Buscó a su amigo con la mirada y lo encontró haciéndose mimos con Jonghyun, ese tipo que le parecía algo zafado; pero key sabría manejarlo, se metió en el baño mirándose al espejo, no lloraba pero tenía un nudo en la garganta que le fastidiaba, salió y se pidió una cerveza, él casi nunca bebía, mas la situación lo ameritaba.
-Hola hermoso- escuchó a su espalda, se le ocurrió de pronto que esa clase de tipos parecían tener un manual de frases clichés- ¿te apetece bailar?- dijo el tipo. El pelinegro lo miró, se parecía a Minho, tenía facha de ligón; sonrió irónico y dijo que sí.
Ni con todo su metro ochenta pudo apartar a la gente lo suficientemente rápido, la había cagado estaba muy seguro, buscó a su pelinegro por mucho rato pensó que tal vez se había ido, ojala hubiera sido así; pero no, ahí estaba Lee Taemin, el serio y decente Lee Taemin que tantas veces le había rechazado, bailando abrazado a Onew, pegándosele como un gatito en busca de calor, Minho sintió que el oxígeno se le iba, se le crisparon los dedos, todo fue muy rápido; solo escuchó dos golpes: su puño contra Jinki y Jinki contra el suelo.
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-Ya déjame rana- gritó molesto, Minho le arrastraba por el campus sin dirigirle la palabra. Llegaron a un BMW de color azul metálico y el alto abrió la puerta.
-Sube- sentenció, Tae abrió la boca para contestar- No me hagas repetirlo Taemin sube de una buena vez- cuando lo hizo, él subió y arrancó de una vez.
Llegaron a la residencia GREED, el pelinegro le seguía, mirando a todos lados con gesto confuso; pararon en el 132 y Minho abrió la puerta dándole el paso.
-¿Por qué me trajiste aquí?- dijo mientras se apoltronaba en la cama y cruzaba los brazos.
-¿Por qué te estabas besando con él?
- Y por qué te importa que me bese con…- Jilo? Jinli? No se acordaba- Jinri, y no nos estábamos besando.
Minho pareció cabrearse todavía más- ¡Es Jinki! Por Dios ni siquiera te sabes su nombre.
-Está mal que yo baile con alguien; pero si tú te besuqueas con Yuuri no hay problema eh?
-¿Estás celoso?
-No
-Ya, entonces ¿puedo besarme con quien yo quiera?- Tae sintió la boca amarga- ¿eso quieres? Que bese a otra persona, que la abrace, que la toque- le rozó la nariz.
Se sintió más pequeño que de costumbre, él no quería que Minho estuviera con alguien más, los ojos comenzaron a arderle y empezó a llorar
-¿Por qué lloras?
-No sé- era verdad, no tenía idea, se sentía confundido y frustrado.
Minho le abrazó con cuidado, envolviéndolo con su calidez, por primera vez se le podía acercar así, le olisqueó el cabello y sonrió, le dejó un beso en la coronilla para apegarlo más.
-¿De verdad te gusto?- dijo contra su pecho, el mayor sonrió con ternura y le apartó para mirarlo, pensó que se veía muy bonito así, como si le hubieran regañado.
-No- el otro hizo un puchero- te amo, me traes loco.
-¿Y vas al café por mí?- se sonrojó
-Venga Lee, creí que eras más listo- el pequeño le dio un empujón y rió
-Y si te doy una oportunidad no me vas a romper el corazón y hacerme llorar?
-Pero si ya estás llorando- le sonrió- prometo no romperte el corazón y prometo dejarle el título de ligón a alguien más ¿vale? Ahora que está claro,¿ puedo besarte ya? Porque de verdad me muero de ganas y hoy estas adorable.
Taemin se rió con ganas y se acercó al grandulón, cerró los ojos y presionó suave contra los labios de Minho, sintió tibio el estómago cuando le tomó por la cintura, le estaba besando suave y delicioso, pensó que no era mala idea darle una oportunidad al futuro ex-ligón
Minho le mordió el labio inferior y el otro soltó un quejido, le acarició con su lengua, la boca de Tae sabía a café, sonrió para sus adentros y pensó que si era así a lo mejor le agarraba gusto al café.
FIN.