Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Wasted Times por DudeDowney

[Reviews - 95]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

 

¡Perdón, en serio perdón! Les juro que traté de reducir el capítulo, pero aún así quedó bastante largo, y esté en especial no podía dividirlo en dos partes, les juro que los siguientes serán más cortos. Y bueno, lo subí hoy porque se portaron bastante bien, infinitas gracias a los que comentaron, tienen un lugar en mi corazón, y en el de Tony. 
Nota: ¿Recuerdan la parte de Toy Story 2, donde el señor cara de papa dice; "soy papa casada"? Bueno, pues recuérdenlo
Nota 2: Les recomiendo que busquen el salar de Uyuni, en Bolivia. Y de noche. 
Nota 3: Strangers in the Night es la canción que se usa, ustedes sabrán el momento de oírla. 

 

"And now I'm askin', who do you belong to now?

  Who you give that love to now?

      Who you pullin' up on?

Who you gettin' sprung for now?"




T'Challa, había salido casi tres semanas de Wakanda por unos asuntos que Steve desconocía, -Cosas de reyes- , era muy normal que hiciera esos viajes. Pero le habían informado que su alteza tenía asuntos urgentes que tenían que discutir en cuanto llegara a Wakanda. Dejando al rubio sumamente confundido.
Una semana después, había sido el primero en despertar, seguido de Wanda y Sam, que veían televisión y desayunaban. Los demás aún no despertaban o se habían ido a hacer algo mejor. Esa mañana le avisaron que el rey había llegado, y Steve se fue, ante la confundida mirada de sus amigos. Lo llevaron a una sala donde se supondría estaría su aliado.
Había un gran ventanal que dejaba ver el paisaje Wakandiano, como en la mayoría de habitaciones. Lo único que la adornaba era una mesa y dos asientos, una pequeña caja de paquetería se encontraba en la mesa
-Capitán- saludó el moreno entrando por una puerta que Steve no había notado.
-Su alteza- respondió, acercándose al otro para saludarse -disculpa mi atrevimiento T'Challa, pero, ¿ocurre algo malo?-
-Toma asiento, Steve- invitó sentándose -¿Cómo te encuentras?-
-Mejor que nunca- mintió Steve. A lo que el contrario sólo asintió, intercaló ambas manos y miró por unos segundos al Capitán, sin saber cómo proceder. Hasta que finalmente suspiró.
-Como sabrás, tuve que salir por un tiempo- decía algo incómodo -hace tres semanas, mientras resolvía unos asuntos pendientes, recibí esta caja... -El rey vaciló un poco, confundiendo aún más al contrario-... hace tres semanas, Stark me contactó -Steve dejó de respirar- y me pidió que te entregara esto -señaló con su mano la caja- no me dijo qué era, pero dijo que era importante. Como estuve muy ocupado, pude dar aviso apenas hace una semana, y me disculpo por eso-
-No tienes que hacerlo- dijo sin aliento, sentía que todo le daba vueltas.
El rey se levantó, posicionándose al lado de Steve, poniendo una mano en su hombro para llenarlo de confort -¿Estás Bien?- el otro sólo asintió la cabeza -Toma el tiempo que desees, si necesitas algo, no dudes en pedirlo- dicho esto, se dirigió a la salida, justo antes de abrir la puerta, fue llamado por Steve.
-Gracias- fue lo único que dijo el rubio, el rey sonrío y salió por la puerta, dejándolo completamente solo. Después de algunos minutos, Steve tomó la misteriosa caja en sus manos; ¿Será la señal que tanto esperaba? ¿Por qué Tony no le habló?.
  

                                                              ...

1 semana antes

Hoy era un gran día; era su primer aniversario con Stephen. Él no era de los que celebrara esas cosas, y mucho menos el hechicero. Por eso se sorprendió enormemente cuando este le insistió en que deberían hacer algo. Como Stephen se encargaría de todo, terminó cediendo.
Faltaban pocas horas para dicha cena, y Peter no se separó de él en todo el día, lo habían enviado para asegurarse de que no llegara tarde, y lo más seguro fue Stephen.
Esos dos habían estado más juntos últimamente y no es que no lo hayan hecho antes; en realidad se llevaban muy bien. Aunque el doctor siempre había sido una persona seria, a veces arrogante, y Peter era todo un hablador, la mayoría de lo que decía eran cosas sin sentido, también era muy sobre protector, es por eso que habían decidido no decirle a Peter de su relación hasta que Strange se lo ganara por completo, y éste se veía muy comprometido por hacerlo que hasta veía las películas que el menor mencionaba, tratando de sacar un tema, pero desde que empezaron su relación, el carismático chico se volvía serio con el doctor, dejándolo incómodo y confundido. Tony tenía que aguantarse las ganas de reír con cada fallido intento. Después de tres semanas de ser pareja, una mañana, Peter los "descubrió".

Tony se encontraba solo en el complejo, al parecer todos tendrían un ocupado día, y no le quedó de otra más que permanecer en su hogar. Se dirigió a la cocina deseando encontrar una dona y continuar con su ocupada labor de hacer nada, para su suerte, había solamente una. No pudo darle ni una mordida porque al voltear Stephen se encontraba ahí, logrando que diera un respingo.
-Demonios Strange, primero Vision, ¿y ahora tú? Definitivamente quieren matarme- dijo recargándose en la mesa y asegurando su preciada dona. Stephen sonrió.
-Necesitaba verte, tengo algo de tiempo libre- se acercó al castaño tomándolo del rostro, y susurró en sus labios -¿Estamos solos?- sonando como una sugerencia que Tony entendía, la respuesta que recibió fueron los labios del castaño. Sí, estaban solos.
De un momento a otro, se encontraban en el sillón más grande, Stephen los llevó con su magia y estaba encima de él-La cocina ya estaba "estrenada"-. No habían roto el beso hasta que el hechicero decidió atacar el cuello del castaño. Sostuvo las manos de Tony por encima de este con una sola mano, y la que aún quedaba libre acariciaba una pierna del genio, ambos se estaban dejando llevar.
-Hola, chicos- Tony inmediatamente reconoció la voz y se soltó del agarre, empujando al hechicero, que cayó al suelo estrepitosamente soltando un quejido.
-¡Peter! Se supone que estarías en la escuela- trató de no sonar agitado, viendo al menor buscando en la cocina. Un despeinado Stephen se levantaba del suelo y Peter finalmente dirigió su mirada a ellos, Tony se quería morir-
-Sí, bueno... es fin de semana. Lamento interrumpirlos, pero muero de hambre-
-No, no, descuida, Stephen sólo me ayudaba a... abrir... mi... ojo- vaciló y se arrepintió de inmediato, eso había sonado peor de lo que esperaba.
-Claro, los chicos de mi edad suelen "abrir su ojo" todo el tiempo- dijo irónico, pero sin pizca de estar enojado.
-Un momento... -dijo Tony, analizando a Peter, haciendo un gran descubrimiento- ¿Tú ya lo sabías?- preguntó, aunque sonó más como una afirmación.
-¿Que te ayudaba a "abrir tu ojo"? No, eso no era de mi interés -Peter rió y se cruzó de brazos- Pero de que estaban juntos, sí-
-¿Es por eso que estás tan molesto conmigo?- Fue el turno de Stephen de hablar.
-Oh no no no, señor Strange, siempre he pensado que es la única persona capaz de hacer feliz a Tony, ha tenido mi aprobación todo este tiempo, jamás estuve molesto con usted, bueno, un poco con ambos por no decirme y esa iba a ser mi venganza, pero era muy divertido ver su cara de incomodidad al tratar de hablarme que no pude parar, lo siento-
Stephen rió sin poderlo creer, -Ese niño es exactamente igual a su padre- pensó. -A Tony- corrigió de la misma forma. Jamás dejarían de sorprenderlo.
-Eran escenas únicas- dijo Tony burlándose de los intentos de su pareja- entonces, ¿estás de acuerdo?-
-¿Cómo no estarlo? cualquier cosa que te haga feliz, Tony, y el señor Strange es de mi agrado total -se dirigió al mago- Pero no se le ocurra hacerle daño o el amigable vecino araña no lo será tanto -dijo "amemazandole"- o-okey... eso no fue tan amenazador, pero queda advertido-
Este asintió sonriendo -jamás podría hacerle daño-
-Bien, entonces puede seguir ayudándole "a abrir su ojo", sólo no hagan mucho ruido- Stephen por poco se ahoga y Tony empezó a reír, hasta que vio que Peter se iba con su dona.
-¡Oye mocoso! -gritó y Peter salió huyendo- ¡Deja esa dona donde estaba! ¡Yo la tomé primero! ¡Estás muerto, niño!- fue detrás de él dejando solo al hechicero, los héroes que protegían a la tierra de las peores amenazas no eran más que unos niños.


Y ahí estaba ahora ese robadonas, hablándole y ayudándole a vestir un elegante traje que días antes Pepper le compró -aunque él pagó-. Rhodes los esperaba para llevarlos al lugar. De alguna forma, se ganó a todos sus amigos desde el primer momento. -Dr. Strange, ¿qué demonios nos has hecho?- suspiró enamorado, no lo admitiría, pero estaba nervioso.
Se oyeron unos golpes en la puerta y se escuchó la voz de Rhodes -Tony, debemos irnos en este momento si queremos llegar temprano-
Volvió a suspirar, sólo que ahora para soltar tensión -Es hora- le dijo Peter muy emocionado, Tony se extrañó un poco, pero hizo caso omiso y ambos castaños salieron, encontrándose con Rhodey, Pepper, Happy y Vision. Se despidió de todos, y le desearon suerte. Su mejor amigo y él subieron a su lujoso Tesla Roadster. El viaje fue muy largo, y era de esperarse, pues al parecer Stephen había escogido un lugar a las afueras de New York. Aunque el viaje fue muy placentero para Tony; en algún momento se permitió recordar momentos con su pareja, algunos se los contaba a Rhodey y otros eran más privados. El par había hablado de todo, incluso cantaron en algún momento. Hasta que pasaron de ver grandes edificios, una carretera algo solitaria, y finalmente sólo podían observar grandes árboles rodeándolos. Su amigo se estacionó en un punto donde no parecía haber nada.
-¿Acaso me trajiste aquí para asesinarme, robarte a mi novio y mi fortuna, James?- dijo bajando del auto y reuniéndose con él.
-No seas ridículo, sólo me iba a quedar con tu fortuna, pero ahora que lo dices lo otro no suena mal, aunque el doctor no es mi tipo, puedo hacer una excepción -Bromeó, y Tony le dio un ligero golpe -Sígueme-
Los hombres caminaron unos minutos más, Tony ya estaba impaciente, pero pronto logró visualizar una lujosa cabaña.
-Bueno, ahí está el gran palacio y la princesa está esperando-
-Espera Rho...- pero cuando volteó, el moreno ya no se encontraba ahí -Okey... está bien... hagamos esto- mientras más se acercaba, su corazón parecía latir con más fuerza, retumbando en sus oídos. Cuando estuvo lo suficientemente cerca, se dio cuenta de que no era una simple cabaña; era un lujoso restaurante. Se acercó a la persona que parecía ser la Maitre, y ésta, al verlo, terminó de acercarse.
-Señor Stark, un placer tenerlo aquí esta noche, acompáñeme por favor, su mesa está esperando- mientras se dirigían, la mujer hizo unas señales y muchos meseros se empezaron a mover por todas partes. Notó que las mesas eran bastante elegantes, con una iluminación muy tenue, y no había tantas personas, a lo mucho cuatro parejas, que no parecían notar su presencia. Salieron a una terraza donde sólo se encontraba una mesa con dos sillas y unas velas -esta será su mesa, póngase cómodo- justo cuando dijo eso, un mesero ofreció quitarle el saco, pero declinó con la mano - En breve traerán la cena, si necesita algo más háganoslo saber, por lo mientras me retiro-
-Gracias- dijo Tony, aún de pie observando a la señorita regresar al interior del restaurante, se acercó a la orilla de la terraza, la vista era muy hermosa, a su alrededor sólo se apreciaba el bosque, pero desde aquella terraza se veía a lo lejos los edificios de la gran ciudad que no dormía. Era un muy bonito panorama.
-Tony...- el castaño regresó su mirada a donde provenía la profunda voz. Sintió su corazón detenerse, retuvo la respiración sin querer, y abrió su boca embobado por la imagen ante sus ojos. Ahí estaba el gran Stephen Strange, con un elegante traje. Tony había visto al hechicero en ropa casual, -incluso sin ropa-, pero jamás lo había visto en traje.
-Strange, te ves jodidamente sexy- si no fuera porque estaban en un restaurante y a su pareja le haya costado bastante planear la cena, ya estarían haciendo cosas más divertidas. El otro soltó una pequeña risa, y él quería llorar, algo debió haber hecho bien para tener a ese mago como pareja. Se saludaron con un tierno beso.
La cena había sido fantástica, duró alrededor de dos hora y media, tenían una conversación bastante amena, recordaron varios momentos, cómo se conocieron, primeras impresiones, primer beso... Tony no pudo evitar mencionar la vez que Peter los descubrió, pero a pesar de todo, había sido el mejor año para ambos. Hubo risas, suspiros, pequeños besos y otros más largos, caricias, el castaño no desaprovechaba la oportunidad para recordarle a Stephen lo bien que se veía, y reclamarle que pudo haberle ahorrado dos horas de viaje si hubiera usado su magia. -Pero no sería especial- se defendía el contrario. Y tenía un poco de razón.
Después de acabar los deliciosos platillos que habían sido escogido con anterioridad, permanecieron un momento más en la terraza.
-Es tiempo de ir a un lugar más... especial-
Tony enarcó una ceja -¿sí? ¿Y qué sugieres?- dijo seductivamente.
-Nada de lo que te estás imaginando en este momento, Anthony -Stephen abrió un portal, ante un atónito Tony -Se han ido, nadie está viendo- dijo refiriéndose al personal, y el castaño relajándose se levantó de su silla.
-Sólo espero que no nos lleves a otra dimensión- dijo entrando al portal. Al contemplar el lugar donde había sido llevado, quedó totalmente boquiabierto, era impresionante. El oscuro cielo estaba iluminado por millones de estrellas, lleno de colores alucinantes, pero eso no era lo más impresionante; el suelo parecía no estar ahí, ya que se reflejaba la misma vista que el cielo le ofrecía, era como estar en el espacio, sólo que a diferencia de las traumáticas veces que había estado en él, está vez se sentía bien, y miró a la persona responsable de todo -creí que querías una noche "normal". Estar en otro planeta no es algo que suelan hacer las personas saliendo del trabajo-
Stephen rió por el comentario y la extasiada cara de su novio -Seguimos en la tierra, en el mismo continente-
-No es verdad- Volvió a mirar a su alrededor, y sintió unas manos que rodeaban su cintura.
-Bailemos- dijo Stephen volteando al castaño, Tony rió; no era nada nuevo, habían bailado un par de veces antes, pero ahí no podría haber música. Antes de que pudiera recalcar eso, como si de una película se tratase, una vieja canción empezó a sonar, sin poder averiguar de dónde venía, el hechicero tomó su mano derecha para levantarla, y la otra se posicionó atrás de su espalda, a la altura de la cintura. El castaño sonrío, y cedió pasando su mano libre en el hombro de su pareja, empezando a bailar suavemente. Y si Tony ya estaba más que estupefacto, conoció un nuevo nivel al escuchar que Stephen había empezado a cantar, su grave voz quedaba perfecto con aquella canción.


-"Strangers in the night, exchanging glances

Wondering in the night, what were the chances

We'd be sharing love, before the night was through?..."-

-"...Something in your eyes, was so inviting

Something in your smile, was so exciting

Something in my heart told me I must have you"-


Ambos habían permanecido mirándose a los ojos, tan cerca que sus narices rozaban, hasta que Tony recostó su cabeza en el hombro de su pareja. Observando el hermoso paisaje, en los brazos de Stephen mientras éste le cantaba. Y esa canción... esa canción decía exactamente cómo se sentían. Un sentimiento tan puro. Todo era tan irreal.

-"Strangers in the night, two lonely people

We were strangers in the night

Up to the moment when we said our first "hello"

Little did we know, love was just a glance away, a warm embracing dance away"-

Su última relación estaba más que perdida un año antes de que se desatara la Guerra Civil. Tony siempre había creído que las relaciones no eran lo suyo, y eso sólo le afirmaba que sería así. Pero llegó el hombre que ahora lo sostenía. Y todo ha estado perfecto desde el primer día en que cruzaron miradas. Volvería a pasar un millón de veces todo el tormento anterior sólo para terminar de la misma forma, al lado de Stephen.

-"...It turned out so right

For strangers in the night-"

El doctor no pudo seguir cantado pues fue interrumpido por los labios del castaño, la canción seguía sonando y ellos paparon de bailar. Era el lugar más impresionante que había visto en su vida -ahora el definitivo-, pero cualquier lugar donde estuviera con Strange, era perfecto.
Se separaron del beso justo cuando la canción terminó.
-Mayo de 1966, del álbum Strangers In the Night, lado B, originalmente compuesta por Bert Kaempfert, reescrita e interpretada por Sinatra- dijo Stephen, aún viéndose.
Tony lo miró extrañado, pero escuchó un "-mierda-" y volteó a un lado, sin separarse de Stephen.
Ahí estaba Rhodey dándole un par de billetes a Peter que miraba orgulloso a Stephen. También estaba Pepper, Happy y Vision, que hace unas horas vestían normal, ahora estaban vestidos elegantemente. -Dijiste que pondrías algo de Beyonce, Niño Stark- ese era Wong, él vestía sus típicas ropas -Un día escuchó a Stephen llamar a Peter "Niño Stark" y desde ese momento le llama así-. Peter iba a contestar pero fueron regañados por Pepper.
-Tony...- el castaño regresó su vista a su pareja- Nosotros no tenemos una vida "normal". Quisiera que fuera así, pero hemos visto de todo, y creemos que nada nos puede impresionar, siempre arriesgamos nuestra vida, y se nos limita a cosas tan ordinarias como lo suele ser una cena, o un baile. ¿Quién diría que un sentimiento tan común como el amor sería mi perdición? Te tengo bajo mi piel, y no voy a limitar el amor que siento, simplemente no puedo. Odio decirlo, pero cada día que pasa puede ser el último, y yo no quiero morir sin demostrarte lo valioso que eres aunque tú ya lo sabes, sin demostrarte que cada parte de ti es perfecta tal y como es, sin demostrarte que soy esclavo de esos hermosos ojos castaños que tienes, sin demostrarte que cada minuto que pasa me estoy enamorado más y más de ti. Estoy dispuesto a darte cada día de mi vida, y morir por ti si fuera necesario. Eres lo que más he esperado sin saber que lo hacía, y desde el día en que te conocí, mi vida, cuerpo y alma te pertenecen, me tienes a tus pies, Anthony...- Stephen se separó de él poniéndose de rodillas. En este punto, el castaño no sólo quería llorar, estaba llorando, realmente hizo algo muy bien para merecer esto-... sí te sientes de la misma forma... -sacó un elegante estuche negro con bordes dorados y al abrirlo, Tony vio un hermoso anillo de oro, de por lo menos 18 quilates, con una piedra medianamente grande, que le recordaban a los imposibles ojos de Stephen; una lucha entre azul y verde. A cada lado había una parecida sólo que más pequeñas, y en las orillas había un diminuto diamante rojo-... Cásate conmigo-.
-Mírame Strange, estoy llorando, ¿y todavía dudas? La respuesta es sí, ¡un millón de veces sí a todo! -el ex neurocirujano no pudo siquiera levantarse cuando Tony se lanzó hacia él, quedando ambos en el suelo y compartiendo un tierno beso.
Mientras que sus fieles amigos los miraban sonrientes, incluso Pepper había llorado por las palabras de Stephen. Todos habían contribuido en algo; Pepper en los trajes y el anillo junto con Peter, el también se había encargado de que Tony no se distrajera en todo el día, Rhodes el lugar de la cena y Vision escogió el menú, Wong los llevó al alucinante lugar. Y Happy compró unas bebidas para celebrarlo. 
-Wong, Happy ¿están llorando?- preguntó sin malicia Peter.
Efectivamente, estaban llorando.

                                                                 ....
    
Presente

-Carajo- decía un fastidiado Sam con el control remoto- No puedo creer que estén pasando esa basura por todos los canales, ¿a quién le interesa ver a simples personas con tela ridículamente cara?
-¿Qué es eso de "Noticia del Siglo"?- preguntaba confundida Wanda, en todos los canales había visto el anuncio, pero el impaciente Sam no dejaba el mismo canal por más de un segundo. Natasha y Bucky ahora se encontraban en la sala.
-No lo sé, de seguro es otra actriz anunciando su embarazo o algún otro drama entre las tontas celebridades- el moreno se frotaba la cara a punto apagar la televisión hasta que escuchó una conocida voz- ¿Rhodey? - y de inmediato todos los presentes tenían su atención en la palantalla.
-...no nos tomó por sorpresa, desde el instante que se conocieron sabíamos que esto iba a pasar, todos contribuimos en alguna parte y estamos realmente felices de que resultara mejor de lo planeando, quedamos encantados- decía a una reportera un muy sonriente Rhodey, que vestía un elegantísimo traje, y aún con las prótesis, se veía bastante bien, según Sam.
-¿No te aterra que tengan en mente otros posibles padrinos?-
El entrevistado rió -Bueno, aunque tengan en mente a otras personas, es evidente que soy la más competente opción-
-No sé quién te dijo semejante mentira, James- dijo Pepper que pasaba justo en ese momento
- ¡Señorita Potts! Tan elegante como siempre, ¿acaso peleará por el cotizado lugar con el coronel Rhodes?-
-Aquí no habrá ninguna pelea queridos, yo nací para ese lugar - dijo muy feliz Pepper, recibiendo risas de los otros dos -Nos tendrás que disculpar, pero tenemos que seguir avanzando-
-Seguro, muchas gracias por su tiempo a ambos -se despedía la rubia reportera mientras se dirigía nuevamente a la cámara- Nos encontramos en la alfombra roja más esperada y exclusiva del año, hemos podido encontrarnos con figuras que hace tiempo no se pasaban por aquí, luciendo sus elegantes atuendos. Pero sin duda el tema que se ha robado esta noche y lo más seguro las que restan del año, es la aparición de dos personalidades; el dueño de Stark Industries, Tony Stark, también conocido como Iron Man y el famoso y aparentemente desaparecido neurocirujano Stephen Strange se encuentran aquí, ambientando la alfombra roja con sus excéntricas personalidades, ha sido bastante el tiempo que no se les veía en eventos así. Y no sólo nos hicieron oficial su sospechada relación que fue negada por ellos y colegas, sino que también nos dieron la catalogada noticia del siglo; ¡hace una semana están comprometidos!. La pareja no se ha separado un solo instante, regalándonos infinidad de momentos sumamente dulces en lo que va de la tarde y demostrándonos lo enamorados que están. ¡Y a nosotros nos han concedido una entrevista! Esperemos que Tony nos muestre el exclusivo diseño del anillo, que según otras fuentes se le estima un precio aproximado de 3.6 millones de dólares, y sin duda será tendencia en futuros compromisos. Varias celebridades se han acercado a felicitar a la pareja, definitivamente todos estamos muy felices por ellos, entraremos en más detalles en unos instantes, mientras tanto...-Siguió hablando la reportera, dejando atónitos a todos en la sala.
-¿Alguna idea de quién es ese tal Stephen Strange?-preguntó Bucky, rompiendo el sepulcral silencio que se formó entre ellos
-Ni idea- respondió Sam -Pero Steve no puede enterarse de esto, no ahora-
-Suerte con eso- todos se exaltaron, todos menos Romanoff
- ¡Steve! ¿Hace cuánto tiempo estás ahí?
-20 minutos-
... ¿Lo viste?- habló Natasha. Pero no pudo obtener una respuesta, pues una multitud de gritos provenientes de la gran televisión llamó la atención de todos, y la antes serena reportera ahora hablaba mucho más fuerte, casi gritando para hacerse oír.
Señoras y señores, tenemos por fin aquí a la más afamada pareja!- Gritó emocionada la reportera mientras la cámara enfocaba a los mencionados. Ambos caminaban juntos tomados de las manos. Tony usaba una camisa blanca debajo de un saco aterciopelado color vino, la solapa, mangas y bolsillos eran de color negro, al igual que el moño y pantalón. Sus lentes de sol no podían faltar nunca, siendo de un color rojizo. Tenía una enorme sonrisa en su rostro -Tan galante como siempre- pensó Steve. La persona que tomaba de la mano vestía un traje similar, sólo que éste era completamente negro, el saco aterciopelado, pero la solapa y demás detalles eran grises, el moño de éste era del mismo color que del saco color vino. Y a diferencia de Tony, usaba unos guantes negros.
El sujeto era esbelto, le llevaba al castaño por lo menos unos 9 centímetros. Tenía el cabello oscuro con unas cuántas canas en las patillas, su barba era parecida a la de Tony, su piel era pálida haciendo contraste con la piel bronceada del genio, sus ojos eran los más extraños que habían visto. Llevaba una pequeña pero sincera sonrisa. -El tipo era horrible-, opinaba el rubio.
- ¡Pero qué guapos están ambos!, definitivamente la mejor pareja vestida, muchas gracias por darnos una entrevista- había dicho la chica al llegar ellos.
Es todo un placer, y tú no te quedas atrás preciosa, pero temo decirte que soy papa casada- 
La reportera rió ante el comentario y también Wanda -Tony, ¿puedes enseñarnos tu famoso anillo? Ha causado bastante revuelo- El castaño mostró su mano izquierda, y la cámara la enfocó. Un "Wow" se escuchó de parte de la reportera, Wanda e incluso Natasha. Steve les reprochó con la mirada.
Es precioso!- dijo encantada, la cámara volvió a enfocar a los tres- Stephen, ¡imagino que te costó una fortuna! ¿Puedes decirnos de qué piedras está hecho?-
-La más grande y dos medianas están hechas de grandidierite, las dos más pequeñas son diamantes rojos. No fue tan costoso, pero si me decía que no, podría haber viajado por el mundo, dos veces- él y la rubia rieron, Tony le dio un pequeño empujón fingiendo estar ofendido, el más alto también fingió seriedad y miró al castaño- Aunque claramente no lo disfrutaría, amor. Todo sea por el amor de mi vida y ahora futuro esposo- besó la mano del castaño, Tony le sonrió y le dio un rápido beso, lo último que se escuchó fue un "Aw" y más gritos antes de que la tele se pusiera totalmente negra. Steve la había pagado
No podía permitir eso, seguramente Tony estaba confundido. No podía haberle regresado el anillo por ese tipejo. 
-Iremos a casa- dijo a su equipo.

 

"Y te pregunto, ¿a quién le perteneces ahora?

¿A quién le das ese amor ahora?

¿Con quién estás llegando?

¿De quién te estás encaprichando ahora?" 

 

 

-Entonces si es la noticia del siglo… ¿Tony estaba embarazado? ¡Eso es biológicamente imposible! ¿O no?- se debatía inocentemente Wanda gracias a lo que había dicho Sam.




Notas finales:

¿Ven por qué les dije al principio lo de Toy Story? Para que le entendieran y no me tomaran por loca. 
Así es señoras y señores, este fanfic se trata única y exclusivamente de pedirle matrimonio a Tony, adivinen quién será el siguiente (Obvio no jaja), pero no sería mala idea, pero es más difícil de lo que piensan. No exagero con el precio del anillo, el grandidierite y el diamante rojo son de los más caros del mundo, pero si no le preguntan a Strange de dónde sacó el dinero, entonces él no les tendrá que mentir. 
¡Espero que les haya gustado!, por favor sigan comentado, y obtendrán un capítulo más y un anillo exactamente igual al de Tony. (Juro que lo imaginé muy bonito, así se verá mi anillo de bodas... sólo que con joyería de fantasía...) 
Muchas muchas gracias por leer, eres especial. <3


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).