Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Mi alma te pertenece por UzUchi Sandoval

[Reviews - 1]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Disclaimer:Los personajes son propiedad de Masashi Kishimoto, sólo la historia es de mi autoría.

Reto terrorifico del grupo Shhh...  SasuNaru  NaruSasu 2018

Este One-Shot va dedicado a Carolina González y Suthea Reltimah.

Notas del capitulo:

Reto terrorifico Shhh... SasuNaru NaruSasu 2018

 

Naruto es un joven soñador con la meta de llegar al más allá para reencontrarse con su familia, por años estuvo buscando alguna oportunidad pero nadie pudo ayudarle, hasta que un día encontró un demonio que podría hacer su sueño realidad, pero había una sola condición. Naruto debía tomar el puesto temporal de una parca recolectora de almas, llegar a un cierto número de almas humanas y la última alma debería ser de un no humano, un alma el cual sea totalmente digna para que aquel pacto fuera terminado.

Por meses Naruto estuvo recolectando almas como le había ordenado aquel demonio, pero al final de la lista estaba el nombre de aquella alma la cual no pertenecía a un humano, era la última, con ella podría cumplir su preciada meta, entonces, emocionado y con la postura en alto fue hacia aquel ser para conseguir su mayor sueño.

Cuando encontró a aquel ser quedó impactado pues era un bakeneko y nunca había logrado ver uno a pesar de todo por lo que antes había pasado y es que lo más impresionante es que era un cambiaformas, esos que solo podrías encontrar en libros y que según ellos ya no existían desde hace siglos. ¿Entonces esa última alma era el único Bakeneko que existía?

 El rubio le explico al ser que debía llevar su alma pues ya su tiempo se había acabado, pero éste se negó de una manera que no le pareció para nada agradable.

 

 — No quiero morir aún. —Dijo de nuevo el ser cuyos cabellos eran oscuros como la noche al igual que sus ojos. — Mucho menos me dejaré llevar por una parca con cara de idiota que está cansado de su trabajo. — Lo último lo dijo con burla lo que hizo que el rubio gritara de una forma demasiado infantil.


— ¡No te lo pregunté! — Exclamó Naruto mirando al azabache con un puchero. —Además es tu última vida y ha llegado tu tiempo, debes de morir ‘ttebayo. — Explicó mientras hacía ademanes con las manos.

— Dilo cuantas veces quieras, no va a funcionar. — Respondió cruzando los brazos mientras se dio la vuelta alejándose un poco del rubio, dejando a éste solo con las palabras en la boca. Era divertido ver como el rubio se desesperaba por no conseguir su cometido, había pasado mucho tiempo desde que habló con otro ser. Una pequeña sonrisa nostálgica se formó en su rostro.

 

Naruto al ver que el desgraciado gato le dio la espalda alejándose de él, hizo una rabieta gritando improperios hacia ese cambiaformas arrogante. Sentía una extraña sensación, si quisiera hubiera tomado su alma sin el consentimiento del otro, pero algo le detenía. Algo dentro de él le decía que no debía hacerlo, o más bien, no era el momento.

Entonces el rubio se cansó de gritar y cerró su boca para meditar, no llegaría a nada si discutía con el bakeneko. No si deseaba conseguir su alma. El cambiaformas lo miraba disimuladamente, se preguntaba qué había detenido al rubio para no seguir con sus gritos hacia su persona.

 Naruto luego de pensar su situación, rompió el silencio, además no podía quedarse callado por mucho tiempo.


— Soy Naruto Uzumaki.

 Aquella conversación se profundizó más, se presentaron de una mejor manera y Naruto insistió tanto en quedarse al lado de Sasuke diciendo que por ahora no pensaba irse de aquel lugar pues quería saber más sobre él, lo peor es que no sabía el porqué. Sasuke era muy reservado y se le dificulta un poco relacionarse con los demás, pero con ese rubio cabeza hueca era diferente, había algo en él que le atraía.


Pasaron los meses y llegaron a conocerse muy bien. Tenían experiencias un tanto divertidas, algunas tristes, otras muy locas casi rayando el peligro, pero siempre estaban uno al lado del otro. Compartían una conexión fuerte y sin igual.


Sasuke sabía que el rubio era alguien especial, no era como los otros seres con los que había convivido en siglos anteriores. Podría decir que Naruto era tan cercano como lo llegó a ser su familia y al notar la bondad que abundaba en el corazón del rubio, a pesar de ser la parca que arrebataba la vida a todo ser viviente y con el tiempo tomaría la suya, decidió compartir con él su lugar especial.

 

Ese lugar era un secreto total y Sasuke deseaba mostrar con ese hecho que Naruto le importaba demasiado. Además no podía negar que con los meses un sentimiento fue creciendo en su corazón.

 

— ¿Ya casi llegamos, teme? — Preguntó Naruto siguiendo a Sasuke, pues le estaba encaminando hacia aquel lugar especial.


— Ten paciencia, dobe. — Siguió adelante mientras miraba de reojo a Naruto notando que en su rostro se pintaba la desesperación.

Pasaron los minutos, habían llegado al lugar que Sasuke quería mostrarle a Naruto, aunque en realidad solo se trataba de un puente con una vista que les permitiría ver el amanecer y pasar un buen rato juntos.


El corazón de Naruto empezó a latir a un ritmo demasiado rápido, sonrió de oreja a oreja, era un lugar muy hermoso, lejos de la vista de curiosos. Dio pequeños pasos hasta acercarse al pasamanos del puente. Sasuke veía el rostro del rubio embelesado, pues el brillo en sus ojos le indicaba que el lugar le había gustado.

 

— Es hermoso, Sasuke. —Naruto sin pensarlo dos veces se lanzó a Sasuke para abrazarlo fuertemente.

— Naruto, entiendo que te guste mucho pero no me gustaría ser asfixiado... — Dijo el azabache con una pizca de burla.

— Oh, lo lamento. — Naruto soltó a Sasuke pero por alguna razón sintió como si quisiera tenerlo abrazado el resto del día.

— Ven, vamos a sentarnos en la orilla del puente. — Caminó pero en el momento que lo hizo sintió como el otro tomaba de su mano y caminó junto con él.

Ese día significó demasiado para Naruto, aquel detalle le hizo sentir preciado e importante por el de cabellos negros, en su interior sentía crecer algo enorme que le quemaba el pecho, algo que era provocado por las acciones del bakeneko... en ese momento sentía un abrumador peso en su ser, ya que sus anhelos le traicionaban, pues sentía que empezaba a despertar sus sentimientos por Sasuke.


Hubo un momento en el que sintió las desesperadas ganas por besar a Sasuke, era tan fuerte que estuvo a punto hacerlo, pero después de reaccionar se alejó rápidamente intentando actuar como si nada de eso hubiera pasado e intentando ocultar lo que sentía en ese momento.

El día pasó lento para ambos, estuvieron charlando sobre sus vidas, Sasuke le contó a Naruto el porqué no quería morir, se trataba de un trauma de cuando era pequeño, pues los padres de Sasuke habían sido asesinados por su hermano mayor y el azabache se sentía culpable por ese día no haberlos ayudado, aunque solamente era un niño y no podría culparse a sí mismo.

***

En muchas ocasiones  pasaron incidentes muy extraños que hacían que ambos se confundieran y cada vez su lazo de amistad se fue transformando en amor, pero nunca se atrevieron a decirse lo que sentían.

Hasta que un día, Halloween llegó, Naruto y Sasuke quedaron de reunirse en cierto lugar de aquella aldea para festejar esa noche que era muy especial para ambos. Naruto quería hablar con Sasuke sobre sus sentimientos, sobre todo lo que el azabache le había traído a su vida los últimos meses… Felicidad ¿Eso era? No lo sabía, Naruto a veces creía que prefería quedarse con Sasuke siempre e incluso estaba dispuesto a dejar su gran sueño por  este.

— Sasuke…—  Murmuró Naruto lo que hizo que Sasuke alzara la cabeza para mirar al blondo.

— ¿Qué sucede? — Preguntó Sasuke sin apartar su mirada y esta vez posando sus ojos en los ojos del otro.

Naruto quedó en silencio unos segundos pero después habló, claro que no sin antes soltar varios suspiros ya que se sentía demasiado nervioso y a la vez desesperado para saber lo que Sasuke sentía.

— Bien… Yo he querido contarte algo y pensé que este día sería el correcto para hacerlo. —Habló tragando en seco.

— Naruto, yo también quiero contarte algo. —Interrumpió a Naruto, la voz de Sasuke sonaba como si fuera a contarle algo de suma importancia que por unos segundos el rubio olvidó lo que iba a decirle. — Yo también pensé que este es el día correcto para que lleves mi alma, adelante, ya no me opondré a que lo hagas, pues lo he pensado y el momento ha llegado.

— ¡Eso no es lo que quería decirte! — Exclamó sintiendo como su voz se le iba lentamente al tener un nudo atorado en su garganta. —Sasuke yo… Te amo, ¡No voy a llevar tu alma! — Dijo con desesperación moviendo las manos como si estás le ayudará a expresar aquella lluvia de sensaciones por la que su corazón pasaba en ese momento. — ¿Qué pasará conmigo? Quedaré solo, como lo estaba antes de conocerte.

— Naruto, es por eso mismo que quiero que lleves mi alma, porque te amo y quiero ofrecerme, además ya no vale la pena es mi última vida y de todas maneras moriré ¿Acaso no te das cuenta? No estarás sólo, cumplirás tu sueño y verás a tu familia cuando vayas al más allá.

— Pero… Ambos sabemos que si no estamos juntos estaremos totalmente solos, Sasuke… No importaría quienes son las personas que nos rodean… si no estamos juntos nada será igual. — Contestó al otro llevando su brazo lentamente a su cara para cubrir sus lágrimas.

— Naruto, Si tu sueño se cumple yo estaré bien, créelo, ahora hazlo, cúmplelo, no te detengas más y encuentra a tu familia, ese es mi sueño.

Si Sasuke deseaba aquello Naruto no iba a negarlo y no podía hacer nada más que llevar el alma de Sasuke, el azabache tenía razón, Naruto no podría impedir que muriera pues en algún momento debería de partir  y en eso el rubio era el único que podría ayudarle.

El azabache confiaba plenamente en Naruto, además ya era hora de que se reencontrara a su familia y aquel miedo que tuvo desde los seis años desapareciera.

Todo se tornó blanco lo que indicaba que Sasuke ya había muerto y que el pacto que Naruto antes había hecho ya terminó y ahora partiría al más allá junto con su familia, pensó que lo enviarían al más allá en cuanto se librará del pacto, pero al parecer no fue así, todo seguía en blanco y no había rastros de vida alguna así que camino solamente para ver si encontraba algo que le indicara que le llevaría al lugar que antes tanto anhelaba.

Después de minutos de tanto caminar empezó a ver como poco a poco se acercaba a un puente en donde parecía que había alguien sentado en la orilla mientras observaba un lago, Naruto corrió al ver que esa silueta era demasiado similar a la de Sasuke y una vez llegó al puente gritó su nombre con todas las fuerzas del mundo, el azabache volteó a verlo sonriendo de lado al encontrarse de nuevo con Naruto.

Ambos eran niños, ambos continuarían su vida como unos niños, sólo que esta vez estarían juntos para toda la eternidad sin que algo se los impidiera… Naruto y Sasuke habían tenido el derecho a renacer y nunca lo supieron hasta en aquel momento donde ambas miradas se volvieron a cruzar una vez más en aquel puente donde sus sentimientos empezaron a cambiar.

 

Desde ese día ambos pasaban halloween en aquel puente tan especial ambos.


FIN.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).