Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Danke por Melu102

[Reviews - 42]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Holu~ aquí viene Melu, dejando el capítulo número diecinueve con una adrenalina que no tienen idea XD

Esta es la primera vez que hago una escena de pelea, así que, sí quedó medio raro, les pido disculpas por la inexperiencia xd

En fin… Que lo disfruten~ 

Obres de un intenso color carmín se acercaron lentamente hacia ambos chicos, estos retrocedieron un paso con cautela y dedicación. La criatura dejó que la penumbra descubriera sus imponentes y afilados dientes, dando paso a la gran melena que cubría su cuello. Grandes patas de una textura de piel diferente, y una gran larga cola áspera y sin pelo, le dieron a Edward la seguridad de que aquello, no era un animal que conociese.

   -Quimera… - Expresó Alphonse poniéndose en guardia, acercando ambas manos para una futura transmutación. Edward imitó la posición de su hermano.

   La gigantesca criatura dejo escapar un gran rugido, saltando con una velocidad que ninguno de los dos hermanos esperó realmente, abalanzándose sobre ambos chicos. Edward y Alphonse se corrieron rápidamente hacia un costado, y le menor juntó sus manos con fuerza y las dirigió hacia el suelo, transmutando una gran púa que penetró a la quimera por el lomo de su espalda, ocasionando de que este diese un gran quejido de dolor, alterándose y dejando que su cola se desparramase por toda la extensión del lugar, golpeando a ambos hermanos y tirándolos unos largos metros más lejos.

   Edward transmutó una lanza en cuestión de segundos, lanzándola con gran habilidad hacia el ojo derecho de la criatura, quien intentaba desesperadamente quitarse la púa de la espalda. Otro gran quejido, esta vez más fuerte, alteró a ambos chicos allí presentes. Antes de que su cola los golpease nuevamente, Alphonse transmutó otra lanza, clavándola directamente en la extensión de esta, aprisionándola contra el suelo.

   El menor notó otra presencia detrás de su hermano, y en acto reflejo como los del pasado, se posicionó tras de él, protegiendo con su brazo derecho la mordida de lo que en la velocidad del acto, interpretó como una mezcla extraña de un mono y lobo. Al sentir el fuerte dolor en la extensión de su brazo, no pudo evitar apoyarse en la espada de su hermano, intentado contener un grito. Para Edward, que todo estaba pasando con demasiada velocidad, se volteó y al notal al escena con precisión, juntó sus manos con rapidez y furia, transmutando otra púa que se clavó directamente en el pecho de la quimera, ocasionando que esta soltase el brazo del menor y por la altura y velocidad con la que la púa crecía, este quedó aprisionado contra el techo de la caverna.

   -¡¡Al!! ¿¡Estas bien!? – El rubio se dedicó rápidamente a asistir a su hermano, son notar que la primera criatura con la que estaban luchando anteriormente se había liberado de su agarre. Lamentablemente, para cuando Al se dio cuenta de aquello fue demasiado tarde, una de las patas de esta tiró con fuerza a Edward a un lado de la caverna, haciéndolo chocar contra una de las paredes de esta.

   -¡¡Ed!! – Alphonse tomó gran atención a ambas quimeras mientras al mismo tiempo, rogaba que su hermano no se hubiese golpeado demasiado fuerte la cabeza contra la pared. –Cabeza… - Entonces una idea azotó su mente como un rayo. Juntó sus manos una vez más, transmutando una lanza y luego grandes pinches a ambos lados de la quimera. Se dirigió primero a la de la derecha, la  criatura se preparó entonces para cubrir aquel lado con dificultad, puesto que su lado derecho estaba lesionado por la lanza que le obstruía la vista, tuvo que girar completamente la cabeza para poder divisar alguna cosa, pero grande fue su sorpresa al notar que nada había en la extensión de tierra, entendió entonces que el chico le había hecho una rápida finta, dirigiéndose realmente hacia el pinche de la izquierda.

   Para cuando la criatura pudo darse cuenta, Alphonse se encontraba detrás de su espalda. La quimera se retorció de un lado a otro con dificultad, intentando desesperadamente quitarse al humano de encima, estiró su cola hacia atrás, golpeado fuertemente al castaño en la espalda, ocasionando que este soltase un quejido de dolor. Acto seguido, un fuerte dolor azotó directamente su cabeza, dejándolo completamente seco. Alphonse clavó la lanza anteriormente transmutada en el centro de su cabeza, directamente sobre su cerebro. Al notar que ya no se movía, soltó un gran suspiro, aliviado.

   Decidió entonces que debía seguir con la otra criatura, pero al subir la vista hacia el techo esta ya no estaba posicionada en donde antes. Giró entonces su vista nuevamente, esta vez hacia atrás de sí, encontrándose con la otra quimera quien había saltado sobre él. Alphonse se cubrió con solo un brazo puesto que con el otro se sostenía de la quimera, intentando inútilmente aguantar el golpe, pero un estruendo lo sacó de su posición de defensa, haciéndolo levantar la vista. Divisó entonces a la criatura nuevamente atrapada sobre el techo de la caverna, esta vez, con una extensión de tierra ensartada en su cabeza, nuevamente suspiró aliviado, girándose para ver a su hermano, quien estaba medio parado con ambas manos en el suelo.

   -¿Estas bien Al? – Preguntó Edward débilmente, el menor asintió sonriendo. -Qué alivio… - Dijo entonces, desplomándose estruendosamente sobre el suelo, alterando de sobremanera al castaño.

   -¡¡Nii-san!! – Expresó con preocupación Al mientras se bajaba a gran velocidad de la criatura. Corrió hasta donde se encontraba su hermano y se arrodillaba a su lado intentando sostenerlo entre sus brazos. -¡Nii-san! ¡Ed! ¡¡Edward!! – Un gran mareo le pescó de repente, haciendo que todas sus fuerzas lo abandonasen, con fuerza miró la espalda de su hermano, la cual se encontraba completamente llena de sangre, sus pupilas se contrajeron llenas de preocupación y desesperación por igual, tres grandes marcas de garras quedaban totalmente estampadas en la espalda del mayor. –No… ¡No! ¡¡Despierta Ed!!

   Las lágrimas azotaban terriblemente el rostro del pequeño mientras la debilidad le azotaba terriblemente cada vez más fuerte. El chico no lo entendía, los golpes que había recibido no eran absolutamente nada comparados con los que ahora tenía su hermano. Su cabeza le daba grandes punzadas mientras el mareo se hacía más constante, Alphonse tomó a su hermano, abrazándolo con fuerza, intentaba moverse, pero simplemente no podía. Un dolor insoportable entonces azotó fuertemente su pecho, dejándolo sin aliento, dificultándole el respirar.

   -No… ahora no… Ed… ¡Ed! – El menor no tenía idea de que hacer, solo llamaba a su hermano, intentaba pararse, pero sus pies simplemente no respondían, ¿Podría ser tal vez que los dientes de aquella criatura tuviesen veneno? –No… - sacudió su cabeza intentando seguir adelante, arrastrándose penosamente en el suelo junto a su hermano.

   Un estruendo lo sacó de su concentración completamente, miró hacia arriba, encontrando lo que le pareció ser una mezcla entre un pájaro, que terminaba siendo una serpiente, bajó su cabeza, estaba totalmente perdido. Sacudió nuevamente su cabeza mientras la criatura se acercaba rápidamente hacia ellos. Alphonse juntó sus manos débilmente transmutando otra púa que insertó a la quimera en su cola, el mareo no le permitía asestar bien, por lo que la criatura se zafó fácilmente se du agarre.

   -No permitiré… que se acerquen a Edward… - Expresó el castaño mientras abrazaba con fuerza a su hermano, con lágrimas que no dejaban de salir de sus obres, juntó nuevamente sus manos, asestando esta vez, directamente en el pecho de la quimera. Sintió entonces un líquido recorrer por su nariz, al sentir el sabor del hierro en sus labios, supo que se trataba de sangre, el mareo y el dolor en su pecho, la falta de aire y las punzadas en su cabeza le obligaron a finalmente desmayarse, desplomando su cabeza en el cuello de su hermano.

   Más quimeras vinieron desde la penumbra anunciándose con fuertes rugidos, y un fuerte estruendo lleno de violencia azotó las paredes de la oscura caverna, dejando sentir en el ambiente, el final del intruso enemigo. 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).