Hechos que sucedieron poco antes de que Lucy diera a luz
Narra James
-Lo entiendo, sí-asentí y apreté el teléfono-Gracias-suspiré y colgué. Observé en silencio la pantalla de mi celular hasta que se bloqueó por sí misma
-¿Qué te dijeron?-volteé a ver a Lucy que se encontraba sentada en medio del sofá de la sala; llegar a ese lugar le había tomado “años”.
Mientras yo estuve buscando en internet el número del hospital, Lucy se había encargado de bajar los escalones de a uno en uno
-A la enfermera no le importó que le dijera que soy un conocido de Iván, me dijo que por el momento no podría atender mi llamada porque él estaba revisando a un paciente, que más tarde lo contactara a su número privado-me froté el rostro
-¿Cuánto tiempo es “más tarde”? ¿Falta mucho?-Lucy se cruzó de brazos y tomé asiento a su lado
-No lo sé-observé hacia el piso-Y además no tengo el número personal de Iván-sí tenía uno, pero dudaba que después de varios años todavía tuviera el mismo; aparte de que antes yo no contaba con un número que pudiera dejarle a Iván y seguramente él no iba a responder la llamada de un “número desconocido” como si nada
-¿A la enfermera no le fue suficiente con que le dijeras que se trataba de una emergencia? Que insensible de su parte-negó mientras hacía una mueca
-Tienen demasiados filtros de seguridad porque no se trata de un hospital normal-expliqué-Es para cierto tipo de personas que pueden pagar las grandes cantidades que cuesta el servicio; Iván no es un doctor convencional y los servicios que ofrece tampoco lo son-había sido mucha la suerte que tuve cuando alguien como él me enseñó sobre medicina.
Ambos guardamos silencio.
Recargué mi nuca en el respaldo del sofá y observé por un momento el perfil de Lucy. Ella, con todo y sus ojeras continuaba siendo una mujer hermosa
-¿Quieres desayunar algo?-le pregunté sin tener en mente otra idea. Aunque la posibilidad de despertar a Sean para que nos ayudara en conseguir a alguien que atendiera a Dany me estaba tentando demasiado
-Quiero volver a dormir-Lucy me respondió con un suspiro de por medio
-Entonces ve a acostarte mientras te preparo algo, no puedes quedarte sin desayunar-no aparté mi mirada de ella y poco a poco vi como empezaba a sonreír
-Se me antoja…-Lucy hizo una expresión de estar pensando en el desayuno que quería para ese día-Un…-pero fue interrumpida cuando mi celular empezó a sonar.
De inmediato observé la pantalla y me encontré con un número desconocido. Las palmas de mi mano transpiraron y me convencí de que estaba a nada de tomar la decisión definitiva de bloquear los “números desconocidos” para siempre.
Tomé el aire suficiente antes de contestar
-¿Estás enfermo de cáncer y quieres que te lo cure?-mis palabras de saludo no consiguieron ni siquiera formarse porque la voz de Iván me interrumpió. No tuve palabras para responderle.
Y lo mejor era no responderle
-Mi enfermera atendió tu llamada y me explicó que tienes una emergencia-prosiguió con ese tono de voz tan imponente. Si las cuentas no me fallaban, él andaba entre los 50 y tantos años, pero su voz continuaba de la misma manera en que la recordaba.
¿Cuánto había pasado?
¿10 años? ¿13 años?
-¿Cómo sabía que se trataba de mí?-observé a Lucy y abrí con exageración mis ojos para que entendiera la gravedad del asunto. Ella elevó ambos hombros y se levantó del sofá
-Voy a preparar té-escapó para dejarme a solas con Iván, aunque él se encontrara a muchos kilómetros de distancia
-Hasta ahora, todavía eres el único James de Rusia que conozco-froté el puente de mi nariz-Bueno, dime de una vez de qué se trata esa emergencia, tengo a otros pacientes que atender-como siempre, él no le daba vueltas de más a los asuntos
-¿Y si se trata de una emergencia para querer saludarle?-sonreí. De seguro iba a dejarlo sin palabras ante mi pregunta fuera de lo convencional
-Voy a colgar-fue lo único que respondió sin un tono de diversión y entré en pánico
-¡No! ¡No! ¡Espere!-me alarmé y escuché una risa discreta de su parte-La emergencia no es para mí-me removí sobre el sofá-Es para atender a un amigo-
-¿Y qué sucede con ese amigo? La enfermera intentó explicarme lo que le habías mencionado, pero ella misma se enredó-pasé saliva
-Es un amigo que también tiene poderes y hace poco lo rescataron de un laboratorio-no escuché ningún sonido de su lado y dudé-¿Doctor?-pregunté con nervios porque tal vez me había colgado después de que escuchó las palabras “poderes” y “laboratorio” en una misma oración
-Estoy escuchando-fue lo único que mencionó y lo agradecí mentalmente
-Bu…-cierta cantidad de saliva casi provoca que me atragantara-Bueno-me aclaré la garganta-Él tiene varias heridas, una en el ojo derecho que parece fue creada por un golpe directo y otras en las muñecas-relamí mis labios porque los nervios me los secaban en muy poco tiempo-Su estado de salud es grave y una doctora que lo revisó hace poco le dictaminó gangrena-expliqué y me decidí por dejar a un lado lo del incidente con la anestesia.
Si Iván aceptaba en atender a Daniel, entonces me encargaría de darle los detalles necesarios
-¿Tú no lo examinaste?-cerré por un momento mis ojos. Aunque Iván no decía nada más, podía escucharlo decir con claridad y firmeza que, después de todo, yo no había continuado en aprender más sobre medicina
-Sí, pero fue algo rápido, tuvimos otros problemas y pasaron varias cosas que, bueno, fue algo complicado-suspiró
-No te estoy entendiendo nada, pero me parece muy mal que estemos perdiendo el tiempo con esta llamada, tráelo de inmediato al hospital para que lo revise-solo por un mini segundo mi alma regresó al cuerpo
-Espere, espere-detuve cualquiera de los movimientos que tuviera planeados
-¿Qué?-respondió con rudeza y eso me hizo recordar su nacionalidad
-Yo no podré llevarlo porque tengo unos problemas encima, pero unos amigos míos se encargarán de hacerlo-mis problemas eran vigilar las acciones de Sean
-He dicho que lo revisaré, que digan tu nombre en la recepción y los atenderé personalmente-
-Sí, entiendo-otra vez relamí mis labios-También ¿Podrá ayudarnos en el transporte?-maldijo en voz baja ante lo que le pedí.
Había sido algo que se me ocurrió al instante, pero tal vez iba a servirles a los demás. Seguramente no iban a poder tomar un vuelo con Daniel en ese estado y sin tener a Tom de su lado para que se encargara de las mentes del resto de las personas que se encontraran en su camino iba a ser algo mucho más complicado.
Iván suspiró y también pude imaginármelo al frotarse la frente para intentar calmar su disgusto ante lo extraño que debía parecerle todo.
A él le frustraba no comprender las cosas y más aún si no se lo explicaban debidamente
-¿En dónde están? Les mandaré un helicóptero, solo podrá viajar el herido y dos acompañantes más porque mandaré personal para que lo revisen en el camino-estuve de acuerdo. El otro equipo tendría que organizarse por su cuenta
-Están en una isla, en el mar báltico-expliqué
-¿El nombre?-guardé silencio por un momento para intentar recordar el nombre
-Es una isla de Estonia, la pequeña-dudé-Su nombre…-en verdad hice mi máximo esfuerzo para recordarlo, pero el cansancio que todavía tenía no me permitía dar más. Suspiré-No lo recuerdo-
-Investiga el nombre y dime si hay algún aeródromo cerca mientras realizo una llamada a la centra de vuelos de emergencia-
-La isla se llama Hiiumaa-escuché un susurro de Lucy a mis espaldas y ni siquiera volteé a verla, pero estuve seguro de que después iba a darle un gran beso por esa valiosa ayuda que me proporcionó
-La isla se llama Hiiumaa y recuerdo que el aeropuerto se llama Kardla-asentí varias veces. Por suerte, ese otro nombre no se me dificultó tanto recordarlo
-Indica a tus amigos que se dirijan al aeropuerto, yo me encargo de los permisos y el papeleo correspondiente-la manera en que dio sus indicaciones me hizo recordar cuando me daba lecciones sobre algún tema médico en el estudio de su casa; incluso recordé el olor del café que siempre tomaba a las 5 de la tarde. No importaba si hacía frío o calor, él siempre lo tomaba hirviendo y sin azúcar-Lo tendré todo listo en 2 horas, yo te llamo para darte los detalles-no pude decir nada más porque me colgó.
Observé el resumen de la llamada; su tiempo fue de 4 minutos con algunos segundos.
Parecía que no había cambiado en nada, continuaba siendo un hombre poco hablador y estricto. Con tan solo ver su rostro cualquier persona se la pensaría dos veces antes de intentar bromear con él o tratarlo amistosamente. Era justo por eso y otros detalles extras que no soporté pasar más de un año bajo su cuidado.
Froté lo largo de mis brazos varias veces.
Agradecía lo que había hecho por mí, pero pasar de estar vagando sin ningún rumbo a estudiar medicina durante varias horas al día continuaba pareciéndome una fatal combinación. Las personas que estuvieran acostumbradas a la libertad total y que de un momento a otro se la “quitaran” iban a comprenderme.
Por supuesto que escaparme fue una mala decisión porque los del laboratorio consiguieron encontrarme y atraparme en poco tiempo, pero muy en el fondo agradecía no tener que vivir con regímenes militares tan estrictos.
Ni siquiera los del laboratorio habían sido tan extremos.
Un ejemplo claro era que, al vivir con Iván, yo tenía que estar bañado, vestido y con mi cama tendida justo poco antes de las 5 de la mañana. En cambio, en el laboratorio me levantaba unas cuantas horas más tarde y no importaba si dejaba mi cama hecha un desastre porque, al fin y al cabo, yo era el único que la utilizaba
-¿Va a ayudarnos?-volteé rápidamente en cuanto escuché la voz de Lucy
-Sí-elevé ambas cejas y me levanté del sofá para acercarme a ella que continuaba en la entrada de la cocina
-Parece que no te odia tanto como te habías imaginado-me sonrió e hice una mueca
-Tal vez si la llamada hubiera sido para invitarlo a una cena me colgaría al instante, pero como esto se trata de salvar la vida de alguien, su vena de doctor le impide decir que no-le quité su taza humeante que mantenía entre ambas manos y le di un sorbo.
De inmediato se la regresé al saborear lo dulce que se encontraba su té de limón
-¿Le mencionaste sobre la negligencia médica?-Lucy, en cambio, dio un sorbo a su taza como si nada
-No-me froté ambos párpados y recordé un detalle-Pero tengo que enviarle el historial médico de Daniel-saqué mi celular y busqué la página oficial del hospital con la esperanza de encontrar un correo electrónico administrativo en el que pudiera enviarle digitalmente todo lo que tenía sobre los análisis que con anterioridad le había hecho a Daniel
-¿Te lo pidió?-Lucy me preguntó mientras ambos empezábamos a caminar de regreso al sofá. Yo me moví con mi atención en la pantalla del celular
-No, pero no creas que fue porque se le olvidó, él está seguro de que me enseñó muy bien los protocolos básicos para atender a un enfermo y sí que lo hizo-de nuevo hice otra mueca.
Lucy se rió
-Me gustaría conocerlo, solo cuando hablas de él haces tantas expresiones graciosas-continuó riéndose de mí, pero no comenté nada porque era verdad.
Me gustara o no, Iván había sido la persona que consiguió dejarme una marca en lo que llevaba de vida.
Una marca muy profunda que en algunas situaciones salía a la luz
-No encuentro ningún correo que me de confianza-suspiré-Tendré que llamar de nuevo a recepción para pedirles uno en el que pueda enviar los datos de Daniel-relamí mis labios
-¿Te ayudo en algo?-Lucy me preguntó y negué mientras daba inicio a mi camino rumbo al laboratorio de la fábrica para empezar a acomodar todo lo que tenía de información sobre los estudios que le había hecho a Daniel
-Descansa y si te das cuenta de que Sean está despierto, avísame de inmediato-fue lo último que mencioné antes de salir de la fábrica para empezar a hacer lo que Iván no me había pedido.
Tenía poco tiempo para reunir la información y después informaría a los demás sobre los nuevos planes que se aproximaban.
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Tal y como lo dijo, Iván me llamó en poco tiempo para ponerme al corriente con lo que había conseguido. Y vaya que obtuvo muchas cosas. En primera, el helicóptero había sido cambiado por un avión sanitario que iba a llegar al aeropuerto de Kardla, me dio la clave del vuelo y la hora en donde Maxim y los demás iban a poder abordarlo.
Quedaba poco tiempo para que el encuentro se llevara a cabo.
Tuve que realizar varias llamadas que se distribuían entre el celular de Maxim y el teléfono del hospital, pero al final conseguimos poner todo en orden para que Daniel fuera transportado de manera inmediata para recibir el mejor tratamiento del mejor doctor que conocía
-¿Entonces ese doctor va a atender a Dany?-Maxim me preguntó justo después de que le pasé todos los datos necesarios para cuando abordaran el avión y para después de que descendieran de él
-Sí, pueden confiar en él-dije con total seguridad.
Hace poco menos de una hora le había enviado a Iván toda la información médica necesaria de Daniel, él me dijo que iba a revisarla a profundidad mientras el avión regresaba, pero no mencionó nada sobre que yo todavía recordaba sus enseñanzas
-James…-escuché la voz de Lucy a mi lado justo al mismo tiempo en que Maxim empezaba a mencionar otra cosa y como no supe a qué prestarle atención, no pude evitar que Sean me arrebatara el teléfono
-¡¿Maxim?!-lo observé y di un paso atrás-¿Qué le dijiste? ¿Hablaron de Daniel?-Sean bajó el teléfono y deduje que Maxim había terminado con la llamada
-Lo llevan al mejor lugar que hemos podido encontrar-di otro paso atrás
-¿A dónde?-Sean se veía cansado, pero eso no impidió que se viera amenazante. Parecía que tenía muchas ganas de soltarme un buen golpe
-Está lejos-elevé ambas cejas con obviedad para intentar hacer caer sus esfuerzos
-Dímelo-me froté el puente de la nariz y suspiré.
Sean era imposible.
Narra Maxim
-¿¡Maxim!?-escuché la voz de Sean al otro lado de la línea y no se me ocurrió otra cosa más que cortar la llamada y quitarle la batería a mi celular.
Estuve a nada de aventarlo muy lejos, pero por suerte me frené a mí mismo
-¿Qué sucedió?-Sergei me preguntó con ambos ojos totalmente abiertos por la impresión que mis movimientos le habían causado
-Creo que Sean le quitó el teléfono a James-apreté entre ambas manos mi celular
-¿Escuchó algo?-Ana preguntó desde la parte delantera de la ambulancia
-No, no creo-suspiré-O no lo sé, puede que haya estado escuchando a escondidas-
-Pero tenemos tiempo de ventaja, estamos cerca del aeropuerto y falta poco para que el avión aterrice- August mencionó desde el lado del conductor-Y en la última parte de la conversación no mencionaron hacia dónde es nuestro destino-
-Eso espero-calmé mi respiración y poco a poco mis latidos desenfrenados empezaron a tranquilizarse. Ese susto había resultado ser demasiado extremista
-Qué suerte lo del avión-Ana habló hacia August y después volteó a vernos-No tengo ni idea de cómo es un avión sanitario, pero ya quiero verlo-sonrió y por ese simple gesto, sus ojeras fueron más notables.
Pero Ana ni siquiera se preocupaba de que su cabello estaba hecho un total desastre.
De hecho, a ninguno nos estaba importando lo desastrosos que de seguro no veíamos desde que habíamos recibido la llamada de James que trajo muchas noticias buenas
-¿Y quién es Iván? ¿Un doctor prestigioso?-Sergei preguntó mientras intentaba estirar sus piernas en el poco espacio que había en la parte trasera de la ambulancia. A pesar de que habíamos acomodado muy bien la camilla de Dany, el espacio continuaba siendo reducido como para sentarnos de mejor manera
-Es un conocido de James, Iván fue quien le enseñó sobre medicina-August le respondió
-¿Él le enseñó?-pregunté con sorpresa-Creí que James había aprendido todo por sí mismo-me incliné hacia el frente y destapé un poco a Daniel para revisarlo.
Antes, Dany no había necesitado de una máquina que lo ayudara a respirar, pero la doctora de la clínica nos había ayudado y dado algunos consejos para transportarlo y para mantenerlo estable. Lo de la asistencia respiratoria era para prevenir cualquier complicación, pero las posibilidades de que algún problema surgiera, eran bajas.
Con todo y el error que la doctora había cometido, no me resultó una mala persona.
Terminé por no considerarla como una verdadera profesional, pero por lo menos su buena actitud y atención del principio nos permitió relajarnos momentáneamente.
Cuando tuviera internet y ganas, me iba a encargar de calificar con media estrella a su clínica en Google. Solo sería para que otras personas tomaran su debida precaución
-A James siempre le ha gustado todo eso de estudiar y aprender cosas complicadas-August continuó explicando-Solo estuvo viviendo por un tiempo con Iván justo después de que él y yo nos separamos-
-¿Ustedes estuvieron juntos desde el principio?-Sergei preguntó
-Sí, nos conocimos porque él me descubrió utilizando mis poderes en campo abierto, me dijo que me detuviera porque le daban miedo los relámpagos-August se rió-Éramos unos niños, pero él ya era muy mandón-
-¿Y por qué se separaron?-ahora fue mi turno de preguntar
-Por la misma razón de que hacía uso indiscriminado de mis poderes, no le prestaba atención a ese tema, siempre me ha gustado utilizar mis poderes intrépidamente-asentí. Los relámpagos eran algo que seguramente hacían sentirlo poderoso e invencible-A James no le gustaba que atrajera mucho la atención y siempre estaba diciéndome que alguien podía atraparnos, no sé qué habrá vivido antes de que nos conociéramos, pero al parecer eso lo mantenía siempre en alerta-
-¿Nunca les ha contado?-me crucé de brazos mientras hacía la pregunta
-Es como con todo el mundo, a nadie le gusta traer su pasado de regreso y mientras menos personas lo conozcan, es mejor ¿O no?-relamí mis labios
-Creí que como todos ustedes son cercanos, saben todo de todos-Sergei mencionó
-Bueno, August y yo nos conocemos bien-Ana entró a la conversación-También conozco alguna que otra cosa de Lucy, James y de Tom, pero de Sean sé casi nada-giró un poco sobre su asiento para observarnos-Ahora, es seguro que Lucy y James ya saben todo del otro-sonrió-Así como James conoce a Sean y a Tom porque coincidieron en algunas misiones, eso Tom me lo platicó-sonreí.
Me resultó increíble de escuchar. Todos se conectaban entre todos
¿Había sido obra del destino?
-¿Y cómo es que llegaron a vivir todos juntos?-Sergei se inclinó hacia adelante para reposar sus antebrazos sobre sus muslos y entrelazar los dedos de sus manos.
Ana guardó silencio unos momentos para pensar y recordar, pero August le ganó
-Cuando James se fue por su lado, me encontré con Ana-y como si estuvieran conectados, ambos empezaron a reírse al mismo tiempo ¿Qué les sucedía?
-¿Qué? ¿Por qué se ríen?-Sergei preguntó con una sonrisa de por medio sin dejar de verlos. Ana cubrió su boca ante la risa y también observó a August.
Después de que ambos se calmaron, Ana continuó
-Porque cuando ambos nos presentamos, nos tomamos de la mano y nos electrocutamos-ambos rieron con más fuerza-No sabemos por qué ocurrió, pero todavía recordamos el dolor-
-Fue la primera vez que sentí la potencia que mis poderes creaban-August mencionó sin dejar de reír
-Después de eso, nos caímos bien y decidimos quedarnos juntos, pero los del laboratorio no tardaron en encontrarnos y lo peor fue que nos llevaron a diferentes lugares-Ana se quejó-En mi primer laboratorio estaba sola, pero después me llevaron a otro y en él me encontré con Tom-afirmó-Antes era más serio y callado, no me agradaba del todo, pero por unos entrenamientos en los que coincidimos empezamos a tratarnos más-
-¿Por qué entrenaban juntos?-pregunté porque no le veía sentido a un entrenamiento en conjunto de poderes mentales y el de controlar el agua
-Tom tenía que leer la mente de las personas a través de una pared de agua u otros materiales que poco a poco fueron incrementando en complejidad, a veces veía sus entrenamientos y lo hacían sufrir demasiado-en el rostro de Ana, ya no había rastros de la risa que antes no podía controlar-Es por que poco a poco fue desarrollando la manía de leer las mentes de todo mundo, ya lo hacía sin desearlo realmente-chasqueó su lengua-Incluso, hubo una vez en la que él creyó estar hablando conmigo, pero la verdad es que él respondía directamente a mis pensamientos, fue como si ya no supiera diferenciar lo que de verdad le decían a lo que estaba leyendo en las mentes, es por eso que muchas veces no era del agrado de otras personas-exhaló-Poco a poco se vio en la necesidad de cambiar su carácter para agradar un poco más a las personas y por eso habla mucho-sonrió-Es para no darle oportunidad a sus poderes de que se le adelanten-elevó ambas cejas mientras sonreía sin abrir la boca.
Por eso Tom era así.
La verdad, es que no podía imaginármelo como alguien callado y serio. El Tom que conocía era “molesto” a su manera.
Me provocaba más risa que desagrado
-Después, por varias casualidades, resultó que Tom conoció a James y a Sean, Tom me lo contó y llegamos a la conclusión de que tal vez ese James del que August siempre me hablaba, podría ser el mismo que Tom conocía y bueno, poco a poco empezamos a comunicarnos entre todos y a planear un escape-Ana finalizó mientras regresaba a su posición inicial-Conseguimos reunirnos y decidimos vivir juntos-elevó ambos hombros como si no hubiera una mejor respuesta
-Bueno, creo que nos perdimos en la conversación-mencioné después de un prolongado silencio en el que solo se escuchó el pitido de la máquina que ayudaba a respirar a Dany y el del motor de la ambulancia-¿Entonces por qué James conoce al tal Iván?-decidí recobrar el sentido de la conversación porque me interesaba escuchar un poco sobre Iván antes de encontrarnos con él
-James me contó que estaba practicando con sus poderes y se le salieron de control a tal grado en que sus brazos sufrieron un daño considerable-August fue quien me respondió
-¿Se auto-quemó?-repliqué
-Sí y estuvo a punto de morir, pero alguien que pasaba de casualidad por el lugar del accidente lo llevó al hospital en donde antes trabajaba Iván-August encendió una direccional y la ambulancia tomó otro rumbo que no era línea recta-Supongo que mientras buscaban a alguien que respondiera por James no lo consiguieron e Iván lo ayudó en ese aspecto-August elevó ambos hombros
-¿Y por qué yo no había escuchado de Iván?-Ana le preguntó a August
-No lo sé, es asunto de James-August le respondió-A mí me lo platicó cuando Dany sufrió lo de la sustancia verde, pero no me dijo nada más-
¿La sustancia verde? Había escuchado una que otra cosa respecto a ese tema, pero todavía no lo entendía. Observé a Daniel que continuaba en un estado entre dormido y medio despierto.
¿Qué más le había sucedió con anterioridad?
-Ya puedo ver el aeropuerto a lo lejos-Ana mencionó con bastante ánimo-¿El avión ya habrá aterrizado? ¿Cómo será?-escuché el entusiasmo en su voz y sonreí.
Yo también estaba contento porque eso significaba que la ayuda iba en camino.
De nuevo, observé a Dany. Pronto iba a recuperarse.
Estaba seguro de ello.
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Todos se movían como si supieran lo que debían de hacer con exactitud. Y claro que sabían lo que hacían.
Rodeaban a Daniel sin alterarlo ni un poco. Platicaban entre ellos para decir en voz alta el estado de Daniel y también decían en voz alta cada que le conectaban algo o para mencionar los signos vitales.
Ana, August, Sergei y yo también fuimos atendidos. A cada uno nos preguntaron si algo nos dolía y nos ofrecieron vitaminas y agua.
Los 4 tomamos asiento en donde nos indicaron dentro del avión mientras los enfermeros y enfermeras se encargaban de subir a Daniel con todo y camilla. Lo hicieron tan expertamente que ni siquiera pude cerrar la boca ante la impresión que tenía de la manera en que todos se movían.
Parecían estar en sincronía
-Tengan, beban este suero. Les vendrá bien-una enfermera nos volvió a ofrecer ayuda y en esa segunda oportunidad ya nadie dijo nada y aceptamos. Pensaba que no lo necesitaba, pero una vez que tomé un trago del suero, ya no pude detenerme y llegué a terminarme dos botellas en poco tiempo.
Lo mismo fue para los demás, pero solo Ana quedó totalmente rendida y se durmió después de que le proporcionaron una manta. August también se quedó dormido
-Ustedes también deberían descansar, el viaje no será largo, pero pueden aprovechar el tiempo-fue un enfermero el que nos habló mientras revisaba una especie de tableta-Pueden estar tranquilos, el chico está bajo observación-señaló con su barbilla hacia Daniel-Hemos conseguido estabilizarlo, no le afectará el traslado-nos sonrió a Sergei y a mí y después continuó haciendo su trabajo
-Dormiré un momento-Sergei murmuró a mi lado y al poco tiempo de que el avión despegó, se quedó dormido.
Yo no pude dormir porque me entretuve viendo todo lo que le hacían a Daniel. Si bien la ayuda era enviada por alguien que James conocía, no podía bajar la guardia.
Eso es lo que Sean haría si estuviera en mi lugar.