Sam despertó, notando al instante que algo no andaba bien. Habia algo que se le estaba escapando.
El mismo cerró la ventana, después de llegar de una larga noche ayudando a los Cuatro Fantasticos . Desde su lugar en el suelo podía decir que, de hecho, seguía cerrada.
Sin disparos, explosiones, rayos laser, gritos, risas maniacas o cualquier otro sonido que inmediatamente indicase malas noticias. Aunque Parker también despertaría al escuchar esos sonidos.
Su casco descansaba pacíficamente en su mochila, sin señales de luz o irritantes pitidos y esa insistente necesidad de ponérselo. La casa estaba... bueno, no silenciosa exactamente, no con cinco adolescentes y la tía May viviendo todos ahi , pero no había sonidos mas extraños que los normales a esa hora de la noche.
Dio un vistazo rápido al cuarto, puerta cerrada, nada acechando desde las sombras entre la puerta y la cama de Peter, una mata de desordenado cabello castaño sobre la almohada, otra mata de desordenado cabello castaño descansando sobre el pecho de Peter, el reloj sobre la mesa de noche recordándole que era demasiado temprano para estar despierto.... Espera.
Problema encontrado.
En lugar de una persona -ligeramente- nerd y dotada de poderes aracnidos, en la cama de dicha persona había, en realidad, dos personas.
Pero el -no-Peter con la cabeza sobre la almohada tenia el cabello un poco demasiado largo y los labios bastante carnosos. Y, oh si, Peter tenia la cara metida entre sus pechos. Tal vez debería despertar a Webs primero.
Aunque técnicamente ambos eran Webs. Como sea, buscó su teléfono celular.
Definitivamente debería despertar a Pete antes que a... Webigail? Ugh, probablemente lo golpearía si le escuchara llamarla así. Con la facilidad que solo alguien acostumbrado a tomar fotos vergonzosas de sus -razonablemente- paranoicos amigos Sam acomodó la cámara de manera que el flash no despertase a ninguno de los dos.
Aunque... probablemente podría salirse con la suya esta vez. Con el flash dos -casi- idénticos gemidos de lo que podría interpretarse como su nombre se escucharon. 'Webby' tiró de la almohada hasta ponerla sobre su cabeza y Peter se acurrucó aun mas en su pecho. Ambos suspiraron casi al unisono.
Aun dormidos, delgados como eran, con el cabello adorablemente desordenado, solo habia una palabra. Perfección. O bueno, probablemente sería perfección si no estubieran usando estupidas e identicas pijamas, en serio, ¿Quien usa ridiculas pijamas a rayas? El hombre araña y aparentemente... la Chica araña?
De todas formas, guardó la imagen para el mismo.
Realmente necesitaban saber que estaba pasando, la tia May despertaria pronto. El estaba muy seguro de que ella sabia sobre el asunto de los superhéroes, pero SHIELD piensa que no es asi. Asi que era hora de escabullirse e inventar alguna excusa por muy tonta que sea.
Igualmente, el estaba un poco mejor que Peter. Sería algo dificil explicar la aparición de una nueva sobrina, especialmente si no iba a quedarse.
Se inclinó sobre la cama y comenzó a picarle las costillas a Peter.
"Hey, Parker"
Peter arrugó la cara y trató de hundir su cabeza en los pechos de 'Webby'. Tuvo bastante éxito en eso, aunque probablemente seria malo para su salud cuando ella despierte. Ella gruño algo incoherente que definitivamente no sonó como "Fuera de aquí cabeza de cubeta" -o eso se dijo Sam a si mismo-. Ella trató de alejar a Peter sin ningún éxito. La fuerza y capacidad de adherirse a cualquier cosa de las arañas podía ser muy molesta. El lo entendia, gracias a los estrictamente platonicos abrazos post pesadilla claro está.
Pero, eh, probablemente debió haber visto que ella era una Parker también. Reanudó los piquetes a las costillas de Peter y trató de nuevo.
"Pete, despierta"
Peter protestó.
"Vamos, es importante"
Peter hizo un sonido que le recordó a las ballenas espaciales, nunca llegó a identificar las especies adecuadamente pero, uh, era irrelevante ahora.
"Peter, Por favor-"
Susurró/gritó desesperadamente. El solo sabía que le culparía por la inapropiada situación con sus pechos si ella despertaba primero.
Peter levantó la cabeza y miró a Sam como si le pusieran una luz directamente en la cara. Sam se inclinó mas, con los ojos azules siguiendo sus movimientos.
"Uh, Pete, no te asustes pero..."
Sam señaló vagamente en dirección a la cama.
"Creo que tenemos un problema..."