44. Extra – Don’t lewd the dragon loli
(Traducido: No pervirtáis a la loli dragón)
Hoy tenía que aparecer un extra con algo de acción y emoción, pero acontecimientos relacionados con fans y con mi familia han provocado mi ira y he decidido avanzar una semana este extra.
Aunque esto, más que un extra, es una opinión. Llevo desde los capítulos de la boda con esta firme convicción y no he podido resistir más el exponerla. Para traducirlo de forma simple: a algunos fans no os gustará leer esto.
Mirad, sé que os gusta Kanna. Yo la adoro, ya lo sabéis, es de largo mi personaje favorito de la serie. También sé que os gusta cuando en el anime y en el manga pasan cositas adorables que dan pie a pensar en cosas rikolinas. Y lo entiendo, como para no verlo, y a mí también me gusta. Creo que en esto estamos todos de acuerdo.
Pues bien, cuando empezó el anime, Rule 34 explotó en sangre nasal y los fans se dedicaron a hacer porno y más porno de la pobre Kanna, y lo sé porque por desgracia lo he visto (buscando cosas decentes de Elma 7v7), y sí, muy bonito y muy sexy, pero no, no es para mí.
Y no soy el único que lo pensó, existe todo un “barrio” de gente decente en el hentai y el yuri que expandieron el eslogan “don’t lewd the dragon loli”, que hasta ha llegado a las grandes páginas yuri en español de Facebook (saludos a JacRios, de Ocio Yuri 2, el abanderado y paladín defensor de la inocencia de las niñas pequeñas en el yuri).
Evidentemente, este extra no es para deciros “no miréis/leáis porno de Kanna”. Esto ya es conciencia de cada uno y no me voy a meter en ello.
Lo que quiero decir es que Kanna y Saikawa son NIÑAS. ¿Vale? Párvulos (cada una a su manera). Y en el anime ya se dice (en boca de Tohru) que Kanna aprende de lo que ve de Kobayashi y de la propia Tohru, y de ahí la extraña confusión que tenéis algunos de vosotros, fans míos, de que Kanna y Saikawa se van a comportar en algún momento como si fueran una pareja adulta y formal, porque NO, NO SUCEDERÁ. Será amor todo lo que queráis, pero será infantil, será jugar y pasar rato juntas, será poner cara de asco ante la posible “babosidad” de un beso mal hecho, Y PUNTO. Porque esto es lo que hacíamos nosotros en párvulos y en primaria.
Ahora al punto principal de este extra/opinión: no, no va a haber extras aleatorios sobre Kanna y Saikawa. No va a haber pornosidades, no va a haber siquiera insinuación de ello. Cabe la posibilidad que escriba algo de ellas, sí, pero más abajo pondré en qué condiciones.
A ver, después de esto, alguien me puede salir con algo como “haz cuando ya sean mayores”. Bueno, para empezar, yo ganas no tengo. Kanna es mi niñita, mi tesoro, me siento un poco su padre por X razón, y no consigo imaginarla de mayor (aunque sé que hay fanart). Además, recordaréis que Kanna envejece bastante más lentamente y que, aunque lo pueda camuflar en forma humana, emocionalmente será una niña ahora y en cuarenta años.
También habrá quien me diga “haz algo como en capítulos anteriores”, pero, bueno, la finalidad de estos extras es cubrir vacíos inexplicados durante la historia principal, como el extra anterior. Si ahora me pongo a hacer one-shots póstumos porque sí, es como hacer otra historia. Para eso ya lo hago por separado y no, no tengo planes de hacer one-shots independientes de ellas dos.
Ahora os digo, sobre mis condiciones que he nombrado antes: si en vuestro fanatismo por la pareja o por el fic, conseguís encontrar un solo agujero en la trama que afecte a Kanna y a Saikawa, lo comentáis aquí y yo hago el extra. Solamente tened en cuenta que será bajo mis normas y mi opinión.
Todo esto es un recordatorio para todos aquellos que siempre me repiten que salgan más ellas dos. En la historia cabía lo justo, y al inicio tuvieron protagonismo. Vale. No han salido más ocasiones. Pues qué se le va a hacer, en la boda quise meter todo lo que pude de ellas. Pero hay que recordar que esto es la historia de una familia, no de una pareja (aunque Tohru y sus excentricidades y dolores de cabeza os hagan ver lo contrario XD).
Y lo digo sin enfadarme, pero con profundo cansancio.
Mirad, si queréis fanfiction de Kanna y de Saikawa, lo hay en wattpad, lo hay en Amor yaoi, y seguro que en otras plataformas también. Y si no hay lo que buscáis, lo podéis crear, y os invito a hacerlo, más riqueza en el fandom, ¿no? Hasta os podría leer yo, porque no rechazo la pareja en general, me gusta. Lo que rechazo es que ESPERÉIS ACCIÓN que podría estar en cualquier otro fic que no fuera el mío (y peor, un lemon de dos niñas de cinco años). Yo mando en mi fic, y esta historia no es una democracia.
Dicho todo esto, os repito, si encontráis huecos por donde meter la pareja para un extra, comentadlo; si tenéis fics que creéis que me gustarán, pasádmelos; y si no estáis satisfechos con lo que resulte de ellas dos en mi fic, escribidlo en vuestra propia historia.
Mientras escribo todo esto y mi cabreo se disipa, me entra una profunda pena. De verdad. Llevo un año escribiendo este fic (aunque empecé a publicarlo hace 10-11 meses) y vosotros leyéndolo, y me sabe mal que termine en pocas semanas. Es como cuando acabas una serie, es el fin del mundo, ¿no? Yo quisiera continuarlo pero, en primer lugar, no encuentro motivos para alargar lo inevitable, y en segundo, estoy SECO de ideas para esta familia. Lo he alargado todo lo que he podido y ahora ofrezco hasta extras.
Como nota para la posteridad, este es la segunda historia más larga que he escrito en toda mi vida y desde luego el que más rápido he escrito en comparación con su longitud. El primero es 150 páginas más largo, pero tardé 7-8 años solamente en terminar la primera parte y ahora he empezado la segunda (lo siento, no lo colgaré, está en un idioma que no sabéis XD). Por ello, este fic es muy especial para mí, entre otras cosas porque mi perfil explotó desde que empecé a publicarlo XD antes no era nadie.
Así que tened por seguro que, si encuentro una buena idea para esta familia, empezaré escribir de nuevo en otra historia aparte, y lo pasaremos bien de nuevo.
Para el próximo extra, ya para cerrar este, aparecerá rellenando un hueco y una relación sin resolver otro dragón, nuestra encantadoramente destructiva Iruru. ¡Hasta el domingo que viene!