Pretendía llegar su hogar para descansar en la biblioteca. Sus días despierto comenzaban a dificultarle algunas cosas como la velocidad de sus movimientos, mas otras cosas que provocaba el “cansancio”.
En fin.
Trataba de ignorar lo mas posible al auror que o paraba de seguirlo.
Mientras pensaba en ello, el estomago de Harry hizo de presencia. El sonido de su hambre llego hasta los oídos de los elfos domésticos en la cocina.
Vamos a ver... el desayuno. ¿Potter? Ni idea.
Comió un emparedado cuando fueron al departamento de misterios. ¿Potter comió? Seguro que no.
Pobre diablo.
Draco camino hasta el comedor cerca de las cocinas, en cuanto se sentó noto que Potter no lo hacia.
Vaya, la otra noche se mostró bastante maleducado y deja de hacerlo cuando es necesario.
-Siéntate Potter.
No era su intención que sonara como una orden. Obviamente Potter se lo tomo mal.
-Yo no soy tu sirviente Malfoy- !que exasperante!
-No, no lo eres. Pero tu estomago esta haciendo demasiado ruido ¿Serias tan amable de acompañarme a cenar?
Tampoco era su intención que eso ultimo sonara de aquella manera. Pero no tubo tiempo de arrepentirse en cuanto vio el pequeño sonrojo del moreno.
Ah... así que era de esos hombres que se conmovían por cualquier cosa.
Debería intentarlo de nuevo.
Ambos hombres se mantuvieron en silencio hasta que los elfos llegaron con los platos de entrada.
Por primera vez en todo su historial, este silencio no les pareció en absoluto incomodo.
Recapitulemos; El colecciona artículos de su interés (Entre ellos magia negra) y enviaron a Potter a reconocer su humilde morada.
Dicho reconocimiento a durado hasta hoy un día y medio completo, por lo que debemos intuir que Potter no sabe hacer su trabajo o se esta tomando su tiempo. Algo inusual ya que los otros aurores que vinieron a hacer lo mismo se emprendieron de inmediato a buscar cualquier cosa para poder inculparlo.
¿Porque permitía que Potter hiciera las cosas a su manera? Bien el se encarga de quejarse siempre que puede, pero su curiosidad le impide echarlo.
O solo su inconsciente desea que su invitado lo conozca un poco y se quede sorprendido de su trabajo y logros.
Draco pensaba en ello cuando vio que Potter verdaderamente disfrutaba de sus costillas, tanto que las comía con las manos y se encargaba de no dejar nada el hueso.
Normalmente al rubio le molestaba mucho cuando alguien no seguía los protocolos en la mesa. ¿Pero que podía decir? El moreno se veía gracioso con toda esa salsa desparramada en su rostro y parte de su barba.
-¿Desde cuando te dejas la barba?- no pudo evitar preguntar.
Potter dejo de comer su ultima costilla para lamerse la salsa que tenia entre los dedos.
-Creo que desde los 25 años- dijo.
-Te hace ver realmente maduro, es una pena que tu comportamiento no sea igual a tu estilo.
Con eso Potter se avergonzó de chuparse los dedos y siguió con limpiarselos con una servilleta.
Curiosamente, Draco ahora si que se arrepintió.
-Lo siento, tu elfa domestica cocina realmente bien.
-¿Cual?
Potter terminado de limpiar sus manos continuo para usarlas en su pantomima descripción.
-La que tiene pañuelos en la cabeza- era un tipo muy exprecionista, todas sus palabras eran acompañadas de sus manos. Describió los pañuelos de la elfa como si el mismo se colocara pañuelos en su propia cabeza.
-Se llama Dotyna, es una maestra del arte culinario. La conocí hace ya 7 veranos.
Draco pretendía dejar el asunto por terminado, pero Potter se apoyo encima de su brazo para escuchar el resto de la historia.
¿De verdad le interesaba los antecedentes de sus elfos?
Que mas da.
-Ella cocinaba para el secretario de la reina Elizabett II nuestra actual monarca en el reino unido- las cejas de Potter se alzaron de impresión- si Potter, incluso la reina sabe del mundo mágico, lamentablemente Dotyna no era muy apreciada por su dueño, y este al ser un muggle le ofreció una prenda de ropa sin saber las consecuencias dejando a la pobre sin empleo.
-¿Porque un Muggle tendría un elfo domestico?- pregunto Potter.
-Todos los Muggles con un prestigioso puesto esta al tanto de la magia, algunos desean tener un recuerdo y a ese imbécil se le fue otorgado Dotyna.
-¿Como llego ella hasta ti?
-Una vez asistí a una cena en el palacio, pretendía llevarme un cuadro de allí.
-¿llevarlo o hurtarlo?
-Tomarlo prestado, Potter. No seas aguafiestas. Dotyna se encontraba lloriqueando en uno de los salones del palacio, la lleve conmigo firme los papeles del ministerio y ahora trabaja conmigo.
-¿Así de fácil?-Potter verdaderamente no intuía su cansancio, y el al parecer no le molestaba permanecer despierto un poco mas.
-Las cosas resultan fáciles si las realizas bien.
-¿Porque querrías a una elfina domestica mas? Yo mismo vi que posees un ejercito.
-Para empezar ella tiene conocimientos culinarios como ningún otro, ambos admiramos a alguien en común y ademas ella conoce todos los rumores y situaciones vergonzosas que se producieron en palacio y en los hogares de su circulo interno.
Potter se echo a reír de buena gana.
-Ya me decía que algo como eso estaba detrás.
¿Le menciono a Potter una par de cotilleo que le contó su elfina? Si.
¿Porque? Potter se veía muy agradable cuando reía.
-Excelente charla, pero no e dormido en casi tres días y e de marcharme a mi alcoba.
-¿Que haces despier- Draco inmediatamente lo interrumpió.
-En el desayuno, Potter.
El rubio esperaba de que el moreno fuera lo suficientemente inteligente como para captar su permiso de quedarse a dormir una noche mas.
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Potter obviamente no eligió de nuevo la habitación de la colección de calaveras. Esta vez eligió una un poco mas pequeña y cerca de las cocinas.
Durmió una vez mas muy plácidamente. Se preguntaba el porque no puede dormir así en su propio departamento.
Fue una pena que no pudiera levantarse a la hora que quisiera.
Adivinen quien fue quien lo levanto.
-¡Arriba, Potter!
El moreno lanzo un chillido no muy digno.
-¡Malfoy!¡¿Que rayos?!
-Lo que tienes en la frente ¡De prisa! Debemos salir lo mas pronto posible.
Así, Draco salio de la habitación dejando a un Harry en el suelo con sabanas incluidas.
Mientras se vestía a la velocidad de la luz, no alcanzo a notar que al caer, lo hizo justo en su hombro.
Suponiendo de que el no puede ir a misiones normales de auror por una lesión en el hombro...
...¿Porque en todo este tiempo no le a dolido?
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A penas pudo alcanzar a Malfoy a la salida de la mansión.
La pobre Dotyna chillaba detrás de ambos con el pretexto de que aun no desayunaban.
-¿A donde vamos?- pregunto a gritos.
-¡Grecia!
Draco tomo el brazo del auror y los apareció en el centro de trasladores internacionales.
Todo fue relativamente rápido. Draco al ser alguien quien viaja mucho hizo cargo de todos los papeleos y boletos e hizo que un acompañante pudiera ir con el sin planificación.
El pobre Harry tubo que quedarse en su sitio con un intento de postura autoritaria mientras Draco firmaba, charlaba y alardeaba con un secretario y curiosamente...unos cuantos periodistas.
Malfoy repetía lo mismo una y otra vez.
“Sin comentarios”
“Sin comentarios”
A los pocos segundos, el rubio arrastro a Harry a una plataforma en donde les esperaba un raton de computadora.
Como un disparo, ambos fueron jalados por el poder del traslador.
Hace tiempo que Harry no viajaba a través de esos desagradables artículos. Pues ya en el minuto 6 estaba a punto de vomitar encima del abrigo largo y azulado de Malfoy.
Cuando llegaron a Grecia, Harry corrió a los arbustos para poder vomitar el desayuno... que aun no come.
El muy amable de Malfoy se rio de el.
-Hombre ¿Es que te tomaste algo antes?
-Vete al carajo Malfoy.
-¿Que puedo decir?¿Eres un mago de treinta años y aun no te acostumbras a los trasladores?
-Tengo 28.
Una vez mas, Malfoy lo arrastro por el centro turístico. Hablándole sobre el millón de variedades que presentaba Grecia y su cultura.
Harry lo hubiera escuchado de no ser el pequeño detalle... de que no le importaba .
-¿Porque estamos en Grecia, Malfoy?
-Estamos en busca de uno de los magos mas poderosos en nuestra historia.
La primera persona que en quien pensó Harry fue en Dumbledore.
Draco supo exactamente en quien estaba pensando el moreno.
-Necesitas aprender mas historia, Potter.
-¿A quien buscamos?
-Mas adelante, ahora es tiempo de que comamos algo.
-He notado que tienes mucho amor por la comida.
Draco siguió caminando por su cuenta con Harry caminando ahora detrás suyo.
-Tenemos que disfrutar los pequeños placeres de la vida.
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El queso estaba genial, también lo estaban las aceitunas. Incluso comer ambas al mismo tiempo te dejaba un rastro delicioso en la boca.
Fue una pena que Harry se mordiera la lengua en el proceso.
Pareciera ser que cada pequeña atrocidad que le sucedía a Harry le hacia muchísima gracia a Draco.
-¡Oh Merlín santo!¿porque no eras así durante el colegio?
-¡Yo siempre soy agradable!
-¡Ahahahahha!
-¡Ya para! ¿Porque no me dices a quien buscamos?
-Pero que falta de sinapsis tienes... yo esperaba que tu hicieras un esfuerzo. Iremos a ver a Herpo el Loco.
-...- Harry quedo con la boca abierta ¿Tan fácil era de sorprender?- El es un mago tenebroso...
-No me digas.
-¿El esta vivo?
-¡Por supuesto de que esta vivo! Su horrocrux es un basilisco. ¿Sabes cuanto viven esas criaturas?
-¡¿Horrocrux?!
-Deja de gritar Potter, me esta dando dolor de cabeza. ¿Acaso quieres que algún periodista te escuche y lo publiquen en primera plana?
-¡Yo soy un auror!¡debería apresarte de inmediato!
Draco actuó convicción mientras se agarraba sus propios hombros.
-Merlín, querido auror...¿Vamos a jugar con cuerdas?
Con ese ataque, el moreno titubeo por minutos enteros. Deseaba pincharlo una poco mas, pero el asunto de Herpo debía ser sanjado.
-Bien, espero que te guste los pantanos, Potter.
-¿Los pantanos?
-Si ese reptil sigue vivo y cuerdo, seguramente se encuentre en el sitio mas aislado y húmedo de su tierra natal. El norte de Termopilas seria su lugar ideal.
Harry no sabia como es que Malfoy lograba todo lo que se proponía.
Incluso, en los pocos días que compartió con el, llego a admirarlo.
Solo un poco.
Como la manera en que trataba a sus elfos, como cambio el ambiente de la mansión Malfoy (Incluso la habitación de calaveras no era tan terrorífica), como logra mantener sus contactos, como relata algunos hechos de esa manera tan teatral, como se mueve junto su abrigo azul oscuro con encajes de terciopelo e incluso su fascinación por la gastronomía.
Se le es muy difícil enfocarse en su misión principal.
Aun no ve ningún articulo de magia oscura, porque aun no se dedica a buscarlas.
Fue en ese instante en que se dio cuenta, de que quería prolongar su estadía la mayor cantidad de tiempo posible.
El sabe, que aun no roza siquiera los secretos de Malfoy. Ni siquiera sabia la verdadera razón de sus viajes por el mundo o el viaje de ese momento.
Malfoy ocultaba muchísimas cosas de si mismo. Y Harry aprendió a respetar a las personas que no dejan a la luz de si mismo de golpe.
Así eran los Slytherin´s.