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Fugitivos II: ¿Una razón para vivir? por diidi1897

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Notas del fanfic:

Espero que lo disfruten mucho <3

Notas del capitulo:

¡Hola!

Aquí segunda temporada de fugitivos... buscando una razón para vivir <3

Los invito a que la lean para que se enteren de todo lo que sucede en esta nueva temporada.

Pueden leerla aquí (es la antigua edición, 2013) o pueden pasar a leer la nueva edición en wattpad (2018)

¡Muchas gracias!

  

Previamente…

-Dany…-murmuró Ana mientras avanzaba unos cuantos pasos más dentro de ese lugar y le presté atención-Oh no…-observé a mi alrededor hasta que lo vi.

Presté atención en la pequeña figura que se encontraba abrazándose a sí misma en ese oscuro rincón. No pude evitar hacer una mueca.

¿Él era Daniel?

Sean iba a volverse loco.

Narra Maxim

Mi mirada lo recorrió por completo de un lado a otro; se encontraba recargado en la pared del lugar, estaba encorvado y se notaban a simple vista los temblores que viajaban por todo su cuerpo. Su cabeza la mantenía oculta entre sus rodillas.

¿Qué tanto le habían hecho esos hijos de perra como para que terminara en ese estado?

-Dany…-Ana dio un paso hacia él y lo único que hizo el muchacho fue encorvarse aún más. Los temblores en su cuerpo no cesaron, de hecho, me pareció que aumentaron considerablemente-Dany… tranquilo-Ana se colocó en cuclillas a su lado-Somos nosotros-la voz que estaba empleando también consiguió tranquilizarme-Ven, vámonos-estiró su mano y apenas rozó un poco ese hombro tembloroso cuando el chico se enderezó abruptamente y se alejó de nosotros

-No, no, no, no, no, no, no, no, no, no-repitió infinidad de veces sin apartarse en ningún momento de la pared; parecía ser lo único que continuaba manteniéndolo de pie-No por favor, no por favor, no por favor-a pesar de que estaba hablando en voz muy baja, como si estuviera en trance, conseguí escucharlo a la perfección gracias a que mis poderes continuaban presentes -No, no, no…-continuó murmurando mientras el piso se cimbraba producto de otra explosión que hubo a lo lejos. Reaccioné

-No hay tiempo, debemos sacarlo ya-avancé hacia él con el objetivo de cargarlo sobre mi hombro porque él no iba a ser capaz de dar dos pasos sin que se desplomara por completo

-¡No! ¡No!-gritó con demasiada fuerza; fueron gritos tan desgarradores que me detuve al instante-¡No! ¡No! ¡No!-observé hacia Ana que continuaba en cuclillas y mantenía una expresión de incredulidad en su rostro

-Dany…-ella se levantó-Tenemos que llevarte, este lugar va a derrumbarse en cualquier momento-explicó, pero Daniel continuó sin prestarle atención

-No le digan nada, solamente tómenlo-habló August-No podré alumbrarlos por más tiempo-asentí y nuevamente avancé hacia Daniel

-No, no, no-continuó repitiendo mientras negaba con movimientos frenéticos de su cabeza. Los movimientos que estaba realizando me parecían un poco borrosos porque la luz que August nos estaba otorgando no era tan potente. Y parecía que estaba extinguiéndose

-Vamos-extendí una mano hacia él, pero lo siguiente que hizo me desconcertó un poco. Volvió a su posición inicial mientras empezaba a balancearse hacia adelante y hacia atrás sin dejar de repetir “No, no, no”. Definitivamente se encontraba en un trance

-Tiene cadenas-mencionó Ana a mi lado mientras señalaba lo que había justo bajo nuestros pies. Eran argollas de uso rudo que se encontraban adheridas al piso; de ellas se extendían las cadenas que terminaban en… busqué su final, pero el cuerpo de Daniel no me dejó encontrarlo ¿Daniel estaba esposado a ellas?-Intentaré gastarlas con agua-mencionó mientras tomaba una parte de las cadenas y la envolvía en una pequeña corriente continua de agua.

El movimiento del agua fue circular, constante y se mantuvo en una parte específica alrededor de las cadenas

¿Iba a poder romperlas de esa manera?

Mientras ella hacía su parte, yo intenté acercarme otro poco a Daniel aprovechando que mantenía oculto su rostro entre sus rodillas. Di dos pasos hacia él

-Espera, vas a asustarlo de nuevo-me detuve en cuanto escuché la voz de August-Cuando Ana rompa las cadenas, aviéntale a Daniel tu sudadera para cubrirlo-lo observé crédulamente

-¿Quieres que lo haga de la misma manera que a los animales?-sabía que para capturar a un animal inquieto, primero lo cubrían con algún pedazo de tela para que perdiera la vista por un momento y se desconcentrara. Era una estrategia campirana, pero efectiva

-¿Se te ocurre algo mejor? No vamos a poder convencerlo a que salga por cuenta propia y tampoco creo que pueda hacerlo él mismo-observé a Daniel que continuaba en su trance. Ignorándonos por completo-Tampoco creo que te permita cargarlo como si nada si no lo cubrimos antes-asentí a las palabras de August

-Como sea, apresurémonos-empecé a quitarme mi propia sudadera. Sabía que una vez que estuviéramos fuera del laboratorio probablemente iba a petrificarme por el frío, pero debía de asegurarme en cubrir muy bien a Daniel porque si pescaba un resfriado estando en esas condiciones, no me imaginaba las consecuencias

-No se gastan-mencionó Ana cuando estuve a nada de arrojar mi sudadera hacia Daniel que continuaba encorvado, pero había dejado de murmurar incoherencias y también había dejado de balancearse-Probablemente con agua del mar pueda gastarlas-tuvo una idea y estuve de acuerdo. La sal y el movimiento podían con todo

-No tenemos tiempo para ir y regresar-la apuró August-A un lado, intentaré hacer caer un rayo sobre las argollas para desprenderlas por completo-Ana asintió y se alejó de donde se encontraban las argollas

-¿Daniel no va a asustarse por el sonido?-mencioné

-No lo creo…-August dudó

-Debemos hacerlo rápido-Ana se colocó a mi lado y también se quitó su chamarra-Ya no tenemos más tiempo-asentí y de inmediato, la luz que nos había estado iluminando, se extinguió

-Cúbranse los oídos-August indicó en medio de la oscuridad y acaté su recomendación.

Pasé saliva en cuanto un pequeño relámpago empezó a nacer de entre sus manos; después se encargó de frotar sus palmas una contra la otra

-Aquí van-sus manos se separaron e hizo un movimiento rápido. Una mano la deslizó hacia arriba y la otra hacia abajo. Esperamos un poco hasta que un rayo que nació desde el techo se estrelló justo sobre una argolla. La argolla cambió al color rojo y después August se encargó de patearla una vez para que terminara hecha pedazos-Voy por la otra-esta vez, sus manos hicieron el movimiento hacia la dirección contraria y el rayo se estrelló contra la argolla restante.

August se deshizo de ambas argollas, pero Daniel empezó a gritar y otra explosión detonó cerca de donde nos encontrábamos. Con ayuda de mis poderes conseguí escuchar pasos apresurados que iban hacia nuestra dirección

-Vienen varios, seguramente son guardias-indiqué. También estaba la posibilidad de que fuera Sean y su equipo, pero esperaba que en esta ocasión no lo fueran

-¡Rápido, cúbranlo!-indicó August-Revisaré el pasillo-escuché sus pasos rumbo a la entrada del lugar y de inmediato creó más luz entre sus manos

-Ana, ve con August y dame tu chamarra-ella lo hizo de inmediato

-No tardes-respondió y después escuché sus pasos alejarse hasta que la vi en la entrada. Ambos empezaron a vigilar ambos lados del pasillo.

Con la débil luz que me llegaba, conseguí distinguir a Daniel que continuaba en la misma posición y en el mismo rincón

-De acuerdo, vámonos de aquí Daniel-le informé e inmediatamente le aventé mi sudadera justo sobre su cabeza.

Gritó desesperadamente y antes de que consiguiera quitársela, corrí hacia él y lo tomé entre mis brazos.

Estuve a nada de dejarlo caer por la impresión que tuve de su cuerpo contra mis manos.

Daniel no era más que huesos y tuve miedo de fracturarle alguno con un movimiento equivocado. Se sentía tan frágil y estuve seguro de que su peso rondaba entre los 40 kilos o menos. No lo descubrí en ese momento

-¡No por favor! ¡No por favor!-empezó a gritar con más fuerza y a pesar de que se zarandeaba, no sentía ninguna fuerza de su parte

-Ya está, ya está-murmuré mientras acomodaba la chamarra de Ana sobre Daniel para cubrirlo un poco más-Shhh, tranquilo-lo acomodé un poco más, pero entonces sentí un líquido en mi mano derecha; justo donde sostenía los muslos de Daniel.

¿Qué era ese líquido?

No quise averiguarlo en ese momento porque no teníamos tiempo y no fue hasta que estuve seguro de que lo estaba cargando correctamente, corrí a un lado de August.

Las cadenas se escucharon de inmediato

-Espera, si las cadenas se atoran con algo los dos van a salir volando-August me detuvo

-Colócalas sobre mis hombros-le indiqué y de inmediato Ana empezó a acomodarlas justo como le dije.

Ese nuevo peso sobre mis hombros fue inesperado. Las cadenas no eran comunes y mucho menos corrientes. Pesaban demasiado y esperaba soportarlo hasta que llegáramos a la embarcación.

Tenía que soportarlo

-Apresurémonos, creo que son más guardias los que se están acercando-acatamos la indicación de Ana y los cuatro nos alejamos de ese lugar al que nunca se le dispersó ese olor tan nefasto.

No sabía cómo es que habíamos soportado estar en su interior y tampoco podía imaginarme cómo es que Daniel había soportado estar encerrado en ese lugar por quien sabe cuánto tiempo.

Olía mal y al parecer lo habían dejado a oscuras; también por ese poco peso con el que contaba se podía asegurar que lo habían privado de comida.

Algo era claro, la estancia de Daniel en ese lugar no fue nada agradable y no me parecía buena idea que Sean se enterara de algunas cosas por el momento. Primero debíamos de alejarnos antes de que “estallara”

-Justo detrás de nosotros vienen unos guardias-anunció August a mis espaldas y apreté el paso porque yo lideraba el camino con Daniel en brazos mientras que August y Ana nos iban cubriendo de esos pasos que momentos antes había escuchado.

Si ellos dos ya podían escucharlos significaba que se estaban acercando

-Falta poco para llegar a la luz-les mencioné en cuanto distinguí luz a lo lejos. Eso significaba que ese pasillo oscuro iba a terminarse y pronto íbamos a poder salir

-Avancen, me desharé de una vez por todas de esos cabrones-dijo August

-Te esperamos al final del pasillo-mencionó Ana mientras apretábamos el paso.

Caminamos otro tramo más hasta que por fin salimos de esa maldita oscuridad que empezaba a hastiarme. Ana y yo observamos hacia el interior del pasillo que dejamos atrás y lo encontramos repleto de rayos y relámpagos que iban desde el piso hasta el techo. Fue una escena increíble que me recordó a esa imagen famosa que rondaba por internet sobre el lago de Maracaibo.

Los relámpagos presumían tonalidades entre blancas, azules y amarillas. Fue como ver una telaraña atípica en un lugar poco convencional

-La ropa de Dany apesta-Ana mencionó mientras se cubría la nariz y dejé de prestar atención al pasillo para observar lo que había mencionado.

Me encontré con la ropa que Daniel llevaba en esos momentos; sus colores andaban entre el amarillo, el café y el negro. No quería ni indagar en el porqué de esos colores. También su textura no estaba siendo agradable entre mis dedos, parecía algo revuelto con grasa de cocina que había sido reutilizada un par de veces

-Lo importante es que ya se tranquilizó un poco…-lo mencioné porque cuando nos encontrábamos caminando a lo largo del pasillo, él no dejó de agitarse en ningún momento, pero ahora se encontraba tranquilo, aunque continuaba murmurando algo diferente.

“Basta, basta, basta” era lo que ahora se encontraba mencionando insistentemente y sin pausas.

Y en ese momento quise verle el rostro.

Quería ver el rostro de la persona que había hecho que alguien como Sean se encargara de mover mar y tierra para encontrarlo, pero mi sudadera y la chamarra de Ana lo cubrían desde el rostro hasta una parte de sus pies que se mantenían colgando de mis brazos. Tenía que aguantar un poco más porque no iba a ser bueno que Daniel pescara un resfriado una vez que saliéramos a la intemperie.

Lo acomodé otro poco más entre mis brazos y después “troné” los huesos de mi cuello; las cadenas a pesar de que no eran tan extensas empezaban a pesar aún más que al principio, pero debía soportarlo.

Si las cadenas eran de ese tamaño y mantenían adherido el cuerpo de Daniel al piso, significaba que sus movimientos en el lugar eran muy reducidos. Algo que, para mí, podía considerarse como desesperante

-Alguien viene-después de escuchar la voz de Ana, presté atención al pasillo. Ella se ocultó a un lado y yo hice lo mismo, pero del lado contrario. Los pasos apresurados se acercaron a nosotros y vi de reojo que Ana ya contaba con varias bolas de agua a su alrededor en caso de necesitar defensa.

Los pasos se acercaron aún más hasta que August salió apresuradamente del pasillo. Nos observó a ambos

-Listo, continuemos-asentí a sus palabras e inmediatamente emprendimos el camino de regreso por el pasillo que nos guió a ese otro pasillo de pesadilla.

Nuevamente acomodé a Daniel entre mis brazos y avancé con seguridad porque Ana y August iban atentos en el camino

-¿Creen que el equipo de Sean esté esperándonos?-mencionó Ana sin que nos detuviéramos en ningún momento

-Estoy seguro de que Sean va a buscar en otras partes y no solo la que le tocó-le respondí. Conocía a Sean, él no iba a salir del lugar hasta haberlo revisado por cuenta propia. Iba a peinar todo de ser necesario, pero su plan fallaba porque Daniel se encontraba en mis brazos.

Sean no iba a ser capaz de encontrar a Daniel

-Esperemos que no haga algo estúpido-alcancé a escuchar el murmullo de Ana y no pude evitar reírme. Ella era muy graciosa

-De Sean espero hasta lo imposible-sonreí-Es capaz de hacer muchas cosas para conseguir su objetivo-mi sonrisa desapareció cuando 6 guardias salieron de una puerta que había en el pasillo-Oigan…-me detuve de inmediato cuando nos apuntaron con armas largas

-Me toca-Ana pasó a mi lado y fue más rápida que los guardias.

Frente a nosotros creó una especie de pared de agua. Escuché los disparos y fue increíble ver cómo las balas se quedaban “atoradas” dentro del agua; las balas continuaban girando, pero no consiguieron atravesar la “pared” para llegar a nosotros.

Ana movió otro poco más sus manos hasta provocar que las balas giraran dentro del agua y después las impulsó hacia el exterior.

Los seis guardias cayeron e inmediatamente después de que la pared se extinguió, continuamos con nuestro camino.

La salida no tardó en aparecer y me alegré más de lo que esperaba porque las cadenas estaban matándome; podía sentir el momento exacto en que mi cuello se tensaba un poco más a cada paso que daba.

Inmediatamente después de que crucé la salida, mis dientes empezaron a estrellarse entre sí, pero lo dejé de lado para dedicarme en cubrir muy bien a Daniel; también no me importó que mis dedos estuvieran entumiéndose

-Está haciendo más frío ¿O es mi imaginación?-August se frotó ambos brazos mientras preguntaba sin dejar de temblar y observé a mi alrededor. No podía ver nada más que esa neblina espesa que habíamos creado. La llovizna que había tampoco nos ayudaba en algo, ni siquiera podía ver por completo nuestro barco; solamente podía notar una pequeña parte de la punta

-Al parecer alteramos bastante el clima con todo lo que hicimos-Ana le respondió. Ella también frotó sus brazos y el vaho salió de su boca al hablar.

Sentí el cuerpo de Daniel temblar y lo abracé con fuerza para intentar darle un poco más de calor

-Necesitamos que James venga a revisar a Dany, puede que también le dé un poco de calor-Ana se acercó y estornudó

-Enciende el walkie talkie-le pedí a August y él lo hizo de inmediato-Intenta hablar con James sin que Sean se entere-expliqué

-¿Por qué?-Ana preguntó y recordé que no les había explicado la idea tan vaga que había tenido cuando encontramos a Daniel

-No me parece buena idea que Sean vea en este estado a Dany, ustedes no lo han tocado y tampoco lo han cargado, pero parece que sufre de desnutrición grave-los dedos de mis manos continuaban rozando peligrosamente los huesos de Daniel-Y también ya lo escucharon-afirmé-Seguramente ya se dieron cuenta de que no se encuentra muy bien que digamos-

-No entiendo, dices que Sean… ¿No debe ver a Dany por el estado en el que se encuentra?-August se rascó la cabeza

-Sí-asentí varias veces y relamí mis labios que se encontraban sufriendo por la baja temperatura-No sé de qué sería capaz si lo encuentra y nosotros todavía estamos aquí-por todo el tiempo que había pasado, me percaté de que Sean no pensaba mucho las cosas cuando el nombre de Daniel estaba de por medio.

Era como si la mente se le nublara

-Ya entiendo-observé a Ana y a pesar de que la encontré temblando, continuó razonando lo que les había explicado-Sean sería capaz de destruir el lugar por el estado que Dany tiene-asentí

-Suena exagerado, pero sí, podría pasar-Sean iba a pensar rápidamente que no iba a tener otra oportunidad de regresar a ese lugar y seguramente lo explotaría por completo sin importar las consecuencias o a quienes lastime en su plan

-De acuerdo, entonces comunicarnos primero con James resulta ser lo más viable por el momento, él podrá ayudarnos-asentí a las palabras de August.

Me alegraba el hecho de que los amigos de Sean tuvieran cerebro.

-También necesitamos saber lo que está haciendo el equipo y en dónde se encuentran-mencioné como dato porque no iba a ser bueno que nos los encontráramos de sorpresa porque con cada momento que Daniel pasaba en mis brazos, me convencía aún más de que su estado no era el mejor y por eso Sean no podía verlo.

No en ese lugar y menos en ese momento

-¿Estás ahí James? Cambio-August volvió a insistir en el walkie talkie y esperamos una respuesta, pero no la obtuvimos-¿James? Cambio-

-¿Y si Sean responde?-Ana murmuró mientras nos encontrábamos a la expectativa de recibir una respuesta.

Escuchamos estática que provenía del walkie talkie y dejé de respirar por un momento

-¿Qué pasó? Cambio-los tres dejamos salir el aire que habíamos estado conteniendo por mantener la expectativa de quién iba a ser el que nos podía contestar

-¿Sean está cerca de ti? Cambio-explicó August mientras los tres nos observábamos y asentíamos

-No, a él y a Tomás los perdimos cuando algo explotó-suspiró-Regresé junto con Heinz a la entrada, estamos esperándolos-sonreí-¿Por qué? ¿Encontraron algo que nos lleve a Daniel? Cambio-

-Necesitamos que nos ayudes, encontramos a Daniel, pero su estado de salud no está bien y creemos que no es buena idea que Sean o Tomás lo vean ¿Puedes venir a revisarlo? Cambio-la voz de August salió ligeramente débil. Estábamos congelándonos en ese lugar

-Voy en seguida, mientras tanto vayan adecuando un lugar para que lo revise, cambio-James respondió y fue nuestra última conexión

-¿Podrá llegar a este lado sin ningún problema?-a duras penas alcancé a escuchar el murmullo de Ana. Ella se veía peor porque en primera, había utilizado de sobremanera sus poderes y ahora estaba sin chamarra porque se la había pedido para cubrir a Daniel

-Los poderes de James son muy útiles en este momento, no tendrá ningún problema-mencionó August mientras se quitaba su propia sudadera y se la entregaba a Ana

-Estoy bien…-ella intentó detenerlo, pero August no le hizo caso

-Puedo electrocutarme a mí mismo si mi corazón está a punto de detenerse-intentó bromear y consiguió que sonriéramos un poco por la broma de muy mal gusto

-Creeré en tus palabras-Ana le respondió y se colocó la sudadera-Acomodemos a Dany dentro del barco para que James lo revise-mencionó de inmediato.

Asentí y los tres caminamos hacia lo poco que conseguíamos ver del barco. August y Ana brincaron sin ningún problema hacia el interior del barco, pero yo me lo pensé dos veces

-No puedo saltar de esa manera con Daniel-negué levemente mientras apretaba con otro poco más de fuerza su cuerpo tembloroso

-Pásamelo-August se colocó en la punta del bote y extendió sus manos hacia mí

-No lo vayas a soltar-le advertí mientras yo también estiraba mi cuerpo hacia él.

El mar embravecido se movió justo en medio de ambos

-Con cuidado…-Ana indicó por los nervios que tenía mientras Daniel pasaba de mis brazos a los de August

-Lo tengo, lo tengo, lo tengo-vi la pequeña reacción que August hizo al palpar la desnutrición que Daniel tenía, pero a pesar de la impresión, lo sostuvo con fuerza

-Cuidado con las cadenas-cuando me libré del peso de Daniel, sostuve con fuerza las cadenas entre mis manos

-Brinca al bote-August retrocedió y entonces conseguí brincar. Las cadenas hicieron bastante ruido al agitarse y escuchamos otro grito ensordecedor que provino de Daniel-¿Le hice algo? ¡¿La cagué?!-August se alteró y pude haber reído por la expresión que hizo, pero el grito de Daniel me había asustado bastante

-Yo creo que fue por el ruido de las cadenas, deberíamos de acostarlo ya-Ana ingresó a la cabina de la embarcación y la seguimos. Por ahora su respuesta la consideramos como buena.

August y yo nos mantuvimos coordinados a cada paso que dábamos para evitar que las cadenas sonaran tanto y para que Daniel no se alterara.

Tampoco debíamos lastimarlo si es que nos separábamos de más.

Cuando ingresamos al pequeño espacio de la cabina, nos encontramos a Sergei observando atentamente las pantallas de seguridad con las que el barco contaba.

Él volteó al escuchar todo el ruido que creamos y su mirada fue directamente al bulto que August llevaba

-¿Es Daniel?-de inmediato se levantó de su lugar por la curiosidad

-Sí, consigan más mantas y acomoden algunas en el piso-le respondió August y mientras yo me dedicaba en soltar con mucho cuidado las cadenas, Ana y Sergei recolectaron todas las mantas.

Al final conseguimos colocar 3 mantas en el piso y August se encargó de acomodar a Daniel sobre ellas.

Daniel terminó muy bien acomodado sobre el piso. Por ahora era lo mejor que podíamos hacer

-¿Por qué no le destapan el rostro?-preguntó Sergei mientras volvía a acomodarse en su asiento

-Afuera hacía más frío, pero creo que aquí podremos hacerlo ¿Verdad?-respondí y me encargué de destaparlo apenas un poco

-No es posible…-murmuró August a mi lado mientras yo me quedaba mudo de la impresión

-¿Qué es esto? ¿Se supone que eso es una herida?-Sergei preguntó en un murmullo.

Estaba seguro de que nadie de los presentes nos esperábamos algo como… eso.

La herida se veía fatal.

La mitad derecha del rostro de Daniel no parecía tener ninguna forma, pero el izquierdo no se quedaba atrás, su ojo se mantenía cerrado y se veía una gran ojera bajo él. También tenía unos cuantos rasguños en su mejilla y la frente.

La herida más grave parecía originarse en su ojo derecho porque… ¡su ojo no se veía! Todo lo que rodeaba ese ojo se encontraba inflamado y a mi parecer parecía estar infectado de gravedad; sus colores rondaban entre el morado, el rojo y el amarillo.

Seguramente lo que se notaba en amarillo se trataba de pus

-Fue un animal el que lo golpeó de esta manera-Ana se hincó a un lado de donde Daniel reposaba-Se ve muy mal-extendió una mano con la intensión de tocarlo, pero se detuvo a último momento.

No solo era la herida en su ojo derecho, el ojo izquierdo estaba rojo y parecía que Daniel se encontraba haciendo su máximo esfuerzo en mantenerlo abierto. Nos observaba, pero no se notaba mucho porque su ojo lo tenía muy entrecerrado.

Se veía mal, muy mal.

Tampoco tenía cabello, bueno sí, pero estaba rapado en extremo. En su cabeza también se podían distinguir algunas heridas.

Su desnutrición también era bastante obvia.

Sus pómulos resaltaban y no tenía nada de mejillas; su boca se veía ligeramente “caída” y parecía que su piel iba a desprenderse con un solo roce. Lo poco que podíamos ver de su cuello también era desesperanzador.

¿Cómo tendría el resto de su cuerpo?

-¿Qué fue ese ruido?-preguntó Sergei al aire mientras observaba hacia el techo de la cabina

-Alguien saltó hacia el barco-mencionó August y ambos caminamos rápidamente hacia la salida con la expectativa de que fuera Sean el que le había ganado a James, pero fue todo un alivio cuando vimos a James caminar hacia nosotros.

Venía solo y con una mochila negra que colgaba de sus hombros

-¿Heinz y Claudio?-le pregunté en voz alta

-Se quedaron, les expliqué superficialmente la situación y van a impedir que Sean o Tomás se aproximen-respondió mientras se acercaba a nosotros. Él no parecía estar sufriendo por el clima.

El fuego de verdad que era muy útil en situaciones como esa

-Ellos dos no podrán detenerlos-le respondí y James elevó ambos hombros

-Nos avisarán por el walkie talkie-se acercó por completo-¿En dónde está?-

-Adentro-le di la espalda y lo guié al interior de la cabina con August siguiéndonos de cerca.

James ingresó e inmediatamente se hincó a un lado de Daniel.

Él también hizo una mueca al verlo, pero no mencionó nada

-Bien, esto no es para nada alentador-murmuró mientras abría la mochila negra y sacaba un par de cosas entre las que pude identificar una pequeña lámpara de mano y que parecía funcionar con baterías.

James la encendió y apuntó con mucho cuidado hacia el rostro de Daniel, pero no sirvió de mucho esa precaución porque Daniel giró su rostro y su ojo “sano” se cerró por completo. La luz le molestó.

James lo examinó en silencio por lo que me pareció fue bastante tiempo.

Revisó todos los ángulos posibles hasta que finalmente negó

-Escuchen, me parece buena idea que ni Sean ni Tomás vean el estado en el que Daniel se encuentra –murmuró mientras centraba su atención en inspeccionar con más detalle la grave herida que había en donde se suponía se encontraba el ojo derecho de Daniel

-¿Entonces estás de acuerdo?-lo interrogó August

-Claro, si Sean lo ve no sé de lo que sería capaz y mientras intentamos controlarlo perderíamos tiempo valioso para buscar ayuda en la revisión que Daniel necesita con urgencia de un profesional. Sean no nos va a servir de mucho en estos momentos-le respondió mientras se inclinaba aún más para ver de cerca la herida del ojo

-¿No puedes darle algún tratamiento ahora?-Ana se colocó a un lado de August

-Ya me imaginaba que el estado en el que podíamos encontrarlo iba a ser con algunas heridas, pero-negó varias veces mientras dejaba de observar el rostro de Daniel para descubrir un poco más su cuerpo-Esto está fuera de mi alcance-ninguno de los que estábamos presentes pudimos ver bajo la manta que James estaba alzando hasta que tomó un brazo de Daniel y lo sacó.

Entonces vimos otra grave herida.

Su muñeca parecía estar deshecha, pero no se podía apreciar completamente por la esposa que lo mantenía adherido a las cadenas

-No podré curarlo con lo que traje, sus heridas ya presentan un grado de putrefacción avanzada por el olor que desprenden. No sé qué tan acelerada y peligrosa esté la infección en la herida del ojo y de las muñecas-James negó nuevamente y elevó su mirada hacia mí-Deben llevarlo a un hospital lo más pronto posible-asentí-También su desnutrición es grave, la verdad no sé si Daniel soporte el viaje hasta el hospital más cercano-

-¡Haremos que lo soporte!-Ana gritó mientras James guardaba nuevamente todo en su mochila

-Tendrán que transportarlo con mucho cuidado, intenten que el barco no se tambaleé tanto y una vez que lleguen a tierra busquen un hospital para que por el momento le coloquen un suero, no permitan que le inyecten otra cosa-nos advirtió y se enderezó por completo

-¿Otra cosa como qué?-le pregunté ante la duda

-No sé cómo funcionen los hospitales en este lugar, pero mantengan vigilado al personal, puede que les sorprenda bastante que lleven a alguien con esta magnitud de heridas-asentí porque comprendí un poco lo que intentaba explicarnos-Lo menos que queremos conseguir es llamar la atención ¿Estamos de acuerdo?-asentí y él también-He pensado en algo…-mencionó después de un tiempo mientras observaba hacia Daniel que continuaba con su ojo cerrado.

Todos escuchamos atentamente las indicaciones de James.

Narra James

-¿A dónde va el otro barco?-me sobresalté al escuchar la voz de Tomás a mis espaldas

-Nos atacaron y tuvieron que irse antes, nosotros hemos estado esperándolos, idiota-le recriminé y aproveché para desviar un poco su atención del barco que se encontraba alejándose de nosotros cada vez más-¿Por dónde se fueron? Los perdimos a mitad de camino-Tomás abrió la boca, pero la voz de Sean le ganó

-Revisamos cada piso ¿Y Daniel? ¿Ustedes lo encontraron?-Sean salió del laboratorio y lo noté calmado.

Verlo de esa manera me daba a entender que estaba furioso.

Pasé saliva cuando la mirada de Sean se movió hacia la embarcación en donde los demás se alejaban junto a Daniel

-¿A dónde van?-señaló con su barbilla hacia donde ya sabía y observé de reojo a Heinz y Sergei. Ambos estaban en blanco por intentar en no empeorar lo que se aproximaba

-Encontraron a Daniel-dije rápidamente, pero Sean captó mis palabras e inmediatamente avanzó hacia mí

-¿Por qué no nos esperaron?-me pasó de largo y caminó hacia la parte interna del barco para ponerlo en marcha, pero entonces me metí en su camino-¿Qué haces?-suspiré antes de hablar

-Escúchame, primero ocupémonos por completo de este lugar, destrúyelo completamente-relamí mis labios y Sean me observó sin parpadear.

Pude sentir como el sudor se resbalaba por mi espalda. Sudor de nervios porque Sean estaba observando el más mínimo detalle que podría guiarlo a una rápida resolución del problema que teníamos entre manos

-Será después, ahora tengo que ver a Daniel-él intentó pasarme, pero nuevamente lo frené

-No creo que después podamos regresar a este lugar, hagámoslo ahora-afirmé

-¿Por qué quieres destruir un lugar si siempre estás en contra de eso?-entrecerró sus ojos y estuve a nada de dejar que el sudor resbalara por mi frente, pero conseguí consumir esa gota usando mi poder en mí mismo. No podía auto delatarme

-Daniel ya fue rescatado y los de ese barco están cuidándolo, quememos este lugar y después podremos alcanzarlos-Sean inclinó su rostro hacia un lado y continuó observándome sin parpadear-Es tu culpa por separarte, teníamos que esperarte-en verdad, eso sí fue un error de Sean

-¡Tomás!-su grito hizo que me sobresaltara, pero entendí rápidamente la situación.

Por un momento había olvidado que Tomás estaba presente y se encontraba justo detrás de mí. Me encontraba rodeado

-¡No Tom! entiende, entiende, entiende-pensé rápidamente en cuanto observé de reojo a Tomás.

Él iba a utilizar sus poderes para leer mi mente y así encontrar la mentira que le estaba ocultando a Sean

-Tom, debemos mantener a Sean en calma, no cometas una tontería o podrías ponernos en peligro a todos-intenté convencerlo-¡Después podré explicarles con calma la situación!-

-¿Qué está pensando?-Sean presionó la situación y escuché un suspiro de Tom a mis espaldas

-Te está diciendo la verdad-la voz de Tom salió segura; tanto así que incluso a mí me convenció

-Entonces he decidido que después me encargaré de este lugar, ahora quiero ver a Daniel-el Sean terco estaba presente, pero también el Sean astuto y el cansado y el desesperado.

El paquete completo y más.

-Destruyamos este lugar primero-insistí y entonces me di cuenta de que esa no era una buena excusa para mantener alejado a Sean de la verdadera situación.

Suspiré y relamí mis labios

-Escucha Sean, el estado de Daniel es grave y te recomiendo que primero te encargues de este lugar porque vas a desear hacerlo de inmediato una vez que veas a Daniel-nos observamos fijamente

-Después me encargaré de este lugar-afirmó y entonces saqué mi última carta

-¡Lo están llevando al hospital! ¡¿De acuerdo?!-me alteré. Sean era un maldito necio

-¡¿Por qué?!-él también se alteró

-Ya habíamos platicado sobre las posibilidades, Sean-lo enfrenté-Te había dicho que podíamos encontrar a Daniel muerto o herido de gravedad-tomé aire.

Sí, Sean y yo habíamos platicado meses atrás que tal vez podríamos encontrar sin vida a Daniel o en un muy mal estado de salud. Él necesitaba que alguien se lo dijera para que él estuviera preparado ante todo lo que podría suceder

-¿Qué tan grave?-su preocupación fue notable-¿Lo viste? ¿Cómo?-

-Escucha Sean, primero cálmate-

-¿¡Qué tan grave!?-gritó con fuerza

-¡No me grites imbécil!-también lo enfrenté y mis poderes ayudaron en el momento. Las llamas aparecieron a nuestro alrededor, pero sobre el mar.

Fue como si nuestro barco hubiera estado rodeado de combustible y yo me encargué de dejar caer la chispa para que todo ardiera.

Y los poderes de Sean no se hicieron del rogar.

De reojo pude ver que una parte de mis llamas estaba siendo controlada por sus poderes. Estaba haciendo suya la energía que mi fuego poseía.

Por eso Sean era alguien difícil de derrotar. Su poder funcionaba con todo. Absolutamente en todo.

La energía se encontraba en todas partes y Sean no desaprovechaba ese punto a su favor. Él le sacaba provecho de más.

En esos momentos los poderes de Sean se encontraban “robando” la energía de mi fuego hasta el punto de extinguirlo en una parte.

Él podría extinguir todo mi fuego si así lo querría; podría consumir el que se encontraba en el exterior y el que había dentro de mí.

¿Qué es lo que iba a hacer?

Notas finales:

:) Gracias por leer, nos leemos el fin de semana con un nuevo capítulo!


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