Capítulo 12: Dolor, solo dolor
-¿Niño Luke, quiere algo de beber?
Le pregunto Kay la doncella personal de Luke. Kay miró con tristeza a Luke, el chico era muy guapo, pero también muy triste. Desde que había llegado a la ciudad flotante un mes atrás, no lo había visto sonreír ni una sola vez.
-No, Kay, gracias.
Suspiro Luke mirando melancólicamente por la ventana.
-¿Extraña al joven Han?
Le pregunto Kay.
-No, realmente prefiero no verlo.
Expresó Luke sin remordimiento por lo que decía. Entonces Luke recordó la razón de por que no hubiera visto a Han después de la primera semana de su estadía en el palacio: Una amenaza de aborto. Han estaba saliendo del cuarto de baño, cuando vio a Luke encogido en la cama, con una mueca de dolor. Al acercarse a su esposo, lo vio agarrándose el vientre y sangrando entre las piernas. Luke había estado dos días inconsciente. Dos días en que los médicos estuvieron peleando por su vida y la del bebé. Cuando lograron estabilizar a Luke y su hijo, el medico les prohibió la relaciones sexuales. Después de una pelea espantosa donde Luke había acusado a Han de querer matar a su hijo y amenazarlo de irse de regreso a su hogar con su padre, Han lo había encerrado en su habitación y todo el mundo tenia prohibido dejarlo salir. Las únicas personas que tenían permiso para ver a Luke eran el medico, Han y Kay.
-Lo que extraño esta allá fuera. Extraño mi libertad. Aquí me asfixio, Kay.
Dijo Luke y a pesar de que aparentaba tranquilidad, Kay vio su labio inferior temblar.
-Cuanto quisiera poder ayudarte, Luke.
Le dijo Kay abrazándolo. Luke dio rienda suelta a sus lagrimas abrazándose a Kay.
-Si puedes hacer algo por mi Kay. Escríbele a mi padre, cuéntale lo que sucede aquí. Por favor, Kay, no lo soporto más, este lugar me esta sofocando.
-Shhh, Luke ya lo hice, escribí a su gemela. He oído que los gemelos se adoran, así que le escribí a la señorita Leia. Llegara hoy o mañana, y podrá planear un modo de escapar con ella el mes próximo en la boda de su padre con su prometido Obi Wan Kenoby.
Le confeso Kay.
-¡No, Kay! ¡¿que has hecho?! Mi hermana Leia me odia... ¡Es por ella que Han me desprecia!
Luke cerró los ojos con fuerza preguntándose si la vida le deparaba algo más que sufrimiento. Su bebé se merecía un entorno feliz, no ese odio que se respiraba en el ambiente, no el sufrimiento de su pa' por el amor de Han.
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-¡Niñas, ya basta.!
Les gritó Anakin, a sus dos hijas. Paula y Leia se estaban peleando, o mejor dicho Paula le estaba dando una tunda a Leia.
-Si vuelves a lastimar a Luke, olvidaré que llevamos la misma sangre, zorra.
Le susurro Paula al oído antes de soltarla.
-Lo siento padre, pero la princesa Leia, se atrevió a ofender a mi pa'.
Dijo Paula con fingida vergüenza. Anakin miró molesto a Leia.
-No quiero que te atrevas a insultar a Obi-Wan, nunca más Leia. Obi-Wan es mi prometido y pronto mi primer consorte.
-Kenoby sólo es un arribista que quiere quitarle su lugar a mi madre.
Le dijo Leia molesta. Anakin se tuvo que contener para no pegarle a su hija.
-Vete a tu cuarto Leia y de allí no saldrás hasta que aprendas a respetar a Obi-Wan. Maestro Quin, acompáñela.
Furiosa Leia no tuvo mas remedio que seguir a Mestro Windu y a Quin Gon Jin.
-No te preocupes Paula, Leia es así con todo el mundo, incluso con Luke, lamento decir que Padme la ha mimado a extremos insospechables- Suspiró Anakin. Paula le sonrió débilmente. -Vamos anímate hija - Le pidió Anakin. Paula sonrió.
-¿Puedo ir a la disco padre?
Pregunto Paula. Anakin le sonrió.
-Bueno, pero que Quin te acompañe, no debes de ir sola.
Paula abrazo a su padre.
-Gracias, papi, mi pa' nunca me deja ir a la disco, bueno en realidad nunca me dejaba salir de casa, era como si me ocultara.
Suspiró Paula.
Molesto Anakin pensó que si la ocultaba... de él. Pero en vez de decir eso a su hija, le sonrió animándola a que fuera a buscar a Quin, para que la llevara a la discoteca. Cuando Paula se fue, Anakin se dio la vuelta y fue en busca de Obi Wan. Entró como un huracán a la habitación de Obi Wan sin siquiera tocar la puerta. Obi saltó de la cama en la que estaba sentada leyendo un libro y miró asustado a Anakin, preguntándose que había echo esa vez, para que Ani estuviera tan molesto con él.
-¿Tanto me odiabas, Obi?
Le reclamó Anakin. Obi lo miró asustado no queriendo provocar más la rabia de su prometido.
-¿Que pasa ahora, Anakin?
-La encerraste. Has tenido a Paula encerrada todos estos años... ¡y sólo para apartarla de mi!
Le reclamo Anakin acercándose hacia él. Atrapado entre la pared y la cama, Obi trató de explicarse.
-No es lo que tu pien....
Pero una sólida bofetada de Anakin, lo envió directo a la cama. Tomándolo del cabello tan fuerte que le hizo dañó, Anakin lo besó. Antes de que Obi Wan pudiera reaccionar Anakin lo soltó obligándolo a mirarlo.
-No sabes cuanto te desprecio, Obi Wan Kenoby. Y esos años que perdí de la vida de mi hija, me los tienes que reponer... ¡Oistes Obi Wan!... Me darás un hijo.
Obi miró a Anakin horrorizado.
-¡No, jamás!
Fue todo lo que fue capaz de decir Obi Wan. Anakin rió despectivamente.
-Sí, y siempre que a mi me de la gana, Obi. Así que prepárate, por que concebiremos a nuestro próximo hijo en nuestra noche de boda.
-¿Por qué, Ani? ¿Por qué quieres que te de un hijo si me odias?
Trato de razonar desesperadamente con él. Anakin lo miró con desprecio antes de contestarle.
-Porque me lo debes, Obi Wan Kenoby. Así que lo quieras o no me darás otro hijo. Pero calma esperaremos hasta la noche de bodas, mientras tanto respetare tu cuerpo. Pero no lo hago por ti, Obi, que coste que te desprecio y no te tengo el más mínimo respeto, para mí no eres más que una ramera, una puta que me calentó la cama y que me la volverá a calentar pronto. No concebiré mi hijo ahora, porque no dejaré que Paula piense que la amo tan poco, que no me importo concebir con su pa' otro hijo fuera del matrimonio.
Y con estas últimas palabras Anakin salió, dejando a un destrozado Obi Wan Kenoby en la recamara. Obi Wan se sintió mal y desmoralizado. Así que eso pensaba Anakin de él. Mientras él lo había amado y lo amaba con locura, Anakin Skywaker lo consideraba un cualquiera, un puto. Enterrando la cabeza en la almohada, lloró en soledad, rogando a "La Fuerza" que le diera valor suficiente para soportar todo eso. Lo tenia que hacer, tenia que poder soportarlo, no podía perder a Paula y por "La fuerza"... ahora Anakin quería que le diera otro hijo. Y la verdad era que Obi ya no se sentía con fuerzas de poder aguantar más sufrimiento. Pero tal vez después de todo un hijo significara un consuelo una fuente de fortaleza, Paula lo era. Ese, ese fue el único pensamiento que le sirvió de consuelo a un abatido Obi Wan.
Continuará...