Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

THE PRINCES OF EROS por Sayurayaoista

[Reviews - 9]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Sayura: gomen gomen

Ana: a duras penas acabamos el semestre justo hoy

Nina: lo unico bueno es que...empiezan las vacaciones¡¡¡

Xóchitl: y esperamos poder actualizar más seguido 

Todas: ¡a leer!

Sonrió al ver aquel mote que le había puesto solo para fregar, confiaba en Reborn ciegamente y si algo le llegaba a pasar él podría cuidar a Lampo, porque de algo estaba seguro amaba al de cabello negro y no le importaba enfrentarse al de ojos grises por ello, Kyoya ya no iba a arruinar su felicidad.

-/-/-/-/ Nuevo Capítulo /-/-/-/-

-pareces feliz-

-lo soy dame-Tsuna-

El de ojos negros observo al castaño frente a él, se encontraban en el dojo entrenando, a pesar de todas sus diferencias Tsuna seguía siendo el décimo capo y el como parte de la rama secundaria tenía el deber de protegerlo, además lo hacía por Nana Sawada la difunta madre del capo quien también fue su propia madre en su momento.

Un golpe, el capo lo esquivo, aunque respiraba de modo agitado, esto extraño al de patillas parecía que el menor había disminuido su capacidad.

- ¿Qué pasa? –

-nada-

-Tsunayoshi-

El menor lo ataco de forma algo desesperada, mientras lo esquivaba mandándolo al suelo, lo interesante es que el joven se había volteado para caer de espaldas y ahí lo vio.

-Quítate la playera-

- ¿eh? -

-quítatela Tsunayoshi o te la quitare a la fuerza-

Vio los ojos del menor no lo haría de eso estaba seguro antes de que pudiese actuar, se encimo al menor y empezó a forcejear con él, la puerta fue abierta por un asustado Giotto quien había oído el pequeño alboroto.

- ¡Tío Reborn! Con cuidado papi esta embarazado-

El de cabello negros se detuvo ante la sorpresa del menor quitándole de un movimiento rápido la playera dejando al descubierto grandes marcas moradas Giotto desvió la vista mientras Tsuna apretaba los puños.

-Giotto ve a tu cuarto-

-pero tío…-

- ¡AHORA! –

El menor salio disparado de ahí mientras el de negro cabello se levantaba cerrando la puerta con seguro.

-Fue Kyoya-

Aquello no había sonado a pregunta, Tsuna estaba sentado en el piso mientras se abrazaba a si mismo dando una leve caricia a su vientre. Reborn apretó los puños mientras lo observaba furioso no con el castaño sino consigo mismo como no lo había visto antes.

-Tsuna…él sabe-

-se lo dije hace una semana-

- ¡maldita sea! ¡ahora si lo mato! -

 -Reborn no-

- ¿Qué planeas que te golpe hasta que un día logre matarte? El bebé que perdiste…-

- ¡Cállate, Reborn! -

El menor alzo la vista totalmente empañada en lágrimas mientras tomaba su vientre, Reborn apretó los puños caminando hasta él mientras se inclinaba a su altura tomando su rostro.

-da la orden-

- ¿eh? -

-soy la rama secundaria Tsuna…una sola orden y lo desapareceré de tu vida-

-yo no…-

-piensa en Giotto-

-pero él es mi marido-

- ¿Qué diría Mamma? No puedo dejarlo así…prometí protegerte, que estúpido he sido, como jodidos no me di cuenta antes-

-Reborn yo…-

-hazlo Tsuna dame una orden-

-no puedo, jure cambiar a Vongola y no irme por el camino del odio y las muertes…ve con él ahora, no hay nada más que hacer aquí-

-Tsuna-

- ¡es una orden! Y olvida esto-

-si mi señor, aunque no creo poder olvidarlo-

El de cabello negros salió del lugar mientras Tsuna tomaba su playera temblando, respiro mientras salía en busca de su único consuelo dirigiendo sus pasos al cuarto de Giottto, iba furibundo como maldita sea había pasado aquello por alto, si era un jodido secreto a voces en la mansión, tomo las llaves de su motocicleta y se fue; si se quedaba un poco más en aquella mansión se encontraría con ese tipo y no respondería por sus actos, lamentablemente sin orden de Tsuna no podía hacer nada, el de ojos grises aún era marido del décimo capo y su palabra aunque menor tenía cierto grado de validez y autoridad.

Llego al lugar donde Lambo no estaba tan feliz se intentó preparar mentalmente, pero nada lo preparo para ello.

-hola vaquita-

-hm, hola-

- ¿Qué pasa? -

-primero que todo, tonto, idiota e insensible Reborn ¿quieres ser mi novio? –

El de cabellos negros se quedó en una pieza debía ser él el que dijera aquello, espera ¿en qué diablos pensaba? Y en ese momento lo notó, no podía vivir sin esos ojos verdes y esa dulce fragancia a vainilla que lo relajaba, sin más que decir se acercó tomando su mentón mientras le plantaba un beso.

-hm, acepto vaquita, te has metido en un problema, ahora eres mío-

Ambos sonrieron mientras el de ojos esmeraldas recibía un beso algo subido de tono del mayor. Jadeo un poco pero no podía dejarse llevar tan rápido, se separó del mayor completamente sonrojado.

- ¿y bien para que me querías? –

Sabía que aquello no era todo y cuando vio la caria seria del menor supuso que habría problemas.

-quería aclararte mi problema con Hibari Kyoya, y la situación de Lampo, antes de que algo pase o que te enteres por él, ya que por lo visto son cercanos-

-te escucho, es el esposo de mi primo nada más-

-conocí a Kyoya hace 7 años cuando trabajaba para Tsuna-san, en ese tiempo no sabía que estaban casados, él era una persona completamente indiferente a Tsuna, no sé qué vio en mí y se le hizo fácil conquistarme, caí en su trampa y termine saliendo con él, al principio era bueno a su manera después de 6 meses de relación vino la primera pelea y por consecuente le primer golpe, él se disculpó y me llevo a comer a un bonito restaurante pero sus celos y posesividad eran mayores, llego el punto en que tuve que cubrirlos-

El menor había ocultado la mirada mientras Reborn apretaba los puños, ahora si lo mataba con o sin orden de Tsuna.

-nunca dije nada por miedo a él, así pasaron 4 años de un vaivén de situaciones era bueno, era malo, me golpeaba, me daba regalos hasta que llego Lampo, Lampo es mi medio hermano hijo de mi padre y su nueva esposa, la madre de Lampo murió en el parto paso un tiempo hasta que un día papá enfermó, y me mando a llamar dejándome la tutela de mi pequeño hermano y a los 4 días murió-

-lo lamento-

-no era muy apegado a él, me emancipé a los 15 y viví por mi cuenta; al principio Kyoya parecía de acuerdo inclusive acepto rápido al que ahora era mi hijo y los golpes también habían cesado, pensé que había cambiado tuve que trabajar y por consecuente tenía que llevar a mi hijo a la guardería, ahí me encontré con Tsuna; quien tenía en brazos al pequeño Giotto, pasaron unas cuantas semanas hasta que un día Tsuna no pudo venir, me quede ahí hasta que recogieran a Giotto y fue cuando me entere de la verdad Kyoya era padre de Giotto y esposo de Tsuna, no me quede a escucharlo simplemente me lleve a mi hijo de ahí, después sobrevino una pelea; deje a Kyoya, y no sé cómo un día Tsuna me confronto parecía ser que el día anterior Kyoya le había confesado la verdad estando bastante tomado, hubiera cambiado a Lampo pero él y Giotto habían hecho una fuerte amistad y ninguno de los dos tuvimos corazón para separarlos-

El de cabello ondulado cerro los ojos abriéndolos sorprendido sintiendo la mano del mayor entrelazarse con la suya, dándole apoyo de forma muda; Lambo lo agradeció lo que no sabía es que Reborn buscaba contenerse para no levantarse e irse a atacar al de ojos grises en ese instante.

-hace un año Kyoya me envió un mensaje se iría del país junto con Tsuna, debo admitir que aquello me alegro, aunque tuve que consolar a mi hijo por la pérdida de su amigo y eso es todo, Reborn-

- ¿qué? -

-Kyoya me amenazo, y sinceramente tengo miedo, en su momento estuvo a punto de mandarme al hospital, no quiero que Lampo vuelva a vivir esto, pero no me quedare de brazos cruzados esta vez y si algo me pasa quisiera que mi hijo quedase en tus manos sé que es repentino todo esto, pero no veo a alguien más indicado para cuidarlo-

El menor se sonrojo mientras desviaba la mirada aquel discurso se escuchaba mejor en su cabeza, pero lo que no se espero es que Reborn apretase su mano alzo la mirada topándose con ese par de ónix que lo miraban de manera seria pensó en que había metido la pata, pero Reborn lo beso, aunque esta vez su beso sabia diferente sabia a amor, necesidad, deseo y un sentimiento de protección que le embriago el corazón.

-no digas estupideces vaca tonta, nada te pasara a ti ni a dame-Lampo porque yo los protegeré del inútil “carnívoro” ese-

Sonrió de manera dulce mientras volvía a besar al de cabellos negros sonrojándose cuando este intensifico el beso se separaron mientras Lambo se sonrojaba porque muchas personas los miraban y Reborn sonreía con autosuficiencia.

- “lo mato juro que lo mato, perdón Tsuna pero esto no se puede quedar así, no cuando encontré a la persona indicada para entregarle mi corazón”-

-/-/-/ tres semanas después /-/-/-

Víctor estaba nervioso, sumamente nervioso y Yuri no se encontraba mejor, habían tomado una decisión que no le iba a gustar para nada al pequeño rubio hijo de Yuri, en esos momentos se encontraban en el zoológico mientras Yurio paseaba por los hábitats de los tigres completamente ilusionado, habían ido a aquel lugar para hacer menos duro el golpe incluso Víctor había movido sus influencias para darle una buena estancia al gatito ruso y ahora se dirigían a la entrada exclusiva de empleados para que el niño pudiese convivir con una cría de tigre, todo lo hacía por su lindo Yuri quien sonreía de vez en vez mirando a su hijo si eso no era amor le rompería la mandíbula a quien se atreviese a tan siquiera insinuarlo, el día paso relativamente rápido hasta que llegó la hora del almuerzo donde ambos adultos le soltarían la bomba.

El niño comía a buen ritmo, habían estado caminando todo el día, y se había cansado ya, además a pesar de su delicada figura Yurio comía bastante por suerte no engordaba fácilmente como su papá Yuri solo unas clases de baile en la escuela y estaría perfecto; eso y también por joder a Víctor quien había financiado aquello, sonriendo con suficiencia.

-Yurio amor-

- ¿quepasaldjg? -

-no hables con la boca llena hijo-

-lo siento ma, ¿Qué pasa? –

-Víctor y yo queríamos decirte algo-

El rubio se les quedo viendo mientras Yuri entrelazaba su mano con Víctor por encima de la mesa dándose el valor necesario para continuar dejando que el rubio esbozase una mueca incrédula ante lo que veía y antes de que Yuri pudiese hablar el menor grito.

- ¡SALES CON EL ANCIANO! -

Sin más el niño se bajó de la mesa mientras corría, Yuri intento ir por él, pero Víctor lo detuvo.

-yo hablare primero, ya cuando regresen hablas con él-

El de cabello blanco salió en busca del menor, cuando observo hacia donde se dirigía se sintió algo intranquilo ya que el menor iba directo al hábitat de los grandes felinos y acelero el paso, no era por nada, pero tenía excelente condición atlética, logro detenerlo mientras el chiquillo pataleaba.

- ¡Yurio! –

-suéltame anciano-

Su pequeño cuerpo temblaba y Víctor se inclinó a su altura, supuso a que se debía, el rubio tenía miedo de que él le quitase el amor de Yuri, pero aquello no iba a pasar nunca; a pesar de los pataleos y los pequeños rasguños que el niño le daba lo abrazo a su pecho de forma cálida mientras el menor se relajaba un poco.

-no te voy a quitar a Yuri de ningún modo, él te ama, y siempre lo hará sin importar nada yo simplemente voy a convivir con ustedes de un modo más cercano-

-no sabes de lo que hablas viejo-

-sí que lo sé Yurio o debería decir Yuri Plisestky, Yuri me confió la verdad sobre ti y solo me queda decirte una cosa que te voy a querer con todas mis fuerzas y nunca los voy a abandonar-

- ¿nunca? -

-no…además vele el lado positivo gatito tendrás todo lo que quieras, aunque me cueste bastante-

El de cabellos blancos sintió como el pequeño gatito se aferraba a él mientras pequeñas gotas mojaban su camisa y después escucho su típico suéltame esquivando la mirada del adulto sonrojado, pero aun así dándole su mano para regresar a la mesa donde Yuri los esperaba al lado de un rubio que Víctor reconoció de inmediato.

- ¿Cris? -

- ¿jefe…que diga Víctor? -

- ¿Cris-san? -

- ¿se conocen? –

A Yuri simplemente se le fue el color del rostro, pero aun así esbozo una pequeña sonrisa al ver llegar a su novio tomado de la mano con su hijo, aunque después el niño lo negaría todo.

-/-/-/-/-/-/-/-/-/-

Se sentía preocupado ya habían pasado 5 minutos de la hora que Fei le había dicho que regresaría con su hija, ambos se habían ido al cine, a pesar del semi confrontamiento que siempre tenía con Ryuichi desde que este le había declarado la guerra-o aquello había parecido esa vez- el chino había regresado a su hija de forma puntual a los brazos de su madre, decidió respirar un poco mientras intentaba no volverse paranoico, su celular vibro mientras sonreía al ver el remitente.

De: Ryu-san

¿Cómo están?

Re: Aki-chan

Yo bien, Fei no ha llegado aún, se llevó a Mei

De: Ryu-san

¿Ya lleva mucho tiempo retrasado?

Re: Aki-chan

Solo como 10 minutos, pero no me está gustando esto, tengo un mal presentimiento

De: Ryu-san

Tranquilo no deben estar lejos, yo voy para tu casa; llegare como en media hora cuando llegue Mei le pones algo lindo iremos a cenar, tengo algo importante que decirte

Su corazón dio un vuelco mientras se sonrojaba, casi podía observar la sonrisa ladina del más grande al intuir porque se tardaba en contestar, esperaba que fuera lo que pensaba.

Re: Aki-chan

De acuerdo

P.D: ¿Qué planeas Ryuichi-san?

De: Ryu-san

Nada que debas saber…aún

El de cabellos rubios sonrió mientras suspiraba guardo su celular mientras se sentaba en el sillón dispuesto a esperar al padre de su hija y al hombre de quien se había enamorado, si ahora lo admitía se había enamorado de Ryuichi Asami a pesar del difícil carácter del mayor y del hecho de que era un pervertido total, le gustaba cada cosa de él además tenía un cuerpo de infarto que más podía pedir; y su hija se llevaba bien con el mayor; en las últimas semanas la pequeña se había acercado un poco más al de ojos miel a pesar de convivir con su otro progenitor.

No supo cuánto tiempo se quedó dormido, despertó al escuchar el timbre fue a abrir encontrándose con Ryuichi al observarlo se asustó porque no había rastro de Mei ambos se vieron a los ojos sincronizándose con sus pensamientos.

-Mei-

Se asustó mientras se ponía pálido, pero no era momento busco su celular el cual se había caído debajo del sillón mientras buscaba entre la agenda de contactos el número de Fei Long lo marco el aparato timbro una, dos veces y la tercera le contestaron.

-Akihito-

- ¿DONDE ESTA MI HIJA FEI? -

-no grites Akihito, ella está bien, se encuentra dormida-

-traeme a mi hija ahora-

-no lo hare, esta niña también es mi hija así que, nos vemos Akihito; algún día te la devolveré-

La línea fue cortada mientras Akihito dejaba caer el teléfono mientras sentía que el alma se le iba termino sentado de sopetón, mientras el de ojos miel lo veía algo preocupado.

- ¿Akihito? -

Se sentó a su lado mientras el menor se aferraba a él, sintió su camisa mojada producto de las lágrimas que soltaba el rubio y los leves temblores productos del llanto.

-se la llevo, Ryuichi, Fei se la llevo-

- ¿qué pasó? -

-FEI SE LLEVO A MI HIJA-

El mayor chasqueo la lengua, ese niñajo se las pagaría caro por hacer llorar a Akihito solo él tenía ese privilegio, pero él lo haría llorar de placer, pero no era momento para pensar en ello, recordó el regalo que le había dado a la niña semanas atrás y espero que aún lo trajera puesto separo al rubio de su cuerpo.

-creo saber cómo encontrarla-

Notas finales:

Sayura: sayonara 

Ana: esperemos que les haya gustado el cap

Nina: y su gustan dejarnos algun RR nos harían muy felices

Xóchitl: hata el proximo fic y la actu bye bye 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).