Trataba de convencerlo con la mirada, esos profundos orbes rojizos no dejaban de seguir los suyos intentaba apartar la mirada pero era imposible. Él tan solo se negaba a la petición que le acababa de hacer el otro, era demasiado vergonzoso como para poder aceptarlo... Y mientras seguía rechazándole, de fondo, la música que se oía en la radio, seguía sonando...
Acuéstate conmigo
Y sostenme en tus brazos.
Por un momento se perdió por completo en la radiante sonrisa que su tigre le dedicaba, de pie parado al pie de la cama, él estaba sentado en la misma, abrazando sus rodillas viendo fijamente esa hermosa sonrisa que sabía, era solo para él.
No podía negarse a esa mirada...
Estoy cayendo por tus ojos.
Y con la sensación de que voy a olvidar.
Estoy enamorado ahora...
Kagami le extendió una mano, apoyando un poco la pierna en el colchón, para acercarse más a él.
Tímidamente, tomó su cálida mano…
Bésame como si quisieras ser amado
Quisieras ser amado
Se siente como si me enamorara
Como si me enamorara.
El pelirrojo lo atrajo hacia su cuerpo, pegándolo a su pequeño contra sí y colocando sus manos en su delicada cintura. Por otro lado, Kuroko rodeo el cuello del mayor con sus brazos, recargando su cabeza en el fuerte pecho de su luz, sintiendo el latir de su corazón…
Fui hecho para mantener tu cuerpo caliente
Pero soy frío
Como el viento que sopla
Así que sostenme en tus brazos.
Comenzaron con un lento vaivén, moviendo sus pies al ritmo de la suave melodía que había de fondo. El peliceleste, más bien, se dejaba guiar por los pasos del otro, balanceándose de un lado a otro. Kagami-kun definitivamente sabía bailar muy bien, aun a pesar de que solo estuvieran girando en un pequeño tramo de la habitación, las suaves secuencias que hacía se lo demostraba…
Mi corazón contra tu pecho
Tus labios presionados sobre mi cuello.
Escondió aún más su rostro enrojecido en el pecho del contrario, trataba de acostumbrarse a esa situación pero, seguía siendo un poco vergonzosa. Al hacer eso, pudo sentir como el mayor depositaba un corto beso en la coronilla de su cabeza, levantó un poco la mirada, Taiga le dedicaba una tímida sonrisa, con un brillo realmente hermoso cubriéndole esos ojos rojos. No pudo evitar esbozar una sonrisa al observar esa expresión…
He sentido todo
Del odio al amor
Del amor a la lujuria
De la lujuria a la verdad
Supongo que es así como te conozco.
El ritmo de la música se aceleró un poco, haciendo que el mayor separara a su sombra de su cuerpo para darle una vuelta para regresar a su posición inicial. Kuroko soltó una risita el sentir como giraba para volver a los brazos de su pareja.
Bésame como si quisieras ser amado
Quisieras ser amado
Se siente como si me enamorara
Como si me enamorara…
La canción estaba por terminar, los últimos versos ya estaban dichos lo único que se escuchaba ahora era la lenta música final. Apretó al pelirrojo contra su cuerpo abrazándolo lo más fuerte que sus pequeños brazos le permitían. El mayor dejó sus movimientos de lado, deteniéndose para corresponder al abrazo. Manteniéndose de esa manera por algunos largos minutos,
Si fuera posible, podrían quedarse así toda la vida…
Taiga se alejó unos centímetros, perdiéndose en esas lagunas tan bellas que su pequeño tenía por ojos. Recargó su frente contra la del contrario, teniendo una mejor vista de esos orbes, y sin separarse del menor se acercó lo suficiente para depositar un casto beso en los dulces labios de Kuroko...