No podía quitarme la idea que MinHo había plantado en mi hace unos días…una familia.
Comía en compañía de mis padres, HaYii no tenia deberes en la universidad, asi que el almuerzo lo tomamos en total tranquilidad. Platicamos y todo era armonioso, entre que mi hermana me pasaba trozos de brócoli que no le gustaban y yo le arrojaba guisantes.
—¡Ya niños coman!
Reímos y todo fue normal. Al terminar me ofrecí a lavar la loza ayudando a mi madre.
—Mmm que raro Taebaby, seguro quieres salir con MinHo por la noche y por eso estas siendo amable.
—No que va, vino su hermano y hoy no vendrá. —Por supuesto que me había invitado a comer con ellos, pero para nada iría con lo mal que me veían casi todos, exceptuando su cuñada.
Secaba los últimos platos cuando lance la pregunta.
—¿Qué pensarías si yo…?
—¿Tu que?
Tenía miedo del regaño, pero aun así necesitaba saber su opinión.
—¿…no fuera a la universidad? ¿Se enojarían ustedes?
Mi mamá se quedó seria. Me escudriñó con la mirada, no pude negar que sentí un poco de miedo a su reacción.
—Es por MinHo ¿ verdad?
—¡NOOO! …digo no, como cree.
—Es por el bebé, no puedes negarlo.
—Es solo que…no se, tal vez ir a la universidad no sea tan importante…digo papá y tu no necesitaron ir…solo digo…no los juzgo.
—Tu hermana va…
—Si y eso es bueno, solo digo…
Se mordió la uña del dedo pulgar, mientras me miraba, no sabia que diría.
—Siéntate —Me jaló del brazo nos sentamos uno frente al otro. —Una vez me demostraste lo mucho que lucharías por el amor que le tienes a MinHo y no puedo negar que me sorprendió que fuera la primera vez que me desafiaras, eso me deja claro que no buscas mi aprobación, sino mi opinión …
—No, claro que no mamá…yo solo…
—Está bien bebé, no es un reproche…solo quiero que sepas que… —respiró profundo antes de contestar — está bien si eso quieres, pero solo si estas totalmente seguro.
No pude más que asombrarme.
—¿En verdad?
Asintió con la cabeza y me tomó de las manos. —Sabes tu padre decidió no ir a la universidad porque todos sus hermanos fueron y el al ser el mas joven, pensó que alguien debía cuidar de sus padres, de sus tierras dados por sus ancestros, las que ahora rinden fruto a nosotros… alguien debe cuidar de esa herencia y si tu no quisieras ir a la universidad, podrías quedarte con tu padre…formar tu propia familia, vivir a Yangbuk , en casa de tus abuelos donde nadie te juzgue…solo creo que estas creciendo y debes pensar muy bien lo que quieres de tu vida…solo tu puedes decidir, sino lo haces, es probable que culpes a quien decidió por ti…yo no quisiera que me culparas por ello.
—No mamá, no lo digo por usted.
—Yo igual te amaré sin importar que decidas.
Le sonreí, no pude dejar de asombrarme al pensar en como la cosas habían cambiado con el tiempo.
Seguí pensando sobre ellos das después, MinHo me hacía insinuaciones sutiles. Mi cabeza seguía llenas de dudas pero no me atrevía a decirle a mi novio. Esa tarde MinHo no me dejó ir a la tutoría. Cuando llegué a la casa, le dije a mi madre que ya había comido, a decir verdad MinHo me había atiborrado de comida.
Busqué a mi padre que estaba en una pequeña buhardilla llena de herramientas. Me acerque mientras el limpiaba unas piezas.
—¡Hola!
—¡Pequeño que susto!
—No es verdad, nuca lo asusto.
Solo sonrió y me sacudió el flequillo.
—Eres un pequeño travieso. —Siguió con su labor y no pude dejar se sentirme culpable, por mis inasistencias a las clases que el pagaba.
—Si…lo sé.
—¿Qué quieres contarme?
—¿Por qué piensa que quiero contarte algo?
—Porque te conozco y tus ojos me lo dicen —Dejó la herramienta y me prestó atención. —Anda, dime, prometo no reñirte.
Dudé, pero era le momento. —Es que yo… yo… —Las palabras no salían.
—Estas pensando en no ir a la universidad ¿no es así?
—¿Cómo lo sabe?
—Puedo leer tu mente, eres muy transparente.
¿ Se notaba? ¿Sabría que esa tarde había tenido sexo?
—Tae se te van a salir los ojos, tu madre me ha contado —Entendí la broma—…aun eres un chiquillo tan crédulo, como cuando eras niño y te robaba tu nariz…
—Recuerdo, te decía a punto de llorar que me la regresaras.
Asintió evocando el recuerdo. —¿Es eso?
—Aun no lo se…
—Sabes tu madre iba a ir a la universidad…
—¿Y porque no lo hizo?
—Te diré un secreto ¿prometes no decir nada?
—Si…digo si prometo no decir nada.
—Tu madre era la mas lista en el instituto, no entiendo porque se fijo en mi siendo yo tan tímido y simple — Río—Había presentado el examen y era un hecho que se iría, yo estaba resignado, consciente que tal vez conocería a alguien mas inteligente y me dejaría, pero no me importaba, si ella iba a ser feliz…pero — Calló, se pasó la lengua por los labios —Éramos jóvenes y ella me pidió que la esperara y yo se lo prometí, cumpliría mi palabra, yo no iría porque ya sabes me quedaría a cuidar de mis padres… pero ambos estábamos llenos de dudas que no queríamos hablar y ella quiso darme una prueba de amor…sabes a que me refiero —Me dio una mirada apenada.
—Yo…lo entiendo…digo eran jóvenes…claro eso no significa…— ¡Ssiba! Ahora mi padre pensaría en que yo tenía sexo con MinHo.
Río un poco —Lo sé, yo la amaba …la amo tanto que no tuve la fuerza de voluntad para negarme y poco antes de irse, se dio cuenta de que estaba embarazada de tu hermana, nunca se entristeció, dijo que estaba feliz…pero yo no pude dejar de sentirme culpable, le pedí que fuera a la universidad, yo buscaría un trabajo cerca de su universidad para cuidar de ella y cuando el bebé naciera, me regresaría con mis padres para que me ayudaran a cuidarlo mientras ella terminaba la universidad…pero ella no aceptó, estaba convencida que era una señal de que debía quedarse, nos casamos inmediatamente…cuando HaYii nació ella enloqueció de amor, yo le insistía que presentara nuevamente el examen, pero se negó.
—Ella es muy buena madre. —Comenté.
—Ella no puede evitar su sentido sobreprotector, pensé que tal vez cuando HaYii creciera un poco, ella aun tendría una oportunidad.
—Pero un años después nací yo… —Le había robado una oportunidad a mi madre.
—No, ella quería tener otro hijo pronto, creyendo que era el momento adecuado para que se cuidaran el uno al otro, por eso solo se llevan un año, ella siempre dijo que era su decisión no ir. Pero yo aun me sigo preguntando que hubiera sucedido si ella hubiera tenido esa oportunidad…ella es feliz, lo siento, lo noto en ella, pero eso no cambia el pasado.
De alguna manera sentí que yo también le estaba robando esa posibilidad de ir a la Universidad a MinHo
—Por eso siempre sedes a lo que ella quiere.
—Eres muy intuitivo, pero si, esa es la razón.
—¿Entonces que opinas?
—Es tu decisión, tu madre y yo te apoyaremos solo analiza bien las cosas para que no te arrepientas en el futuro, decide hoy lo que vivirás mañana. —Me besó la frente como solía hacerlo.
—Gracias padre— Era libre de decidir ¿era capaz de hacerlo? ¿O era más fácil que los demás decidieran por mí?
Ese día MinHo decidió que pasaría por mi a la salida, pretendía que nuevamente faltara, había conseguido rentar un pequeño departamento gracias al patrocinio de su cuñada y hoy lo conocería, no quería ir, no porque no quisiera conocerlo, sino por evitar faltar una vez mas, pero el era tan insistente. JongIn no lo sabía o al menos lo sospechaba y me lo reprochaba, así que dejó de ir a la práctica de básquet para asegurarse que irimoas juntos a las clases, el plan era comer juntos y luego dirigirnos con el tutor.
Si le decía que no iría ¡ardía Troya!, así que opté por esconderme cerca de unas escaleras, alejadas de nuestra clase, al menos esperaría hasta que calculara el se fuera. Miraba mi celular, seguramente MinHo estaba ocupado, tratando de cumplir sus obligaciones para tener la tarde libre. Tomé mis audífonos comencé a escuchar a Linkin Park, tarareaba “Heavy”, es ese momento la letra era muy inspiradora. Tenía los ojos cerrados cuando sentí una mano, brinqué del susto.
—¡Te busca JongIn!, le marcaré para avisarle.
SungMin hizo amago de llamarlo, pero le di un manotazo para evitarlo —¡No lo hagas! Lo sorprendí y eso me hizo sentir apenado.
—¿Por qué no quieres que le avise?
—Porque…no …iré…—Su mirada me juzgaba —Porque…tengo que comprar unos encargos de…mi madre…
—Dile que te acompañe primero a ello y luego pueden ir …—Dijo bajando el tono al final de la oración mientras me veía esperando no se que de mi.
—Si…tal vez.
—¿Le llamo?
—No, yo lo busco —Me levanté pensando adonde me escondería ahora de JongIn y de SungMin.
—Espera Tae —SungMin se sentó a donde estaba y palmeo a un lado. Se me hizo extraño, pero no supe que decir. Solo me senté, me serviría para hacer tiempo.
—¿Tae recuerdas que yo llegué a medio año escolar al iniciar el instituto, hace tres años?
—Si.
—Estaba asustado, no conocía a nadie ý sentía que era raro.
—Lo eras, un poco —Reí en broma, pero su rostro serio me dio a entender que no era broma.
—Pero afortunadamente alguien se me acercó a mi, me hizo sentir integrado.
—¿Fui yo? No lo recuerdo.
—¡No diablos, tu no!, me ignoraste, eras un brazo de JongIn, eras como su perro oliendo su trasero…mas bien como cuasimodo persiguiendo a Esmeralda…como…
—Ya entendí el punto SungMin…no tienes que insultarme, JongIn y yo somos amigos desde muy pequeños. —le di un golpe en el brazo.
—No te enojes, el punto es que JinKi me aceptó fácilmente y el era pare de tu grupo de trabajo, así que después me aceptaste tu y JongIn…son buenos, pero mas tu…quiero decir, casi nunca hacía nada y no te importaba…bueno si te importaba, no me hagas esa cara, pero aun así seguías dejando que fuera parte de tu equipo, pese a que hacías todo.
—Bueno si quieres agradecer, supongo no hay de que…
—No, no es eso —Se pasó la mano por la cara un poco angustiado —Lo que creo es que te debo algo…
—Me has pagado ya todas las tareas que te he vendido.
—No, no me refiero a eso —Se retorció las manos antes de hablar —Pese a que JinKi es mi mejor amigo, no lo sabe, pero te lo diré a ti…mi padre era un hombre muy celoso con mi madre, no le dejaba tener celular, no le permitía que usara cierto tipo de ropas o que tuviera amistades…
—¿Por qué me dices eso?
—¿En serio me preguntas? No soy ciego, puedo ser un poco estúpido en la escuela, pero tengo ojos y se reconocer, desde el día que conocí a tu novio…
—En casa de JinKi, cuando fue por mi…dijiste que no te agradaba…
—Pude ver su misma mirada, desconfiada, su mano posesiva, yo no te había mas que tocado el brazo y se notaba que quería arrancármelo.
—Bueno, no lo es tanto…
—Luego vi la pelea con Kyu, como te sacó del gimnasio, no sin antes discutir por tu ropa, como casi no hablas con nadie, ni siquiera con JongIn, como pasas todo el tiempo pendiente del celualar o hablando por teléfono o mandando mensajes o como a veces no traes el tuyo, supongo es el de el ¿no es así ?
—El va a cambiar con el tiempo.
—Tae lo celos nunca disminuyen, pude verlo con mis ojos, cuando mi padre llegaba antes del trabajo para verificar si mi madre se había ido con otro hombre, como le revisaba el bolso o la ropa oliéndola…cuando mi hermana nació fue peor, le preguntaba si era de el o de su amante…—Sus ojos se llenan de lagrimas— El fingía tan bien frente a mis abuelos, éramos una familia feliz, nadie lo notaba, el era encantador y agradable.
—¿Qué pasó después?
—Con los años se puso mas feroz, mi madre caminaba con la mirada gacha cuando iba por la calle, no salía mas que con nosotros y solo si mi padre lo autorizaba, si a mi madre un vendedor o el cajero o un mesero se atrevía a sonreírle, desataba la furia de mi padre, la regresaba a casa…—Ahora llora —La golpeaba acusándola de tener amantes…yo le pedía que nos fueramos, pero ella decía que no, por nosotros, llegué a defenderla, pero solo empeoraba todo, hasta que una vez le golpeó tan fuerte, al otro día le dolía demasiado el brazo que le insistí en ir al hospital , estando ahí ella mintió como siempre…que se había caído…pasamos toda la mañana en el hospital, cuando regresamos, ella con el brazo enyesado, mi padre ya estaba en casa, molesto por no saber donde habíamos ido, la abofeteó y me metí, pero el me aventó y caí mal, me rompí la nariz, empecé a sangrar…ese día mi madre reaccionó…
—¿Lo dejó?
—Fue el inicio, mi padre se asustó, al llegar al hospital se sorprendieron por lo pronto que regresamos y con una nueva herida, pero esta vez ella dijo la verdad, lo arrestaron, el tiempo suficiente para que mi madre tramitara un cambio de escuela y la petición de custodia temporal , por la situación y un buen abogado que llegó a nuestras vidas, lo logró, mi padre estaba aun encerrado cuando 3 semanas después llegábamos a Gyeongju, por una tía de mi mamá, si íbamos con los abuelos el nos encontraría, el tramite del divorcio fue largo, pero mi madre nunca estuvo mas segura de hacer lo correcto, con el tiempor obtuvo la custodia completa y una orden de restricción por el juez, no volvimos a ver a mi padre y ahora vivimos tranquilos.
—Bueno mi novio, si es algo celoso —Pensé para mi que “Algo” no era la respuesta correcta —Pero jamás me ha golpeado, el nunca ha sido violento.
—Sabes, tuvimos que ir con el psicólogo, por todo lo que vivimos, mi madre era maestra cuando conoció a mi padre, pero después de casarse no le permitió trabajar, desde ese momento el violentó su vida, decidiendo por ella, la psicóloga le dijo a mi madre que la violencia no solo es algo físico, el le quiso quitar todo, pero ella era mas fuerte que el.
No pude evitar pensar en la insinuación de MinHo en que no fuera a la Universidad.
Se levantó sacudiendo el polvo de su pantalón, se limpió los ojos. —Ahora tenemos una buena vida, mejor, se que ella algún día volverá a amar, ella no quiere, pero espero que un día cambie de parecer. Solo quería que lo supieras…tal vez deberías pensarlo… ¿hasta cuando soportaras esta situación ?
Me quedé pensando, ¿Qué tanto era capaz de seguir soportando sus celos?
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Sacaba una cazadora para el camino, por si bajaba un poco la temperatura, aunque prácticamente era imposible, era un día caluroso, JongIn hacía un buen rato se había ido , últimamente pasaba muchas noches en mi casa, haciéndome compañía. Acomodé las últimas cosas en mi bolso, cerré la maleta, hoy viajaríamos a Ulsan, a nuestros dormitorios, no nos quedaríamos juntos porque era la universidad quien los asignaba, pero al menos estaríamos en el mismo piso.
—¿Puedo entrar?
—Estas adentro HaYii —Dije con ironía.
—¡Malo! No te veré en mucho tiempo y así me tratas.
Sonreí y me di cuenta que era cierto.
—Lo se, no tendras a quien molestar.
—Ni quien me preste mascarillas o me alacié el cabello o me preste de sus tratamientos para las manos…
Le aventé un almohadón mientras me acostaba en mi cana, ella me imitó.
—Estoy orgullosa de que pasaras el examen para la universidad.
—Lo se, debe ser lindo tener un hermano inteligente —Me regresó el almohadazo.
—¡Babo!...oye no has querido contarnos, tal vez deberías…
—No HaYii, saben lo que deben saber y eso es todo. —Me levante de la cama y ella me imitó.
Sabían que había terminado con MinHo hacia unos meses, pero no sabían la razón y les pedí respetaran mi silencio, no se volvió a hablar del tema.
—Esta bien, solo espero no te arrepientas, quiero lo mejor para ti—Dijo mientras me ofrecia una bolsa de regalo — Toma lo hice para ti —La abrí, había portarretrato con origami, tenia una foto, MinHo y yo en el centro comercial cuando fuimos con ella y SuHo.
—Lo se y te lo agradezco, se que es lo mejor. —Sonreí y me abrazó, ella tenia muchos deberes de la universidad y no iría a dejarme— Me dio un beso en la mejilla. Se levan
—Tae estamos todos listos… —Llegó JongIn corriendo a mi habitación.
—Bueno tu no eres muy listo Jonginnie —Le dijo mi hermana y el fingió morderla.
No pude evitar suspirar, voltee a ver mi cuarto antes de salir, vi la parte de la rejilla que aun cubría una parte de mi ventana, mi ex cinturón de castidad, la cama donde MinHo y yo hicimos el amor a escondidas de mis padres, una rana de peluche que el me había regalado para que me acordara de el yacia en el velador, una camisa de el colgaba en un perchero, el la había olvidado en mi casa después de ir a trabajar con mi padre.
Miré mi mano, vi la pulsera y el anillo, me los quité, los guardé en una cajita de un regalo de mes-aniversario que me había dado MinHo. Deslizarlos fuera de mi cuerpo dolía, vaya que dolía, pero debía dejar el pasado atrás.
JongIn debió darse cuenta porque sentí sus brazos rodear mis hombros —Estaremos bien, conoceremos muchos chicos lindos, nos faltan tantas cosas que vivir —JongDae hacia una semana se había ido a Seúl y habían terminado su relación.
—Lo se —Apagué mi celular lo guardé en el velador, mis padres me habían comprado uno de mayor calidad para la universidad, no necesitaba este, ni mucho menos era necesario esperar mensajes o llamadas que no llegarían para pedirme perdón o una promesa que cambiaría su comportamiento.
No me arrepentía de nada, gracias a el pude defenderme de los abusos de mis compañeros, me ayudó a entender que yo era hermoso, aprendí a hacer el amor y a disfrutar el sexo, aprendí a defender mis deseos aunque fueran opuestos a los de mis padres, asumí mi sexualidad ante ellos, el me ayudó a crecer como persona.
No cambiaría nada de lo que viví, a final de cuentas yo decidí que el decidiera por mi, no me quede con la duda del que hubiera sido si… lo viví, me equivoqué, pero esa era la parte de crecer.
Pero hoy, hoy empezaba una nueva fase de mi vida.