Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

PRIMER AMOR por crystalwall

[Reviews - 75]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola, les traemos el capitulo nuevo, el nombre lo dice todo uyyyyyyyyyyyyyyyy

Capítulo 13.- Karma

 

Miércoles, miércoles y Shun seguía encerrado e incomunicado en su casa, el muchacho de cabellos verdes se preguntaba si su situación se podría considerar como secuestro, Ikky seguía en muy mal plan y él quería morirse, esta situación estaba insostenible y el pequeño peliverde se sentía muy mal, muy muy mal

 

Esa mañana Shun estaba acostado en el mueble de la sala, no le apetecía estar en su habitación y en este punto de la mañana miraba al techo, odiaba a su hermano por quitarle todas las opciones, odiaba a Hades por no haber dado señales de vida, odiaba a Seiya porque tampoco había venido a verlo, odiaba a todo y a todos, negros pensamientos tenía Shun en este punto, seriamente consideraba la posibilidad de escaparse, él no iba a permitir que Ikky mangonee su vida a placer, ¿será que Hades lo recibía en su casa?

 

Shun saltó asustado cuando escuchó golpes suaves en su ventana en el segundo piso, se asomó a la ventana de la sala y vio a Hades que estaba lanzando piedras a su ventana con una puntería de envidia, el corazón de Shun se llenó de emoción, no lo podía creer, así que abrió la ventana y llamó a su amado

- Hades… por todos los dioses, ¿qué haces aquí?, ¿estás loco?, ¿te saliste del trabajo?

- Shun… ¿estás bien?, ¿qué te hizo el imbécil de tu hermano? – Hades dejó caer las piedras en la vereda y corrió a la ventana, tenía barrotes pero la pareja se dio modos para besarse a pesar de ellos, Shun lloraba en este punto y Hades trataba de enjugar sus lágrimas

- No me ha hecho nada, solo me tiene aquí encerrado, no me toma en cuenta y Hades… me va a mandar a un internado en Okinawa, me quiero morir Hades, te lo juro – Shun hablaba con desesperación

- No te puedes morir y no vamos a permitir que tu hermano siga en estas poses medievales, he venido a hablar con él y aquí lo voy a esperar, ábreme la puerta

- No puedo, no tengo las llaves

- ¿En serio te encerró? – Hades no podía creer el grado de inmadurez de su amigo, Ikky se estaba pasando la verdad

- Sí, me quitó mi teléfono, desconectó la línea fija de la casa, desconectó mi decodificador y ni siquiera puedo ver televisión y hasta me escondió mis libros, desapareció a mi perro porque no tengo idea de a dónde se lo llevó porque me niego a pensar que lo botó a él de la casa también, nunca lo había visto así, por eso no deberías estar aquí, me dijo que si tu venías me iba a mandar a una academia militar en Kioto o en Okinawa, ya ni siquiera me acuerdo de a dónde me iba a mandar – dijo Shun con urgencia y temor

- Él no te va a mandar a ninguna parte, por sobre mi cadáver, ok., si no puedes salir mejor me regreso a la escuela y vengo luego de que timbre la salida, a las dos, eso le da tiempo a tu hermano de llegar y así podremos hablar, ¿suena bien?

- ¿Y de qué vas a hablar con él?, no escucha razones

- Tengo que hacerle ver de alguna manera que no me va a mantener alejado de ti, te amo Shun y estos días han sido de absoluta tortura, no te puedo dejar salir de mi vida, si tu hermano se sigue poniendo intransigente, te juro que te secuestro y nos casamos a escondidas

- ¿En serio?

- Si… yo quiero todo contigo Shun, no voy a permitir que una rabieta de tu hermano nos robe la felicidad, ¿huirías conmigo?, ¿te casarías conmigo?

- Yo… claro que sí, yo te amo Hades

- Perfecto, espérame que yo vendré a las dos y hablaremos con tu hermano, por si acaso haz una maleta o algo y yo vendré por ti, ¿está bien?

- Si… lo que tú digas, te amo Hades, te amo

- Y yo a ti Shun, mi dulce Shun…

 

La pareja se despidió con apasionados besos a través de los barrotes de las ventanas, pero Shun se quedó con una paz en el corazón única, Hades se lo iba a llevar, lo había venido a buscar y había prometido no dejarlo solo en esta situación, esto era genial y la verdad era lo menos que esperaba Shun de Hades, así que con una canción en su corazón fue a su habitación y preparó una pequeña maleta, él se iría con Hades, nada más importaba

 

Ikky llegó a medio día y se sorprendió al ver que Shun había preparado algo de comer, el muchacho de ojos verdes estaba en la cocina y se había afanado en hacer espagueti

- ¿Cocinaste? – preguntó Ikky arqueando una ceja

- Hola Ikky, si cociné, ¿no me puedo dejar morir no te parece?

- Igual no vas a salir de la casa Shun, y prepara tus maletas, mañana te voy a ir a dejar en Okinawa, hoy en la tarde tengo que hacer el depósito pero ya tengo todos los papeles listos y mañana ingresas al internado en Okinawa

- Pero Ikky… - Shun miró a su hermano con desesperación

- Cállate!!!!, tú no tienes derecho de decir nada, no te mereces nada

- Ikky por favor…

- Basta!!!, siéntate que yo sirvo la comida

- No, se me fue el apetito – Shun se enfureció y tenía toda la intención de irse a su habitación a esperar a que Hades llegara, pero Ikky lo tomó con fuerza del brazo y lo sentó en la mesa de la cocina y le dijo en una voz baja completamente amenazante:

- Tú no te vas a ninguna parte, te sientas y comes, es mi última palabra

 

Shun estaba comiendo en silencio, últimamente siempre comía en silencio, el ambiente de su casa era por demás tirante, Ikky estaba comiendo también pero no lo regresaba ni a ver, el peliazul lo ignoraba olímpicamente y esa había sido su situación por días, y cuando hablaban era solo para herirse, esto le era insoportable a Shun que dejó el tenedor en el plato de espagueti y lo miraba ausentemente

- Come – dijo Ikky en un tono nada amable

- No tengo hambre – respondió Shun en un susurro

- No te estoy preguntando si tienes hambre o no, come te estoy diciendo y no me contradigas Shun

- No tengo hambre, no quiero comer – Shun empujó el plato suavemente solo unos cuantos centímetros de él pero eso Ikky lo tomó de la peor manera y dio un manotazo en la mesa, Shun pudo ver la furia en los ojos de su hermano mayor

- No quiero castigarte Shun, no me provoques

- ¿Más castigado de lo que ya estoy?, si no puedo salir ni a la puerta, me confiscaste el teléfono, desconectaste el internet, quitaste la antena del cable, me quitaste todos mis libros y desapareciste a mi perrito, en serio Ikky… no es justo lo que me estás haciendo, no he cometido el peor de los pecados

- ¿Y te atreves a defenderte?, ¿defiendes lo que hiciste? – Ikky estaba indignadísimo

- Yo lo amo Ikky…

- ¿Cómo vas a amarlo?, tú no tienes edad suficiente para saber lo que es el amor, y ya no quiero hablar más de esto Shun, ya dije mi última palabra

- Ikky por favor, yo nunca te he pedido nada en la vida, yo he hecho todo lo que tú siempre has pedido y no te he exigido nada, esto es lo único que quiero, yo lo amo, Hades es mi novio

- Él no puede ser tu novio, es muy mayor a ti

- Es de tu edad

- Por lo mismo, es muy mayor a ti, y ya no quiero seguir discutiendo esto, se me fue el apetito – Ikky botó el tenedor en la mesa y se puso de pie con rabia, Shun corrió a la sala, el peliazul lo miró y frunció el ceño, lo siguió al tiempo que vio como Shun abría la puerta principal y se lanzaba a los brazos de Hades, el pelinegro había estado esperando en la entrada aparentemente, Ikky casi se muere del coraje al verlo

- Ikky por favor, ¿podemos tener una conversación civilizada? – Hades no soltó a Shun que seguía aferrado a su pecho y tenía el rostro escondido en su chompa, Ikky se acercó amenazadoramente pero Hades levantó la mano para detenerlo y puso a Shun a sus espaldas

- No, fuera de mi casa y quítale tus sucias manos de encima a mi hermano!!!!

- Ikky por favor, trata de ser racional, hemos sido amigos por años, yo amo a tu hermano y mis intenciones con él son buenas – explicó Hades tratando de hacer entrar en razón a su furioso amigo que estaba apretando los puños de la rabia que sentía

- ¿Son tan buenas que a la primera oportunidad que tienes lo llevas a la cama?, eres un inconsciente Hades, no tenías derecho de hacerlo

- Ikky por favor… tú me conoces, yo sería incapaz de dañar a Shun, te lo repito, mis intenciones con él son buenas – Hades seguía hablando mientras Shun estaba medio escondido tras de él, Ikky estaba caminando por la estancia tratando de tranquilizarse sin conseguirlo, y en eso estaban cuando el timbre de la casa sonó

- ¿Esperan a alguien más? – preguntó el peliazul con furia

- No… ¿tú esperas a alguien? – preguntó Shun casi en un susurro, Ikky meneó la cabeza por lo que Shun fue a abrir la puerta, afuera estaba el papá de Seiya lo que le sorprendió al joven, pero Shun no tuvo tiempo de hacer o decir nada porque cual vendaval Aioros entró en su casa, atravesó la estancia y sin decir nada le dio un puñetazo a Ikky que lo mandó al suelo

- Sr. Hyuga por favor, tranquilícese – Hades llegó al auxilio de Ikky que no podía quitarse al castaño de encima

- Desgraciado infeliz, suélteme que lo mato

- ¿Pero qué pasa?, Sr. Hyuga por favor… esta no es la forma de arreglar nada – Hades no entendía pero estaba tratando de contener al castaño que se le lanzaba nuevamente a Ikky que se estaba poniendo lentamente de pie

- Perro… mísera alimaña, ¿cómo te atreviste?, ¿cómo pudiste?

- Aioros por favor, déjeme explicarle – Ikky limpió sangre de la comisura de su boca y levantó ambas manos en señal de paz, Aioros dejó de forcejear con Hades, por lo que el pelinegro lo soltó, grave error porque Aioros se le volvió a lanzar a Ikky y le dio otro puñetazo que lo mandó al suelo nuevamente, alcanzó a patearlo una vez en el vientre antes de que Hades lo sujetara, Ikky gruñó al tratar de incorporarse, se había quedado sin aire

- Sr. Hyuga por todos los dioses, si no se calma lo voy a llevar a rastras afuera y no quiero hacerlo – advirtió Hades

- Déjalo Hades, suéltalo… está bien… - dijo Ikky con dificultad

- No, no lo voy a soltar hasta que podamos discutirlo como personas civilizadas, ¿está bien?

- Ya suélteme – Aioros forcejeó una vez más y Hades lo soltó

- Aioros… - Ikky empezó a hablar pero el mayor levantó la mano al decir:

- Cállate insulso gusano, perro desgraciado, yo te abrí las puertas de mi casa, te confié lo más sagrado que tengo, te di cabida en mi mesa, ¿y así es como me pagas?, no sabes cómo te desprecio…

- Aioros por favor, las cosas no son así

- Tú te aprovechaste de él, te aprovechaste de su vulnerabilidad, tu sabías que él sufría por lo que le pasó y estaba necesitado de cariño, tu sabías lo que tuvo que enfrentar, tú lo sabías, ¿tú lo sabías y qué fue lo que hiciste?, lo engañaste, lo embaucaste y abusaste de él!!!!! – Aioros hablaba con total y absoluta indignación, Shun lo miraba y no entendía lo que estaba pasando, pero al parecer Hades si porque miró a Ikky con la boca abierta

- Yo no abusé de nadie

- Que te callaras te dije!!!, de la cárcel nadie te va a salvar, mi hijo es menor de edad y tú tienes casi 30 años, 30!!!!!!!!!!! – Aioros gritó y ahí fue cuando Shun lo entendió

- Por favor Aioros, así no vamos a solucionar nada, ¿dónde está Seiya?

- Tú no te le vas a volver a acercar a mi hijo nunca más, ya le arruinaste la vida, ¿qué más quieres de él?

- ¿Le arruiné la vida?, ¿no te parece que eso es muy drástico Aioros?

- No… claro que no es drástico, mi hijo está en el hospital por tu culpa!!!!!

- ¿En el hospital?, ¿por qué?, ¿qué le pasó? – el poco color que Ikky tenía en el rostro se le fue

- No tienes derecho a saber, no tengo por qué decírtelo, solo te advierto que no te atrevas a acercarte a mi hijo, y prepárate porque hoy mismo voy a presentar la denuncia en tu contra

- Ok., denúnciame, méteme a la cárcel, haz conmigo lo que quieras pero dime, ¿está Seiya bien?, ¿por qué está en el hospital? – Ikky se acercó a Aioros y trató de tomarlo del brazo, Aioros no se dejó tocar y alzó nuevamente su puño, Hades intervino para no dejar que otro puñetazo le cayera en el maltrecho rostro de su amigo

- No te atrevas a tocarme o a ti también te voy a enjuiciar – dijo Aioros mirando a Hades directamente

- Por favor Aioros, ¿qué pasa con Seiya? – la desesperación se podía notar en el tono de voz de Ikky

- Está delicado, su médico dice que… que… los embarazos de este tipo son complicados

- ¿Seiya está esperando un hijo? – Ikky abrió los ojos como platos, se quedó mudo al ver la cara de furia que Aioros mostró al decir:

- No te atrevas mísero gusano a decir que el niño no es tuyo – Aioros se le lanzaba nuevamente a Ikky para golpearlo pero Hades lo detuvo

- Si Seiya está esperando un hijo, es indudablemente mío, nunca podría negarlo, ¿en qué hospital está?, ¿en qué cuarto está? – Ikky sonaba muy seguro de sus palabras y su preocupación por Seiya era muy obvia, eso tranquilizó a Aioros que se quedó en silencio por unos segundos y dijo:

- En el hospital del centro, ¿vas a ir?

- Claro que voy a ir, Seiya debe estar asustado, yo no puedo dejarlo solo y mucho menos en el hospital, Aioros… yo amo a Seiya, lo amo como nunca he amado a nadie en toda mi vida, sé que él es joven, sé que yo soy mayor a él, sé y comprendo todo eso pero… lo amo

- ¿Amas a mi hijo?, ¿en serio lo amas?

- Claro que sí, lo amo con toda el alma

- Entonces… ¿te harás responsable del niño?

- Es mi hijo, claro que me haré responsable por él, por Seiya, y por mí mismo, Aioros… yo quiero a Seiya en mi vida, nos podemos casar mañana mismo si él así lo quiere, yo haré lo que Seiya disponga, solo lo quiero a mi lado, es simple

- ¿Simple?

- Si, sin él no puedo vivir, haré todo lo que él quiera, lo que tú quieras, pero no me alejes de su lado

- Bueno… eso… es algo, mi hijo está en la habitación 501, Aioria está con él, dile por favor que yo voy más tarde, solo busco algunas cosas de la casa y voy para allá

- Gracias Aioros, gracias…

 

Ikky tomó sus llaves, corrió al segundo piso y bajó puesto una chompa, tomó su maletín para sacar su billetera, Aioros ya se había ido, Hades y Shun seguían de pie en la sala, Shun se acercó a Ikky y tocó su brazo suavemente, Ikky lo miró y luego miró a Hades que se cruzó de brazos y sonrió con una autosuficiencia única

- Quita esa sonrisita de tu cara antes de que te la borre a puñetazos

- No se vale, yo te defendí de Aioros, lo menos que me debes es evitar la violencia

- Pues sí…

- Ikky… ¿cómo quedamos?

- Tengo que ir al hospital, ¿quieres venir conmigo? – el peliazul miró a Shun que meneó la cabeza y extendió la mano hacia atrás, Hades caminó un par de pasos y tomó la mano de Shun, el peliazul suspiró derrotado, obviamente se había quedado sin piso y dijo: - Si haces sufrir a mi hermano te voy a matar, voy a ser padre pero no quiero ser tío, Shun tiene que ir a la universidad y nada de lo que tú digas lo impedirá, yo no estoy de acuerdo con esto pero… no me puedo oponer por obvias razones, así que sean prudentes, porque a ti te puedo castrar y a ti te puedo poner un cinturón de castidad, no me provoquen porque en serio lo haré, ¿está claro?

- Ya vete Ikky, y felicidades, abraza a Seiya por mi – Shun abrazó a su hermano que lo abrazó de vuelta y sin decir nada más salió de la casa como alma que lleva el diablo, Hades abrazó a Shun y lo besó en los labios al decir:

- Bendito Seiya, le voy a poner un 10

- ¿Un 10?

- Si, si él no estuviera de novio de tu hermano, tú y yo seguiríamos separados, así que… bendito Seiya, y vaya que el karma en serio que viene a patearte en el trasero

- Tienes razón, oye… voy a ser tío, no lo puedo creer, ¿mi hermano y Seiya?, es que en verdad que no lo puedo creer…

 

Ikky manejó como maniático hasta que llegó al hospital del centro, corrió por los pasillos y subió en el elevador, se dirigió a la habitación que Aioros le había dicho y al entrar encontró a Seiya que estaba recostado de lado, tenía un suero conectado en su brazo y varios aparatos más porque tenía electrodos en su pecho y otros cables más.  Su monitor cardíaco pitó cuando vio a Ikky, el que se acercó a su cama y tomó su mano para besarla y preguntarle:

- ¿Cómo estás?, ¿qué dice el médico?, ¿qué pasó? – la angustia en el rostro de Ikky era palpable, Aioria estaba de pie junto a la ventana y se volteó cuando la conmoción de la entrada de Ikky pasó, sonrió al verlo todo angustiado por Seiya que levantó la mano y acarició su mejilla

- ¿Qué te pasó a ti?, ¿cómo supiste que estaba yo aquí?, Ikky por todos los dioses vete, mi papá no tarda en llegar – Seiya en cambio susurró esto y lo hizo con angustia mirando de reojo a su tío que sonrió divertido

- Lo sé, me dijo que te dijera que recoge algunas cosas de tu casa y viene

- ¿Hablaste con mi papá? – Seiya no lo podía creer y volvió a acariciar la mejilla de Ikky, estaba amoratándose, su labio estaba roto y al parecer su ojo se estaba hinchando

- Si, fue a mi casa y me dijo que tú estás aquí, ¿pero qué pasó?, ¿estás bien?, ¿qué dice el médico? – Ikky volvió a preguntar y al hacerlo acarició la mejilla de Seiya y besó su frente

- Seiya está estable, delicado pero estable, sufrió un golpe algo severo en el partido de básquet que jugó ayer, hay riesgo de aborto por eso tiene que estar acostado y quieto para asegurar que el embarazo no se interrumpa, lo tienen monitoreado porque sus valores están algo fuera de foco pero eso puede ser porque está asustado, ya todo irá pasando poco a poco en los próximos días, es algo que hay que cuidar pero no está en ningún peligro aún, las cosas siguen su curso sin complicaciones, así que tranquilos los dos, ¿está bien? – Aioria explicó e Ikky respiró con un poco más de tranquilidad

- Yo entré en pánico, tu papá no me dijo por qué estabas aquí, solo me dijo que había un problema con el bebé, pero no me lo explicó, por todos los dioses Seiya… casi me muero – Ikky se desplomó en la silla que estaba junto a la cama del castaño y tomó su mano para besarla, Seiya regresó a ver a Aioria que sonrió y meneó la cabeza

- Mi papá… ¿lo sabe?, sabe que tú y yo… ¿lo sabe?

- Claro que lo sabe, ¿no se lo dijiste tú? – Ikky frunció el ceño al preguntar esto, en la conmoción ni siquiera se había molestado en saber cómo fue que Aioros se enteró

- No, no se lo dije, si me preguntó pero no se lo dije, ¿cómo lo supo?

- Casualidades de la vida asumo yo, él es el responsable del detallito, ¿verdad? – Aioria señaló su propio rostro mirando a Ikky, era obvio suponer que Aioros hubiera golpeado a Ikky aunque sea una vez

- Si… estaba fúrico pero, lo hablamos, tu papá me dijo que me iba a meter preso y muchas cosas más, yo le dije que te amaba y que él hiciera conmigo lo que quisiera pero que no me apartara de ti – Ikky acarició la mejilla de Seiya que sonrió

- ¿Y dejaste que mi papá te pegara?, ¿en serio?

- Es lo menos que podía hacer, no me podía defender de Aioros, él tenía derecho de querer matarme, a la final le he robado su más preciado tesoro

- No me has robado

- Si, si lo he hecho, tú eres mío y vamos a tener un bebé, seremos una familia Seiya, una familia… - Ikky sonrió soñadoramente, eso Aioria no se lo esperó

- Entonces… ¿tú quieres tener el bebé?, de eso no hemos hablado – dijo Seiya y lo hizo con temor

- Yo creo que eso no está necesariamente en discusión, el bebé ya viene, no es así como lo pensé, no es así como me hubiera gustado si lo hubiéramos planeado pero… ya viene, es una bendición, así como tú lo eres, eso es lo importante, el resto de cosas las podemos ir arreglando como se presenten, depende de lo que quieras hacer y como lo quieras hacer

- ¿De qué estás hablando? – preguntó Seiya sin entender

- Bueno, tienes que acabar el colegio, lo bueno es que estamos a un mes del fin de año entonces te podrás graduar sin problemas, luego no sé si quieras tomarte un semestre de descanso hasta que nazca el bebé, o un año antes de entrar en la universidad

- ¿Universidad?

- Si… tú quieres estudiar arquitectura, ¿o cambiaste de idea?

- No, no he cambiado de idea pero… ¿y el bebé?

- El bebé estará bien, ya veremos cómo hacerlo pero nada debería impedirte estudiar, ¿no te parece?

- Eso sí…

- Bueno… de todo esto podemos hablar con tiempo ya cuando salgas de aquí y estés mejor, ahora debes descansar y estar tranquilo, yo me quedaré a tu lado así que no te preocupes por nada, te amo Seiya, te amo tanto

- Yo te amo Ikky, con todo el corazón

- Genial, ohhhh casi lo olvido, esto es para ti, era de mis padres, es lo único de valor que tengo de ellos y quiero que tú lo tengas – Ikky sacó de su bolsillo una cadena que tenía el dije de un sol, era de apariencia muy antigua, Seiya lo tomó y sonrió al verlo, ya lo había visto antes y era cierto, Ikky lo tuvo siempre en el cajón junto a su cama, el mayor se lo puso y de entre su ropa sacó otra cadena con el dije de una luna, tomó el dije de Seiya y el suyo propio y los unió, la luna cabía dentro del sol, era un dije que se dividía en dos, Ikky dijo: - Seiya… tú eres la persona más importante en mi vida, tú me completas y me haces inmensamente feliz, y así como estos dijes se funden en uno, quiero que nosotros hagamos lo mismo, Seiya… ¿te quieres casar conmigo?

- ¿Qué?, ¿es en serio Ikky?

- Claro que es en serio, yo quiero formar una familia contigo, quiero envejecer contigo, quiero todo contigo, ¿qué dices?, ¿te casas conmigo?

- Yo… si… claro que si… - Seiya se incorporó un poquito y abrazó a Ikky el que lo besó en los labios con pasión pero lo recostó en la cama para que no haga esfuerzos, y en eso estaban cuando Aioros entró a la habitación y frunció el ceño al decir:

- Déjense de arrumacos que Seiya tiene que descansar

- Papá… mira papá… vamos a casarnos – Seiya estaba todo emocionado y quería enseñarle el dije que Ikky le había dado, así que el peliazul desabrochó los dijes y ahí Seiya pudo enseñárselo a su padre, que lo tomó y arqueó una ceja al decir:

- ¿Van a casarse?

- Aioros, sé que es costumbre pedir su permiso antes pero… todo ha sido tan rápido, las cosas han cambiado de la noche a la mañana pero… nos gustaría contar con su bendición – Ikky tomó la mano de Seiya al decir esto, Aioros meneó la cabeza y dijo:

- Nada de lo que yo diga les hará cambiar de opinión, ¿verdad?

- Papá… yo me quiero casar con Ikky

- Lo suponía, espero que sepan lo que están haciendo, el bebé no es una razón suficiente para casarse, ¿si pensaron en eso?

- Claro que si Aioros, yo amo a Seiya y él me ama a mí, yo sé que todo esto es apresurado por las circunstancias pero no es esa la razón de todo, yo me quiero casar con Seiya y eso no tiene nada que ver con el bebé, solo lo acelera un poco, nada más – Ikky sonrió cuando dijo esto, Seiya sonrió también, eso era más de lo que él había pensado escuchar de su muy parco novio

- Vaya… bueno de ser así, claro que tienen mi bendición siempre y cuando me prometan que Seiya irá a la universidad y continuará con sus estudios, ¿me lo prometen?

- Claro que si – respondió Ikky muy seguro y Seiya solo asintió con vehemencia

- Bueno… entonces todo estará bien…

 

Aioria vio con una sonrisa como Aioros abrazó a su hijo y luego estrechó la mano de Ikky, luego vio como Ikky se enterneció completamente cuando Seiya le mostró la captura del ultrasonido en el que aún no podía verse nada pero todos ellos sabían que allí estaba el bebé que pronto llegaría para alegrar sus vidas

 

Notas finales:

Si... era Ikky el amante secreto de Seiya, si... Ikky no tenía calidad moral de decir nada pero igual lo dijo, ya saben... el más culpable es el más quejumbroso jajajajajaja

Nos vemos el próximo capítulo, ya nos falta poco, muchas gracias por leer y nos vemos pronto, les mandamos un saludo, bye


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).