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Harry Potter y el misterio del diamante. por Maryk0k0

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Notas del capitulo:

HOLA HOY DEJO OTRO CAPITULO DEL MISTERIO DEL DIAMANTE.

Espero que les guste, este fic es uno de mis favoritos y más nuevos.

Nos vemos más al rato jaja xD Adios. 

 

 

—¡Más te vale que no muera porque voy a patearte el culo hasta que el pie entre en él!—gritó Amycus a Malfoy.

Harry, Ron, Hermione, Malfoy, Rossend y Amycus estaban en la enfemeria desde muchas horas atrás. Harry no paraba de dar vueltas preocupado, sabia que se veia como un imbécil pero estaba realmente preocupado. Universe era el chico de Slytherin de quien se enamoró. Era oficial para si mismo. Realmente le gustaba al Slytherin, pero eso era lo menos que podría pensar si peligraba su vida. Malfoy estaba inusualmente callado, más preocupado por su arruinado ego que las consecuencias que traía al conjurar ese encantamiento.

La familia de Universe estaba entrando y saliendo de la enfermería, algunos parecían tan enojados con ellos. Peridot la general salió de la enfermería con llanto.

—¡Es mi culpa!—gritó Peridot al hombre de cabello largo.—¡Yo vi que tenia resultados en cuanto entró al colegio y lo obligue!

El hombre le abrazó rápidamente.

—No es tu culpa.—dijo el hombre.—Además que Sirius podrá salir adelante, ya lo verás.

—Que no lo vea Steven.—dijo Peridot llorando.

—Es tarde.—dijo una chica de lentes de sol.—Steven viene con Perla.

—¡NO! ¡NO PUEDE VER A SU HERMANO ASÍ!—gritó Peridot. —Es el más joven…

—Eso no lo puedes evitar, Steven tiene derecho a ver a su “hermano”.

Peridot se puso las dos manos sobre la boca.

Una chica de piel morada, se acercó al grupo, saliendo de la enfermería, los demás estaban viendo como ella reaparecia con una expresión triste.

—Dice el medico que se pondrá bien.—dijo ella con preocupación.

—Yo se que se pondrá bien.—dijo la chica de piel roja la única que estaba tranquila.—No era tan grave.

—Yo no dije eso, Rubi.—dijo la chica.—Dice que Sirius fue envenenado por un veneno muy eficaz y dice que no entiende como es que no murió ya, pero su tratamiento será largo.

La noticia no parecía tranquilizar a nadie, la otra chica de una perla en el ombligo parecía querer gritar. Ella daba vueltas por todos lados con estrés como él.

—¡¿Cómo que el tratamiento será largo?! ¡¿Y si las diamantes vienen?! ¡Esta vez nos mataran a todos!

—Perla, cállate.—dijo la chica que se parecía a Zircón azul.

—¡Pero Lily! ¡No sabes del poder de las tres diamantes!—gritó la chica.—¡Claro que no porque eres nueva! ¡Pero deja que vengan ellas! ¡SERA EL FIN DEL MUNDO! ¡¿Dónde esta esa perla roja?! ¡PEDAZO DE GUIJARRO INUTIL!

—¿Quieres callarte?—preguntó Rubí cansada.

La familia de Universe, los señores Pink salieron de la enfermería, el joven estaba llorando, sus tres ojos eran tan funcionales que también soltaban lagrimas.

—Ya cállate Casper.—dijo el anciano molesto.

—Pero… esta… esta… no me contesta…

—Es obvio que no te conteste, esta desmayado.

—Pero mi… mi… ¡Oh Sirius!

Harry sabía que él iba a llamarlo “mi padre” pero no pudo completar la frase. Hagrid entró al pasillo donde estaban el resto al lado de McGonagall.

—Señores Potter y Weasley y señorita Granger, deberían volver a su sala común.

—Pero profesora…—dijo Harry preocupado.

—Le he dicho que se valla.—dijo la profesora McGonagall.—Señor Malfoy, usted también vallase a su sala común.

No le tuvieron que decir dos veces, el saltó para largarse de allí.

—Un momento profesora.—dijo Hagrid con un tono molesto.—Malfoy. Estas castigado. Uno de tus compañeros salió herido cuando determinantemente dije que todos se pusieran a resguardo.

—¿Castigado? ¿Me castigas tu a mi?—dijo Malfoy asqueado.—¿Un semigigante estúpido?

Malfoy que tenia el orgullo herido no se dio cuenta de su ultima pregunta, McGonagall le miró con el mismo desprecio que él solia ver a todo el mundo.

—Así es Malfoy.—dijo McGonagall.—A menos que quieras te levante un acta de expulsión por hablar de esa manera a un profesor de Hogwarts.

Victima de sus propias palabras Malfoy se encogió cobardemente, Harry le miró con enfado.

—¿Qué castigo merece, Hagrid?

—Todavia no he pensado en uno. Ya te lo haré llegar con un compañero tuyo Malfoy. Vete.

Por primera vez no podría escuchar la típica frase sobre “se va a enterar mi padre”, esta vez salió hasta las mazmorras, Harry era jalado por Ron.

—Vamonos.

—Bien. Vámonos.—dijo Harry tristemente.

Hagrid le despidió con tristeza mientras que McGonagall le sonreía con aprobación. El único que se le permitió quedarse era Rossend pero era debido a su unión de sangre. Las espadas que Malfoy conjuró fueron llevadas en detención en el despacho del señor Filch.  

Harry se dejó caer en los cogines de la sala común. Algunos de sus compañeros los esperaban en la sala.

—¿Qué sucedió?—dijo Seamus Finnigan a Harry.

—Universe grave.—dijo Ron a los demás.—Hagrid castigó a Malfoy.

—¿En serio?—dijo Parvatil sorprendida.—Parece que empieza a tomarse en serio la docencia.

—Si. Lo que sea.—dijo Ron cansado.—¿Qué era esa chica? ¡La atacamos y la atacamos y… no tiene sentido!

—Por como decía: humanos aquí, humanos allá.—dijo Lavander Brown.—¿Qué le pasaba a esa loca?

—Tal vez es una criatura mágica no humana y tiene celos.—dijo Dean.—Yo lo tendría.

Resumiendo los hechos que Harry sabía en concreto era: Que las diamantes eran malvadas y todos le temian, ¿Pero que eran?

Las chicas gemas sangre pura se regeneraban no morían nunca. Mientras que los hibridos rencarnaban. Habia chicas gemas que estaban a favor de las diamantes pero el resto le temia, incluso Sirius Universe que le temia más que a Voldemort, quizá porque Sirius era siriviente de diamante rosa, de la supuesta diamante que se suponía muerta.

¿Y que clase de raza eran?

Harry se quedó callado mientras que Ron y Hermione les contaban a los otros sobre lo que habia pasado allí, Fred y George opinaban que era difícil que existiera algo así.

—¿Y que es lo que guarda Hagrid?—dijo Dean a Neville.

—Eran espadas mágicas.—dijo Lavander.—Nunca habia visto tantas espadas reunidas.

—No son de Hagrid.—dijo Hermione colorada.—Son de Sirius Universe y Casper Pink.

—¿En serio?—dijeron Lavander.

—Tienen un hechizo de protección.—dijo Dean a Lavander.

—Pues no lo creo porque Parkinson logró sacar una.—dijo Parvatil.—Una pequeña daga…

Harry estaba pensando en Universe que no se acordaba de la pequeña daga.  

—Es posible que esto entre el ministerio de magia.—dijo Fred a George.—Armas en una cabaña, chicas gemas y cosas de esas extrañas.  

—Esperemos que no.—dijo Harry.—Por el bien de todos no.

Se levantó.

—Nos vemos mañana.

El que el ministro se metiera era aterrador, eso quería decir que podrían averiguar que clase de criaturas eran las chicas y algo le decía a Harry que nadie deberia saber sobre ellas por el bien de todos. Ron le siguió y también se fue a la cama para irse a dormir sin decir nada, la verdad es que estaban muy cansados.

En cuanto se puso la pijama y se metió a la cama y  apenas cerró sus ojos cuando oyó un llanto. Un llanto terrible.

No sabía de donde provenia pero lo escuchaba donde estaba el vestíbulo. Harry diambuló hasta allí donde encontró la fuente de las lagrimas.

—Por favor…—dijo la voz.—No a mis humanos, por favor…

Harry vio a dos mujeres gigantes, cada una de ellas con un tono de piel diferente. Una era amarilla y parecía varonil e inflexible y la otra era una mujer de larga cabellera y rostro lloroso pero se veia muy elegante. Ella parecía enfadada ante el pequeño niño el cuál era Sirius. Él estaba llorando a lagrima voz, allí estaba McGonagall, Hermione, Parkinson, Fred, George, Snape, Dumbledore, Ron, y él. Al parecer habia más personas que se estaban reuniendo al entorno de ellos.  

—H—haré cu—cualquier cosa…—dijo Sirius a las dos mujeres.—I—iré con ustedes… pero… déjenlos, n—no m—merecen… n—no merecen…

Cualquiera que fuera lo que iba a decir no lo entendia. Harry se acercó para saber de que demonios hablaba pero la mujer azul le miró con desprecio.

—No. No tienes idea del daño que has ocacionado…

—¡Piedad!

—¡No me interrumpas!

Él calló como si se tratara de un niño renegado.

—Has mentido, has traicionado, te has alejado de tu propósito. Si quieres que tus gemas sean curadas de su castigo, vas a hacer lo que se te mande.

—Vas a ayudar a expandir nuestro reino.—dijo la mujer amarilla.—Pero tus humanos, morirán…

—¡NO! ¡No por favor!—gritó Sirius asustado.—Y—yo haré lo que sea… ¡lo que sea, pero no a ellos!

—Claro que no, ellos te mantienen con la mente ocupada.—dijo la mujer azul.—Todos, sin excepción morirán…

—¡NO! ¡NO, POR FAVOR!

Sirius era sujeto de la cintura por la mujer azul mientras veia un halo de luz azul y amarillo lo apresaba, Harry despertó sobre exaltado callendose de la cama.

—¿Te ocurre algo?—preguntó Neville de pie a su cama.

—No, no. Estoy bien.—dijo tratándose de poner de pie.

—¿Entonces porque gritabas el nombre de Sirius?—dijo Dean sorprendido.

—Si, hombre.—se burló Seamus.—Parecia que ibas a perderlo para siempre.

Miró feo a Seamus, la verdad no soñaba un sueño así, más bien era el extraño sueño de aquella conversación. Miró a otros lados, Ron no estaba con él.

—¿Y Ron?

—Fue al baño a vomitar.—dijo Seamus.—Él empezó a gritar también.

—¿También?

—Si. Gritaba maldiciones de todo tipo.

Harry miró hacia donde estaba la cama de Ron y vio que habia quemaduras por todos lados, Seamus lo veia como algo gracioso pero no lo era.

—¿Pesadillas?—dijo McGonagall ojerosa en cuanto llegó.

—Si.—dijo Seamus.

Ella miró a Harry evaluándolo.

—Han tomado alguna poción que provoque pesadillas.—dijo Minerva limpiándose la nariz, ella sangraba.

—¿Profesora?

Ron salió del sanitario con dolor de cabeza y se veía bastante pálido, miró a la profesora McGonagall con recelo.

—También tuve una terrible pesadilla.—dijo ella a Ron.— Y la mitad de chicas, solo vine a corroborar.

Ella le dio una poción blanquecina para Ron y luego sirvió a cada uno de los niños aquella poción, se veia asquerosa.

—Es poción de dormir sin soñar.  Todos hasta el fondo.

Harry tomo la poción y efectivamente, en cuanto se lo tomó quedo dormido. Y ya no supo que pasó con ellas.

 

Durante los tres días siguientes Harry iba a la enfermería seguido, aprovechaba cuando estaba el hermano menor de Universe pues el anciano le miraba retadoramente cada vez que podía. Steven habia puesto en su cama un oso de peluche a un lado de su almohada por lo que eso de utilizar peluches aun a muy tardia edad era cosa hereditaria por parte de su madre.

Sirius se encontraba durmiendo profundamente, realmente cansado por todos los acontecimientos del año y aun no se terminaba lo del torneo de los tres magos. Steven solia hablarle como si él tuviera la oportunidad de oir todo pero era imposible que eso lo pudiera hacer.

El profesor Snape también se daba sus vueltas para ver al joven debido a que era parte de sus responsabilidades pero no habia despertado para nada.

Los medimagos decían decir que él en realidad no quería despertar pues su salud física estaba realmente bien pero no podría despertarlo si él se negaba.

—Es como si intentara desaparecer o desconectar su mente.—dijo el medico al señor Universe mientras que Peridot lloraba escandalosamente.

—Pero despertará.—dijo Garnet, la chica líder de ellos.

—¿Estas segura?—preguntó Peridot con lágrimas en los ojos.

—Le he visto levantarse como… el 95% de los casos.—dijo ella confiando en eso.—Visión futura.

No tenía idea de lo que quería decir con “visión futura” o tal vez era una clase de Trelawney con su joya, el joven de tres ojos también afirmó con su cabeza a pesar de las lagrimas.

—¿Entonces, según tú…?—preguntó una chica de piel rosa.—¿Qué necesita para que despierte?

Ella miró a Harry, estaba seguro que lo hizo a través de sus lentes.

—Es fácil. Necesita una motivación para despertar.

—¡¿Qué no tiene suficiente motivación con las diamantes apunto de matarnos?!—gritó la chica rosa, la perla.

—Calmate Perla.—dijo Peridot.—Para Sirius, en estos momentos no son importantes las diamantes. Son los humanos, ¿Entiendes?

—¡Pero si hay como 200 millones de ellos en el planeta!—gritó la chica rosa.—¿Cómo se le ocurre pensar en humanos? ¿Si te recuerdo que un humano imbécil fue lo que provocó que Sirius estuviera en esa cama? ¡Los humanos son tan desagradecidos!

Miró al Slytherin que estaba durmiendo pero parecía sufrir en sueños.

—No fue la culpa de ese engreído.—dijo Garnet mirándolo atraves de sus lentes.—Él ya se encontraba emocionalmente débil. Si no es capaz de encontrar una motivación y pronto no va a despertar.  Los eventos futuros dependen de las acciones del presente.

Harry no entendia del todo, ¿Cómo lo iba a lograr? ¿Es que era posible poder contactar con ellos? Steven no parecía en tan mal condición para tratarse de un hermano desmayado pero a veces lo miraba con lastima, ¿Los dos tenían una clase de telequinesis o algo parecido? Siempre que hablaba de Sirius opinaba por él.

A pesar de ese gran misterio para él, Harry se iba a caminar por los terrenos del colegio. Tambien iba acompañado de Ron y Hermione a memorizar un monton de maldiciones para la tercera prueba de la que nadie sabia nada, solo Hagrid que les mencionó que deberían aprender algunos hechizos de defensa.

Ese dia estaban llevando su ultima clase de cuidado de criaturas mágicas pero tenían que leer sobre las sirenas, de hecho se habian topado a Colmillo el cual estaba sentado esperando ser cuestionado sobre su gente y sus costumbres al igual de sus enfermedades más comunes. Algunos habian optado por dibujarlos mientras hablaban.

—Los nuestros tenemos casas que hacemos de roca, las pulimos y…

Hagrid estaba leyendo el último titular del profeta mientras tanto.

—Espero que no sea de mí y Universe besándonos por allí.—dijo Harry molesto.

—Pues si se trata de Universe.—dijo Hagrid leyendo con furia.—Y de mí.

—¿Qué?

—Leelo tu mismo.

Ataque a alumno conmociona al ministerio de magia.

Hace tres días exactamente, un estudiante fue herido mientras que el profesor titular de cuidado de criaturas mágicas, Rubeus Hagrid “ejercia su labor como docente” de dicha materia.

Una mujer que nadie podría identificar quien era, salvo con el nombre clave de Jaspe embistió al joven Draco Malfoy para hacer muestra de su increíble poder físico y anatómicamente superior al de un mago experimentado como el señor Malfoy.

<<Yo le ataqué varias veces pero no podría dañarla>> nos explica el señor Malfoy. <<Su piel era tan dura como la de un semigigante, estoy seguro que debe ser algo de Rubeus Hagrid porque a él no le tocó ni una fibra de cabello>>

¿Qué nos hace pensar que Rubeus Hagrid es un peligroso mago? Hacia unos meses atrás, Hagrid realizó pruebas, emparejando manticoras y cangregos de fuegos para dar origen a los “escregutos de cola explosiva” pero nos hace pensar que él es autor de dichas criaturas mágicas con una gema en su cuerpo.

<<A Draco le atacó pero fue Universe quién le pudo defender y fue atravezado por un cuchillo…>> dijo la señorita Lavander Brown.

Y lo más impactante es que Rubeus Hagrid oculta debajo de su mascarada de hombre torpe y sin pensamiento alguno, y podría tratarse de un poderoso mago oscuro.

<<Traía una varita mágica y se defendia bien de ella, fue lo más terrorífico que he visto en mi vida>> nos dice el señor Dean Thomas al calificar el peligroso semigigante.

El señor Hagrid no sólo es capaz de hacer cruces ilegales es capaz de crear a poderosas e inteligentes criaturas con una agresividad de un semigigante o peores.

¿Y que es lo dice el ministerio sobre un mago que fue expulsado del colegio de magia y hechicería sobre el uso de varitas mágicas? No esta permitido, no está permitido. <<Lo que el señor Hagrid ha hecho al hacer magia podría decirse avanzada para alguien que fue expulsado cuando cursaba el tercer curso es cuestionable saber el como pudo aprender a realizar dichos hechizos, pero todos sabemos que el señor Hagrid es intimo amigo de Albus Dumbledore el cual fue acogido por él cuando estaba el director Armando Dippet, de hecho Hagrid se volvió en el guardian de llaves del colegio y recientemente (aclarando de un modo despiado y con poca información  que él no fue quien abrió la cámara de los secretos en 1943) es profesor de cuidado de criaturas mágicas el cual es un mago incalificado para dicha labor.  Y ha puesto en peligro a sus estudiantes con excentricidades. >>

El señor Universe fue inmediamente llevado a la enfermería del colegio donde allí se encuentra; el pobre muchacho que no solo ha perdido al amor de su vida sino que casi pierde su vida al proteger a su mejor amigo, el señor Malfoy. Sin duda, un acto heroico por parte de él. Esperemos que el señor Universe se recupere.

Hagrid miró la nota hacia Dean Thomas.

—Yo no dije eso.—dijo Dean Thomas molesto.—Si, dije que era terrorífico pero también dije que era lo más genial que he visto.

Hagrid parpadeó varias veces sin creérselo.

—¿Mago tenebroso?—se dijo para si mismo.—¿Yo, mago tenebroso?

Al parecer era lo que más le llamaba la atención.

—¿Mago tenebroso?—se dijo otra vez y luego, y luego rio a carcajadas. —¡Mago tenebroso! ¡Es lo más estúpido que he oído!

Hagrid siguió riéndose pero luego calló.

—Diganle a Malfoy que esta noche a las 7 de la tarde va a ayudarme a curar a los centauros que fueron golpeados por Jaspe y a los unicornios. Ya es momento que le de un escarmiento.

Los demás afirmaron con la cabeza.

—¿Mago tenebroso, yo?

—¡Espera Hagrid! ¡Esto podría ser peligroso!—gritó Hermione asustada.—Podrias enfrentar a juicios por esto.

—Lo sé.—dijo Hagrid.—No debi usar magia cuando tengo prohibido hacerlo pero no podría no usarla. Malfoy estaba en peligro.

—Entonces si te cuestionan tu vas a decirle eso, que era tu labor como profesor…

Él la miró tristemente y vio su vieja varita mágica convertida en un paraguas rosado. 

—¿Y como sigue Universe?—dijo Dean a Harry.

—Pues no quiere despertar por nada del mundo. Creo que esta realmente deprimido pero su hermano se encuentra allí con él.

—Oh si, el chico…—dijo Lavander burlonamente.—Es tan cortito como su hermano Sirius.

—Podria ser que den el estirón pronto.—dijo Parvatil.—¿Ya has visto a los gemelos Pink? En tercero eran cortitos y dieron el estirón más rápido.

Las chicas se rieron a exceptuando de Hermione que les lanzó unas miradas reprobatorias. Lavander le miró sonriente.

—¡Vamos Hermione! ¿A poco no está Rossend demasiado guapo? ¿Por qué se ponía esa cosa en la cara?

—Y Amycus no se queda atrás.—dijo Parvatil.

—Esta un poco con barriga.

—Le da más por comer pero esta bien para mi.

Las chicas se rieron, iban a tocar el tema de Universe, esperaba no ser jalado para sus tontas conversaciones sobre ellos.

—Ya los alcanzaran.—dijo Lavander.—El hermano aun es un poco infantil pero se quitará.

—Tiene novia Lavander… es un poco masculina con esa espada rosada…

—Ya dejen de hablar de cosas triviales.—dijo Dean.

—Niegalo Dean.

—¿Qué?

—Niega que no es guapo. Rossend es demasiado fornido además…

Una niña que estaba allí les miró con sorpresa, era la amiga de Steven; Connie y no venia sola, Steven estaba allí con las orejas más rojas que el cabello de Ron. Harry se puso colorado, ¿Qué tanto habian escuchado? Ellos venían tomados de la mano algunas habian compuesto caras derritiéndose de ternura.

—Disculpe, busco al profesor Ruben Hagrid. –dijo la niña hacia el único adulto.

—Soy yo.—le dijo Hagrid.—Y es Rubeus…

—El profesor Alba Dumbledore me pidió que lo buscara y le dijera que fuera a su despacho. Dijo que es importante. Es sobre el periódico…

Él miró el periódico con sorpresa.

—Bien, bien…—dijo torpemente Hagrid. —Steven ¿Llevas tu varita?

El niño la sacó del bolsillo trasero.

—No es mia.—dijo con la varita en la mano izquierda.—Es de Sirius. Me dijo Amatista que si uno intentaba molestarnos le pegara con la funda.

—Ella dijo que los cortaramos en dos.—dijo Connie corrigió.

—Pero es mejor que les peguemos con la funda de la espalda.—dijo Steven.

—Eso podria meternos en problemas.

—¿Pero supongo que si es Malfoy si lo rebanarás en dos?—preguntó Ron  sonriente realmente emocionado.

—No, le voy a dar un abrazo.—dijo Steven tristemente.—Su padre es alguien malvado y se nota que él necesita muchos de esos.

Hasta Steven pensaba que Lucius Malfoy era un hombre despiado y ruin y eso que era mucho más cariñoso y buen chico que Sirius. Pero dudaba que fuera así con su hijo Draco, realmente le tenían muy mimado. Hermione le afirmó con la cabeza estando de acuerdo pero Ron le miró ceñudo pensando que lo mejor que podría hacerle a la humanidad era cortarlo en dos pedazos o quizá en tres. Harry opinaba que deberían mandarlo a pelear con Malaquite por al menos por dos minutos, ella le habría dado su merecido.

 —Vamos a la enfermería.—dijo Steven.

—Eso esta bien, hemos cumplido con una misión.

Steven se habia preocupado por Sirius, era lógico, ambos eran hermanos de sangre.

—Oye, ten cuidado por algunos de Slytherin.—dijo Ron a Steven.

—Lo haré.

—¡Considera la idea de rebanar a Malfoy en dos!

 

Harry se acercó a la ventana donde apenas dentro de unos días se presentaría para la tercera prueba, los profesores habían encargado trabajos extra pero podría decirse que estaba preparado, estaba listo a enfrentar la última prueba. El problema, el miedo que tenía en esos momentos es que lo hara sólo, sin ayuda, sin nadie que lo ayudase o se burlara de él como si fuese un imbécil pero proporcione una mano amiga a escondidas.

Según lo poco que se sabía de la última prueba es que la planeó Universe, Hagrid y Moody por lo que al menos estaba seguro que no se enfrentaría en un monstruo como un dragón o un basilisco así que podría estar seguro que lo terminaría con la cabeza en alto y sobre todo pegada a su cuello.

Los demás estaban en su habitación durmiendo plácidamente, Neville tenía pesadillas como siempre pero lejos de eso, la habitación estaba tranquila, lo único que alumbraba la habitación era la luna llena donde seguramente, Remus Lupin, el amigo de su padre debía estar sufriendo de su transformación, Sirius y Regulus estaban muy bien resgardados pero lo que le molestaba en realidad era que Sirius Universe no despertaba de su largo sueño.

Llevaban más de tres días o quizá cuatro. Harry entraba y salía de la habitación pero el clima allí era demasiado triste. Él podía ver a su hermano pequeño dormir a su lado pero cuando despertaba el le hablaba que ya despertará sin poder hacer nada más, impotente como lo estaban los demás.

Quizá por eso estaba levantado, porque no paraba de pensar en él.

En él y sus vidas pasadas.

¿Cómo sería reencarnar varias veces y recordar lo que hiciste en la siguiente? Nadie podría vivir con eso, de recordar cada error, cada evento traumatico y sobre todo cada vez que tuviera que morir. ¿Cómo se sentiría Sirius? ¿Era cansado vivir tanto tiempo? ¿Realmente podría decirse que era un joven o un adulto en el cuerpo de un niño?

Por su puesto que era un joven. Snape realizó una prueba con sus líneas de edad. El profesor Dumbledore le ha permitido estar en el colegio. Y sobre todo la manera de actuar a veces infantil podría ser que en realidad era un niño pequeño…

Tal vez no lo recuerda del todo.

Como recordar un viejo acontecimiento y tuviera que hacer esfuerzo por pensarlo. Tal vez si es un joven sin experiencia pero cada día descubre cosas que él ya descubrió. Tal vez redescubre el mundo cada vez.

Quizá vivió en el Japón feudal pero al llegar de nuevo allí podría ver las viejas arquitecturas con asombro. Quizá vivió en la edad media y vio ejecuciones y cuando leyó sobre eso en la actualidad le parecieron grotescas. Quizá él ya era un estudiante de Hogwarts y terminó en otra casa diferente al de Slytherin. ¿Ravenclaw quizá? Tambien era valiente y justo como un Hufflepuff, pero a él le quedaba tan bien Gryffindor que si pasaría más como uno que como Slytherin.

Volvió a la cama y cerró los ojos rápidamente por el cansancio. Sintió un vórtice hacia abajo.

—¡AMATISTA!—gritó un niño debajo de una colina.—¿Qué pasa con ese estúpido unicornio?

Un hombre regordete estaba sujetándolo con un cinturón del cuello e iba tras un joven niño de su edad.

Viendolo lentamente se dio cuenta que era Sirius pero se veia mucho más pequeño, Steven traía un peluche en su mano y se podría decir que rondaban sus 8 años, allí estaba Casper y vestía su túnica azul y rojo pero también se veía joven.

—¿Qué no vez que odia a los hombres?

Sirius vio con aborrecimiento al unicornio.

—Ayer me atacó y casi muero por este…—dijo molesto. —…caballo.

Dicho eso el caballo embistió a un joven con su largo cuerno pero no le pasó nada al poder esquivarlo.

—¡Llevenselo de aquí!—gritó Sirius mientras sostenía a Steven.

Los gemelos Pink estaban allí a punto de ir por el unicornio y poder pelear con él pero Sirius les regañó.

—¡¿Ustedes a donde van?!

—¡Por el unicornio!

—¡John!

El anciano no parecía usar el bastón en esa época y fue y los tomó de las orejas, los gemelos estaban refunfuñiando de coraje por ir a combatir, otro hombre de cabellera larga y pelirroja les miró burlonamente.

—¿Y tú qué demonios haces, Alexander? ¡Ve por ese caballo antes que vuelva a herir a Greg!

El hombre fue hasta donde estaba el otro hombre, Harry se dio cuenta que se trataba de Greg pero no tenia tan poco cabello, empezaba a perder el cabello y el cabello se veía castaño como lo tenia en la actualidad. Al final lograron calmar al unicornio.

—¡Gracias!—gritó agradecido.—Tiene mucha energía.

—¿Por qué los magos no se lo han llevado?—dijo Steven inocentemente.

—Porque es mio.—dijo Amatista comiendo un emparedado con aceite quemado. —¡Oh pesuñas, ¿Verdad que no te quieres ir?!

El unicornio relinchó de enfado y les dio la espalda.

—Voy a conseguirle una novia.—dijo Greg.—La necesita. Es urgente.

—Yo creo que no puedes, es joven aun.—dijo Casper con una sonrisa.—Además es contraproducente ¿no? Imagina a potrillos de unicornios tan agresivos como el padre.

Podria ver que el unicornio apenas estaba cambiando de color, pasaba de dorado a blanco y también dudaba que fuera una solución.

—Con el tiempo pensaba que podríamos castrarlo.—dijo Greg.

La risa se prolongó para quienes entendieron, Sirius, Rossend, Amycus, Steven no se rieron pero si los demás.

—¡¿Oiste eso pesuñas?!—dijo Casper burlonamente.—Sigue asi y serás “ella”.

Volvieron a reírse.

—¿Qué es castrar?—dijo Sirius sorprendido a John.

—¡Ay papá!

El niño no parecía entenderlo, Steven tampoco parecía comprender que era la definición.  Perla salió de una pintoresca casa en medio de la playa. Lo que llamaba la atención es que; en esa casa reposaba en medio de una estatua de una mujer gigante y hermosa. Realmente parecía ser una diosa o algo parecido. Sirius miró a Perla que venía con ellos e iba acompañada de Garnet, de la mujer que acompañaba al anciano, de Cloe y Lily y de Peridot.

Una hermosa mujer de aproximadamente 25 o 30 años estaba con ella. Ella tenía una perla en su pecho como los demás tenían gemas en su cuerpo pero ella tenia uno en medio ¿Seria su hija también? Harry sentía que ella era la líder o la custodia de los niños.

—La cena ya esta servida, ¿Por qué no guardan al caballo y se lavan las manos?

Los demás corrieron mientras que Alexander guardaba el potrillo de unicornio a una cerca cuidando que no fuera corneado. Harry siguió a Sirius que se lavaba las manos junto con su hermano dentro de la playa. Sirius se sentaba en medio de la cena.

—Aquí tiene que ir Steven a mi lado, a otro lado va Amatista y al frente mío va Celestine.—dijo Sirius mandando en la mesa como un pequeño jefe.  –Y Greg también va al frente de Steven. Perla y Garnet a los lados, el resto acomódense como quieran.

—¿Por qué haces ese acomodo papá?—dijo Rossend.—Se supone que tu y Steven deben ir por el ancho de la mesa.

—Porque Perla y Garnet son las lideres por ahora.—dijo Sirius.—Y mientras no sea digno, no iré a ningun lado. ¡Y deja de llamarme papá! ¡Es incómodo!

—Pero tu nos creaste.—dijo Amycus confundido.  

—Me gustaba más la mesa redonda.—dijo Peridot “la general”. –Sin distinción de nada.

—Yo traeré la comida.—dijo Celestine.

—No.—dijo Sirius aplaudiendo con las manos.

Magicamente los platos, vasos, comida se puso sola. Harry podría ver que habia un estupendo pavo relleno, costillas de cerdo, refrescos, pasteles, fruta, ensaladas y arroz estilo chino, la mujer se puso colorada.

—Para eso estaba yo.

—No. Ya hiciste la cena.—dijo Sirius con un dejo de molestia.—Bien. Antes de comer hay algo que tengo que decir.

Los demás se quedaron viendo a Sirius, John estaba sentado al lado de Garnet y al lado de ella iba Peridot.  Sirius se puso colorado al tener a todos viéndolo.

—Hoy es un buen dia para celebrar… que estamos juntos… Y que nosotros… todos juntos. Este… somos… las cristal gems… Unidos para el bien…y…y… para el mal… así que…. Todos aquí… Comeremos y beberemos… como lo haría cualquier familia…

—¡Porque somos una familia!—gritó Steven contento.

—¡Si! ¡No somos un grupo de gemas! ¡Somos familia! Y… y…

Miró a Greg tristemente pero compuso una cara de aceptación hacia él.

—Y aunque Rose no esté con nosotros… ¡Todos somos familia y nos ayudaremos para lo que sea! Todos tomen sus bebidas.—dicho eso las chicas tomaron sus refrescos.—¡Yo brindo en nombre del amor y la tierra! ¡Salud!

—¡SALUD!

El sueño cambió, cambio demasiado drásticamente,  a lo lejos podría ver a Universe con la edad actual y estaba sudando, como si no supiera que hacer con su estrés, incluso parecía que había visto algo sumamente alarmante, incluso parecía no poder respirar. Los gemelos estaban anonadados como Sirius, sin embargo no parecía estar sólo con ellos, había vocecillas conocidas.

—Según Steven eres el único…—dijo la pequeña niña verde.

—¿Y porque hasta ahora nos cuentas todo esto?—dijo Peridot.—¿Por qué dejaste que esto avanzara a este grado?

—L—lo siento… intenté hacer las cosas por mi cuenta… yo apenas me integré a las cristal gems… ¡Llamé a Diamante amarillo, Clod!

Tanto Peridot como Sirius pusieron los ojos saltones, los gemelos se agarraron las caras contorsionando sus caras debajo de las mascaras de algo, muy parecido a lo que era la sorpresa y el miedo.

—¡¿Ll—llamaste a di—diamante a—amarillo, C—clod?!

Miró a Sirius que se había resbalado directo al suelo, casi sin aliento. Harry no entendía por qué tenía ese miedo pero parecía transmitírselo.

—Mi príncipe, mi príncipe, debes calmarte, por favor…

 —¡Yo lo siento!—grito la chica verde cubriéndose con las manos.—¡No me golpees!

—No lo vamos a hacer.—dijo Peridot como si la otra fuese una tonta.—Vamos a resolverlo… siempre lo hacemos… ¿Qué hacemos Sirius? ¿Sirius?

Como si fuese imposible había un brillo cegado sin embargo podía ver como Universe cambiaba de tamaño haciendo una clase de ruido extraño.

—¿Qué le pasa?—dijo la chica verde.

—¡No, Sirius!—gritó Peridot.—¡No vuelvas a tu gema! ¡NO ME DEJES SOLA CON ESTA TORPE!

El Slytherin dejó de hacerse pequeño pero permaneció allí, a una edad de 3 años, Harry estaba sorprendido, así que de ese modo lo hacía, realmente era un adulto, Harry buscaba alguna explicación pero se entretuvieron por sus llantos.

—¡¿Pero qué hiciste, Peridot?!—lloró el bebé.—¡Vamos a morir! ¡Vamos a morir, todos! ¡Yo no quiero otra guerra! ¡Yo no quiero volver a morir! ¡Van a encerrar mi gema! ¡Van a creer que soy mi mamá!

Las dos mujeres gema parecían que quería que guardara silencio.

—¡Vas a llamar la atención de los humanos!

 —¡Diamante amarillo pega duro!—grito el niño llorando en un berriche.—¡Y todavía no alcanzo todo mi poder! ¡Soy un adolescente maldita sea!

—Sirius…

—¡No quiero volver a pelear! ¡NO! ¡Por favor, ya no!  

El berrinche de Universe se fue apaciguando, aunque duró llorando en el suelo por tanto tiempo, decía cosas que no tenían coherencia, sin embargo luego logró calmarse y volver a su propia edad. Harry no comprendía del todo cuando dijo que era un adolescente, ¿O sea que podría cambiar su edad a voluntad pero no permanentemente? ¿Hubo una guerra recientemente? ¿Por qué nadie lo había notado? ¿Qué tan bien habían llevado a guardarse todo eso?

—Podremos usar los taladros gemas de la guardería.—dijo Peridot la general.—¡Y taladrar hasta el fondo!

—No va a funcionar.—dijo Universe limpiándose las lágrimas.—Son un millón de gemas en el fondo del maldito planeta, fusionadas forzosamente…

—Ya no llores…—dijo la chica verde.

—Forzadas…

Para ser justos con Universe, él también quería llorar, quería decir que había un millón de gemas fusionadas más monstruosas que Malaquite. Era un problema de magnitud tan grave que toda la tierra podría estar en peligro.  La chica verde estaba viendo a Universe como si fuese un idiota, sin embargo Peridot le había abrazado y se quedó pegado por mucho tiempo.

—Gracias.

Los dos gemelos no hicieron ningún movimiento. Sin embargo se miraron entre sí, muy incomodos.

—¿Qué haremos?—dijo Universe.

—Podríamos ponerlas en una burbuja.—dijo Peridot.—Y hablar con ellas ¡Lo has hecho en el pasado!

—¿Hablar?

La chica verde parecida a Peridot se había molestado, miró a Peridot como si fuese inferior a ella.

—Déjame decirte que eso no va a funcionar, ¡Necesitamos un plan de ataque!

—Si podemos resolver esto de forma pacífica, lo haremos.—dijo Universe.—Si esas gemas se transforman destruirán el planeta sin incluir que son gemas quebradas y corruptas.

—Yo no sé porque dijo Steven que podríamos confiar en ti.

—¡Te aclaro que vas a mostrar respeto por Sirius!—grito Peridot.—¡Él es uno de los tres líderes de las cristal gem!

—¿Uno de los lideres? ¿Cuáles son las otras dos?

—Estamos hablando de Garnet.

—Oh, la permafusión.—dijo la chica verde.—¿Cómo es que un humano es el líder…?

Peridot iba a golpearla pero Sirius la detuvo del hombro.

—Es obvio que no confía en mí. Mi culpa, he demostrado debilidad.— Lo siento, Peridot.

—No deberías disculparte con ella.—dijo Peridot molesta.—Peridot tiene la culpa de todo, sólo quieres proteger a los humanos y a nosotros.

Harry se sorprendió, Universe no buscaba ser una clase de dictador mágico tenebroso, simplemente buscaba que la tierra estuviera en paz, la chica Peridot más grande caminó hasta la otra chica Peridot, Sirius miró con melancolía a su general armamentística.   

—¿Has oído del devorador de gemas, el perro de Anubis, el rey maligno de zigurat?

—Lo leí en los reportes.

—¡Es él!

La mujer verde le miró con temor.

—¡Así es! ¡Témele y respétalo! Él es el único que ha logrado avances de verdad con las gemas corruptas. Ha aliviado la locura de las gemas y aunque es temporal y su físico no tanto… ¡pero es un importante avance en cuanto a gemas corruptas! Ni siquiera Rose ha avanzado tanto.

La chica verde había visto su error.

—L—lo siento… creo que debí ponerme en tu lugar.

Los dos se habían reído.

—Veo que Steven te ha enseñado algunas cosillas de nuestra sociedad.—Ella afirmó con la cabeza. —Iré a Beach city, voy a ir a entrenar a Steven, él tiene que ayudarme…

—Pero es muy joven. –dijo la otra Peridot.

—¿Y? te recuerdo que a su edad de gema yo podría controlar ejércitos completos y él tiene la gema de mamá…

—Pero Steven todavía no tiene su propia gema…

—Su gema preciosa esta resguardada aun, lista para salir, además que te recuerdo que yo estaba en igualdad de condiciones. Usaba la gema de mi madre.

—Es verdad.

—V—vamos… necesito irme a pedir permiso a Snape… creo que va a estar feliz por dejarme ir por un par de semanas… Últimamente me evita…

—Iré a ver al director. Y nos construiremos un taladro para colocar la burbuja…

—Peridot ven ayúdame no quiero que llames la atención de los demás.

—De acuerdo.—dijo la chica verde.

—Iré con Albus Dumbledore.—dijo Peridot general.— ¿Por cierto, qué va a pasar con el caso Harry Potter?

—¿Qué pasa con él?

—¡Alastor Moody!

Se quedó pensando por un largo tiempo pero luego negó con la cabeza.

—Lo siento por él, me ha dado lástima que se haya quedado sin padres. He intentado por todos los medios decirle a Dumbledore sobre amigo Moody.

—¿Y si mandamos una carta a Potter? ¿Una carta anónima?

—No funcionará… Además estará a salvo hasta la tercera prueba. Creo… que le quieren vivo.

—¿Vivo? ¿Para que lo quieren vivo?

—No lo sé. Es una corazonada, es muy probable que Peter Pettigrew este involucrado pero no sé que tan debilitado este Voldemort.

—¿Quién es Voldemort?—dijo la peridot pequeña.

—Un inútil imbécil.—dijo Peridot grande. —Bien. Ni modo.  Iré con Dumbledore.

—Vámonos Peridot, vamos a la sala común a empacar y hablar con Snape.

—¡Vamos! 

—Ustedes dos tomen sus capas invisibles y pidan comida en las cocinas.

—Ya.—dijeron los dos enfadados.

—¿Vas a ver a mamá?

Dicho eso Sirius compuso una cara mucho más seria.

—Acostumbrense a la idea que Celestine valla a fallecer.—dijo Sirius.—No se ha podido levantar de allí. ¿Qué tiene?

—Seguramente fiebre de dragon.—dijo Peridot.—Esta más verde que yo o Peri.

—¡Oh! 

Harry sentía que su cama se habia inundado, le dio vergüenza que haya tenido un accidente pero cuando se dio cuenta, absolutamente toda la cama se habia remojado en lágrimas. Harry incluso no podría dejar de llorar a pesar que no quería hacerlo, era imposible para él. Al cabo de las seis de la mañana dejó de hacerlo. ¿De quién eran las lagrimas?

 

 

 

Notas finales:

Ron es malevolo jaja xD


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