~ one shot ~
Eran las 6 de la mañana, Joey wheeller se había levantado como todos los días, parar ir a trabajar , y es que su vida era un autentico asco... francamente no valía la pena vivir, y es que desde su vida como colegial había cambiado radicalmente, sus “amigos” les eran totalmente indiferente, ni quedaban ni se hablaban,…era como si no existiese, y es que la indiferencia hace mas daño que el odio declarado.
Con respecto a su padre, hacía ya algún tiempo que había muerto por sobredosis de droga, desde entonces tubo que trabajar el doble de lo que trabajaba, pues había vendido el piso donde vivían para comprar otro. Serenity...ese era el peor trago que había tenido que pasar... sin ningún motivo aparente, cogió alfeimer, desde que se declaro había estado ingresada en el hospital de domino city, lo que le permitía poder verla los domingos.
Para completar con su vida, sus calificaciones era tan bajar, pero aprobadas, que no había conseguido obtener ninguna beca para poder estudiar en la universidad, lo único bueno en estos momentos de su vida, era la casa que se había podido comprar.
Una vez que acabo de arreglarse, salió al trabajo, primero repartía el correo y luego iba al supermercado a trabajar hasta las 10 de la tarde, de vez en cuando se había encontrado con sus “amigos” pero estos habían reaccionado como su no existiese... le dolía, pero al menos sabía el motivo, y es que cuando Yami había ido ya al mas allá para el descanso eterno, su hermana había enfermado y el, debido a la depresión se metió en el mundo de las drogas, cuando sus amigos se enteraron, se alejaron de el rompiendo toda vía de comunicación, cuando su padre murió de sobredosis fue cuando decidió abandonar todo aquello, porque si no acabaría de la misma forma, entonces fue a una asociación de desintoxicación donde pudo dejar aquel fatídico vicio. Hoy en día ya no se drogaba, habían pasado tres años desde entonces, pero seguía muy delgado, y aunque les había dicho que ya había salido ellos actuaban de la misma forma. Joey ni tenía ni estudios, ni amigos ni familiares, estaba solo...esto cada día le estaba hundiendo mas y mas, cada vez expresaba menos sus emociones, era mas frío, menos hablador... parecí un bloque de hielo,... lo que le recordó vagamente a kaiba... el también era un bloque de hielo, pero él era educado y justo.
Estaba pasando la compra de alguien para hacerle la factura, seguía en sus pensamientos, a su bola, demasiado distraído com0 para darse cuenta al a persona a la que estaba atendiendo, cuando este le dio el dinero a pagar joey solo miro el dinero y la caja... nada mas
-gracias y vuelva pronto- dijo tan frío como era ahora
-sabiendo que estas tu aquí... lo dudo- dijo yugi mientras metía la comida en la bolsa, Joey levanto la cabeza
-yugi... escucha...- intentó decir, pero una vez mas el pelipincho dio media vuelta y marcho del supermercado dejando a joey mas decaído todavía, como no podía abandonar su puesto siguió trabajando con el alma en llanto y su corazón con un muro de piedra... y esta vez... para siempre.
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Capitulo 1
Estaba caminando, eran las 10 de la noche y por fin salía del supermercado.... andaba con las manos en los bolsillos del pantalón y la cabeza gacha... pensando en lo que había ocurrido con yugi... si indiferencia querían, pues indiferencia tendrían.
Entro en el parque para dirigirse al centro de este, conde había bancos... árboles y ninguna farola que estorbase la vista de las estrellas. Suspiro ondo, hacía tiempo que no miraba las estrellas, se pasó viendolas como unas os horas hasta que finalmente se levanto y comenzó a irse a casa, no iba a cenar... pues se le había quitado el apetito
~ · ~ · ~
por fin salió de kaiba corp, no sabia porque había estado retenido tanto tiempo, pero entre una cosa y otra... el caso era que ya se podía ir a la mansión a descansar. Iría a pie pues estar tanto tiempo sentado se le habían entumecido las piernas, y quería estirarlas un poco, iba mirando al cielo cuando choco con alguien...
-lo siento- si disculpo automáticamente, pero el otro no le respondió por lo que enfurecido dio media vuelta para reprenderle, pero sus intenciones, solo quedaron en eso... intenciones. Observó a la persona que había empujado... seguía caminado, cabizbajo, metido en sus pensamientos. Kaiba al verle el pelo le reconoció en seguida.
-que crees que haces wheeler?- dijo en un tono de enfado, aunque en el fondo se había alegrado de verlo... no lo hacía desde... el colegio, el rubio ni se giro a hablarle, simplemente siguió caminando. Esta acción de había extrañado al ceo, aunque después de los rumores que había oido de que se había metido en el mundo de la droga ya no le extrañaba tanto como le habría extrañado en otra época
-wheeler, te he hecho una pregunta- dijo mas alto y más frío que antes
-eso es de tu incumbencia kaiba, hago lo que me da la gana- esta contestación cabreó al CEO por lo que fue rápidamente hasta donde estaba él y le agarro por el cuello de la camisa ara levantarlo con relativa facilidad
- no te atrevas a responderme así perro callejero- sus ojos estaban a la misma altura, ambos se estaban fulminando con la mirada, el CEO noto que en esos 4 años el rubio había cambiado notablemente
-pues lo siento kaiba, pero este “perro callejero” al parecer no tiene modales, y le importa un rabano lo que te haga u opines de mi, así que haz el favor de soltarme quieres?- el CEO lo lanzó lejos haciendo que Joey cayese en el suelo, en verdad estaba muy flaco y se había sorprendido a la distancia a la que lo lanzó, abrió mas lo ojos al ver como el rubio se levantaba y se iba por su camino
-vaya no sabia que el ser un drogata te hiciese mas estúpido todavía, si es que podías serlo.. porque desde que te decidiste drogarte superaste tus limites de estupidez... anda pirate y pegate un buen chute de lo que sea- dijo cabreado al no haber conseguido sacar de quicio al perro, pero había dicho las palabras equivocadas... Joey enfadado se dio media vuelta y le propino un fuerte golpe en el pómulo
-para tu información, kaiba, ya no estoy en el mundo de la droga, hace años que lo deje, ahora iba a casa a descansar, ya que mañana tengo que volver a trabajar ¿contento? Eso era lo que querias? Ahora si me permites, me voy!- dijo gritándose para intentar marchar, pero kaiba una vez mas le agarro del brazo
-no, no te doy permiso para que te marches
-por desgracia tuya, kaiba no era un permiso- con un brusco movimiento se deshizo del agarre de kaiba y siguió con su camino, pero seto comenzó a seguirlo
-se puede saber porque me sigues?
- no tengo porque darte explicaciones de lo que hago o dejo de hacer- entonces el rubio estallo girando bruscamente
-MALDITA SEA KAIBA, QUIERES DEJARME EN PAZ? O A ASO VAS A ESTAR FASTIDIANDOME, RECORDANDOME MIS ERRORES Y HUNDIRME MAS DE LO QUE YA ESTOY!!!! ESTOY HARTO DE TODO!!! DEJAME EN PAZ DE UNA VEZ!!!-dijo empujando fuertemente al CEO tirándolo al suelo, pero éste se levanto para responderle
-y que te crees que yo no? Trabajo de 7 a.m. a 8 p.m. , afortunadamente no tengo que ir a la universidad, casi no tengo tiempo de ver a mokuba, solo tengo un mes de vacaciones que aprovecho para estar con el- dijo mirándole amenazantemente- tu al menos tienes a tus padres, tus amigos, tu hermana- Joey estaba cabizbajo
-te equivocas...- dijo en un susurro apenas perceptible con el castaño- te equivocas, mi padre murió de sobredosis fue “gracias a el” por lo que salí, y fue el quien me metió, mi madre, no me dirige palabra desde que se divorcio de mi padre, y mi hermana esta ingresada en el hospital con una enfermedad irreversible fue cuando comencé a drogarme... mis amigos al enterarse de esto me dejaron abandonado.. dejándome así solo, no puedo ir a la universidad porque no tengo e dinero suficiente, trabajo de 6 a.m. a 10 p.m. y no tengo vacaciones, puede que digas que me lo merezco, y tal vez sea cierto, pero deja ya de martirizarme porque ya tengo suficiente con migo mismo- no sabía porque le contaba todo esto... tal vez.. necesitaba a alguien con quien descargar todo lo que se había guardado durante años
Seto permanecía callado, la verdad es que ahora se daba cuenta de que no sabia nada sobre Joey y ahora se daba cuenta deque exceptuando lo de serenity... un golpe muy fuerte... sus vidas era muy similares
-kaiba... tu tienes tres cosas e tu vida muy importantes... tu empresa, mokuba y tus dragones blancos, yo ni siquiera tengo el mío porque se lo di a motou en el torneo contra marik, a mi me lo arrebataron todo, incluso antes de caer en el mundo de la droga, mi padre me violaba y me golpeaba, así que es como si no tuviese uno, mi madre no quiere verme y trabajo para sobrevivir, en cambio tu trabajas para mokuba... ahora.. si me lo permites... me voy a casa a descansar.. estoy agotado...y quiero dormir...- se dio media vuelta y continuo con su camino. El castaño se quedo estático algunos segundo mientras observaba a Joey irse... para después darse media vuelta y continuar con su camino.
-riiiiiiiiiing...riiiiiiiiiiiiiiing...
-si, residencia kaiba, dígame- respondió una chica, seguramente era una de las limpiadoras
-buenas noches... me gustaría hablar con seto kaiba por favor..
-y de parte de quien?
-el perro callejero... con eso sabrá quien soy...- la mujer quedó a cuadros pero fue a avisar a su amo para avisarle
-que? Es una broma? Como va a ser wheeler el que me llame
-eso fue lo que me dijo señor...
-muy bien váyase.. ya lo cojo
-si? Dígame?- respondió al teléfono fríamente... en realidad seguía son creerse que fuese wheeler el que le había llamado
-si... kaiba .. soy yo...
-que quieres perro? Y sobretodo a estas horas
-lo siento... yo.. veras... quería disculparme por lo de hoy...- dijo con un poco de dificultad... no estaba acostumbrado a hacerlo.
-¿cómo? ”se ha vuelto loco???”
-pues... por como te trate hoy...no... no lo merecías...de verdad... si es cierto que me había dolido...pero en cierto modo yo te provoque... lo siento...- kaiba estaba a cuadros... eso no le encajaba- de veras... a pesar de todo tu sigues siendo el único que me traba igual, y bueno, además de que tu vida tampoco ha sido nada fácil, a veces... me recuerda a la mía, solo.. que tu tienes a tu hermano- seto permanecía callado, al verdad era que él también lo estaba pesando de vuelta a la mansión
-lo se...- dijo por fin el castaño...escucho un sollozo al otro lado de la linea...lo que le extraño tremendamente
-Joey?
-lo...lo siento... de verdad...- se notaba que estaba llorando, el castaño estaba con el ceño fruncido aunque en el fondo sentía como su corazón se hacía un puño
-bonkotsu... no tienes que disculparte... estoy acostumbrado
- pero que lo estés no significa que lo tengas de recibir... yo.. lo siento kaiba..- y dicho esto colgó el teléfono.
-joey?...- había colgado...Joey se estaba volviendo a derrumbar... y si antes no había echo nada era porque pensó que yugi y los demás perdedores habían estado con el...que equivocado estaba... tanto que propagaban la amistad... para que cuando uno de ellos que no es yugi tuviese problemas... éstos no le ayudasen..., marco un numero de telefono
-Carlos... te voy a dar el nombre de una persona y quiero que averigües ahora donde vive... es Joey wheeler.
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-ding dong...- sonó la puerta y joey fue a abrirla, le dolía mogollón la cabeza por el llanto y sus ojos estaba rojos, las mejillas húmedas y te un tono carmesí
-k..kaiba... que haces aquí?- dijo perplejo en la entrada de su casa
-acaso no me vas a invitar a entrar a tu casa perro?- dijo con su carácter frío, el castaño fue a sentarse al sofá para después mirar al rubio
-tomaste “algo”? – esa pregunta descoloco a Joey, se sintió ofendido... pero entendía porque lo había preguntado, kaiba mientras tanto miro a sus alrededores, la verdad no vivia ene. Cuchitril que se había imaginado.
-no...- negó simplemente llego también hacia el sofá, sentándose a su lado
se quedaron así un rato, callados, joey mirando ala mesa y kaiba mirando a joey
-yo también siento lo que te dije.. no tendria que haberte dicho que fueses a drogartre
-pero yo te he dado motivos para ello- kaiba negó con la cabeza
-que una vez te enganchases no me da derecho a decírtelo, ahora ya salístes... y bueno...- se podía ver la tristeza en los ojos mieles... como esta tomaba posesión... se veía que estaba a punto de llorar nuevamente
-sabes? Cuando llegue... me llamaron del hospital..me dijeron que mi madre se iba a extranjero y que se llevaba a serenity con ella... no podré volver a verla nunca mas...ella... tiene alpheimer , sabes?..- se le veía totalmente derrumbado, era la primera vez que sentía lastima por alguien... no sabía que hacer... pero al final optó por abrirse el también... nunca lo había echo.. y le costaba
-yo... cuando nos adopto Gozaburo...y vio el coeficiente intelectual que tenia... dejo de verme como a un hijo y me vio como una maquina para ganar dinero en su empresa.. hasta que me volví contra el... nunca fue un padre para mi, y yo, me encargaba de que mokuba estuviese bien ...
-sin importarte tu felicidad..- dijo Joey acabando la frase a la cual Seto asintió, Joey se acomodo en el sofá y apoyo la cabeza en el respaldo de éste mirando al techo
-yo...cuando mi padre empezó a emborracharse a diario y a golpearos a mi madre y a mi... ella se cansó de él y se fue... con mi hermana, a mi, me dejo con mi padre, supongo porque me parezco físicamente a el... entonces todas las palizas me caían a mi, al cavo de un año le despidieron de su trabajo y tuve que comenzar a trabajar para conseguir mantener la casa, pero mi padre me empezó a robar dinero para seguir emborracharse, y bueno...siempre me dejaba alguna propina... yo, siempre decía que me peleaba con la gente, hasta que con el paso de los años aprendí a defenderme y a atacar, pero no se porque... ni he sido capaz de luchar contra mi padre... llamalo debilidad si quieres, pero no puedo y luego cuando... serenity... cogió... bueno....enfermó... y yo... caí... en el mundo de las drogas... mis amigos... me dejaron de lado, es hoy el dial en el que no me hablan, hoy, me encontré con yugi ...pero sigue sin hablarme, y me mira con desprecio... luego cuando mi padre murió por sobredosis, entonces decidí salir de aquel mundo... vendí la casa y bueno... me compre esta.. y ahora me informan de que Serenty se va...- su voz se había quebrado, tenía un nudo en la gargante y un par de lagrimas resbalaban por sus mejillas ahora que se lo había contado a alguien, se sentía mucho mejor...Kaiba seguía mirando a Joey, pero antes de que pudiese decir algo el rubio le adelantó
-Cuida bien de mokuba, kaiba, porque algún día, se ira de tu lado... ya sea por voluntad propia o por obligación, lo que quiero decir es que no te mates tanto trabajando y estés mas con el porque al final solo te quedaran los recuerdos- kaiba asimilo las palabras, había estado a punto de responderle pero el verle tan triste prefirió callar.
-y tu? que vas a hacer a partir de ahora?- pregunto con interés el castaño, pero el otro solo atino a negar, con los ojos cerraos, la cabeza
-nada... no tengo nada ni a nadie-¿dónde estará aquel muchacho energético que había conocido en el colegio? Se andaba preguntando Kaiba, Joey permanecía con los ojos cerrados, y continuo con ellos así...
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-Joey?- pregunto bajito kaiba al rubio que seguía con los ojos cerrados, pero éste no respondía, se había dormido...le cogió en brazos para llevarlo a la habitación donde lo recostó...incluso cuando dormía irradiaba tristeza...no supo porque lo hizo pero le dio un beso en la frente suavemente- descansa...- susurro la vez que le tapaba con una manta
-seto…-dijo en un susurro el rubio mientras se daba media vuelta, Kaiba observó anonadado esa postura para luego salir lentamente y sin hacer ruido de la casa…
Abrió los ojos… vio que estaba en su cama... se había quedado dormido mientras hablaba con Kaiba, no sabía porque pero el haber visto su cama vacía, sin un seto acompañándolo, le entristeció, se levanto lentamente de la cama, la verdad no le apetecía nada ir a trabajar, se aproximo a la ventana... genial! Allí afuera diluviaba y no tenía nada impermeable para ponerse y el paraguas se lo había olvidado en el trabajo la vez anterior... era domingo, y a pesar de que no tenía que trabajar, salió a dar una vuelta.
Se puso lo primero que vio, unos vaqueros un una camiseta blanca con una polera gris y salió a dar una vuelta bajo la lluvia.
Era curioso, pero sentía que el tiempo que hacía afuera iba acorde con el estado de su espíritu, sentía que se desgarraba...cerró los ojos, concentrado en las gotas que caían sobre el, contrastando con el calor de su cuerpo, su flequillo húmedo estaba pegado a su frente, y su ropa estaba toda calada, pero a pesar de ello, no le importaba nada… ya se secaría cuando llegase a casa. Se sentó en un banco a descansar mientras seguía con la mirada en el cielo.
Tenía mucha pereza, no quería levantarse, ni caminar, no mover un músculo, ni siquiera para hablar, porque, estaba mas cómodo como se encontraba en esos momentos, y aunque tenía mucho frió, se encontraba extrañamente... cómodo, cerró los ojos un segundo mientras por su mente pasaban todas las imágenes de su vida desde que se había metido en el mundo de las drogas…nada…ahora ya no tenía nada…unas lágrimas cayeron por su rostro confundiéndose con la lluvia, en su alma, ardían deseos de que su corazón de una vez por todas parase de latir, que dejase de sufrir, que se fuese de ese mundo en el cual era tratado cual escoria. Volvió a abrir los ojos, para observar como las gotas se estrellaban contra el suelo… a lo mejor… la solución estaba más cerca de lo que parecía, pero ahora…tenía que poner en orden algunas cosas… se levantó del banco con algo de dificultad y tambaleándose fue hasta su casa.
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Llevaba desde hacía un cuarto de hora picándole en la puerta, pero nadie abría, estaba planteándose seriamente si irse o tirar la puerta abajo, finalmente optó por la primera opción, se dio media vuelta y se dispuso a salir del edificio cuando se topó con una figura
-¿qué haces aquí kaiba?- dijo cabizbajo, el castaño le inspecciono con la mirada, estaba muy pálido con ojeras y calado hasta los huesos
-eso mismo te debería de preguntar yo no crees? Que hacías afuera haciendo el temporal que hace, sin paraguas?- ordenó mas que preguntó, sin embargo el rubio le dio una leve sonrisa
-me apetecía dar una vuelta… ahora sería mejor que fueses a casa…yo estoy bien… no te preocupes…-siguió avanzando hasta que sacó las llaves y entró en casa siendo seguido por el castaño
-en primer lugar, yo no he dicho que este preocupado por ti, y segundo se nota que no estas bien, estas muy pálido... anda siéntate en el sofá
-te he dicho que estoy bien!- dijo dando un espaviento con la mano, pero en ese momento seto le agarro la mano
-estas helado, y temblando... cuanto tiempo has estado bajo la lluvia?- parecía que le estaba regañando
-yo... no se.... desde las 8... o 9 que salí de casa- se estaba mareando, por lo que kaiba le estaba sujetando mas fuerte la mano por si acaso titubeando entre si cogerle del torso o no
-y que hacías desde tan temprano afuera?- se estaba enfadando su cachorro era un irresponsable
-yo…no me sentía muy bien…así que decidí dar una vuelta…por ahí…- al notar que los tambaleos del rubio iban en aumento con la otra mano le sujeto del brazo del que tenía agarrado la mano mientras que sus ojos se mantenían abiertos esperando cualquier movimiento por parte del otro, observaba como los ojos del rubio comenzaban a fallarle
-joey...- dijo intentando llamar la atención del rubio no consiguiéndolo –JOEY!!!- termino por caer inconsciente y a medida de que caía le agarró mejor para que el rubio no se hiciese daño, no solo estaba congelado, si no que la palidez que tenía en esos momentos el rubio era alarmante-JOEY REACCIONA!!!-dijo sacudiéndolo mientras seguía sosteniéndolo, finalmente opto por cargarlo en brazos para llevarlo a la habitación donde lo tumbo en la cama y comenzó a despojarle de las ropas húmedas y tirarlas al cesto de la ropa sucia, en esos momentos no pensaba en la desnudez del rubio, si no en curarle cuanto antes, lo cargó en brazos y lo llevo al baño donde lo metió en la bañera para comenzar a verterle en el cuerpo agua caliente para que le subiese la temperatura. al cabo de 20 minutos sacó el muchacho rubio y lo secó con la toalla, luego lo llevo a la cama donde le puso un pijama y le tapó con las sabanas.
-eres un idiota irresponsable…-dijo preocupado mientras le echaba el flequillo a un lado para despejarle la frente, fue al otro lado de la cama, se quito la ropa, quedando en boxers y se metió junto a su cachorro para abrazarlo y darle calor corporal, cerró los ojos y al cabo de un rato se quedo dormido...
Cuando despertó observó que Joey seguía dormido, la diferencia a como estaba antes era que ahora tenia un poco mas de color y estaba acurrucado en el pecho del CEO, el castaño sonrió y le acarició la rubia cabellera delicadamente... sabía que no debía... pero le estaba ocurriendo... y no quería impedirlo... se estaba enamorando de ese cachorro inundado por la tristeza, lentamente se fue alejando del cachorro hasta que salió de la cama, se vistió y procedió a hacerle un colacao caliente a su rubio.
Notaba la ausencia de un calor... un calor reconfortante... le gustaba...cuando éste desapareció comenzó a estar a disgusto... al cabo de 5 minutos despertó, sin percatarse de que alguien había dormido a su lado, pestañeó un par de veces...ya era la segunda vez que acababa en su cama y no recordaba como había llegado hasta allí, se incorporo lentamente mirando alrededor de la habitación... nada... no había ningún indicio de que kaiba estuviese allí, se levanto apesadumbrado sin percatarse del pijama y fue derecho a la cocina, tenía hambre
-vaya…ya veo que despertaste- dijo el castaño que le puso una taza recién calentada de leche con colacao
-kaiba…vaya…estas aquí…pensé que te habías ido- dijo rodando la taza con sus manos frías
-ni en broma, en el estado en el que te encuentras…y tu que no sabes ni cuidarte…no te veo capaz de sobrevivir, lo que me recuerda…eres un irresponsable- dijo esto ultimo con un tono de voz enfadado
-desde cuando te preocupo? – dijo intentando sonar gracioso, pero casi hasta sonaba esperanzado
-no me preocupas- mintió, la verdad fue lo primero que le había salido, pero se arrepintió en seguida al ver como en la cara del rubio se veía una sombra mas…una tristeza mas- yo…lo… lo siento
-genial… no solo no le preocupo a nadie si no que encima le doy lástima a mi “peor enemigo” –dijo casi en un murmullo, las lágrimas amenazaban con salirse pero consiguió contenerlas. Seto se había quedado observando al rubio, sentía como algo si le comenzase a invadir una especia de pánico, de miedo.
Joey bebió un poco del colacao para luego dejarlo en la mesa
-y porque no estas con tu hermano kaiba?- tenía su vista centrada en la leche, no sentía fuerzas ni de mirarle los pies, sabía que si lo hacía comenzaría a llorar, y eso era lo ultimo que quería, mientras el CEO estaba tamborileando los dedos en la meseta de la cocina, con una taza de café que se había preparado
-en realidad, mokuba se fue a pasar el día a casa de un amigo y no vuelve hasta mañana después del colegio y tu? Porque no has ido a ver a tu hermana?, dudo mucho que se vayan el domingo- pego otro sorbo sin despegar la vista de joey el cual estaba girando la leche con la cucharilla, apretó los labios y cerró los ojos mientras negaba con la cabeza, cada vez se le hacía mas imposible el no llorar
-n..no puedo hacerlo... se que si voy... en primer lugar no aguantaría la compostura, y en segundo lugar, su madre me echaría de allí a patadas
-pero no crees que merece la pena... con tal de ver una vez más a tu hermana?- en el siguiente trago se acabo el café y lo dejo en el fregaplatos
-no... no podría hacerlo... sería mas difícil separarme si la vuelvo a ver…-un par de lágrimas iban a caer, tenía un nudo en la garganta, así que intentó no pensar en ello unos segundos y tomarse un poco más de leche, pero le pasaba con mucha dificultad…
-te acompaño- dijo de repente kaiba, a lo cual joey negó energéticamente la cabeza
-no, he dicho que no, y no iré!, no quiero que se haga mas difícil la separación, además, ella no sabrá si fui o no además, si mi madre me ve viendo a Serenity…- negó otra vez la cabeza de la misma forma que la anterior, finalmente relajó el cuerpo dando un suspiro-mejor dejarlo como esta- dijo en un susurro, la voz le había salido ronca
-como quieras...- dijo simplemente el castaño para luego mirar hacia otro lado
-una pregunta kaiba, ¿qué haces aquí?-dijo mientras cogía otra vez la taza para darle un sorbo
-cuidar de ti cabeza hueca, ya que esta claro que tu no puedes hacerlo por ti mismo
-¿por qué?
-porque eres patético- lo volvió a hacer, volvió a decir algo, que realmente no pensaba, pero al ser el rubio, se veía que automáticamente le insultaba y se metía con el, se mordió el labio- lo siento... yo no quería decir eso... en verdad yo....
-no es necesario que te justifiques kaiba…- levanto la vista mientras le sonreía dulcemente, o eso parecía físicamente, pero, se veía que en el fondo, estaba llorando sangre, seto sintió un nudo en el estómago-…en realidad…tienes razón…soy patético – kaiba negaba mentalmente, pero su cuerpo no reaccionaba, estaba quieto, únicamente miraba a joey, poco a poco la sonrisa se fue desvaneciendo-ni siquiera se...- el tono de voz fue bajando hasta convertirse en un susurro mientras que su vista volvía a fijarse en la taza –porque sigo aquí “ya estoy cansado de vivir”- esto ultimo se lo había dicho mas bien para si mismo que para seto, el cual, apenas lo había oído, pero lo había oído
-la hipotermia te afecta al cerebro-al decirlo pudo notar como su propia voz temblaba, no quería que muriese y menos aún que se suicidase- anda, será mejor que vayas a la cama a descansa un rato
-kaiba... no es necesario que hagas de niñera por mi sabes?, puedes irte a tu casa a descansar, fijo que lo necesitas-fue hasta el fregadero y dejó la taza para lego apoyarse en la meseta y volver a mirar al suelo, “porque eres patético” esas palabras resonaban en su cabeza, la verdad no le culpaba por ello, sabía que tenía toda la razón del mundo...una lágrima estuvo a punto de caer, no fue así gracias a que con un rápido movimiento de su mano la quito aparentando que le picaban los ojos – esto.. yo... voy al baño...-dijo sin esperar respuesta del castaño, se dirigió a la habitación en cuestión cerró la puerta con pestillo para que kaiba no pudiese entrar, se apoyó en el lavamanos mientras silenciosamente comenzaba a derramar lágrimas y más lágrimas, poco a poco fue agachándose hasta quedar de rodillas en el suelo y de ahí a caer sentado mientras seguía llorando. Oyó la puerta de la calle cerrarse, kaiba se debía de haber ido, a gatas fue hasta una pared y se apoyó contra ella, encogió las rodillas para abrazárselas con los brazos y continuar llorando en silencio.
Al cavo de una hora el rubio estaba mareado de tanto respirar agitadamente y llorar, le dolía un motón la cabeza, y si le sumábamos que todavía estaba débil por la hipotermia, se restregó los ojos con las manos... ya estaba harto de sufrir, si los días que le esperaban, eran así, entonces para eso mejor no vivir, se levantó y agarró un vaso de cristal, donde estaba el cepillo de dientes para estrellarlo contra el suelo, agarró un trozo de cristal y se arrodilló en el suelo para comenzar a realizar un corte en su muñeca, al principio hizo uno fino para trazar la zona donde cortaría, respiró profundamente y acerco una vez más el cristal, esta vez para hacer un corte mucho más profundo.
La puerta se abrió de una patada asustando así al cachorro quien alejó el cristal y miró con ojos desorbitados al hombre que se encontraba delante. Tenía el rostro desencajado, estaba furioso, sin embargo permaneció quieto
-y eso... es lo más patético que puedes hacer, hay muchas formas de ahorrarte el sufrimiento, y el suicidio es la más fácil de todas- dijo con veneno en sus palabras, cuando había pensado en marcharse antes había abierto la puerta, pero finalmente la cerró, sabía que el rubio tenía una depresión de caballo, y que cuando no estuviese él intentaría alguna locura, así que simulo irse y esperar el momento en el que lo hiciese para impedírselo
El rubio agachó la cabeza y volvió a llorar-¿qué haces aquí kaiba? Por favor márchate no me impidas hacerlo...- y dicho esto volvió a acercar el cristal a su muñeca para todo lo fuertemente posible, hacerse el corte, pero un rápido movimiento por parte del castaño se lo impidió
-QUE ERES IMBÉCIL!!!???- dijo mientras le agarraba ambas muñecas con sus manos, notó que en su muñeca izquierda había sangre y pensó que ya se había echo parte del corte, así que asustado la examinó, y se alivió al ver que solo era una corte fino- que no se te vuelva a pasar por la cabeza hacer algo tan estúpido!!!- su voz temblaba mucho, el rubio hasta juraría que estaba a punto de llorar.
-Seto...-levantó la cabeza para mirarle a los ojos, observó que, efectivamente estaba a punto de llorar- no te das cuenta de que es la única manera para no sufrir más...- en su voz se notaba que tenía un nudo en la garganta, mientras nuevas lágrimas caían por su rostro
-hay otras maneras!!!- grito desesperado – no vayas por el camino más fácil!!!- las primeras lágrimas comenzaron a descender – no te vayas...no...- agacho la mirada mientras cerraba fuertemente los ojos y apretaba la mandíbula y las muñecas del cachorro con fuerza- no te vayas de mi lado...- estas últimas palabras, provocó que el rubio abriese los ojos lo más que podía mientras que continuaba llorando, la boca la tenía semiabierta por la impresión y sus extremidades le temblaban – por favor....yo... te amo... no te vayas... no me dejes solo....- cuanto más decía más lloraba
-Seto... has escogido al peor de todos para enamorarte…-dijo bajando los brazos hasta sus rodillas junto con las de seto(recordemos que estaban siendo agarradas por seto)-yo… no tengo nada que darte...no tengo dinero ni riquezas…ni siquiera soy inteligente o manitas…la sombra que ves aquí no es nada
-si que eres alguien... y si que puedes darme... –dijo levantando el rostro y aflojando las muñecas a la vez que le sonreía triste y dulcemente- tu... eres Joey Wheeler, el hombre del que me enamoré, y me puedes dar…tu amor y tu cariño…tu comprensión … tu estancia con migo- a Joey le temblaba el labio inferior ante lo que decía el castaño
-Kaiba....- antes, había parado de llorar por la impresión, pero nuevamente caían lágrimas por su rostro cabizbajo
-Seto…prefiero que me llames así…-dijo en un susurro mientras le cogía el mentón y se lo subía hasta que se miraron- por favor Joey permíteme que juntos reconstruyamos tu vida- el rubio fue inclinando su cuerpo hacia delante hasta apoyar su frente en el pecho del ojiazul mientras asentía con la cabeza y sonaba en su garganta algún que otro sollozo y con sus brazos rodeó el cuerpo de kaiba abrazándolo fuertemente, el castaño le correspondió con un abrazo suave y firme mientras que le daba un calido beso en la melena rubia de su cachorro, el llanto semisilencioso del rubio se convirtió en uno ruidoso y a todo pulmón, kaiba se quedó mirándole, acariciándole la cabellera y meciéndolo suavemente como si fuese un bebé, quería que se desahogase... que llorase todo lo que tuviese que llorar...
-sssshhhh……tranquilo…ya pasó.- susurro el castaño a su cachorro- yo estaré a tu lado…y no te abandonaré pase lo que pase…te lo juro…
-seto…
~ OWARI ~