Imagina a...
Dean y Cas recostados en el capó del Impala mirando el cielo nocturno, sintiendo la temblorosa brisa de la primavera y señalando cada una de las estrellas. Pasan las horas y aún se mantienen despiertos. Dean escucha con detenimiento cada palabra del ex-ángel, aprendiendo sobre el universo y las constelaciones.
«Las estrellas cuentan historias, Dean» comenta Cas con nostalgia en su voz. Por momentos, extiende sus brazos y trata de alcanzar aquellos cuerpos luminosos que parpadean. Dean intenta confortarlo y se desplaza a su lado. Acaricia el rostro de Cas para llamar su atención y ser el único en su visión.
"No estas solo, Cas... así que no te rindas" Dean le susurra antes de presionar un beso en sus labios. Rodea a su amante en un abrazo, tratando de llenar el vacío y el dolor del pasado.
Es verdad.
Las estrellas cuentan historias...
Cuentan sobre cierto ángel que cayó por amor y de un cazador que abrió su corazón.