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Curando Un Corazon por Jessie Inuzuka

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-El pulso esta fallando.- le advirtieron nuevamente. 

-Bueno. Entonces empecemos.- Termino de lavar sus manos y colocarse los guantes.  -Que no haya pánico.- Naruto enfoco la luz clara sobre el lugar a intervenir. 

 

Estaba nervioso. Pero debía tomar una decisión rápido. ¿Esperar al personal calificado y dejar morir al paciente. O hacerlo el y arriesgarse cometer una negligencia medica y aun así perder a su paciente?. Debía arriesgarse. 

 

-Vamos a salvar a este chico a como de lugar.- Cálmate Naruto, respira tu puedes hacerlo eres el mejor. Se repetía así mismo en su mente.- ¿Todo listo?- 

-Entrando anestesia.- Dijo el enfermero. 

 

Justo en el momento que sedaban al paciente. Este sorprendentemente a pesar de estar casi muerto. Este abrió los ojos por primera vez. La Luz del quirófano le impedía ver bien. Sus ojos se perdían y movían sin control. 

Naruto miro aquellos ojos marrones. Hizo contacto con ellos por un momento alejándose de todo, como si el mundo de hubiera congelado. Congelamiento que se rompió cuando el sujeto desconocido tomo la mano del rubio. Como si se estuviera despidiendo, no importa que fuera de un extraño, como si estuviera preparándose para morir.  Luego de que lo logro o por el efecto de la anestesia que invadía su cuerpo cerro sus ojos y soltó el agarre de manos. 

 

Naruto estaba congelado. El sonido de las maquinas que empezaron a sonar enloquecida mente  lo saco del transe. 

 

-Se colapsa-

-Empecemos.- 

 

Naruto se puso en acción. Inicio la intervención. La sangre salía rápidamente. Luego de varios intentos fallidos, por fin pudo acceder hasta donde estaba ubicada la primera bala. Por suerte no se hallaba tan profunda. 

 

-Extrayendo.-  Pudo sacar la primera bala. -A perdido mucha sangre. Dos unidades de sangre.- 

-No sabemos que tipo es.- 

-No tenemos el tiempo para saberlo.- El rubio ignoro y prosiguió. 

 

Esto le aunaba un problema mas. Su paciente estaba desangrándose, ya había perdido bastante antes de llegar al hospital. Estaba prácticamente vivo solo por su aparente buen estado de salud fisco.  Pero aun así si, no administraban rápidamente sangre moriría desangrado.

 

La segunda bala estaba representado un severo problema. Esta estaba muy profunda y cercas del corazón. Un error por mas pequeño que fuera mataria al paciente. Solo una manos muy hábiles podrían lograrlo.  El quirófano estaba en medio de una atmósfera pesada. 

 

-Aquí voy.-

 

Justo cuando estaba por proceder y que parecía podrida extraer el objeto la calma fue interrumpida por el sonido de las maquinas.

 

-Es un paro al corazón. Debemos reanimar inmediatamente.- Le advirtieron al rubio. 

-No podemos hacerlo hasta que haya terminado.- 

-Lo perdemos-

 

El estrés invadió el cuerpo de Naruto. Solo tenia una oportunidad de salvar a este chico. Si fallaba moriría. En medio del sonido de las maquinas y de la sudorosa frente de Naruto. El sonido de algo metálico cayendo sobre una bandeja de acero inoxidable resonó por toda la habitación. Resaltaba un pequeño objeto color bronce junto a un segundo, con las mismas características. Ambas identificadas como balas. 

 

-Vamos a reanimar. Rápido resucitador.- 

El rubio no tuvo ni un segundo de respiro o alivio. Debía rescatar de un paro cardiaco a su pasante. Seria un milagro si este salía vivo. 

 

-Despejen.-  La descarga eléctrica sacudió el fornido cuerpo en la camilla. 

-Negativo- 

-Despejen.-

-Negativo. - 

-Despejen.- 

-No.- 

Cuando todos daban por echo que lo habían perdido. Naruto Decio intentar una ultima vez. 

 

-Despejen. Maldita sea.- Aplico la descarga.

 

Aquella ultimo descarga estabilizo el sonido de las maquinas. Esperaba que su paciente abriera los ojos. Pero no odia estaba sedado. Aun así el sonido de las maquinas le indicaba que lo había logrado. 

 

-Signos recuperándose.- El enfermero palmeo la espalda del rubio. 

 

-Bien. Hay que cerrar las heredadas del pecho.-  Se recargo en con carrito metálico y se dejo caer lentamente hasta tocar el suelo. 

 

-Un turno sencillo- Limpio el sudor de su frente, quitándose el cubre bocas.

 

Al parecer todo había resultado ser un éxito. Al incorporarse tomo una de aquellas balas y la observo. 

 

-Que diablos, ¿Como termino esto en el?-

 

Vendaban al chico y lo preparaban para ingresar a cuarto. 

 

-Debes llenar un reporte clínico.- 

 

-Que raro es el primero que hago. ¿También debería llamar a la policia?. Lo haré después.- el sarcasmo del rubio era cruel. Tomo los papeles.

 

Dio una ultima mirada al paciente que salía encamado por la puerta del quirófano. 

-Podría por favor llevarme los datos del paciente a mi cubiculo. Por favor.- detuvo a una enfermera.

-Claro.- 

 

El tuno de la noche casi estaba por terminar. Pronto amanecería. Tuvo la oportunidad de haber dormido unos minutos. Pero la adrenalina aun corría por sus venas. Y se sentía mas activo que nunca. 

 

-Una noche fácil. ¿Verdad?.- Sai se acerco. 

-No tienes idea.- El rubio sacudió su cabello. 

-Hoo si la tengo. He cubrido mas ese turno que nadie en este hospital.-

-Si claro, lo que digas.- 

-¿Ocurrió algo interesante?- 

-Impacto de balas. Cercas del corazón. Masculino, moreno, joven. Posiblemente pandillero. Ya sabes chico problemas.- 

-¿Y era guapo?.- Pregunto como si aquello no le sorprendiera. 

-Sai. Por favor.- 

-Los chicos como los describes tiene fama de ser muy ardientes.- 

-¿No puedes tomarte un caso clínico en serio?.- 

-No. ¿Y bien lo era?.- 

-No lo se, disculpa me por no fijarme. Estaba muy ocupando evitando que muriera. Pero, claro la próxima dejare que mueran de ataque al corazón y te diré si son lindos.- 

-No tienes que ser tan extremo.- 

-Ya bueno. Tenia un pecho ardiente ¿Contento?.- 

-Lo sabia.- Se burlo de lado. -Supongo que apoyaste  en primeros auxilios.- 

-No. Yo hice la intervención y la resucitacion.- Trono su cuello. 

 

-Tu. ¿Solo?- Sai miro a los lados. -Pero un interno no puede hacer eso. Debiste haber solicitado ayuda a gente mas experta.- 

-¿Que podía hacer? el tipo se moría y no había nadie que actuara.- se incorporo.  -Como siempre alguien no estaba hiendo su trabajo. Y no podía quedarme quieto y decirle “lo siento amigo no hay cirujano vuelva después”.- 

-Impresionante Naruto, impresionante.- Dio una palmada a su amigo en la espalda de este. -Literalmente ese tipo te debe la vida.- 

-No me debe nada Sai. Solo hice mi trabajo.- Comenzó a perderse en el pasillo. -Este seria un mejor mundo si todos lo hicieran mas seguido.- Grito alzando sus manos ya a unos metros de su amigo.

 


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