No esperaba que se sintiera así...
No esperaba aquella sensación de aquel líquido que le había salpicado en el rostro, su mirada estaba perdida en un punto en la nada.
-Señor Cardinale, ya hay que irnos - decían los caballeros de bronce que le habían sido encomendados para la misión, asintió con la cabeza y los siguió.
Aunque la mayoría de los caballeros de bronce eran mayores que el, pero respetaban el rango de las armaduras, así que Cardinale con sus 13 años de edad y portador de la armadura dorada era a quien le tenían más respeto, aunque ahora se viese como un niño asustado.
La sangre, era lo unico en lo que podía pensar, la sangre tan cálida que había salpicado en su rostro, la sangre que el mismo había sentido cuando golpeaba con tal fuerza a sus enemigos que lograba introducir su mano en el cuerpo de estos, era la primera vez que veía a alguien morir, o más bien... la primera vez que el mataba a alguien de esa forma, normalmente era el veneno quien se encargaba del trabajo sucio, sin sangre, con pocas heridas... las imágenes no se iban de su mente, casi sentía como el frío se apoderan de aquellos cuerpos dejándolos tiesos e inmóviles.
Llegó al santuario con el cálido sol resplandeciendo, y que hacia que su armadura brillará aun más...
Subió templo por templo, sin mirar ni hablar con nadie, ni siquiera con Shijima, que desde que había llegado intentaba comunicarse con el mediante su mente, lo ignoraba completamente.
Se puso frente al patriarca dando el reporte de bajas y el resultado de su misión, casi hablaba de manera mecánica.
-bien hecho caballero de Piscis.. puedes descansar - dijo tras ver que el último guardián no tenía nada más que decir, este asintió, hizo una reverencia y se fue.
Su armadura estaba limpia, pero bajo esta un tenia sangre que quería eliminar, en cuanto noto que nadie lo estaba viendo corrió para poder darse un baño, casi tirando su armadura a medida que caminaba.
-《Cardinale!, no pases de mi, ¿estas bien?...》 -
Cardinale no le hizo caso, simplemente se deshizo de todo lo que le cubría para poder bañarse y quitarse la horible sensación de su cuerpo.
-《Cardinale... ¿estas bien? ¿te hirieron?》 - pregunto mientras tomaba un asiento, ser mudo en esos momentos era frustrante, quería gritarle para saber que le escuchaba, pero por ahora sólo podía esperar, mientras veía como la sangre que se había secado en el cuerpo de su amigo comenzaba a desaparecer con el agua.
Ignorado por completo siguió al Caballero de Piscis hasta su habitación, donde este se tiró en la dura cama sin decir palabra alguna, por un momento Shijima sintió que era invisible.
Se sentó a su lado, esperando a que el rubio se dignara a tan siquiera mirarle.
-Shijima... - murmuró tras un largo momento de silencio - ¿crees que lo que hacemos esta bien? - pregunto en un susurro apenas moviendo la cabeza para ver al pelirrojo - hoy... mucha gente murió...
-《eran espectros...》
-eran personas de todas formas... y... y los matamos a todos... - dijo mirando hacia su pared de piedras - cuando nosotros vayamos a morir... -
-《somos caballeros de Oro... estamos destinados a morir en batalla... pero de todas formas... todos los seres vivientes morirán en algun momento, solo los dioses...》
-no quiero morir... - dijo interrumpiendo al pelirrojo - no quiero morir... - repitió acercándose a él para poder abrazarlo, Shijima correspondió a aquel abrazo, intentando reconfortarlo y calmarlo, nunca creyo que el rubio tuviera miedo a la muerte, podía sentir su temor y levanto su rostro dedicándole una sonrisa cálida y le dio un beso en la frente.
-《entonces lucha por no morir...》 - Shijima revolvió los cabellos rubios de su amigo y se puso de pie - 《vuelvete mas fuerte Cardinale, así no morirás tan fácilmente, no sería divertido sin ti cuando Hades venga a atacarnos》 -
-tu no le temes a nada...
-《yo enfrentó mis miedos... eres un caballero de Oro... comportate como uno》- dijo dándole un leve golpe en la cabeza.
-auch... - se llevó ambas manos a su cabeza y sonrió - esta bien... lo siento... -
-《no vuelvas a asustarme así, parecias un Zombie... ahora me voy; escape por que...》
-ah... y mi otro beso? - pregunto señalando su mejilla para molestar un poco a su amigo quien desvió la mirada, aquel beso en la frente habia sido para calmarlo y quizás un gran error, ahora Cardinale tendría con que molestarle por mucho tiempo.
-《jamás menciones eso... jamas》 - shijima salió de ahí casi corriendo sientiendo que su corazón latía con fuerza y una calidez en sus mejillas que seguro era un sonrojo, que por suerte su amigo no habia notado, ya que podía oírlo reírse a carcajadas mientras el se alejaba rapidamente de aquel lugar.
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