Al siguiente día me prepare para salir del castillo y encontrarme con mis amigos, aquellos que no veía hace días y a los cuales ya extrañaba. Aunque no me sentía concentrado debido a todo lo que había pasado ayer…aquel rey que tanto detestaba me había mostrado su lado mas vulnerable, aquel que gritaba que estaba roto al igual que yo y no pude evitar acariciar sus cabellos mientras el dormía, pero de ello jamás se enteraría ya que quedo profundamente dormido y yo me escabullí sin dejar rastro
-¿tienes todo listo?-pregunto el guardia real mientras yo me acomodaba las prendas viejas que tenia e iba a ver al rey.
-si. No es como que tenga muchas cosas- respondí distante. No le perdonaría el haber lastimado a mi amigo, aunque el también estuviese enojado conmigo
-de acuerdo. El rey te espera en la sala del trono- estaba nervioso no iba a negarlo. Aun se me venían a la cabeza las imágenes de anoche, el abrazo, sus sollozos, su debilidad
- esta bien- respondí entrando a aquel lugar y haciendo una reverencia de respeto, el cual no merecía.
-¿vas a ir con esa ropa?- pregunto y yo me sentí expuesto. Era la única que tenia además del uniforme con el que trabajaba
-si. No tengo otra- respondí sarcástico y el río parándose de su trono y viniendo a mi lado
-pues acompáñame- susurro arrastrándome hasta un cuarto en donde había demasiada ropa para mi gusto, mas de la que alguien podría soñar con tener.
- ¿Por qué me trajiste aquí?- indague curioso a lo que el contesto arrojándome una camisa y un pantalón muy bonitos, ropa que nunca había usado
-porque deberías tirar lo que tienes y usar esto. No puedo permitir que te veas así- ¿así como?
-pues lo siento por no tener el dinero de su majestad pero me gusta mi ropa- cuando quise salir el me detuvo
-acéptala, es un regalo de tu rey y no puedes negarte- mi orgullo se veía afectado ya que si era una orden como su sirviente no podía negarme
-esta bien pero solo porque es una orden, no porque me guste- sin mas me aleje de allí para ponerme las prendas y cuando volví el se quedo observándome, parecía hipnotizado y aunque debería darme asco solo me ponía nervioso
-te queda bien- dijo saliendo de la habitación para indicarle unas cosas a Takano las cuales no escuche
-¿ya me puedo ir?- grite. Estaba fastidioso. Necesitaba ver a mis amigos
-claro…y Misaki…-¿Qué quería ahora?- no vuelvas a entrar a aquella habitación- maldición…había roto las reglas y ahora quería saber mas el pasado de aquella persona
-de acuerdo- respondí mientras me iba con Takano al pueblo, a aquella posada en donde mis hermanos me esperaban ansiosos
-Misakiiiii- grito Chiaki arrojándose a mis brazos mientras yo lo abrazaba
-te extrañe- le dije con lagrimas, de verdad los había extrañado demasiado. La vida no es igual sin ellos
-Hiroki es pésimo reemplazo. Me grita todo el tiempo y Kisa solo anda buscando nobles- ¿hace cuanto no reía?
- pues no te acostumbres…el rey me dejo salir solo por un par de horas- su cara de ilusión ahora paso a ser de tristeza. Lo siento Chiaki pero aun no puedo volver.
-Misakiiii y woo que tenemos aquí, al guardia real - Kisa jamás cambiaba, seguía buscando a alguien con dinero
-ya te lo dije la anterior noche, aléjate de mi- contesto Takano enojado mientras se sentaba a beber algo
-el es malo Kisa. No quiero que te acerques a el- le dije mientras el me abrazaba y ponía un puchero
-de acuerdo pero solo porque lo dices tu- sin mas los tres nos abrazamos fuertemente pero aun faltaba alguien
-¿y Hiroki?- pregunte extrañado ya que no habían rastros del mayor
-se fue con Nowaki. Ya sabes…un conde- ¿Qué? No podía ser cierto… no quería que nadie saliera con un noble. Solo era para sufrir
- ¿y ustedes lo permiten? ¿No vieron lo que me paso a mi? los de la realeza son solo viles personas- no quería que Hiroki saliera herido
-tranquilo Misaki…Nowaki es buena persona. Se ve que ama a tu amigo y de eso estoy seguro porque lo conozco. Por cierto me alegra verte- Yukina se había unido a la conversación y yo le estaba muy agradecido por habernos dado refugio
- solo…no quiero que pase por lo que yo. Pero si tu dices que es una persona buena deberé creerte- sin mas nos dimos un abrazo y observe de reojo como Kisa se alejaba.
-oye… ¿crees que tendré una oportunidad con tu hermano?- pregunto y yo no pude evitar reírme. Kisa jamás saldría con alguien pobre pero no podía desilusionarlo.
-Mi amigo es algo especial pero quizás si le das espacio el vendrá a ti.- no mentía, Kisa odiaba a la gente sofocante
-esta bien. Esperare. Por cierto ¿Cómo están las cosas en el palacio? ¿El rey esta bien?- el pueblo estaba en ruinas pero aun así la gente se preocupaba por aquel idiota ¿que rayos había ocurrido?
- supongo que si. No es como si lo conociera mucho. Además es un arrogante, bueno para nada y siempre esta triste o algo parecido. ¿Cómo pueden preocuparse por el cuando el ni siquiera se preocupa por su pueblo?- estaba enojado, no entendía, los reyes son lo peor y la gente los amaba sin darse cuenta
- no puedo contarte lo que ocurrió…pero solo puedo garantizarte que Akihiko es una buena persona y siempre nos ayuda aunque parezca que no – estaba mas confundido que antes
-¡Amigo! dame dos cervezas- grito el guardia real quitándome la atención de Yukina
-luego seguimos hablando- respondió y yo fui con mis amigos a dar una vuelta ya que yo si tenía permiso para circular
-cuéntanos todo. ¿El palacio es grande? ¿Cuantos empleados hay? ¿Viven muchos nobles?-Kisa no dejaba de preguntar y yo ya estaba pediendo la paciencia
-pues…la gente es amable. Todos allí parecen felices no como en el castillo de Ijuuin. Además hice un amigo que se llama Ritsu y es una buena persona- la cara de Kisa se deformo
-¿Ritsu? ¿Ese Ritsu? ¿El que tiene el corazón del guardia? Lo estuvo mencionando toda la noche mientras bebía. No quiso besarme- al parecer los encantos de mi amigo iban disminuyendo
- pues es triste porque ambos están enamorados pero Takano esta comprometido con una duquesa- pensaba en Ritsu y se me partía el corazón, era la misma situación de mierda
- ahora entiendo porque son amigos. Ambos comparten heridas- susurro Chiaki quien ahora parecía apagado. Siempre quise saber lo que ocultaba pero jamás quiso decirme
-lo se. El es bueno. Espero que algún día lo conozcan- sin mas los tres nos acostamos en la suave hierba del lugar y yo no pude evitar contarles todo lo que me había sucedido con el rey
- Misaki, ¡dime tu secreto! Los reyes siempre caen rendidos ante ti- ¿Akihiko y yo? Ni en mil años
-no digas tonterías. Al parecer paso algo con su esposo pero nadie quiere decirme. Es como un tema prohibido- tenía tantas preguntas sin respuesta
-al menos se te ve feliz. Ya no tienes el rostro triste que tenias cuando vinimos aquí- era verdad…hace bastante que no pensaba en Ijuuin y en su traición. Me sentía más liviano
- si…aunque a veces me imagino la vida que hubiésemos tenido…alejados de todo…teniendo una granja…criando niños quien sabe- lo había amado tanto y el solamente me clavo un puñal en la espalda
-serás feliz Misaki. Lo prometo- ¿seria feliz alguna vez?
-chicos escóndanse- sin mas Kisa nos arrastro a un arbusto en donde pudimos ver a una pareja tomada de la mano
-espera…ese es… ¡Hiroki!- exclamo el oji azul haciéndonos sorprender ya que nuestro amigo estaba abrazando al conde y tenia el rostro completamente sonrojado. Faceta que nunca nos mostró.
Me agradaba que mi amigo estuviese enamorado, al menos no seria un cascarrabias para siempre, sin embargo tenia miedo
-¡lo beso lo beso!- si Chiaki seguía gritando nos descubrirían
-¡ya cállate¡- le dijimos tapándole la boca y observando como nuestro amigo luego de decirle algo se retiraba dejando al conde solo
-iré a hablarle- susurre tratando de salir pero antes de poder hacerlo una chica se acerco a Nowaki y lo beso, dejándonos sorprendidos a los tres
-lo sabia….no se puede confiar en los nobles. Vámonos- sin mas nos retiramos y yo planeaba decirle todo a mi hermano, no dejaría que le rompan el corazón como a mi.