V: Sé que el tiempo te está molestando, pero es necesario.
Suga: Piensa un momento idiota, ¿Cuántos días serian hasta entonces? llevamos nueves días y el cumpleaños de tu noviecito sería sábado.
V: ... 13 días.
-Suga se fue acercando al hijo de Afrodita con un aura tensa haciéndolo retroceder casi obligándolo a caer.- Más te vale avanzar en ese tiempo. No pienso quedarme el mes en la tierra.
-V empujo al dios, dándole una sonrisa retadora.- Preocúpate por ti. Por si no lo has notado, Jimin está buscando todas las formas de evitarte.
Suga: No te metas conmigo, V.
V: Lo mismo va para ti, Suga.
La parte alta de la casa empezó a temblar. Llamando la atención de los que estaban abajo.
Jimin: ¿Qué sucede?
-Hope se tensó en su lugar, viendo con nerviosismo a los dos jóvenes.- Hay que mantener la calma y quedarnos aquí.
-Jungkook se levantó de su asiento por inercia, saliendo del comedor.- ¡V está arriba!- Jimin no dijo nada. Se limitó a seguir a su hermano con un inmenso miedo.
-Hope, apretó sus nudillos ante el enojo que acumulo.- Par de idiotas.
Cuando Jimin y Jungkook subieron las escaleras, sus ojos estaban sumamente abiertos, sorprendidos de lo que veían.
Tanto Suga como V los rodeaba una neblina: roja para el hijo de Afrodita, y negra para el hijo de Ares.
Jimin tomo la mano de Jungkook, poniéndolo detrás de él cuando los dioses se percataron de sus presencias.
V fue el primero en disipar su poder, tratando de acercarse a ellos. Pero Jimin empezó a retroceder junto con su hermano.
Jimin: ¡Aléjate!
-V empezó a buscar la mirada de Jungkook, pero este la esquivaba.- No les haremos daño.
Jimin: ¡Salgan de mi casa si no quieren que llame a la policía!
Suga: Tranquilo, Jimin.
-Jimin calmo su miedo. Lanzándole una mirada filosa al hijo de Ares.- Tu principalmente, no te me acerques.
-Los ojos molestos de Jimin, hicieron encender a Suga de una forma equivocada.- Eso no dijiste anoche, mi lindo Jimin.
-Jungkook, alzo su rostro, volteando a ver a su hermano que empezó a temblar.- ¿Qué te sucede hyung?
Jimin: Eso fue un sueño.
-Suga desabrocho un poco su camisa, dejando ver aquellos hematomas que había hecho el castaño.- Tu también los tienes...- La sonrisa triunfante del azabache salió a relucir cuando Jimin trago en seco.- Y vaya que lo disfrutaste.
V: ¿Jungkook?
La voz de V, hizo salir de trance al menor. Jungkook en verdad tenía miedo, pero los ojos de V mostraban mucho más del que él tenía.
Cuando Jungkook se soltó de su hermano e intento caminar hacia V, Jimin, lo volvió a tomar entre sus brazos, haciendo fallido el reencuentro.
Jimin: ¡Dije fuera!
Hope: No entienden cuando no somos bienvenidos aquí, estúpidos.- El pelirrojo, fue el último en subir, mirando secamente a ambos dioses.- Lo lamento Jimin y Jungkook. A veces estos dos no saben cómo controlarse.
Jungkook: Hobi, tú...
Hope: Yo también soy como ellos. Con la única diferencia que yo si se cómo controlar mis poderes.
Jimin: Por favor, llévatelos.
Hope: Eso hare, Jimin hyung... Pero creo que antes de, merecen escuchar porque estamos aquí.
(...)
Jimin y Jungkook estaban sentados en un solo sofá mientras V, Suga y Hope se encontraban de pie, enfrente de ellos.
V: Déjenme hablar a mí.
-Hope no podía sacar de su cabeza sus sospechas, haciendo que se negara al pedido de V.- Vas a pensar que estoy loco, pero lo mejor será que hable Suga con Jimin.
V: ¿Acaso quieres hundirme más?
-Hope, toma la barbilla de V, haciendo que mirara a Jimin. No le tomo mucho darse cuenta de lo que hablaba Hope.- ¿Qué dices?
V: Más te vales escoger bien tus palabras, Suga.
Jimin: ¿Y bien?
-Suga rodo sus ojos, levantando su mano para darles a entender que era él el que hablaría.- Me imagino que deben conocer la historia del Olimpo y los 12 dioses que lo gobiernan. –Jimin asiente. Algo confundido, intenta no perderse de lo que habla Suga.- Los 12 dioses: Zeus, Hera, Poseidón, afrodita, Ares, Atenea, Hermes, Apolo, Artemisa, Hefestos, Deméter y Hestia, han dejado descendencia durante varios años, haciendo que sus poderes otorguen a los humanos lo que le rezan: matrimonio, familia, música, talento en el arte, sabiduría, belleza, amor, fuerza, virilidad, fertilidad... -Suga se empieza a reír sínicamente.- Los humanos realmente piden muchas cosas.
Jimin: Todo ser que se encuentre desesperado busca hasta la última oportunidad que pueda tener. Es por eso que les rezan a los dioses con demencia.
-Suga calló, volviendo al tema que iba.- Nosotros, somos hijos de esa descendencia: Hope, el hijo menor de Atenea, diosa de la sabiduría, artesanías y estratega.- Hope hace una reverencia a Jimin.- Y ese es su verdadero nombre. Su madre le puso esperanza al ser su último hijo.
Jimin: ¿Entonces, Hoseok?
Hope: Es el nombre que se me dio mi padre para llevarlo en la tierra.
Suga: V, que en realidad es su verdadero nombre.- El azabache, voltea a ver a su amigo.- Aun no entiendo por qué tu madre te puso así.- El nombrado alza sus hombres sin saber él tampoco.- Es el hijo menor de Afrodita, la diosa del amor.
Jimin: ¿Y tú quién eres?- Los ojos de Jimin no podían despegarse del dios, que estaba igual de hipnotizado que él.-
Suga: Soy el hijo menor de Ares, el dios de la guerra. Suga- Jimin trago en seco cuando el dios se acercó más a él, tomando su barbilla.- Y tú mi querido Jimin, eres el humano destinado a estar conmigo.
-Los ojos de Jimin se abrieron de golpe, quitando la mano de Suga.- ¡Disculpa!
V: Los dioses tienen la oportunidad de dejar descendencia si encuentran al dios o humano destinado a llevar a sus primogénitos. Si durante años no lo encuentran en el Olimpo, el dios, tiene que bajar a la tierra y buscar al humano destinado. No importa en qué tiempo se encuentre.
Jimin: ¿Me estás diciendo que él y yo estamos destinados a estar juntos?
Hope: Prácticamente, naciste para dar a luz a los hijos de Suga.
-Jimin se empieza a reír como desquiciado, acercándose a Jungkook que se encontraba tranquilo escuchando la historia mientras observaba a V.- ¡Esta es una estúpida broma, no pienso seguir escuchando!
-Cuando Jimin jaló a Jungkook, este soltó su agarre, confundiendo a su hermano.- Yo si les creo, hyung.
V: Tú eres mi destino, Jungkook.
-Jungkook, se acerca al castaño claro tomando su mano con gentileza.- Lo sé. Ahora comprendo por qué te escuchaba en mis sueños.- Una leve sonrisa risueña se apodera de los labios de V, haciendo sonrojar al menor.-
Jimin: ¡No pienso apoyarte en esto, Jungkook! ¡Y tú, más te vale no acercarte a mí!- Sentencio Jimin al hijo de Ares antes de subir a su habitación.
Suga: Tu hermano es bastante histérico.
Jungkook: Si hyung es en verdad tú pareja, te deseo suerte, Suga.
Suga: No la necesito. Sé muy bien cómo llegar a Jimin.
-Tanto V como Hope negaron con frustración a lo que estaba pensando Suga.- ¡El punto es conquistarlo, no matarlo!- Fueron las palabras de Hope, poniéndose enfrente de él.- Así que desecha esas ideas de tu retorcida cabeza.
Jungkook: Si quieres, yo puedo ayudarte.
Suga: No me malentiendas, Jungkook. Pero tengo mis razones de llegar a la forma que lo voy hacer a tu hermano.-
Jungkook: ¿Debería preocuparme? –Le pregunta a su pareja.-
V: Por si acaso, Hope y yo lo vigilaremos.-Jungkook dirige su atención al pelirrojo que asiente con una sonrisa.-
Hope: Es hora de irnos.
-Jungkook, toma el brazo de V, llamando nuevamente su atención.- ¿Por qué presiento que no me están contando todo?
Suga: Una cosa a la vez. Aún hay tiempo.- Fue lo último que dijo Suga, dirigiéndose a la salida junto con Hope algo cansado y rendido.-
-El menor, mira inquisidora mente al hijo de Afrodita, que besa su mejilla antes de irse con los demás.- Te veré en mis sueños, Kookie.- El chico asintió cerrando la puerta a su paso.
La casa de unos minutos a otros se encontraba en silencio. El menor, camino hacia el comedor viendo con decepción la cena. Termino por guardar nuevamente todo en el refrigerador y subir hasta la habitación en donde estaba su hermano.
Jungkook: Ya se fueron.- Dijo mientras se encontraba recargado en la puerta con los brazos cruzados, viendo a Jimin que estaba sentado en la cama con la mente perdida.- ¿Hyung?
-Jimin volteo a verlo, tragando saliva con dificultad.- Dime que lo que acaba de pasar es una broma de mal gusto. Que esto lo planearon ustedes en lo que regresaba a casa.
-Jungkook negó. Se sentó a un lado de Jimin, tomando su mano que no paraba de temblar.- Todo lo que paso fue real... Yo también estoy asustado, hyung. No solo tú.
Jimin: Es que... ¿Destino de un dios? ¿Cómo quieres que comprenda eso?
Jungkook: Yo tampoco lo comprendo del todo. Pero cuando V me mostro lo aterrado que estaba de haberlo descubierto, mi pecho dolió. Es como si su dolor también fuera mío.
Jimin: Estas demente, Jungkook. Tú y ellos están dementes.
-Jungkook abrazo el cuerpo tembloroso de su hermano mayor.- Estaremos bien, Jimin hyung.
-Jimin tomo la mano derecha de Jungkook.- Quiero que me prometas que te alejaras de V hasta que Jin Apa vuelva.
-Jungkook quito el agarre, mostrándole un semblante serio a Jimin.- No lo hare. Te lo dije. El dolor de V es demasiado para mí. No pienso lastimarlo. Pero tampoco quiero lastimarte a ti, así que mantendré cierto margen en el que ambos puedan estar en paz consigo mismos.
-Jimin trago saliva con dificultad.- A veces no te entiendo, Jungkook.
Jungkook: Cuando no puedes entender a una persona, lo mejor es escucharlo y tratar de comprenderlo. No más, no menos.
Jimin: Entonces, espero que también me escuches y comprendas mi decisión. No quiero que ellos se acerquen a mí. En especial ese tal... Suga.
-Jungkook se cruzó de brazos, viendo burlescamente a Jimin.- El parece alguien que no se rinde fácilmente.
-Un escalofrió corrió por el cuerpo del mayor.- Eso ya lo veremos.