CELOS / 2MIN. Algo crece dentro de mí. por Linlim

- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:
Lo siento no he tenido mucho tiempo, por eso avancé en vacaciones.

Después del incidente con JongIn, nuestra amistad continuó, aunque prácticamente se redujo a la convivencia en la escuela, solíamos llevarnos bastante bien, de cuando en cuando me preguntaba si estaba todo bien, pero yo siempre le decía que si.

Los celos de MinHo eran intermitentes, a veces todo estaba bien, en especial cuando nos veíamos seguido, ya no teníamos limitado un día específico para vernos, mi mamá había cambiado las reglas debido al ingreso a la universidad por parte de MinHo, ya que sus horarios y actividades eran tan bastas que no tenía un día u horario especifico para verme y eso que apenas iniciaban clases. Afortunadamente por tener auto, podía ir en ocasiones durante un rato en la noche, mis padres, en especial mi mamá, estaba siendo muy tolerante.

Al inicio de las clases universitarias, hubo diversas fiestas de bienvenida a los alumnos de nuevo ingreso, sin embargo MinHo había declinado a la mayoría de ellas pese a que diversos compañeros de su mismo nivel o niveles superiores lo invitaban e insistían, y eso lo pude constatar por la cantidad de mensajes que le llegaban a su celular y como aún teníamos la costumbre o mejor dicho el la tenía, de intercambiar celulares, me daba cuenta. Cada que le preguntaba que porque no iba, el siempre decía que prefería pasar su tiempo libre conmigo, que yo era su prioridad, eso me hacía sentir importante en su vida, pero no dejaba de querer saber cómo sería una fiesta de universitarios, aun me faltaba casi un año para saberlo, pero era joven y curioso, no quería esperar tanto, sobre todo porque aunque era un cliché, sería lindo llegar con mi novio a una fiesta de mayores. Me ilusionaba un poco.

Un día viendo el perfil de Facebook de MinHo, vi las fotos de sus amigos, habían etiquetado a mi novio en varias fotos, en una de ellas se miraba a una chica muy cercana a el, pese a que el no la estaba tocando, ni la miraba, ella en una foto, lo tenía tomado por el brazo, se veía que estaban trabajando en el salón de clases, pero MinHo hablaba con algún compañero revisando algo en su portátil, en otra mas, todos saludaban para la foto, pero ella lo seguía viendo, no había nada sospechoso, sino fuera porque sabía que MinHo no gustaba de chicos, me pondría celoso, ella era muy femenina y bonita.

Seguía viendo sus fotos, ese día MinHo me había dicho que no iría a verme porque trabajaba con sus compañeros en un proyecto, supuse que de ello eran las fotos. Me deleitaba observado su hermosa sonrisa cuando el celular sonó y vi que era el.

—Hola Bebé…¿Qué haces?

—Estoy en facebook.

—Mmm—Ahí íbamos de nuevo, su tono lo delataba— ¿Hablas con algún chico?

—MinHo sabes que no, por favor no podré verte hoy y no quiero que por tus celos tengamos un mal día si solo estamos hablando por teléfono.

—No puedo evitarlo, te extraño, quisiera estar contigo y tu hablando con otras personas o viendo fotos de quien sabe quien.

—Pues estoy viendo fotos tuyo y por cierto…hay una chica muy cercana a ti…te está tocando. —Lo dije solo con un dejo de venganza, quería sus celos, provocarlo, pues el fácilmente caía, me daba explicaciones excesivas.

—¿Una chica?...no lo sé, no he visto mi perfil…

—Es una chica linda, traía un vestido corto en color rosa…

—No la ubico.

Su negativa me hizo reaccionar.

—Una corona pequeña de flores, cabello oscuro, largo, lacio , labios carnosos…

—Ah ya …es… NaYeon…ella… es mi compañera y…

Algo me sobresaltó, en especial su hablar entrecortado, algo quería decirme.

—¿Y que MinHo?

—Me invitó a una fiesta, claro que no acepté, solo…dije que no…pese a su insistencia.

—No es la primera vez ¿verdad?

—No, pero siempre la rechazo, no es algo importante.

Sentí que ardí en cólera, no porque estuviera celoso, sino porque apenas me lo dijera, sabía que no me engañaría con una chica, pero debió decírmelo antes, como el siempre me hacía hablar a mi.

—¡MINHO!

—Bebé no tiene importancia, en verdad.

Me repetía una y otra vez lo mismo, escuchaba como en varias ocasiones alguno de sus compañeros le llamaba para trabajar mientras estaba al teléfono y el les pedía un momento. Hasta que oí una voz femenina diciéndole que se diera prisa.

—¿Es ella?...dime la verdad.

—Si, pero bebé…

—¡Quiero que me lleves a esa fiesta!

Aprovecharía su culpa, para que me llevara.

—Pero Bebé, hay mucha gente…hombres y luego…

—MinHo ¿me estas ocultando algo?

—¡No! claro que no, sabes que no me gusta ir a las fiestas.

—Me duele MinHo, me duele que no quieras llevarme, no se si porque me ocultas algo o porque te avergüenzas de mi o porque tienes a alguien mas. — Solo necesitaba un poco de manipulación, una pizca de culpa y obtendría la invitación a la fiesta universitaria.

—¿Cómo puedes decir eso?

Los reproches duraron un poco más, solo debía presionar como si estuviera celoso… y lo logré, solo debía convencer a mi madre de dejarme ir, sería el viernes y me quedaban dos días.

Llevaba dos días solicitando permiso …no, mejor dicho rogando por el permiso.

—Por favor, por favor, usted sabe que MinHo cuidará de mí.

—No Taebaby, es una fiesta de chicos universitarios, pueden cometer locuras, tomar alcohol o fumar…no quiero ni pensar que se droguen…así que no insistas.

—Pero yo no tomaré nada lo prometo, confíe en mi.

—Será muy de noche y no es correcto que andes tan tarde solo con MinHo…no cambiaré de parecer-.

—Podrás revisarme cuando llegue…lo que quiera, por favor.

Y bueno, ante tanta insistencia terminó la resistencia de mi madre y me dejaron ir, con la condición de ser respetuosos, tener un horario límite de la una de la mañana y … mi mamá me revisaría que no llegase en estado inconveniente, se entendía por drogas o bebidas alcohólicas, pero… ¡no me fuera a revisar la ropa interior!

Por supuesto que la fiesta estaba llena de gente universitaria con vasos en la mano otros con botellas de cerveza y fumando en el patio. Al entrar a la casa, MinHo dejó una bolsa de supermercado llena de snacks como contribución a la fiesta. Curiosamente me remontó a cuando nos conocimos, en la fiesta de SeHun y me apegue un poco a el cuando mirábamos a la gente bailar en la enorme casa, tenía mi nuca apoyada en su pecho, el tenía un brazo descansando en mis hombros .

La chica llegó. La caza novios ajenos.

—¡MinHo llegaste!

Vaya, que observadora, pensé, pero preferí sonreír con amabilidad.

—Si NaYeon, gracias por invitarme a tu fiesta, aunque solo estaremos un rato —Esa grandiosa casa era de ella— Traje algo que dejé en la mesa.

—No era necesario, pero gracias, ahora vamos a bailar —Intentó tomar la mano de MI novio y quise cortársela …bueno con la mirada.

—No, lo siento vengo con el. —Quitó la mano que tenía en mí para señalarme.

—Ah, es tu hermanito.

—No—MinHo se rió mirándome —El es mi…

—Su mejor amigo, soy TaeMin —Le extendí mi mano, sintiendo que MinHo me lanzaba una mirada extrañado, después de todo, le había hecho un berrinche por ella y ahora yo ocultaba nuestra relación, pero prefería que fuese así a que lo acosaran en la escuela por ser gay.

—Ah, mucho gusto son NaYeon, espero que tu y yo también seamos amigos y me des consejos de cómo llegar a ser mas que amiga de MinHo —Le sonrío a mi novio que palideció al verme.

—Si, claro. —Ya estaba mas tranquilo, no había nada que temer, aunque realmente nunca temí, bueno si, solo un poco.

—Iremos a ver a los chicos, nos vemos luego. —La despidió MinHo.

—Claro, te veo mas tarde y bailaras conmigo MinHo, no podrás negarte.

MinHo solo le sonrío—Por supuesto que no bailaré con ella Bebé, lo prometo. —Me susurró al oído.

Puso una mano en mi cuello y me dirigió por la casa, hacía el patio trasero, jugaban con shoots y retos, un chico ya se miraba en mal estado.

Cuando vieron a MinHo, hubo varios saludos, choques de mano y risas, algunos eran compañeros de clases y otros eran de semestres mas avanzados, me dijo al oído, pero igual lo conocían, les extrañaba que por fin hubiera querido asistir a una fiesta, aunque aseguraban se debía a NaYeon, lo empezaron a molestar, al parecer era de dominio publico que la chica estaba enamorada de el, lastima que el fuera MÍO.

Nuevamente creyeron que yo era su hermano menor, pero ya no me importaba. Un chico nos miraba con demasiada atención, lo ubicaba de una foto que había visto, era de su clase. Se acercó a nosotros.

—MinHo te toca hacer un reto.

—No bebo, lo siento SeoJoon. —Le sonrío con amabilidad.

—Si cumples con el reto no tomaras, es simple.

Todos comenzaron a insistir.

—¿Qué tendría que hacer? —Yo solo estaba parado a un lado, observando divertido.

—Besar a NaYeon.

MinHo se atoró con el refresco que tomaba. Todos rieron y comenzaron a burlarse. Me miró y esperé a ver que hacía.

—Esta bien —Todos callaron el escándalo—Dame ese shoot.

Nuevamente las carcajadas mientras mi novio bebía. El chico llamado SeoJoon me miró.

—Interesante.

Sentí que el sabía de nuestra relación, pero no supe entender cual era su intención cuando me dirigió una mirada maliciosa.

—————0—0—0—————

Después de la fiesta todo siguió con normalidad, las llamadas de MinHo eran mas frecuentes porque sus visitas se empezaron a disminuir, nos veíamos unas dos o tres veces por semana pero era poco el tiempo, a veces trataba de trabajar en mi casa, pero no siempre era posible, pues debía trabajar con alguien mas o necesitaba algún manual o libro de la biblioteca. A veces yo lo iba a visitar por unos breves momentos a su facultad, comíamos algo rápido en la cafetería, luego me acompañaba a veces a tomar el autobús. Nunca tardaba mas de una hora para evitar interrumpirlo.

Un sábado me dijo que como no podría verme , quería que lo acompañara a hacer tarea, solo estaría trabajando en pareja con SeoJoon en su departamento, así que no veía ningún inconveniente para poder pasar un rato juntos. El tipo no me agradaba en realidad, desde ese día, en algunas ocasiones en mi visitas a MinHo en su facultad lo veía , el me miraba con recelo y no perdía oportunidad de acercarse a el o tocarlo, ya en los brazos o recargarse en su espalda mientras le preguntaba cualquier banalidad , incluso una vez estuvo a punto de sentarse en sus piernas, por supuesto MinHo lo rechazaba y lo empujaba. , sentía que era una forma de darme a entender que me respetaba, pero no podía evitar desconfiar de el, de SeoJoon.

Ese día MinHo fue por mi a Angang y llegamos al complejo de departamentos, era un lugar sencillo, pero bastante decente. Cuando llegamos, MinHo tocó la puerta y el chico abrió, traía un short excesivamente corto y una playera deportiva de tirantes, hacía calor, pero a mi parecer su atuendo estaba un poco fuera de lugar, cuando me vio frunció la boca.

—Ah, trajiste a tu amiguito.

MinHo me tomo de la cintura y entramos.

El departamento, no era tan amplio, pero tenía un pequeño living, un cuarto separado por mamparas de cristal opaco, a un lado una puerta que supuse era un baño y al fondo se miraba una pequeña cocina. Se pusieron a trabajar, tendrían una presentación de anatomía y realmente se miraba bastante complejo.

—Nunca pensé que estudiar deportes, implicara estudiar tanto. —MinHo se dirigía a mí mientras yo jugaba en el celular candy crush para entretenerme, desparramado en el sillón.

El tipo, se acercaba demasiado a mi novio, lo veía contonearse , acariciarle la espalda con la palma de la mano y acercar su cara mientras MinHo escribía en su portátil. Estaba a punto de aventarle el celular en la cara a ese tipo.

—MinHo, creo que tendrás que quedarte a dormir conmigo, pues no creo que terminemos hoy— Esa frase hizo voltear a verlos.

—No, claro que no —MinHo levantó su mirada y se encontró con la mía desconcertada.

—Ven Bebé, ayúdame —Estiró su mano hacía mi.

Me acerqué a el, pero tiró de mi e hizo sentarme en su regazo. Eso me aturdió un poco y no pude más que mantenerme congelado. SeoJoon me miraba con los ojos entrecerrados.

—MinHo así no vamos a avanzar.

—Lo haremos…deberías ir por unas bebidas.

—Claro —Se levantó de mala gana para dirigirse a la cocina.

—No, preferiría un frappe.

—No tengo —Paró sus paso para voltearlo a ver molesto.

—Ve a comprarlo —MinHo sacó unos wones de su cartera que estaba sobre la mesa.

—No iré, que vaya el niño—Dijo con algo de burla.

—El me está ayudando, ve tú.

—No iré.

—SeoJoon, me debes una, con tu escapada de clases, recuerda que te cubrí.

— ¡Pero mírame! No puedo salir así. —Se señalo as i mismo. Por supuesto que no podía salir así, parecía bailarín exótico.

—Solo ve y cámbiate. —MinHo giró los ojos.

El chico de mala gana, con la puerta abierta de la habitación se denudo, me sentí incomodo, porque aunque tenía una mica opaca como pared, se notaba su falta de ropa …también su falta de pudor. Salió del departamento azotando la puerta. MinHo me jaló a lo que supuse era el baño… y lo era.

Comenzó a besarme con desesperación, bajaba por mi cuello y nuevamente atrapaba mi boca. Eran besos desesperados.

—MinHo no…por…favor, puede regresa… ¡ MinHo!

— ¿Por qué no? estabas sentado en mis piernas y me excite…tiene mucho…que no nos besamos y hacemos el amor.

—Pero no aquí…SeoJoon va a …sospechar— Sus besos casi no me dejaba a hablar.

—¡Por dios TaeMin, como sino lo sospechara ya!

Sentí sus manos colarse por mi pantalón, bajo mi ropa interior masajeando mis glúteos.

—¡No! —Lo empujé en un arranque de desesperación por calmarlo.

—¡Mierda TaeMin, como me pones y no me quieres quitar las ganas!.

Me salí del baño y me reacomodé la ropa.

—Pero así no, no me gusta, yo soy…muy ruidoso y me sentiría avergonzado.

—Pues entonces por favor, vete, no me concentro contigo.

—¡Tu me hiciste venir!

Guardó silencio.

—¿Te quedaras a dormir aquí?

—Por supuesto que no, por eso debo darme prisa, es mucho lo que debo adelantar, esto no es el instituto, debes entender eso.

Sentí un nudo en mi garganta y mis ojos llenarse de lagrimas, estaba siendo un estorbo. Salí azotando la puerta. Caminé por las escaleras dando fuertes pasos, no quise usar el ascensor, al llegar a la entrada el portero me sonrió, yo solo agaché la mirada avergonzado, muchas lagrimas surcaban mi rostro. Comencé a caminar sin prisa, me daba tristeza la pelea pero también en el fondo sentía un poco de celos del compañero de MinHo. Sacudí un poco la cabeza negando mis pensamientos cuando sentí una mano tocar mi brazo.

—Te llevaré a tu casa.

—No es necesario MinHo, aunque sea un niño de instituto se llegar a mi casa.

—No te estoy preguntando. —Me detuvo por completo.

—Tienes que hacer actividades con tu compañero de clase, lo entiendo, regresa, no quiero quitarte el tiempo.

—Entonces te llevaré a mi casa y me acompañaras mientras adelanto algo.

Caminamos de regreso a su auto, para dirigirnos a su casa. El camino fue silencioso e incomodo.

—¿No está tu mamá?

—Si está.

La señora me daba un poco de miedo, no era desagradable, ni grosera pero mas bien era indiferente.

Al entrar , se encontraba sentada en el living leyendo.

—¿Pensé que habías ido a hacer un proyecto de la Universidad con un compañero?

—Si, ya terminaré, continuaré en mi habitación con otras actividades de la Universidad —Caminó de largo, solo alcancé a hacer una reverencia y fui jalado a su lado, sentí una mirada cargada de desaprobación, después de todo, yo solo entraba a su recamara cuando ninguno de sus padres estaba.

Adentro MinHo se sentó en su escritorio sacando su portátil y apuntes , lanzó su bolso a la cama, se oía como vibraba su celular, lo tomé y pude ver en la pantalla el nombre de SeoJoon, cuando se cortó la llamada, vi que tenía varias llamadas perdidas de el.

—Te llama tu compañero ¿No contestaras?

—No, no tiene sentido.

Se levantó y me quitó el celular para besarme, me tomó de la cintura y sentí como su lenguan entraba en mi boca, tenía los ojos cerrados, una de sus mano bajo a mi trasero, se deslizó apretando cada uno para luego colocarlo en medio, sintiendo como trataba de enterrar sus dedos sobre la ropa, su excitación bajo el pantalón era palpable, estaba a la altura de mi sobre mi vientre, unos gemidos escaparon de su boca y se comenzó a frotar. Mi corazón latía acelerado.

—No..tu madre …puede venir —No me dejaba hablar.

—No entrará, nunca lo hace sin tocar antes—Ambas manos masajeaban mi trasero sin ningún pudor, comenzó a tratar de caminar cerca de la cama, sabía cual era la intención, tirarme en ella.

—No…por favor.

—En casa de SeJoon dijiste que no…aquí sí.

—No es correcto…yo no quiero…

—Aunque sea una “jaladita”…

—¡No!, dije que no.

—¡Mierda! ¡Mierda! ¡Mierda!

Pasó las manos por el cabello, su cara de frustración acompañada de una casa de campaña en sus pantalones demostraba su enojo. Optó por sentarse nuevamente frente a su escritorio.

—¿Hace cuanto no follamos?

Hacía ya unas dos semana. Siempre nos veíamos con prisa.

—No puedo creer que no tengas ganas TaeMin.

Iba a contestar que si lo deseaba, pero no era el lugar, cuando la puerta se abrió sin previo aviso.

—¡MinHo! —Su mamá nos miraba alternadamente—Quería saber…si deseas algo de fruta para estudiar.

—¡No, no necesitamos nada! —MinHo realmente estaba malhumorado.

—Gracias señora— Aunque reaccioné, a mi no me había preguntado —Ya me voy.

—Creo que sería lo correcto, dudo mucho que mi hijo se concentre contigo aquí. —Ella me miró a mi y supe a que se refería.

—Madre, por favor.

—Es la verdad, hiciste un trato con tu padre y SiWon de que no irías a estudiar a Seúl pero que tendrías notas sobresalientes aquí.

—Bueno, creo que no tengo problemas en la escuela, por si no lo sabes.

—Yo…me retiro — Una reverencia rápida y salí, estaba seguro que MinHo no me seguiría por el problema “tan notorio” en sus pantalones.

—————0—0—0—————

El tiempo comenzó a correr , si bien ese día que me fue de su casa , al otro día se fue a disculpar, pasó la mayor parte de la tarde conmigo, aunque su celular no dejó de vibrar.

Después de eso, nuevamente llegaron las ausencias.

Solo habíamos hecho el amor una vez, las visitas a mi casa eran mas esporádicas, lo veía tenso, malhumorado. Cuando iba a verlo a la escuela parecía agradarle, aunque fueran solo por poco tiempo, pues el tenía clases y actividades. Aún me molestaba la presencia de su compañero que parecía rondarlo…no, parecía acecharlo y desde ese día que lo vi, se notaba que yo no le agradaba, aunque realmente no me importaba, MinHo era mío, solo mío, al menos eso pensé al inicio , pues el tiempo parecía desvanecer poco a poco nuestra relación, no sabía lo que sucedía y me daba un poco de miedo.

¿Y si las cosas no eran como yo pensaba? ¿Y si había encontrado a alguien mas? ¿Y si yo le había hartado por ser un chico aún de Instituto? El era tan apuesto y esa NaYeon o SeoYoon lo rondaban. Las dudas y la zozobra asaltaban mi corazón.

Por fín un domingo MinHo me dijo que tendría la tarde libre, que necesitaba hablar conmigo. Eso me lleno de temor. Me arreglé lo mejor que pude, medio chongo, una polera beige y pantalones caqui, ropa interior nueva, me perfumé y humecté mi piel, quería verme radiante para el.

Cuando llegó pidió cortésmente permiso a mi padre, aunque era por amabilidad pues ya no había ningún pero en nuestra relación por parte de ellos, incluso comprendían que MinHo fuera menos frecuentemente, veían la situación de mi hermana HaYii y las presiones universitarias, aunque yo veía que ella tenía mas tiempo libre, pero no estaba presionada por sus notas universitarias como mi novio.

Nos dirigimos a nuestra heladería de siempre.

Junto a la ventana.

Con las azaleas en flor.

Con el sol del atardecer.

Acompañados por el canto de los pájaros.

Pero el semblante sombrío de MinHo. Con el frió pese a ser una tarde cálida de primavera.

No sabía que pensar.

Después de ordenar nuestros helados me atreví a preguntar.

— ¿Pasa algo MinHo?

—Si…creo que hemos llegado a un punto de nuestra relación…

Notas finales:
Nos leemos hasta el martes.

Anniong!!!

Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).