Las manos me temblaban y mi corazon se partia en dos, mi hermana había escapado y ahora no sabía cuándo la volvería a ver, no había sentido este dolor, la familia se desintegraba con la falta de Fumiko y más si el matrimonio que arreglo mi padre no se daba, eso significa que los dos clanes estuvieran en guerra por la humillación que significa romper un trato entre los dos líderes.
La preocupación no me llevaba a ningún lugar al castaño, deberían de arreglar esto lo más rápido posible, dobló la carta en cuatro partes y salió muy rápido su habitación, debía de darle la noticia a sus padres, se dirigió al cuarto de sus padres que se encontraba al otro lado del jardín, los sirvientes lo saludaban como siempre pero esta vez no contestó ya que no podía perder el tiempo.Al llegar pudo oler el aroma de su padre, simplemente no se puede evitar sentirse mal con el olor que emiten los alfas, es tan raro.
Toco la puerta de papel y madera, escuche a su madre -A delante- recorrió la puerta y se sentó en el tatami. el mayor se encontraba revisando unos papeles, parecían ser acuerdos con el clan KASHIA, estaba demasiado concentrado que no miró al pequeño omega -¿Qué es lo que pasa Yuu?u,¿ quieres un poco de té negro?- dijo la morena con un tono dulce a su propio hijo el cual ya estaba muy nervioso, tomó una gran bocada de aire y se dirigió a su padre apretando sus manos.
-Padre, Fumiko ha escapado y dejo esta carta- dijo casi gritando al alfa, y estiró sus dos manos para mostrar la carta mientras cerraba los ojos, su padre de inmediato quitó la mirada de los papeles y se dirigió deprisa a tomar la carta, casi arrebatando de las manos de yuu, su madre solo abrió sus ojos y se tapo su pequeña boca con una de sus manos.
mientras el mayor leía la carta, su aura se vuelve más intensa, los dos omegas presentes empezaron a sentirse amenazados.
La primera en hablar fue Annaisha -Cariño que es lo que dice la carta- preguntó con su suave voz, sin que esta temblara pues ya se había acostumbrado a su alfa, este solo tomo la carta y la arrugó hasta hacerla una bolita, su madre se paró enseguida y lo abrazó para que al sentir a su omega calmara un poco a la fiera que quería salir en ese momento.
-Fumiko ha escapado con un Beta, sl parecer su romance ya tenia tiempo- dijo tratando de golpear la puerta, pero la omega no permitía mover ningún brazo, asi que la tomo y tambien la abrazo, Yuu solo miraba a sus padres, tal vez si él hubiera dicho a su padre de la relación de Fumiko, no estaría pasando esto ahora mismo - Ahora lo que tenemos que hacer es hablar con el mayor del clan KASHIA explicarle la situación, talvez escoja a otra omega y podamos rescatar algo de nuestra dignidad- mencionó el pelinegro con firmeza, después de todo era un alfa y ante estas situaciones su familia no podía hacer nada.
-Yuu podrías decirle a uno de los sirvientes que haga una cita con el presidente de la compañía KASHIA, es muy urgente que sea a más tardar hoy a las 12:00 de la noche- Yuu asintió y se paró de su asiento, dirigiéndose al sirviente más cercano le dio el recado y este solo dio una reverencia, podía ntar que su familia estaba en un gran aprieto y su cuerpo sabía que las cosas podían empeorar.Retomó su día de igual manera se dirigió a la parte trasera donde se encontraban los salones donde se llevaban acabo las clases para los omegas, era uno de los más hermosos omegas que había en todo el clan, no por eso su padre era el superior de todo el clan, y tenía una hermosa madre de la cual heredó su belleza. algunos decían que más hermoso que su hermana, pero eso solo lo podía decidir un alfa o tal vez un beta.
-Yuu estas bien, hoy no tienes bien tu postura, además de que todo tu traje está estropeado, eso no es apropiado de un omega- dijo una de las ancianas que le daba clases de modales, el castaño solo lo miro y le dio una de sus mejores risas, no quería que las preguntas siguieran, la anciana satisfecha se retiró y retomo las clases.Estaba tan ansioso de que las 12 dieran en el reloj solo de imaginar el gran pleito que tendría su padre le hacía temblar las piernas, pero tan rápido llegaron las 12 y el ya había acabado sus clases y se dirigía a su cuarto. su padre no necesitaba su presencia , después de todo solo e un omega que no puede decidir sobre su familia.
entró a su habitación y se quitó el uniforme tradicional, para dejar ver su gran pálida piel, tenía unos boxers, como todo chico, sus pezones eran de color rosa claro y parecían muy erectos por el frio que hacia, se puso la bata que estaba a lado de su cama y se dispuso a dormir, pero eso no pasaría pues una de las sirvientas toco la puerta -Yuu-sama, perdón por molestarlo, pero su padre pide su presencia en el salón de té- dijo una dulce voz detrás de la puerta corrediza. el castaño se levantó de nuevo y ordenó su cabello, se dispuso a salir con paso apresurado a la casita que se encontraba a poca distancia de su habitación.
Al llegar pudo admirar a los dos grandes alfas sentados frente a frente y a su madre a una distancia prudente de estos dos, el hizo una reverencia y se sentó al lado contrario de su padre para poder ver que la situación no marchaba como se pensaba.-Bueno se que lo que hizo mi hija no tiene remedio, no puedo salir a buscarla y que seria un escandalo para la familia, pido una sincera disculpa de parte del clan HYUGA-pidió el gran pelinegro mientras inclinaba la cabeza ante el anciano que llevaba un traje color negro y lentes.
-Hisao, ¿sabes que esto es una gran falta de respeto hacia mi clan?- hizo una pausa y suspiró -Sabes que esto implicaría la bancarrota de tu compañía y con ello tu familia no es así- dijo frívolamente y el contrario solo pudo apretar los puños, Yo solo miraba al tatami quería ayudar pero no podía, levantó su mirada para ver al señor de traje sus miradas se cruzaron para su edad tenía un buen porte es solo lo que pensó Yuu, el hombre de traje no apartaba su mirada de el castaño lo estaba inspeccionando -Hisao, ¿quien es este chico que está aquí- preguntó mientras tomaba la taza de té que estaba en la mesa.
-Este es mi hijo menor, se llama Yuu- dijo mientras miraba al omega y el castaño de inmediato hacia una reverencia al terminar la presentación de su padre, el mayor del clan KASHIA lo miró de nuevo y de un sorbo terminó su té, se miraba pensativo y su padre frunció el ceño.
-Es muy bello, es casi igual a su madre y esos ojos azul ultramar son muy bellos, supongo que es un omega como todos los que habitan aquí, me gustaría negociar de nuevo- propuso el alfa y la madre de yuu miró a su padre, no podía ser sería vendido como su hermana, fue lo que pensó el castaño, pero permanecía callado.
-Temo que no puedo ofrecerte a mi hijo- dijo mientras miraba a yuu -Tiene tan solo 16 años, su olor no aparecido y como te darás cuenta todavía asiste a la escuela de omegas no está listo para procrear- advirtió el alfa, su contrario solo sonrió ante las palabras de el preocupado padre, yuu se sentía un poco aliviado, por fin su padre lo defendió.
-Creo que eres un poco imbécil Hisao, te puedo destruir después de esta falta por parte de tu hija Fumiko, los clanes se pueden unir y a ti solo te importa tu pequeño omega, está claro que tendrá el mismo destino como los demás, te estoy dando la oportunidad de saldar el daño que has provocado, ese omega se emparejaba con el heredero de KASHIA, así que no me vengas con eso de que es menor de edad, pasará mañana mi chofer a recogerlo, y no te preocupes por su educación puedes enviar a un tutor al departamento de Kyuta- después del discurso se paró y le dio la mano al alfa que estaba a punto de estallar mientras el olor de los dos se podía oler en toda la habitación, debilitando a los dos omegas que estaban alrededor suyo, el señor de traje salió por la puerta y detrás de ellos unos guardia lo siguieron