-Mierda, sabia que llovería, lo que no sabia es que llovería como si no hubiera mañana -
-¿lluvia? - cuestiono al escuchar a Jonghyun
-si kibum... llueve y bastante – Jongh uno de los chóferes del hotel daba veracidad a sus palabras sacudiendo el sobretodo mojado.
-oye no hagas eso – Taemin lo regaño ya que con poca delicadeza esparcía gotas por todos lados.
-mierda – asomando la cabeza por sobre el mueble. Vio como a través de la gran puerta una cortina de agua caí como si fuera cascada.
-¿acaso al gatito no le gusta el agua? - bromeo Jonghyun apoyándose e inclinándose hacia el.
- tonto, no es eso – sonrió evitando un momento incomodo, ya que el chófer pudo escuchar claramente el “idiota” murmurado por Taemin – es que vine en mi motocicleta y no me siento seguro manejando bajo la lluvia y menos bajo esta tremenda tormenta -
-gatito a ti solo se te ocurre venir en moto cuando esta anunciada una gran tormenta-
-¿puedes parar de decirle gatito? -Mascullo Taemin sin siquiera mirarlo
-a el no le molesta- se defendió el chófer
-en verdad si – lo interrumpió kibum – y te pedí que no lo hicieras, solo que tu no me has hecho caso -
-solo por que tu no me haces caso – se defendió coqueto mientras hacia un tierno puchero.
-idiota – volvió a atacar el mas chico, solo que esta vez no lo murmuro.
-en fin... tal vez pare de llover cuando tu turno termine-
-no creo, mi turno ya casi termina -
-ni se te ocurra intentar manejar la moto en estas condiciones- lo reto su amigo
-no Tae... no soy un suicida – se maldijo mental mente al recordar que siquiera había traído con sigo la tarjeta de viaje para el autobús- pero no traje mi tarjeta y creo que el efectivo que tengo no sera suficiente para un taxi-
- puedo prestarte – lo reconforto con cariño
- o – Jonghyun los interrumpió mirando directamente a key - este lindo chófer podría darte un aventon hasta tu casa-
-¿tu? - preguntaron al unisono.
-si – respondió ignorando totalmente al mas chico y solo siguió mirando lindamente a kibum – la próxima reserva que tengo es en hora y media... eso me da tiempo suficiente como para llevarte, volver... y en el medio aceptar una taza de café -
-¿taza de café? - pregunto curioso
-si, esa que me vas a invitar cuando te lleve a tu casa en agradecimiento – sonrió guiñándole un ojo
-descarado – lo desafío Taemin – ademas, tu no puedes usar el auto del hotel así a tu antojo-
-eso es verdad, pero el gerente no tiene porque enterarse – sonrió mas amplio.
-como puedes ser tan poco profesional... si se entera el secretario Lee... peor que eso, el sr Choi...-
-pero como dijo Jongh... ellos no tienen por que enterarse – sonrió key encogiéndose de hombros ante la mirada molesta de Tae – ademas me ahorrara el dinero del taxi – finalizo poniéndose de pie
-perfecto gatito iré a listar el auto mientras tu recojes tus cosas... -
-hey – Taemin espero que el chófer se alejara para atajar a su amigo – el no me gusta -
- Tae – suspiro sentándose nuevamente para escuchar la segura perorata de su amigo
-me he cansado de decirte que el es un Donjuán ¿acaso no escuchaste lo que se dice de el?- key negó con la cabeza, porque el no hacia caso a ningún rumor – que no hace ninguna distinción entre hombre o mujer con tal de llevárselos a la cama... no hace mas que algunos meses que trabaja aquí... y dicen que hasta la mismísima Kim Taeyeon lloro por su culpa -
-¿Taeyeon? ¿la de administración?-
-si... la misma, dicen que gracias a ella, el paso de ser el muchacho de los repartos a un chófer V.I.P-
-tal vez solo son habladurías, el es muy simpático y tiene buen cuerpo y es muy sociable... tiene la combinación perfecta para que los demás se sientan celosos -
-yo no me siento celoso de el – bufo molesto
-claro que tu no Tae, eres perfecto, pero los demás... tal vez se sientan amenazados -
-su altura no es nada amenazante... dejarme decirte - bromeo – en fin key, lo que quiero decirte que el es un descarado, uno que no descansa hasta obtener lo que quiere... y ahora parece que lo que quiere es a ti -
-exageras -
-claro que no lo hago... el te ronda como abeja a una colmena... y ya lo sabes... por donde entran las abejas -
-¿he? -
-por el agujero de la colmena... el esta deseoso de entrar por allí-
- ¡Taemin! – lo regaño por lo que acababa de sugerir
-solo te advierto, te cuidado con el...-
- solo me llevara a casa ¿de acuerdo?- apoyo sus manos en los hombros de su amigo para tranquilizarlo
-bien, pero ni se te ocurra invitarle una taza de café... ¿quien sabe lo que hará ese idiota si lo dejas entrar a tu casa -
“¿porque no? El es guapo”
pensó kibum mientras se cambiaba, comprendía que Taemin se preocupara debido a la mala fama que tenia Jonghyun... pero key tampoco era un santo... no por lo menos con su mente perversa que no dejaba de tener sucias fantasías con su jefe... fantasear con Choi Minho... era un maldito habito no muy sano.
Minho era el hombre de sus fantasías, el que lo tomaba de todas las maneras posibles, el que lo besaba fervoroso, el que lo tocaba alocandolo... pero solo en su mente.
En su imaginación Minho era el hombre que lo amaba. Pero la realidad era otra, en la realidad Minho solo era su jefe. Minho es su vida real solo era alguien distante e inalcanzable.
Con Jonghyun todo era diferente, Jongh era un hombre guapo, alegre y de carne y hueso. Key no era ajeno a como lo miraba, le sonreía y le coqueteaba. Tal vez era hora de dejar las fantasías a un lado e ir por algo mas real.
Pero todo ese buen animo se esfumo cuando al llegar al lobby del hotel vio a Jonghyun hablando justamente con Choi Minho.
-¿paso algo?- pregunto por lo bajo a su amigo
-No...– Taemin miraba de reojo a los dos hombres algo alejados – solo una estructuración de una reserva, pero es raro-
-¿raro?-
-si, que sea el mismo Minho el que se encargue de decirle al chófer que ha habido un cambio -
-tal vez se deba a que sea alguna celebridad o algún político importante -
-¿que?-
-es decir si el mismo dueño del lugar se encarga de ello, debe ser alguien muy importante -
-¿hablas del tipo de la 114? - a Taemin le pareció un tipo bastante común, solo que no tubo tiempo de decirlo.
-lo siento gatito, cambio de planes – murmuro llano – al parecer el de la 114 desea adelantar su viaje. Tiene miedo de perder el vuelo a causa de la tormenta y quiere estar lo mas pronto posible en el aeropuerto – los ojos de cachorro lo miraban abrumados – yo realmente quería ese café contigo -
-claro... café...- ironizo Taemin con molestia.
-chófer Kim, el cliente lo espera – Minho pronuncio mirándolo seriamente.
- si señor ya mismo preparo el auto – se acerco a kibum y por lo bajo bromeo -ese tipo si que da miedo... pareciera estar enfadado, recuerda me debes un café -
- claro en otra ocasión...- key le sonrió apenas viendo como Choi se acercaba.
-Cuento con ello gatito – y se marcho ante la atenta inspección del mas alto.
-Sr kim – la voz grave lo hizo enfocar la mirada en esa perfecta persona en forma de hombre. Choi siempre vestía endiabladamente bien. Sin embargo hoy vestía mas informal con unos jeans oscuro, una remera blanca ajustada al cuerpo rematando su atractiva presencia con un saco negro – creí que su turno ya había terminado – hablo sin mirarlo solo ojeando su costoso reloj.
-si Sr, ya estoy fuera de turno – se reverencio incomodo al ver como ahora lo miraba de lleno. Su pantalón de desgatado y la camisa que llevaba de seguro lo hacían ver como un vagabundo.
-Usted vino en su motocicleta ¿verdad? - key asintió solo con un gesto ¿como rayos sabia eso? Claro que era el dueño y decían que nada se escapaba de su control... pero – seria imprudente de su parte si decide irse en moto con estas condiciones climáticas – al pesar del tono neutro, kibum juro ver un reproche escondido.
-No Sr Choi – respondió tímido, claro que había un reproche. El era un empleado y si faltaba por causa de un acto irresponsables la empresa tendría que correr con algún gasto medico y la molestia de conseguirle remplazo – yo justamente... - balbuceo nervioso – Taemin... - el nombrado que observaba callado lo miro alerta y en su rostro se veía “ ¿yo que? No me metas en esto” - vera... yo no he traído mi billetera y el se ofreció a prestarme dinero para un taxi- hablo rápido, sin entender porque daba esa larga y de seguro para Minho tan poco interesante explicación- ¿verdad Tae? - este solo murmuro un “claro” y rebusco torpe en su bolsillo, sacando de el un bollo de dinero, extendiendoselo sin siquiera saber si seria suficiente.
-eso no sera necesario Sr Lee – Taemin parpadeo hacia Minho confundido, ya que este retiraba con amabilidad su mano con los billetes arrugados – estoy de salida, por lo que no sera ningún inconveniente alcanzarlo hasta donde desee -
-¿usted? -preguntaron en conjunto key y Taemin el primero sorprendido, el segundo confundido.
-le dije voy de salida, tengo el auto esperando en el estacionamiento-
-No – expreso de pronto... El solo pensar en ir en el mismo auto sentado al lado de Minho lo hacia estremecer.
-¿no? - cuestiono parco con molestia poco disimulada
- yo no... no quisiera molestarlo – key apenas podía mirarlo
- y yo ya le dije que no es molestia alguna – sentencio sin lugar a replica acomodándose el saco y haciéndole un ademan para que lo siguiera. Key camino autómata, no sin antes mirar por sobre su hombro a su amigo quien aun continuaba con los billetes en su mano y los bonitos ojos denotaban asombro.
Camino detrás siguiéndolo hasta el sub suelo, donde se encontraba estacionado el lujoso auto negro de marca alemana propiedad de Minho. Apiado a un lado vestido elegante se encontraba el secretario del joven heredero.
- Sr Kim, el es mi secretario y hombre de confianza... Lee Jinki – Key saludo educado con una reverencia y el hombre respondió cortes con un movimiento de cabeza mientras le abría la portezuela del auto para que ingresara.
-Minho... – la voz melodiosa y suave salio de la boca del secretario. Kibum no pudo evitar sentir algo de celos al darse cuenta que el secretario le hablaba de manera directa e informal – llevamos a nuestro invitado a algún lugar en particular -
-claro- sonrió abiertamente a su amigo para luego enfocar su mirada en key – Sr Kim, quiere indicarle a Jinki la dirección por favor – el secretario tenia la mirada fija en el a través del espejo retrovisor.
-claro – susurro apenas, con la incomodidad como segunda piel - la quinta avenida y la calle numero diez... no se si se ubica -
- nos desviaremos bastante del punto original, pero no hay problema... - sonrió amable poniendo el auto en marcha- conozco la zona -
-yo perdone las molestias – volvió a decir tímidamente al secretario – sr Choi... - apenas miro al hombre a su lado – si es muy engorroso solo puedo coger un taxi -
-Sr kim, le dije que no era molestia alguna... aunque entiendo que tal vez mi compañía no sea de la mas agradable - key miro confuso, el joven heredero solo negó con la cabeza restandole importancia– nada sr Kim, solo que supongo que tenia pensado volver a casa en compañía mas... confortante - los labios esponjosos se dibujaron desdeñosos y la mirada inmensa se enfoco hacia el camino, como si hablar con kibum ya no fuera nada interesante.
Key se removió inquieto ante ese incomodo silencio, ante ese raro planteo. Kibum llego a la conclusión que su negativa a que lo llevara había terminado ofendiendo a sr Choi, pero nada tenia que ver con no disfrutar de su compañía, sino que podía llegar a disfrutar mucho de ella, demasiado... y su mente podía hacer un verdadero desastre. A pesar de que el asiento trasero del lujoso rodado era exquisitamente confortable , el no podía evitar sentir esa maldita tensa sensación en todo su cuerpo. Tenia que estar alerta, tenia que estar con todos sus sentidos despiertos para que su mente no hiciera estragos como de costumbre... porque cada vez que Minho estaba a su lado su sentido de la realidad se apagaba y el botón de la fantasía se activaba tomando todo el maldito control.
Nerviosos refregó las manos y una vez mas cometió el error de mirar de reojo a Minho. Era perfecto ¿como alguien era tan condenadamente perfecto? Aspiro una vez y mentalmente contó hasta diez. No debería volver a mirarlo. No debería hacer ninguna estupidez. Intento enfocar su vista en el paisaje lluvioso que apenas se divisaba a través del empañado cristal. Cerro los ojos contando nuevamente pero esta vez lo haría hasta cien... ya que la respiración a su lado y esa cercanía lo estaba extasiando.
-Kim Jonghyun -
key abrió los ojos confundido e instintivamente miro al hombre a su lado. Este lo miraba con extrema curiosidad, como esperando una respuesta a una pregunta no formulada.
-Kim Jonghyun – volvió a decir Minho. Entonces escuchar el nombre del chófer no había sido una ilusión . Ante el desconcierto tatuado del mas joven, Choi prosiguió arqueando una ceja y acomodando su cuerpo hacia key – con Kim Jonghyun parecen ser bastante cercanos -
-¿cercanos con el chófer Kim? - cuestiono sin entender el porque Minho decía eso. Los ojos rasgados miraron hacia el espejo retrovisor chocando con la mirada picara del secretario. Al volver la vista Minho esperaba una respuesta – no creo que cercano sea la palabra, solo somos compañeros de trabajo-
-¿compañeros de trabajo? - indago incrédulo.
-si... bien usted sabe, ambos trabajamos para usted -
-así es, aunque ambos trabajan en áreas distintas, pero kim Jonghyun se las arregla bastante bien para estar siempre cerca de recepción ¿no lo cree?-
-tal vez se deba a que nosotros nos encargamos de las reservas – pronuncio tímido
- puede ser – murmuro mientras su mano se movía hacia un tablero al costado del apoya brazos y tras zumbido kibum vio como un vidrio oscuro emergía separando la parte delantera del conductor con la parte trasera – sin embargo me he dado cuenta que el solo ronda recepción cuando tu estas allí – los grandes ojos jamas abandonaron su rostro mientras hablaba – por lo que creo que a el... solo le gusta rondarte -
-¿he?-
-al parecer es su nuevo lugar favorito – se posiciono mas cerca rompiendo el espacio personal de kibum – el te ronda como abeja al panal – un movimiento mas y había acorralado al mas bajo contra la portezuela.
-¿como abeja al panal? - ¿porque Minho usaba el mismo eufemismo que Taemin?
- como abeja muy interesada en ingresar en ese panal – susurro en su oído – una molesta e insistente abeja– se alejo para poder mirarlo.
-no se a lo que se refiere...-
-¿no lo sabes? - cuestiono, todo el semblante de Minho detonaba fastidio – tal vez tu tengas algo de culpa - Los labios de key se entreabrieron no sabiendo como responder – tu le sonríes y lo miras coqueto y dices no saber de lo que te estoy hablando-
-yo... yo solo - trago nervioso su propia saliva – lo trato como trataría a cualquier compañero de trabajo, con Taemin tengo mucha mejor relación -
-dudo que a Lee Taemin se le de por llamarte “gatito”- los ojos oscuro se clavaron en los suyos – por que la intención de Taemin es solo ser tu amigo y lo sabes, en cambio Jonghyun... por eso a Lee no le agrada Jonghyun... por que como yo, se da cuenta de que el chófer solo tiene una cosa en su cabeza - la mano grande y cálida se posiciono sobre su mejilla derecha – tiene un solo propósito y es llevarte a su cama... o a la tuya depende que tan fácil se lo dejes -
-disculpe pero... –
-¿era por eso que estabas molesto cuando dije de llevarte?-
-¿he?-
-¿preferías que fuera el?-
- yo... Sr Choi, no lo comprendo - ¿que era esto? ¿por que todo parecía como un raro sueño?
- El anda tras de ti cual cachorro habido de atención ¿y tu no lo comprendes? -Minho hablaba con voz tranquila pero espeluznante - El te da miradas pervertidas ¿y tu no lo comprendes? El busca cada maldita ocasión para acercarse a ti y rozarte... pero tu... no lo comprendes – el pulgar acaricio impetuoso la mejilla sonrojada – y como si eso fuera poco...tu... como si nada lo ibas a dejar entrar a tu casa -
-¿a mi casa? - key parpadeo atónito ¿como sabia eso? ¿como podía ser que Minho supiera que Jongh lo llevaría a casa?
- y vaya a saber que hubiera hecho si lo dejabas entrar... el no me gusta, no me agrada y no me agrada como tu le sonríes – el tono se volvió amenazante – pero por sobre todo lo que mas detesto es la mirada lasciva que impone sobre ti – emitió un gruñido peligroso - ¿no eras consciente de ello cuando accediste a que te llevara? ¿acaso no sabias cuales eran sus verdaderas intenciones? - el agarre sobre su rostro se volvió apremiante - ¿o si lo eras y solo buscaba fastidiarme?-
¿fastidiarlo? ¿que era lo que Minho quería decir? ¿acaso estaba celoso?
Sin embargo la pregunta siquiera había podido ser expuesta. Minho lo tomaba de la nuca para a traerlo a el y los labios carnosos se posaron en los suyos. La impronta del ardiente beso lo hizo chocar contra el vidrio de la ventanilla, mas no importo. Ese beso egoísta arrastraba cualquier pensamiento coherente, podía sentir como el arrebato hasta el aire mismo le robaba, dejándolo mareado.
-¿acaso voy a tener que echar a ese perro a la calle? -
-no... el-
-no lo defiendas kibum...- las dos manos sostenían el rostro con pertenencia.
- no es eso...- si ese hombre supiera que solo existía el es sus pensamientos
- ¿entonces que? - los ojos inmensos miraban posesivos - voy a tener que demostrarle a el – los labios se separaron apenas para esparcir besos por su mandíbula y su cuello – que no tiene permitido mirarte – la lengua acaricio en círculos la piel – ni acercarse, ni rozarte… - la boca se cerro con egoísmo sobre el cuello y los dientes se arrastraron por la delicada piel – un jadeo se escapo de los labios acorazonados. Kibum sintió el ardor y autómata llevo su mano justo donde había sido mordido -esto es solo un recordatorio de que no puede, ni debe mirarte de ese modo kibum, por que eres mio, solo mio -
Los felinos ojos se abrieron asombrados observando las orbes oscuras que lo miraban con deseo y codicia. El corazón de key latió con tanta fuerza que amenazo con salirse de su pecho. Minho estaba celoso, celoso por los coqueteos de Jonghyun, celoso por que el le sonreía y le hablaba ameno. Minho sentía celos y la sensación era increíble. Que ese hombre hermoso se sintiera amenazado al punto de que los celos lo hicieran rabiar era una sensación maravillosa y abrumadora a la vez, al punto que bajo la mirada y cerro los ojos para calmar esa algarabía que lo embargaba. Ese hombre perfecto y hermoso... estaba celoso, estaba celoso por el.
-Sr kim... Sr Kim – la voz de Jinki hablo sorprendiéndolo – creo que llegamos – key levanto la vista y lo miro directo, ya no había ningún cristal oscuro que los separaba – es la dirección correcta ¿verdad?- pregunto al ver la cara confusa del muchacho - ¿esta bien?-
- el esta bien, solo que lo acabas de despertar – kibum parpadeo atontado - al parecer el cansancio venció al sr Kim y se ha tomado una corta siesta... - Minho hablo a su lado con el cuerpo recostado contra el respaldo, sin embargo estaba alejado, con la postura elegante y distante.
-yo... lo siento – hablo en un tono alto, casi histérico. El se había dormido... el muy idiota se había dormido y en sus sueños volvía a fantasear con Minho.
-no tiene porque lamentarse sr kim – sonrió Jinki - los asientos son muy cómodos y es comprensible -
- yo lo lamento... en verdad no me di cuenta – con ansiedad abrió la portezuela queriendo escapar de allí
-Sr Kim tome, lleve un paraguas...- Minho intento en vano darle el objeto.
-no hace falta... gracias por traerme... y en verdad perdone por quedarme dormido – se reverencio haciendo caso omiso a la lluvia copiosa que empapaba su cuerpo.
Como si las gotas lo quemaran corrió hacia su departamento, sin detenerse siquiera a esperar el ascensor se lanzo por las escaleras. Una vez dentro con rabia quito sus ropas mojadas, maldiciéndose una y mil veces... otra vez... otra vez, que estúpido ¿como podía ser tan estúpido? Las ducha no calmo ni un gramo su ira...
-estúpido kibum – dijo a su reflejo sobre el empañado espejo – como mierda puedes quedarte dormido en el auto de tu jefe... y como demonios puedes soñar esas cosas, ¿Minho celoso? Eso quisieras idiota, si vas a fantasear... por lo menos obtén algo mas que un beso y una escena de celos. Mierda... - los ojos rasgados se posaron en su imagen – aunque no estuvo tan mal – se sonrió travieso – imaginar a Choi celoso y posesivo - bufo sin quitar su sonrisa - en tus fantasías kibum... solo en tus fantasías – se encogió de hombros mientras tomaba una toalla para secar su cabello. Entonces algo llamo su atención y con ojos entornados se acerco al espejo...
“¿que demonios era eso?”