Lanza un suspiro el pelilila, bajando la cabeza, apretando sus puños, mordiéndole el labio inferior…
Pensar rápidamente lo que está ocurriendo… Saber qué hacer con exactitud…
¿Sería prudente hablar de un tema que no le corresponde?
¿Realmente puede confiar en estos dos?
Más precisamente en Aioros…
¿Lo puede hacer?
¿Realmente no dañaría a Saga cuando sepa la verdad?
Mu solo comprende que estos temas no son de su total incumbencia, si… Conoce la historia completa de su mejor amigo, entiende lo que ha pasado…
No solo por boca de él, sino porque su papá en algún tiempo trabajo allí…Cuando los padres del peli azul eran los que tenían el control, como lo que eran, los verdaderos dueños de este hotel…
El sufrimiento que padeció Saga después, es algo que a ninguno de los antiguos empleados les pareció justo, pero no se metían más allá de intentar ser amables con el único hijo superviviente de ese fatídico accidente.
Todo se fue de a poco de ese hermoso hotel lleno de buenos recuerdos, momentos y empleos bien pagados, ahora en donde se respira la tensión, cada que la familia usurpadora se presentaba, dañando al verdadero heredero de esta fortuna, solo como alguien que duerme en la sala de calderas en esta época.
Puede que para los dos presentes el silencio por parte de Mu no augure nada bueno, pero… La desesperación de uno le exige que intente seguir hablando… Que no se le prive de la verdad…
Aioros no va solo para pasar una noche con el peli azul, no… Para nada, va directamente para protegerlo, cuidarlo, darle todo lo que quiera y desee… Darle solo amor…
Es un terrible y precioso amor a primera vista, que no cualquiera podría demostrar tan abiertamente, pero Aioros no teme dejar ver sus sentimientos…
-Mu…- Se acerca al pelilila sujetándolo por los hombros, dejando ver un rostro con lágrimas, y ceño fruncido por la impotencia –Solo dime… ¿Qué debo hacer para ganarme su confianza? Ya no pido su amor… Pero si su confianza, si eso… Si aunque sea tengo eso, podría… Ayudarlo con lo que necesite, lo que sea… Yo estoy dispuesto a todo, incluso a esperar todo el tiempo que sea necesario-
Sus palabras provocaron que el menor levante su vista, impresionado por como ese hombre de tanto dinero y buena posición social esté dispuesto a todo por Saga.
Incluso se humille ante alguien que tampoco tiene mucho, solo por saber la razón del sufrimiento de su amigo.
Mu tiene un corazón demasiado bueno, amable y que se ablanda demasiado cuando las personas demuestran un lado que no creía que poseyeran.
La sinceridad y bondad en sus palabras son demasiado palpables, que es imposible ahora en pensar que le hiciera daño a Saga.
Tal vez… Solo tal vez debería pensarlo mejor, calcular si es lo que beneficiaría a su amigo o dañarlo, pero…
Ver en esos ojos verde oscuro lágrimas, suplicas, rogándole que le diga algo, lo que sea para que puede acercarse a ese herido peli azul.
Incluso, si Saga no le pudiera corresponder su amor por sus miedos internos, Aioros está dispuesto a solo ser su amigo, alguien que le tenga confianza para ayudarlo en lo que sea necesario.
No le siguió sosteniendo la mirada, dejo escapar un suspiro más, para cabizbajo poder aclarar este tema –No le puedo decir todo… Existen muchas cosas que rodean a Saga, muchos males le han ocurrido y muchos han sido causados por terceras personas…- Levanta la vista, para apartarse de ese agarre, da unos pasos atrás… No le agrada que lo estén tocando, y presionando para hablar de algo muy difícil –Ha sufrido mucho y no puede confiar tan fácilmente-
-Mu, eso ya nos habías dicho- Responde el castaño claro, ahora sentado en una silla con el respaldo delante, apoyando sus manos sobre este.
-Aioria, déjalo terminar- Rápidamente el mayor regaña al menor, para seguir mirando atento el pelilila, con la boca ligeramente abierta, y esos ojos tan tristes y angustiados por conocer más sobre esta verdad a medias –Por favor, dime más… Lo que sea, lo que puedas…- Aprieta sus labios, solo temiendo el no encontrar la forma de ayudar a quien ama.
-Saga… Él…- Aun sigue dudando, pero… Esta podría ser la mejor oportunidad de todas, la única que tendría para salvar a su mejor amigo de un terrible infierno, incluso para apoyarlo a volver a tener lo que tiene por derecho de nacimiento…
Tal vez sea algo caprichoso pensar en que Aioros solo serviría para ayudar de esa forma a Saga, pero… Es algo que le convendría mucho al peli azul, y al menos no tendría que estar sufriendo por maltratos, y de paso que logre darse una oportunidad con alguien que si vale la pena, que lo protegería de esa loca y maldita familia.
-Sus padres y hermano menor fallecieron en un accidente hace trece años, desde entonces ha tenido que vivir aquí en el hotel… Más precisamente en la sala de calderas… O en la lavandería dependiendo el clima afuera…- Avergonzado, sin siquiera sostener la mirada, ya que se siente muy mal y despreciable por estar revelando información privada del otro, pero… Es que si no lo hace…
Si no intenta, al menos ayudar a este castaño… A acercarse al terco y decepcionado corazón del otro, las cosas no funcionarían y solo sería más sufrimiento.
-¡¡¡¿DUERME EN LA SALA DE CALDERAS?!!!- La voz impactada del castaño oscuro se nota determinada, incluso su frustración y enojo, el ceño fruncido y apretando la mandíbula -¡¡¡¿POR QUÉ DORMIRÍA ALLÍ?!!!-
-Más precisamente, ¿Por qué duerme allí? ¿No se supone que es un empleado?- El menor habla intrigado por esta información –Sé que en algunos hoteles los empleados o algunos tienen habitaciones sencillas para estar las veinticuatro horas a disposición del servicio pero… ¿Las calderas?- Alza una ceja, bastante extrañado -¿No es eso muy peligroso?-
-Lo es, pero no tiene de otra…- Niega con la cabeza.
-¡¡¡¿CÓMO QUE NO TIENE DE OTRA?!!!- Reacciona mal por esta pequeña revelación, angustiado y pensativo a más no poder… Sintiendo como la sangre de todo su cuerpo hierve, mientras sus manos en puño se dejan ver, tan tensas que casi se encaja las uñas en sus palmas por la furia contenida, que desea dejar salir.
-Eso… Ya es algo que no pudo decir… Yo…- No le dan tiempo de reaccionar o hablar más, cuando siente el agarre en sus brazos por parte del castaño, que lo sujeta no con toda su fuerza, pero si para no dejarlo ir.
-Mu, Por favor… ¡¡¡NECESITO SABERLO!!! ¡¡¡NECESITO SALVARLO!!! ¡¡¡PROTEGERLO!!! ¡¡¡DIME POR FAVOR TODO LO QUE SEPAS!!!- Su reacción sin duda es de pánico, en su mente ha empezado a formular miles de hipótesis y una es más terrible que la anterior…
No es siempre así de impulsivo, no se podría catalogar como agresivo, pues no está golpeando, ni insultando, pero si gritando y sujetando con fuerza a alguien que solo intenta darle un poco información hasta donde puede.
-Se… Señor… Yo… Ya no puedo decir más… O hacer… Mas…- La mirada esmeralda se impacta con esa forma de actuar tan repentina y fuera de sí de este hombre que aparentaba ser calmado, pero ahora… Le da a entender su actuar repentino.
Logrando asustarlo levemente, pues jamás nadie se había acercado tanto así a él, y con algunos gritos incluidos…
-¡¡¡DEBO SABERLO!!! ¡¡¡SI ES PARA AYUDAR A SAGA, QUIERO SABERLO TODO!!! ¡¡¡TE LO PIDO!!! ¡¡¡SOLO DIME Y ME ENCARGARE DE QUIENES ESTÉN HACIÉNDOLE DAÑO QUE LO PAGUEN CON SANGRE, SU ODIO CONTRA ÉL NO SERÁ DEJADO SIN CASTIGO!!!- Oficialmente el temple de Aioros se ha ido de su mente y cuerpo, pues solo actúa a gritar y sacudir levemente al pelilila que no deja de verlo con algo de alarma.
-¡¡¡AIOROS!!! ¡¡¡ESPERA!!! ¡¡¡GRITANDO NO VAS A SOLUCIONAR NADA!!!- El menor primero se quedó impactado por cómo comenzó a ponerse el castaño oscuro, pero estar ya poniéndose así, zarandeando a alguien que apenas conoce y le da información hasta donde puede.
Su actuar principal es ir directamente hasta donde están los dos, a escasos pasos de su lugar, intentar que Aioros suelte al asustado Mu, poniéndose en medio.
No es algo que pueda escalar a golpes, solo gritos de desesperación por parte del castaño oscuro, la mirada de susto en Mu y el intento de zafar al pelilila del agarre del otro…
Claro que llaman la atención, pues ni se sabe cómo se logró escalar esto…
Y bueno… Los dos hermanos deberían recordar por escasos segundos que no han venido solos a este hotel….
La puerta que divide las habitaciones se abre de golpe, pues dos adultos bastantes molestos y preocupados por esos gritos que inundan desde el pasillo principal hasta este punto.
-¡¡¡¿QUÉ ESTA PASANDO AQUÍ?!!!- El hombre de cabellos verde oscuro y mirada tan afilada como la legendaria espada Excalibur mira a los tres jóvenes allí presentes.
-¡¡¡¿AIORIA?!!! ¡¡¡¿AIOROS?!!! ¡¡¡¿QUÉ LES SUCEDE?!!!- Quien posee gran parecido con el mayor y obvio también con el menor, se queda preocupado admirando la escena nada buena.
En donde el mayor sujeta por los brazos al pelilila que ahora ya intenta zafarse, gritándole porque este sujetándolo así y el menor también haciendo rueda para calmar el ambienté.
Y bueno esto fue suficiente para que los tres dejaran de gritarse, y zarandearse, pero… No por ello lograría calmar las aguas tan fácilmente,
-Papá, padre…- Aioria es quien siente el miedo de ser castigado por esto ya que esa mirada en el peliverde oscuro no augura nada bueno en sí.
-¡¡¡¿QUÉ SIGNIFICA ESTO?!!! ¡¡¡¿AIOROS POR QUÉ SUJETAS A ESE CHICO ASÍ?!!!- El Cid no es de tolerar mal comportamiento de parte de sus hijos y más si no tienen una buena razón.
El castaño oscuro esta entre decirle lo que pasa a sus padres o quedarse callado y no hablar más por su propio bien…
Está en una encrucijada repentina.
Cierra sus ojos, sabe que está atrapado contra sus padres no puede hacer mucho y entiende que como lo maneja no es para nada beneficioso, ni le ayudara a encontrar una salvación rápida para su amado.
Suelta al pelilila de forma rápida, casi el otro siente que se puede caer por el tira y afloja que han estado ejerciendo.
En sí, no porque el otro lo aventara, solo lo soltó simplemente… Y gracias a que Aioria está siendo parte de esta situación, lo sostiene rápidamente para que no se cayera…
Cada instante se volvía más tenso el lugar.
-No es nada padres…- Murmura esto, apretando sus puños con la mirada baja y su mandíbula tensa, deseando no haber actuado así y haber mejor logrado sacar informes de forma adecuada y no estar actuando como un idiota de manera repentina.
Pero…
¿Se le puede culpar al cien por ciento por esto?
Está muy enamorado, perdidamente por así decirlo, es amor a primera vista y eso no siempre puede significar que va actuar con sensatez y más al saber que ese peli azul, vive en una situación de riesgo y se imagina de abusos…
Y es allí, en ese preciso momento en que conecta la situación número uno con la número dos…
Cuestión de solo dejarle procesar todo y no actuar como si no entendiera todo al pie de la letra con pequeños instantes y explicaciones que están a medias y aun así seguían.
-¿Como que no es nada?- Sísifo se acerca al mayor de sus hijos, mirándolo serio pero preocupado por la forma de actuar de este día de su primogénito –Aioros, te estas portándote demasiado extraño ¿Qué está pasando?-
-Ellos… Ellos le han hecho vivir así a Saga ¿Verdad?- Ni presto atención en las palabras de su papá, prefirió levantar su cabeza y mirar al pelilila con deseos de saber una confirmación –Esa familia lo ha dañado por alguna razón… ¿Tiene que ver con sus padres? ¡¡¡¿POR ESO LO HAN HECHO VIVIR EN LA SALA DE CALDERAS O LAVANDERÍA?!!! ¡¡¡¿POR QUÉ LO TRATAN ASÍ?!!!- Sus gritos de nuevo en primera plana, como si ignorara la presencia de sus padres.
-¡¡¡POR QUÉ SAGA ES EL VERDADERO DUEÑO DE ESTE HOTEL!!! ¡¡¡Y LO HAN HECHOS SENTIR MENOS TODA SU VIDA POR ESO!!!- Se le salió la verdad por sí misma, por el hecho de estar muy enojado y malhumorado por ese actuar poco cortes de parte de ese castaño.
Ahora si los rostro de tremendo impactó se ve en los cuatro allí presentes…
Puede que no auguren nada bueno…
---Unas Horas Después---
-Y por esa razón Mu no está con nosotros para practicar hoy en el torneo- Habla un poco serio el otro, mientras deja escapar unos suspiros, sentado con las piernas cruzadas sobre la silla, en forma de flor de loto.
-¡¡¡¿PORQUE TU HERMANO LO TUVO QUE MOLESTAR DE ESA FORMA?!!!- Al parecer el rubio chico detrás de la pantalla, solo presto atención hasta el punto donde escucho que Aioros sujeto de forma brusca al pelilila.
No es ya secreto para ese castaño claro los sentimientos del rubio, aunque este no lo quiera admitir –No fue con mala intención, Aioros se alarmo cuando escucho que su “Amado” está durmiendo en una sala de calderas...- Cierra sus ojos pensativo ante esta revelación -Es como en ese videojuego en donde la princesa está atrapada en un castillo custodiado por dragones-
-Aioria, esto no es parte de un videojuego, es la vida real… No se arreglará solo con movimientos absurdos y apresurados, si no, con una verdadera estrategia, en donde el tiempo y la paciencia son más productivos que cualquier otra cosa- Le habla bastante indiferente.
-Es lo mismo que mis padres le dijeron a mi hermano- Niega con la cabeza bastante tranquilo –Mu se fue a los pocos minutos del regaño, mis padres… Nos sentaron a habla como cuando éramos niños… No estaban tan molestos conmigo, pero si con Aioros por portare como loco- Suspira, dejando ver una sonrisa algo calmada –Pero entendieron que el amor hace o decir cosas estúpidas y locas-
-Eso no es excusa…- Entrecierra sus ojos el rubio en la pantalla de la laptop -¿Desde cuándo a ti no te parece tonto el amor?- Y aquí Shaka denota algo que había estado apreciando en su amigo en estos instantes de platica.
No hacia expresiones de asco al hablar del tema romántico, no frunce el ceño o dice que es una estupidez o un caso perdido al estar en algún tipo de relación.
Cosa que claro extraña a alguien que lo conoce muy bien.
Tremendo impacto que se lleva al verse expuesto sin quererlo del todo, impresionándose y poniéndose sumamente rojo de las mejillas… Para evitar su mirada.
-No sé de qué estás hablando- Habla apresurado, casi sudando, aunque tuviera el aire acondicionado encendido y el clima ya no sea del todo cálido afuera.
-Algo estas ocultado, lo puedo ver en ti…- Niega con la cabeza, no puede dejar de pensar en el pelilila que no logro ver el día de hoy por las idioteces del castaño oscuro, por eso está muy decepcionado, deseaba ver ese angelical rostro ante la pantalla, como se divierte ante los videojuegos, notándose tan precioso por sus sonrisas -¿Qué va hacer Aioros ahora con esta información?-
Era mejor cambiar de tema, tampoco es que le interese mucho los asuntos románicos de su mejor amigo, ya que ahora mismo está más interesado en cautivar a alguien que esta tan lejos de su alcance y que solo por él, ha estado pensando en pedirle a sus padres un enorme favor, aunque sea algo que de ante mano está por así decirlo sumamente prohibido.
Viajar hacia Grecia es un asunto que sus padres jamás quieren tocar… Pues aunque su padre viene de este país, no significa que desea ver su ciudad natal…
¿Algo más se está ocultando para estos jóvenes?
-Pues… Me sacaron de la habitación de los regaños antes de saber más…- Suspira, ahora inclinándose hacia la mesa y poniendo su codo sobre la misma, bufando algo fastidiado y posando su barbilla sobre la mano –Creen que soy aun un niño, para escuchar esas cosas de “Adultos”…- Sus mejilla se inflan en un puchero –Ya no soy un niño-
-Te sigues comportando como uno, claro que lo eres- Responde el rubio, cansado por esta actitud del contrario, que no le da mucha información en sí, aunque lo principal si lo escuchó y no le agrado nada ese hecho.
-Ay, exclamo el que esta enamoradísimo de Mu y no pude siquiera verlo cuando se pone a mirar fijamente la pantalla cuando jugamos…- Ahora entrecierra sus ojos, para ver feo al rubio, pues le refuta su ataque rápidamente –Te pones todo idiota cuando está presenté, y no eres capaz de decirle algo, solo te comportas serio y preguntas cosas muy básicas… Deberías aplicarte mejor-
Esto solo logra hacer fruncir el ceño al rubio, dejando ver unas mejillas rojas, apretando su mandíbula, y tragando saliva pues está atrapado –Eso no te incube Aioria-
-Claro que si- Cruzado de brazos, ahora tratando de ser serio, pero más burlón –Mi hermano es muy torpe en cómo comportarse ahora que está sumamente enamorado, pero… Tú, Shaka… Tienes las posibilidades de hablar con él, de convivir en un ambiente de amistad antes que de otra cosa, incluso sabes perfectamente que puedes tomar un avión desde la India hasta Grecia, no es impedimento para ti en lo económico, ¿Por qué no vienes a verlo?-
Sí que Aioria muestra un cambio de personalidad muy latente, de estar por completo desinteresado en cualquier tema romántico o algo fuera de su interés por los videojuegos, y ahora estar ayudando a su hermano mayor, e intentar que su mejor amigo hable con quién le guste… Por eso y que necesitaban a otro compañero de equipo, invitó al pelilila a unirse a ellos…
Sin duda, la familia de esos dos hermanos demuestran herencias de enamorarse a primera vista de una sola persona de por vida y esto causa que sus personalidades calmadas, indiferentes y serias, sean ligeramente alteradas por el fenómeno del amor.
No siempre quiere decir que sea algo malo, solo que… Se puede ver la vida de otra preceptiva…
Solo nunca se debe llevar al extremo.
-No es tan fácil Aioria, y lo sabes…- Suspira y se recarga en el respaldo de la silla.
-Solo me dijiste que tus padres no te dejan venir para este lado del mundo, aunque… Si has ido a visitarme a España… ¿Qué tiene Grecia que les molesta tanto?- Alza una ceja curioso por esto, para cruzarse de brazos e imitar la misma acción del rubio.
-No lo sé, pero… Me está causando mucha intriga ahora- Cierra sus ojos para intentar pensar mejor, pues el tema es ajeno para él, aunque envuelva a sus padres.
-Deberías preguntarles. En todo caso, escápate a Grecia unos días, te quedas con nosotros y cuando vuelvas te castiguen tus padres, pero conocerás al amor de tu vida- El tan “Buen” concejo que el castaño claro le dedica al joven Hindú, sin duda no es de los mejores, pero… Puede que tenga un buen punto.
Sin embargo Shaka no responde, solamente se ha quedado mucho más serio de lo habitual, y eso es decir mucho.
Aioria notando esto, se acomoda en su asiento, esperando una respuesta que sea un reproche o regaño.
-Tengo que irme…- No lo pensó dos veces, para apagar la cámara de la computadora.
Ante la mirada de unos ojos como un frondoso bosque que se han quedado sorprendidos, por creer que el otro haga una locura.
-¡¡¡SHAKA!!!- Alza la voz en un grito, levantándose rápidamente del asiento –Ay, no me van a culpar también de esto ahora…- Su cara palideció, por creer que el otro fuera capaz de tomar su no concejo como algo bueno.
---La India---
Sentado sobre su silla móvil, delante de su escritorio de madera rustica y finamente tallada, su laptop acomodada en una perfecta simetría en todo lo que ahí a su alrededor.
Aquella habitación tiene las luces encendidas, al parecer es de noche, sin duda las dos horas y media de diferencia hacen su truco mágico.
Un ventanal enorme, cubierto por unas cortinas, dejando que el frio aire se cuele, pero ni se percata de esto el joven rubio…
Poco le interesa, ya que se ha quedado tan pensativo en esa conversación con el castaño claro…
Existe tanto sobre la mesa, lo que paso con Aioros y Saga, que se atreviera a molestar a Mu el hermano mayor de su amigo, que Aioria le esté molestando con respecto a ese enamoramiento que siente por el pelilila, y no puede negar que si es verdad su actuar, es tímido y no tiene ninguna experiencia previa.
Pero igual… Algo más lo asalta en sus pensamientos… Y es el hecho de que sus padres, más precisamente su padre… Le tenga solamente restringido ir a ese país…
-¿Algo oculta?- Se pregunta para sí mismo –Actuó muy raro cuando les dije que Aioria me invito a ir a ese viaje, no quiera ir a fin de cuentas en ese momento, pero… No le agrado la idea…- Posa su mano alrededor de su poco, apoyándose con el pulgar en su mejilla y el codo sobre la mesa, pensando seriamente el asunto –Papá no me quiso decir nada y padre, ya no deseo tocar el tema por nada del mundo… Y yo realmente no insistí, no lo creía importante-
Por auto reflejo se levanta de su silla, para ponerse de pie… Y dirigir sus pasos hacia esa curiosa cama, que se encuentra al ras del piso, no es como esas tradicionales con patas de madera, metal o algún otro material, sino de una base de madera maciza, un colchón brumoso y cubierto por telas muy suaves, como cojines de elegantemente bordados.
No era exageración que Aioria mencionará que Shaka no tendría problema en lo económico por tomar un avión e ir a Grecia, pero… Por sus padres sí.
Subiendo sobre su cama, tomando una posición de flor de loto, para cerrar sus ojos y empezar a respirar calmadamente, necesita encontrar tranquilidad en su atormentada cabeza por este tema y por el deseo en su corazón.
-Quiero conocer a Mu en persona… No me podrán hacer desistir de eso, pero… Primero me gustaría saber… ¿Qué ocultan mis padres?- Murmura entre su ceremonia de pensamientos privados, mediante la medicación que necesita realizar con urgencia.
Ya que si no lo hacía… No negara que estuvo a nada de hacer caso a ese mal concejo de Aioria, tomar su pasaporte, todo lo que necesita y tomar un vuelo, aunque deba hacerlo a espaldas de sus padres.
Esa es la causa principal por la que decidió meditar, ordenar sus ideas y así formular un plan, pues… Sabiendo que Mu puede no estar seguro en ese lugar… Ya no solo por el hecho de Aioros sujetándolo con fuerza, si no… Que si esa familia Acuario llegará a querer hacer algo contra su amado pelilila… Contra el doncel del que esta perdidamente enamorado por ridículo que suene, no lo permitiría.
Si debe ir a enfrentarse a quien sea por ese hermoso pelilila, está dispuesto… También es capaz de poner todo a disposición de Mu si es necesario, después de todo… Aioros no es el único loco de amor en esta historia.