SEGUNDO ACTO:-
NEJI-BAKA, LA DECLARACIÓN Y UN GRITO A MITAD DE LA NOCHE...
-Mami Lee…por fas cuéntame como se declaró papa!!-
Lee esta vez si rió bobamente como lo caracterizaba. Gaara frunció el ceño, de solo recordarlo hacía que su sangre hirviera de nuevo.
-Kazuyo…recuerdas a Neji-sama??- comenzó Lee, introduciendo al personaje que sin cuya participación nada habría sido igual….N A D A…-
-Hyuuga-Baka??- respondió Kazuyo inmediatamente…-
-¿Qué?- O.o- Noo…se llama Neji Hyuuga…Neji-sama…-
-Pero papá dijo que…-
-Dile Neji-sama!!- pidió Lee casi gritando, con las mejillas rojas.
Volteó a ver a Gaara con enojo, pero el muy cínico se hacía el desentendido.
-Neji…ya es el momento…-
-No me presiones, esto es más difícil de lo que parece…-
-Claro que no…solo tienes que llegar y decir “Te amo, se mi novia y te protegeré por el resto de mi vida…”- declaró Lee como si fuera lo más normal del mundo.
Neji lo miró con cara de fastidio, Lee no sabía ni un pepino en asuntos del corazón, y eso lo hacía sentirse un tonto por haber recurrido a el para que le ayudase.
-¡Vamos, Neji!! Llevas toda la semana en esto!! Lo hemos editado y corregido más de veinte veces…ya no puede fallar…- le apresuró Lee levantando un dedo en pose de “Nice Guy”-
Por mucho que le costara admitirlo, Lee tenía razón, era el momento de la verdad y prolongarlo solo lo haría más difícil al final.
¡Pero justo ahora era difícil! Le avergonzaba tener que practicar con otro hombre y peor aún, que Lee utilizara esta estúpida peluca castaña, para según el “agregarle más realismo a la dramatización”.
-Está bien…pero quítate la peluca!!- pidió Neji como un pequeño bonus a su ya de por si muy destruido orgullo.-
Lee bufó exasperado…Neji no tenía nada del espíritu aventurero y artístico que representaba la juventud. ¡Mira que rechazar una idea tan buena como la peluca!! Aún así, si eso ayudaba a su eterno rival (como que eso no sonó muy bien…je je je), entonces no había de otra.
-Está bien…-
*INICIO DE LA DRAMATIZACIÓN*
Pasa Lee-Tenten caminando frente a Neji, este se hace el desentendido durante unos segundos pero termina llamando la atención de la chica-Lee.
-Tenten…Disculpa, puedo hablar contigo un segundo??-
Lee-Tenten le mira un poco confusa pero asiente de todos modos.
-Si, Neji-kun??-
-Hay algo que…quiero decirte…-
/Estaban tan absortos en su “práctica” que no notaron la presencia de Ino, la chica había llegado temprano en la mañana para recolectar algunas flores que le habían pedido en su casa, y su búsqueda la había llevado al pequeño rinconcito apartado del bosque donde Lee y Neji se ocultaban para practicar la próxima declaración de este último.
-Hay! (gesto de dolor)…llevo demasiado tiempo agachada…- se replicó Ino a si misma, sintiendo la punzada de cansancio en la espalda. Se levantó del suelo para estirarse y fue ahí cuando los vio. Neji hablaba con Lee, aparentemente de algo importante porque los ojos de Rock Lee estaban fijos en el Hyuuga./
-Yo…bueno…-Neji tartamudea un poco, en un gesto desesperado de deshacerse del nerviosismo.- desde hace algún tiempo…que siento cosas…algo fuerte cuando estoy contigo…No te pido que seas mi pareja, ni que correspondas a mis sentimientos, solo quiero que sepas…que me he enamorado de ti…-
Lee-Tenten se sonroja levemente, no es capaz de articular palabra, por lo menos en los primeros segundos, luego se toca las manos con frenesí.
-Yo…también te quiero, Neji-kun…no, en realidad, no solo te quiero…te amo…-
/En este punto de la plática Ino tenía la mano sobre su boca, intentando que ningún grito de sorpresa saliera inoportunamente. ¡Por Kammi-sama!! Eso era demasiado!! Sabía de rivales que terminaban como pareja (como por ejemplo Sasuke y Naruto) pero jamás se imagino que Neji y Lee siguieran la misma línea.
Osease, Neji era un genio y Lee era un tonto sin remedio, además, no eran taan rivales, en cierta forma su amistad estaba bien fundada y con sólidas bases. Su relación era así, meramente fraternal.
Salió despavorida del bosque, dividida entre la vergüenza de escuchar una declaración tan privada y las ganas de contárselo rápidamente a Sakura./
*FIN DE LA DRAMATIZACIÓN*
-Yosh!! Neji!! Ha estado excelente...seguro que Tenten cae rendida a tus pies…- gritó Lee envuelto en la emoción.-
Neji tuvo que admitirlo, era cierto, por primera vez había dicho todas sus líneas sin olvidar ninguna, sencillamente perfecto.
-Entonces creo que por hoy hasta ahí lo dejamos…- propuso Neji sentándose sobre el pasto para descansar. Habían utilizado su único día libre en el mes para practicar, se merecían un descanso por el resto del día, ya habría tiempo para declaraciones a lindas chicas con dos colitas en la noche, durante el festival.-
Lee se sentó a su lado y le sonrió, en una forma silenciosa de desearle suerte.
No más de quince minutos después, en la aldea, ya casi todos sabían de la nueva pareja “oficial” que se había formado en Konoha. Las kunoichis habían cometido el error de platicar en frente de Naruto, que ni tardo ni perezoso se lo dijo a todos los que había conocido en su vida, y así esa persona se lo comunicaba a otra y sucesivamente.
Gaara había llegado ese día para asistir al festival, en plan de estrechar lazos con Konoha, no faltaba decir que el odiaba las fiestas, siempre eran aburridas.
El viaje había sido largo, pesado y cansado, y para su mala suerte, el primero en recibirlos fue Naruto.
-Gaara!! Hi!! Bienvenido, Tebayo!!- El rubio le saltó encima, en un abrazo más que asfixiante.
-Oehh!! Usuratonkachi, déjalo respirar…- dijo Sasuke prácticamente arrancando a Naruto de Gaara, en parte para no molestar al Kazekage y porque le daban celos, pero eso solo lo confesaría bajo amenaza de muerte.-
-Cierto, Gomen, Gaara…- se disculpo el rubio.
Gaara no le tomó importancia, inclinó la cabeza para darle a entender que lo había escuchado y le “perdonaba”. Hecho seguido miró hacia Sasuke, luego a Naruto, levantándose en puntillas para ver encima de sus cabezas.
-¿A quien buscas, Gaara??- preguntó suspicazmente Sasuke.-
El pelirrojo lo miró de forma gélida, aunque ahora mostrara un poco más de sentimientos seguía siendo la fría muralla de firmeza.
-Pensé que habría más chunnins con ustedes…- dijo en tono neutro.
Sasuke dio por sentado el asunto. (Ingenuo ¬.¬ obvio que busca a Lee-chan!! ^o^)
Comenzaron a caminar, en dirección al apartamento que Tsuande-sama les había asignado a los shinobis de la arena.
Sasuke iba atrás, ligeramente apartado, pero sin despegar ojo de la aparente “plática” que Naruto sostenía con Gaara. Aunque en realidad Naruto era el que hablaba y hablaba como dobe y Gaara solo pretendía escucharlo.
-Oeh!!! Oeh!! Tebayoooo!!! Adivina quien ya tiene pareja!!- gritó Naruto.-
Gaara, que hasta ese momento había hecho difíciles intentos de escucharlo, fijó su atención en el, seguramente Naruto se refería a alguna persona completamente desconocida para el, y de no ser así, mínimo que no le interesaba.
-Lee-kun!!- finalizó el rubio, con una enorme sonrisa que declaraba a los cuatros vientos que no estaba enterado del ambiente casi asesino que se formó alrededor de Gaara.-
Pero no por nada era Gaara del desierto, el perfecto shinobi carente de emociones. Se mantuvo sereno aunque por dentro deseaba cometer un asesinato, sin crispar sus facciones.
-Valla…- exclamó en forma neutra, como…apenas y sorprendido.- y…con..-
-¿Con quien está?? Esta con Neji, Tebayo!!-
Y ahí termino todo, Naruto siguió hablando de temas que le tenían sin cuidado hasta llegar a su residencia en Konoha. Se despidió de la pareja (sasunaru) y entró a su habitación encerrándose herméticamente.
¿Qué Lee estaba con Neji? ¿CON NEJI??!! ¿Cómo era posible que ese indigno se hubiera ganado el corazón de Lee? Gaara se tomó con fuerza del marco de la ventana, a punto de quebrarlo.
Pero no podía evitarlo, el coraje lo hacía varias veces más fuerte y peligroso, de solo imaginar que Neji estaba tocando a Lee, aunque fuera un saludo de manos, lo volvía loco.
Debía tranquilizarse, y lo sabía, pero se había vuelto tan difícil, ya no se controlaba…si seguía así Shukaku saldría a la luz del día.
Terminó destruyendo el marco de la ventana en miles de pedazos. Pero logró calmar un poco sus ansias de sangre Hyuuga.
Ahora que su mente se iba enfriando poco a poco, tenía la oportunidad de analizarlo.
Primero que nada, la fuente de información: Naruto.
No era que no confiara en Naruto, el decía que eran “amigos” y “supuestamente” los amigos siempre eran sinceros. Pero…Naruto también se caracterizaba por ser un dobe cualquiera, cabeza hueca y ninja hablador de la aldea de la hoja.
No dudaba que tal vez simplemente los había vistos juntos pero para el ya eran pareja declarada.
Mmhh…eso era lo más probable, siii!! Se estaba tomando las cosas demasiado en serio, seguramente todo era un mal entendido y Lee seguía siendo el mismo adorable soltero del que se había enamorado.
Pero…
Y si era verdad…
Si Lee en realidad se había enamorado de Neji y estaban saliendo juntos.
Gaara no se sentía lo suficientemente fuerte como para soportarlo. De ser así, que Lee estuviera con otro, estaba prácticamente seguro de que lo mataría y luego el se quitaría la vida.
El pelinegro no era capaz de entenderlo, y eso era lo que más le fastidiaba, Lee no sabía que le pertenecía, a él y a nadie más. Desde hace años que era de su propiedad y cada vez que volvía a Konoha se aseguraba de que las cosas siguieran asi.
De que Lee continuara siendo suyo, tan puro y simple…como el amor obsesivo que le profesaba.
Imaginarlos juntos, abrazados, caminando por la calle…Besándose…
Y ya no pudo seguir pensando, sabía irremediablemente que era lo que seguía y si lo llegaba siquiera a visualizar en su cabeza entones si Shukaku saldría para matarlos a todos.
Las imágenes hacían que su pecho doliera…
Pasando las horas, el ambiente en el centro de Konoha se hizo festivo, los colores y la música llenaron la mente de sus aldeanos. No sabían que festejaban, pero por orden de Tsunade-sama, lo hacían…
Aunque no de mala gana...
-Lee!!-
Neji se acercó corriendo a donde estaba el pelinegro, Lee se veía especialmente “interesante” esa noche. Con un kimono masculino verde que se asía levemente a su cintura y el cabello negro que ahora estaba con las puntas hacia fuera, todavía escurriendo algunas gotitas de agua.
-Neji-kun…¿Qué sucede??...Acaso…ya has…- y le miró cómplicemente.
Neji no pudo evitar sonrojarse. ¡Claro que no! Aún era muy temprano como para andar soltando declaraciones de amor a la chica de sus sueños.
-Ne…En realidad…tengo un problema…- Y se acercó a Lee para susurrarle discretamente en el oído.
-¿¡¡OLVIDASTE TODO LO QUE ENSAYAMOS??!!-. gritó Lee prácticamente encolerizado.-
Neji no podía ser más torpe, todos los días que ensayaron, el cansancio con el que terminaban, sin mencionar lo difícil que fue conseguir la peluca, para que al final le ganaran los nervios al Hyuuga y todo su valor se fuera al caño en unas cuantas horas.
-Por favor…solo, solo una vez más…- rogó Neji al punto de ponerse de rodillas, el también estaba avergonzado de su actitud pero no pudo evitarlo!!! De solo pensar que iba a declararse lo había hecho vomitar horas antes, justo cuando iba a salir de su casa!!- En verdad necesito que esto salga perfecto!-
Rocke Lee suspiró fastidiado, le gustaba ayudar, nunca puso un pero a lo que Neji le pedía, pero…las cosas tenían un límite y para la mala suerte del poseedor del Byakugan, Lee estaba llegando al suyo.
-Esta bien, pero solo una vez…¡Y más te vale que para mañana tu y Tenten sean pareja!!-
Lo tomó de la mano y lo encaminó al bosque, a un lugar lejos de la música y donde pudieran ensayar tranquilos.
Llegaron a un claro iluminado por la luna, se colocaron uno frente al otro y se miraron con firmeza.
Hacer ese acto era difícil, y aparentemente no ayudaba en nada a Neji.
-¿Sabes que? Borremos toda la parte del porque, mejor simplemente voy al grano…- sugirió Neji, seguramente entre menos hablara más fácil se le haría y por ende el nerviosismo de hacerlo sería más corto.-
Lee asintió con cara de enojo ¡Si eso pensaba entonces se pudieron haber ahorrado las semanas de planificar el guión y de ensayos que duraban horas!!!
-Te amo…-
La forma tan directa de hablar de Neji tomó a Lee por sorpresa, y no pudo evitar ponerse rojo. El no era la clase de personas acostumbradas a escuchar ese tipo de declaraciones, aunque fueran fingidas.
Para su asombro, Neji se fue acercando, despacio y con una sonrisa de superioridad muy leve en la cara. El sonrojo en sus mejillas se incrementó al doble cuando sintió el aliento de su eterno rival haciéndole cosquillas en el lóbulo de su oreja.
-Solo…imagina que soy Gaara…- pidió Neji con voz suave y pastosa.-
Lee abrió los ojos asombrado antes de lanzar a Neji con ambas manos. ¿Cómo…como era posible que le dijera eso?? ¿Acaso…lo sabía??No!! era imposible, lo había escondido de forma magistral. Ni siquiera Gai-sensei lo había notado.
Aunque su garganta y su mente quisieron replicar, Lee no dijo nada, solo fijó los ojos en Neji que reía ante su reacción tan impredecible e infantil.
-Tranquilo Lee…no es algo que…-
Y no pudo terminar de decir la frase porque un montón de arena le dio de lleno en el pecho lanzándolo quince metros en dirección hacía un árbol donde su cuerpo se dobló terriblemente hacia atrás.
Tan fuerte fue el impacto que Lee pudo ver como Neji escupía sangre.
-¡NEJI!!- corrió hacia donde estaba su archi rival.-
-Detente!!-
La voz penetró dentro de su cuerpo, la reconocía y perfectamente. Dio media vuelta y la figura de Gaara llenó sus pupilas.
Estaba escondido en la oscuridad de tal forma que pudo haber estado ahí durante horas y nadie se habría enterado de su paradero.
-¡¿Por qué demonios atacaste a Neji?!!-
Gaara no se dignó a responder, el coraje le comía las entrañas y la razón, lo único que ocupaba su mente era destruir a Neji, en esparcir su sangre y destrozar su cuerpo.
Ver a Lee intentando correr para auxiliarlo solo ayudaba a empeorar las cosas.
-Veo…que ya te enteraste…- exclamó Neji desde el otro lado del claro, levantándose a duras penas y sosteniendo una parte de su estómago especialmente adolorida. Gaara se detuvo…-
-Entonces…-
-Si, Lee y yo somos pareja…-
-¿¿¿NANI?? Pero que tontería estas diciendo, Neji??- gritó Lee, sumamente enfadado. ¿Cómo se atrevía Neji a decir eso, y peor, en frente de Gaara??-
Todo menos frente a Gaara. ¿Por qué le decía tal cosa?? ¿Acaso deseaba que Gaara se alejara de el??
Neji…podía ser tan cruel cuando se lo proponía.
-Ya basta de fingir, Lee…deja que lo sepa…de todas formas se iba a enterar tarde o temprano.-
-¡Basta, Neji!!- rogó Lee…¡Que se callara!! Que dejara de mentir…le estaba alejando cada vez más de Gaara.-
La arena no perdió tiempo y aprisionó a Neji contra el mismo árbol con el que lo había estampado. Era imposible que Lee estuviera con Neji, el jamás iba a permitir que alguien más tocara a su hermosa bestia verde, nadie, así tuviera que matar para cumplir su cometido.
La sangre que Neji escupía aumentó en cantidad.
-¿¡¡Y a ti en que demonios te afecta que este con Lee?!!- le gritó Hyuuga con ira.- No es una persona importante para ti, ni siquiera te cae bien!! ¿No puedes dejarlo ser feliz??!!!-
Gaara no se crispó, no dijo nada y no miró a Neji durante unos segundos.
-Cállate, insecto…-Gaara se fue acercando, tan lento y a la vez tan peligroso que cada pisada resonaba en la cabeza de los otros dos. Neji era la cosa (ni siquiera se ganaba el apelativo de “persona”) que más odiaba en este mundo, no merecía vivir y sobre todas las cosas no se merecía a Lee.- Eres un tonto ingenuo…¿Acaso no lo has visto?? LEE ES MIO!!!- finalizó con un grito inhumano que se pudo escuchar hasta en la aldea.-
La gente, Lee y Neji se quedaron en silencio.
Fue como si una piedra hubiera golpeado a Gaara en la cabeza, despertó de su trance asesino-maniaco-sediento de sangre y miró hacía los lados como para asegurarse de lo que había hecho y dicho.
La cara de Lee era todo un poema indescifrable, un poema muy rojo, mientras que Neji sonreía con la cabeza agachada. ¡Gaara había caído perfectamente en su trampa!!
Pero no hubo tiempo de pedir explicaciones, aún quedaba el estado de Neji, así que evitando encontrarse con Gaara o siquiera mirarlo a los ojos Lee se acercó a donde estaba su compañero.
Neji no parecía muy herido, solo con algunas fracturas de huesos, nada que una sesión con Tasunade-sama no pudiera reparar. Estaba tan absorto en su tarea de evitar pensar en las palabras de Gaara y ayudar a Neji que no fue capaz de captar el momento en que el pelirrojo quedó a solo pasos de donde estaban ambos.
Neji volteó a verlo, aún sin quitar la mirada de “Si, Lee es mío, que te quede claro…”
-¿Por qué??-
Replicó Gaara con voz clara. Lee no quiso voltear, aunque fue capaz de escucharlo, se tomó demasiado tiempo en sacar a Neji de la arena que ahora se apretaba aún más.
-¿Por qué lo ayudas??-
Lee siguió sin voltear a verlo, pero por lo menos esta vez le contestó.
-Porque Neji…es una persona importante para mí…-
Y fue como si le quebraran el corazón a Gaara. Se mordió el labio intentando no llorar pero fue inútil, las lágrimas surcaron sus mejillas.
Nunca supo que era el amor, jamás lo sintió en carne propia, pero aquello que le dolía en el pecho, que le evitaba dormir o pensar en otra cosa que no fuera Lee…tenía que serlo.
Muchas veces se lo dijeron, el amor duele y valla que dolía. ¿Acaso así tenía que ser siempre?? Siempre debía de estar solo??
Había sufrido toda la vida y cuando pensó que había encontrado a la persona que terminaría con eso de una vez por todas, resultaba que estaba enamorado de otro.
Dejó que el amor por Lee creciera tanto que ya no pudo retenerlo, tenía que gritarlo aunque su garganta se rompiera, aunque supiera que todo estaba dicho.
Aunque al terminar de decirlo estuviera aún más solo…
-¿¿POR QUÉ???!!! ¿POR QUÉ EL??- comenzó a decir, sin darle tiempo a Lee de darse la vuelta.- ¿¡¡¡ES QUE ACASO NO ME VES!!? ¡Que tengo que hacer para que me mires solo a mi!!??-
Se acercó a la espalda de su pelinegro y lo abrazó con tal fuerza que las telas desaparecieron por un segundo. Lee tenía la mirada desorbitada, no podía dar crédito a lo que escuchaba, ni siquiera terminaba de creer que Gaara estuviera llorando.
Solo era capaz de sentir, y en ese momento, la esencia de Gaara, su calor, sus manos apretándolo con desesperación y su aliento chocando contra su cuello era lo único que le permitía saber que no estaba soñando.
-Por favor, solo quédate conmigo…Yo, te prometo que no te arrepentirás, te haré feliz…- siguió Gaara, apretando un poco más su agarre.- Nunca sufrirás, nunca te haré llorar…-
-Gaara…kun…- dijo Lee a duras penas, sin ser capaz aún de moverse.-
-Te amo…-
-Papa!! ¿En verdad gritaste eso?? ¿En verdad dijiste que Mami Lee era tuya???- cuestionó Kazuyo a su padre con el kanji en la frente.-
Gaara miraba hacia otro lado y no le dijo nada, pero asintió un poquito, avergonzado de lo tonto e impulsivo que se comportó en ese momento.
-wow…que vergonzoso debió haber sido…- declaró Kazuyo finalmente…-
-No tienes idea…- soltó Gaara mirándola por fin…-
-A mi me gusto…- recalcó Lee con una sonrisa. Kazuyo y Gaara lo miraron, era cierto, Lee no entendía ni un pepino en asuntos del corazón.
-Je…- rió bobamente el pelinegro al notar las miradas.- Bueno…es que era algo que esperaba escuchar desde hace mucho tiempo…- declaró mientras jugaba con sus deditos…-
-¿Entonces tu también llevabas tiempo enamorado de Papa Gaara??-
-Si…mucho antes del incidente con el paraguas…-
-¿Y porque no le decías nada a papi??- Kazuyo miró a Lee con sus ojitos inocentes, la historia de sus padres cada vez era más interesante.
-Porque…estaba acostumbrado a los rechazos…- exclamó Lee luego de soltar un enorme suspiro que estaba retenido en su pecho.- ¿De que me servía declararme si al final de todos modos me dirían que no?? Prefería tragarme el sentimiento por años hasta que desapareciera…-
Y Kazuyo se sintió triste por su mami, ¿Acostumbrado a los rechazos?? ¿Cuántos debía de sufrir una persona como para hacer esa declaración tan pesimista??
No tuvo tiempo de responder su propia pregunta antes de que su mami Lee la tomara en brazos y le diera un fuerte abrazo cálido.
-Por eso agradezco que tu padre fuera tan celoso…sin sus palabras y acciones jamás habríamos conocido los sentimientos del otro, no estaríamos juntos y tu y Kouryu no estarían aquí para alegrar mi vida.- le sonrió su mami con ternura.
Kazuyo se mordió el labio y escondió la cabeza entre sus brazos, indispuesta a mirar a Lee. El pelinegro se sorprendió un poco, pero no dijo nada, de todos modos ya sabía que era lo que le sucedía.
Su pequeña era una persona muy fuerte, y siempre estaba dispuesta a continuar así, por eso cada vez que quería llorar se mordía el labio a tal punto que quedaba rojo, solo para no hacerlo (=P).
-¿Vas a llorar?- le preguntó suavemente, enternecido de lo emocional que Kazuyo llegaba a ser.-
-¡Nhio!!!- gritó con la voz gangosa.-
Lee sonrió nuevamente, sintiendo como el calor de las lágrimas de la infante caían sobre su ropa.