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Las Cuatro Estaciones por Shun_ElMasBello

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Notas del capitulo:

bueno aqui esta el segundo capì.... me tarde un poco.... y creo que no salio como esperaba..... un beso a todos los que lo han leido...... ^^

 

Han pasado tres meses desde que los cuatro caballeros de Atenea llegaron al mundo de las estaciones, y empezaron su misión para averiguar que les había pasado a estas y mantener el equilibrio entre los cuatro reinos. Ashley y Franco les dijeron que ellos estaban ahí por lo mismo que ellos, y decidieron unirse para investigar mejor.

También habían empezado un entrenamiento para controlar los poderes de las estaciones y de cómo debían comportarse con su pueblo. A Shiryu, Shun y Hyoga no les fue difícil como aprender a comportarse y a tener buenos modales con grandes mandatarios de otros mundos y con dioses, pero Ikki que no era del tipo muy cordial se le había echo frustrante, en especial cuando le llegaba alguna persona importante justo el día en que se escapaba para ir a verse con Franco, habían empezado una relación y no quería echarlo a perder.

Por otra parte Ryu (Radamanthys) planeaba el modo en que haría que los chicos olvidaran sus vidas anteriores, pero tenia que esperar que estos aprendieran a manejar sus poderes bien, se había despreocupado un poco de apartar a Ikki de Franco, a pesar de la advertencia que había recibido.

A parte de todo lo que debían hacer, a los chicos no se le permitía usar sus verdaderos nombres y tampoco sus vestimentas acostumbradas, solo podían ser llamados dependiendo de que estación estaban sustituyendo y sus ropas tenían que ser elegantes, Hyoga usaba ropas bien abrigadas por el frío de su reino aunque eso a él no le afectaba, Shiryu vestía con ropas bastante ligeras, ya que su estación es bastante fresca, Ikki llevaba casi siempre ropas de guerrero que no variaban de un azul oscuro o negro y Shun vestía kimonos manga larga que eran obligatorios para la primavera ya que eso le daba un mejor manejo de sus habilidades.

 

"En el Reino de la Primavera".

En los jardines del Gran Castillo Primaveral, Shun se encontraba practicando sus ataques contra varios muros, los cuales trataba de derribar pero le era difícil, llevaba dos meses de entrenamiento y aun no controlaba bien esos poderes, Franco acababa de llegar de una de sus escapadas y se dirigía a toda velocidad para ayudar a Shun.

Franco: tomando aire- lo siento Shun, pero Ikki no me dejaba regresar ^^.

Shun: con una gran sonrisa- no te preocupes, ya me imagino como se pone cuando le dices que tienes que volver.

Franco: sonriéndole- gracias por entender.

Shun: de nada, además es mi hermano y lo conozco bien.

Franco: jejejeje cierto.

Shun: sentándose en la grama- ¿le entregaste mi carta a Hyoga?.

Franco: si, me dijo que no soporta el estar tanto tiempo lejos de ti, se le nota que te ama.

Shun: con ojos llorosos- yo tampoco lo soporto, pensar que tenemos tres meses que no nos vemos T_T.

Franco: abrazándolo- se lo duro que es estar tanto tiempo lejos de la persona que amas- viéndolo a los ojos- ¿no te gustaría ir a verlo?.

Shun: secándose unas lagrimas que se le escaparon- si me encantaría, pero no puedo.

Franco: claro que si, podemos escaparnos esta noche mientras todos en el castillo duermen.

Shun: ¿estas seguro?, me parece un poco peligroso.

Franco: pues no lo es, además me vas a decir que no harías cualquier cosa por ir a ver a Hyoga?.

Shun: sonriendo- es verdad, entonces esta noche vamos.

Franco: esta hecho- levantándose del suelo- creo que mejor seguimos con tu entrenamiento.

Shun: si vamos, ¿me habías dicho que me enseñarías un nuevo movimiento?.

Franco: ^^- Sip, se llama las rosas solares, es un de los ataque mas poderoso.

Shun: suena bueno, ¿qué tengo que hacer?.

Franco: solo concéntrate y deja que el poder fluya.

Shun comenzó a poner su mente en blanco y cuando se encontraba en completa calma, sintió como un nuevo poder surgía, grito con fuerza- "Rosas Solares"- y miles de rosas amarillas parecieron de la nada destruyendo todos los muros que horas antes Shun había tratado de destruir, el poder era sorprendente las rosas parecían pequeños soles que incineraban todo a su paso con resplandores dorados. Luego de haber derribado todos los muros, los dos chicos entraron al castillo y así poder prepararse para su escapada.

Shun: oye ¿por qué no vamos un momento al pueblo?.

Franco: bueno si tu quieres, ¿qué harás aya?.

Shun: es que quiero comprarle algo a Hyoga.

Franco: esta bien, deja que me cambie y nos vamos.

Shun: Ok, yo haré lo mismo.

Después de haberse bañado y cambiarse de ropa, los dos salieron de los terrenos del castillo y bajaron al pueblo, para comprar unas cosas. Cuando estaban afuera las personas se acercaban a Shun para saludarlo y preguntarle si lo podían ayudar en algo, a lo que Shun les decía que no se preocuparan de una forma muy amable y siempre con una sonrisa en el rostro. Caminaron por horas, viendo de tienda en tienda para ver que comprarle a Hyoga, a Franco se le ocurrió que aprovecharía para comprarle algo a todos los demás y llevárselos cuando pudiera. Después de tanto buscar Shun le compro a Hyoga un brazalete azul marino a el cual le mando a grabar las iniciales de los dos. Al terminar sus compras decidieron quedarse un rato caminando, casi no salían del castillo y querían aprovechar.

Shun: caminando por un puente- ¿cuánto tiempo crees que estemos aquí?.

Franco: hasta que las estaciones despierten.

Shun: si, pero están haciéndonos aprender tantas cosas, que pareciera que se olvidaron de ellas.

Franco: yo también pienso lo mismo, por eso le pedí a Ashley que en lo que pudiera fuera al reino neutral a ver como están las estaciones.

Shun: ya veo- mientras camina una pelota llega a sus pies- ¿mmmm?.

Niño: corriendo hacia Shun- disculpe Primavera, ¿podría devolverme la pelota?.

Shun: claro- agarra la pelota y se agacha para dársela al niño- toma y ten mas cuidado, la próxima vez se te podría ir mas lejos- y le regala al niño una de sus mejores sonrisas.

Niño: Sip, tendré mas cuidado, gracias ^^.

Franco: jejejeje, que lindo es tener esa edad ¿verdad?.

Shun: Si- viendo hacia una panadería- mira, vamos para allá creo que veo los panes que me gustan.

Franco: bueno, pero espero que halla algo de chocolate jijijiji- caminan hacia el lugar para comprar un pan de guayaba y uno de chocolate.

Luego de comprar en la panadería se fueron a sentar bajo un árbol y pensar un rato en como saldrían esa noche.

Al regresar al castillo les avisaron de que llegaría la Diosa Atenea a ver a la Primavera, Shun se alegro de escuchar eso y se fue rápidamente a cambiar, claro que esto ya le arruinaba los planes de escaparse esa noche.

Eran las siete de la noche y a las afuera del castillo se escucha el trotar de caballos, Shun y Franco se encontraban esperando en el jardín a Atenea, al poco rato de escucharse el ruido de la llegada de alguien, se apareció frente a ellos Sahorí.

Sahorí: buenas noches, ¿como estas Shun?.

Shun: muy bien, ¿y tu?.

Sahorí: pues no me quejo, pero me estresa que todavía ustedes estén aquí.

Shun: jijijiji lose, pero tenemos que estar hasta que todo se arregle.

Sahorí: dándose cuenta de la presencia del otro chico- Oh, discúlpame, un gusto conocerte tu debes ser Franco, ¿no?.

Franco:  ese mismo soy yo jijijijiji, un placer conocerte.

Sahorí: sonriendo- entonces tu eres el que le robo el corazón al obstinado de Ikki.

Shun: jijijijiji si él es mi cuñado y vieras a Ikki es todo un amor, esta vez creo que mi querido hermano se enamoro de verdad- apagando su sonrisa- pero no creo que hallas venido solo para conocerlo a él.

Sahorí: estas en lo cierto, vengo porque necesito hablar con ese tal Ryu, tengo que ver como van las investigaciones, y por supuesto que todos ustedes vendrán conmigo, pero primero quiero hablar a solas con los seis. No se porque pero no me es de fiar ese Ryu.

Franco: lo mismo digo, ese anciano es algo raro, como si ocultara algo.

Sahorí: seguro que el sabe mas de lo que ha dicho.

Shun: ¿ustedes creen que ese señor tenga algo que ver con todo esto?.

Sahorí: si, pero como ya dije mejor vamos a otro lugar, así que prepárense para salir de este reino ahora mismo.

Shun: sorprendido- ¿tan rápido?!.

Franco: yo pienso que es lo mejor, estoy de acuerdo con Sahorí.

Así los tres avisan que irán al Reino Neutral y salen lo mas rápido a buscar a los demás. Viajaron toda la noche en el carruaje donde había llegado Sahorí, Shun observo por una ventanilla y vio como la primavera quedaba atrás para hacerse paso el otoño, ya era obvio que habían llegado al reino que le fue encargado a Shiryu.

 

"El Reino del Otoño".

Ya estaban en la ciudad, se podía observar a lo lejos el Castillo de las Hojas Secas, el cual se encontraba construido sobre un árbol gigante, estaba cubierto por hojas y se alzaban tras él dos pilares de color verde oliva. Pudieron detallar también el paisaje de todo el reino, con la mayoría de los árboles con sus hojas secas y cayendo formando alfombras, hermosos ríos, el aire fresco que mecía las hojas de los árboles, toda las casas construidas en árboles, y todas las personas eran amables unas con otras, el reino estaba tan hermoso como el de la primavera.

Pronto estuvieron en la entraba del castillo y justo ante ellos se encontraba esperándolos Shiryu, que estaba listo para su partida, ya que días antes le fue avisado lo que la diosa iría hacer.

Shiryu: con voz suave- hola, ¿cómo estuvo su viaje?.

Shun: sonriendo alegremente al ver a Shiryu- muy bien amigo, pero dime ¿cómo has estado?.

Shiryu: bien Shun, algo ocupado y lleno de obligaciones, pero nada que no pueda manejar.

Sahorí: en tono burlesco- me alegro que te estés divirtiendo jijijiji.

Franco: jejejeje, ¿y que has averiguado Shiryu?.

Shiryu: bueno me eh dado cuenta que mi guía no es quien dice ser, y si es así Hyoga podría estar en peligro.

Shun: preocupado- ¿qué?!!, entonces mi príncipe necesita de nuestra ayuda.

Franco: explícanos que quieres decir Shiryu.

Sahorí: sintiendo que alguien los observa- creo que mejor vamos al siguiente reino y en el camino hablamos.

Shiryu: es lo mejor.

Suben al carruaje, y en lo que este sale del reino Shiryu les explica, que hace unos días vio como su guía tenia un aspecto muy extraño, su cuerpo era distinto pero no llego verlo bien porque estaba oscuro. Y en ese momento se acordó de que Hyoga le había dicho algo parecido sobre su guía. Todos estaban ahora un poco mas preocupados, sospechaban del anciano y si él resultaba ser el enemigo era seguro que tendría aliados y quien mas que esos dos guías.

 

"El Reino del Invierno".

Hacia mucho frío, la nieve abundaba en el lugar, el castillo era totalmente de hielo, de ahí su nombre El Castillo Iceberg. De las casas se veía salir humo por las chimeneas, la gente usaba ropa bien abrigada para mantenerse calientes, los ríos y lagos estaban congelados y se podía ver personas patinando en ellos. Era un lugar a pesar del frió bastante bello, todo brillaba como si el hielo fuera miles de diamantes.

Al llegar a la entrada del castillo, Hyoga subió apresuradamente al carruaje sin dejar que los demás bajaran, ya adentro dio la orden de ir al siguiente reino, para luego besar a Shun un largo rato ante la mirada de todos. El transporte empezó a moverse y en lo que Hyoga dejo de besar a Shun, Sahorí comenzó a hablarle.

 

Sahorí: ¿qué pasa Hyoga?, ¿por qué la prisa?.

Hyoga: discúlpenme, hola a todos- con total seriedad- creo saber quien es el que durmió a las estaciones.

Shun: recostado del pecho de su amado- ¿y quien es amor?- recuperándose del repentino beso.

Shiryu: si dinos que has averiguado.

Hyoga: bueno se que el dios del infierno Hades es el causante de todo esto.

Franco: Wow eso si es una sorpresa.

Sahorí: ajo yo sabia, ese lo que quiere es adueñarse de este mundo, como no pudo ganarnos.

Hyoga: no lo creo Sahorí, su verdadero objetivo es destruir la tierra, me entere porque vi como mi supuesto guía hablaba con alguien y cambiaba su apariencia, para dejarse ver como quien realmente es.

Shiryu: entonces yo no estaba tan errado, en lo mismo descubrí hace poco a mi guía. ¿Pero dinos quien es realmente él?.

Hyoga: pues uno de los tres jueces del infierno, Aiacos de Garuda.

Todos: ¿qué?!!!.

Hyoga: Sip, como lo escuchan, así fue como supe que con quien hablaba era Hades.

Sahorí: ese desgraciado, ya vera y seguro que el guía de Shiryu es otro de esos tres jueces.

Shun: pero ¿cuál de ellos será?.

Franco: mmmm, yo conozco un poco sobre esos tres, y casi nunca están muy separados. Siempre van a las misiones juntos.

Shiryu: es cierto, lo que da a ver, que en alguna parte están Minos y Radamanthys.

Shun: A mi parecer el anciano y el guía de Shiryu son los otros dos. ¿cual de ellos serán?

Franco: al llegar al reino neutral hay que hacer que den la cara y vencerlos allí, antes de puedan llevar a cabo su plan.

Sahorí: yo misma los haré sufrir el peor de los castigos.

Hyoga: bueno pronto llegaremos con Ikki y seguro que le va a hervir la sangre al saber todo lo que averiguamos.

Franco: es capaz de matar a todos sin siquiera dejar que terminemos de explicarle.

Shun: jejejeje mejor, así nos ahorra el trabajo.

Sahorí: es verdad ^^.

Luego comenzaron hablar sobre como habían estado esos días, lo que habían aprendido y como acabarían con los jueces de Hades.

 

"El Reino del Verano".

Fuera de los dominios del invierno pudieron notar el intenso calor del verano y se hacían la idea de que pronto estarían con Ikki. El sol iluminaba todo el camino dejando ver franjas doradas muy lindas, el suelo estaba seco y casi no había cauces de ríos.

Al estar cerca del reino vieron el Castillo Solaris, este tenia unas torres que en sus puntas estaban adornadas con unos grandes soles, la entrada al castillo también poseía un sol enmarcado a su alrededor. El carruaje se detuvo y todos comenzaron a bajar, entraron al castillo, se dirigieron hacia un gran salón y allí se encontraban Ikki y Ashley.

Ashley: corriendo hacia su hermano- hola!!- lanzándose a los brazos de Franco- jejeje, ¿cómo estuvo el viaje?.

Franco: hola hermanita, pues muy bien.

Sahorí: ¿qué tal?, ¿cómo van las cosas?.

Ikki: viendo a la diosa con cara de fastidio- ¿a que se debe tu visita?.

Sahorí: pues eh venido a llevármelos, ¿qué mas crees que vendría hacer?.

Shun: acercándose a Ikki- hermano, que bueno es verte- lo abraza con fuerza.

Ikki: acariciándole los cabellos- hola hermanito, yo también me alegro de verte.

Hyoga: Ikki ya sabemos algo de lo que les pudo pasar a las estaciones.

Shiryu: resulta que mi guía y el de hyoga son dos de los tres jueces del infierno.

Hyoga: y Hades es el que planeo todo para traernos aquí y apoderarse de la tierra.

Sahorí: hemos venido a buscarte para ir al reino neutral y hablar con ese tal Ryu, si es que ese es su nombre.

Ikki: ya veo, ese viejo jamás me inspiro confianza.

Ashley: acercándosele- eso lo dices porque no te dejaba acercar a Franco jijijiji.

Shun: jejejeje, te pillamos hermano.

Franco: dándole un beso- no vallas a ponerte bruto cuando lleguemos allá- viéndolo tiernamente- ¿me lo prometes?.

Shun: se une a su cuñado para hacer que Ikki caiga mas rápido- si hermano, por favor prométenos que no harás nada estúpido.

Ikki: con cara de fastidio- ¡ay!, son unos chantajistas, tenia pensado romperle la cara. Pero me controlare- tomando a Franco por la cintura- eso si, vas a tener que darme algo a cambio- sonriéndole maliciosamente y acariciándole las nalgas con fuerza.

Franco: >////< Ikki, no al frente de todos.

Cayo la noche y decidieron que mejor salían hacia el Reino Neutral en la mañana, planearon lo que harían y como le sacarían la información a el anciano. Luego se separaron por el castillo para observar los alrededores, Ikki que no podía estarse quieto tomo a Franco en brazos y lo llevó a su habitación cuando Sahorí termino de pronunciar las ultimas palabras del plan. Hyoga se había llevado a Shun a el jardín y se encontraban conversando sobre lo que habían hecho. Ashley caminaba por todo el castillo junto con Sahorí y Shiryu.

Luego de un rato se fueron a las habitaciones que les habían preparado para dormir y se acostaron. Pero no podían llegar a descansar, porque cada vez que cerraban los ojos escuchaban los gemido y gritos de Shun y Franco, que por sus voces estaban disfrutando bastante de lo que sus novios les estaban haciendo. Pasaron la mayor parte de la noche así, y casi no dejaron que los demás durmieran en paz.


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