Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

EL MATRIMONIO DE OSOMATSU (OSOMATSU-SAN) por Neko Angeluss

[Reviews - 29]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

 

Cuando el reloj marco las seis de la mañana se levantó dirigiéndose a la regadera, ese domingo agradecía que tuviera el día totalmente libre, la noche anterior y la madrugada había acabado con sus deberes y aunque estuviera cansado estaba decidido, a partir de ese día vigilaría a Choromatsu, quiera o no descubriría que estaba pasando.

Al salir del baño se vistió con la ropa más normal que encontró sin ninguna tonalidad roja, no quería ser descubierto, algunas veces había oído que Karamatsu estaba pegado a él todo el día, podía sentirse libre de que el menor no lo descubriera, pero Karamatsu era otra cosa, por muy doloroso que fuera, no era idiota.

Al no tener coche camino hacia la casa, sabía que aunque no tenía que usar metro estaba retirado, cuando paso frente al subatta que apenas estaba siendo abierto vio a su hermano colocando el letrero del local, quiso hacer una prueba, acomodando la gorra gris que traía tapando su rostro lo mejor posible paso frente el chico sin que este se diera.

Sonrió por dentro, esto sería más fácil de lo que creyó, sabiendo claramente que el camino al hogar de sus hermanos se encontraría con el local donde trabajaba Jyushimatsu, solo volteo al lado contrario, ese día no se distraería con cualquier cosa.

Cuando vio a Choromatsu salir de la casa acomodo su gorra, se iba a acercar pero lo vio, Karamatsu salió de su hogar cerrando la puerta con seguro y hablaba algo que no podía escuchar con Choromatsu, le pareció extraño, ¿A dónde iban esos dos para salir tan precavidamente?

Los siguió todo el camino, no podía acercarse más porque sabía claramente que sería descubierto, pero no entendía, según recordaba, ese día ellos descansaban, entonces. ¿Porque iban hacia el centro de la ciudad?

Entonces los vio entrar a un complejo de departamentos, que el sabia ninguno de los dos tenía amigos por esa zona, más bien no tenían amigos, ¿porque entrar ahí entonces?, Osomatsu movió la cabeza, ese día estaba haciendo demasiadas preguntas y era el primer día, tomo asiento en una de las bancas frente a los edificios y espero.

Si tan solo supiera lo que estaba ocurriendo.

✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧

-Por fin te encontré Kuro, estaba tan preocupada-.La morena alzo al pequeño felino quien se acurruco en su regazo.

Jyushimatsu suspiro de alivio, aunque buscaron por tres horas habían encontrado al minino, cuando Ichiko volvió con el pequeño su teléfono sonó, un mensaje de su jefe lo hizo sonreír, aunque al pensar bien las cosas la sonrisa se borró.

-¿Que pasa Jyushimatsu-kun?-.La voz de Ichiko lo hizo salir de sus pensamientos, concentrándose en la chica.

-Nada, solo que mi jefe me dijo que era todo por hoy, así que tengo que dejar Cookie de nuevo en el local-.

-Si quieres te acompaño, me ayudaste a buscar a Kuro-.

-No quisiera interferir con tu tiempo libre-.

-No interrumpes, te sigo-.Y sin más caminaron hacia el local donde él trabajaba.

De una manera irónica las ilusiones de Jyushimatsu se estaban cumpliendo, pasar tiempo a lado de esa bella mujer era el más grande sueño de su vida, y se estaba cumpliendo, nunca imagino que tendría que agradecerle a ese cachorro por esos momentos.

Al llegar al local, metió a Cookie en su perrera y salió cerrando con llave el local, encontrándose con la sonrisa misteriosa de la pelinegra, amaba esa sonrisa, siempre se sentía atrapado por ella, incluso aunque podía fingir que no tenía dichos sentimientos, ella pudo ver el claro sonrojo en sus mejillas.

-Bueno ya que el pequeño cookie está en su jaula que te parece si vamos por un café-Las mejillas de Jyushimatsu se coloraron cuando ella hizo esa sugerencia.-Te obligue a ayudarme a buscar a Kuro, al menos puedo recompensártelo así-.

-¿Realmente estas segura que no te es un inconveniente?-.

-Claro que no, ¿Acaso te molesta mi presencia?

-¡Caro que no!-.Cuando se dio cuenta de su exaltación sus mejillas se sonrojaron mucho mas.-Solo que una chica tan bonita debe tener un novio con quien salir-.

--Te equivocas Jyushimatsu-kun, ninguna escoria quiere salir conmigo, así que prefiero pasar un buen rato con un dulce chico como tú, que con un idiota como mis amigos-.

A Jyushimatsu le sorprendió la manera tan mordaz que dijo lo último, no imaginaba que una chica tan linda tuviera una forma tan sarcástica de ver las cosas.

-Ahh lo siento-.En su voz se notaba un tono decepcionado.-Siempre quero dejar atrás a ese yo, pero nunca puedo dejar de decir cosas desagradables desde que era niña-.

Los ojos de Ichiko bajaron al suelo, odiaba esa faceta suya, ahora que conocía a un buen chico lo alejaba con ese tipo de palabras, sus amigas tenían razón, por culpa de esa boca sucia suya siempre los hombres se alejaban de ella, todos buscaban una chica linda y dulce, no una mujer sarcástica de boca sucia que ya no estaba en buenos años.

-Yo no creo que sea desagradable, en verdad me sorprendió, pero creo que es agradable cuando una persona es ella misma sin tapar nada de ello-.

Sus ojos se abrieron con sorpresa y sus labios se curvearon en una sonrisa, tal vez Jyushimatsu podría ser un buen amigo, que no la trate mal por ser quien es realmente, abrazando a su pequeño minino se acercó al hombre de suéter amarillo, quien aún sonrojado le miraba inquieto.

-Bueno si Jyushimatsu-kun me acepta como soy seguiré molestándolo por mucho tiempo-.

-Jajaja no eres una molestia en ningún sentido, realmente tienes razón, el clima es muy frio en la noche, vayamos por esos cafés, pero yo pagare-.

-¿Ahh?, ¿Crees que una mujer no puede pagar su propio café?-.

-Claro que no, solo quiero invitártelo yo-.

-Bueno solo porque eres tu Jyushimatsu-kun-.

Y así ambos lado a lado se encaminaron a la cafetería más cercana.

Jyushimatsu no podía sentirse más feliz.

✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧

Atsushi sabia claramente como se había dado su amistad con Todomatsu, sabía que sin importar como son las cosas ahora para el Matsuno el solo fue una billetera andante en el inicio, y a pesar de eso continuo siendo su amigo.

Siempre había envidiado la relación que el menor tenía con sus hermanos, a pesar de que se quejara él era testigo del gran amor que le tenía a cada uno de ellos, de cuanto podían hacerle falta cuando no estaban a su lado y de cuanto podía llenarse de felicidad cuando estaban a su lado.

El, alguien que nunca conoció el amor de hermanos tenia envidia, envidia de que Todomatsu tuviera alguien a su lado, con quien pasar los ratos de ocio, los buenos ratos y los malos, pero ese era el problema.

Sus ojos se detuvieron de nueva cuenta en el rostro de su amigo, aquel que cada domingo lo acompañaba enseñándole que a pesar del inicio su actual relación era sincera, una muestra de que no estaba tan solo en el mundo.

Cuando Todomatsu le conto sus sentimientos por el segundo hermano, algo en su cabeza reacciono, no de manera de repudio, ni asco, sino diferente, era algo que nunca había sentido, era como si...se sintiera amenazado.

En su perfecta vida nunca se sintió así, todo lo que el quería lo tenía en sus manos, todo lo que quería estudiar era algo sencillo, pero entender esas emociones ante las palabras de su amigo fue lo más difícil que él tuvo que experimentar.

-¡A-tsu-shi-kun, despierta!-Sus ojos se abrieron cuando las manos de Todomatsu aplaudieron frente a sus ojos-En serio, has estado así últimamente por mucho tiempo, ¿Qué es lo que ocurre Atsushi-kun?

El mayor solo sonrió, a pesar de que no era algo nuevo Todomatsu en verdad lo apreciaba lo suficiente para preocuparse por él, si tan solo el chico supiera que esto no era muy bueno para él.

-No es nada Todomatsu-kun, solo el trabajo me ha estresado demasiado esta semana eso es todo, ¿Me decías que Karamatsu-kun hizo?

-Ah sí, bueno te estaba diciendo que...-.

Desde hace mucho tiempo se había fijado en algo muy especial, Todomatsu quería olvidar a su hermano, pero...siempre hablaba de él, desearía ser un médico, un psicólogo que pudiera darle la mejor receta para olvidar al segundo pero, no lo era, y eso era algo que lo mantenía molesto.

El poder saber que era el amigo más cercano para el menor de los Matsuno lo hacía sentir especial, el siempre hacia lo posible por ayudar al chico, escuchar sus problemas y darle un consejo acerca de que podía hacer dependiendo de las circunstancias.

Pero el problema era el famoso Karamatsu, aquel que era dueño de los suspiros del menor, sus sentimientos y sus más grandes deseos carnales, muy dentro de él se preguntaba cómo era el tal Karamatsu, realmente era cierto lo que le decía acerca de lo guapo que era, o tal vez era el amor que cegaba a Todomatsu.

Así que se le ocurrió algo, un plan que aunque no sabía si era bueno o malo podría al fin hacer algo bueno para el menor, su sonrisa llamo la atención del Matsuno, quien divertido golpeo levemente su hombro, sin palabras Atsushi sabía lo que ese golpe significaba.

Así que hablo, ese plan podía ayudar claramente al menor o abrirle los ojos de una manera dolorosa, pero sería la manera definitiva en que Todomatsu podría avanzar, porque a diferencia del muchacho el si guardaría su mejor secreto.

Aquel que no se atrevía a revelar.

✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧ ✧

Choromatsu analizo a la mujer frente a sus ojos, no podía creerlo, pero por un momento sintió ver a su hermano mayor en ella, se tranquilizó, realmente estaba tan mal para llegar al grado de las alucinaciones, aclaro su garganta y saludo a la mujer.

-Bu-buenos días, es un placer conocerle Mutsugo-sensei-.Dijo con voz clara y manos temblorosas.

-Bueno, yo me voy, no te preocupes Choromatsu, puedes confiar en ella-.Y sin más tanto su hermano como la asistente los dejaron a solas.

-No tiene que estar nervioso Matsuno-kun, recuerde que aquí estamos en confianza, ¿quiere algo de beber?, ¿Agua, jugo, te?

-Agua estaría bien, gracias-.De una manera calmada tomo asiento como la doctora le invito.

-Muy bien-.De manera elegante se dirigió hacia un pequeño refrigerador de donde saco una jarra de agua y sirviendo en un vaso se lo entrego a Choromatsu.-Cuénteme de su día Matsuno-kun, ¿Cómo se despertó hoy?-.

-Supongo que bien-.La manera cortante en que Choromatsu le contesto la hizo suspirar.

-Usted está sufriendo por algo Matsuno-kun, ¿Qué es lo que en verdad le aflige?, yo no lo juzgare, tampoco pensare nada malo de usted, estamos aquí para ayudarlo, solo eso, confié en mi-.

Choromatsu miro sus ojos y encontró la sinceridad en sus intenciones, respiro profundo, la doctora tenia razón, el podía confiar en ella, por eso nadie se había enterado del lugar donde estaba, y por eso ese consultorio estaba en un lugar cerrado, con el simple objetivo de proteger al paciente.

-Vera-.Se decidió a hablar.-Hace más de diez años que he tenido esto muy guardado, siempre he sentido que esto es malo-.La doctora le miro con atención.-Yo tengo cinco hermanos, a todos los quiero por igual, pero-.Trago saliva.-Hay alguien a quien amo más que a cualquiera, mi hermano mayor Osomatsu, siempre fue importante para mí, sin importar que, siempre estábamos juntos, en esos tiempos todo era divertido, pero hubo un tiempo que...

Tomo el vaso de agua y bebió nervioso, la doctora se mantuvo en silencio mientras el joven se tranquilizaba, no lo presionaría, pero estaba entendiendo más la situación, a Chromatsu le era difícil hablar del tema, pero quería continuar.

-Cuando cumplimos 17 años llego el momento de graduarnos, ese día todos estábamos felices por lograr algo que pensamos que nunca cumpliríamos-.Rió un poco.-Llego el momento en que chicos y chicas estaban disfrutando de sus últimos momentos juntos, pero yo-.Apretó sus manos.-Me encontraba en el baño, sabia claramente que los demás estarían buscando a las chicas, así que me encerré en el baño, y con la ropa deportiva de Osomatsu yo...-.

Choromatsu escondió su cabeza en sus piernas, realmente no era fácil decirle esto a una desconocida, Osoko se acercó a él y palmeo su espalda dándole ánimos, en su carrera como psicóloga sabía claramente lo difícil que podía ser una situación tan delicada como esa.

-Cuando me di cuenta mis manos tenían mis fluidos igual que su camiseta, me sentí muy mal con ello, cuando llegamos a casa Osomatsu nii-san intento chocar su mano con la mía, pero lo rechace, a partir de ese día no podía acercarme a el-Osoko se sentó a su lado-¡Por Dios, somos hermanos!-.Osoko pudo ver las lágrimas salir de sus manos las cuales aún tapaban sus ojos.-Es asqueroso ¿verdad?

Choromatsu siguió con su relato, esta vez sin pausas y de manera fluida, cada cuanto Osoko hacia anotaciones, pero su rostro se mantenía totalmente inexpresivo, jamás pensó que esa mujer le diera la confianza suficiente para hablar del asunto más delicado que implicaba a su persona, cuando termino la mujer cruzo sus piernas y reviso sus anotaciones, ciertamente podía al fin sacar sus propias conclusiones.

-Veo que Karamatsu-kun es alguien muy importante para ti-.

-Sí, de hecho él fue quien me la recomendó-.

-Sé que esto es muy doloroso para ti Matsuno-kun, pero hemos empezado bien, lo que tú necesitas es soltar todo, absolutamente todo lo que Osomatsu-kun significa para ti, y cuando lo hayas hecho, sabrás tomar la decisión correcta-.

-¿Acerca de qué?-.

-Si caminaras hacia delante, o buscaras una última oportunidad-.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).