Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Atracción sobrenatural por ValexWalker

[Reviews - 7]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Como prometí el cap es algo más largo, espero les guste.

 

—Tú me conoces muy bien ¿cierto?

Mientras observaba el malvavisco incrustado en la larga y delgada vara de madera que sostenía sobre la fogata, Lori sonrió al escuchar la pregunta de su esposo. ¿Era necesario siquiera responder?

—Por supuesto—giró hacia él y sus miradas se encontraron—eres mi esposo

—Entonces sabes bien que no soy bueno iniciando conversaciones, así que te lo diré directamente—no apartó sus ojos de los contrarios por más que el miedo se lo gritase— ¿Qué fue lo que te llevó a iniciar una relación con Shane?

Rick pudo notar el rostro de Lori volverse pálido de repente y su expresión ir de lo aterrada a lo altanera en tan solo unos segundos.

— ¿Cómo fue que te enteraste?—su voz sonó demasiado fría

— ¿No piensas negarlo?

— ¿Debería?

—No, no tendría sentido—llevó una de sus manos hacia el rostro y suspiró pesadamente—los vi juntos

—Rick, escucha yo…

—No, déjame hablar primero— interrumpió— desde hace algún tiempo supe que algo estaba pasando, pero me engañé inventando cualquier excusa y…—hizo una pausa— en fin, lo que trato de decir es que a pesar del dolor y la decepción que sentí, yo aún te sigo amando Lori.

— ¿Decepción? —aventó la delgada vara hacia el fuego y se reincorporó del suelo con enojo emanando de todo su ser— ¡¿No crees que eso es lo que yo tengo derecho de decir?!

Al verla exaltada, Rick se apresuró en  ponerse de pie.

—Lori…

—Todo lo que esperé de nuestro matrimonio, todo lo que pensé viviría a tu lado—apretó los puños mientras veía fijamente al hombre de cabello castaño oscuro frente a ella— ¡no fue más que una decepción!

— ¡¿Y por eso te acostaste con mi mejor amigo?!—Él también levantó la voz, toda la furia y el dolor que prefirió guardarse habían superado su autocontrol— ¡Con una de las personas más importantes para mí!

—Sé que no estuvo bien, pero Shane y yo no pudimos luchar contra la atracción que sentíamos; lo intentamos, pero no resultó.

—Tsk…—caminó en círculos tratando de calmarse y evitar que sus ojos lo traicionasen, no debía permitirse el llorar— ¿lo amas? —preguntó luego de casi un minuto de silencio

—Yo no… no lo sé— desvió la mirada hacía el suelo cubierto de pequeñas ramas y hojas secas

— ¿Desde cuándo?

—S-Seis meses

—Ya veo— Rick se acercó hacia su esposa quedando su cuerpo a pocos centímetros del de ella—entonces mi intento por compensarlo fue un fracaso desde el inicio

—Lo lamento mucho, de verdad—Lori alzó la mirada y sintió un dolor agudo en el pecho al observar los ojos azules de su esposo enrojecidos por las lágrimas que había comenzado a derramar—Rick, en serio no sabes lo que daría por evitar todo esto

—Quédate conmigo—en un impulso tomó el rostro de Lori con ambas manos y apegó su frente a la de ella, pidiendo con su mirada, rogando con sus lágrimas— te prometo que todo será distinto, que  seré el hombre que siempre deseaste que fuera, así que por favor, quédate a mi lado

—Rick, no hagas esto—habló en susurros y se separó un poco para poder mirar fijamente  los ojos de su esposo—a estas alturas debiste ya haberte dado cuenta que por más que intentes ser el tipo de hombre que quiero, será imposible; no puedes cambiar tu forma de ser por la fuerza, estarías viviendo una mentira y jamás serías feliz, ninguno lo sería

—Lori…

—No, escucha—guio la palma de su mano hacia de una de las mejillas de Rick y la acarició gentilmente —cometí un error en engañarte de esta forma durante tanto tiempo, debí habértelo dicho desde que lo mío con Shane comenzó, pero al principio no era nada más que una aventura, nunca pensé que llegaría  a más, nunca pensamos que esto se volvería así de serio hasta ayer por la tarde

— ¿A qué te refieres?

Lori se apartó del sheriff y apretó los labios en señal de frustración, Rick pudo notar entonces que lo que fuese que ella estaba por decirle, le resultaba muy difícil.

—Estoy embarazada

El mundo le cayó encima al escuchar solo esas dos palabras. Cualquier esperanza que pudiese haber guardado hasta ese momento había sido fulminada sin dejar rastro alguno luego de aquella declaración.

Había pasado mucho tiempo desde la última vez que había intimado con Lori, y recordaba muy bien el haber usado un preservativo, significando entonces que la criatura que yacía dentro del vientre de su esposa, llevaría el apellido Walsh cuando naciera.

—Felicidades

—Shane y yo decidimos hablar contigo en unos días, pero bueno, todo se adelantó y…—suspiró—lo siento de verdad

—…—Ya no había nada más que decir, todo había quedado sumamente claro entre ambos y en ese momento lo más sensato era retirarse, ser un buen perdedor—aún no es tan tarde ¿te parece si regresamos?

— ¿Eh?... S-Sí, claro

Se dirigía a empacar nuevamente la tienda de campaña cuando un fuerte ruido captó su atención y la de su aún esposa.

— ¿Qué fue eso?

—No lo sé

Fue a su camioneta rápidamente y tomó su arma, el no dejaba de ser un sheriff ni siquiera cuando iba de campamento y en ese momento era una ventaja, o eso parecía.

Por indicación suya, Lori se mantuvo detrás de él y reinó el silencio durante unos segundos hasta que otro ruido fue percibido. Esta vez se escuchó el crujir de las hojas, era evidente para alguien como Rick que no se encontraban solos, y esperaba fuese algún animal del bosque.

Recibió la linterna que Lori recogió del suelo y comenzó a caminar hacia donde se produjo el ruido, lo hacía cautelosamente como tenía acostumbrado en las redadas junto a Shane, conteniendo la respiración por momentos y poniendo todo el peso en sus talones.

Le faltaban menos de dos metros para alcanzar el lugar cuando una sombra se deslizó rápidamente entre los árboles, las ramas de estos crujieron fuertemente y una risa burlona llenó todo el silencio instaurado hasta el momento.

-¡Ahh!— Lori no pudo evitar gritar por la sorpresa y el miedo— Rick ¡¿Qué es eso?!

Inmediatamente él se colocó delante de ella y trató de alumbrar a la sombra, pero esta se movía tan rápidamente que sus intentos fueron fallidos.

—  ¡¿Quién eres?!- gritó cansado de aquel juego—Mi nombre es Rick Grimes y soy sheriff del pueblo, así que será mejor que te muestres

Una ráfaga pasó por su lado y para cuando se dio cuenta ya tenía varios cortes profundos en el brazo izquierdo. La sangre no tardó en brotar aterrando más a la pelinegra, quien comenzó a gritar llamando su nombre.

—  ¡Rick! —sin pensarlo dos veces rasgó parte de la blanca camiseta que llevaba y la ató alrededor de la herida, en algo debía ayudar a detener la sangre —Vas a estar bien, cariño, debemos irnos y…

—Oh ¿Por qué tanta prisa? Nos estábamos divirtiendo

Un hombre alto de cabellera y vestimenta negra apareció frente a ellos en un instante. Rick apretó su arma y no dejó de apuntarla hacia él, era todo lo que tenía. Sea lo que fuese aquel sujeto, su instinto le decía que no era algo parecido a lo que hubiese enfrentado antes, un humano no podía moverse a esa velocidad.

— ¿Quién…? No, ¿Qué eres tú?

—Me gustan los hombres inteligentes— sonrió con malicia—y más si lucen como tú

— ¿Qué es lo que quieres de nosotros? — esta vez fue Lori quien habló, aparentaba valentía aunque por dentro se encontrase aterrada

—No hablaba contigo, pero te responderé—en menos de un segundo se colocó tras la pareja, no sin antes arrebatarle el arma a Rick en el acto— estaba sediento y no me pude resistir

— ¿Cómo…?

—Esto no los ayudará, dulzura—miró fijamente a Rick mientras apuntaba el arma contra su sien—es inútil

El estruendoso sonido del arma siendo disparada hizo eco por el lugar, cayendo luego esta al suelo, pero no así el cuerpo del sujeto.

Rick y Lori no podían creer lo que estaban presenciando, aquel sujeto se había disparado en la cabeza y seguía allí frente a ellos, de pie y con una sonrisa siniestra en el rostro.

— ¿Esto los aterró?

Rick esperaba internamente que alguien más hubiese escuchado el disparo y se dirigiese al bosque para ayudarlos, pero sabía que la probabilidad de que eso sucediese era mínima. Casi nadie transitaba por la carretera al ponerse el sol al ser King County un pueblo no muy grande.

Él debía pensar en una alternativa, algo que pudiese ayudar a que Lori y el bebé que estaba esperando estuviesen a salvo y tras recrear varias situaciones alternas en su mente llegó a una conclusión.

— Toma la camioneta y vete sin mirar atrás

— ¿Qué? No, no pienso…

—Sé feliz, Lori

Rick se abalanzó contra el sujeto frente a ellos mientras una aterrada Lori obedecía a lo dicho por su esposo.

A pesar de lo bueno que era en la lucha cuerpo a cuerpo, el hombre había logrado evitar todos los golpes que el sheriff propinaba, riendo mientras observaba como la sangre brotaba cada vez más de la herida en el brazo de este debido al fuerte movimiento.

 —Hueles delicioso

— ¡Cierra la boca!

Al escuchar el ruido de los neumáticos se sintió aliviado, todo valdría la pena si ella lograba escapar, no le importaba perder la vida allí  si era capaz de mantenerla a salvo.

—Oh, No creerás que la dejaré ir ¿o sí?

De un solo movimiento el  extraño sujeto lo tomó del cuello, pudo sentir mientras lo asfixiaba sus uñas afiladas incrustarse en su piel antes de ser empotrado fuertemente contra la corteza de un árbol.

Quedó completamente aturdido luego del golpe. Llevó una de sus manos con dificultad hacia la parte trasera de su cabeza y sintió el líquido caliente empaparla por completo.

Luego de eso escuchó un fuerte golpe secundado del grito aterrado de Lori. Fijó su nublada vista hacia la camioneta algo alejada de donde se encontraba y observó como aquel monstruo tomaba del cuello a su esposa y en un instante se aparecía frente a él, aventando rudamente contra el suelo su delgado cuerpo.

—N-No le hagas daño— habló con dificultad, estaba a punto de perder la conciencia—por favor, déjala ir

—No puedo hacer eso—  acercó su rostro al de Rick y olfateo su cuello durante unos segundos—a pesar de lo mucho que me gustas, no puedo cumplir ese deseo

—Mátame a mí, no le hagas daño

—Shhh— lamió la piel del sheriff provocándole un inmenso asco—deja de hablar

Con toda la fuerza que pudo reunir, golpeó la cabeza del hombre con la suya y se arrastró hacia donde se hallaba Lori. Sacudió su cuerpo con fuerza para evitar que ella perdiera la conciencia y la ayudó a reincorporarse del suelo junto a él.

—Es muy importante para ti ¿eh? — La sonrisa divertida que le dedicó no provocó más que terror en él— Los humanos son idiotas, debes saber que yo escuché su conversación, Rick Grimes— la luz de la fogata iluminó el rostro y a su vez los colmillos sobresalientes que formaban parte de su dentadura— ¿En verdad eres capaz de sacrificarte por esta perra?

Rick intentó correr junto a Lori, pero le fue cerrado el paso de inmediato, la velocidad de ese malnacido tenía una sola explicación y luego de todo lo que había presenciado, el escepticismo no cabía lugar en él.

—No te irás, deberías haberlo entendido ya

Emitió un grito de dolor al ser desgarrado por aquel sujeto. De su estómago chorreaba el líquido escarlata empapando su camisa y provocando que cayese de rodillas al suelo por el dolor.

— ¡Rick!—  Lori, un poco más recuperada, se agachó junto a él y apretó con ambas manos la herida

—Huye, por favor

Dejó de sentir la presión en su estómago y observó con impotencia, rabia y dolor el cómo el monstruo tomaba de los cabellos a su esposa y la levantaba del suelo poniéndola frente a él.

— ¡Ahh! ¡Suéltame, maldito! — forcejeó y pateó todo lo que pudo, pero al agarre no se suavizó ni un poco

—Presenciarás tú mismo lo que tu debilidad no fue capaz de proteger

— No…

—Despídete de tu querida esposa

— ¡No! ¡Rick, Ayúdame!

— ¡No! ¡No lo hagas!

Sus gritos desgarradores no fueron de importancia para aquel sujeto. Él clavó sus colmillos en el cuello de Lori y comenzó a succionar su sangre.

A pesar del dolor y el estar al borde de la inconciencia por la pérdida de sangre, Rick se reincorporó cómo pudo y se abalanzó contra él. Sin embargo, no pudo apartarlo de Lori ya que una mano rodeo su cuello y comenzó a asfixiarlo con fuerza.

Hizo todo lo que pudo por soltarse, el aire le comenzaba a faltar y el estar viendo cómo el monstruo drenaba la sangre de la mujer que amaba frente a él lo puso al borde de la locura; él tenía que salvarla, los ojos de ella se encontraban abiertos mirándolo fijamente, no sabía si aún se encontraba consciente, pero la expresión de terror y súplica emanaba de ellos. Le estaba pidiendo que la ayudase, que no la dejase morir.

—L-Lori

Las garras del sujeto incrustándose en su garganta terminaron por drenar sus fuerzas. Por más que internamente gritase y rogase a su cuerpo el mantenerse consciente, este parecía no poder aguantar más. Había perdido mucha sangre, era casi un milagro que aún estuviese despierto.

—Oh no, no te duermas

Sintió su cuerpo golpear de lado contra el suelo y se quejó por el dolor. Respiró con dificultad por unos segundos tratando de recuperar el aire perdido y fijó su vista en el sujeto vestido de negro. Al no ver a su esposa junto a él, se desesperó y comenzó a llamarla.

—L-Lori

—No gastes tus energías, ella ya no puede oírte

Rick sintió un escalofrío recorrerlo completamente al escuchar aquellas palabras, buscó con la mirada a Lori y la halló, a pesar que su vista se había tornado algo borrosa, tirada a un lado de su agresor. Se encontraba completamente inmóvil, no podía percibir el más mínimo movimiento proveniente de ella y todo dejó de tener sentido en ese instante.

Imparables lágrimas comenzaron a brotar de sus ojos, no le importó el seguir apretando sus heridas para evitar que la sangre continuase brotando libremente o arremeter contra el causante de todo aquello, en ese momento solo importaba Lori, el llegar a ella y abrazarla fuertemente.

Con ayuda de sus brazos y piernas se fue arrastrando en su dirección, en su mente solo se repetía el nombre de la profesora de arte y el dolor que pudiese sentir debido a la acción, lo empujaban a no parar un segundo.

—Deja de moverte— se acercó al cuerpo de Rick y se colocó de cuclillas junto a él— ¿Quieres morir?

El aludido no respondió, ni siquiera escuchó las palabras del sujeto, lo único en lo que se enfocaba era en llegar hacia Lori, eso era lo único que importaba.

—Si no quieres responder está bien— se relamió los labios y de un rápido movimiento estampó el cuerpo de Rick de espaldas contra el suelo provocando que emitiese un fuerte quejido de dolor—tengo un regalo para ti

La imagen era sumamente borrosa, pero logro distinguir el rostro del sujeto acercarse al suyo. Sentir su nariz rozando contra su piel le provocó tal repugnancia que le era preferible morir mil veces antes que soportar un segundo más cerca de él.

—Tu aroma es exquisito

Odiaba que sus brazos no le respondieran, su mente les ordenaba moverse y apartarlo, golpearlo, matarlo, pero estos no obedecían, estaban prácticamente muertos.

—Sería un pecado dejar que murieras, así que…

El aire le faltó de golpe cuando el hombre clavó sus colmillos en su cuello. El dolor era indescriptible. ¿Eso es lo que Lori había soportado? No se lo perdonaría.

Un poco de su sangre fue succionada, pero antes de que lo último que le quedaba de vida le fuese arrancado, el sujeto se apartó. Difusamente lo divisó morder su propio antebrazo y succionar un poco de sangre para nuevamente acercar su rostro y pegar su boca a la suya. Trató de ladear el rostro, pero un agarre en su barbilla se lo impidió tajantemente. Solo le quedó sentir como un caliente líquido de sabor metálico se introducía en su boca y se deslizaba por su garganta.

Después de unos segundos, el hombre de negro se apartó de él, mirándolo divertido y con una expresión satisfecha en el rostro.

—Todo listo

Lo observó reincorporarse y sacudir sus ropas como si nada hubiese pasado, era increíble el nivel de crueldad que acompañaba aquel sujeto. Rick juró que si lograba sobrevivir, él se vengaría, lo haría de la más horrorosa y dolorosa forma posible.

—T-Te mataré

—Y yo estaré esperando—se acercó al cuerpo sin vida de Lori y lo cargó con uno de sus brazos— aunque primero debo deshacerme de esto y llevarte a otro lugar

Sus ojos comenzaron a pesarle de forma amenazante. Aunque trataba de mantenerse despierto su cuerpo había llegado ya al límite desde hace mucho y se encontraba exento de energía para siquiera oponerse a lo evidentemente pasaría.

Lo último que su vista divisó fue la silueta de Lori, delgada e indefensa, a ese sujeto no solo le había bastado con asesinarla, sino que quién sabe iría a hacer con su cuerpo. Era un bastardo y lo pagaría caro, muy caro.

...

Notas finales:

Espero no demorar en la próxima actualización.

Besos! 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).