Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Más alla de las dimensiones por Terry

[Reviews - 7]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Qu epuedo decir... solo lean y juzguen

 

 

La habitación que Fye ocupaba había sido destruida por completo cuando Kurogane llegó a una distancia prudente para atacar.

 

 

 Justo cuando se disponía a atacarlo con su técnica el ser levanta el vuelo “bien… te tomare en el aire… ya veras” había pensado el pelinegro aunque nunca contó con que ese ser que le arrebatara a su padre, ahora tenia entre sus garras a un inconsciente rubio

 

 

 

-Demonios… no puede ser…-dijo mirando como ese delgado y largo cuerpo colgaba desguanzado de esa garra-Si le ataco… puedo lastimar a Fye-se dijo irritado, no quería arriesgar al mago.

 

 

 

Desde las altura Fye abre lentamente los ojos “mmh… ¿Dónde estoy? ¿Qué ha pasado?” se dice mientras siente ese aire chocar contra su rostro.

 

 

 

-Oh… si ya lo recuerdo… esa cosa… esta cosa destruyo el cuarto y cuando me vio me atrapó con su garra, tal vez me quiera para alimento de sus crías-dijo el rubio suspirando-Es una pena… pero yo no puedo ser alimento para crías de monstruos-dice sonriendo ligeramente.

 

 

 

Desde tierra Kurogane maldecía  mientras veía como el monstruo se alejaba, encajando la espada en el suelo como símbolo de su coraje, de su rabia e impotencia; sin siquiera esperar lo que iba a pasara a continuación. 

 

 

 

Fye, aun prisionero miró hacia a bajo.

 

 

 

-Fiuu… seguro que la caída dolerá…-dijo con su usual tono despreocupado-Pero no hay otra opción-se dijo mientras con la poca energía recuperada conjura un poco de magia, hiriendo al ser, logrando con ello lo soltara…

 

 

 

-¡¿Qué?! ¡Se va a matar!-exclama Kurogane mientras ve como se precipita en caída libre-Maldición… va a caer en el bosque… aunque tal vez… eso amortigüe su caída-musita mientras desentierra su espada y se dispone a irse.

 

 

 

-Kurogane-se oye la voz de Tomoyo detrás de él-Es peligroso que te adentres tu solo en ese bosque…-comienza a decir ella como si tratara de disuadirlo.

 

 

 

-No hay tiempo para hacer un grupo de exploración ni nada parecido-responde el ojirrojo-Si no me apresuro… es posible que Fye no resista semejante caída, aun está débil y enfermo-añade decidido a irse solo.

 

 

 

La princesa  no pudo detenerle, sólo lo vio alejarse, con la espada al hombro… “Kurogane… ten mucho cuidado” pensó mientras comenzaba a rezar.

 

 

 

Kurogane se adentro a ese espeso bosque, bosque temido por muchos, explorado por pocos y conocido por un puñado… “Tienes que haber sobrevivido… no puedes haber acabado de ese modo… maldita sea… no puede ser” se decía mientras caminaba al punto que suponía había caído el rubio.

 

 

 

Mientras tanto el ojiazul se encontraba inconsciente; su caída había sido amortiguada por un sin fin de ramas justo antes de que cayese al suelo quedó atorado en una de ellas, quedando como un muñequito de trapo… con las ropas rasgadas y un sin fin de heridas y rasguños en todo el cuerpo.

 

 

 

-¿Qué es eso hermano?-preguntó una jovencita de cabellos castaños a su hermano mayor cuando pasaban por debajo de es árbol-¿es un pájaro?-inquiere al ver como las ropas parecían formar alas desguanzadas.

 

 

 

-Mmh... No se parece a ningún ave que conozca-dijo el chico-Iré a ver-dice al tiempo que sube por las ramas “pero no es un pájaro, es un chico” pensó al encontrar al rubio inconsciente.

 

 

 

Con mucho trabajo el joven de cabellera castaña se coloco al mago sobre su espalda para así tratar de bajarlo sin lastimarlo más de lo que ya se veía.

 

 

 

Los jóvenes se llevaron al mal herido mago hasta su casa, donde el jovencito le desviste y comienza a curarle.

 

 

 

-Ay…-se queja débilmente Fye aun estando inconsciente mientras le curaban.

 

 

 

Las horas pasaban… Fye dormido profundamente en esa casa en medio del bosque mientras que Kurogane le buscaba…

 

 

 

-“Estoy seguro que calló por esta zona… aun así no hay rastro de él, no puede ser que me haya equivocado de ubicación”-se decía hecho un manojo de nervios…

desesperado de no encontrar rastro de ese rubio-¡Maldita sea, ese monstruo no pudo habérselo llevado tan lejos!-exclamó pateando un árbol-“Aún estaba grave… y esa cosa… esa cosa pudo haberlo lastimado”-pensaba sin poder evitar que la preocupación embriagara su ser.

 

 

 

Acababa de sentarse bajo el árbol cuando un trozo de tela le cae en el regazo, sin saberlo había llegado al árbol donde Fye quedó atorado…

 

 

 

Al tomar la tela la reconoció como parte de la vestimenta del joven mago, sin pensárselo dos veces comenzó a subir creyendo estaría atrapado… su decepción fue indescriptible al no encontrarlo

 

 

 

-¿Alguien… alguien se lo abra llevado? ¿O será que el viento sólo trajo esto hasta mí?-se pregunta apretando ese trozo de tela, sintiéndose impotente-Fye…

 

 

 

La noche comienza a caer, cosa que a Kurogane no le agradó en lo más mínimo, pues temía que eso afectara aún más el delicado estado de salud de Fye, así que siguió su búsqueda sin preocuparse en lo más mínimo que ésta se complicara.

Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).