Era de noche y kuroko tetsuya se encontraba en la oscuridad de su habitación, demasiado concentrado y desconcentrado a la vez. En cuerpo y alma en su cama pero al mismo tiempo fuera de ella. Al borde del delirio y la demencia…. A un paso de la locura y el abismo del pla…
—¡Qué demonios! —exclamó cuando aterrizó de su laguna mental. Un golpe incesante taladraba la puerta principal de su departamento.
No podían, no ahora, pensaba entre debatiéndose en seguir con lo suyo o levantarse y atender el llamado. Quiso ignóralo, volver a su mundo de ensueño de donde nunca debió bajar pero le fue imposible.
El golpeteo era para despertar a todo un país. Realmente se preguntó si no se estaba cayendo el mundo afuera y el ahí sin enterarse. Se levantó colocándose lo primero que encontró de ropa escuchando regaños que él mismo también dejo salir.
Al salir de su habitación y encender la luz comprendió que no se estaba cayendo el mundo así que más le valía a la persona que estaba echando abajo su puerta tuviera una buena razón para ir a las once de la noche a molestarlo.
Al abrirla no se encontró a nadie mas que su primera luz, aquel moreno casi golpea su cara cuando le abrió la puerta y el seguía golpeando con desesperación. Su enojo se esfumo al pensar que algo pudiera haberle pasado a Momoi, Kagami, a la kiseki o la familia de moreno. ¡O no!, decía y pedía en su interior que no fuera nada malo.
—Tetsu, lamento molestarte pero necesito hablar contigo —Su vos fue afligida, preocupada casi temerosa.
El joven con mirada preocupada se hiso a un lado para dejarlo pasar. Esto era importante.
—¿Que paso Aomine-kun? —Su amigo se notaba nervioso sentado en el sofá mientras miraba sus manos.
—Veras… el amigo de un amigo mío está en problemas pero no tengo idea de cómo ayudarlo…
Ok… kuroko podía respirar tranquilo porque Momoi estaba bien, no era su segunda luz el asunto, sus amigos estaban bien y a la familia del moreno no le habia pasado nada. Pero aun así esto parecía seguir siendo importante, no todos los días veía nervioso y sonrojado al moreno.
—Espera iré por café —dijo conciliador el peli celeste dejándole saber que escucharía lo que tenía decir —te escucho —dijo una vez se sentó enfrente. Teniendo el café y unas galletitas de vainilla para acompañar.
—Bien… mira…lo que pasa es que el amigo de mi amigo está confundido, veras… mi amigo me conto que su amigo con otro chico han sido amigos un largo tiempo, pero que últimamente las cosas han cambiado mucho—Decía Aomine tratando de explicarse.
—¿En qué sentido? —interrumpió masticando una galleta con interés el más pequeño.
—Veras… me conto que después de que se besaran por accidente lo han seguido haciendo un par de veces más, pero a pesar de que eso pasa siguen como si nada hubiera pasado.
—Oh comprendo —decía kuroko con asombro.
—Sí, eso lo tiene muy confundido porque a pesar de que le gusta besarlo no sabe si le gusta él o es solo porque se siente bien.
—Ya veo, que dilema —decía una tanto preocupado —pero yo creo que si le gusta besarlo es porque le gusta también, a no ser que le dé lo mismo besarlo a él o a otra persona —dijo kuroko viendo al moreno negar enérgicamente.
—No es solo con él.
—Mmm pero aparte de querer besarlo ¿no desea otras cosas? — preguntó kuroko sorbiendo de su café.
—La verdad es que sí, me dijo que la última vez que habían estado juntos se les habia pasado la mano y bueno… fueron más allá —dijo sonrojado el moreno mirando el piso.
—¿Que es más allá? —preguntó un poco confundido kuroko.
—Me dijo que se calentaron lo suficiente como para que el otro chico le hiciera un oral.
—¿ohh y le gusto? — preguntó ahora si más interesado, y llevándose otra galleta a la boca.
—¿A quién? ¿A él o a mí? — preguntó distraídamente y corrigiéndose de inmediato—quiero decir al amigo de mi amigo si le gusto sobre todo luego de ver lo bien que lo otro chico también lo disfruto.
—Ya entiendo… aunque —kuroko pareció pensativo — no, no lo hago muy bien. Si se llevan tan bien cuál es el problema.
—Que luego de que hacen cosas no pasa nada y siguen como si fueran amigos, eso es lo que el amigo de mi amigo no entiende. Porque a pesar de que le gusta besarlo y tocarlo y al otro chico parece también gustarle nunca quedan en nada concreto.
“Caray” pensaba kuroko esto realmente era un preocupante dilema, él realmente creía que al amigo del amigo de Aomine le gustaba el chico y era correspondido, pero y ¿si no era así? No podía dar su opinión a la ligera.
Un golpe delicado y casi silencioso lo saco de sus pensamientos. Alguien más osaba visitarlo esa noche. Como estaba en una importante conversación miro por el agujero de la puerta para saber quién era.
—Oh, es Kagami-kun — dijo en un susurro hacia el moreno, pero en cuando dijo ese nombre vio cómo su amigo moreno se iba a esconder a la cocina y le hacía gestos para que mantuviera silencio. No entendió del todo su actuar. Ya le preguntaría después porque no quería ver a kagami.
—Buenas noches Kuroko — le dijo el pelirrojo. Kuroko noto el su amigo estaba cansado y con ojeras, le dejo pasar y le indico que se sentara. —Lamento molestarte tan tarde pero necesitaba hablar contigo —dijo y enseguida kuroko tuvo una especie de deja vu
—Espera iré por más café — en cuanto estuvo de vuelta se sentó para escuchar atentamente —¿qué sucede kagami-kun tienes algún problema?
—Pues… no yo, pero tengo un amigo que si esta con un problema que no lo deja pensar claramente.
“oh” pensó el menor sorprendido y hasta conmovido y emocionado. La verdad es que el menor se sentía feliz de que sus luces fueran a buscar su ayuda. No estaba entiendo mucho pero si al menos podía ayudar en algo lo haría. Kagami al igual que Aomine se veía en un gran dilema. Y le ponía contento el saber que ambos se preocupaban tanto por sus amigos y que al mismo tiempo contaran también con él para ayudar.
—¿Qué le pasa a tu amigo? — dijo con interés mientras abría otras galletas ahora de sabor chocolate.
—Veras mi amigo le gusta un chico, pero no sabe si es correspondido y no es un chico cualquiera es casi su mejor amigo y rival sin mencionar que es alguien que siempre se ha considerado heterosexual.
—O ya veo esto si es malo… pero nunca le ha dado algún indicio de que pueda sentir algo por él.
—El cree que sí, mi amigo me conto que se han besado en varias ocasiones y hace poco bueno mi amigo ya sabes —kagami le hiso gestos a kuroko con la mano y su boca para ahorrarse la vergüenza de decirlo.
—¿¡Se la chupo!? —Adiós esperanzas, kuroko lo habia dicho y al pelirrojo solo le quedo familiarizar con los tomates.
—Si
—¿y el chico que hiso? ¿lo dejo? —kuroko estaba tan interesado en el tema que ya ni cuenta se habia dado que iba por la quinta galleta.
—Si
—¿Hasta el final?
—¿Cómo hasta el final? —pregunto kagami confundido.
—Refiero a que si se corrió —Kagami realmente se preguntó si sombra no tenía vergüenza.
—Ssss..si
—¿¡En la boca!?
—Sss-si —No, no la tenía.
—¿Y el sabor como era?
—Pues la verdad no era ma… quiero decir mi amigo dijo que no le habia desagradado.
—¿Y… y luego qué? ¿No pasó nada? —Kuroko vio como a kagami se le apagaban los ojos de nuevo.
—No, ese el problema, después de que hiso aquello el chico solo se fue y las veces que han vuelto a encontrarse hacen como si eso no hubiera pasado.
—oh
Fue su simple respuesta y la verdad no sabía que decir, no cualquier persona deja que te hagan un oral y mucho menos otro hombre si te consideras totalmente heterosexual. En su opinión también podría ser reciproco, pero ¿y si no era así?
Kuroko estaba en un dilema, quería ayudar pero como lo hacía sin lastimar al amigo de kagami y no meter la pata tampoco con el amigo del amigo de Aomine
—¡YA! ME COLMARON LA PACIENCIA —gritó alguien en el interior de una habitación.
Kagami vio con asombro como Midorima shintaro salía de la habitación de kuroko en ropa interior y por demás enojado.
—¡AOMINE, SAL AHORA DE LA COCINA! —gritó el peli verde.
Kagami miro la dirección y vio como Aomine salía sonrojado y rascándose la cabeza y al mismo tiempo sorprendiéndose de ver al peli verde. Preguntas como que hacia Aomine en la cocina y Midorima en la habitación de kuroko estaba en el aire.
Mientras tanto el peli celeste tomaba su café y recordaba lo que hacía antes de que sus amigos llegaran.
—USTEDES DOS PAR DE IDIOTAS YA ME HARTARON, LLEGAN A INTERRUMPIR JUSTO CUANDO ESTABA A PUNTO DE JODERME A KUROKO —al menor le molesto esa palabra pero sabía que estaba enojado así que no lo interrumpió —PENSE QUE PODIA SER ALGO IMPORTANTE PERO ESTO ES ABSURDO.
Ambos jóvenes miraban a Midorima como niños siendo regañados
—¡TU! —Midorima apunto al moreno — Si al amigo de tu amigo — dijo en un tono burlesco —le gusta besarlo y tocarlo es porque obviamente le gusta el chico y creo que es bastante reciproco si el otro chico —dijo mirando a kagami disimuladamente — fue capaz de chupársela, por favor eso no lo hace cualquiera ni yo que vengo saliendo con kuroko más seis meses he conseguido que lo haga.
El peli celeste comía su galleta mientras asentía ante las palabras de su novio que a su parecer tenía mucha razón.
—Y TU KAGAMI —el pelirrojo se puso rígido — DILE A TU AMIGO QUE EL CHICO TIENE DE HETEROSEXUAL LO QUE YO DE IMBECIL —y no, midorima shintarou no tenía un pelo de tonto —si el hombre dejo que tu amigo ”un hombre” le hiciera un oral y aparte se han besado es obvio que ya no lo es y está bastante interesado en tu amigo, pero es muy estúpido como para darse cuenta solo. Así que te concejo que le digas a tu amigo que de él, el primer, segundo y hasta el tercer paso si es necesario.
Kuroko estaba a punto de pararse y aplaudir a su novio.
—AHORA, QUE YA RESPONDÍ SUS DUDAS, LÁRGUENSE DE AQUÍ Y VAYAN A SEGUIR MIS CONCEJOS, ¡¡ANTES DE QUE LOS SAQUE A PATADAS!! —grito empujándolos y sacándolos a los dos de la casa de su novio.
Midorima suspiro hondamente cuando cerró la puerta, realmente le costaba creer que tuviera amigos tan imbéciles. Se calmó cuando sintió esas cálidas manos rodearle desde su espalda.
—Eres genial midorima, realmente espero que los hayamos podido ayudar, se vean complicados por querer ayudar a sus amigos, jamás me lo espere de Aomine-kun.
El peliverde suspiro, dándose vuelta para abrasarlo. “una sombra estúpida, para dos luces aun peor” realmente no les sorprendía que se llevaran tan bien. Los tres eran tal para cual. Solo esperaba que no fuera contagioso.
Beso su frente con cariño, antes de tomarlo en brazos muy dispuesto a continuar en donde habían quedado.
~*~
Por otro lado Aomine y kagami caminaban lentamente por las calles perdidos ambos en sus pensamientos. Ambos avergonzados de usar algo tan vergonzoso el amigo de un amigo como excusa. Pero necesitaban una tercera opinión a lo que estaba pasando y habían sido descubiertos por Midorima en el proceso.
—Ya es tarde Aomine… ¿Por qué no te vas a quedar a mi departamento? —dijo kagami teniendo en cuenta las palabras de midorima, el habia tenido el valor de darle un oral, aquí iba su segundo paso. Ya idearía el tercero llegando a su casa.
El moreno sonrió. Habia escuchado esa conversación y estaba seguro que el amigo de Taiga no era otro que el mismo pelirrojo. También habia puesto mucha atención a lo que midorima le habia aconsejado.
—Claro — respondió sonriendo, no dejaría que kagami hiciera su tercer paso, ahora era el que daría el primero y era mejor que su pelirrojo se preparara, le demostraría a midorima que no era tan estúpido como habia afirmado. Y les escupiría en la cara luego todo lo que le sacaría a kagami esta noche que él ni en sueños obtendría de kuroko al menos no en tiempo record.
Fin