-¿Y como es este gran animal?. -Se estaban alistando para ir en caza de la gran bestia aunque la madre del principe vino a interrumpir con la promesa de un baile del cual su hijo ya presentia las verdaderas razones de este. Pero ya estando listos solo esperaban a que Bromsley se dejara de tonterias y bajara de una vez.
-Nadie sabe, solo que no es lo que parece. Podría ser cualquier cosa.
-¿Que? Te estas arriesgando a un enemigo que no sabes como luce, eso es...
-Loco... Lo sé, pero, hare lo que sea por salvar a Odette. -La mirada del noble solo reflejaba seguridad y sus palabras no dudaron ni por un segundo.
-¿Es ella la princesa de la que todos hablan?
-Si... Desde que nacimos se decidio que nos casariamos para unir así por fin a los reinos, pero, nuestros padres nos dieron la oportunidad de podernos enamorar durante cada verano y cuando por fin la tuve enfrente y poder decir cuanto la amo yo solo los eche a perder. Despues fue cuando esa cosa se la llevo, por mi culpa. ¿Sabes lo que es amar tanto a alguien y despues hacer algo estúpido para perderla? Por eso no importa que pase traeré a Oddete a como de lugar.
-Si... Te entiendo. -Claro que entendia, su mayor estúpidez fue aceptar a la oscuridad tan facíl por despecho, creyo que con velar un año por Sora mientras sus memorias volvian podría pagar una pequeña fracción de lo que hizo, puede que tambien por eso el destino lo hizo a él su Dream Eater. Por más diferentes que fueran las situaciones se podia identificar con él. -Derek, vamos a encontrarla...
-Gracias... ¿Oye, qué tal una rueda de atrapar y disparar?
-¿Una que...?
Ya teniendo al castillo desprotegido ahora procedian con su plan de robar el mapa. Odette vigilaria mientras para que la vieja ayudante del mago oscuro no los moleste aunque como muchos planes es más facíl decirlo que hacerlo y tuvieron un encuentro con la anciana qué despues de una persecusión y unos extraños pases comparables con varios deportes lo consiguieron. Ahora seguía la segunda parte del plan.
-¡Atención! Es la hora zero soldados. ¡Odette! Preparate para despegar
-¡Bien!
-Y los demas ya tienen sus asiganciones. ¿Estan todos listos?
-¡Listo para actuar, señor! Mientras tú y la princesa atraen al principe me asegurare que ningún Heartless se interponga.
-¡Bien! ¿Y tu Jean Bob?. -Pero, la rana no contestaba. -¡Jean Bob!. -Nada... -"¡Su Alteza!"
-¿Hmm? ¡Oui, estoy listo!
-¡Despeguen!. -Después de unas amenazas de azotes y freir sus patas en aceite por parte de Jean-Bob ya estaban dentro del bosque con Rufino explicandole a Odette como podia oler a los cazadores a Kilometros de distancia que fue cuando una flecha paso veloz junto a ellos.
Sora por su parte en tierra limpiaba cada rastro se Heartless que encontraba cuando vio a lo lejos un grupo de hombres que intuia eran cazadores muy cerca de la princesa.
-¡Riku, Rápido! .
Corrian tras ellos sin perderlos de vista y Riku vio la oportunidad de hacer el conocido ataque de arrogar su keyblade al enemigo cuando escucho un grito.
-¡No!. -Sin pensarlo dos veces se lanzó al individuo que queria arrogar algo a Odette y por eso no habia dado cuenta de la identidad del cazador hasta que pudo verlo bien. -¡Riku!
-¿Que? ¡Sora! ¿Que estas haciendo aquí y por qué estas así?.
-Me desvié un poco de la misión del maestro Sid ¡Pero mas importante! ¿Riku que estas haciendo con ese cazador?
-Es el principe y ayudarlo con el monstruo que busca puede estar conectado a lo que el Maesro Yen Sid me dijo. Como sea no tengo tiempo. -Volvio a emprender carrera rompieno las ramas que se metian en su camino, mas tarde el y Sora podrian hablar.
-¿Principe...? ¡Derek! -Sora tambien tomó carrera alcanzando a su amigo sin esfuerzo. ¡Riku, espera! .-En un intento desesperado salto a la espalda del peli plata casi haciendo caer a los dos, sujetandose como podia a su hombro.-¡Riku, eso no es un Heartless es la princesa!.
-¿Que? .-Casi perdia de vista de a Derek quien estaba más y más cerca de meter una flecha en el corazón de Odette.
-Seguramente ya sabes que alguien se la llevo. Le puso un hechizo y ahora por eso es un cisne.
-¡Entonces debo detener al Derek!
-¡No, que la siga!
-¡Decidete!
-De noche vuelve a ser ella, pero, tiene que estar en cierto lago y solo el principe Derek puede romper el encantamiento.
-¿Entonces que hacemos?. -Aunque Odette intento esconderse de las flechas con la cegadez del sol este ya se estaba a nada de esconderse tras la montaña.
-Que nos siga, pero, que no le haga daño. Yo me adelantare y limpiare el camino de los Heartless, confía en mi Riku... -Antes de saltar de su hombro hizo a pose heroica y con ayuda de los troncos de árbol fue impulsandose adelante sacando su Keyblade lista para lo que viniera.
-¡Si confio...! -Con una nueva convicción y fuerza dio un fuerte salto y ahora corria por las copas de los árboles que cada vez eran mas negros y tenebrosos. A cada flecha que Derek disparaba el la desviaba como podia.
Ya estaban llegando y la luna ya estaba saliendo al igual que el corazon de la princesa tenia tanto miedo de que las habilidades de caza de su amado la mataran antes de poder llegar al lago.
-Odette tienes que salir. Es ahora o nunca. -Insistia Rufino.
-No puedo... Me matara. No... No.
-¡Princesa! .-Sora apenas llegaba jadeando, pero, entendia la situación. Si ella no salía nada de esto valdria la pena. -Princesa... -Hizo una pequeña pausa. -Odette... Recuerda, recuerda el amor que se tienen, si tu corazon es fuerte no tienes que temer.
El cisne bacilo, pero aún con miedo descendio al agua esperando a que pasara la magía, pero, como si fuera un chiste cruel las nubes no dejaron que la luna se reflejara a tiempo. Aprovechando el principe lanzó una ultima flecha que casi llega al blanco de no ser por Rufino, entonces por fin la magia del lago empezó.
-¿Dondé estas Riku?. -Preguntó preocupado. Sí él no detuvo esa ultima flecha, algo debio pasa tan solo esperaba que no fuera nada malo, sin perder un momento mas salio disparado en su busqueda.
-Supongo qué tú eres quien puso el hechizo. -Mientras le seguia el paso a Derek vio sospechoso que por una razón paso desapercibido por Sora.
-Que muchacho tan listo, pero, tranquilo no vine aquí a pelear. -Dijo al ver que el ya estaba en pose de combate. Rubarto estaba siendo precavido ya a sabiendas de las habilidades del chico. -Solo vine por algo que mi colaborador necesita. No te dolera será como un piquete.
Se le avento de frente y aunque lo trato de esquivarlo hacia atrás laañ mano ajena se le hundio en el pecho apredantolo dejandolo sin aire, sacando una pequeña esfera brillante color morado.
-¿Que rayos fue eso?. -Gritó exigiendo respuestas.
-No necesitas gritar... Solo copie una que otra memoria de tu corazón es todo. Yo no vine a pelear. ¿Que diria mi futura esposa si se entera que lastime a un chiquillo? Oh, bueno la noche es jovén y tal parece que tengo visitas. -Poco a poco adentrandose a la oscuridad de sus terrenos y desaparecio de manera siniestra.
-¡Espera...! .-Grito entre dientes, ese golpe en el pecho lo habia entumido, no podia moverse bien y respiraba pesadamente, antes de poder hacer nada ya se habia perdido entre el espeso bosque. -Maldición...
-¡Riku! .-Llego corriendo a la escena. Riku apenas se estaba poniendo de pie, ya no dolía, pero, se tocaba el pecho aún sintiendo un cosquilleo.
-¡Sora, rápido. Van tras ellos!. -Alarmado, el antedicho freno bruscamente deslizandose sobre la tierra regresando sobre sus pasos.
-¡Princesa donde...!.
-¡Shh!. -Callaron fuertemente, los tres animales acompañantes para no romper la burbuja romantica que los dos noblez tenian.
-Oh.. -Ahora se sentia algo tonto por haber interrumpido, pero, se alegraba de que el plan funcionra. Habiendo pasado el falso peligro y ahora mas tranquilos se sentaron en la pastura juntos uno a lado del otro. Sora vio a los enamorados con ternura, luego volteó a Riku. -Sabes... Yo sé que nuestra mision es importante, pero, cuando conocí a la princesa. Yo...
-Tenias que ayudar. Si... Eso es algo que tú harias. Siempre sales corriendo cuando ves que alguien necesita ayuda, eso es algo muy bueno de ti. Es algo que me gusta de ti.
Palabras dichas con sinceridad sin segundas intenciones y con una sonrisa de la mas dulce. Sora se sentia avergonzado. Riku... Siempre hablando bien de él, de no tener forma zorril se estaría sonrojando. Gracias a Dios por el pelaje.
-Riku...
La conversación que tuvo con Oddete la noche antes lo había puesto a pensar en cierto asunto, subio la mirada a la luna meguante, perdido en su mente. Tan ausente estaba que ni cuenta se dio qué Riku hace rato peinaba su cola con la mano.
-¡Oye!. -Dio un salto de la sorpresa, tan alto que el peli blanco lo vio por encima de su cabeza.
-Perdón, me dio curiosidad. Yo no cambio de apariencia sin importar en que mundo esté. -Extendió la mano tratando de volver a tocar la esponjosa cola del volpino. -Y la verdad admito que eres muy suave...
-No soy una mascota...
-Oh, vamos.
"Riku en verdad parece interesado..." Pensó el otro. Se sento dandóle la espalda dejando caer la punta de su cola en la rodilla del Maestro espada dando a entender que tenia permiso.
-Le dices algo a Kairi o a los demás y te mato... -Resignado se dejo acariciar el lomo, siendo tal vez él quien estaba sacando provecho de la situación.
-Hecho...
Rompiendo la agradable atmosfera Rubarto se escuchaba a lo lejos gritando el nombre de Odette alertando a todo mundo.
-¿Es él? Perfecto terminaremos el asunto de una vez por todas. -Dijo Sora invocando su Keyblade, advirtiendo a su amigo para qué estuviera listo.
-No, espera... -Detuvo al pequeño zorro antes de que este saliera corriendo. -Es peligroso afrontarlo estando ellos dos en medio. -Refiriendose a Odette y a Derek.- Sabe que estamos aquí, así que lo mejor será retirarnos.
Odette sabiendo que era lo más inteligente tambien ahuyento a su amado para que se pusiera a salvo y volviera por donde vino.
-Tiene que ser un voto de verdadero amor y debes decirlo ante el mundo entero.
-Siempre he querido hacer uno. ¡Ven al baile mañana en la noche! Le demostrare al todos lo mucho que te amo.
-¡Si, si. Ahora corre!. -Se regalaron una ultima mirada de amor diciendo que todo iba a estar bien.
-¡Derek!. -Le llamó Riku para que corrieran al bosque. El principe se adelantaba mientras compartia unas últimas palabras con su compañero.
-¡Riku...!
-Sé que tú puedes sólo. -Con eso dicho desaparecio entre el follaje.
-Ten cuidado...
La escena despues prosigio como debía. Odette tratando de engañar a Rubarto con ser su esposa, él viendo atraves del engaño y de ahí es donde empiezan los problemas.
-Ya tuve suficiente princesita, no más Mr. Bueno para ti... Ni para tu amigo de otro mundo. -Dio una mirada cinica dando a entender que iba en serio.
-Entonces basta de juegos. Terminemos esto aquí y ahora, tambien dejaras ir a Odette. -Sabemos que la paciencia no es su fuerte, así verlo lanzarse en ataque se veia venir, qué claro Rubarto contaba con ello, esquivarlo fue facíl y tomar a Sora del cuello y retenerlo lo fue aún más.
-Calma pequeño, yo tambien tuve visitas el día de hoy y le encantaria tener una charla contigo. -Se movio viendo hacía la ventana de la torre dondé una figura siniestra y conocida los miraba desde arriba.
-Vanitas... -¿Lo había estado siguiendo?.
-Rubarto, Odette y tu eres Sora. Bien ahora que todos nos conocemos pasemos a lo siguiente... -Con un chasquido de dedos los Heartless rodearon a la princesa haciendola desaparecer en un charco de oscuridad.
-¡Sora!
-¡Odette!
-Pronto iras con ella, no hay prisa. ¿Verdad?. -Su sonrisa de burla lo hacía enojar aún más, pero, qué Vanitas estuviera de repente frente a ellos apago esa llama rápidamente.
-Si, tomalo con calma. No quieras morir tan rápido ahora. -Traia el casco puesto, pero, Sora podia sentir la mirada demente sin querer imaginarse lo que tenia en mente. -Los principitos tienen la estúpida idea de tener un felices para siempre, ya tenemos a la chica, pero, ese tipo es un problema si viene por ella. Encargate...
-No necesito que me digas que hacer, lo haré de todos modos. -Como si solo fuera una piedra arrojo al chico a la tierra con fuerza quedandose este lastimado tratando de volver a estar en pie muy apenas.
-Volvamos contigo... Únete a mi, es inútil resistirte a este punto. -Con Gear Void en su mano no daba otra opción.
-¡Jámas!. -No importaba que doliera, tampoco que lo que pasara con él al final, pero, desde qué lo vio sabía que se enfrentarian algún día.
-Parece lo terco siempre ha sido la especialidad de ustedes dos.
Con esta forma se encontraba un poco desventaja, no podia usar todas sus habilidades al máximo, sin embargo, chispas de fricción se esparcian al rededor de sus armas. La pelea estaba igualada, no se sabria quien tiene la ventaja.
Todos saben que los jueguitos mentales son los favoritos de Xeanorth y sus seguidores. Aun siendo así por qué siempre Sora cae en ellos...
-Elegiste una juala muy frágil para esconderte, Ventus... -Dijo apuntandole con su llave. -Apenas y es digno de ser un portador de la Keyblade.
-¿Que tienen ustedes con siempre cambiarme el nombre? Grabenselo de una vez... ¡Es Sora!. -Sin cuidado alguno fue a un ataque directo, explicar lo fácíl que los proyectiles oscuros de Vanitas golpearon es explicar démas.
-Se preocupa tanto por arreglar todo el desastre que hizo, pero, termina olvidando qué él mismo es un inútil.
-Cállate... -Éxalo tirado a los pies del pelinegro.
-Y tú tambien, nunca fue el elegido de la keyblade en primer lugar. -De una sola patada Vanitas lo mando al otro lado del campo, jadeaba intendando poder respirar tratando de pensár en como atacar.
-Aunque... -Se acerco y puso su bota contra su cuello, cada vez con más presión. -Si tú no hubieras sido tan egoista tal vez él nunca se hubiera interesado en abrir la puerta en primer lugar.
-Tu... No sabes... Nada...
Sora no podia hacer nada, no podía quitarselo de encima y tan siquiera hablar unas palabras estaba fuera de discución, mas aún cuando el muy cínico se inclino apretando mas fuerte.
-Me parece que sé más que tú. -De la mano de Vanitas aparecía la esfera que Rubarto saco de Riku. -Pero descuida, ya lo entenderas.
Entre más entraba la esfera en el más recordaba como era esa vez que Xeanorh lo encerro en una pesadilla.
Tantas eran las sensaciones qué se desmayo, para sensiorance qué estaba completamente ido, Vanitas pateó su costado.
-Eres casi tan tonto como Ventus -Con ambas manos mantenia elevada su keyblade a lo alto sobre el cuello del castaño a modo de ejecución. Apreto con fuerza la empuñadura y la bajo con fuerza, pero... Se había detenido subitamente, apenas con un pequeño espacio entre Sora y su arma. -Tks... Por más que quiera matarte con él dentro, aún falta que cumplas tu parte como nuestro peón. La próxima vez no te ira tan bien.-Volvio a patearlo por pura maldad, alejandose hacía el portal oscuro que había abierto.
Sora sentía que se ahogaba, ¿Será una pesadilla o solo una ilusión? No distinguía arriba de abajo, como si alguien dranara el mar el nivel del agua bajo para dejarlo sacar la cabeda y respirar, ya distinguía la orilla, pero... ¿Como es que había vuelto a Destiny Island?.
Se dejo caer sobre la orilla, permitiensose cerrar los ojos un rato, la tranquilidad que le daba el ruido de las olas lo llenaba de nostalgia. El ruido de pisadas en la arena lo hizo levantar la vista, eran él y Riku de niños, corriendo en una de sus muchas carreraa al muelle.
-¡Gane! -Victorio Riku.
-Aww, podrias dejarme ganar una vez...
-Si lo hicera cuando en verdad ganes no sería especial.
-Creo que tienes razón... ¡Pero podría actuar realmente emocionado cuando lo haga!.
-Jaja... No lo creo. -Se río el niño, Sora recordaba que de niños Riku no era tan serio y ultimamente este había estando a volver a ser un poco como este entonces.
-¡Riku, mira!.-Su "Yo" infantil señalo a su dirección y se espanto creyendo que podian verlo, pero, en realidad estaba señalando a uma niña tendida en el agua junto a él.
-Kairi...
-¡Sora, ve por los adultos!.-Y tal como dijo salio corriendo por sus padres y él corria hacía la niña levantandola tratando de hacerla reaccionar.
Él ya se había levantado y se quedo viendo la escena hasta que poco a poco empezó a cambiar, ahora veia como él y Kairi jugaban a lo lejos, Riku estaba frente él a punto de romper en llanto.
-¿Riku...?
-Me cambiaste por ella... -Empezó a gimotear tallando
-No, eso no es cierto. -Rápidamente se arrodillo para abrazarlo y consolarlo con una voz tenúe.
-Entonces vamos a un mundo donde no este ella. -Los brazos de Riku a sus 15 años le devolvieron el abrazo, un abrazo agresivo y posesivo.
Ahora estaban construyendo la balsa y Sora recordo que salir a buscar nuevos mundos juntos fue idea de Riku, pero qié fue él quien invito a Kairi a ir con ellos.
Una manta, tres pescados y una soga... Con eso empezarón su gran aventura. Mientras su otro él le daba todo a la chica sintió algo horrible por detrás, una vibra oscura de rencor.
¿Por que tenias que traerla...?
¿En verdad la prefieres a ella qué a mi?
Ambos estaban frente a la puerta de la cueva decidido a abrir la puerta.
Si ella es tu luz... Yo traere oscuridad.
-¡No!. -Quiso alcanzarlo con su mano cuando todo se hizo oscuro, pero termino aferrandoze a la nada y nuevamente cambio la locación.
-¡Te busque por todos lados!
-No quería que me encontraras... ¿Como podria mostrar mi cara despúes de todo lo que hice.
-No es tu culpa... -Lloraba abrazandose a si mismo, le dolia bastante volver a pasar por esto, ver como Riku se echaba la culpa cuando sabía que en realidad era de él...
Por él, Riku se sintio apartado, por él abrio la puerta y por él es qué Riku buscó la oscuridad.
Hace tiempo sopechaba que lo veia con otros ojos, pero, se concentro tanto en Kairi que olvido que tambien era su amigo.
-Perdonamé, Riku...
Sora, despierta...
-¿Eres tú quien mantiene a Sora en esa pesadilla?.
¿La vez que Xenmas lo atrapo en el exámen?. Nunca supo realmente que paso mientras estaba encerrado.
-¡Soy lo que las pesadillas temen... Y voy a protegerlo!
-Riku es mi Dreameater...
¡Sora!
¡Sora!
¡Sora!
Las voces que lo llamaban para despertar, tres habitantes de su corazón que venian a hacerlo reaccionar.
-Sora, no puedes dejar que esto te pare.
-Roxas...
-Tú y Riku cometieron errores, pero, no pueden dejar que el pasado afecte su futuro. -Esa chica de pelo negro... Ya la había visto antes.
-Toma esta llave... Y protegé a aquello que amas. -Otra vez eran niños y ese jovén de un pasado olvidado hablaba con Riku.
-Lo prometo.
Las tres apariciones lo reodearon y el único que no había hablado pregunto...
-¿Quien es para ti la persona más importante? Sora...
Con un nudo en la garganta lo pensó un segundo y dijo...
-Riku...
-Bien dicho... -Le sonrio y todo se llenaba de luz. Estaba sentado en su palmera junto a Riku y Kairi, como siempre deberia ser. -Espero que la proxima vez que nos veamos sea hasta qué tú me despiertes.
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español