- come... Es una semilla del ermitaño- murmullos de voces se escuchaban a lo lejos mientras algo era introducido en su boca, alguien lo ayudaba a masticar, era algo cansado...
Lentamente fue abriendo sus ojos al sentir sus energías restablecidas, una figura que el bien conocía apareció frente a sus ojos, su corazón bombeo bruscamente, tomo su espada en un ágil movimiento y lo atacó, aun sabiendo que todo estaba perdido, sabía que moriría.
- ¿que te sucede Trunks? - gritó una voz familiar, cerro y abrió varias los ojos creyendo que todo era producto de su imaginación, aquel no era Black, claro que no, su vestimenta era naranja y su sonrisa lucia amable y bondadosa.
- ¡auch! - grito al sentir como era golpeado en la cabeza, volteando a ver de dónde venía el golpe - mamá.... - cayó de rodillas ante la peliazul evitando que sus ojos se cristalizaran mientras la rodeaba con sus brazos a la altura de la cintura.
-tsk- ese sonido basto para que se lograra estabilizar y se avergonzara de su reacción, pues su padre lo observaba con un gesto de fastidio.
Lo había logrado, el cielo no era oscuro ni gris, sino de un potente azul claro con una hermosa vista.
- mamá, ¿quien es él?
-Trunks, ¿tienes un hermano?
El ojiazul miro a dos pequeños que lo observaban con curiosidad, sin duda uno de ellos era el mismo, pero al otro no lo había visto antes, pero por el parecido, dedujo que era hijo de Goku.
- no, yo no tengo hermanos... Mamá, ¿que sucede?
-Trunks, guarda silencio- ambos voltearon a ver al peliflama- arggg... Trunks pequeño – corrigió.
- ¿se llaman igual? - el menor estaba totalmente confundido.
- ¡tu también silencio!
- si señor Vegeta.
- ahora tu, Trunks grande, explícate a que has venido – exigió.
- Vegeta ya cállate!, apenas llegó y ya lo estas presionando - gritó la ojiazul.
El peliazul simplemente se acerco al pelipalmera mayor y colocando sus manos como si estuviera rezando se disculpo por su comportamiento justificándose con que la última vez que lo vio había muerto en la explosión con Cell y procedió a explicar.
- en el futuro están pasando cosas terribles.
- no me digas que es Majin Buu - expresó el saiyajin mas alto.
- no, el supremo Kaiosama me ayudo, logre detener a Babidi y a Dabura antes de que Majin Buu despertara, lo peor sucedió después, un ser apareció dispuesto a exterminar a la humanidad, el día que ataco a la Tierra quise detenerlo, pero él es bastante fuerte, ese mismo día él se auto nombró.... Perdone por atacarlo, por un momento pensé que seguía en el pasado y que no había logrado escapar.
-no te disculpes jeje- dijo sin darle importancia al asunto.
- ¿a qué te refieres? Explícate - ordenó el saiyajin mayor algo impaciente.
-lo que sucede es que el día que se hizo presente el mismo dijo que era... Son Goku.
- ¿estás diciendo que ese tipo tiene la cara de imbécil de este idiota?
- ¡oye! Sigo presente - se hizo el ofendido, pero en verdad solo estaba conteniendo la risa.
- así es, pero con la diferencia que su vestimenta es oscura... En el futuro es mejor conocido como Black.
- que nombre tal ordinario- dijo la ojiazul cruzándose de brazos.
- ¿eh? Pero fue mamá quien dijo que le dijéramos así- contesto cabizbajo, lo más probable era que en estos momentos ya no estuviera con vida.
- ¡¡Trunks, mira, ya tengo dos tus y dos papas!! - grito emocionado.
- cállate- desvió su rostro - mamá, ¿ya me vas a explicar? - dijo ya irritado.
- ese muchacho apuesto que ves ahí eres tú en el futuro.
- así es, yo te conocí cuando eras un bebe- sonrió acercándose a los menores - pero a ti... No te había visto - poso su vista en el ojinegro - dime, ¿cómo te llamas?
- mi nombre es G... Goten - se sonrojo levemente - tengo 12 años (si estoy equivocada corríjanme, no recuerdo muy bien las edades en súper n.n')
- debes ser hijo del señor Goku - revolvió sus cabellos, ese niño le parecía lo más tierno que pudo haber visto mientras el pelilila lo miraba molesto.
- jeje - rio nerviosamente.
- ¡Goten! Vamos a jugar - el ojiazul lo tomo de la mano y se lo llevó casi a rastras.
- alguien esta celoso - la mujer reía tontamente.
- ¿por qué has venido arrastrándote como gusano? No me digas que decidiste huir.
- ¡Vegeta, déjalo en paz, aunque sea de otra dimensión sigue siendo tu hijo! Al igual que Trunks! ¡Vegito no es el único! Deberías ser como Goku! ¡El trata igual a Goten y Gohan como a Vegito!
- ¡eso es obvio! ¡A este cabeza hueca solo le importa tragar y entrenar! ¡Le da igual lo que suceda con sus hijos!
- ¡oye! ¡Claro que me importan! - Se defendió el pelipalmera.
- ¡tú cállate! - gritaron ambos.
- ¡Trunks también es tu hijo!
- ¡a mí me toco criar a Vegito! ¡¿Y quien dice que no me importa Trunks?!
- vaya, con que un viajero del tiempo - Wiss y Bills habían permanecido en silencio escuchando la conversación.
- así es, la máquina del tiempo es una creación mía - dijo orgullosa de sí misma.
- ¿eh? - el peliazul no los había visto, no podía sentir la presencia de ambos- ¿quienes son? ¿Y qué hacen aquí? - dijo desconcertado, ¿quien era Vegito? ¿A qué se refería su padre con criar?
- él es el dios de la destrucción y el otro el señor Wiss - contestó con simpleza Bulma.
- ¿un dios? - expreso atónito.
- si, cuando Bulma nos llamo nos encontrábamos entrenando en su planeta y decidieron venir a acompañarnos- explicó el de cabellos alborotados.
- ¿saben ustedes que es un gran delito manejar el tiempo a su antojo? - cuestiono el peliblanco con el semblante serio.
- ¿que?
- como oyen, eso se castiga con la destrucción - el gato sonrío malévolamente.
- pero yo no la construí, fue mi yo del futuro - dijo cruzando los brazos y cerrando los ojos.
-es lo mismo.
- ¡esperen! castíguenme a mi - rogó al de piel azul- discúlpela dios de la destrucción, fue mi culpa, mi mamá no puede volver a morir.
- ho ho ho, el dios es el de ahí, yo solo soy su sirviente - se burló al ver la reacción del gato.
- ¡¡niño insolente!! ¡Nadie se había atrevido a faltarme al respeto!
- perdone - suplicó con las manos juntas.
- ya dejen de discutir y tomen- de su bata blanca saco unas tiras de carne- son salchichas de pescado - se las daré si se olvidan de la máquina del tiempo - la mujer sonrió con suficiencia.
- por comida deliciosa lo que sea- asintieron de acuerdo.
-Trunks, ¿puedes pelear conmigo? Quiero saber que tan fuerte es Black - pidió el de cabellos alborotados con emoción.
- Kakarotto, ni se te ocurra destruir el lugar, que si despiertas a Vegito te tocará dormirlo.
- está bien Veggie, tratare de controlarme.
- ¡¡que no me digas Veggie imbécil!!
- pero anoche no te molestaste.
- ¡¡cállate insecto!! - gritó poniéndose de todos los colores.
- vámonos Trunks, si no mis hijos se quedarán sin papá - voló seguido del ojiazul a un lugar deshabitado, mientras los demás los seguían también.
- ¡ahora ataca!
- ¡¡está bien!! ¡Aaah! - su cabello azul se torno dorado y con menos mechones en el flequillo.
- con que el súper saiyajin dos... yo también ¡¡Aaaah!! - ahora el también lucia de dorado- ataca jeje.
- si- su expresión paso a ser seria y comenzó a pelear tratando de atinar un golpe.
- Bah... Tiene los mismos poderes que cuando peleo con Cell - bufó el peliflama - hasta Vegito es capaz de pelear a su altura.
- me gusta como se ve el Trunks grande- soltó con admiración el menor.
- ¿para eso dijiste que viviéramos? - si no vas a ver la pelea vamos a la casa.
- chiquillos dejen de estar diciendo tonterías, si se trata de quien se ve mejor claro está que ninguno de los dos.
-si señor papá.
- ¡¡que sea papá de Trunks y de Vegito no quiere decir que también sea tu papá!!
-pero Trunks es mi novio, Vegito mi hermano y usted el novio de mi papá.
-baaahhh, que allá aceptado que el hijo de un soldado de clase baja ande con mi hijo no quiere decir que tolerare todas sus tonterías.
-ya papá, déjalo en paz, es un tonto, no sabe lo que dice.
-tsk.
- ¡¡miren!! Mi papá se transformó en súper saiyajin tres.
- jeje.
- grrr - con su espada, el híbrido intento atacar al mayor pero para su sorpresa, el de cabellos alborotados logro detenerlo con sus dos dedos índices.
- dime, ¿ese Black es igual de poderoso? - regreso a su estado base.
- si - asintió imitándolo y colocando su espada en la espalda.
- jeje- miró a Vegeta que le sonreía con determinación - no habrá ningún problema - afirmó pero inmediatamente se puso alerta.
Del cielo surgió un agujero negro provocando que un fuerte viento soplará, de él, una figura muy conocida salió con una sonrisa muy arrogante y llena de maldad. Posó su mirada en cada persona que se encontraba presente, duro un poco más en el azabache menor pero rápidamente se enfocó en el guerrero que quería ver.
- SON GOKU.
- así que tu eres Black.
- viajaste en el tiempo, por eso tu ki desapareció sin dejar rastro... Una máquina del tiempo, con que de eso se trataba - con su mano formó una bola de ki y la mando en dirección a donde se encontraba la corporación cápsula provocando una pequeña explosión a lo lejos.
- Kakarotto - el peliflama voló hasta el pelipalmera - ya que no puedo matarte a ti, yo pelearé con tu copia.
- demasiado tarde, quien lo vio primero se lo queda jijiji- grito ya bastante lejos del príncipe.
- arggg- se cruzó de brazos.
- Black, pelea conmigo.
- la sangre guerrera de los saiyajin es admira, lástima que su sed por pelear sea su mayor defecto.
- sin duda ese no es Kakarotto, el no piensa y este s i- dijo con mofa.
- ¡¡te escuche!! - grito con el ceño fruncido - Black pelea.
- humanos insensatos... Está bien - sus auras de energía aumentaron, una era dorada mientras la otra era obscura y de color negro, sus puños se conectaron, provocando que ambos sintieran un hormigueo recorrer desde su palma hasta su antebrazo, todos los golpes eran así, llevaban el mismo daño que el otro, parecía que el combate se iba a alargar, pero el hoyo negro de donde había salido la contratarte del pelipalmera se fue expandiendo reclamando lo que era suyo, Black se resistía, no quería regresar, no aun, pero con un golpe en el abdomen que recibió por parte de el guerrero dorado, hizo que cayera dentro del agujero que al instante se cerro.
- dime Trunks, ¿es igual de fuerte que cuándo peleó contigo? - pregunto llegando hasta el peliazul.
- ... - solo asintió.
- ¡¡genial!! - gritó como si ya tuviera la batalla ganada.
- esperen un momento, ¿alguien más vio el anillo que portaba?
- es un anillo del tiempo, se supone que solo pueden usarlo los Kaioshin - aclararon la deidad y su ángel.
- ¿un anillo del tiempo? ¡¡Explícate!! - exigió el peliflama.
- ¡¡papá!! - un peliflama con dos mechones por flequillo vestido con el pantalón de un gi azul y una playera naranja de 5 años llego con una gran sonrisa a abrazar a su progenitor.
- Vegito, no me abraces - lo reprendió el príncipe - ¿que haces despierto? ¡Deberías seguir durmiendo! ¡¡Kakarotto, te dije que no hicieras escándalo!!
- Kakarotto no fue, fue una explosión – explicó.
- ya te dije que no me digas Kakarotto, soy papá - el saiyajin menor llegó con su familia.
- papá Vegeta te dice Kakarotto - se justifico.
- Vegeta...
- ¡¡no me mires insecto!! - desvío la vista.
- oigan, ¿alguien me puede explicar que ha pasado desde la última vez que los vi? - el ojiazul posaba su vista en el trío mientras los híbridos soltaban un suspiro y formaban una mueca de burla.