El viento sopla ligeramente revolviendo un poco tus cabellos dorados y acariciando esa cremosa piel que tantas veces e tenido ganas de tocar pero me he detenido por falta de coraje por no tener el valor de declararte mis sentimientos y con justa razón, pienso yo, por que tu lo único que harías es rechazarme, pero aun así este sentimiento ha crecido día con día volviéndose insoportable hasta llegar el punto de mantenerme estático melancólico yo el incontrolable y salvaje portador del emblema de el valor Taichi Yagami reducido a una décima parte de lo que soy por tu simple presencia recortada en estos momento en un fondo de blanca arena y un mar de claros colores entra azul cielo y verde agua tu Yamatto Ishida portador del emblema de la amistad, tu mi Matt.
-Matt- Tai que haces ahí sentado no piensas bañarte.
-Tai- He… no, quiero quedarme aquí a tomar un poco de sol.
-Matt- Que pasa baka desde hace algún tiempo no eres tu mismo te sucede algo
“Si me pasas tu” pero como decírtelo sin ganarme tu odio en el camino.
-Tai- No, no me pasa nada probablemente estoy cansado por el viaje… recorrer medio planeta en avión no es exactamente algo descansado…
-Matt- Tienes razón, aun no puedo creer que estemos aquí en esta paraíso
Observo como te agachas frente a mi lo suficientemente cerca para dejarme contemplar tu escultural cuerpo, esa perfecta silueta de músculos ligeramente marcados expuesta por la casi desnudes que te proporciona tu bañador esos mechones de hilos de oro cubriendo en parte tus ojos azul claro mas impactantes, en mi opinión, que este hermoso mar enfrente nuestro, recoges con tus manos un poco de arena y la dejas escurrirse entra tus dedos… al mismo tiempo que yo pliego las piernas a mi cuerpo para evitar que te des cuenta del caos que causa tu presencia por debajo de mi bañador.
-Matt- Habías visto una arena mas fina y suave al tacto… parece azúcar glass.
-Tai- No… es una pena que los de más no hayan podido acompañarnos, de todo lo que se están perdiendo…
Mientras te hablo desvió la mirada para esconder un poco el ligero color rosado que me causas en las mejillas.
-Matt- A mi no me da pena, así puedo pasar mas tiempo con mi mejor amigo, mas tiempo con tigo.
Me dices golpeándome ligeramente con tus nudillas en la cabeza, y empiezo ha sentir como los colores se me suben violentamente a la cara y me paro rápidamente echando a correr hacia el agua.
-Tai- MEJOR SI ME BAÑO TOMAR TANTO SOL ME ESTA PONIENDO ROJO- te grito des de el agua tratando de mitigar mi bochorno por tus palabras.
Te me quedas viendo con esa gélida mirada, característica en ti, directa mente hacia mis ojos como si estuvieras tratando de leer mis pensamientos.
-Matt- QUE TE PASA TAI por que huyes de mi…
Alcanzo ha escuchar tus ultimas palabras a pesar de que bajas el volumen de tu voz.
-Tai- No huyo simplemente tengo ganas de nadar…
Empiezo a nadar con todas mis fuerzas mientras pienso como rayos haré para evitar ponerme en evidencia los cinco días que voy ha estar contigo, mi mas preciado “amigo”, en este pedazo de paraíso.
Me he pasado toda la mañana evitándote corriendo de un lado a otro en la playa, nadando, conviviendo con los de mas turistas a pesar de que apenas nos entendemos por las diferencias de los idiomas y en estos momentos me encuentro jugando un partido de fútbol que yo mismo organice a ultimo minuto, mientras te veía venir decidido hacia mi evitándote sabiendo de antemano que no te gusta este deporte,
-Matt- Tai podemos hablar.
-Tai- Ahora no estoy muy ocupado.
Te observo mientras te das la vuelta enojado dirigiéndote hacia el bar de la paya donde unas muchachas se te acercan y empiezan ha hablar animadamente con tigo, tu lo dudas un momento y después de dedicarme una fugas mirada empiezas a corresponder a su platica levantando tu mano para rozar la mejilla de una de las chicas mientras acercas tus labios a su oído y le susurras algo en secreto… de repente siento un fuerte dolor en la cabeza y empiezo a caer con un montón de celos y recuerdo como te veías esta mañana mientras dejabas escurrirse entre tus dedos un poco de esta suave arena en la que estoy recostado mientras me dejo hundir entre la inconciencia y los recuerdos de unos rosados labios, cremosa piel, dorados cabellos y unos preciosos ojos color de cielo.
Empiezo a despertarme abro los ojos lentamente y te observo inclinado sobre mí sosteniendo con tu mano una bolsa de hielos sobre mi rostro.
-Tai- Matt que es lo que paso…
Te pregunto sin poder evitar que otra vez se me sonrosen las mejillas y me doy cuenta que estamos en la habitación del hotel donde nos hospedamos.
-Matt- Tranquilo no fue gran cosa el balón de fútbol te pego en la cara con fuerza mi entras jugabas… deberías fijarte mas en lo que haces, aunque te veías muy gracioso echado en la arena con la boca abierta y tirando un poco de baba jijijijiji…
Me siento en la cama rápidamente enojado por tus burlas.
-Tai- QUE TE PARECE TAN GRACIOSO solo me distraje un momento mirando algo y pues yo…
Me quedo callado tratando de pensar en que decir a mí defensa.
-Matt- Tranquilo solo es una broma, a decir verdad me preocupe mucho cuando te vi tirado, no sabes lo mal que me sentiría si a ti te pasara algo.
Me dices sentándote en la cama junto a mi, estremeciéndome por dentro a causa de tu cercanía y tus palabras.
-Matt- Apropósito ¿que es lo que observabas tan distraído?
Me quedo en silencio.
-Matt- ¿Por qué?...
Dices con un deje de melancolía en tus palabras.
-Matt- ¿Por qué me has estado evitando todo el día?... ¿No ves que ignorándome me haces daño? tu eres muy importante para mi… yo te aprecio mucho.
Escucho tus palabras con asombro y siento como tu mano busca la mía en la cama, yo me aparto y recojo las piernas contra mi pecho mientras escondo el rostro entre mis brazos.
-Tai- Matt yo… no se como explicarte que desde hace algún tiempo tu presencia produce en mi sentimientos extraños, que solamente busco el momento para estar con tigo ya que me haces sentir muy bien, pero hala vez huyo por que tengo miedo de que tu no sientas lo mismo que yo, tengo miedo de que te des cuenta de los estremecimientos que invaden mi cuerpo cuando te acercas, cuando me hablas al oído, cuando me dedicas tus sonrisas, cuando me observas con esa profunda mirada tuya que me desconcierta y me deja indefenso… tengo miedo que te des cuenta de que “te amo” y me rechaces por ello…
Empiezo ha verter lagrimas sobre mis brazos y rodillas mientras espero que comiences con tus recriminaciones y me maldigo mentalmente por haberte confesado lo que siento ya que seguramente ahora no querrás ser ni mi amigo…
Siento como tus suaves manos levantan mi rostro y te veo acercando te a mi cara, dejándome sentir tus labios sobre los míos en un tierno beso, comenzando por chupar y morder ligeramente el labio inferior y tu lengua recorriendo mi comisura pidiendo permiso para penetrarla…
-Tai- Mat ¿Que haces…? ¿Por que…?
Pregunto sorprendido mientras tú aprovechas para introducir tu lengua en mi boca rozando la mía y explorando ligeramente mi húmeda cavidad para después separarte.
-Mat- No es obvio baka yo también “te amo”.
Deslizo mis brazos por tu cello y me pego a ti apoyando mi cabeza sobre el arco de tu cuello y dejando escapar un par de lagrimas de felicidad por haber al fin escuchado esas palabras que tanto ansiaba y pensando en la perspectiva de las maravillosos días que me esperan junto a ti en esta paradisíaca playa donde aprovechare para cumplir todas las fantasías e ilusiones que avía reprimido desde el momento que me di cuenta que estoy enamorado de ti…
…. ¿Fin? ...