Capítulo IX
Aquella tarde de Mayo, cierto forense de origen italiano consideró que haber cubierto dos turnos seguidos ameritaba una siesta épica, se dio un relajante baño de tina, pero no le entusiasmó tanto sin su peliceleste; por tanto poniéndose ropa cómoda y holgada se rindió al sueño en el momento en que puso la cabeza sobre la almohada. Ese hubiera sido su día de no ser que en pleno sueño sobre sectas que le rendían culto a una piedra con cara, sintió las caricias de su sueco favorito… contestó alguna incoherencia poco importante antes de que Dita usando la más suave de sus voces lo comenzara a traer de vuelta al mundo de los despiertos…cuando terminó de abrir los ojos afuera era de noche, y cuando tomó noción de su entorno con mayor precisión se vio entre un catatónico Shura y un contenido Dita, el primero a su izquierda echado boca arriba con sus manos cruzadas sobre su vientre mirando el infinito, y el segundo arrodillado a su diestra, con los ojos brillando inusualmente.
- Esto es genial, me ahorro las visitas- bromeó con voz ronca terminando de desperezarse.
- Y trajimos cena, nadie tiene ganas de cocinar- acotó su esposo
- Y Shura murió a las…- comienza a bromear desordenándole el negro cabello (aún más).
- Como a eso de las seis, dita trajo mis restos- la respuesta de Shura lejos de ser agradable parecía que había salido de una tumba abierta.
- Buen, asumo que esta visita no tiene que ver conmigo, ¿podemos comer para invocar el alma de Shura?- agrega buscando la cena con la mirada
- No vamos a comer en la cama mi cielo…- Dita le habló dulce pero recargando las consonantes al final y mirándolo con el rostro que podríamos clasificar de “cautela”.
- Tengo tres meses de embarazo, y no tuve síntomas- Shura intenta no mirar a nadie al decirlo.
Se hace un silencio inusual en el cual el peliceleste le da un apretón cariñoso en el brazo al español, Ángelo termina de intentar sentarse bien en la cama y con una expresión inusualmente seria, como la que usa cuando asusta a los practicantes con una charla sobre reglamentos recién inventados y disfruta ver como se encogen en la sala de la morgue.
- Ahora entiendo, debió ser algo impactante que ni siquiera viste venir- se cruza de brazos- pero era lo que más querías así que los detalles son secundarios…-enfatiza en el último punto con total solemnidad- felicidades…
Llega un punto en que sus interlocutores (Shura despabilándose y Dita orgullosísimo)… cuando el mismo italiano suelta una carcajada.
- ¡¡¡¡LE PODREMOS DECIR SABROSHURITA Y VESTIRLO COMO TU!!!!!!!!!! JAJAJAJAJA, SIIIIIIIIIIIIII, ¡momento de ver fotos! ¿te mostré las de la primera comunión?
Los pasivos interlocutores pasaron de la incredulidad, a la sorpresa, y de alguna forma pareció natural no intervenir para así poder juntar las tres cabezas a mirar las fotos de la infancia de Ángelo y Shura, tanto las que conservaron de sus familias como las que les sacaban esas “estúpidas monjas”.
Así pasó una media hora, donde Dita se derretía por ver a esos mini delincuentes en el mayor estado de inocencia imaginable, Shura salió del todo de su letargo y cuando su estómago sonó el matrimonio Lindberg-DeSantis no dejó pasar un momento más sin arrastrarlo al comedor, sentarlo, e impedirle hacer cualquier cosa que no fuera mirarlos ir y venir con platos, vasos y cubiertos mientras aseguraban que era la última vez que comían algo que no fuese elaborado por alguno de ellos, entre risas le contaron a Ángelo la cara de horror que puso la cabra cuando, saliendo de la consulta de Mu, recordó que fumó cannabis una vez con Dita y Camus. Mu estuvo tentado de reírse por el pánico que el español estaba experimentando, pero se contuvo y le dijo que una vez no es nada, que es una planta inofensiva, y que Dita jamás cultivaría algo mal así que se puede ir con calma.
- Lo bueno es que decidiste no beber después del cumpleaños de mi flamante pecesito, ¡Salud!, por la mini cabra y el embarazo menos vomitado- pidió Ángelo
Los tres rieron, brindaron (Shura con jugo, pero en copa, otsea), hablaron de futuros controles médicos, de la ecografía del mes siguiente (no accedió a hacérsela el mismo día porque estaba en shock), bromearon sobre nombres que rimaban con sabrosura (que no existen asique imaginen las idioteces) hasta que finalmente Dita no aguantó más y se levantó a abrazar a Shura emocionado, ya que éste confirmó que ellos eran los padrinos.
- Espera…- recuerda el italiano- ¿en las cláusulas con tu donante, está considerado el si es o no obligación notificarle de esto?- y todo el alivio que había conseguido Shura, se evaporó.
- ¡Ángelo!- le recrimina el peliceleste.
- Pero es necesario saber dónde terminan y empiezan sus derechos, así se ahorran discusiones, malentendidos… de todas formas nos encontramos en el casino porque almorzó con Saga y me pidió disculpas por no sé qué de sus prejuicios, y me agradeció por haberle enseñado a Aioria a ser más rudo, estuve de acuerdo con él sobre todo en lo último: ¿te imaginas a ese Aioria mimado lidiando con la realidad…sin nosotros?, yo hubiese…
- No- cortó el pelinegro- no hemos acordado nada… es que se nos hace muy difícil hablar, es como que me aturde y sólo sirvo para coger cuando estamos solos…yo…- se cubre la cara- he sido muy irresponsable con eso, estaba tan metido en el trabajo que jamás se me ocurrió comprar un test de embarazo… he dormido menos aunque ahora entiendo porque siento el doble cansancio, sobre todo el último tiempo…lo que me mortifica es que no soy capaz de decírselo a Aioria aun, y esto es lo peor: me van a creer el peor ser humano, pero… aun siento que esto le está pasando a alguien más no a mí, aun no asimilo que tengo a alguien creciendo dentro, no he querido tocar la zona de mi vientre donde podría estar, aunque intento recordar, olvidé completamente como se ve un humano en el tercer mes de gestación… ¿ya puede escuchar lo irresponsable que soy? …. Sé que nadie que me conozca esperaría esto de mí… pero estoy a la mierda de asustado, ¿si lo pierdo? ¿si lo hago mal?...
- Shhhht, bambino, acá estamos nosotros que sabemos menos que tu del tema y tu jamás descuidarías a un ser humano… sobre todo ahora que sabes que existe, vamos a aprender contigo… y con Aioria
- Eso es lo peor porque y- inicia el español
- Ángelo está diciendo que no hay formas incorrectas, primero debes tomarte un tiempo (si gustas, a solas) para asimilar toda esta información, y solo ahí serás capaz. No hay un momento justo así que no comiences a culparte ahora…
- Aunque no lo crean…les haré caso en todo… para empezar me tomaré la mañana libre, Camus entenderá y nos pondremos al día en el almuerzo…y Shiryu también lo está pasando mal, le avisaré que tiene la mañana libre- dicho esto Shura se pone a mensajear a las personas indicadas en lo que el matrimonio comparte una mirada de mutua aprobación y se sonríen con ternura.
Con la cantidad de información por asimilar, fue casi increíble que el pelinegro cayera en un profundo sueño en el momento en que se acomodó en la cama de invitados, soñó que Mu vendía mangos a cambio de piedras en un castillo.
Cocinería La Maison, miércoles 14:00 hrs
- Pensé que no era adecuado invadirte con esas noticias ayer, te veías decaído- Camus estaba degustando animadamente su sopa de queso mientras se ponía al tanto con su colega
- Disculpa, creo que el estrés me está pasando la cuenta, quiero tomarme unos días para… pensar, por eso quiero que hoy dejemos acordado lo de la cena de inversionistas- Shura de momento prefiere omitir las “grandes noticias” y se sirve apenas una ensalada.
- ¡Por supuesto!, de hecho con el divorcio me queda una hermosa cabaña a dos hectáreas de la de Aioria, ¿me permites ofrecértela? Es un buen lugar de descanso, es muy tranquilo, te va a encantar- habla el francés mientras evalúa el postre.
- Wow, muchas gracias, aceptaré- dice el español fingiendo sonrojo
- JAJAJAJA, damisela aquí está la llave o lo olvidaré después… ahora: ¿que buscamos con asistir a la cena? Yo aún no soy socio ¿estás seguro que quieres que te acompañe?
- Por supuesto, estás preparado y lo que necesitamos es comenzar a relacionarnos con los nuevos inversionistas, yo soy ambiental pero necesito a alguien con tus conocimientos técnicos para dar un discurso más sólido, y esta cena es sólo la apertura, se vienen más en el año…pero con la de la otra semana debemos estar atentos.
- Entonces iremos, algo más de cóctel que formal…-
- Si, de hecho lo básico es que vean que somos los más capaces, sólo hay que saber cuánto hablar y con quien. Nada más… pero ahora cuéntame más de lo de Milo, no te contengas
- Es… perfecto… no hay drama ni dolor… me hace reír, es hermoso, me encanta, todos piensan que “debo corregir” su comportamiento, pero estamos lejos de eso, él no me fuerza a ser más extrovertido y yo no censuro su desplante…te juro que no tenía idea que una relación podía ser tan… osea…que podría disfrutarla tanto… con Surt tenía que pedir disculpas si me iba bien en el trabajo, si ganaba más o me elegían a mí en vez de a él para representar un caso…y Milo… él no se mete, no me juzga, se pone feliz si me va bien. Eso, estoy por primera vez disfrutando una relación.
- ¿Y Hyoga como se lo toma?
- Pfff, se aman, la familia de Milo lo adora, a todo esto, un primo de Milo irá a la cena, es psiquiatra y dijo que nos puede presentar gente
- ¿y qué hará allí? ¿promocionar su consulta?
- No, entiendo que tiene inversiones paralelas
- Es familiar de…
- No, es primo por su familia materna, no paterna.
- Mejor aún ¿quieres mi postre?
- No, estoy bien con el mío ¿te sientes mal?
- Es que lo siento demasiado dulce, quiero algo más como…mango
- Tú y tus adicciones jajaja
Estaban saliendo del restaurant francés cuando se encontraron con Shiryu y Shion, que lo encaminaba a la oficina
- Hola Shura, gracias por darme la mañana, dormir más me hizo bien
- Me alegro, de todas formas desde mañana estás a cargo de unas tareas, hola Shion- Shura caminó al lado del peliverde mientras Camus y Shiryu hablaban de otras cosas
- ¡NO!- dice Shion agarrando a Shura del brazo luego de mirarlo atentamente por segunda vez- ustedes sigan, ya los alcanzamos- le anuncia al par que se había dado vuelta a mirarlo.
- ¿Qué pasa?- interroga el pelinegro desconcertado por el actuar del mayor.
- He sido padre en más de una ocasión Shura Montés, y he atendido una cantidad obscena de embarazados… ¿Cuántos meses tienes?
Shura sintió que la sangre se le iba a los pies, esto era demasiado para el bajo perfil que necesitaba tener, sin darse cuenta se puso a hiperventilar nervioso, antes de encarar a Shion una vez más
- Tengo tres… y no me había dado cuenta… lo supe ayer por casualidad. Soy una vergüenza para estas cosas…
- Nada de eso, tuve casos en que fueron al hospital porque les dolía el estómago cada 30 segundos y terminaban saliendo bebés, no tienes que avergonzarte de nada… disculpa por abordarlo así. Tomate tu tiempo y descansa… no le debes nada a nadie…
- Aun no me atrevo a decírselo al padre…
- Todo a tu tiempo, ¡nadie te puede reprochar nada! ¿Qué? No me mires como si estuviese loco, meterla es fácil, pero el que gesta necesita vivir cada cosa a su tiempo, aparte porque te vas a apurar si ni tú lo has asumido ¿cierto?
- De hecho me tomaré unos días para terminar de convencerme, y dormir…
- Eso es excelente, porque será el momento inicial de la relación con tu hijo ¿o hija?
- No quiero saberlo aun…
- Bueno, el punto es que aunque no lo creas, lo que uno transmita ellos lo sienten, así que nada de presión, solo hazle saber que están bien… me alegro por ti, hay pocos lazos tan importantes como el que uno crea con los hijos… y aprovecha mientras aun eres todo su mundo… después crecen y se ponen de novios con tu archienemigo- prosigue Shion dramáticamente
- Tomaré todos tus consejos
- Ya, los dejo, despídeme de Shiryu y cualquier cosa que necesites no dudes en llamarme, hay información que no está en los libros ni en esa porquería de internet
- Créeme que lo tendré en cuenta, gracias Shion- comienza a despedirse Shura dándole una torpe palmada en el brazo antes que el ariano le dé un abrazo afectuoso y le desordene el cabello.
- Lo harás excelente, disfruta esos días…
Aquella tarde transcurrió tranquila, ajustaron los últimos objetivos de la cena de inversionistas, Pandora anunció que se iba en un mes de la firma par a viajar por Japón con su esposa, casi no sonó el teléfono, y finalmente Shura le entregó todas las instrucciones a Shiryu hasta el lunes siguiente.
Por primera vez desde que usaba teléfono móvil, Shura lo dejó en modo avión, condujo tranquilamente a la casa que Camus le había ofrecido (era muy fácil llegar) y pasó esos días entre lecturas postergadas, hizo unos leves avances con unos casos no tan urgentes, estuvo horas mirando la biblioteca del lugar, encontrando ediciones únicas de sus autores favoritos, cada tanto iba a caminar a la playa… donde la llegada del verano era más inminente. Cocinó con muchos vegetales (había un mercado pequeño a medio camino) y fue consciente de todo lo que probaba, intentó retomar algo de yoga sobre la alfombra del estudio, vio un par de comedias que no tenía a idea que le iban a gustar. Aun así jamás podría negar que cada tanto sin quererlo su mente se detenía en los recuerdos en los cuales Aioros hacía algo que lo desarmaba, como los besos después de hacerlo, las caricias cuando se estaba por dormir… finalmente se imaginaba un niño con sus facciones, luego una niña con su cabello… nada le desagradaba. Finalmente aquel domingo mientras estaba recostado en la playa se atrevió a acariciar ese punto en su vientre que tanto temía, y no fue tan terrible, fue en ese momento en que supo que iba a amar incondicionalmente a ese montoncito de células que el decidió traer al mundo…
- Prometo hacerlo bien…
-
Lunes, supermercado más grande del centro de Atenas, 19:00 horas
Cuando Shura estaba decidiendo que jugo de mango llevar a casa, que divisó la cabellera de un griego atrás de las manzanas, su corazón se detuvo cuando creyó que era Aioros, se calmó cuando notó que era Aioria… se volvió a detener cuando supo lo que se venía, y definitivamente se deprimió cuando Aioria le correspondió el saludo de una manera más que fría.
- Aioria lamento no haber estado el viernes yo…
- Da igual, esperaba que tuvieras cosas más importantes que hacer, pero cierto, tampoco estabas en tu oficina.
- No dejé de ir por culpa del trabajo…
- ¿Acaso tu pelea con Aioros es más importante?
- No… tu eres más importante… somos amigos y sé que te merecías ese reconocimiento más que nadie, eres genial con tus alumnos… y con la gente que te rodea- acotó para no sonar mal
- Como sea…
- Aioria por favor no te molestes conmigo…
- No dije que estaba molesto…
- Entonces…
- Shura te brillan los ojos… ¿vas a llorar? ¿puedes llorar? NO, no, broma, no llores
- No voy a llorar- contesta serenamente Shura al darse cuenta que estaba a punto de hacerlo (ahora se le ocurría aparecer a sus malditas hormonas)
- Te perdono, pero igual andaré algo distante para hacer notar que rompiste mi corazón, pero a medida que me consientas tal vez se me pase…- ahí estaba el Aioria de siempre, era orgulloso, pero no puedes serlo mucho tiempo con tu casi hermano que te vio crecer.
- Gracias…
- Ahora, si quieres un mega descuento en perdón, dime ¿por qué no fuiste a mi ceremonia?…
- Me tomé unos días de descanso…
- ¿tan mal estás? Nadie puede auto explotarse como tú, ¿pero estás mejor?
- Mucho mejor…- Shura nuevamente se emociona e inconsciente mete acaricia su vientre, por suerte Aioria estaba demasiado (es demasiado) distraído como para notarlo.
- Si…Aioria te quiero mucho, de verdad eres como mi hermano menor…
- Que carajos… ¿es cáncer?, dímelo, yo te voy a apoyar en todo el tratamiento, solo no sigas diciendo esas cosas ¿no ves que me preocupo por ti?- alega el león tomándole la temperatura con la mano
- Tengo tres meses de… tu sabes… gestación, carajo que no te puedo omitir nada pendejo infernal.
- ¿¡QUE?!, espera…- Aioria intenta recordar algunas fechas en su memoria antes de cubrirse la boca con ambas manos- ¡NO ES DE AIOROS!, ¿alcanzaste a recibir inseminación?
Shura le pega una palmada suave en la cabeza antes de reírse más aliviado y volver a mirar al castaño con reproche.
- Estoy calculando que lo concebí el día EN QUE TU NO ME AYUDASTE A PINTAR LA SALA, ¡¿ASI QUE QUIEN DEBE HACERSE EL OFENDIDO AIORIA AFKADIS?!
- Buen intento de chantaje, pero me va a decir que con esa vez y ¿ya?
- Exacto
- SEMEN AFKADIS, EL MEJOR!-
- Aioria… shhht-
- Aioros no lo sabe, y asumo que tienes buenos motivos para no haberle dicho aun
- Yo llegué anoche a la ciudad, y… quiero encontrar el momento indicado, no discutimos nada respecto a los límites de su paternidad ¿puedes guardártelo hasta que lo sepa?... hasta que yo pueda decírselo
Para sorpresa de cualquier persona que conozca al león, éste de forma muy serena sopesó la petición en su cabeza, terminando finalmente por darle un abrazo al pelinegro y prometerle que iba a respetar sus tiempos. Shura lo mira algo confundido y agradecido a la vez…
- ¿Aioria estás bien?
- Mejor que nunca, ¡VOY A SER TÍO!, Y ¿Qué ESPERABAS?, salir con Marín me hace empatizar con la lucha de los derechos de los gestantes, de hecho el próximo mes vamos a hablar de la paternidad responsable y el aborto tres causales en un taller…
- Soy fan de Marín, vengan a almorzar conmigo un día, estaré en la firma….
- Claro ¿viste que soy súper moderno y vengo a hacer las compras yo? De hecho no tengo problemas en que la elijan como presidenta del consejo, soy un ejemplo de macho con perspectiva de género.
- Que te autodenomines macho invalida tu….
- SHURA ESTOY TRATANDO
- Ok, lo haces genial, ¿puedo terminar de comprar tu perdón con un helado?
- DE DOS SABORES
- Y con bañado en chocolate
- Serás un excelente padre.