Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Obedeceme por AMMU TEIKOKU YUDAINA

[Reviews - 0]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Por favor disfruten, lean, y comenten. 

Nos vemos abajo. 

Esa sonrisa sínica en el pontífice, sintiéndose al fin aliviado, porque el corazón del pelirrojo es por completo suyo.

Domina sus pensamientos, sus deseos y voluntad, no importa lo que le pida, Gateguard lo hará.

Y se lo está demostrando con el hecho de aceptar en traicionar a Atena.

-Gateguard, puedes dormir aquí esta noche- Le da esta afirmativa, mientras lo deja sobre la cama.

-Si… Gracias… Pa… Triar… Ca- Las mejillas sonrojadas como sus cabellos, esa sonrisa de satisfacción y humildad, con los ojos cristalizados.

Que su amado libra le deje descansar en donde han estado teniendo sexo, pues es la única forma correcta en hacer referencia a lo que ambos dejan salir en esa cama.

Es lo mejor posible, podría dormir a lado del patriarca, algo que más imagino ser digno.

Quisiera quedarse más tiempo despierto, pero… Su cuerpo ya no puede aguantar.

Fue la presa de Itiá por toda la tarde, desde su llegada, hasta la noche y sin contar el tiempo que tardo en llega al santuario.

No importa, es feliz con el patriarca, sabe que no tiene derecho a abrazarlo, ni besarlo, esto aún lastima su corazón, pero lo acepta ya no se cree capaz de vivir sin Itiá.

Por eso él trata de remedirse por sus pecados, por traicionarlo, aunque nunca han sido nada, no se deben ninguna lealtad alguna.

Pero Itiá no está dispuesto a compartir nada.

De a poco los ojos verdes se están cerrando, con una sonrisa por ser “Perdonado” aunque aún debe probar su lealtad con una traición hacia la propia Atena.

No va a preguntar, ni reclamarle nada, solo escuchar sus deseos y los hará realidad.

El de cabellos oscuros, lo observa con sumo detalle, sorprendido por como Gateguard se ha quedado dormido.

No puede negar aunque lo desee, el ariano tiene una apariencia tan frágil, y hermosa.

Que es difícil verlo sin desear seguir tomándolo.

-Gateguard… ¿Por qué me tientas?- Sonríe de lado, observando más de cerca.

Su expresión facial denota que eso es lo que quiere, tenerlo solo para él.

Le demostró que es al único que necesita, quien le dará todo lo que desea, pero… Obviamente el amor no es uno de ellos.

Frunce el ceño, recordando las palabras del pelirrojo.

El cómo le confeso el hecho de Sage se atrevió a besarlo, aceptar esas caricias que no eran del pelinegro.

Apretando su puño, sintiéndose tan molesto por ese hecho.

-Esta vez… No permitiré que te aparten de mi…- El enojo aumenta, pero parece que no es solo por tocar su propiedad.

-Ese maldito de cáncer…- Su mano es llevada hasta el suave rostro del pelirrojo, pero antes de siquiera pensar en apretar las mejillas.

Su semblante parece relajarse, incluso sonriente, como si el enojo se hubiera bajado, con solo ver a Gateguard dormido plácidamente en ese lecho.

-Si me voy al infierno, te iras conmigo…- Un suspiro sale de sus labios –Nunca debió pasar esto…-

Cierra sus ojos, apoyándose con su codo a un lado del cordero dorado, para observarlo más detalladamente, acomodándole unos mechones de cabellos a un lado, no quiere que nada estorbe en su vista.

-Nunca te diré esto, jamás lo aceptaré delante de ti, pero... No te compartiré con nadie, Sage no te apartara de mí, si no… Lo matare- Sonríe, su cosmos ha dejado de ser el de siempre.

Como si se hubiera vuelto un poco más caótico, pero es capaz de manejarlo, para que nadie se dé cuenta ni la misma Atena.

Pero… Posiblemente ella ya se ha enterado, teniendo leves sospechas.

Recostándose a un lado del pelirrojo, no puede evitar mirarlo por la cercanía.

-Eres muy hermoso… Muy similar a… Soterios…- Parece que su corazón se ablando.

No sabes lo que tienes hasta que lo vez perdido.

Se da cuenta al final de todo, que si Gateguard empezará a dudar de sus sentimientos por él, existe alguien que es capaz de aceptarlo con todo lo que ha vivido.

Una persona que de verdad lo ama de la forma más pura y sincera posible.

Un caballero dorado, que no tiene malas intenciones, que demuestra ese amor con acciones, no solo palabras.

Esto hierve la sangre del pelinegro, imaginar que ese carnero decida tomar la mano de Sage, dedicándole una última mirada al patriarca, para solo volverse un simple dorado, sin ningún privilegio con el pontífice, pero… Con un gran amor.

-No… No lo permitiré…- Cuantos conflictos están pasando por su mente.

Desistió en el hecho de que los sentientes se involucren, pues perdió la única barrera que le tenía para hacer su voluntad.

-Obtuviste lo que deseaste…- Ver al cordero dorado plácidamente dormir, lo hace dejar escapar ideas y verdades que no dejara en claro jamás.

-Tú perdiste desde el inicio por enamórate, pero yo lo hago ahora…-

Pudiendo ver el cuerpo desnudo del pelirrojo, acariciándolo por primera vez con cuidado, como un cristal tan delicado que lo podría romper en cualquier momento.

Por fin piensa en esto, cuando con anterioridad le daba igual, las penetraciones tan bruscas que le proporcionaba.

Esa sangre que varias veces corría por sus pernas, las marcas en hombros, pezones y piernas del ariano.

Las burlas y humillaciones que Itiá lo obligaba a soportar y hacerlo solo por no abandonarlo.

Y ahora el mismo patriarca está temiendo ser dejado de lado.

Que Gateguard lo deje, solo porque encontró el amor.

-Sage… No permitiré que me lo arrebates- Como si pudiera verlo de frente, dedica esa mirada retorcida de furia y deseos de acabar con uno de esos jóvenes que entreno para volverlo un digno portador de cáncer.

Para este punto esos momentos inocentes del pasado, donde se demostraba como un mentor bondadoso y amable con sus pequeños pupilos, ha quedado atrás, para dar paso a una persona que ha hecho caso a sus bajos instintos.

Poseyendo a uno y odiando a otro.

El único pecado de ambos fue enamorarse de la persona incorrecta.

Puede que esta noche no duerme por seguir contemplando a su propiedad, a ese dorado que está ocupando sin permiso su corazón.

Odia sentirse de nuevo así, juro que solo Soterios sería capaz de ponerlo así, pero… Gateguard esta poniendo en tela de juicio este hecho.

¿Qué más da?

Ya han pasado por mucho, como para reevaluar la situación actual.

Estar odiando a otro solo besar y le dedicara un amor sinceró a Gateguard, aunque este estuviera perdido en su embriaguez y llamándolo.

Itiá está dispuesto a hacer lo necesario para cumplir sus deseos y ahora con una nueva adición que no puede permitirse que se aleje.

Tanto por capricho como por necesidad.

-Si querías un beso…- Se va acercando a ese rostro sonrojado e indefenso –No se lo vuelvas a pedir a otro-

Le deposita un beso tosco en esos delgados labios, probando un sabor tan deleitante, es diferente en el que el pelirrojo se atrevió a tocarlo.

Pero no será tan perfecto como aquellos que compartió con su primer amor.

-Solo yo puedo satisfacerte- Su semblante sigue siendo sínico, pero un cierto brillo en esos ojos oscuros se puede reflejar.

Decidido en dormir, dándole una pequeña muestra de un afecto que no volverá.

Abrazar al dormido Gateguard, sentirlo cerca, como un sustituto de aquel quien amo tanto.

Sin embargo el pelirrojo de esta era, parece que se está ganando su propio espació en ese corazón tan antiguo que parecía marchito.

---(Días después)---

Ambos gemelos entrenando, tratando de pasar el tiempo mejorando, ayudar al menor en no estar pensando en el ariano.

Pero eso solo ayuda un poco al fin de cuentas.

Lamentablemente el tema de conversación pueda alterar algo al cangrejo.

-Wow- Recostado en el suelo por el último golpe de Sage –Si que has mejorado, mira me has derribado-

-No es la gran cosa, a veces lo he podido hacer- Intentado llevarle la corriente a Hakurei.

-Ay no te menosprecie, por algo eres el perfecto caballero de cáncer- Sin darle más importancia, se cruza de brazos detrás de la cabeza, para disfrutar de la calma recién instalada entre ambos.

Solo asintiendo el de cabellos sueltos –Hakurei…- Llamando con algo de pesadez.

-¿Qué pasa?- Sus ojos cerrados, disfrutando de la brisa se esta mañana.

-Gateguard…- Hablando tímidamente.

-Ay no… Sage deja de estar pensando en ese amargado- Frunciendo el ceño, pues nadie hace llorar a su hermanito –Ese que ni te quiere, ni te merece-

-Sabes que no puedo- Suspira, dedicando una sonrisa triste.

-Ya sé que eres un terco- Giro sus ojos fastidiado, pero soltando una bocanada de aire por la boca –Y si… He notado como se está comportando-

-¿Por qué lo está haciendo? Él nunca le ha gustado convivir con los demás de buenas a primeras- Sentándose en el suelo a lado de Altar, con un semblante de verdadera preocupación.

-Pude… Que quiera hacer un cambio en su vida… O…- Fue rápidamente interrumpido por su gemelo.

-¿Lo estará obligando?- Sus ojos dirigen una mirada de odio, justamente hacia la dirección de donde se llega alcanzar ser el recinto del patriarca.

-Mmh… Puede ser- Abriendo sus ojos de golpe, para mirar a Sage –Pero te vuelvo a repetir… Si ellos están en una relación y le pide hacer cosas… Tal vez sea para que deje de ser tan amargado, no quiere decir que nada malo- Intentando ser la voz de la razón, cosa que no es partidario de serlo.

-Pero… Eso no…- Baja la mirada, pensando con detalle esta situación.

Por lo que ha visto, esas marcas, el dominio que ha ejercido en el pelirrojo, sabe que... Esto no es para el bienestar de nadie.

-Si estas celoso es normal, pero no puedes sentenciar su…- Ni siquiera le dejan terminar una oración, cuando ya se encuentra ahora solo –Pero… ¿Qué?- Se gira para todos lados buscando al menor, pues ya no está a la vista.

Notas finales:

Buenos días, tardes, noches, ¿Que hora es? ¿Quien me ha robada el reloj? ¿Como están el día de hoy mis terrones de azúcar?

Yo me encuentro super bien, acabo de almorzar y bueno... Esperando algunas notificaciones imprtantes jajaja de lo que ya hable e lunes. 

Jajajajaja sigo emocionada por esa gran noticia, jajajaja pero les quiero recordar que yo no me iré de aquí, jamas, jajajaja nunca de los nunca, pues amo escribir y los adoro a todos mis terrones de azúcar, así que me tendrán aquí siempre mis terrones de azúcar. 

Jajajajja en fin...

En este capítulo...

Creo que el patriarca quedo como tonto...

Primero no lo quería besar, luego cuando ya piensa que lo puede perder, allí esta.

Haaaa pero primero don yo no quiero enamorarme jajajajaja

¿Es normal hacerle burla al personaje que estas escribiendo para tu fic? Jajajajajajaja Es que... Creo que si queda super bien.

Ademas que les diré una cosa, a partir de aquí, se ira alineando con el Gaiden, así que... Alerta Spoiler tendrá en los próximos capítulos hasta que termine. 

Sin mas por el momento...

Bueno mis terrones de azúcar, les agradezco mucho que estén leyendo mis locuritas, de verdad son los mejores de todo el mundo. 

Nunca les podre terminar de agradecer por darme la oportunidad de mostrarles cada uno de mis fic's y que los disfruten. 

A partir de este capitulo el próximo ya sera algo alineado con el Gaiden, obvio algunos cambios habrá. 

Bueno me paso a retirar. 

Cuídense mucho, hagan caso a las medidas de higiene y no se expongan de mas. 

Los quiero mucho. 

Ammu se va. 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).