"LOS POLITICOS AHORA CONTRA EL MATRIMONIO IGUALITARIO, SON LOS FUTUROS VILLANOS DE NUESTROS LIBROS DE HISTORIA AMERICANA".
-NATALIE MAINES (THE DIXIE CHICKS)
Capítulo 5
Ryan llegó rápidamente a la conclusión de que los amigos de su prima y también los de Liam, definitivamente eran todos idiotas.
Por supuesto llegó a esta confirmación de varias maneras. En primer lugar; ¿de quién fue la idea de llevar una escopeta en un viaje de campamento? En segundo lugar, aunque sigue vinculado con el primero, Tenían más armas de fuego que linternas.
Cuando solo había un arma de fuego que decía algo sobre los procesos de pensamiento de su generación.
Y finalmente, ¿Qué persona "brillante" fue la que decidió entregarle la escopeta al chico más alborotado del grupo? que además le gustaba enviar disparos a cualquier cosa que se moviera en la distancia sea una animal o ¡hasta una persona!
Por estas razones específicas, y algunas otras, decidió alejarse de toda la fiesta de "cacería" del grupo; estaba considerando seriamente caminar de regreso al campamento, pero sería una suerte para Ryan que el idiota de la escopeta decidiera dispararle pensando que era un ciervo o algo así.
Así que siguió siguiéndoles el paso y esperando que pronto pudieran volver al campamento; ya había visto suficientes películas de terror para saber que; la noche, los bosques y una escopeta no eran precisamente una buena compañía.
Pero Ryan había vivido su propia película de terror, por lo que encontró la paz del bosque extrañamente fascinante, ya que el sonido de los animales se escabullia bullicioso en la parte delantera, haciendo que la probabilidad de que el chico disparara a una corta distancia era casi nula.
Con lo que estaba secretamente contento; después de casi morir él mismo, sabía cómo se sentía y no se lo deseaba a nadie.
Incluso Liam, que seguía enviándole miradas supuestamente disimuladas por encima de su hombro, pensando que no se daba cuenta.
Cruzando los brazos sobre su pecho mientras un escalofrío recorría su piel, Ryan automáticamente fijo su mirada hacia Liam.
Apenas podía distinguir la figura del muchacho en la tenue luz que emitía su celular cuando trataba de iluminar el camino.
—¿Te estás divirtiendo?"
—¡¡Woah!! —Ryan exclamó en shock cuando sus pies tropezaron hacia un lado, haciendo que su tobillo se torciera en el suave barro debajo de sus tenis antes de que Jake se acercará a su costado.
—Cuidado ahí, amigo. —Las manos del muchacho se envolvieron alrededor de los brazos de Ryan, retrocediendo en el camino.
—No quisieras caer allí, —Jake le mostró con un movimiento de cabeza la pequeña pendiente en la que caminaban.
—Créeme, nunca te volveríamos a encontrar.
—Gracias, —Ryan dejo escapar un lento suspiro mientras miraba hacia el foso oscuro, de repente, el bosque no le parecía tan tranquilo como originalmente pensó.
—Mi celular acaba de morir, —se burló Jake mientras tocaba la pantalla en blanco antes de que lo guardará en su bolsillo.
–¿Está bien si compartimos la linterna del tuyo? —miró a la luz que brillaba desde su móvil, apenas deslumbrante.
—Claro, —Ryan asintió mientras daba un paso vacilante hacia adelante, un dolor fugaz se propagó en su tobillo izquierdo, pero era soportable así que siguió caminando.
—Entonces, no me respondiste, ¿te estás divirtiendo? —Jake trató de comenzar una pequeña charla, la mayoría de sus rasgos escondidos en la sombra del bosque.
—Oh, ya sabes, —Ryan se encogió de hombros.
—Me estoy divirtiendo tanto al paso de estar siguiendo a un lunático armado, —Ironizó mientras que Jake dejó escapar una risita suave.
—Francis no es tan malo, —Supuso que el tal Francis era amigo de Jake.
—Su padre es dueño de una granja en algúna zona rural, además ha tenido bastante práctica con el rifle cuando iba de caza con sus tíos de por allí, así que no estaría tan preocupado.
—Eso no inspira mucha confianza, —Ryan suspiró, negando levemente con la cabeza.
—Y no estoy preocupado, —agregó rápidamente después de recordar el otro comentario de Jake.
Pero el muchacho solo se echó a reír.
—Vamos, deberíamos estar junto con los demás al frente, están hablando de que hay un lago cerca. ¿Te gustaría nadar a medianoche? —Ryan frunció el ceño, sus labios se separaron mientras lo pensaba por unos segundos. Su reacción automática era decir que no.
Su mente le estaba gritando que no hiciera nada peligroso; Cualquier cosa podría pasar; Cualquier cosa podría salir mal.
—Mira, —Hablo Jake, girándose para mirarle cara a cara haciendo que Ryan retrocediera un paso hacia atrás.
—Entiendo que te sientas asustado.
—No estoy asustado, —mintió.
La verdad era que podia haber algo en esa agua; sustancias derramadas, vidrios, serpientes.
—Entonces demuéstralo, —se rió Jake mientras se daba la vuelta y corría hacia adelante, su figura se perdía rápidamente en las sombras haciendo que Ryan entrara en pánico mientras aceleraba el paso para poder alcanzarlo, poniendo más peso en su tobillo lastimado.
El dolor empeoró de manera frustrante, pero lo ignoró mientras intentaba estar a la par de Jake, dándose cuenta de que se encontraban más lejos de los demás de lo que pensaba.
Y la idea de estar solo en el mugroso bosque, con la batería de su celular agotada, no era a lo que Ryan llamarían estar divirtiendose.
Cuando finalmente divisó a los demás pudo respirar tranquilamente, aunque tampoco fue demasiado difícil encontrarlos.
Hacían tanto ruido que era una rareza que las personas que pasaban por la carretera no llamaran a la policía. Si había algo que su tía Rose siempre le había dicho era que odiaba a los adolescentes excesivamente ruidosos; y este grupo de más de siete muchachos que se lanzaban a un lago de profundidad desconocida no hacían nada más que fomentar bullicio.
El lago parecía ser un acontecimiento natural ya que se extendía casi cincuenta pies de ancho y cien pies de largo con islas más pequeñas alrededor del centro.
—¡Ryan!, ¡Ryan!
De pie en lo alto de una colina, con vista al lago, volteó la cabeza al oír su nombre y encontró a Jake agitando los brazos en el aire, tratando de llamar su atención.
Todos estaban parados en una pequeña formación rocosa, de casi veinte pies de altura, quitándose la ropa antes de saltar, o en algunos casos ser empujados al agua.
Liam ya se encontraba en el agua, su rostro era llamativamente inconfundible cuando de repente sus ojos verdes miraron a Ryan.
Siguiendo el camino alrededor de las rocas, Ryan se deslizó por los últimos metros del terraplén antes de subir sobre la roca más grande, compartiendo una mirada con Liam mientras esté regresaba al borde con sus amigos.
—Se ve divertido ¿verdad? —Jake Envolvió su brazo alrededor del hombro de Ryan, girándolo para ver como Francis era el último en saltar desde la roca alta.
—¡BOMBA! —gritó el chico de manera desaforada.
Este era exactamente el tipo de cosas que se ve en las noticias antes de que se encuentre el cuerpo de un adolescente imprudente.
El grupos de acción para jóvenes los tendrían a ellos de ejemplo en el futuro mientras se presentaban por las escuelas secundarias del país, utilizando sus malas acciones para concientizar a los niños y que se mantengan al tanto antes de hacer cualquier estupidez.
Ryan no estaba al tanto de los demás, pero de lo que sí estaba seguro era que no quería convertirse en ninguna estadística de un libro de ejemplo para mocosos de primaria.
—Vamos, será divertido, —Jake le dio una palmada en la espalda, enseñándole una sonrisa alentadora mientras se quitaba la camiseta, al igual que con los vaqueros hasta quedar solo con sus boxers negros.
—Yo ... —Ryan dio un paso hacia atrás, la voz de su padre repentinamente gritaba regañandole en el fondo de su mente.
—¡Liam, dile! –se quejó Jake con su compañero, mientras que el mencionado respondió escogiendose de hombros.
Ryan y Liam compartieron una mirada torpe.
—Estoy seguro de que puede tomar sus propias decisiones, —finalmente habló el castaño mientras se reincorporaba a la fila que se estaba formando otra vez dándole la espalda a Ryan.
—Que gran ayuda me has dado Li —suspiró Jake.
—Escucha, Ryan, si realmente no quieres saltar al lago, puedes volver sin ningún problema al campamento junto con las chicas —Jake se encogió de hombros sin sentido cuando se dirigió detrás de la fila; mientras que Liam estaba en frente esperando su turno.
Mirando a los demás, Ryan asimilo que era el único que estaba completamente vestido y secó y la idea de ser el último daba miedo.
Él no quería que lo dejaran afuera como un chico marginado y seguramente nada podría salir terriblemente mal, todos lo han hecho y salieron a la superficie sin lesiones obvias.
Tal vez Ryan podría permitirse divertirse un poco.
—¡Está bien! —Le hablo a Jake, —Pero no me quitaré mi camiseta, —El recuerdo de sus cicatrices siempre presente y a pesar de la noche no quería correr el riesgo de que alguien las viera.
—¡Sí! —Jake respondió en el acto.
—¡Quítate los pantalones!
Ryan ignoró la forma en que lo escuchó decir aquello logrando que aumentara su ritmo cardíaco, pero tal vez era porque estaba dispuesto a saltar voluntariamente de un acantilado de veinte pies al agua helada.
Quitándose sus tenis y los calcetines, la repentina falta de soporte para el tobillo hizo que el dolor fuera agudo, pero él no estaba dispuesto a ceder, ya que se había desabrochado el cinturón y rápidamente el aire le mordió la piel.
Sabía que se veía ridículo con su bóxer azul pálido y su camiseta manga larga de color granate, pero no tenía otra alternativa.
—Ahora, debes saltar tomando una mínima distancia y envuelve tus brazos alrededor de las rodillas, —Jake le instruyó mientras se acercaban a su lado y entonces las mariposas comenzaron a multiplicarse asquerosamente en su estómago.
—Solo mírame, te mostraré —Ryan asintió con la cabeza con los dientes tiritando por el frío mientras envolvía sus brazos alrededor de su pecho y retrocedía, permitiendole al muchacho que tomara la distancia que necesitaba. Esperando a que se moviera fuera del camino en la parte inferior.
Jake dio un gran salto luego de haber corrido una distancia suficiente y en el momento en que sus pies abandonaron el suelo, Ryan quedó sorprendido. El sonido del cuerpo golpeando el agua hizo que un leve estremecimiento lo abarcará, el agua se estrelló a su alrededor y Ryan se inclinó sobre el borde esperando verle de regreso a la superficie.
Incapaz de postergarlo por más tiempo, Ryan esperó a que Jake estuviera una vez en tierra y cuando lo vio comenzó a dar un paso hacia atrás tomando la distancia dicha con anterioridad y, después de animarse a hacerlo, comenzó a correr.
La fría piedra mordió las plantas de los pies descalzos, y su tobillo protestó contra el peso impuesto, pero en el momento en que saltó desde aquel borde y ya no había nada debajo de él, tan solo aire.
Ryan se vio envuelto en una extraña sensación de libertad.
Justo antes de que regresara a la fría realidad y el gran dolor que provocaba su tobillo.
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—¡¡ERES UN ESTÚPIDO!! —Vocifero Liam.
—Un gran jodido imbécil, ¡completamente idiota!. ¿Donde mierda tenias la cabeza? —Ryan se mordió la lengua, tratando de evitar gritar de dolor cada vez que apoyaba el pie en el suelo, pero la molestia constante de Liam no ayudaba.
—Sabías perfectamente que estabas herido —Liam negó con la cabeza.
—Pero de igual manera saltaste al lago ¡¿Por qué demonios no has dicho nada antes de que te lanzarás precipitadamente del acantilado?!
—No pensé ... —respondió Ryan con voz vacilante.
—¡No, no pensaste! —le corto Liam denotando su enfado.
—¿Me vas a dejar hablar o vas a seguir gritándome? —Ryan negó con la cabeza y lamentablemente tuvo que apoyarse en el chico para no perder el equilibrio y caer al suelo; los demás muchachos ya los habían dejado atrás para regresar al campamento.
Liam fue el único que se quedó atrás con él, lo cual fue algo considerado de su parte, pero los constantes gritos y agregándo los insultos, no le ayudaban para nada en ese momento.
Y sus acciones lo confundían cada vez más cuando Liam envolvió un brazo alrededor de su cintura, mientras que Ryan apoyó su brazo sobre los hombros del castaño.
—Gracias, —suspiró una vez que Liam había dejado de hablar.
—Lo que estaba diciendo, antes de que me interrumpieras groseramente.
Liam abrió la boca a punto de protestar pero Ryan le lanzó una mirada amenazante diciéndole que se mantuviera callado y Ryan se sorprendió cuando el chico le obedeció.
—Sí, fue groseramente. Lo que estaba diciendo era que el dolor no se sentía tan mal cuando caminaba.
—Creí que eras uno de aquellos chicos inteligentes que les importa un bledo saltar a un lago de un acantilado, —suspiró Liam mientras intentaba equilibrar a Ryan de un lado y apuntar la linterna de su celular hacia el camino de tierra.
—No soy inteligente.
—Créeme eres más listo que yo, —se burló el castaño mientras continuaban caminando en el barro, sin parecer hacer ningún progreso.
—Vi todas esas A que obtuviste en las hojas de Biología de la clase del profesor Rothbone, —el rubio frunció el ceño ante las palabras de Liam.
—Le entregué aquellas hojas el jueves. No me las ha entregado todavía, —Liam entro en pánico por un momento, dándose cuenta de que había metido la pata.
—¿Crees que estamos lejos del campamento? Rachel seguramente me estará buscando.
Ryan entre cerró los ojos por un momento, volviendo su mirada hacia el camino mientras las palabras de Liam rondaban en su cabeza.