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Soul Sphere por AustralianRick

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En el ascensor del edificio estaba Victoria, algo confundida por lo sucedido en la cocina, pero llena de expectativa. No entendía bien el comportamiento de esos dos, pero pensó para si "Si algún día lograse tener algo similar". Si llegara aquel día, los oscuros días en la prisión habrán valido la espera. Tener con quien ser verdaderamente libre, conocer la importancia del otro y anhelar su compañía. Para Victoria, por alguna razón eso era lo que Kris veía en Anthony y no entendía el porqué.

El movimiento del ascensor sacó a Victoria de sus fantasías. Regreso a su ahora, a su realidad. Allen le había dicho dónde estaba su habitación, pero ella no tenía idea de donde se encontraba ella misma. Menos aún sabía usar el "ascensor". No quería que los demás sintieran que ella era "diferente", que había muchas cosas que no entendía del mundo más allá de la prisión. Ella trataba por todos los medios de ser una chica normal, al menos su versión de lo normal. Hablaba con normalidad, caminaba con normalidad. Había practicado todo eso, por si algún día sucedía, por si algún día ella podía volver al exterior. Pero interactuar con otros, las costumbres del exterior eran cosas que ella no conocía y temía echar a perder "la imagen" que trataba de obtener frente a los demás. La imagen de solo ser una chica con un pasado nublado.

Sin avisarle, las puertas del ascensor se abrieron luego de que este se detuviera. Por su rostro de alivio parecía ser una buena noticia, una más el día de hoy.

-Victoria que alegría verte acá – La chica sonreía al escuchar aquella voz computarizada – Ven vamos a tu habitación. Debes estar ansiosa, ansiosa de poder empezar de nuevo. De poder liberar a la Luna de la misma manera que fuiste liberada.

Victoria se sorprendió notoriamente. Recordaba que las ocasiones en las que se encontraba con Allen este le terminaba hablando de la rebelión y de que ella sería libre y los ayudaría en su causa. Ella solo asentía con la cabeza y le preguntaba cosas del exterior, esperando que él viniera a conversar con ella otros días, no esperaba en verdad ser liberada. Sin embargo, cada vez que pensaba en la posibilidad de ser liberada, poder enfrentarse a quienes las encerraron tanto tiempo, podría darle calma, sí, pero no sería posible. 

- Allen creo que deberíamos hablar de eso. Yo, en verdad ...

- Tranquila Victoria, no te impacientes. Pronto vivir en un mundo libre de la tiranía de las doncellas será una realidad. Siento que los dioses así lo quieren.

Para Victoria su vida actual estaba bien. Claro, poder ser libre completamente, andar por todo el planeta, ambos planetas, sería asombroso. Pero el riesgo que existía era perderlo todo. Perder lo único que tenía y que no había terminado siquiera de conocer.

- Por el momento, es importante que te acostumbres a tu nueva vida, al menos hasta mañana. Ven sígueme, es en este piso.

¿Mañana? Por un breve instante la mente de Victoria se puso en blanco mientras seguía a Allen dentro de una habitación. No prestaba mucha importancia a donde estaba. Ahora toda su vida parecía volverse una broma de mal gusto.

- Allen, yo en verdad no...

Al prestarle atención a sus alrededores se dio cuenta que no había nadie más que ella en lo que parecía, sería su habitación. Reviso los alrededores, al parecer Allen se había ido. La miró de nuevo detenidamente. Era verdad lo que veía, toda una habitación para ella. Frente a sus ojos tenía una cama, la cama tenía sábanas y otras cosas que no sabía que era, pero parecían cómodas. Al frente de la cómoda una especie de estante con cajones se acercó lentamente hacia ellos y los abrió con algo de temor. Había ropa dentro de estos, ropa limpia y algunas inclusive brillantes. Se volvió a ver a sí misma, miró sus pies sucios y con algunas cicatrices, su cuerpo empolvado, la ropa gris que traía encima. Ahora estaba parada encima de un piso púrpura esponjoso, con sus manos cubiertas de la tierra de la prisión tocó el tapiz violeta de la habitación. Lentamente, mientras las lágrimas empezaban a correr por su rostro, dejando la marca del agua; camino hasta la otra puerta de la habitación. Era pequeño, pero lo reconocía, era un baño. Con sus manos se limpió la cara y abrió el grifo, mientras corría el agua y se lavaba las manos, empezó a llorar levemente. Tenía lo que una persona, tenía gente que la rodeaba, tenía un lugar donde regresar. Finalmente lo tenía, tenía lo más cercano a una vida.

Secándose las lágrimas de su rostro entró al baño y cerró la puerta tras de ella. No cerraba solo la puerta del baño, en ese instante cerraba la puerta de su vieja vida a la cual no planeaba regresar. Al salir de esa habitación no sería para regresar a la celda. Jamás.

- Un nuevo mundo me espera; más allá del metal.

Fue lo último que se escuchó en el pasadizo de ese piso antes del sonido de una puerta cerrarse.

- No sabía que había mujeres en este piso – Se escuchó la voz de un joven que acababa de llegar por las escaleras.

Charlie llegó por las escaleras luego de desistir de su idea de ir por comida mortal. No tenía tiempo que perder con adoradores, como seguramente habría en el piso principal si había alimento. Usando el rastro de luz del caballero llegó hasta la habitación de este, que por lo que sabía del demonio compartía con la "perturbación".

- Podría ir a visitarla un rato, antes de seguir con mis tareas, relajarme un rato... Pero no me puedo permitir ni un minuto más estar atrás del Demonio en esta misión.

Si conseguía averiguar cómo se conocieron el caballero y el muchacho podría comprender la situación completamente, estaría delante del Demonio.

Con tranquilidad toco la puerta y esperó. Repitió un par de veces más sin respuesta alguna. Toco la puerta una última vez más sin respuesta. Su mente se ilumino con un hecho que había pasado por alto al parecer.

- Maldición, ellos también son mortales – Claramente estaban comiendo fue lo que pensó. Por suerte no estaba el demonio cerca de él para ufanarse, pero casi podía sentir su risa tras él. Mas bien la escuchaba, volteo rápidamente y frente a él parecía estar una desconocida. Una agradable desconocida.

- Me encanta ver sonriente a señoritas... ¿Victoria? – Su cara pasó de coqueteo a asombro y luego a más asombro – ¿Victoria? – Exclamó.

- Ángel, claro que soy yo.

Frente a Charlie estaba "Victoria". Pero no tenía el traje de reclusa, tenía un top violeta que parecía hecho de una tela brillante y no le cubría el estómago ni los hombros, era como una banda. Tenía una falda que solo llegaba hasta la mitad de sus muslos del mismo color del top y unas botas altas del mismo color que le llegaban hasta la mitad de la pierna. Una parte de su cabello estaba arreglado con un cerquillo y dos coletas que llegaban un poco más debajo de su cuello.

- Señorita Victoria, veo que le sintió bien el cambio de aires.

- Si Charlie, así es – Da medio giro con de cuerpo entero – Y que tal ¿Crees que el caballero se percate de mi cambio?

Hay estaba la mortal, denigrando su imagen inconscientemente. Su afán de obtener el interés del caballero era bastante claro. Lamentablemente para él tenía que seguir con su plan inicial en busca de superar al demonio.

- Cualquiera lo haría, señorita Victoria. Pareces una persona nueva, perfecta para nuevas impresiones. Pero, ya te lo imaginaras verdad. Lo que debes hacer

- Suspiro – Si te refieres a comportarme con el otro chico para poder acercarme al caballero... Si lo sé ¿Y qué hacías tocando esta puerta, Ángel? – El Ángel era el único con quien parecía poder tener una conversación normal por el momento, pero no estaba mal.

- ¿Yo? Nada especial, vine buscando al chico. Necesito conversar con él, como te habrás podido dar cuenta Victoria y por lo que dijo el demonio, él es la razón de todo esto. Es un ser de importancia.

¿Ganaba algo hablándole de su misión a la mortal? Claro que no, más que sentir la mirada de adoración y agradecimiento de la mortal. Además de atraerla más hacia su lado, seria fácil si el Demonio la alejo del suyo con sus acciones.

- ¿Era verdad? El chico es la razón por la cual ustedes dos están aquí, con el... ¿Pero el caballero? Porque el caballero está a su lado. Además, él no tiene nada especial. Aunque el demonio - recordar los momentos que vivió hace unos instantes aun le traían terror a su cuerpo, la impresión, la situación, el cambio, todo fue una pequeña prueba de un tipo de realidad diferente al que ella conocía o esperaba - dijo que el podía tener un potencial en su interior - Recordó en ese momento que el caballero dijo lo mismo, con otras palabras, tal vez, pero lo mismo en el fondo. Sin embargo, relaciono la presencia del ángel y la relación del chico y el caballero para llegar a una aún más importante conclusión.  ¡Esta es la habitación de Kris! Esta justo a mi lado, no puede ser... Y la del chico también.

Hay iba de nuevo la chica, con su obsesión con el caballero. Al caballero no le importaba la existencia de la chica, verdaderamente a él tampoco. Probablemente a nadie le importaba, más que a "la perturbación" y posiblemente aquel ser viscoso. El único interés que veía hacia ella era respecto a aquello que el demonio le menciono ¿De que será capaz el poder? Algo surgió en su cabeza, pero necesitaba alejarse de la chica y dirigirse hace su objetivo principal.

- Exactamente – sonrisa con chasquido, mientras apuntaba con sus dedos – Pero no parecen estar aquí.

- Claro que no están Ángel, están arriba. No entiendo bien, pero parece que el chico se encarga de este lugar y... El caballero se quedó para ayudarlo.

Recordaba cómo se llevaban esos dos a solas, era extraño. Recordaba cómo el pequeño era una persona diferente, una persona inclusive más interesante cuando estaba con el caballero que "no le caía bien del todo".

- Gracias, eso es mi llamado para retirarme. Espero que podamos seguir esta charla más tarde, Victoria.

Charlie se dirigió al ascensor con rapidez sin escuchar a Victoria, en el piso principal estaba todo lo que necesitaba. El caballero irrespetuoso y el simple mortal con orejas.

Victoria se dirigió hacia las escaleras del edificio. El Ángel la hacía sentir tranquila, si lograba que Kris quedase tan impresionado como el Ángel podría llamar un poco de su atención. Probable y lamentablemente la del pequeño también.

Las puertas del ascensor se abrieron en la sala principal para darle paso a Charlie. Una vez fuera sintió el olor a comida proveniente de "la cocina". Podía entrar sigilosamente, escuchar la conversación y obtener información, igual que una vil rata. Pero luego de haber tenido que mantener el teatro con la chica y la situación con el demonio, era claro que aparecería frente a ellos y exigiría respuestas. Se dirigió a la cocina de donde provenían dos voces ya conocidas para él.

- Kris, ya estamos terminando. Puedes ir a la habitación en lo que yo termino y llevo el almuerzo. No sé si Allen y el otro tipo te dejen estar acá.

- No puede haber problema alguno Antony, después de todo eres mi sirviente. Puedo estar donde tu estés.

- suspiro – En serio, sé que lo acepte y todo. Pero, venía con un "pero". Tenías que explicarme que querías exactamente de mí. No pienso hacer ninguna estupidez, Kris...

Antony no entendía que quiera el caballero más allá de ser llamado por su nombre.

- Pues... no lo sé – suspiro –

Quería una buena relación con su sirviente, eso lo tenía claro. Pero no sabía que quería que cambiase exactamente, aun no lo sabía. Esperaba que este le ayude y juntos poder descubrir lo que tenían que lograr, pues el sello parecía no hacer el trabajo.

- ¡¿Que?! Kris, me has estado hostigando durante más de 24 horas con que sea un buen "sirviente". Me pediste que sea un buen "sirviente". A mí me suena que solo quieres que sea más amable contigo o algo así.

- Podríamos empezar por eso – Acerca su mano a un plato de comida – No está mal sirviente, vas progresando.

- Deja eso Kris – Aleja el plato – Te dije que lo nuestro lo llevaría a la habitación más rato... ¡Como que está bien! Demonios, maldición Kris. Si solo querías eso lo hubieras pedido desde un principio, no soy tan miserable como para negarme... Ni que te tratase tan mal.

Antony recordaba todas las veces que había interactuado con Kris, en especial cuando estaba con otras personas. Debía admitir que la gran mayoría no eran muy buenas, pero eran también culpa de Kris por su cosa del sirviente. Pero si este mismo lo resumía en ser más amable y acompañarlo ¿Acaso no era eso?

- Antony, no es solo eso. Dije que podíamos empezar por eso, lo demás...

- Lo demás se te ocurrirá en el camino ¿Verdad?

La cara de Kris se enrojeció un poco, sentía que Antony empezaba a descubrir su leve y casi inexistente incapacidad para entrenarlo ¿Habría sido buena idea confesarle que no tenía idea de que era tener un sirviente?

- suspiro – Por lo que yo veo Kris, quieres que seamos amigos. No entiendo mucho de dónde vienes ni qué costumbres tienen allá, pero está bien.

Antony tocó el hombro de Kris de manera fraternal a lo cual este reaccionó con extrañes.

- Seamos buenos compañeros de viaje Kris, hasta que se te ocurra que más quieres. Entiendes como funciona esto ¿no? Yo seré tu compañero y tú el mío, no solo yo de ti, sino tú también de mí. Es algo de a dos, aunque en verdad yo tampoco sé de qué va esto – Antony se sentía realmente estúpido, recordaba en su vida haber tenido algo cercano a un amigo. Pero hay estaba el caballero de brillante armadura – Esto, no estará tan mal...

Kris estaba asombrado, dejo de escuchar a Antony cuando vio en su hombro brillar el sello. Habían dado un paso adelante, el sello había reaccionado a las palabras de su sirviente. Eso tenía que significar, no, no, era un hecho, lo había escuchado.

- Finalmente me aceptaste como tu Amo, Antony – La mirada de Kris iba directamente a los ojos confundidos de Antony. Sentía algo extraño de nuevo en su pecho, pero esta vez era una agradable sensación.

- Bien, bien. Veo que se llevan de lo mejor... Y veo que tienes un sello de luz en tu hombro.

Kris escucho aquella voz, de todas las que podía escuchar era por mucho la que menos deseaba, menos en este momento.

- Charlie ¿También vienes por comida? – Antony no pudo evitar mirar a Charlie con algo de confusión ¿Los Ángeles también comían? – ¿Yo y Kris? – volteo un instante a mirar a Kris el cual lo miraba con intriga y algo de desespero al ver que este no respondía –Si, asi es. Nos llevamos bien ¿no, Kris?... - Hay estaba otra vez la mirada de Kris, tétrica y dirigida hacia el ángel. Sabía que no le agradaba el Ángel, pero no entendía el porqué, no del todo.

Kris miraba irritado al ángel, ese sujeto siempre estaba en el peor lugar en la peor situación, estorbaba todos sus planes e ideas. Por otra parte, no podía sacar de su cabeza el brillo en el hombro de su sirviente. La prueba de haber sido aceptado por Antony como su instructor, amo, guía, guardián...

- Si Ángel, nos llevamos bien. Él es mi sirviente, es mi compañero y yo el suyo - exclamo mientras salía de su comodidad para acercarse al Ángel, más se detuvo antes de terminar el primer paso - Si vienes a continuar con lo pendiente... - inhala y exhala recuperando la calma – Este no es un buen lugar y ahora, no es buen momento. Él ya trabajó mucho como para que arregle tus despojos y rastros, además no creo que te extingas sin dejar rastros de vida.

Antony miraba con leve preocupación a Kris ¿Exactamente con quien se había vuelto "compañeros"? Parecía que deshacerse de alguien era su rutina. Lo imaginaba, o lo venía pensando. El caballero era un soldado, comandaba legiones en guerras, le gustaba el combate. Probablemente el número de personas que había matado eran más que los dedos de su mano. Pero, no esperaba que lo dijera con tanta naturalidad. Cuando lo decía, su mirada era aquella que vio por primera vez, "tétrico", similar de alguna manera al cambio de personalidad de Demian.

- Tranquilo perro guardián, rayos. Mucha intensidad contigo y eso que ni tenía que hablar contigo, al menos no primero.

- Parece que necesitas otra charla con el suelo Ángel, una un poco más profunda – Su tono se volvió más grave y oscuro en la última frase -

Para Antony, la reacción de Kris hacia Charlie no era normal. Entendía que el tema del sirviente y la autoridad fueran importante. Más con Demian no se comportaba igual, solamente Charlie sacaba esto de él.

- Wow, dices mucho para no haber sido capaz de nada más que atacarme por sorpresa...

Antes de poder terminar tenía al caballero a unos pasos frente a él.

- Solo vine a conversar con él, aunque viendo como están las cosas – se acerca al caballero – También serviría conversar contigo y así podrías ayudarme. Tú sabes para impedir que el demonio logre su objetivo y cubra de oscuridad tu vida y la suya - dijo mientras señalaba a Anthony.

- No me interesa, nada de lo que planeen hacer ustedes dos. Y no te brindaría información de ningún tipo, sobre todo por tratarse de ti.

- ¿De mí? De un ser de luz, que solo quiere ayudarlos a labrar su camino hacia esta. Los mortales están cada vez más perdidos del camino de la luz.

Por un instante Anthony reconoció algo de iluminado en Charlie, pero en parte seguía siendo su pintoresca personalidad.

- Un camino de luz hacia ti, es como caminar cegado hacia un abismo. Una vez caes, no hay manera de salir. Los de tu clase, solo saben hacer eso, los conozco bien. Mi rey se deshizo de uno de ustedes, era su anterior asesor y del anterior Rey.

Anthony pensó que ese sería el momento en que el ambiente se volvería tenso y que la rivalidad irracional de aquellos dos daría paso.

- Un débil e inferior Ángel, incapaz de lograr su cometido. No todos son tan grandes como yo, poderosos como yo o hábiles como yo. Es por eso por lo que tu - decía mientras señalaba a Anthony retirándose los lentes de sol - debes confiar en mí, brindarme información.

A Anthony no le sorprendió de todo lo poco o nada que se inmuto Charlie respecto al tema. Sirve para lo que haces parece ser el lema de ambos, de él y de Demian ¿Qué clase de información quería Charlie? ¿Qué mundo tan intrigante pero asombroso era el que le esperaba?

- Esto... Charlie

- No Anthony, este sujeto no merece nada... – Kris giro rápidamente hacia Antony con confusión - El Demonio tampoco, pero el menos.

- Tus problemas con los Ángeles no son asunto mío pequeño caballerito y tampoco deben ser los tuyos, Anthony.

- suspiro - En verdad no, pero en esta ocasión sí. No me interesa mucho lo que quieras tu o Demian. Pero si esto incomoda a Kris de tal manera, tendrá que esperar.

Kris miraba con maravilla en su mirada como estaba siendo considerado por su sirviente como prioridad frente a otros por primera vez. 

- Si tendrá que espera - dijo con un tono infantil, mientras recapacitaba la situación - ¿Esperar que exactamente? 

- Pues que se lleven bien, digo esto es estúpido. Vamos a estar juntos un buen rato, no se pueden llevar mal por el simple hecho de existir. Además, si quieres información útil de los dos, deberías pedírsela a Kris - No era por volver a menospreciarse, pero nada en su vida hasta el día que conocía a Kris tenía algún tipo de interés - Digo él tiene poderes y esas cosas... Se supone.

- Hey, no dudes, ni por un instante. Que de todos los presentes yo soy el más poderoso.

Antes de terminar esa frase, se escuchó la risa de Charlie.

Kris estaba reflexionando exactamente por qué no lo estampo contra el suelo apenas lo vio. Si otra vez le arruinaban el avance que había tenido, especialmente uno que logró el brillo de la marca, tendría que tomar "acción" sobre los "obstáculos" frente a él.

- Por favor ¿El más poderoso? Además, yo necesito información que tu conoces bien... Quiero pensar - suspiro – Vamos has lo tuyo mortal, se normal y socializa conmigo. Cuéntame como se conocieron y eso. No necesito volverme tu mejor amigo y mucho menos el suyo.

La cara de Antony se convirtió en una de decepción, esperaba una conversación asombrosa sobre la "perturbación". Charlie en verdad estaba tomándose demasiadas molestias para algo tan común.

- oh, Ángel. Hubieras dicho eso antes... - dijo Kris con el tono más amigable posible.

Antony estaba pasmado mentalmente ¿Ese era Kris?

Antes de que Antony pudiera pensar en lo incapaces que eran esos dos para comunicar lo que querían de manera normal, el sonido de la puerta lo alertó. Pensó por un instante que se trataría de Allen y Xin o peor aún lo "inquilinos", pero recordó que aún le quedaban unos 5 minutos o más ¿Sería Demian? No lo creía, Demian no usaría las escaleras, nadie usaría las escaleras, pero especialmente no él.

- Kris, me alegra verte de buen humor – Las orejas de Antony alertaron aquella voz inmediatamente, la chica de ojos violeta había regresado. Podía oler un aroma florar aproximarse – Ya debe ser la hora del almuerzo ¿Y si comemos los 4 juntos?

Victoria, en el trayecto al piso principal, había tenido una idea. Si trataba de acercarse al caballero de una manera más sutil y pacífica, lograría que este la vea de una manera diferente a la primera impresión que tuvo de ella.

Antony la vio entrar a la cocina, ignoro completamente el no haber sido mencionado. Entraba una figura radiante de amplia sonrisa, ojos brillantes y cabellera perfecta. Pero lo más importante, algo en ella era diferente. Se veía feliz, feliz con todo frente a ella. Pensó que quizás se debería a la presencia de Kris, pero sabía que solo él apreciaba de verdad su sonrisa.

Kris escucho aquella voz, aquella que sin culpa ni intención alguna podía causarle problemas. Pero si el ángel no había afectado su progreso, no tendría de qué preocuparse. Era preferible que deje la situación progresar de manera normal, para que Antony vea que también pondrá de su parte con esto de "la chica de sus sueños". Siempre y cuando no se torne problemático.

- Hola Victoria, veo que ahora estás más arreglada ¿Más a gusto? Te ves más relajada.

Victoria se sentía sonrojada, una conversación directamente para ella, solo para ella. Finalmente, sucedía, su cambio atraía los ojos esmeraldas, todo parecía salir bien. Antony y Charlie estaban desagradablemente sorprendidos con el trato de Kris hacia Victoria ¿Acaso ahora que era aún más atractiva si era del gusto del caballero? ¿Como la chica se podía sentir tan halagada con un diálogo tan simple?

- Ese Kris, todo un caballero ¿No es así? - Antony pensaba que era lo normal, Victoria era atractiva y Kris claramente tenía la caballerosidad de un caballero. Si logro convencer a sus hermanas que era el siguiente santo, podía convencer a una chica cegada por su armadura que ahora si es de su agrado.

- No se ah qué viene eso. Pero si Antony, soy uno de los mejores caballeros. Y tú serás el compañero de este caballero.

- Bueno, sería un gusto poder comer los cuatro y tener una agradable conversación, señorita Victoria - No iba a ser fácil obtener la información que necesitaba si tenía que mantener el teatro frente a Victoria. Además, que estaba seguro no aguantaría más a la chica deslumbrándose por el caballero. Y lo peor, ahora el caballero parecía tratar de llevarse bien con ella, quién sabe para qué. Podía ser para molestarlo, molestar a su sirviente o algo sin sentido – Pero, la criatura verdosa me pregunto por ti, tú sabes Allen. Quería que te avise que tendrían una reunión contigo acá durante el almuerzo.

- ¿Y eso porque Charlie? ¿Y nosotros nos tenemos que quedar también? - Antony no sabía si solo era una cosa de Charlie para deshacerse de Victoria o si en verdad Allen tenía asuntos con ella, cosa que tendría sentido.

- Bueno, entonces podemos comer los 4 aquí. Si es una reunión sobre la rebelión tenemos que estar presentes. Así conocemos a los demás miembros – Kris trataba de ser lo más amable posible para que su sirviente esté a gusto, pero estaba seguro de que el ángel y la chica interrumpirían la charla de la rebelión. Además, el prefería comer en la tranquilidad de su cuarto con su sirviente. Le parecía extraño haberse acostumbrado tan rápidamente a la compañía del otro. En su planeta comían en grandes grupos o sólo, difícilmente pasaba tiempo a solas con una sola persona. Divagaba con facilidad, esperaba poder deshacerse de ambos y seguir el avance con el sello del hombro de Antony.

- Si excelente. Además, que me gustaría conversar sobre cosas, tú sabes. Como por qué estamos reunidos los cinco. Después de todo, venimos de lugares distintos.

Esa era una pregunta que al parecer solo ella y Antony se hacían. Los otros tenían algo bastante similar a una respuesta y a Kris, no le importaba.

- A mí también. Victoria, a mí también me gustaría preguntarle a... - Lo mejor sería preguntarle a Demian, pero molestarlo de nuevo con algo que parecía no tener interés en responder luego de "la escena" no sería buena idea - Charlie, qué sucederá ahora que ya nos reunimos... Tú, yo y Kris ¿Tu, no Kris? - Si bien no había escuchado que Kris fuera de alguna importancia para los otros dos, era un hecho que el seguiría a su lado un tiempo ¿No?

Kris sentía que Antony en verdad había cambiado, quizás por lo que le dijo o... Quizás por el sello que brillo al aceptarlo como su Amó. Y como su amo, está incluido en todas las circunstancias de su vida, como parece haber entendido. Él ya sabía más o menos que intenciones tenía Demian con ellos dos, básicamente usarlos. Pero para seguir el progreso y recompensar el comportamiento de su sirviente, seguiría el juego ¿Que mentira diría el Ángel? Porque claramente eso sería lo que diría, una mentira.

- Si Charlie ¿Porque se reunieron con nosotros?

Antes de que Charlie pudiera hacer énfasis en que Victoria estaría, para su suerte, ocupada. Escucharon una voz computarizada, que llamaba a Victoria.

- Victoria, veo que ya está alistada. Todos los presentes vienen a conocerte. Ya avisé en las habitaciones que una prueba de la caída predestinada del yugo del imperio del Sol y de la Luna nos ha visitado. Verte contenta y radiante, luego de años de prisión injusta, será lo que muchos necesitaran para motivarse completamente y convencerse de que esta es la causa por la que vale la pena jugarlo todo ¿No lo crees, Victoria? Y ustedes también - dijo señalando a los otros presentes.

Victoria pensó por un momento en solo un fragmento de lo que había escuchado ¿Jugarlo todo? Pero ella no tenía nada, nada más que su vida y su recién obtenida libertad. Estaba agradecida con todos por haberla esperado y que sea importante para ellos. Pero no quería pensar en la posibilidad de perder su libertad, o probablemente la vida ¿Que sería peor, perder la libertad luego de recuperarla? ¿O morir sin haber disfrutado del significado completo de esta?

- Allen... Mañana...

- Así es Victoria, mañana será el gran día. Un poco de motivación en la sangre de nuestros reclutas y podremos poner fin al dominio de las sacerdotisas. Las rutas están completadas. Y con los nuevos reclutas y tu Victoria, podremos oprimir a las sacerdotisas.

Antony y Victoria se quedaron consternados por un momento. Cuando Allen se refería a nuevos reclutas, era claro que hablaba de ellos, Kris, Demian y Charlie ¿Planeaban colocarlos frente a frente con, posiblemente, las dos personas más poderosas de los ambos reinos?

Para Victoria el solo sobrevivir ya parecía demasiado, sobrevivir a aquellas que la apresaron desde antes de poder caminar correctamente. Ahora conocidas como el máximo poder de los reinos gemelos. La prisión sería el mejor destino para ella de no lograr escapar. Enfrentarse a una de ellas, no podría...

Antony en verdad no tenía intención alguna de ir a la famosa guerra por el reino. Aparte de que "arriesgar su vida en el campo de batalla de unos desconocidos" no le llamaba la atención y tenía aprecio por su vida. El hecho que lo planean mandar contra Sol Belén o Lorelaine, luego de ver lo que eran capaces, le sonaba a suicidio. Más aún, él tenía un objetivo en la Luna, uno en el cual Allen podría ayudarlo. Pero eso sería luego.

- Excelente - la voz de Kris sacó de lugar a todos los presentes, inclusive a Charlie - ¿Cuál de las dos es más primordial?

- Esa motivación era de la que hablaba ¿Ve joven Victoria, lo que logra con su presencia? Pues yo diría que retener a Lorlelaine en la Luna mientras toda la rebelión llega al Sol a través del puente es lo más importante. Ella es incapaz de pisar el puente que conecta ambos astros por demasiado tiempo. Aunque su poder alcance el sol, será mucho menor su intensidad.

- Pues listo. Yo, Kris LIghtSword la detendré. Mi sirviente me acompañara para ver a su Amo en combate.

- Yo creo que te estorbara, pero es tu decisión. Suficiente con esta charla, Victoria por acá. Puede ir comiendo mientras llegan los demás reclutas. Ustedes, podrían bajar por la escalera. Así no obstruyen el tráfico de manera innecesario. No es requerida su presencia, luego nos reuniremos para hablar de la formación.

Charlie no se veía sorprendido, claramente un designio del cielo le permitía moverse con sutileza y que los acontecimientos lo favorezcan. Ahora podría obtener la información que necesitaba.

Los tres bajaron por las escaleras sin más que decir, aprovechando la situación que se presentó frente a ellos. Charlie no tendría que hacer más teatro. Antony no tendría que ver a Victoria acercarse a Kris y Kris tendría una persona menos en su habitación. Sin embargo, Antony no pudo evitar despedirse de Victoria.

- Nos vemos luego Victoria.

- Nos vemos... - dijo algo desanimada por todo lo sucedido. Ella en verdad quería comer con los seres más "cercanos a ella" aunque sea por la extraña situación que veía. Mas si esa pudiera ser su primera y última comida en grupo.

Mientras bajaban las escaleras con la comida en un inusual silencio, por la cabeza de Antony recordaba lo último que dijo Victoria, se le notaba desanimada.

- Kris, tu estas muy tranquilo con eso de enfrentar a Lorlelaine. La máxima y bellísima sacerdotisa de la Luna, quien congeló nuestra nave y todo el puente en menos de un segundo.

- Si, puede que esta vez sí sea interesante el reto ¿No crees Sirviente? Vencer a quien se atrevió a ponerte en prisión en su propio campo.

- Le das mucho crédito a la chica, perturbación. El hechizo de protección que utilizaron en la prisión fue fácilmente disuelto por tu servidor. No creo que le de mucha pelea una sacerdotisa al inútil del caballero.

Estos tipos definitivamente venían de un mundo diferente. Incluso victoria, quien tenía poderes como ellos, se había visto afectada por la noticia. Pero Kris y Charlie sonaban de los más tranquilos.

- Igual no es que lo fuese a ayudar, yo no participare en peleas de mortales - Dijo Charlie con bastante tranquilidad. No tenía interés en hacerlo y si algo había comprendido del demonio, es que alterar el flujo de las cosas mientras no comprenda a la balanza, lo podría afectar negativamente.

- No planeaba necesitar de tu "ayuda", si a lo que haces se le puede llamar ayudar, Ángel. Me será suficiente con mi sirviente y algún que otro soldado para la tarea.

- Ehm... Kris... Yo tampoco pienso ir. Uno porque tengo una verdadera razón para estar en la Luna y otra que me gusta estar vivo. En verdad creo que deberías asegurar un escuadrón para poder hacerle frente...

Kris se detuvo en seco en los últimos escalones que tenían que bajar antes de llegar a la puerta de su piso.

- Eres mi sirviente ¿Porque no estarías a mi lado en nuestro primer combate? ¿Qué puede ser más importante que tu Amo y "compañero"? - La voz de Kris era firme, seria.

- Kris ¿Recuerdas para que vinimos? - Dijo mientras sacaba el radar de su bolsillo - La señal de la Luna. Mi semejante o mi familia - Mostró a Kris la luz parpadeante en el radar - Están aquí, por esto deje la tierra y a mis hermanas atrás. No para matarme en una guerra con desconocidos.

Kris pensó que Antony se habría olvidado de ese asunto en estos días con los últimos acontecimientos. Que la marca lo convertiría en una prioridad para él. Pero aquella misión que le dejaron sus hermanas estaba aún en él, como un recuerdo o quizás como una esperanza.

- ¿Planeas ir a buscarlos en toda la Luna, por tu cuenta? ¿Dejándome contra alguien que tu consideras peligrosa?...

- Bueno, bueno. Suficiente de ustedes dos... Bueno suficiente de "esto" de ustedes dos. Vamos, a que me digan cómo se conocieron, luego continúan ¿Les parece?

- Charlie, no fue precisamente lo más asombroso... - Para Antony la manera cómo conoció a Kris fue asombrosa de muchas maneras, pero luego de haber visto y vivido un par de horas con los demás, parecía todo ser bastante normal – Al menos no creo que te valla a brindar información...

- Antony, el Ángel se interesa por alguien que no es él. Es una rara situación, aunque sea para su propio beneficio – dijo Kris mientras miraba a Charlie, en verdad no le importaba que planeaba hacer.

Pronto habían llegado a la puerta de la habitación que compartían los dos. Kris abrió la puerta e hizo un ademán de que pasaran luego de él. Antony entro ultimo y cerró la puerta. Al voltear, Kris estaba sentado en la cama y Charlie había jalado una silla. No recordaba que hubiera una silla en la habitación, pero eso no parecía ser lo mas importante en esta situación.

- Ángel, solo permito tu presencia porque eres la excusa perfecta para esta situación.

- Discúlpame? ¿Yo una excusa? ¿Por quién...? - Charlie se detuvo cuando pensó en que esta oportunidad podría no repetirse, más si lograba convencer a uno de los dos que estaba de su lado – ¿Sabes qué? No importa continua – Dijo desganado mientras se recostaba en el respaldar de la silla, inclinando está un poco hacia atrás

- Kris, yo creo que Charlie solo quiere saber que nos conocimos en la tierra por un accidente que te trajo a mi planeta hace unos días... - Antony no sentía la compañía de Charlie del todo aceptable, sabía que tramaba algo y darle información que puede ni él conozca no parecía buena idea.

Charlie estaba intrigado por dentro consigo mismo ¿Cómo se había complicado tanto la vida con seres tan simples? Antes de decidir retirarse al ver que un "accidente" fue lo que trajo a esos dos juntos a la Luna, la voz de Kris lo interrumpió.

- Para ti puede que solo haya sido solo un accidente, Antony. Yo soy Kris LightSword, caballero real del Rey Dreigan. El día que nos conocimos estaba destinado por mi linaje, mi sangre y mi legado. El día que nos conocimos fue mi 18avo cumpleaños, el día en el cual tenía que escoger a mi primer sirviente.

- Y no pareces haber buscado bien si terminaste con un mortal, es “la perturbacion” y todo pero no hay manera que lo hubieras sabido o que te ayude en algo – Dijo sin titubear Charlie. Pareciera que fue como dijo el humano un accidente, y descuido del -caballero.

- Hey eso… Si Kris, que te puedo decir en verdad. Ya estamos metido en esto y todo pero si haces todo esto porque te quedaste sin buenas opciones pues…

- Antony, no fuiste mi única ni mi peor opcion. Estas muy lejos de habe sido un mal acontecimiento o una ultima opcion. Te escogí por encima de dragones, jinetes encantados, arqueros y magos de otros castillos y condado.

- En verdad, cada vez pienso mas que el unico con sentido común de los presentes es el mortal… - Charlie no entendia que podria haber pasado por la cabeza del caballero para poner a un mortal sin gracia por encima de un dragón, hasta el mas pequeño hubiera sido mas útil que “Antony”. Vio al mortal que compartía su mirada de asombro al ver las oportunidades desperdiciadas, el chico era astuto y realista seria facil ponerlo de su lado, el lado correcto. El caballero por otra parte parecia verlo con enojo.

- Yo no necesito “sentido común” para escoger a mi fiel y único compañero. Necesito una conexión Antony, no adoración, no buscadores de prestigio. Necesitaba encontrar a alguien con una conexión fuerte con sus principios y conmigo. Necesitaba encontrarte a ti.

- Kris... No es por dudar de tu juicio... No, la verdad que sí es por eso. Kris, cuando nos conocimos yo no quería nada que ver contigo. A mi parecer cualquier de los que mencionaste hubiera sido mejor. Además, no es que no me aprecie, pero como compañero de pelea también cualquiera era mejor opción.

Charlie pensaba en recalcar lo obvio pero parecia que el caballero lo ignoraría otra vez y el solo queria ver hasta donde llegaban las excusas para escoger mortales sobre seres mágicos.

- Las habilidades se aprenden Antony, hay cosas que se valoran en un compañero mas que sus habilidades de eliminar al ejercito enemigo. Necesitaba una conexión única y predestinada solo para mí.

- Kris no se mucho sobre tu planeta, pero estoy bastante seguro de que los demás caballeros hubieran escogido al más útil o letal.

- Como cualquier persona sensata... – Charlie silbaba mientras terminaba su frase

- Así es Antony, mi sirviente – dijo tranquilamente, enfatizando sus planes de ignorar al ángel completamente - Los demás caballeros tienen seres poderosos o entes de renombre como compañeros a su lado. O sino simples ejércitos de muchos soldados de clase media. Luego de 4 años buscando yo también pensé que eran solo ideas mías. Que no existía tal cosa como el sirviente destinado. Había recorrido todo el mundo y no lo encontraba.

- Espera "sirviente destinado". Eso me suena más a una leyenda de tu reino.

- Algo similar, Antony. Es una tradición que se pasa de generación en generación. Cuenta de la existencia de un ser destinado para cada caballero. Y que con él lograra desarrollar una conexión sin precedentes.

Kris recordaba aquello que casi perdía para siempre, el sueño del que casi se rinde. Pero la voluntad y perseverancia no había cedido completamente, aun quería que su primer sirviente tuviera algo especial que lo llamara.

La cara de Antony y Charlie era similar, una mezcla de indignación y confusión.

- Kris ¿Y cómo se supone que ibas a saber quién era tu sirviente destinado?

- Nadie lo sabe, solo lo sabrás cuando lo encuentres es lo que se relata. Antony, cuando te vi con tus hermanas por primera vez, cuando me hablaste y nos miramos lo entendí. Que todo aquello pensé eran ideas mías, en verdad existía. El sirviente destinado a ser el primero y único si existía.

- Entonces... ¿Sí se conocieron por un accidente? – Charlie se había contentado con la respuesta del chico de orejas. Sin embargo, la historia del caballero le hacía pensar que fue una muy extraña coincidencia. Solo quedaba algo que saber.

Antony no podía evitar sentir que ahora comprendía un poco más por qué Kris le tenía tanto afán a él y al tema del sirviente, aunque ni él mismo lo comprendiera del todo.

- ¿Qué de especial tiene la marca del primer sirviente? Que te hayas arriesgado a quedar sin "sirviente" debe ser por algo.

- La marca de sirviente sirve para conectarse con el otro y viceversa de múltiples maneras, dependiendo de cómo es invocada. La primera es la más profunda, dependiendo del tiempo que tenga para desarrollarse. Es como un bosque, el árbol que crece primero ocupa más espacio y los demás crecen a su alrededor. Por eso estaba tan tranquilo, sentí la conexión a primera vista. Más que tranquilo, afortunado. Afortunado que mi descuido y el de tus hermanas, tu existencia y la de mi hermano, me hayan permitido encontrar la respuesta a una de mis dudas. Que todo aquello que tendría que haber sucedido para que nos conociéramos se haya juntado en aquella noche en tu planeta, en aquel bosque al lado del claro donde se reflejaba la luz la de luna.

- Espera Kris... ¿Me dices que esta marca en mi hombro ayuda a que nos comprendamos mejor? – Antony destapó la marca de su hombro, al verla se dio cuenta que las "alas" de la espada se habían movido con respecto a la primera vez que la vio. Era algo mínimo, pero lo sabía, la marca había cambiado.

- Si, al comienzo, como te imaginaras, funciona solo de un lado. Para que yo comprenda mejor cómo prepararte. Sin embargo, mientras avanza, la conexión se vuelve de doble sentido. Su principal aplicación es para las estrategias de combate, pero en tu caso Antony, parece que tiene otros efectos.

Antony pensó, que no era necesario "magia" para eso, pero esta supuesta para varias personas. Por lo que desarrollarías una conexión fuerte sin tener que interactuar debe servir para planificación, o algo.

- Eso indica que estas conectado con la perturbación también – Charlie interrumpió la conversación con sus pensamientos en voz alta. El caballero estaba conectado a la perturbación. Y por lo que había visto en la cocina el chico tenía algo especial, en solo unos días el sello de luz ya había empezado a brillar, la conexión era fuerte. Tenía que averiguar si era por la balanza o simplemente por la "conexión mágica" de la que habla el caballero, si es que esta misma no es la propia perturbación. Pero de ser ese el caso, entonces la balanza también le habría asignado un rol...

- No creo, Ángel – Kris suspiró con algo de lamento. Hubiera deseado no tener al Ángel mientras le narraba algo tan importante a su sirviente. Pero no parecía poder si solo estaban los dos, la situación que le dio el Ángel no la podía desperdiciar - Sabía que estas eran tus “benditas” intenciones. Que por eso querías saber cómo "nos conocimos". Pero solo estoy conectado con él, con nadie ni nada más. Mis habilidades de encantamiento no son lo suficientemente fuertes para lograr conectarme con sus ancestros ni siquiera, como sucede con los caballeros de linaje mágico. Gaste hasta la última gota de energía que tenía para lograr que el sello transmita todo lo que tenía y quería transmitir – Era lamentable que su habilidad mágica sea tan escasa que aún no recuperara todo su poder luego de días, en verdad había gastado hasta la última gota. El cuerpo por lo general guarda reservas, pero él estaba decidido a usar todo en sus manos. Al recordar, fue inevitable que volteara hacia el causante de todo - Aunque sé que tu no lo ves así – Dijo mirando a Antony el cual lo miraba fijamente – Pero eso no es importante, al menos ya no, ahora que...

Antony le quería decir, más ahora que había escuchado su historia, que estaba feliz de haberlo conocido. Que Kris dejase de pensar que el solo lo veía como una molestia a él y a su sello. Sobre todo, porque parecía que Kris solo quería un compañero, por alguna razón que quizás comprendería después. Pero estaba bien, él también quería uno.

- Kris, esta marca y el haberte conocido, no ha estado nada mal... - Antony fue interrumpido por la mirada de Kris dirigida a su hombro. Cuando giró a verlo estaba ahí, el brillo del sello, de nuevo.

- Dos veces, en tan poco tiempo... - Charlie estaba completamente seguro, no era normal la reacción del brillo hacia la luz... Luz... ¿Sería una señal de la presencia de la perturbación? ¿O una reacción del sello hacia él, un Ángel? Pero ya había brillado antes que él llegara.

- Es la tercera vez... ¿Antony, aun crees que es una idea mía?

- Pero... ¿Qué significan los brillos, Kris?

- Pues... que me aceptas y eso... Bueno Ángel, ya sabes demasiado – Kris se levantó y abrió la puerta – Ahora, procede a retirarte de mí espacio, con rapidez.

Antony planeaba preguntarle algo a Kris, pero no parecía buena idea con Charlie presente, a pesar de haber estado juntos la última media hora. Ahora se preparaba para el enfrentamiento por estar "botando a un Ángel del cielo".

- Tranquilo caballero, no trates de usar esta oportunidad para revindicar tus pecados tocando a un ser del cielo. Bueno, antes de retirarme tengo una pregunta para ti, chico de orejas.

- ¿Sí?

- ¿Sientes alguna conexión mágica o extraña con este caballero? Más allá de ser "conocidos" o esas cosas.

- Pues no, nada en especial... - ¿Estaba bien responderle? Miró a Kris un instante en busca de alguna respuesta en su mirada, pero no había nada. Era extraño

- Bueno eso es todo. No me tienen que agradecer por iluminarlos con mi tiempo. Su información será suficiente por ahora – Pasa a través de la puerta – Yo me reti...

Charlie no pudo terminar de despedirse pues Kris cerró la puerta apenas salió. Kris giro a sentarse en la cama y echarse sobre ella.

- ¿Aun nada eh? Supongo que aún es poco tiempo. No te preocupes Antony, pronto la conexión no será solo mía sino nuestra. Cuando eso suceda, verás lo especial que eres para mí.

En la mente de Kris había muchas dudas e incógnitas sobre el sello. En parte se sentía tranquilo que aun Antony no reaccionara, eso indicaba que no había influencia de esta famosa "perturbación" en la conexión con su sirviente. Pero a la vez sentía que ya debería empezar a haber algo más, y que hubiera podido ser así, si tuviera más poder. Quería ver el efecto de la marca en ambos, quería ver el efecto de la marca en Antony. Quería afianzar la conexión con rapidez, sentía que cada instante que pasara sin que la doble ruta este activada mientras esos dos estén presentes lo podría perder.

Antony sintió algo de lamento en la voz de Kris, echado en la cama en la cual estaba él sentado ¿Qué tenía de especial él? Al parecer todos veían algo en él. Algo que él mismo no podía ni siquiera sentir, probablemente porque no era más que un sueño suyo. Uno en el que es querido por varias personas por diferentes razones. Más personas de las que una vez podría haber conocido.

La simpleza de ciertas cosas hace parecer que son incapaces de cambiar su entorno o a quienes las perciben, mas todo siempre dependen de persona, tiempo y lugar. Simpleza correcta en entorno incorrecto en persona incorrecta en un tiempo incorrecto puede cambiar drásticamente una vida o muchas.


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