Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Ringoring por gonwaifu

[Reviews - 6]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Sí, esto contiene algo de lo que no me arrepiento jaja-

Killugon, pero con tentáculos ayuda. 

Esto tiene contenido +18, y shota ajdjsjd lo sient0 diosito 

—Por favor... - Suplicó, prácticamente arrodillado a sus pies, colgándose de sus pantalones cortos, sin querer bajandoselos un poco.

Él frunció el ceño alzando sus pantalones antes de que se caigan al suelo. —¡No quiero! Y puedes ir tu solo si quieres- La pataleta de Gon duró durante largos minutos desde que la idea se le metió a la cabeza, y queriendo unir a la idea a Killua no le quedó más que suplicar para que vayasen los dos a la playa.

 

—¡¿Pero no tienes calor, Killua?! - Gimió desesperado, quería ir si o si con su mejor amigo a relajarse de la vida o tal vez solo ponía vagas excusas para disfrutar del sol que solía sentir en Isla Ballena.

 

—Sí, pero no quiero estar con tanta gente con poca ropa y sudada a mi alrededor. - Dijo incómodo comenzando a caminar hacia otro lado, arrastrando a Gon por el suelo durante todo el camino. —¡Podemos ir a otra más vacía! - Excusó nuevamente haciendo un puchero, intentando darle pena al albino. Killua no respondió, camino a las escaleras de la casa. —Sueltame o te golpearas con el escalón. - Fríamente alzo una pierna amenazando a Gon, que lo que decía no era broma.

 

El cazador mayor lo miró con esa mirada decidida, que no se rendiria hasta conseguir lo que quería, y Killua mordió su labio inferior frunciendo el ceño. Admite que no puede ir contra él, aunque se niegue de alguna u otra forma Gon se las arreglaba para hacer que acepte. —No me mires así. - Amenazó. Sin esperarselo Gon trepó hasta quedar colgado de su cuello, rodeando sus piernas a su cintura como si fuese un Koala a la rama de un árbol. —Vamos Killua, te prometo que no habrá tanta gente. - Killua se estremeció un poco por la cercanía que tenían, le ponía incómodo que violasen su espacio personal y Gon lo sabía muy bien.

 

Dio un largo suspiro, aunque el moreno estaba muy confiado en que había ganado Killua siempre tenía algo bajo la manga, de alguna forma coló su mano dentro de su camiseta de tirantes moviendo sus dedos encima de su estómago. Gon sufrió un ataque de risa, soltándose del menor y cayendo de trasero al suelo pero no paro de reírse, ni cuando Killua se volteo y siguió moviendo sus dedos por la piel bronceada. —Ki... Killua... De-detenteee Jajs... Jsskadfgkd.. —No se le entendió mucho y el albino rio burlón porque era una de las pocas veces en las que tenía control sobre Gon.—No hasta que me dejes en paz. - Los debiluchos brazos de Gon empujaron sus hombros mientras que su cuerpo se movía de forma exagerada en el suelo. —No... No... Jajaj... Vamos... No me rendi- ajaja... Rendiré - Se carcajeo, pero no tenía la posición para contradecir al menor, quien sonreía con superioridad. Por un momento dejó de hacerle cosquillas viendo a un Gon jadeante y con mejillas rojas, lágrimas queriendo escapar de sus comisuras y con la ropa tan desarreglada.

 

Killua se quedó en blanco y se apartó de él con el corazón en la boca. El moreno jadeo un rato más en el suelo hasta que se levantó del suelo y miró con los ojos en llamas al albino. —Killua... No debiste haber hecho eso.- el mencionado seguía pensando en lo excitante que se había visto Gon y no se dio cuenta cuando él estaba sobre su regazo y comenzó a mover sus dedos encima de él. —¿Gon? - Salió de su ensoñación viendo cómo el mayor se encontraba algo confundido. Killua sonrió al ver lo que intentaba. —Lamento decirte que no soy tan sensible como tú. - Gon hizo un puchero tierno intentando en vano hacerle cosquillas a Killua quien lo miraba serio, y luego se sonrojó ahora, el azabache estaba encima suya y moviéndose encima suya. 

 

—Moo... Killua, ya no se que hacer para convencerte. - Gon dejo de "hacerle cosquillas" a Killua y se bajó de su regazo, agachó su cabeza causandole culpa al albino. Suspiró, de alguna forma el moreno le había ganado como usualmente lo hacía. —Está bien. Vamos- jadeo mirando hacia otro lado. 

 

Gon alzo la cabeza y sonrió de oreja a oreja como si hubiese fingido el estar triste. —¡Siii! ¡Te prometo que será divertido! - Y apenas termino de decirlo se tiró en los brazos de Killua quien solo atinó a sentirse incómodo y sonrojado. 

 

[...] 

 

—¡Osu! - Dijo Gon con su mochila amarilla de siempre, su vestimenta consistía en algo bastante simple: en vez de sus botas verdes llevaba unas sandalias de playa y su chaleco verde fue reemplazado por su musculosa negra de tirantes de siempre, su short verde era el mismo. Killua venía detrás de él, su vestimenta era completamente distinta como siempre, una musculosa color rojo y unos pantalones largos color amarillo con rayas negras, la mochila de tres tiras blancas que caían por sus pálidos brazos y sandalias amarillas. Su rostro era de total aburrimiento. —Vamos rápido antes de que me arrepienta, Gon - Cruzó sus brazos mientras miraba la espalda del mayor. —¡Entonces sígueme y no me pierdas! - Justo después de decir eso comenzó a correr a quien sabe donde a gran velocidad. Killua abrió grande los ojos. —Baka, siempre olvidas cerrar la puerta. - Renegó haciendo lo que dijo y luego comenzó a correr hacia donde Gon había desaparecido encontrandolo y poniéndose a su nivel. 

 

Corrieron durante aproximadamente 49 minutos, ambos estaban en excelente forma por lo cual ni siquiera sudaron un poco. —¡Yey! No hay mucha gente como dijiste Killua. - Exclamó Gon mirando la playa con arena blanca y aguas tranquilas al horizonte. Y tenía razón, realmente no había casi nadie y eso extrañó un poco al albino pero no le dio importancia. —Que suerte tienes. - Reclamó comenzando a caminar y buscar con la mirada algún lugar para dejar las cosas que habían traído. —Mi instinto me dijo que este era el lugar perfecto. - Contraataco Gon levantando su dedo índice creyéndose algo inteligente, siguiendo a Killua con una sonrisa inborrable en su rostro. —Si, lo que digas. - Graznó el albino dejando su mochila apoyada a una roca y Gon le imitó, intuyendo que ese sería el lugar para sus cosas. —Wahh... Realmente tengo mucho calor. - Gon comenzó a urgar en su mochila sacando una toalla verde y tendiendola en la arena, luego sacó una sombrilla muy compacta, armándola y luego poniéndola al lado de la toalla, como siempre, la sombrilla también era de color verde. Killua quiso hacer un comentario sarcástico sobre la sombrilla y la toalla pero mejor se quedó callado al ver como se quitaba la parte de arriba de su "conjunto". —Creo que iré a probar el agua ¿Vienes? - Dijo mirando a Killua con la gran sonrisa de siempre, pero no recibió respuesta, el albino se había quedado hipnotizado viendo ese abdomen bien formado frente a él, sintiendo que su cara se ponía levemente roja. —¿Killua? ¿Qué pasa? ¿Tengo algo? - La última pregunta de Gon le hizo salir de sus pensamientos, sacudió su cabeza a los lados y se golpeó la cara con sus dos manos, dándose palmaditas en las mejillas. —No, nada. - Excusó riendo nerviosamente, Gon inclino su cabeza no muy convencido. —¡Ah! Si, iré en... Un rato. - Forzó una sonrisa en su rostro y Gon olvido lo que acababa de suceder. Se levantó de la toalla y asintió. —¡Si! Entonces ya sabes donde encontrarme. - Le guiño un ojo a Killua y se fue riendo como un niño pequeño hacia una tienda de dulces. El albino se sonrojó un poco por el guiño de Gon. Diablos, diría que mentía si dijera que Gon no se veía sexy sin camiseta. 

 

El menor suspiro mirando como la figura de Gon se perdía en el horizonte. —Ahh... Será mejor que vaya o venir aquí será en vano. - Habló para sí mismo, rebuscando en su mochila también su toalla, la tendió al lado de la de Gon y se sentó sobre ella colocándose otra capa de bloqueador, pues al ser albino era más sensible al sol y debía ser muy precavido. 

 

Pasaron alrededor de 20 minutos y Killua por fin se había decidido a ir con Gon, anteriormente ya se había quitado la camiseta y el pantalón, debajo del pantalón también tenía un short parecido al del moreno solo que era de color azul y era sutilmente un poco mas largo. —Es extraño que Gon no haya venido a decirme que fuera con él. - Habló guardando el bloqueador en la mochila y viendo a los lados por si había alguien cerca que pudiese robarles mientras no estaba. Afortunadamente los lares se encontraban totalmente vacíos. 

 

Metió ambas manos en los pequeños bolsillos de su short y comenzó a caminar hacia al frente esperando encontrarse a Gon jugando con el agua o haciendo un castillo de arena. Pero no lo encontró. 

 

Killua alzo una ceja "¿Acaso habrá nadado hasta más allá de la orilla? " Era una alternativa muy probable si se refería a Gon. Eso justo iba a hacer pero un gimoteo le hizo salir de sus pensamientos y lentamente giró su rostro hacia atrás, no vio nada hasta que lo escucho nuevamente.

Killua, curiosamente comenzó a caminar hacia una piedra gigante, escuchando sonidos bastante erógenos de alguna forma. 

 

Le dio la vuelta a la piedra y no estaba esperando ver algo así.  

 

Su mirada se agrandó enormemente, podría jurar que casi se desmayaba. No, no. "Esto es... Una pesadilla" el shock solo le permitía quedar intacto en la misma posición, pero sabía que algo así no podría ser producto de su imaginación. 

 

—Ki-Killu... Mmh... Gh... A-ayu... Da. - Gimió y pronunció antes de que ese tentáculo se metiera en su boca imposibilitando la forma en que siquiera hablara. 

Gon no tenía nada puesto, sus pequeños shorts verdes estaban tirados a una distancia considerable. Pero eso no era lo importante en ese momento. Tampoco entendía ¿Cómo Gon había terminado así? ¿No era lo suficientemente fuerte para sacarse tal viscosidad del cuerpo? 

Varios tentáculos tenían sujeto a Gon, por alguna razón uno de los ocho estaba dentro de la boca del azabache metiéndose hasta quien sabe donde, otros dos se movían en sus protuberancias y agarraban fuertemente sus brazos dejando húmedo ese lugar y también inmobilizandolo. Otro tenía sujetado el pene de Gon, y realmente parecía que lo había envuelto por completo, otros dos tentáculos extendían y abrían las piernas del mayor a lados opuestos. Y los últimos dos entraban y salían de su interior de forma realmente rápida, abriéndose pasó en su interior tanto que era espeluznante. El rostro de Gon tenía varias lágrimas resbalando de sus mejillas las cuales estaban rojas hasta las orejas, sus ojos miraban hacia el albino, entrecerrados por el placer y miedo mezclados, suplicantes de que parase. 

 

Aunque tal vez pedían otra cosa. 

 

 

Killua aún seguía en shock. El gemido de Gon lo sacó del pequeño paro que dio su corazón y rápidamente se arrodilló frente a él dispuesto a electrocutar aquel animal que no dejaba en paz a su amigo, sin embargo, pensó mejor la situación. Gon saldría afectado también y no quería dañarlo. ¿Qué hacer? 

 

—lua... Ghhh.... Mmmh.... Aaa... No-no... ¡Hah! No importa... Aghh.. si... Hhhnnn- no podía hablar, el tentáculo se metía en él y lo único que podía hacer era morderlo fuertemente para poder decir algo, pero cada vez que abusaban de su entrada no podía evitar gemir, no quería aceptarlo pero se sentía tan bueno. Nunca jamás hubiera imaginado que algo pudiese estar tan dentro de él. Aunque quería que Killua lo ayudase otra parte de él decía que era mejor que lo dejara ahi. 

 

El albino miraba como el potenciador se retorcía de dolor - ya que el interpretaba que Gon la estaba pasando mal- y realmente no sabía que hacer, en sí la situación era muy extraña. Y algo exitante aunque no lo admitiria. 

 

Gon gimió nuevamente, trayendolo de vuelta a Tierra y optó usar una forma simple, alejando los tentáculos de Gon con fuerza bruta. —Aagh... Están muy pegados y resbalozos. - Exclamó con asco pero no se detuvo, apoyando un pie en el abdomen de Gon y tirando fuerte. El moreno se quejo de dolor aunque pasó desapercibido por tener algo violando su entrada.

 

Sin que Killua se diese cuenta, un tentáculo salió de Gon y tomó por el brazo al menor haciendo que parase de jalar al instante y lo tirara con fuerza a la arena. —Mierda. - Gimió de dolor cuando su cabeza se estampó con la piedra. La rosada extremidad rodeo sus pantalones cortos y los intentó bajar pero Killua fue más rápido y uso godspeed para escapar antes de que le hiciera lo mismo que Gon, la idea de electrocutar el tentáculo le estaba interesando más que antes ya que no pensaba usar sus habilidades de asesino, el podría salirse de control y lastimar a Gon también. 

 

—¡Hnmm!.. A-ah... - Killua escuchó el gemido de Gon y volvió a acercarse al lugar, al parecer había cambiado de posición, y Gon había sido puesto de espalda con la cadera alzada y la cabeza contra la arena. El albino se excito demasiado por la vista y sintió que algo dolía abajo. El tentáculo salió de la boca de Gon dejándole respirar y se escondió en quien sabe donde. —Ki-Killua... Mmm... Electrocu... Aaghh... Talo... No-no importa... Si... Hyaaa... Me... Me... La-lastimaaas nnnh.- Habló entre gemidos sintiendo ahora tres tentáculos en su entrada, se sentía demasiado bien y su lengua colgó hacía afuera jadeando fuertemente, sin embargo, cuando Killua lo tocó dispuesto a pasarle electricidad Gon se corrió demasiado en la arena. —Wa-wahh... ¡Ahhh! - Gritó en un gemido y Killua se quedó estático y muy sorprendido, por un solo toque Gon... Se había corrido.

 

Su estabilidad mental no era algo fácil de controlar, la poca cordura que tenía desapareció al ver a Gon de esa forma, dando paso a la lujuria la cual opacó los ojos azules y su palida mano acarició la piel del mayor quien temblaba por su orgasmo. En un empuje Gon terminó hechado boca arriba sintiendo su esencia en su espalda. Los tentáculos dejaron de moverse, retirándose del interior de Gon para luego dirigirse hacia su pecho y acariciando su pene nuevamente. —No...no...o-otra vez...mmmggh.- Gimió temblando de placer cuando sintió la mirada penetrante de Killua en él. —Ki-Killu... Mmhh... - Sus ojos se entrecerraron cuando los tentáculos en sus piernas hicieron que se abrieran aún más, incitando a Killua a que siguiera con el trabajo cosa que sorprendió al albino pero no lo demostró. Realmente en ese momento no le importaba que las cosas rosadas y pegajosas tocarán a Gon de forma tan descarada. Le importaba ver su rostro haciendo muecas de placer cada vez que lo tocaban. —Gon. - Jadeo poniéndose al frente de su entrada la cual vio contraerse haciendo que la ansiedad lo consumiera lentamente. —Q-que...estás....aghhh.- El tentáculo de nuevo se metió en su boca impidiendo que hablase. 

 

El albino lo miró de reojo mientras que comenzaba a bajarse el pequeño short que había llevado para mojarse en el agua, dejando a la vista su ereccion palpitante ante los ojos perplejos de Gon quienes se entrecerraron al sentir una arcada por la profundidad en la que intentaban llegar en su garganta. Killua se mordió la lengua ante tal exitante vista. Acercó lentamente su dedo a la rosada entrada de Gon acariciando la superficie y luego insertandolo en su interior. —Wow... Está tan mojado y resbaloso que entra sin problema alguno. - Exclamó haciendo a Gon gemir de placer cuando la extremidad rosada salió de su boca. —¿Ki... Llua? De-detente... - Gimoteo nuevamente cuando otro dedo se insertó dentro de él y se movió en forma de tijeras. Killua no respondió. Estaba hipnotizado viendo cómo sus dedos salían y entraban con tanta facilidad de Gon. "¿Por qué los tentáculos sólo me hacen esto a mi?" Pensó viendo cómo Killua miraba con tanto interés su entrada. Eso realmente era vergonzoso para Gon. Y lo peor era lo tan mala suerte que era para llegar a esa situación. 

 

 

*Flashback de Gon*

 

 

Mientras el niño de puntas color verde corría hacia el mar, notó que unas cuantas personas se retiraban del mar con caras ¿Asustadas? 

En ese momento realmente no le importó, "Probablemente sólo habían recordado algo" pensó ingenuamente hasta que por fin sintió la frialdad del agua arrullar sus pequeños pies. —Haaa... Se siente bien volver a la playa después de tanto tiempo. - Sus ojos se cerraron disfrutando la brisa que removió sus cabellos lentamente. Luego de un minuto aproximadamente volvió en sí y comenzó a caminar más adentro del mar sintiendo el agua fría envolver su acalorado cuerpo. Gon se puso de espalda, flotando en el agua disfrutando del sol y la brisa marina. —Killua se está perdiendo de esto, debería llamarlo. - Dijo haciendo una mueca malvada refiriéndose a que en vez de "llamarlo" más bien lo obligaría y arrastraria con él. 

Con esa idea en mente dejó de flotar y comenzó a nadar hacia la orilla, sin embargo algo llamó su atención en su camino. —¿Y eso? - Se preguntó a sí mismo hasta llegar cerca notando que era un pulpo. Gon se sorprendió, normalmente esos estaban más al fondo del mar y no casi por la orilla. El azabache intentó ayudarle a volver, probablemente se haya sentido sofocado por el inmenso calor del día y se haya desorientado bastante. Acercó su mano hacia el pequeño pulpo con intención de tocarlo, aunque cuando ya estuvo lo suficientemente cerca pensó que el animal se asustaria es por eso que repentinamente paró de nadar y alejó su mano, sin embargo, el tentáculo del pulpo lo tomó antes de que volviera a su posición original sorprendiendo al moreno. El tentáculo lo tenía bien sujetado y Gon no podía safarse del agarre. Con una fuerza descomunal el animal lo arrastró cerca suya y los tentáculos envolvieron el cuerpo de Gon en su mayoría. —¿Qué sucede? Pensé que me tendría miedo. - El azabache comenzó a asustarse cuando las resbalosas extremidades rosas se deslizaron bajo sus shorts verdes tocando su miembro y envolviéndose en él. —¿¡Ehh!? ¿Qué...? - Intento alejar al animal marino de sus partes nobles, pero el tentáculo comenzó a bombear su pequeño miembro haciendo que gimiera suavemente. Nunca había sentido algo así en su vida. Eso lo distrajo y - pudiendo haber usado jajanken- sólo gimió cada vez que aquella extremidad tocaba toda su extensión y acariciaba sus testículos también. —Haa... N-No...De... Detente.. nhhh- Habló como si el animal le entendiese. Aún en el agua otros dos tentáculos se deslizaron hacia sus dos mejillas inferiores, llegando directamente hasta su entrada la cual no dudaron en penetrar ni un segundo, haciendo a Gon abrir grande los ojos gritando en un gemido. —¡AHhhh! ¿Q-qué...haces? N-naaah- Las extremidades salieron y entraron de él, tan profundo que hasta Gon se retorcía de placer. 

 

Sin poder evitarlo se corrió de forma abundante en el agua del mar, jadeando fuertemente, los tentáculos dejaron en paz a Gon, y este mismo se encontraba confundido y realmente asustado por lo que acababa de pasar. Cuando el pulpo se alejo de él, comenzó a nadar hacia la orilla como si su vida dependiese de ello subiéndose los shorts cuando ya se encontraba parado en la arena sin dejar de correr en busca de Killua para decirle que debían irse de ahí lo antes posible. Aunque sintió algo en su pierna cuando ya estaba a mitad de camino, con pavor miró hacia su pierna encontrándose con aquella cosa bien sujetada de él. Gon entró en pánico y sin pensarlo dos veces exclamó. —JAN...KEN..- Antes de pronunciar la última palabra la cosa ya estaba alrededor de sus brazos impidiendo que se moviese, Gon sin ganas de perder lanzó un cabezazo en su dirección pero fue esquivando fácilmente, se tiro en la arena para hacer que el animal sea aplastado pero solo logró golpearse el mismo. —¡Maldición! - Comenzó a correr hacia al frente buscando ayuda de Killua, sin embargo el pulpo le hizo tropesar y como estaba colina abajo rodó hasta chocar con una gran roca y el azabache quedó medio atontado por el golpe en la cabeza.

 

El pulpo aprovechó la situación y le quitó los shorts verdes, desplazando sus viscosas extremidades por sus muslos haciendo que sus piernas se separacen y sin esperar más metió tres tentáculos a la vez en el caliente y estrecho agujero de Gon quien gimió fuertemente mientras sentía su cuerpo contorsionarse de dolor y placer combinados, entraban tan profundo en él que prontamente se olvidó de lo tan incómodo y doloroso se sentía. —Mmmgh... Se... Siente... Agh... ¡AH! tan... B-bien.. - Gimoteo sin querer, sintiendo las rosadas extremidades palpitar dentro de él, mientras que las demás retorcían sus pesones y también su miembro, otro se metió en su boca y el moreno no pudo evitar jadear ante la intrusión de dos lugares en su pequeño cuerpo. 

 

*Fin del flashback de Gon*

 

–Mghh. - Jadeo cuando sintió más dedos dentro de él, su agujero palpitaba y se contraía, abrazando las extremidades de Killua el cual gimió por sentir a Gon estrecharse en sus dedos. Los tentáculos se volvieron a introducir en su boca y Gon lloró de placer cuando Killua había comenzado a embestirlo con cuatro dedos dentro. "Realmente esto es mejor de lo que pensaba." Pensó con la vista nublada viendo cómo los tentáculos abrían más las piernas de su mejor amigo. Retiró los dedos del ano de Gon luego de dar unas cuantas embestidas más. 

Se apoyó en sus rodillas, agarrando su palpitante erección y alineándola con la no tan virgen entrada, introduciendo la punta lentamente y deslizándose hasta meterlo todo. —¡Annhhh! - Gon gimió bastante fuerte cuando los tentáculos desalojaron su boca. —Ki-killuwahh.- No pudo evitar estremecerse al escuchar el tono lujurioso que Gon había usado al exclamar su nombre a los cuatro vientos. 

 

El pálido gimió al sentir de nuevo la estrechez de Gon en otra parte más sensible, abrazándolo con sus paredes al estar tan excitado. Agarró sus piernas y las separó un poco más, apoyándose en su cintura lo elevó un poco haciendo a Gon sobresaltarse por sentir algo más grande que los tentáculos dentro de él. — Dios... - Gimió de nuevo el ojiazul viendo al de orbes doradas hecho un desastre, mientras la viscosidades se movían lentamente por su cuerpo las ventosas estimulaban sus pesones que lo hacían de vez en cuando estremecerse y que de por sí debían salir suspiros y gemidos ahogados por estos mismos en su boca, su virilidad también era estimulada de forma que hacía a Gon enloquecer. 

Killua lo penetró y Gon lloró de placer al no poder hacer algo más. —Ahh - Killua gimió, a parte de ser su primera experiencia sexual, su mejor amigo estaba demasiado estrecho y viscoso por dentro, podía entrar tan fácil en él y eso era relativamente excitante. 

El albino no era consciente de lo que hacía y eso era por una razón en particular. 

 

Los tentáculos liberaban esporas que conllevaban a ese mismo resultado, Killua es inteligente y no se dejó engatuzar demasiado fácil pero después de haber tocado a Gon había perdido la batalla y se dejó llevar. Cabe recalcar que esto era mucho más que un tipo de veneno, era algo que aún Killua no había realizado defensas y es por eso que había funciado en él. Mientras que Gon ya era un caso perdido, ahora simplemente servía para el entretenimiento para Killua y también para la viscosidad que seguía haciendo su trabajo, intentando nuevamente adentrarse en Gon, deslizando una de sus extremidades por su ano sintiendo el movimiento que Killua le hacía a este mismo. —¡nnnNnnh! - Gon abrió sus ojos de golpe cuando la ventosa del tentáculo encontró su próstata, comenzando a hacer un tipo de manipulación extraña que hizo que se moviera erráticamente en el suelo. —¡Nnmghhh! - Killua siguió entrando y saliendo de él, ya poco le importaba que un tentáculo se hubiese metido en el mismo lugar que él.

 

— Estoy a-apunto de...- El ex asesino gimió tales palabras yendo más fuerte en él mientras que la ventosa tocaba aquel punto que hacía a Gon delirar, los tentáculos en su boca se retiraron. —¡ahh! ¡Ahh! ¡Ahh! Se-se siente.. ¡ahh! Nngh. - Ya no podía decir nada, no hasta que Killua llegó a ese mismo punto. – ¡Ki-Ahhh! - Su semen salió disparado en pequeños chorros manchando su abdomen, rostro y una parte de Killua. —Jo-der.. Ah- El transmutador cerró fuertemente los ojos con las mejillas realmente rojas, esparciendo su esencia dentro de Gon, quien respiraba rápidamente, sus ojos se entrecerraron en delirio, temblando ligeramente en el suelo sintiendo como desalojaban su entrada.

 

Killua salió de él y después el tentáculo, que también retiró todas sus extremidades del pequeño cuerpo tembloroso. Alejándose de ellos hasta meterse de nuevo al mar. 

 

— Hah... - Suspiró viendo a Gon con los ojos cerrados y con la cabeza inclinada hacia otro lado, mejillas rojas y lágrimas de su placer cayendo por sus comisuras, su lengua colgaba hacia un lado. 

 

De pronto el efecto de la "droga" había desaparecido. 

 

Killua no había sido capáz de proteger a Gon en ese momento, incluso ni de él mismo. 

 

Y esa sensación le enfermaba. 

 

Se acostó a su lado en la fría arena, rodeó su cintura y lloró en silencio. 

 

 

 

 

Notas finales:

Está muy triste aaaa pero weno. 

El siguiente essss soft, con una pizca de Leorioxgon because why not. 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).