Los automóviles de lujo formaban una pequeña cola para entrar a la mansión, mientras los novios iban a tomar sus fotos; la recepción en la mansión de Ryuichi era simplemente fabulosa, la entrada de la mansión se encontraba bellamente decorada con una alfombra roja a la entrada y varios candelabros, la seguridad era un tema bastante discreto pero abundante, después de pasar la recepción se dirigían a los invitados hasta el jardín donde estaba montada una carpa y alrededor de 70-80 mesas, un equipo de meseros, un equipo de cocineros, y demás personal; también había una pequeña zona para niños los cuales eran vigilados y monitoreados por personal de seguridad.
Los invitados charlaban entre si mientras esperaban la llegada de los novios, un silencio se hizo presente cuando la orquesta-colocada al lado izquierdo del jardín- empezó a tocar la marcha nupcial-Colonello propuso la fúnebre, pero fue golpeado por su esposa Lal- mientras las tres parejas hacían acto de aparición recibiendo los vítores de los más de 700 invitados.
-recuérdenme porque hay tantos invitados-
-parte de Ryuichi, parte de Víctor, parte Reborn, nuestras familias, nuestros amigos-
-esto será agotador-
-y aun no llegamos a la noche-
-pervertidos-
-no nieguen lo que quieren-
-hm-
Un suspiro generalizado de los tres donceles se dejó escuchar mientras desviaban sus miradas levemente sonrojados, y sus esposos sonreían de forma maliciosa; la fiesta dio inicio de forma tranquila mientras convivían con sus invitados y sus hijos.
-/- Con Akihito -/-
Mei caminaba de la mano con su papi mientras saludaban a algunos conocidos suyos, buscando a Ryuichi quien se había separado de ellos; la niña visualizo una mesa mientras sonreía soltándose de la mano de su padre.
-papá Fei, viniste-
-no podía faltar mi niña además fue invitación de tu papi-
El de ropajes chinos tomo en brazos a su hija siendo vigilado por la mirada de halcón de Akihito después de mucho discutir con Asami habían acordado en invitar al padre de la niña y esta se veía feliz a pesar de todo.
-Fei-
-Akihito-
La tensión entre ambos era palpable hasta que el chino en una seña le dio una caja de mediano tamaño en tonos blancos que el rubio recibió sorprendido.
-felicidades, si quieres puedo llevarme a Mei tu sabes estos días-
-no te preocupes Kain-san y Tsusuki-san se la llevaran de vacaciones-
-de acuerdo-
-me quedare con mi papá un rato, papi-
-de acuerdo, come-
El rubio se inclinó a darle un beso en la frente a su hija dejándola en manos de su padre aun no le tenía la suficiente confianza al chino y este bien lo sabía; siguió caminando un rato en busca de su esposo.
-/- con Lambo -/-
El joven de ojos verdes se encontraba algo sorprendido mientras veía como su esposo tacleaba a una chica de cabello rosa, seguridad llego casi al instante levantando a la joven quien empezaba a dar pelea, la chica-que parecía mesera- había llegado sorpresivamente ante él ofreciéndole un bocadillo siendo vista por el de ojos negros quien le arrebato dicho alimento y luego la golpeo.
-Bianchi-
El nombre fue soltado con desprecio mientras el de patillas abrazaba al doncel de la cintura, su aura de sed de sangre fue calmada por el mismo Lambo quien correspondió su abrazo de vuelta inclinándose en su pecho.
-no debiste casarte con él, yo te amaba-
-pero yo no, eras solo la amante de turno así que olvídalo ya; no te hare nada por respeto a mi esposo, pero si vuelvo a verte no tendrás la misma suerte; escorpión…sáquenla de aquí y que alguien revise esto-
-si señor-
- ¿Qué fue eso? -
-lo siento no sé cómo me encontró, ella era Bianchi mejor conocida como Escorpión Venenoso, una ex amante mía; y también una asesina cuya especialidad son los venenos; termine con ella hace mucho, pero se obsesiono conmigo-
- ¿debería acostumbrarme a esto? –
-tal vez; siempre te protegeré-
-te amo-
-lo sé-
-/- Con Yuri -/-
El de cabello negro sonreía discretamente ante la cara de tonto de Cristophe, él iba caminando con su amigo Pichit quien hablaba sobre su suerte de casarse con alguien tan rico Yuri reía con las ocurrencias de su mejor amigo quien sacaba fotos por doquier para presumirlas en internet cuando ambos se toparon con el rubio quien ahora estaba levemente sonrojado mirando al de origen tailandés quien le sonreía, Víctor veía la escena con una sonrisita mientras carraspeaba llamando la atención de ambos cruzando miradas con Yuri quien rápidamente capto el mensaje.
-Pichit, él es el mejor amigo y guardia de mi esposo Cristophe, Critophe él es Pichit mi mejor amigo-
-mu-mucho gusto Pichit-
-igualmente mucho gusto ¿te puedo decir Cris? -
-por-por supuesto-
Los recién casados sonrieron mientras poco a poco se escabullían de ahí dejando a esos dos a solas, Víctor reía mientras abrazaba a su doncel burlándose de la torpeza de su amigo.
La tarde paso relativamente tranquila dándole paso a la noche los invitados tomaron sus asientos cuando el presentador informo de dos bailes especiales. Tres sillas fueron colocadas delante del improvisado-pero gran- escenario, mientras se les pedía a los donceles sentarse en aquellas sillas, ninguno de ellos sabía que pasaba mientras las luces enfocaban el centro del escenario, una tonadita se dejó escuchar mientras de entre las cortinas salían sus hijos.
Los tres se sorprendieron al ver a los tres niños vestidos con pantalones de mezclilla, tenis, y playeras de tirantes de diferente color (Yurio azul, Lampo Verde con toque negros y Mei Lila) bailando al ritmo de la música, lo que termino por hacerlos alucinar fue que detrás de los niños sus esposos tomaban sus respectivos puestos siguiéndole en coordinación a los menores, y lo más sorprendente es que los mayores estaban igualmente vestidos que sus hijos-y si Ryuichi traía una playera lila ajustada- bailando con ellos.
Ninguno de los tres donceles podía expresar palabra, mientras veían las piruetas y demás con apoyo de los varones; la música seguía mientras ellos intentaban contener la risa y las lágrimas ante la ternura frente a sus ojos, la canción termino mientras los cansados esposos recibían los aplausos de todos, los donceles se levantaron subiendo al escenario y recibiendo a los niños y a sus esposos con un abrazo.
-eso fue-
-alucinante-
-y muy dulce de su parte-
-nosotros planeamos todo papi-
-y tío Kain nos ayudó-
-lo imagino-
Los tres donceles empezaron a reír siendo abrazados por sus esposos mientras se levantaban y se iban a cambiar, al regresar fueron guiados por sus donceles hasta el centro de la pista, la música cambio a una canción algo movida, sus ojos hicieron contacto mientras se colocaban en posición, la música subió de tono mientras los donceles movían sus caderas mientras los mayores se pegaban a su cuerpo.
Manos y cuerpos coordinados como si fuesen uno, aquello era alucinante de ver; cuando la canción termino todos los invitados aplaudieron; ellos simplemente sonrieron mientras se besaban como aquella vez en esa pista de baile. La noche siguió su curso y ya avanzada la madrugada los novios se despidieron, se iban una semana de vacaciones por sus hijos no había problema Mei se iba de viaje con Kain y Tsusuki, Yurio se iba con la hermana mayor de Yuri, Mary; y Lampo se iba con Tsuna y Giotto a la mansión de este.
Todos llegaron al aeropuerto como a eso de las 4:30 a.m, los donceles estaban completamente dormidos y no sintieron cuando los subieron al avión, sus ahora esposos los dejaron dormir habían sido unos meses ajetreados y la boda había sido agotadora; además el vuelo era de casi 9 horas.
Despertaron cuando el avión llego al aeropuerto, los donceles suspiraron al observar el lujoso hotel de las paradisiacas islas de Hawaii donde se hospedarían; un escalofrió les recorrió cuando sus esposos se pegaron a ellos con nada sanas intenciones y bien lo sabían, pero aún les faltaba un detalle por hacer.
-Lambo, Akihito los espero en media hora en la recepción-
-claro-
- ¿Qué planeas mi Yuri? -
La voz de Víctor salió algo ronca producto del deseo contenido y petrifico al menor quien comenzaba a ponerse nervioso siendo salvado por su rubio amigo.
-algo…especial, solo; manténganse quietecitos un poco más-
-nos tomara un par de horas arreglarlo todo-
Los donceles suspiraron mientras sus esposos los veían de forma divertida, lo que fuera que estuvieran planeando les causaba cierta pena ya que todos tenían las mejillas sonrojadas y nos los veían directamente.
-solo un par de horas-
Cada uno fue a sus habitaciones y después del tiempo estipulado se reunieron con el doncel de anteojos. Este se encontraba al teléfono con alguien mientras se sonrojaba cada vez más, los otros dos suspiraron a veces Kain era…un total pervertido.
-vale, ya entendí-
El chico colgó la llamada mientras observaba de reojo que los mayores no estuviesen cerca para poder escabullirse del hotel, conocían a sus parejas a la perfecciona si que dieron varias vueltas para poder llegar a aquel lugar.
-/- Horas después -/-
Después de que sus hombres perdieran a sus esposos les había llegado una extraña invitación a aquel sitio “un cabaret” el folleto lo único que mencionaba era la presentación de “the princes of eros” y guiados por sus impulsos -y celos- dieron con el lugar inmediatamente la noche caía, y el lugar ya tenía algo de gente, las empleadas los guiaron a una mesa cercana al escenario donde se podían apreciar varios tubos anclados al techo, inclusive en su mesa había uno de ellos. Tres bebidas le fueron ofrecidas inmediatamente mientras las luces bajaban, una canción se dejó escuchar y el telón subió provocando que casi, casi se atragantaran.
Ahí en medio de la pista estaban sus esposos vestidos de manera sumamente provocativa a pesar de las máscaras que portaban podían reconocerlos, Yuri tenía una especie de vestido corto-muy corto- color blanco, Lambo por su parte traía puesto un vestido parecido al del rubio en color negro y por último estaba Akihito quien traía puesto corsé negro con ligeros.
Los que más les hizo alucinar fue el uso de aquellos tubos en medio de la pista, los tres jóvenes se movían de manera magistral sobre ellos mostrando posturas casi imposibles, el lugar se llenaba de chiflidos, pero aun así ninguno de los donceles dejaba de verlos a ellos, desde inicio del baile sus ojos se mantenían conectados produciéndoles un cosquilleo en la parte baja del abdomen.
Aquella canción que parecía no tener fin llego a su final con los chicos completamente cansados mirando al techo con las rodillas flexionadas a los costados, el presentador llego mientras les daba las gracias a los chicos por la presentación y estos hacían una leve reverencia.
-bueno, bueno calma; esto no es todo, por pedido especial de un conocido “y mi jefe actual” os daremos una sorpresa y tres afortunados subirán al escenario con los príncipes, ¿ya saben quiénes, muchachos? -
-si, ellos-
Su mesa fue señalada y tres sonrisas predatorias cruzaron sus bocas, sus esposos querían jugar y ellos cooperarían en el juego; ya después les harían pagar con creces aquello, tres sillas fueron colocadas cerca de aquellos tubos y en cuanto se sentaron, las luces bajaron mientras los donceles se colocaban frente a ellos con una mano en el objeto metálico, una nueva canción se dejó escuchar y el espectáculo comenzó.
Si antes aquello había sido excitante, esto superaba los límites de su paciencia y resistencia; sus cuerpos se friccionaban en una danza deliciosa y completamente prohibida, las manos de los varones ya se paseaban de forma descarada y a los ukes no les molestaba en absoluto.
-/- Víctor -/-
El doncel de cabellos negros se encontraba sentado en las piernas de su esposo mientras se movía sobre estas, se pegó al cuerpo del de cabellos grises mientras suspiraba en su oído.
- ¿te diviertes? -
-sí, bastante-
-pagaras por esto mi querido Yuri, gritaras mi nombre y te llenare tanto que tendrás muchos bebes-
-lo estoy esperando Víctor-
-joder no me reclames después-
-no lo haré-
-/- Reborn -/-
Las manos de Reborn se habían colado ya por debajo de la ropa de su doncel dando leves mordidas a su cuello mientras este jadeaba y gemía bajito sin dejar de bailar con la espalda pegada al pecho del mayor.
-mngh Reborn-
-pagaras por esto vaquita, haz sido malo-
-mngh ¿Qué me harás? -
-más bien la pregunta sería ¿que no te hare? Porque no pienso dejar tu lindo cuerpo en toda la noche y todo el día eso tenlo por seguro-
-/- Ryuichi -/-
Ryuichi era el más descarado de los tres con ambas manos completamente colocadas sobre la parte inferior de su doncel dándole leves masajes a su parte intima, provocando escalofríos y leves gemidos en el menor.
-cuida las manos-
- ¿Por qué? -
-soy ca-casado-
-mm y ¿tu esposo sabe que bailas en estos sitios? –
-no, pero es muy ce-celoso-
- ¿tanto así? ¿Qué pasaría si hago gritar y gemir como puta en celo a su querido uke? –
-mm no sé, ah, dios-
-te llenare por dentro, y te hare gritar tanto que gemirás mi nombre en vez del suyo-
Aquella placentera tortura termino más rápido de lo que imaginaron, las luces se prendieron mientras los más jóvenes terminaban de arreglar sus ropas dieron una reverencia y tomando las manos de sus esposos los llevaron detrás del escenario, llegando rápidamente a unas habitaciones lujosamente decoradas era ahora no había vuelta atrás y no se arrepentían en absoluto.
-/- Reborn -/-
En cuanto la puerta tras de sí se cerró el mayor olvido sus miramientos pegando a su muy excitado uke contra la pared desgarrando aquella prenda en el proceso relamiéndose los labios ante la vista.
-vaya…que sorpresa-
Debajo de aquella prenda el menor portaba ropa interior femenina un top blanco y unas diminutas bragas que ya no ocultaban aquel erecto miembro, por mero pudor-que mal que bien debía llegarle en aquel instante-su fantástica vista fue cubierta por las manos de Lambo.
-quítalas-
Acompañado a sus palabras tomo el mentón del menor besando sus labios mientras lo conducía a la cama dejándolo caer con cuidado en ella. Lambo asintió aferrando sus manos a las almohadas y deleitándose con el estriptís privado que le daba su marido al desprenderse de su ropa lentamente.
-Reborn-
Aquello había sonado casi como un ronroneo y mando su cordura al inframundo, se quitó el pantalón y su bóxer de forma desesperada dejando a la vista de su uke aquellos 20 centímetros de buena carne.
Se relamió, pero por supuesto que se relamió ¿y quién no? Ante semejante pedazo de monumento, y si había sentido aquella parte de su marido restregándosele un par de veces contra sus posaderas, pero verlo en vivo le quito el aliento y más que darle miedo provoco que mucha saliva llegase a su boca.
- ¿te gusta lo que ves? -
-me encanta-
Se coloco en cuatro gateando de forma sensual hasta el mayor tomando entre sus manos curiosas aquella parte de la anotomía del mayor, masajeándola a su antojo; para después tomarla con su boca recorriéndola de arriba-abajo con la lengua.
-demonios…sigue así-
Las manos de su esposo lo incitaron a comer aquel trozo de carne ni el mismo, sabia como es que estaba tan desinhibido, pero es que Reborn hacia estragos en su mente y no pensaba con claridad, después de unos minutos concentrado en su labor le fue retirado su dulce provocándole un puchero.
-quiero hacerlo dentro de ti-
El de ojos verdes asintió mientras dócilmente se colocaba de espaldas a la cama abriendo sus piernas todo lo que podía-la ventaja de ser bailarín era la flexibilidad- mientras veía aquel par de ónix devorarlo continuamente, señalo uno de los cajones de al lado de la cama y cuando el mayor lo abrió observo un paquete de condones y lubricante desecho los primeros ya que no los iba a necesitar mirando interrogante al doncel.
-ka-kain-san-
Debió haberlo supuesto, sonrió agradeciéndole mentalmente a aquel terco doncel ya que pudo haber lastimado a Lambo debido al fuego que lo carcomía por dentro coloco una generosa cantidad en sus dedos introduciendo dos de sopetón, provocando que el doncel arqueara la espalda.
-mngh Re-reborn más…-
-joder, no te quejes después-
El asesino coloco una generosa cantidad de aquel liquido en su miembro mientras ponía debajo de las caderas del chico una almohada y se colocaba en posición, sin muchos miramientos lo penetro de golpe provocando un gemido mezclado de un grito y pudo sentir las uñas del más chico clavadas en su espalda.
Se contuvo todo lo que pudo evitando lastimar aún más al menor y limpiando aquellas traicioneras lagrimitas que brotaron de sus brillantes gemas, besos sus labios mientras que con sus manos intentaba relajar al chico, sus caricias surgieron efecto tiempo después mientras sentía que el de ojos verdes se relajaba en sus brazos, empezó un lento mete y saca disfrutando cada una de sus estocadas.
La pasión los consumió poco a poco subiendo el nivel y cambiando las posiciones varias veces; hasta que volvieron a la posición inicial con el mayor embistiendo de forma brusca al menor quien se aferraba a su cuerpo gritando sin ningún pudor el nombre del contrario.
-RE-REBORN…ME VENGO-
Un par de embestidas bastaron para que ambos llegasen a su clímax, Lambo entre sus vientres y Reborn dentro de su doncel, el de patillas termino recargado en el pecho del menor mientras ambos recuperaban el aliento.
-te amo-
-lo sé-
Reborn besaba su cuerpo con calma mientras Lambo enredaba sus manos en el cabello negro, dio un pequeño gemidito cuando sintió al mayor salir de su interior sin dejar de besar, lamer y morder su cuerpo; el de ojos negros se levantó mientras dejaba apreciar su desnuda figura.
-te daré 10 minutos de descanso, así que prepárate-
El joven doncel se quedó de una pieza mientras veía al mayor desaparecer rumbo al baño, sonrió mientras se colocaba el antebrazo sobre los ojos, miro el reloj, descansaría 5 minutos y luego acompañaría a su pervertido esposo al baño.
-/- Víctor -/-
En cuanto cruzaron la puerta de la habitación no dudo en tomar a su lindo doncel por la retaguardia mientras mordía sus hombros y cuello, escuchando leves jadeos; desgarro su ropa mientras besaba todo lo que se encontraba a su alcance parecía un animal en celo que Yuri apenas conocía, pero aquello lo volvía excitante.
-Ví-Víctor-
-te amo Yuri, ahora se un niño bueno y acepta tu castigo-
-si-
El mayor sonrió depositando al joven sobre la cama mientras encajaba los dientes en el hombro izquierdo provocando un quejidito del menor, se levantó solo para quitarse la ropa rápidamente, sonrió malicioso al quitarse la corbata y amarrar las manos del de ojos negros con ella.
-amazing…ahora estate quietecito-
El de ojos negros estaba completamente perdido, nunca había visto esa faceta de Víctor tan “caliente” arqueo la espalda al sentir como el mayor tomaba su excitado miembro con su boca, sus ojos miraban intensamente a su pareja quien sonreía de forma ladina, Yuri también estaba mostrando una faceta desconocida para él y le encantaba.
Le dio la vuelta al cuerpo de su esposo poniéndolo en cuatro mientras se dedicaba a besar, morder y lamer enmarcando toda la columna deleitándose con los sensuales gemidos del de cabellos negros, llego hasta sus nalgas las cuales separo con sus manos mirando con lujuria mal contenida aquel pecaminoso agujerito que lo incitaba a pecar.
-mira que tenemos aquí-
-mngh Víctor-
Aventuro un par de sus dedos a aquel lugar disfrutando de la estreches y calor, de solo imaginar que su miembro estaría acogido por aquellas deliciosas paredes provocaba que su erección doliese.
-tan caliente y estrecho, mira como se humedece mi querido ángel ¿tantas ganas tienes? ¿has jugado con tus dedos aquí? Mi pecaminoso Yuri-
-n-no.…mngh-
- ¿no? ¿estás seguro? ¿nunca has recorrido tu cuerpo con tus manos imaginando que son las mías? Recorriendo cada centímetro imaginando mis dedos haciendo lo mismo, masturbándote pensando en mí, y jugar con este lugar imaginando mi muy dura polla dentro, entrando y saliendo mientras tus labios gimen y gritan mi nombre-
-Víctor…por-favor…para-
-este es tu castigo mi ángel-
Detuvo sus dedos mientras los retiraba ganándose un gemido de protesta de su uke, una sutil risa broto de sus labios mientras bajaba a la altura adecuada, separo aquellas montañitas no sin antes darles unos mordisquitos juguetones, las separo saboreándose con anticipación; el primer lametazo provoco un grito de Yuri quien difícilmente giro la cabeza observando a su esposo.
-Ví-Víctor…no-
-mnh pero si lo estas disfrutando mi querido niño, en cuanto coloque mi lengua aquí, tu cuerpo vibro y mira como gotea tu miembro dime Yuri ¿Qué deseas? -
-hazlo-
-no te entiendo-
-HAZME EL AMOR-
-mejor-
El mayor se levantó de su posición mientras se colocaba detrás de su esposo, busco con la vista sus pantalones y los recogió sacando de uno de los bolsillos un pequeño botecito de líquido transparente, vertió una generosa cantidad y colocando las manos en las caderas ajenas entro de una sola estocada. La espalda de Yuri se arqueo de forma casi imposible mientras Víctor se mantenía quieto.
-mierda…tan estrecho-
-mue-muévete…por favor-
- ¿estás seguro? Ngh no te quiero lasti-mar-
-si, so-lo…hazlo-
El de cabello gris no se hizo de rogar saliendo y entrando de su doncel de forma lenta, disfrutando de los lindos gemidos de Yuri; ninguno de los dos iba a durar mucho aquellos juegos previos los habían encendido demasiado, Víctor salió del menor dándole la vuelta mientras se sentaba en la cama con el menor encima, sus bocas se conectaron en un beso demandante mientras Yuri colocaba las manos-aun amarradas- detrás de su cabeza y él se aferraba a sus caderas subiéndolo y bajándolo a velocidad vertiginosa.
-VÍCTOR-
Tras este grito las paredes de su doncel se estrecharon demasiado y solo bastaron un par de estocadas para que el construyese la plataforma de su propio orgasmo gruñendo el nombre de su pareja, terminaron desplomados sobre la cama mientras intentaban respirar con normalidad.
-te amo Yuri-
-también te amo Víctor-
El de cabello gris beso los labios de su doncel retirándose con cuidado y desatándolo mientras besaba sus rojas muñecas, beso un pezón y luego el otro provocando quedos suspiros.
- ¿listo para la otra ronda? -
-solo…ve despacio-
El doncel volteo la mirada lo suficientemente sonrojado provocando una risa nada maliciosa de su esposo quien le dio un tierno beso en la nariz seguido de caricias tiernas, esa iba a ser una larga noche.
-/- Ryuichi -/-
Llegaron a la habitación comiéndose las bocas, Akihito disfrutaba de las caricias de su esposo mientras sonreía de forma ladina.
-entonces ¿Qué me haría tu esposo? Si nos descubriese-
-mandaría a sus hombres, es un gran mafioso-
- ¿oh, eso es cierto? ¿Qué tan grande? -
-lo suficiente, pero ahora calla y follame hasta que grite-
-eres una ramera Akihito-
-tú me has convertido en una Ryuichi, mi querido esposo; solo tú ramera-
-maldición, no te quejes después-
El mayor lo aventó a la cama mientras se colocaba encima de él, Akihito intento contener los salvajes instintos del mayor solo un poco.
-mngh…espera-
- ¿Qué sucede? –
-tengo algo que te gustara-
El mayor detuvo sus acciones mientras observaba a su doncel de forma intensa, este sonrió de manera ladina mientras los besaba desanudando su corbata, se bajó de la cama sacando de esta una maleta de color negro la cual coloco frente al mayor. Este la tomo abriéndola mientras sus ojos se oscurecían producto del deseo.
- ¿Quién te conto sobre esto? -
-Kirishima-san es fácil de convencer si usas…los medios correctos-
-no tientes tu suerte mi querido esposo, porque ahora eres solo mío-
El mayor tomo con fuerza el cuello del doncel provocando un ronroneo de su parte, la sonrisa maliciosa tomo más fuerza en su boca mientras se quitaba el cinturón amarrando con ello las manos de su esposo, también saco un pequeño cuchillo de su zapato desgarrando con ello aquel traje tan provocativo de su doncel dejándolo completamente desnudo saco de la maleta un juego de sogas; paso la primera por las piernas del menor amarrando sus tobillos a los extremos de la cama con sus piernas flexionadas, la segunda la paso por su torso juntando codo con codo y ajustándola a su pecho.
-mngh-
-guarda silencio, mi pequeña puta-
Tomo un collar color negro y lo coloco en el cuello del menor sonrió ante la plaquita que colgaba en el centro que rezaba “propiedad de Ryuichi Asami” tomo otra soga y amarro dicho collar a la cabecera de la cama, dejando a Akihito sentado con sus piernas flexionadas hacia él, sonrió de forma maliciosa aquello iba a ser muy divertido.
Aquello era parte de sus más oscuros secretos le atraía el BDSM y ver Akihito tan cooperativo no había hecho más que encenderlo, ya después investigaría que había hecho su muy sensual doncel para sacarle la información a su hombre de mayor confianza y el único que sabía de sus gustos “particulares”
-Ryuichi-
-calla-
Para dar énfasis a sus palabras paso su corbata por la boca del doncel acallándolo, se colocó en medio de sus piernas mientras tomaba su erección con rudeza lamiéndola de arriba-abajo velozmente para después disminuirla hasta solo pasar su lengua superficialmente, y por los gemidos ahogados de su doncel aquello lo estaba enloqueciendo.
Siguió así un poco más llevando al chico al borde del orgasmo y deteniéndose por momentos, hasta que el joven no aguanto y termino corriéndose. Tomo su esencia con su boca saboreándola a su antojo subió el rostro hasta su pareja mientras lo besaba.
-no te ordene correrte, pero lo dejare pasar…por ahora-
Desato las piernas y cuello de su esposo colocándolo en cuatro amarrándolo esta vez a la altura de sus muslos, dejando que sus brazos y pecho-aún amarrados-se recargasen sobre la cama, beso su espalda con calma enmarcando con sus manos todo el cuerpo del doncel.
-Asamingh-
Sentía las manos del mayor recorrer su cuerpo con calma y hasta cierta delicadeza, gimió bajamente disfrutando de aquel momento algo tierno de parte de su esposo, aunque este término rápidamente cuando sintió una nalgada.
-mngh-
-eso fue por correrte cuando no debías-
Un beso y una lamida a su enrojecido glúteo y un golpe más.
-y eso, por lo de tu bailecito amor mío-
La enorme carga de sarcasmo más que molestarme mando una descarga electrica a mi espina dorsal, mi castigo siguió unos momentos más sintiendo de vez en cuando las lamidas que mi esposo daba a la zona afectada.
-de-deja de jugar-
El mayor sonrió mientras ignoraba las palabras del rubio dando una mordida a su nalga derecha, él también estaba al borde y no sabía cuánto más podría aguantar, le tomó la palabra al doncel al fin y al cabo tenían toda la noche, no; más bien toda la vida. Dio una leve sonrisa sincera mientras volteaba el cuerpo de su doncel y le quitaba la mordaza de la boca.
-quiero que gimas y grites mi nombre-
-te amo-
-yo también-
Se besaron de forma salvaje mientras Ryuichi colocaba una almohada debajo de las caderas de su uke y colocándose en posición lo embestía de una sola estocada, el grito-gemido de Akihito fue ahogado por los labios del mayor quien solo espero unos segundos para empezar a moverse.
Como pudo soltó las manos del menor quien se aferró a su espalda gimiendo en su oído, lo levanto por los hombros recargándolo en la pared más cercana, las embestidas aumentaron de nivel y de potencia arrancando agudos gritos de su doncel, pronto llegaron al clímax con el rubio casi desmayado sobre el hombro del mayor quien lo recostó de nueva cuenta en la cama, un poco de descanso no les haría mal, lo abrazo a su cuerpo sintiendo al menor dibujar figuras en su vientre desnudo.
-/-/-/-
Bailarines y mafiosos ¿Quién lo diría? Seis vidas que se cruzaron por azares del destino y que sin pensarlo cada uno era el hilo rojo del contrario, ahora todos eran más fuertes y cada uno había encontrado lo que necesitaban.
Nuestros bailarines alguien en quien confiar que los amara tanto como ellos lo hicieron y nuestros mafiosos una familia por la cual pelear, ¿Qué les deparara el destino? Bueno quien sabe, tal vez el futuro sea resplandeciente.
FIN