Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Tormenta de Chispitas de Chocolate por cancion del viento

[Reviews - 2]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

-No has cambiado nada, Tony. –dijo con amabilidad revolviéndole el cabello al más bajo.


-Tú tampoco, Víctor. –Stark sonrió con gentileza.


-¿Y? ¿Cómo ha estado mi genio preferido? –le comentó el más alto.


-Mejor. –se emocionó. –¡Hay mucho que quiero contarte! –Tony le sonrió con unos ojos brillantes.


-Opino lo mismo, vamos... Te acompaño a tu salón. –lo tomó de los hombros con suavidad y comenzaron a caminar hacia el aula del más bajo. –Dime que traes otra chamarra contigo... afuera estamos a -5 grados.


El castaño menor hizo un puchero. –Pero si esta chamarra es muy bromosa. –le enseñó sus mangas. –Apenas si puedo moverme.


-Vamos a mi casillero, tengo un suéter extra.


-No es necesario.


-Este que traigo puesto. –se detuvo y se quitó su chamarra color verde fuerte. –Te lo prestaré... el que está en mi casillero es para mí. –se la colocó a Stark en la cabeza. –Así que si no quieres que me congele, démonos prisa.


-Pero... –sostuvo el abrigo en sus manos.


-No me hagas enojarme. –suspiró el más grande con una sonrisa. –Además te verás encantador con una prenda de vestir que te queda como vestido...


-¿Q-qué? –se avergonzó el menor con la chamarra todavía en sus manos. –Está bien... –dijo y de inmediato se puso la chamarra, tuvo que enroscar las mangas ya que le quedaban muy largas, además de que la chamarra le quedaba hasta la mitad de las piernas antes de las rodillas. –Otra persona puede caber aquí... –se jaló levemente el cuello del abrigo. –No entiendo por qué tú también usas ropa más grande que tú...


-Mera comodidad. –Víctor se encogió de hombros. –Ahora vamos antes de que se haga tarde...


-Bueno... –dijo Tony con sus mejillas sonrosadas por el calor que la chamarra le estaba proporcionando. –Tu ropa sigue siendo igual de cálida...


-...Y tú sigues pareciendo un rollito de canela muy delicioso... créeme que no lo pensaría dos veces antes de comerte. –le sonrió dulcemente y sonrió más cuando vio que el castaño menor se ruborizaba. –Como dije, sigues siendo para muchos la última gota de agua en el desierto. –le revolvió los cabellos.


-¡Víctor! –se abochornó el menor. –¡Y tú me sigues gustando como doctor!


-Quita el "como doctor".


-¿Eh? ¿Para qué? –Stark se confundió.


-Si, por eso te metes en problemas con frecuencia. –le regañó el castaño oscuro.


Tony hizo un puchero y se cruzó de brazos. –Eres como Stephen, a veces no puedo entenderlos... 


-Pero él perdió su oportunidad hace tiempo... –se encogió de hombros.


-¿Oportunidad de qué? ¿De competir contra ti? –Tony se emocionó, creyó que estaban hablando de ciencia. –Deberíamos hacer una reunión de ciencia... podemos invitar a Bruce. También sabe de eso.


-En parte si es competir contra mí pero no estoy hablando de ciencia... –suspiró Víctor. Finalmente ya habían llegado a su casillero, lo abrió y sacó su chamarra de repuesto acto seguido se la puso. Y así caminaron hasta el aula de Stark.


-¿Sigues comiendo solo en el receso? –cuestionó Tony un poco incómodo con el tema, sabía que su amigo aborrecía comer con otras personas ya que no le agradaba que muchos hicieran ruidos molestos al masticar. Por eso prefería quedarse en el laboratorio del tercer edificio y hacer algo de provecho.


-Sabes que me parece molesto que mis compañeros no sepan comer adecuadamente. –frunció el ceño. –Parecen animales...


-No todos son así... –intentó animarlo. –Come hoy con mis amigos y conmigo... ya sabes, para ponernos al tanto de todo...


-¿Cuántos de tus amigos son molestos?


-... Pues... –el castaño más bajo lo pensó por unos momentos. –Yo no los consideraría molestos... además hay dos personas que quiero presentarte.


-Supondré que algunos de tus amigos si son fastidiosos. –Víctor chasqueó la lengua.


-A veces... –se rascó la nuca el menor. –Solo a veces...


-¿Y por qué no comemos tú y yo solos? –le preguntó con un tono de voz más suave. –Así podemos platicar con comodidad.


-Come primero con mis amigos y conmigo. –le retó Tony. –¿O tienes miedo? –se rio.


-Muy bien. –le miró desafiante. –Acepto el reto... aunque yo no le veo como desafío. –se encogió de hombros. –¿Qué tan escandalosos pueden ser tus amigos?


-Te sorprenderías... –sonrió Tony con malicia.


Dado unos cuantos corredores de la academia, por fin llegaron al salón de Tony y antes de entrar se detuvieron. –Entonces nos vemos a la hora del almuerzo, Tony. –se despidió Víctor.


-Nos vemos... –dijo Tony y posteriormente se metió al aula, llegó a su asiento y dejó sus cosas en su pupitre, pero no tardó mucho cuando sintió la mirada de sus novios sobre él. Con lentitud se dio media vuelta y miró con confusión a sus fortachones. –¿Hola?


Lo que los más grandes observaban era la chamarra que traía Tony, no era suya ni de ellos eso se notaba a simple vista, además de que el abrigo desprendía una colonia diferente a las que ya conocían. En teoría no era de nadie que conocieran.


-Buenos días, Canelita. –sonrió Steve.


-Hola, Anthoska... –le sonrió de la misma forma que Steve.


-Este... ¿Qué pasa? ¿Por qué me miran así? ¿Hice algo malo? –se confundió el menor.


-¿De quién es la chamarra que traes puesta? –Bucky fue el primero en aventurarse a preguntar, se notaba los celos en su tono de voz.


-Si tenías frío pudiste decirnos, Tony. –Avisó el rubio.


-De hecho no tenía frío. –Stark se sujetó la chamarra. –Pero es calientita... –sonrió suavemente con sus mejillas sonrosadas.


-¿Entonces? –Insistió Bucky.


-Ah... es de Víctor, es un amigo. –comentó alegre el menor. –Por cierto, espero que no les moleste que él coma con nosotros hoy.


-Claro que no. –el rubio le acarició la cabeza a su pequeño novio. –No es un problema, incluso podemos aprovechar el almuerzo para conocerlo.


-Si es tú amigo entonces supongo que será el nuestro también. –Añadió el castaño mayor.


Tony les sonrió a sus fortachones. –Sé que se llevaran bien.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).