Cinco formas de emborrachar a Sasuke Uchiha (3)
By Yelmar Doker
3.- Borracho deschavetado
Lo primero que Naruto hizo al ver subir a Sasuke al autobús—que casualmente figuraba en la misma ruta que del Uchiha—, fue verlo con mucho detalle y sin disimulo alguno. Sasuke había tomado asiento en uno de los sitios desocupados que estaban casi en el fondo. Ocupo el mismo lugar que estaba a lado de la persona que más desagradaba al moreno. Rock Lee no era precisamente su persona favorita, pero siempre podía ignorar a éste. Sin embargo, el de cejas encrespadas no era precisamente una persona silenciosa... Más bien, todo lo contrario.
El blondo vió como le sonreia con su perfecta dentadura, y luego le guiñaba un ojo, como signo de compañerismo. Sasuke, por desgracia, malinterpreto éste gesto, y pensó que Lee intentaba coquetear con él. Más no le dió mucha importancia, porque no seria el primer tipo que lo hiciera. No obstante, Rock Lee tenia cero posibilidades de ser un buen candidato. Digamos que... no era su tipo.
Desde su posición, Naruto logró ver como la boca de Lee se movía sin parar. Eso significaba que estaba narrando una de sus grandes hazañas como alumno estrella del equipo de Karate. Sasuke no se veía interesado, pero fingia que le oia para no ser tan descortés seguramente.
En ese instante un avioncito de papel pasó volando por sus narices y se estrello frente a la ventanilla de su lado del autobús. Curioso, se agachó para recoger el avión y miró a todos lados para más o menos investigar de donde vino o quien lo había lanzado. Y allí fue cuando sus azules y expresivos ojos se toparon con los verdes de otra persona.
Sakura.
La chica tenia fama de ser una persona con mucho caracter, pero casi nunca hablaban debido a que tenia nulo contacto por los horarios de clase. Sin embargo, era muy bonita para si quiera imaginar que ella quisiera algo con él. La boca de Sakura formó una perfecta "O" y le señaló el papel doblado en sus manos.
"Leelo" creyó leer el mensaje.
Así que lo desdobló cuidadosamente y buscó la postura correcta para poder leer la perfecta caligrafía. Una alarma de peligro empezó a sonar dentro su cabeza. Sus manos comenzaron a temblar y apretar el papel a medida que su mente registraba cada palabra.
"Sé lo que tu y Kiba le hicieron a Sasuke-kun. Karin me lo contó todo y no me costo mucho llegar a esa conclusión. Que feo de tu parte, Naruto-Baka. Voy a contarselo todo a Sasuke-kun en cuanto lleguemos al instituto"
La cara de Naruto palidecio.
¿Qué lo sabia? ¿Que tanto sabia Sakura? ¿Le estaba hablando de la broma que le hicieron al bastardo hace tres dias? ¿Pero como supo que ellos fueron los responsables?
Mierda, Mierda, Mierda...
Si Sasuke se enteraba.... Si Sakura le contaba todo... Seguramente éste se enfadaria tanto que le daría un puñetazo. Pero aunque sabia que se lo merecia, y la promesa del golpe en si no le asustaba tanto... La reacción del Uchiha si que le daba miedo. ¿Que tal si se lo contaba a la directora? ¿Que pasa si se enteran sus padres? Eso si que sería un terrible problema...
Dios, tenia que convencer a Sakura para que no dijera nada.
***
Hace dos dias que había salido del hospital con un diagnóstico que lo dejó bastante desconcertado. Itachi y su madre le insistieron muchísimo para que se hiciera una revisión con el medico y de esa manera confirmar que no tuviera nada grave alojado en el estomago. Y él no pudo evitar pensar que ellos se preocupaban demasiado, y decidió por si mismo que iría mañana temprano. Pero un pequeño inconveniente frustró sus planes...
Durante la noche, a eso de las dos de la mañana, empezó a sentir nauseas, mareos, y un terrible dolor de cabeza que casi se sintió como si la cabeza le fuera a estallar. Fue al baño, cojeando, casi arrastrandose y arrodillandose delante del retrete para vomitar una sustancia verde amarillenta que le quemó la garganta y los órganos sensibles de la boca. No recordaba haber comido algo en mal estado para sentirse así de enfermo, pero la peor parte vino después.
Alarmado por los sonidos, Fugaku decidió ir a ver que demonios era aquel ruido que no le dejaba dormir. Sin embargo, al llegar al pasillo escucho fuertes golpes contra la pared del baño y fue allí para ver cual era el problema.
Una escena que le descompuso el rostro.
La ceramica del suelo estaba mojada, los productos de limpieza tirados en el suelo, el grifo del labavo abierta... Sasuke en el suelo, desmayado, sucio, cubierto de manchas verdes y rojizas, y con la piel tan extremadamente blanca como la de un difunto.
Fugaku se asustó. No pudo pensar en nada más que gritar el nombre de Mikoto y de su hijo mayor.
—¡Mikoto! ¡Itachi!
Cuando Sasuke abrió los ojos, estaba en una habitación completamente blanca, rodeado por su padre, su madre y su hermano Itachi. No habló por un largo rato, debido a que su mente estaba muy confudida y desorientada para pensar con claridad. Eso hasta que vino un médico y le explicó que había sufrido una intoxicación producto de un envenenamiento y le habian tenido que hacer un lavado de estómago.
Al parecer, encontraron restos de alcohol en su sistema sanguíneo.
—¿Que? ¡¿De que está hablando?! ¡Mi hijo no bebe! ¡Eso que dice es absurdo!
—Escuche, Señor Uchiha— el galeno dijo con toda la calma del mundo. Obviamente un poco nervioso por los gritos del hombre— los analisis no mienten. Hallamos un porcentaje no demasiado alto de alcohol en el menor. Pero esa no fue la causa del envenenamiento, creemos que se debe a otro tipo de sustancia que afectó a su organismo...
—¡Pero eso es absurdo! —interrumpio nuevamente Fugaku, negandose a creer que su hijo hubiese sido envenenado. No había razón para creer que alguien quisiera verlo muerto, ¿Y que tenia que decir su hijo al respecto? ¡Dios santo, si solo tenia 17 años!
Por otro lado, la mente de Sasuke ya había asimilado todo lo que había pasado en las ultimas horas. Desde el momento en que el dolor lo levantó a altas horas de la madrugada hasta que un fuerte mareo lo dejó inconciente en el piso del cuarto de baño. Y ahora estaba en el hospital, escuchando todo lo que el doctor le decía que le habían hecho.
Pero... ¿Un envenenamiento?
Ese mismo día, por la noche, Sasuke volvió a casa. Los médicos le ordenaron guardar reposo por las próximas veinticuatro horas, y que el lunes por la tarde se le pasaría los efectos de los medicamentos que había tenido que tomar en el hospital.
Como llegó muy cansado, nada ni nadie le impidió que se fuera a dormir un buen rato, pese a que a aún era de día. Pero al día siguiente no se salvó de las preguntas insistentes de sus padres, incluido las de su hermano mayor. Ellos estaban tan preocupados que su madre evaluaba la posibilidad de contratar a un guardaespaldas que vigilara a su hijo. Pero Fugaku e Itachi pensaron que aquella idea era un tanto descabellada, para alivio de Sasuke.
¿Entonces que más podrían hacer? Era el menor de la casa, y a los mayores les daba miedo que algo malo pudiera pasarle. Mikoto no concebia su vida sin sus dos hijos.
—Lo mejor será que te vayamos a recoger al instituto todos los dias—sugirió el patriaca del hogar—No podemos arriesgarnos a que algo malo te vuelva a pasar. Pero Sasuke, ¿de verdad no tienes ni una mínima idea de quien puede querer hacerte daño?
"Claramente no lo sé— pensó, harto de sentirse el centro de atención en casa — si lo supiera, yo mismo me haría cargo de encontrar la maldita raiz de todo este problema"
Miró por la ventana. Faltaba poco para llegar al instituto.
***
Naruto no era estupido. Sakura no podía haberle mandado aquella nota si no quisiera que se preparara para hacer algo. La pregunta era, ¿Porque decirle lo que sabia, si de todos modos iba a delatarlo? Porque eso haría, ¿verdad? O acaso... ¿Sakura quería algo a cambio para que mantuviera cerrada la boca? No le gustaba mucho la idea de que le chantajearan, debido a que no le gustaban sentirse presionado. Pero... Tampoco quería meterse en mas problemas.
Así que decididamente bajó del bus y tomó a la chica del brazo para guiarla a otro sitio mas alejado de las demás personas. Para ésa conversación necesitaban algo de privacidad. Afortunadamente, Sakura se dejó llevar y no puso resistencia alguna. Eso confirmaba sus sospechas de que ella queria algo de él.
Dieron una vuelta y se internaron en los jardines de la escuela, donde no había ni un solo alumno rondando por allí. Naruto y Sakura se miraron fijamente a los ojos.
—¿Y...? ¿Que es lo que quieres?
Fue directamente al grano, se sintió algo nervioso por la cara inexpresable de Sakura. Nunca la había visto tan seria, y eso que no eran muy amigos que digamos.
Pasó un largo momento antes de que ella contestara.
—Lo que Kiba y tu hicieron no tiene nombre, Naruto.
Inevitablemente, sintió como las mejillas se le calentaron. Sabia que ése sonrojo se debía a la vergüenza.
—Uh, yo...
—Sé perfectamente que no aprecian a Sasuke-kun, y que por ello lo hicieron— los gestos de Sakura se volvieron agresivos. Naruto dió un paso atrás —. Sin embargo, tengo entendido que tu sueles asistir a las mismas clases que él.
—¿Emh?—meneo la cabeza, sintiendose confuso— No lo entiendo... ¿Que tiene que ver eso con lo que escribiste? De todos modos vas a decirselo a Sasuke, ¿cierto?
—No, no lo haré — sonrió. No era una sonrisa confiable. Naruto empezó a sudar.
—¿Puedo preguntar entonces porqué...?
—Quiero tener una cita con Sasuke-kun, y quiero que tu me ayudes—le cortó.
La boca se le abrió enormemente. Sakura se sonrojó, pero la sonrisa no desapareció en ningún momento.
—¿Eh?
¡¡¡¿Eeeeeh?!!!
***
Naruto no podía dejar de darle vueltas a todo lo que Sakura le dijo hace solo unas horas. Estaba en la hora del descanso, caminando, y no podía quitarse de la cabeza la información que recibió hoy en la mañana. Es que era tan... ¡¿Sakura pretendía que él la ayudara a salir con Sasuke?!
Eso era tan ridículo como pedirle que le ayudara a cuidar a su perro los fines de semana. Él era tan malo cuidando de las mascotas como yendo de celestino por el mundo. Arg, no quería pensar más en ello. Odiaba el solo hecho de imaginarse a Sasuke teniendo una cita romántica con ella. No estaba seguro del porqué, pero algo se le retorcia en el estomago cada vez que los imaginaba en ésa situación. Pero si no aceptaba...
Sakura hablaria.
No tenia opciones. Y por esa misma razón había cedido a sus chantajes. Que bajo has caído, Naruto. Se dijo a si mismo, mientras se colocaba su bata blanca para su siguiente clase de Química. Hoy le tocaba laboratorio.
Cuando llegó dentro del aula ya estaban todos, o casi todos. Vió a Kiba conversando animadamente con Shikamaru, Shino y Chouji. Ino y Hinata estaban teniendo una plática amistosa con Suigetsu, quien se las jugaba de galán. Por fortuna, no vió a Sakura por ninguna parte, y eso le hizo suspirar por segundos. Era un alivio no encontrarla allí, suponía que los nervios le traicionarian y se le saldria la lengua. No era muy extraño que metiera la pata en situaciones como aquella.
Juugo y Sasuke se encontraban en una mesa de laboratorio en el fondo, con expresiones serias y tranquilas. Lo normal era encontrarlos asi, ya que según sabia Juugo tenia un transtorno de bipolaridad. Nadie se metía con él, porque sabían lo terrible que podía llegar a ser si se enfadaba. Probablemente era Sasuke el único que no le temía a sus ataques de bipolaridad. Y solo por eso las chicas como Sakura pensaban que el bastardo era cool. Era algo que Naruto no podía soportar.
Finalmente tomó asiento junto a Shikamaru y luego de unos minutos llegó Anko, la profesora de Química.
Ella fue bastante parca y poco detallista en dar explicaciones. Con un marcador de agua anotó un compuesto en el pizarrón y dijo que las primeras cinco personas obtendrian la máxima nota y los demás una nota del 20 por ciento. Eso hizo que más de uno se apresurara a realizar la tarea asignada con celeridad. Obviamente, los "nerds" tuvieron mas oportunidad y fueron mas rápidos. Como el trabajo era individual, Anko se aseguró de que nadie estuviera copiando o haciendo trampa. Quería ver quien de todos esos mocosos era el más aplicado en su materia.
Y vaya sorpresa, Sasuke Uchiha fue el primero en terminar. Anko evaluó la formula junto con el tubo de ensayo y determino que estaba bien hecha. Fue el primero en obtener la máxima nota. Luego le siguió Shikamaru, Hinata, Juugo y Shino. A los demás automáticamente se les asignó un puntaje bajo, como un premio de consolación por su esfuerzo.
Kiba y Naruto tenian una expresión de pura frustración en sus caras. Ellos eran los que pateticamente no habían acabado si quiera. El castaño se puso celoso al ver que Sasuke fue el primero en terminar, le hervia la sangre cada vez que el amargado se quedaba con todo, incluidas las notas más altas. ¡Era simplemente insoportable!
—¡Kiba, creo que ya me salió!
Naruto, por el contrario, seguía intentando llegar a la formula correcta, aunque el tiempo se hubiese terminado ya. Era mejor concentrarse en esto que en la propuesta/chantaje de Sakura. Kiba ni siquiera le prestó atención, estaba más ocupado ideando una forma de 'vengarse' de la buena suerte de Uchiha.
Entonces se le ocurrió un plan.
Con una sonrisa perversa, vertió algunos compuestos en un tubo y luego hizo hervir la sustancia con ayuda de un cerrillo. Puso una banda elástica sobre la boquilla del tubo y esperó a que ésta se inflara como un globo lleno de agua. Finalmente, en el tubo no quedo ni un rastro de fórmula.
Guardó la banda elástica en el bolsillo de su bata y esperó a que éste se enfriara.
—Hey, Naruto— éste giró el cuello para mirarlo con un claro signo de interrogación — ¿podrías hacerme un favorcito?
—¿Mm? ¿Cual?
—Dale ésto a Sasuke, ¿si? — sacó la banda del bolsillo, ante la mueca ceñuda del rubio— Ten cuidado.
—¿Y que es?— cogió el globo en sus manos, tratando de ser cuidadoso.
—Emm.... Es para que se le pegue el flequillo a la cara— mintió, inventando una nueva broma para que Naruto no pudiera sospechar.
—¿Ah? ¿Quieres que le de ésto ahora?
Naruto no sabia que clase de broma era eso, pero le parecia muy simple para alguien tan bromista como Kiba. Pero si el flequillo de Sasuke se le pegaba al rostro... Eso seria divertido de ver, aunque aún no entendía el funcionamiento de la cosa que tenia en la mano.
Pese a ésto, lo haría.
—Ok.
—Excelente, viejo. Solo tienes que ponerselo en la cara, muy cerca, ¿entiendes?—le explicó, y Naruto era lo suficientemente ingenuo para no sospechar nada.
Fue al lugar en donde Sasuke platicaba con Suigetsu y Juugo. Se paró frente al moreno y le tendió el globo justo delante de su cara. Uchiha dejó de hablar en ese momento, le miró y frunció el ceño al no ver muy bien lo que prácticamente se le restregaba en la cara.
—Tsk. ¿Que haces aquí, Dobe?
—Dice Kiba que... — pensó el algo rápidamente —... Le ayudes con ésta cosa. Es su creación y quiere preguntarte si lo hizo bien. Ya que tu... Pues, eres el mejor de la clase.
—¿Y que es...? — cogió la especie de pelotita y la agitó dos veces. Había algo adentro, aunque no sabria decir si era agua o gas.
Naruto trató de aguantarse la risa. Se suponía que eso estallaria en su cara, ¿no? Solo esperaba que no le entrara por los ojos, ya que eso seria un poco problemático.
—Veamos... — Sasuke apretó ligeramente.
¡CHAzzzz!
La pelota estallo, si. Pero no paso nada extraño. Tanto Naruto como Suigetsu y Juugo lograron percibir un olor un tanto espeso, algo que les resultaba familiar. Pero no lograban identificar qué.
Sasuke, por otro lado inhaló el extraño vapor que salió del globo sin darse cuenta y que nadie más logró ver debido a la posición de la luz que entraba por la ventana. Fue solo cuestión de segundos antes de que su cabeza rebotara contra algo duro. Cuando se dió cuenta ya estaba en el piso.
Ruidos, ruidos, y mas ruidos.
—¡Aah!
—¿¡Sasuke!?
No hubo dolor, solo un profundo desconocimiento de lo que pasaba a su alrededor.
—¡Mierda, ¿que diablos le hiciste?!— Suigetsu bramó, sorprendido por la inesperada forma en que Sasuke se cayó de su silla. Había sido como si lo hubiesen noqueado de un golpe, pero él mismo vió que nadie hizo nada— ¡Llama a la profesora Anko, Karin!
Sasuke dejó de sentir su cuerpo. En un primer momento no supo que había sucedido. Solo lograba oír ruidos, gritos... Y voces que no lograba reconocer. Sus ojos ardian y era incapaz de moverse. Ahh... Todo le daba vueltas...
Naruto gimió. Por segunda vez en su vida tuvo miedo. Dios, estaba temblando de miedo. Creyó que Sasuke estaba sobre actuando para asustarlo, pero éste no se movía, y a cada segundo que pasaba su cara adquiria una tonalidad mas oscura. ¿Se estaría ahogando? ¿Se había desmayado? ¿Estaba... ? No, porfavor... por favor...
"¡Dios, ¿que hice?!"
Y entonces pasó algo extraño. Sasuke reaccionó. Si, reaccionó.
Empezó a reírse. Se rió como un desquiciado. Automáticamente todo el mundo guardó silencio. Solo se podía oír de fondo la histerica risa de Sasuke.
Fue entonces que Anko, acompañada de Karin, entró al laboratorio. Vió la extraña escena de su mejor alumno siendo rodeado por los demás. Riendose escandalosamente sobre el piso.
—¡¿Uchiha?!
La respuesta de Sasuke fue una risotada mas fuerte que la anterior.
TBC