Algunos traviesos rayos de sol se asomaron por entre las gruesas persianas. Arum dormitaba sobre la gran cama cubierta con sabanas de seda, mientras en su mente solo una imagen se repetía una y otra vez.
-Rayos...debería olvidar eso de una buena vez-Se dio vuelta intentando dormir un rato más, pero ya no se le fue permitido. Cansado de su constante búsqueda de respuestas a sus acciones, se puso de pie y se metió a la ducha.
El agua caliente siempre había sido la solución a sus problemas, siempre y cuándo estos tuvieran solución.
“-¿Por qué?...¿Qué fue...?-”.
-Basta!!-Soltó el frasco donde se encontraba la loción que usaba para lavarse el cabello, se sujeto con fuerza la cara y miró el suelo.-No pienses más en eso Arum...olvídalo-Cerró las llaves de la ducha y salió con una toalla rodeando su cintura.
Caminó hasta su closet, tomó un pantalón holgado, una camisa de vestir negra y se los puso, después de eso, se arregló un poco el cabello y salió disparado por la puerta.
-Hoy mismo arreglaré esto...lo juro-Saltó algunos escalones y corrió hacía la calle.
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-¡¡Gracias por la comida!!-Los 32 jóvenes que residían en el orfanato se encontraban reunidos en el comedor, pues era la hora del almuerzo.
Tras dar las gracias por la comida servida sobre las mesas frente a ellos, cada uno se colocó en su lugar predilecto.
-Por cierto Mill~Freund-Un joven pelirrojo de ojos oscuros, se acercó al ojiverde que devoraba lo que había sobre su plato-¿Dónde estuviste anoche?...te espere para...-Se acercó a su oído-Ya sabes...divertirnos...Pero nunca llegaste-Subió un poco la voz y se sentó frente a este.
El de cabellos cenizos le sonrió de forma graciosa.
-Lo siento Grieg...es que estaba en casa de un amigo nuevo-.Terminó.
-¿Qué?...¿Amigo nuevo?...No entiendo explícame otra vez eso ¿Quieres?-.Dijo con un tono algo molesto el pelirrojo.
-Pero que veo...¿El gran Grieg Smetana se ha rebajado al nivel de celar posesivamente al idiota de Millet?-La voz de Vivian interrumpió a ambos chicos que miraron a la chica.
-¿Celos?...¡¡Por supuesto que lo celo!!...nunca ha tenido un amigo más que yo...y ahora llega como si nada diciendo “estuve en casa de un nuevo amigo”...¿Como quieres que reaccione?-Respondió de mala gana Grieg.
-Ya...ya...cálmate...-Se sentó junto a ellos-Pero...explícanos bien...¿Quién es el chico?-Preguntó la chica.
-Digamos que un chico joven que exagera mucho las cosas...-Se puso de pie y mostró una pícara sonrisa-Además...besa muy bien-Dicho esto se alejó frente a la atónita mirada de los otros dos.
-¿Besa muy bien?-Dijo indignado el de ojos oscuros.
Vivian se encogió de hombros y siguió con el almuerzo.
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“-Ya tengo que irme...si llego más tarde me ira peor-Sonrió Millet.
-Esta bien...lamento que ya te vayas...pero no puedo retenerte aquí-Se lamentó el de cabellos negros.
Después que la fiesta se volviera más ruidosa y Bach y Dalí hicieran de las suyas, ambos optaron por salir un rato a respirar al jardín, Millet guiado por Arum.
-Tu padre esta muy ocupado, no quiero ser mal educado pero la verdad no me gustaría interrumpir su diversión-.
-No te preocupes...yo les explico que tuviste que irte...por favor, ten cuidado, ya es tarde y no hay mucha gente por las calles a esta hora...-
-Gracias...-Sonrió.
-¿Eh?...¿Por qué?-Cuestionó dudoso.
-Por todo esto...por preocuparte por mi-Se acercó un poco a él.
-A...sí...bueno...hasta pronto-Sin poderlo evitar se puso un poco nervioso, pero aun así le tendió una mano al ojiverde.
Millet le miro algo extrañado.
-Así te despides...con la mano-Preguntó divertido por el nerviosismo del ojiazul.
-Sí...así me enseñaron-Contestó extrañado por el comportamiento del otro.
-No...yo te enseñare como se despiden según lo que yo se-Sonrió de nuevo y se acercó inclinándose un poco, depositando un suave besó en la mejilla del pelinegro-Ese es para la familia-Y antes de que Arum pudiera hacer o decir algo, el rubio le sujetó por la cintura con delicadeza y dio un leve pero largo beso en sus labios.
Arum se quedó quieto, no se movió ni un poco, su sentido común le ordenaba alejarse, pero el resto de él le obligaba a quedarse allí. Sin darse cuenta, lentamente entrecerró los ojos.
Millet notó al inició la sorpresa del chico, pero se sorprendió al ver que le correspondía, sonrió para si e imito el gesto y disfruto más aquel tacto, para separarse segundos después.
-Ese es para ti...-Se alejó del chico que aun mantenía los ojos entrecerrados y mostraba un gran rubor sobre sus mejillas.-No vemos...-Tras esto salió corriendo del lugar.
-Adiós...-Susurró, pero al instante se dio cuenta delo sucedido y su normalmente yo volvió a tomar control de su cuerpo-Oye espera...¿Por qué?...¿Qué fue eso...?-Gritó, pero el otro ya se había alejado del lugar.”
-¡¡Basta!!-Sacudió la cabeza intentando alejar esos recuerdos, cerró los ojos con fuerza y comenzó a correr, pero...-¡Auch!-Sintió algo frío contra su rostro y después nada.
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-¡Oye!...hola...abre los ojos...¡Arum!...¿Estas bien?-Escuchaba voces a lo lejos, abrió los ojos lentamente y sintió una leve punzada de dolor, se llevó una mano a la frente.-Vaya...por fin!...pensé que no despertarías hoy-.Se quejó el cenizo.
-¿Millet?...Millet!-Se paró de golpe, cosa que sorprendió al otro, quien se tuvo que alejar rápidamente para no ser golpeado por el rostro del pelinegro.
-Calma Arum...ahora dime-Se acomodo mejor en la silla junto a la cama donde estaba el otro-¿Qué demonios hacías inconsciente frente al orfanato?-Dudó.
-¿Inconsciente?...no se...creo que me estrelle contra la barda por ir tonteando-Suspiró avergonzado.
-Y me dicen idiota a mi...-Susurró.
-¡¿Qué?!-.Dijo de inmediato evitando el tema.
-Nada...oye...y ¿Que hacías por aquí?-.
-¡Ah!...venía a verte...para preguntarte...por que demonios me...-El ojiverde le calló con sus labios-...besaste ayer...-Soltó tras separarse.
-Ese fue el saludo-Dijo alegre Millet.
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-¿Me mando a llamar Superiora?-La hermana Carmen entró a la habitación.
-El chico que esta con Millet...es Arum Oréa ¿Cierto?-Dijo seria.
-Si...eso dijo Hallbridge-Respondió intrigada la mujer.
-Esto cada vez se pone peor Carmen...-Suspiró.
-¿Señora?...-.
-Ese chico...ese chico es hijo del hombre que más daño le ha hecho a Millet...es hijo del asesino de su padre...-.
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Gracias por leer, perdón por la ortografía.