DUDA (HUNHAN) por Linlim

 
̶ JongIn no te parece que eso es un poco… 
 
 
–¿Un poco que? 
 
 
–…demasiado…
 
 
–¿Crees que es demasiado? entonces mejor me llevaré este –Toma otra prenda de vestir .
 
 
–¡No!... digo eso no crees que…
 
 
 
–Dijiste que era demasiado, quiero algo que se menos.
 
 
 
LuHan no encontró las palabras adecuadas, para  decirle que ese conjunto no parecía el más adecuado. 
 
 
 
–Este otro  y uno más. –Pone prenda tras prenda, sobre su brazo  y se dirigen al probador.
 
 
 
Todas las piezas fueron probadas, no podía negar que le iban bien, JongIn tenia una figura esplendida pensaba LuHan, no como el, con una vientre un poco flácido y con una cicatriz, aunque SeHun le decía que era perfecto así, eran cicatrices de amor y en el fondo LuHan eso creía.
 
 
 
 
–¿Qué tal me veo?
 
 
 
–Lo vas a dejar con la boca abierta, literal – Ming agito sus brazos al tío JongIn, tal vez a ella si le gustaba.
 
 
 
–¿Crees que funcione? –JongIn se miraba al espejo de cuerpo completo parándose de lado y de frente y de espaldas, en todos los ángulos posibles,  emocionado, ilusionado. 
 
 
 
–Al menos vas a intentarlo y si no …
 
 
–¡Lu! No me digas eso, soy el solterón de la familia– Dice con un puchero en los labios, que lejos de parecer ridículo, termina siendo adorable.
 
 
 
–Aun eres joven.
 
 
 
– Mi hermana ya se ha casado, mis primos incluyendo al menor , tu también. –La familia de JongIn es enorme, llena de bebés, con tías, primos y sobrinos  por doquier, pero se siente  excluido de alguna manera al no tener aun una pareja
 
 
 
Carga a Ming que rápidamente lo abrazó. Le da un beso tronado en la mejilla que hace disgustar a la niña, que pide ser regresada con LuHan. 
 
 
 
–Nos tienes a nosotros.
 
 
 
–Sabes que amo a Ming, pero …quiero mi familia, una propia, en mi casa, que sepa que alguien espera por mi, niños, muchos niños corriendo por ahí – Todo era entendible – que en la noche mi esposo y yo hagamos el amor apasionadamente, que nos arranquemos la ropa y que muerda…
 
 
–Ok JongIn ya entendí. –LuHan prefería no tener demasiada información. 
 
 
 
–Es en serio, ¿soy tan feo?
 
 
 
–Sabes que no, eres hermoso y sexi,  está el pediatra, el te adora, si tu le dieras una oportunidad…
 
 
 
–No, el no, ya lo intente, no funcionó, no sentí nada.
 
 
 
YiXing era un hombre atento que se desvivía por JongIn,  su mirada se perdía en  admiración cada que se encontraban en el hospital cuando le acompañaba, le  insistía en  invitarlo a salir , cosa que en algunas ocasiones JongIn llegó a aceptar, pero fue  fugaz, JongIn insistía en  decir que era como si le fuera infiel a su chico–no chico, cada vez que tenían una cita.
 
 
 
Pero…bueno, quien era  LuHan para juzgar  la devoción  de JongIn. Porque así es el amor, complicado, errático, sencillo o tranquilo. No decidimos de quien nos enamoramos. Definitivamente el lo estaba o tal vez solo era una ilusión revestida de enamoramiento, incapaz de distinguir, el solo sabia que lo quería, tan simple como eso se resumía su desesperación  por agradarle.
 
 
 
– Se que el es el indicado LuHan, desde que lo conocí, supe que era mi soulmate, cuando sus ojos se conectaron con los míos – Un gran suspiro–  Supe que era el destinado en mi vida. ¿Me crees?
 
 
 
–Bueno, creo debes conocer a la persona para saber si será tu alma gemela, no creo que sea así de rápido.
 
 
 
–Pues yo si lo creo, que esta destinado a mi, mírate, pese a todo, tu destino era estar con SeHun y ahora ustedes son una hermosa familia, estaba destinado a ser tu alma gemela.
 
 
 
–Si JongIn , pero es diferente, tal vez el chico no sea lo que tu imagines que es.
 
 
 
–Pues no lo sabré sino me da la oportunidad de conocerlo o que me conozco, mira SeHun ya me ha contado todo de ustedes, de cómo se conocieron,  el no te agradaba, pero el insistió hasta conquistarte ¿No?
 
 
 
LuHan ríe, es verdad, el también trabajaba a tiempo parcial en una cafetería para poder pagar algunos de sus gastos universitarios, porque pese a que sus padres le mandaban dinero desde China, nunca era suficiente.  Cuando SeHun lo conoció,  en una  cafetería como mesero,  insistió una y otra vez para que saliera con el, pero LuHan  se negaba pensando que solo quería jugar con sus sentimientos, pues se notaba a simple vista que era un hijo de familia adinerada, menor que el y  además de tener una  cara altiva y engreída. De no ser porque un día lo defendiera de un cliente mano larga, después de agradecerle y que SeHun le diera una sonrisa, sintió  que  vio algo en su mirada que le hizo creer en el, aceptó salir con el. Años después ellos tenían una gran historia de amor  que contar. 
 
 
 
Porque lo que tiene que ser, será.
 
 
 
– Tienes razón JongIn, tal vez si es tu destinado, no sabrás si el no te da una oportunidad, así que la conseguiremos. –Un apretón en su brazo reafirma sus palabras.
 
 
 
–Bueno, espero que esta vez no vuelva a rechazarme, espero tu plan funcione…aunque bueno, tal vez solo me repita lo mismo, que no le gusto.
 
 
 
LuHan no puede evitar preguntarse porque los seres humanos pese a su hermosura pueden pasar desapercibidos para algunos, JongIn era muy guapo, pero también era un adulto capaz, con don de mando , organizado, eficiente y muy inteligente pero  con un alma de niño, capaz de amar incondicionalmente. 
 
 
 
–Listo, me llevaré puesto este…Me miro bien ¿verdad?
 
 
 
–Muy bien Jonginni, solo… tal vez deberías llevar abrigo para que no te  resfríes ¿No crees?
 
 
 
–No Lu, al contrario, nada que arruine mi oufit.
 
 
–Ok –Admira la seguridad de JongIn.
 
 
Después de pagar, se dirigieron en el auto de JongIn a la cafetería, con un plan en manos.
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
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–Vamos al mostrador a hacer el pedido, quiero que sea lo primero que vea cuando lleguemos, hoy le toca preparar los cafés.
 
 
 
Se acercan  y miran tras el aparador, un chico bastante simple, ordinario para cualquiera tal vez, no para JongIn, el chico al voltear  lo ve, le es inevitable abrir los ojos de mas y un poco la boca. JongIn suele venir a la cafetería en traje, pero hoy, definitivamente hoy ha venido a matar.
 
 
 
El chico lo recorre rápidamente con la mirada, tras el  nerviosismo inicial, trata  de controlarse acomodándose las gafas de moldura gruesa, para disimular un poco.
 
 
 
–Pueden tomar asiento en cualquier mesa, alguien los atenderá prontamente.
 
 
 
–Es que mi amigo LuHan… es un poco quisquilloso con su pedido, así que prefiere pedirlo directamente.
 
 
 
El chico de cabello oscuro ahora lo mira con un poco de molestia.
 
 
 
LuHan no puede evitar sonreír, mece  con delicadeza la carriola donde Ming duerme plácidamente y ajena a todo.
 
 
 
–Quiere un latte doble, con leche de almendras, sin espuma y… –Mira a JongIn se le ha olvidado que otra cosa debía decir, a LuHan le gusta el café americano y solo eso.
 
 
 
–Con un toque de vainilla…̶   Completa JongIn ̶   Para mi un moka con extra de leche y… algo de azúcar.
 
 
 
El chico de los ojos bonitos sonríe, ladea la cabeza y lo mira con burla.
 
 
 
–¿No saben lo que lleva el latte o el moka?
 
 
 
JongIn mira asustado al chico, se ha delatado, el solo toma café por el chico, pero realmente a el no le gusta, siente que sabe a veneno, pero sin embargo siempre pide el mismo, algo dulce que ya conoce. El chico sonríe al darse cuenta de la verdad.
 
 
 
Al menos ya no parecía irritado después de la tención inicial.
 
 
 
– A ti, te llevare el capuccino de siempre, con sabor a chocolate –Señala a JongIn– y a ti…un latte muy rico, confía en mi. 
 
 
 
Luhan sonríe y JongIn, no puede evitar la cara de asustado. Se dirigen a la mesa, para mala suerte quien lleva los cafés es una chica de ojos cafés y cabello rubio, que le sonríe a JongIn.
 
 
 
–No lo tomes a mal, el anda de malas, como siempre, ya sabes, pero creo que lo has dejado a impactado, ha derramado un poco el café y el nunca lo hace.
 
 
 
–Gracias Jenni –La sonrisa de JongIn ilumina su rostro.
 
 
 
SeHun había prometido alcanzarlos mas tarde.
 
 
 
–Hola amor –Da un beso en los labios a LuHan y un beso en la frente de Ming que aun duerme. –Hola Jongin.
 
 
 
–Hola SeHun falta mi beso ̶   SeHun sonríe haciendo una mueca de broma.
 
 
 
̶   Bueno  voy al sanitario.
 
 
 
Cuando se levanta es inevitable a SeHun soltar una expresión– Mierda JongIn donde esta la otra parte de tu ropa. – Dice con burla, sin poder  evitar la carcajada pese a la mala mirada que le da LuHan, ahora el moreno, se siente un poco avergonzado y trata de cubrirse un poco.
 
 
 
Lleva una crostop que le llega a la mitad del abdomen y unos zapatos de tacón alto.
 
 
 
–El se ve bien SeHun, no lo molestes– Luhan lo golpea. –Anda ve y que el chico vea de lo que se esta perdiendo, camina con seguridad como tu sabes ¡Fighting!–  Lo anima  levantando los pulgares. 
 
 
 Y así lo hace, camina como si fuera el rey del mundo. Alguien tras el mostrador lo ve con el ceño fruncido.
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
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–LuHan ¿estas seguro que funcionará? ya es tarde y no llega.
 
 
–Claro que si JongIn, confía en mi – Le dice mientas le acomoda la solapa del traje rojo que porta su amigo.
 
 
 
LuHan ahora es su apoyo moral,  su compañero para ir al café, aunque la verdad había empezado a amarlos, en sus diferente formas y presentaciones, pero sobre todo los deliciosos postres que preparaba, sentía que había aumentado algunas libres por culpa de ellos.
 
 
El chico de ojos lindos había estudiado para Chef, pero al parecer por problemas económicos no pudo terminar,   pero amaba la repostería, algo le había comentado  LuHan se había ganado un poco mas su confianza, por supuesto mas que JongIn y aprovechaba eso para  de emparejarlos, lo había invitado al cumpleaños de SeHun en  su departamento.
 
 
 
El timbre sonó. Pos supuesto que la persona indicada abrió.
 
 
 
–Buenas tardes, disculpa la demora… – El pelinegro tenia una charola en la mano, pero se quedo estático ante la visión.
 
 
 
JongIn sonreía complacido por la reacción provocada, así que dio un paso mas. –¿Qué ibas a decir? ¿Disculpa por…?
 
 
 
El chico bajó los ojos, era evidente su turbación.
 
 
 
–Por llegar tarde, no pude salir antes de la cafetería.
 
 
 
JongIn  haciendo usos de sus armas, o de su arsenal, acariciaba lentamente la puerta con un dedo mientras, ladeaba el rostro y sonreía con sensualidad.
 
 
 
–Pudiste decirme y hubiera ido por ti. –Diciendo la ultima palabra , toco el hombro del chico y recorrió su pecho. Por supuesto KyungSoo le aventó el dedo.
 
 
 
–Bueno llegue, pero  si ya se acabo, me iré. 
 
 
 
–No, no, pasa por favor –JongIn abandonó la pose sexi  por miedo a que el chico bajito se fuera. Se hizo a un lado dándole el paso.
 
 
 
–No sabia que era una fiesta formal, no tuve tiempo de cambiarme. – Le lanzo una ultima mirada.
 
 
 
–Así esta bien, tu siempre te  miras muy guapo…digo yo…cuando te veo en la cafetería…es uniforme pero…
 
 
 
–Guarda silencio. 
 
 
 
–Hola Soo, me da gusto que vinieras, SeHun no tarda en llegar. – Lo recibió LuHan para evitar una discusión innecesaria.
 
 
 
Lo  que les dio tiempo de platicar y conocerse un poco mas, por supuesto a LuHan y a KyungSoo, aunque de vez en vez dejaban hablar a JongIn.
 
 
 
Cuando SeHun llegó y comenzaron a comer, todo estuvo tranquilo, siendo solo ellos cuatro, pero Ming despertó y cuando LuHan regresó con ella, al ver al tío JongIn rápidamente lloro por el.
 
 
 
–Dámela. 
 
 
 
Cuando Ming se vio en los brazos de su tío, fue inevitable para ella actuar.
 
 
 
–¡Eche!
 
 
 
Debido a que LuHan había decidido dejar de lactar, la niña buscaba tras el traje rojo abierto de JongIn un pezón donde succionar, este reía nervioso de quedar totalmente expuesto luchando con las manos de Ming.  SeHun tenia pequeñas lagrimitas de risa, LuHan trataba de controlar a Ming y Soo solo se mostraba serio.
 
 
 
 
El moreno  creía que era un desastre. 
 
 
 
Después el trance extraño y de degustar la tarta que hizo LuHan con la receta  que le dio el pelinegro  y  comieronel postre que llevó Soo para SeHun pero que fue  prácticamente devorado por JongIn, la  noche pasó  mas tranquila, con una animada charla y  JongIn portando  ahora  la playera mas grande que SeHun le pudo prestar. 
 
 
 
–Agradezco la invitación, pero debo irme.  – Anuncio el chico de ojos grandes.
 
 
 
–¡Puedo llevarte! – Se ofreció el moreno.
 
 
 
–No es necesario.
 
 
 
–Es tarde…es peligroso…tal vez no encuentres autobús…vives lejos.
 
 
 
–¿Cómo sabes que  vivo lejos ? – Le mira extrañado, nunca les he dicho donde vivo.
 
 
 
–Yo…yo…lo imagine.
 
 
 
Jenni era la  cómplice que le pasaba información de Soo  cuando dejaba mejores propinas.
 
 
 
Lo miro dudoso, pero aceptó.
 
 
 
–Está bien.
 
 
 
La despedida poco  formal, después de unas venias y un fuerte abrazo familiar que le dio LuHan, salieron .
 
 
 
–Hoy será la noche–Dijo JongIn a lo bajo a LuHan cuando este lo abrazó.
 
 
LuHan sonrió, porque JongIn le había dicho que estaba preparado para lo que fuera, incluyendo algo de protección masculina por si se deba el momento.
 
 
 
 
Una hora mas tarde, cuando  LuHan dormía abrazado por un cariñoso y cansado hombre,  escuchó sonar su celular, identificando el número de JongIn.
 
 
 
–¿Que pasa?
 
 
 
Un fuerte  sollozo.
 
 
 
–Lo arruine LuHan –Hipidos al hablar. –Dice que no me quiere, que soy un fácil.