Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

EL LIBERTADOR por vITALY

[Reviews - 5]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo: Hola a todas muchas gracias por leer esta historia, esta es la segunda parte, espero les guste igual o mas que los dos cap anteriores, gracias por sus reviews en especial a Ayesha porque es una de mis autoras favoritas y ha sido una fuerte inspiracion... ya te lo habia dicho?? jaja...

EL LIBERTADOR

Por vITALY

Parte 2

El halo de la verdad es invisible a los ojos, solo los oscuros propósitos son los que se propagan...

****

- Esperen aquí...- ordenó a sus acompañantes, ellos obedecieron sin chistar.

Mirage se acercó al par de guardias que custodiaban la entrada y dio su nombre, inmediatamente fue dirigido al interior del mausoleo.

Fue llevado por un largo pasillo completamente sellado, luces provenientes de las paredes le escaneaba cada segundo, sabia de ese método de protección, las armas muchas veces no solo se llevaban bajo la ropa, había algunos nativos que podían llevarlas ocultas bajo su propia carne, además daban un informe a detalle de sus poderes y puntos débiles en caso de un ataque.

Al final se vislumbró una entrada que permanecía cerrada, cuando estuvieron frente a ella uno de los guardias, tecleó un número de seguridad, y la puerta fue abierta instantáneamente.

Aquel lugar si lucia como otra dimensión, un jardín dentro de un cápsula de cristal, a imagen y semejante del planeta Num.

Ahí estaba Madre, junto a ella, la teniente Unah Ferguson.

Esta demás decir que su vista fue directamente hacia la joven pelirroja.

Unah se adelantó unos pasos, debiendo ser cuidadosa con el verde pasto bajo sus pies.

- Madre no es ni parecido a lo que imaginaba- murmuró, un tanto extrañado.

- El tiempo pasa Mirage... aun en los Elegidos…

Ambos observaron a la anciana mujer que con lentos movimientos regaba las muchas flores sembradas.

Padre le inspeccionó minuciosamente, al tiempo que levitaba hacia El.

Trevor sintió cierto nerviosismo al sentirse observado. Lucia solo como un niño curioso, y no como uno de los elegidos.

- Mirage…- le llamaron a sus espaldas y se giró de inmediato- Bienvenido al Comité- sonrió con ternura.

Valla si eran raros esos seres todopoderosos, aunque tampoco lucían tan fantásticos ni extraordinarios, pensó con disimulado desdén.

- Supongo que la teniente Ferguson lo ha puesto al tanto de la misión que deseamos encomendarle- su paso fue tranquilo y relajado a pesar de la temperatura del ambiente, muy posible bajo cero y dado que al igual que Padre, su ropa era delgada y sus pies estaban sin calzado.

- Entregar a Siena.

- Así es, usted será ayudado por Unah a infiltrarse dentro de la tripulación de la nave Gideon, que comanda ese terrible robot, ganara su confianza, además de tenernos informados de sus movimientos, de sus planes de invasión, encontrara la forma de entregarlo a nosotros, para si dar por terminado con su legado de muerte y destrucción. Se le será juzgado y procesado según a la leyes intergalácticas, por cada uno de sus delitos.

Su voz relajada se tensó en aquel momento como si guardara un odio personal contra el robot, mas que la aversión normal hacia un criminal o enemigo del comité.

- Estoy enterado de lo que quiere de mi, se que desea que haga- replicó ladino- pero usted esta conciente de lo que quiero yo…

Si Unah hubiese podido le hubiera propinado un buen golpe ante aquella terrible afrenta.

Madre se acercó aun mas, quizás la mayor cercanía que hasta ese momento había mantenido con alguien en muchos años, los guardias se pusieron en posición de alerta, solo bastaba un movimiento extraño por parte de Mirage para inmovilizarlo con alguna de sus letales armas, que le apuntaban de todas direcciones.

- Me gustaría poder ser sincera con usted… supongo que ha notado algo extraño en mi imperiosa necesidad de apresar al robot Siena.

Mirage no respondió, pero la respuesta estaba de más.

Aunque Trevor no lo pensaba, Madre se había tomado la molestia de investigarlo, así que además de haber sido un excelente soldado lleno de cualidades, en su tiempo en el magnánimo, ya desde entonces se sabía que el carácter rebelde iba incluido en el paquete.

- Es cierto, además de que se ha intentando por todos los medios capturarlo por sus innumerables monstruosidades, no se ha logrado… no es ese el verdadero motivo de mi ira en contra de El- sonrió cómplice.

Con un movimiento de cabeza de la anciana, lo guardias se alejaron, hasta Unah se detuvo, solo ellos y el pequeño calvo levitando les siguió en su andar.

- Creo que conoce los desastre, las matanzas, la destrucción que el robot Siena a dejado a su paso, el convencimiento irracional que ha llevado a cabo, prometiendo que el es el medio de paz, cuando al mismo tiempo va creando caos, solo para derrocarnos y erigirse como dueño absoluto del universo entero.

- Lo se- dijo con aire serio, aunque en el bajo mundo corrían otras versiones ¿Quién tenia la razón? No importaba en lo mas mínimo, era traficante de armas, la guerra solo aumentaba su trabajo, además si Siena era el tan mencionado Libertador o solo un embustero asesino, era su pellejo el que estaría en juego, si fallaba en su misión.

- Esta batalla comenzó aun antes de que usted naciera- rememoró nostálgica- cuando creamos al robot Siena.

- ¿Ustedes lo crearon?- cuestionó aunque guardándose la ironía para si.

- Así es, el peor error de nuestras vidas fue ese- se giró para ver al pequeño que bostezaba exhausto, acariciándole la calva con aire maternal- en aquel entonces no creímos que podría alcanzar los poderes y la autonomía que posee ahora, así como su ambición, simplemente creímos estúpidamente que realizaría el fin para el que fue instituido y nada mas.

Calló un momento, aquello costaba mucho el ser revelado.

- El motivo de su creación fue otro muy diferente- un nudo en la garganta le volvió la voz casi un hilo- proteger al Pilar.

¿El Pilar? Cuestionó su mente, ¿No era aquello solo un mito?

- Tuve la fortuna de poseer una hermosa familia, antes de ser convocada, Taita mi hija, Novac su esposo y mi nieto, el pequeño Farel, quien desde pequeño denoto su poderío, su extraordinario visión, sus aptitudes de mando, lo único de casta Numita.

Mirage desvió la vista un momento de su interlocutora, recordaba que Madre era del legendario planeta Num, planeta que prohibió la mezcla con los humanos, por miedo a perder su sangre pura.

Además creía que los Elegidos eran separados del resto desde el alumbramiento, ocultándoles el origen de su procreación, y los lazos de sangre.

Para ese entonces Padre había formado una pequeña burbuja, muy semejante a un esfera de cristal, en ella podía apreciarse un hermoso paisaje abstracto.

El planeta Num…

En un campo de mandalias* corrían contentos una hermosa mujer, un hombre igualmente apuesto, para llegar al encuentro de un pequeño de a lo sumo tres años. Pero lo mas sobresaliente de aquel cuadro, era el niño, tenia una expresión demasiado madura para su edad y unos ojos…

Padre al ver la fijeza de Trevor sobre el menor, deshizo el hechizo dando por terminado su viaje al pasado.

- Ellos eran ¡ah cuanto tiempo!- un par de lagrimas surcaron sus mejillas, retomando el relato y la atención de Mirage- no se si tuve la fortuna o la desdicha de que mi nieto Farel fuera tan único, ya que por su línea ancestral, la alineación de los planetas en su nacimiento, así como sus sorprendentes poderes, era la encarnación del Pilar.

Podía verse en su rostro y denotarse en su voz un orgullo tangible.

- Dado a conocer esto fue educado para que a su mayoría de edad tomara el mando del comité y del universo entero.

Que diferencia había entre ellos y el tan proclamado Libertador, siempre buscando el control de un universo asqueado y sumiso.

- Fue ahí que decidimos crear a ese maldita maquina, para proteger la virtud de Farel, pero a todo lo previsto fue Siena quien le robó la vida a Farel, a sus padres y terminando con el planeta Num.

Unas lágrimas más gruesas que las anteriores le quitaron el habla, por un momento Trevor sintió su profundo dolor, pero intentó mantener la mente fría, recapitulando en su mente lo recién dicho, dándole tiempo a la mujer de sobreponerse ante sus terribles recuerdos.

Siena había sido creado para cuidar del Farel, recordaba que alguna vez su Padre le había comentado sobre el planeta Num, sobre sus prodigiosos nativos, como su destrucción gracias a una explosión masiva de gases acumulados en el planeta. Mas nunca comentó nada sobre el robot Siena, aunque a decir verdad nadie mas sabia esta versión.

- Como vera uno de los crímenes que deseo que pague es la muerte de mi familia entera…- resopló con ira contenida, sus ojos centellaron como lenguas de fuego en las irises amatistas.

No supo en ese momento porque, pero sintió que dentro de todo aquello, había un trasfondo bastante turbio, pero también coincidió con su razón de que no era su deber averiguarlo.

Detuvieron su andar, justo donde habían iniciado, Unah los miraba expectante.

- Si aun después de la historia que me ha contado… me niego- se aventuró a decir- ¿me obligaría? Digamos que usaría otros métodos de convencimiento.

Aquellas palabras tenían un doble sentido que saltaba a la vista, existía el rumor de que quienes se no sublevaban ante el comité, eran cruelmente asesinados y si alguno llegaba a quedar con vida terminaba sus días en alguna horrible prisión, en un planeta bajo.

Si Unah creyó que la desfachatez de Mirage tenia un límite, realmente se había equivocado, aquello era inaudito.

- Por supuesto que no- respondió Madre con un aire de inocencia e incredulidad ante tal idea.

- Ya no soy un militar…- recalcó esas palabras borrando al mismo tiempo su clásica sonrisa socarrona, deseaba dar a sus siguientes palabras la importancia debida.- ¿Sabe cuanto arriesgaría si somos descubiertos? No solo mi vida sino la de mi tripulación.

- Es cierto capitán Mirage, pero el propósito es justo, siempre se deben correr riesgos en las mayores encomiendas, además si logra su cometido será perfectamente recompensado, no tenga duda de ello- sonrió honesta- así como borrados sus antecedentes de los archivos del Comité.

Aquello era una oferta tentadora, arriesgada pero tentadora, tanto a El como a sus hombres les agradaba la aventura, además si la paga era buena, podrían servir para dejar de lado las actividades ¨poco¨ legales que realizaba.

- Muy bien, me ha convencido- suspiró con fingido pesar- aclaro que no es por lo bueno, que espero, sea mi recompensa, sino por que un ser así debe ser detenido.

Unah desvió la vista con fastidio, Mirage era un pésimo actor.

- Correcto- musitó la mujer mayor poco convencida, además era de esperar, después de su repentina deserción del ejercito magnánimo, se había vuelto mercenario y traficante- pónganse de acuerdo usted y la teniente Ferguson sobre la misión.

- Lo haré- sonrió abiertamente.

Unah como odiaba esa sonrisa de satisfacción, que parecía llevaba tatuada al rostro.

Madre se acercó a Padre y le tomó de la mano para irse, el chico perezosamente desdoblo sus delgadas piernas, para comenzar a caminar.

Antes de alejarse Padre se giró a mirarle por última vez, Mirage lo sintió. Casi podía sentir en su cuerpo el frío de esa mirada traspasarle como si fuera un simple holograma, era como si pudiera ver mas allá de lo que esta a la vista, quizás aunque se oyera muy estupido, mas allá de su carne, incluso de su alma, aunque claro, por algo ese mocoso era uno de los Elegidos, algún don especial debía de tener, pero de que era escalofriante, lo era.

- Ese mocoso es raro- murmuró para si mismo, pero no lo suficientemente bajo para que Unah no le escuchara.

- Deja al niño tranquilo- recriminó molesta- ten mas respeto.

Uno de los guardias se acercó para escoltarles a la salida, su estancia dentro del Comité había terminado.

 

* Mandalias: hermosas flores de color violáceo,

****

 

- OK, soy todo oídos- sentenció Trevor una vez que salieron del edificio.

- Bien, primero que nada debes saber que estoy infiltrada en la tripulación del Gideon.

- ¡Valla!- exclamó con sorpresa.

- Tengo entendido que Siena esta interesado en encontrar algo- sus ojos azules mostraron incertidumbre- no estoy enterada de lo que es en si, solo se que con ello podrá incrementar su poder, volviéndole muy superior a los poderes que poseen los elegidos, lo cual declinaría la balanza a su favor en la inminente guerra.

- ¿Y?

- Tu serás su buscador, ha escuchado de ti, al comentarle que te conocía, me asignaron la tarea de convencerte, por lo que veo estas bastante solicitado…- murmuró irónica, mas sin perder su fría actitud militar.

- ¿Así que por ambos lados salgo ganando?

- Ni lo pienses Mirage- le retó con la mirada.

- Esta bien, esta bien… aunque tampoco estaría demás sopesar ambas ofertas- bromeó sin saber que no era el mejor momento para ello.

- No me obligues Mirage a encarcelarte ahora mismo, por parte del Comité podemos buscar a otro, mejores soldados que tu hay muchos, y por parte de Siena, seguro que …

- Tranquila era un broma

- Pues para broma esta muy fuera de lugar…

- ¿Cuándo cambiaste tanto? Guardas mucho rencor dentro de ti, que no sabes reconocer un simple intento de diversión- susurró algo escéptico.

- La vida continuó después de que te fuiste, para mi no ha sido fácil y sobre mi rencor no creo que esperaras que te recibiera con los brazos abiertos después de que me dejaras- se le quebró la voz y antes siquiera que pudiera evitarlo sus ojos vidriaron traicioneros, al fin de cuentas, Trevor Mirage no era misión superada.

- Yo no te deje, tu me traicionaste- reaccionó con firmeza, reemplazando su sonrisa, por una mueca difusa entre dolor y recelo.

- Desertaste… me pediste abandonar mi carrera militar, desertar yo también, ¡sabes a la perfección cuanto le cuesta a un Danton* entrar al magnánimo!

- Yo no podía quedarme aquí y seguir como si nada hubiese sucedido- vaciló por un momento, al recordar.

- ¿Hasta cuando vas a entender que era tu deber? ¡La muerte de algunos es necesaria! Más si escarmienta el resto- estaba notoriamente alterada ante la necedad del rubio de sentirse culpable.

- No podía continuar como Capitán, esa muerte necesaria como tu la llamas, fue mas para probar mi lealtad que otra cosa, tu y yo lo sabemos- calló un momento para después continuar- por eso necesitaba alejarme de este mundo- señalo a su alrededor, había militares por todos lados, acatando ordenes, guardias escoltando esclavos, naves despegando, soldados heridos por alguna reciente batalla.

- Querías irte y que me fuera contigo…

- Te negaste, así que me fui solo.

- No me necesitabas, si así hubiera sido, te hubieras quedado o insistido una sola vez mas.

- Te conocía y sabía que aunque te fueras conmigo terminarías odiándome por dejar todo por mí, amabas y amas tanto el uniforme.

Unah meneó la cabeza intentando despejar sus pensamientos y con ello recuperar la compostura, secó de un solo manotazo las huellas húmedas de sus mejillas.

¡Valla si había sido difícil recordar para Unah Ferguson!

Pero para Mirage había sentido un cierto desahogo hablar del pasado, podía decirse que una extraña sensación de tranquilidad le envolvía en ese momento.

Sonrió nuevamente.

- ¿Y cuando partiremos?- cuestionó con sarcasmo, volviendo a ser el mismo patán infeliz de siempre, además sabia que Unah le agradecía el gesto.

- Te veo en una hora en el área de despegue

- Hablare con mi tripulación te seguiremos…

- Muy bien- se encaminó la joven alejándose presurosa.

- Bienvenido a la acción- dijo para si mismo, con un poco disimulada alegría- a los chicos les va a encantar.

 

 

* Danton: Ser sin ningún tipo de habilidad física.

*****

Los chicos como El solía llamarles era sus hermanos de alma, les había conocido en un mugriento bar del planeta Mampara, estaba perdido en alcohol, le habían salvado de una muerte segura a manos de un reptilo*.

Era Ges un acuantico*, Luanda un argelo*, Mina una halana* y Thudor un anciano del antiguo ejercito libertador, había desertado al igual que El, aseguraba ser humano autentico*, no un adaptado* como Mirage.

*****

* Reptilo: Humanoide con forma de reptil, cara de cocodrilo y cola de cobra, con la cual estrangula a sus victimas hasta morir, nativo del planeta Mampara.

 

* Acuantico: Humanoide con escamas, nativo el planeta Atlantis, tiene la habilidad de respirar tanto fuera como dentro del agua por tiempo ilimitado.

 

* Argelo: ser mítico, quimera entre humano y ave, puede leer la mente y volar incluso fuera de la atmósfera.

 

* Halana: nativa del planeta Halan, sentidos súper desarrollados.

 

* Auténticos: legendarios del planeta tierra, se dice que en el éxodo muchas naves se perdieron en el espacio y que su tripulación no sufrió el paso del tiempo.

 

* Adaptado: nacido de humanos auténticos, engendrados en distintos planetas, nacen con ciertos poderes, pero también tienen la capacidad de obtenerlos por medio de entrenamiento.

 

Continuara…

 

Nota de la autora:

 

Gracias por leer la tercera parte de El Libertador, espero que la hallan disfrutado, tanto como yo de escribirla, este es un cap un poco mas largo, seguiremos mas o menos así, espero cualquier sugerencia, comentario, critica constructiva, bomba molotov… será bien recibida, como review o si gustan pueden escribirme a mi correo vitaly_kun@yahoo.com.mx. Gracias y hasta el próximo cap.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

.

Notas finales:  

Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).