Tamaki estaba en su habirtación, mirando el cuadro qe Kyouya le había obcequiado, estaba derimido; pero en el momento mismo en que se había dado cuenta estaba enamorado de Kyouya se supuso que él jamás le correspondería como él habría querido.
Kyouya también se encontraba en su habitación recostado sobre su cama, orgulloso de haber ganado la apuesta; un pensamiento interrumpió el sabor de su victoria; recordó el beso que recibió de Tamaki ese día por la mañana, recordó como por unos momentos lo disfrutó. (piensa): yo... ¿disfruté ese beso? ¿en serio lo hice? nunca pensé que en verdad Tamaki estuviese enamorado de mí siempre supuse que lo estaba de Haruhi, bueno... ya ni modo (recuperó una malévola sonrisa)
Al día siguiente, Tamakí nuevamente llegó temprano, y el segundo en llegar fue otra vez Kyouya.
TAMAKI: ah Kyouya, ya he traducido el poema que trajiste ayer, ¿quieres escucharlo? (le ofreció como si nada más hubiese pasado al día anterior, cosa que extrañó a Kyouya)
KYOUYA: claro (responde extrañado)
TAMAKI: bien...
Encore.
beaucoup de cela fait déjà, beaucoup de temps que tu es parti, beaucoup de cela fait déjà temps que tu es parti et je t'attends, il(elle) fait beaucoup que je t'attends et tu n'es pas revenu et en espérant que tu reviens je meurs.
Beaucoup de cela fait déjà, beaucoup de temps que cette angoisse d'attendre éternellement m'angoisse, je ne consiste déjà plus qu'une fleur pâle et mustía en ce qu'à l'ombre de l'oubli il est effeuillé.
Beaucoup de lunas ont passé et tu ne viens pas, seule j'erre après la jalousie blanche, avec la neige des années dans les tempes, toujours(encore) continue de m'attendre, encore.
(Tamaki recitó esto bellamente, y no era para más ya que el idioma le queda de maravilla)
KYOUYA: se escucha muy bien, si quieres hoy comenzamos a ensayar cuando se hayan las actividades del club.
TAMAKI: si está bien (le responde con una sonrisa)
KYOUYA: Tamaki... tú ¿estás bien?
TAMAKI: ¿por qué preguntas? ¿por lo de ayer?
KYOUYA: si
TAMAKI: si estoy bien, de todas maneras yo sabía que tú jamás me corresponderías; sé que para tí solo soy un indiota que le cuesta trabajo entender las cosas verdaderamente importantes, pero como te dije ayer, no quiero perder tu amistad, es por eso que mejor olvidamos lo que sucedió ayer.
KYOUYA: (piensa): valla, por un momento Tamaki no pareció tan idiota, hasta se ve raro. (hablando): bien, me parece una buena idea.
LUEGO DE QUE EL HOST CLUB SE HABÍA MARCHADO...
TAMAKI: bien kyouya; dividamos el poemas en partes y lo decimos en un orden aleatorio ¿qué te parece?
KYOUYA: es buena idea, hagámoslo. (Tamaki y Kyouya comenzaron así sus ensayos, como si nada hubiese pasado entre ellos, luego de unos momentos, tanta cordura en Tamaki, molestó a Kyouya.)
KYOUYA: Tamaki
TAMAKI: ¿si?
KYOUYA: ¿en verdad no estás molesto? ¿no con los gemelos?
TAMAKI: con ellos no tengo razón para estar enojado, de ellos pude haberme esperado algo inclusive peor, porque a veces entre los dos carecen de sentido común, pero de tí fue de quien jamás me lo hubiese esperado, creí que eras más censato y respetable, pero... jugar así con alguien, no es algo que me enoje, es algo que me entirstece, y mucho, no tienes idea de cuánto.
KYOUYA: Tamaki... yo... lo siento, jamás pensé que te fuese a lastimar tanto.
TAMAKI: no, no lo sientes, estoy seguro; pero al fin de cuentas tú eres tú y siempre será así, creo que el único momento en mi vida en el que he sido un verdadero idiota fue cuando pensé que algún día sentirías por mí lo que yo por tí. (luego de que dijo esto, Tamaki dejó la sala de música donde habían estado ensayando y se fue a su casa, dejando atrás a un Kyouya sorprendido y confundido que posteriormente se fue a su casa también)