Danny oía con atención como sus padres les explicaban sobre cómo funcionaban las nuevas armas con las que planeaban atrapar a los fantasmas, desde electrificarlos hasta poder lanzarles nanomicrochips que eran capaces de dejar una grieta abierta hacia la zona fantasma en dado caso de que estos lograran escapar. Aunque no le agradará mucho estar ahí tenía que saber a qué se tendría que enfrentar cuando aquellos inventos dejaran de ser solo prototipos.
—Casi lo olvido— mencionó Jack mientras empezaba a soldar una armadura mejorada —, Vlad vino hace un rato y nos dijo que les manda saludos.
Danny reaccionó recordando en donde estaba y que no podía quedarse por mucho rato más.
—¿¡En serio!? Me encantaría ir a verlo. ¿Creen que pueda?
—No lo sé, cariño. Supongo que el igual quiere verlos a ambos pero el trabajo de ser rey no es algo que de mucho tiempo libre que digamos— comentó Maddie intentando hacer que su hija viera la realidad.
—Si, creo que tienes razón— dijo con notable tristeza.
—Yo, ahh. Quede con los chicos de vernos en 15 minutos en el cine— decía Danny al mismo tiempo que empezaba a retroceder hacia las escaleras —. Así que creo que sí quiero llegar a tiempo debería irme...ya...
Todo su cuerpo se tensó al sentir como su espalda chocaba contra algo, lo peor era que por más que intentará convencerse de lo contrario sabía que muy bien y con horror que no había chocado con la pared.
—¡Tio Vlad!
Jazz corrió hacia el mayor haciendo a Danny a un lado en el proceso y abrazo a su "tio" siendo inmediatamente correspondida de igual forma.
—Hola Jazmine, veo que has crecido algo en estos meses. Y también te veo más hermosa que nunca, no me sorprendería que me contarás qué tienes a varios candidatos tras de ti o incluso que ya tengas novio.
—Jaja, tío Vlad ¿pero qué cosas dices?
—¿Entonces me dirás que no es cierto?
—...
Ambos empezaron a reír, claro Jazz más animada y estruendosamente que Vlad. Este paso su mirada de la pelirroja al pelinegro que temblaba casi de manera imperceptible por la presencia del soberano.
El más alto dio unos pasos hasta quedar frente al menor, le dedico una sonrisa tanto dulce como coqueta al mismo tiempo que extendía su mano para saludarlo cortésmente. Danny no sabia si debía corresponder al saludo, pero pensó que con su hermana de posible testigo -ya que sus padres estaban metidos en algún tipo de láser nuevo- Vlad no se atrevería a intentar algo raro, así que extendió su mano y lo saludo estando un poco más tranquilo.
Pero Danny olvidaba que su majestad siempre tenía sus trucos bajo la manga.
—Jazmine, querida. ¿Sabes qué hace poco compre un estéreo nuevo? Ahora el equipo de sonido es, según me dijeron, más óptimo e insuperable en varios ángulos ¿te gustaría ser la primera en probarlo?
—¿¡De verdad!? ¡Gracias, tío!— y sin esperar un segundo más salió corriendo.
De inmediato el miedo volvió a recorrer el cuerpo de Danny y cuando intento safar su mano del agarre de Vlad este puso más fuerza haciendo que aquello fuera imposible. El más alto lo arrastró hasta la salida del sótano dando una vaga despedida a sus amigos para no levantar sospechas; cuando ambos se encontraron en el pasillo Vlad aligeró el agarre procurando que el otro aún así no pudiera soltarse.
—Daniel, qué enorme alegría el que vengas a visitarme— atrajo la mano que sostenía y depósito un beso en está provocando un intenso sonrojo en el menor —¿Ya te eh dicho lo irresistible que me pareces cuando te sonrojas? En especial cuando soy yo quien lo provoca.
—¿P-Por qué sigues con este juego? ¿No es suficiente para ti lo que hiciste hace 6 meses?
—¿Todavía sigues enojado por aquello? Insisto en que estas malinterpretando lo que sucedió ese día. Aunque debo admitir que en parte me alegra que recuerdes eso, me gusta que recuerdes todo lo que tenga que ver con...nosotros.
—Dime algo ¿te parece correcto que el rey se la pase acosando a un chico de 15 años? Porque yo creo que no.
El mayor soltó una pequeña risa antes de colocar sus brazos a cada lado del azabache dejándolo acorralado y a su completa merced. Llevo su mano derecha a la mejilla del contrario para que luego empezará a acariciarlo lentamente con su pulgar logrando que otro sonrojo apareciera en el rostro de Danny.
—Daniel, llevamos jugando al gato y al ratón por mucho tiempo, años realmente.
—Exacto ¿nunca te cansas de hacer esto?
—¿Cuánto más tengo que hacer para que comprendas que no hago esto para perjudicarte?
—Tampoco es como si lo que hicieras ahora diera mucha confianza a lo que dices.
Vlad apartó sus brazos liberándolo y empezó a caminar en círculos a la par que pasaba sus manos por su cabello y su cara; lo admitía...estaba molesto, lo único que quería era que Danny aceptara sus muestras de afecto para comprobar si lo que sentía por él era realmente una rara pero agradable especie de amor o si sólo era atracción pasajera, aunque en dado caso de que fuera lo ultimo pensaba que 3 años era mucho para que fuera solo algo "pasajero".
En un rápido movimiento Vlad tomó a Danny de la parte trasera de su cabeza con una mano, lo atrapó entre la pared y su cuerpo y junto sus labios en un demandante y necesitado beso; pasaba su mano libre entre los cabellos del más bajo deleitándose con la suavidad tanto de estos como de los labios que estaba probando por milésima vez y que nunca le cansaban. Danny golpeaba a Vlad para que lo soltara al igual que llevaba sus manos a los hombros intentando empujarlo.
—Daniel ¿qué es lo que quieres para que aceptes esto?— pregunto en medio del beso y juntando su frente con la del otro.
—¡Lo único que quiero es que me dejes en paz!— finalmente Vlad se apartó viendo con furia creciente a Danny —¿Por qué haces esto en primer lugar? ¡Nunca te di motivos para hacerme pasar todo esto!
La expresión en el teatro de Vlad volvía a transformarse a una de sorpresa pero pronto esta se convirtió en una sonrisa y mirada maliciosa.
—Oh mi querido Daniel ¿a qué te refieres con que nunca me has dado motivos? ¿A caso crees que haría esto solo porque si?— su sonrisa aumento al ver que el rostro del menor se deformaba en una expresión de miedo —Claro que no, topo tejón.
Escucharon pasos provenientes del pasillo contiguo y a los pocos segundos apareció un sirviente algo contrariado y nervioso, cuando divisó a Vlad fue rápidamente hacia el, noto la presencia de Danny pero no le tomo importancia.
—Majestad, disculpe interrumpir su conversación pero todavía tiene una pila de asuntos pendientes que debe atender en la mayor brevedad posible.
Este frunció el ceño y soltó un bajo gruñido que solo fue percibido por el, se giró para ver a Danny y se acercó para hablarle con un tono neutral.
—Mis disculpas Daniel pero continuaremos nuestra interesante platica en otra ocasión, no olvides que siempre eres bien recibido...vuelve cuando quieras.
Y sin más regreso la vista a su sirviente y avanzó haciendo gala de su elegancia innata. Cuando desapareció de la vista de Danny este suspiro aliviado y salió de ahí para buscar a Jazz para que ya pudieran irse rápido de ahí.
Llego la noche y justo a las 11:37 Danny se preparaba para dormir, había sido un día demasiado agotador para él y lo único que quería era descansar y olvidar lo que había ocurrido en la tarde con "su real majestad". Dio varias vueltas hasta que logró acomodarse de tal manera que podía abrazar la almohada; sus párpados cada vez eran más pesados y dejándose llevar por el sueño hablo a la nada como era su costumbre de pequeño.
—Buenas noches...
Después de interminables documentos que firmar y entrenamientos y sometimientos que supervisar, por fin podía tomarse un descanso, lo malo es que este era solo para dormir.
Vlad retiró las sabanas de algodón egipcio y se recostó en el lado izquierdo de su mullida y cómoda cama. Lo único malo de ser rey y tener una cama ridículamente enorme...era que al estirarse y tocar al otro lado, la ausencia de alguien era demasiado evidente. Se cubrió hasta los hombros y sin poder ocultarse a sí mismo suspiro con tristeza, se sentía solo y en todo sentido; no tenía familia ni nada, solo a los Fenton como viejos amigos y a los chicos como "sobrinos". Pero por alguna razón, siempre que pensaba en su favorito de ambos...sin saber correctamente en que sentido dejaba de sentirse solo, pero con el corazón hueco.
Apago la luz y susurro en la completa oscuridad soñando con que el otro le respondiera como antes.
—Buenas noches, mi pequeño Daniel.
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español