¡Yaoi Full House! por Uzumaki Yuki

¡Yaoi Full House!

Episodio Once: Sentimientos

Sasuke se encontraba sentado en su cama, pensando en muchas cosas... las cosas dichas por Gaara que quería estar junto a él y las palabras dichas hace unos minutos atrás por Naruto.

"-Ese hombre... Sai, ¿esta bien que me guste-ttebayo?-" Rondaba en sus pensamientos aquello, el no supo que decirle y al igual como hizo con Gaara, Sasuke se levanto sin nada mas que decir y se fue directo a su habitación en la situación que le encontramos ahora. Luego de dar un largo suspiro, abrió el cajón donde puso el contrato de matrimonio, lo quedó observando varios minutos, hasta que ya cansado decidió acostarse y dormir.

Al otro día como costumbre, el moreno se aseó. Fue al baño a lavar sus dientes, luego de ello se quedó observando el cepillo de dientes del rubio, lo tomó y lo contempló pensando quizás muchas cosas a la vez. Pero sus pensamientos fueron cortados cuando cierta cabeza rubia entro al baño, Sasuke se llevó la mano tras su espalda ocultando lo que tenia en sus manos. El rubio le miró curioso, mientras daba un gran bostezo y se estiraba. El moreno para disimular comenzó a hablar:

- Vaya, vaya... ¿nuestro dobe se ha levantado temprano para hacer el desayuno?- El rubio le miró enojado. El moreno comprendió el porque.

- Mmm... verdad que no puedo llamarte dobe- Lo pensó un momento, - ¿Entonces como debería llamarte?... mmm... no se me ocurre nada, usuratonkachi me agrada llamarte así- dijo dando una sonrisa de medio lado.

- ¿¡Qué has dicho Teme!?- Al rubio comenzaba a salirle la venita enfurecida por las palabras del moreno, mientras elevaba su puño. Estaba enfadado.

- Ohh... ¿nuestro Usuratonkachi se ha levantado temprano para hacer el desayuno?, Muy bien, usuratonkachi- dijo aun con aquella sonrisa, mientras daba unas palmadas en la espalda al rubio. Este por su parte decidió ignorarle. Ya le conocía, no valía la pena discutir. Comenzó a mirar el lavamanos y los accesorios cerca de el y puso una mueca extraña.

- ¿Dónde está?- el moreno sabia a que se refería, no valía la pena ocultar lo que estaba haciendo, así que le entregó el cepillo. El rubio se lo arrebato al instante y le miró con desconfianza.

- No he hecho nada- dijo el moreno encogiéndose de hombro no dándole importancia y se marchó del baño. Naruto comenzó a olerlo, no creía mucho en las palabras del moreno, lo limpió y se lavo los dientes. Sasuke se vistió y bajo al comedor a desayunar. Y cual fue su sorpresa al ver todos los implementos para hacer el desayuno, pero no el desayuno ya preparado.

- Tsk, Usuratonkachi- y molesto, comenzó a hacer el desayuno. Ya sabía que Naruto le había dejado todo para que él lo hiciera. Sasuke calentó la leche, hizo las tostadas y puso unas frutas más un zumo de naranja, todo en la mesa del comedor. Cuando Naruto ya estaba listo, bajó y se encontró con Sasuke sentado en la mesa mirándole con el ceño fruncido como este bajaba por las escaleras, el rubio solo dio una sonrisa zorruna divertida y se sentó a desayunar junto a su "marido".

- Debo salir-ttebayo - Anunció el rubio antes de darle un mordisco a la tostada. El moreno tomó de su taza de café.

- ¿Y ahora por qué?- No lo había notado, pero en su voz se notaba como algo enfadado.

- Acordamos hacerlo cuando estuviera ocupado- Decía mientras tomaba un poco de su leche.

- ¿Y por qué estas ocupado?- el rubio bajó su vaso de leche y miró al azabache.

- Porque he quedado por la tarde con Sai- el moreno solo le miró por varios segundos, haciendo sentirse algo incomodo al rubio.

- ¿Que pasa?- El moreno bajo un poco su mirar a su taza de café. Para responder.

- No, nada...- tomo un poco de su café y miró nuevamente al rubio, - Así que tú y Sai, supongo cenaran juntos-

- Es lo más probable- dijo mientras se encogía de hombros y le daba una mordida a su tostada.

El moreno se sentía extraño, pero jamás lo daría por conocer. Solo hablaba como si nada le... ¿afectase?

- Va a invitarte a comer tu comida preferida o quizás que, pero algo bueno y sobretodo caro- dijo mientras desviaba su mirar.

- Yo le digo que no me gustan ese tipo de comidas caras-ttebayo, pero el insiste- dijo, mirando a otro lado. Las palabras del moreno, le hacían sentir algo decepcionado y no comprendía el porque. Sasuke observó esos zafiros que miraban por los grandes ventanales hacia el lago.

- Ahora que lo pienso... nunca te he invitado a cenar- el rubio le miró sorprendido, pero con un brillo en sus orbes; - Siempre rompo las promesas- el rubio negó levemente con la cabeza. No le gustaba ver al moreno cabizbajo y hablando así; - Naruto...-

- Dime-ttebayo -

- Si quieres estar con Sai, adelante. Puedes... hacerlo- el rubio le miró sorprendido, - No necesitas mi permiso- le costó decirlo, pero era lo que pensaba.- Tu corazón no estaba en el contrato. Nuestro matrimonio puede ser un negocio... demo, no nos lo tomamos así. Tu corazón... es tuyo-.

Naruto por su parte, tras esas palabras sintió un nudo en su garganta. Desvió su mirar, sentía una mezcla de sentimientos, tristeza, decepción y rabia... no comprendía mucho las últimas. Al menos el moreno había sido sincero con el, pero todos conocemos a Naruto, un cabezota de primera clase. El rubio no respondió, solo se levantó de su lugar, dejó los platos en el lavalosas. Se dirigió al bañó lavó sus dientes y luego se encaminó a su habitación, tomo una parte de su escrito que también debía entregar y bajó, no mirando si quizás el moreno se había marchado, cerró la puerta y habló.

- Eres un Teme.... Cierto-ttebayo. Mis sentimientos son míos, así que desde ahora haré lo que se me plazca con ellos- dijo enojado, pero a la ves derrotado y triste mientras se iba por la colina para luego esperar el bus.

Lo que no sabía era que el moreno, seguía en la mesa del comedor y había escuchado las palabras del rubio, este tampoco hablaba muy bajo.

- Es lo que siempre deberías hacer, usuratonkachi- dio una media sonrisa desganada. Sin duda la conversación lo había dejado con una sensación de vació.

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El rubio se encontraba enfrente de Sai, este leía partes del escrito, luego de estar así varios minutos, levantó su mirar al rubio, dando una de sus típicas sonrisas.

- Se ha vuelto mas brillante, así que el trabajo esta mucho mejor-

- ¿En serio?, que alivio-ttebayo- suspiró agradecido el rubio ante las palabras del ojinegro, - Ne... ne-ttebayo, ¿se hará con la historia una película?- el moreno se cruzo de brazos mientras respondía.

- Bueno... yo no determino eso- el rubio posó su mirar en el ventanal mientras veía algunos aviones pasar.

- Es verdad-

- Seria necesario hacer un guión- le dijo el moreno, alentando al rubio para que se animara a escribir uno, este le dio una sonrisa; - Ya que has escrito la historia, te gustaría hacer el guión de la misma- el rubio le miró asombrado, no comprendiendo mucho las palabras.

- ¿Nani?... ¿watashi?-

- ¿Doushite?, ¿no te sientes preparado para escribirla como guión?-

- Yo... etto, quiero decir... gomen es que estoy un poco nervioso y creo que lo intentaría hacer bien, demo no estoy seguro-ttebayo - el moreno le miró con una de sus sonrisas sinceras, de esas que pocas veces daba.

- No hay necesidad de preocuparse, puedes hacerlo bien-el rubio le observó con una sonrisa de agradecimiento por las palabras dichas, - Preocúpate más tarde por esto. Vamos a cenar, que hemos pasado todo el día acá hablando de tu escrito. Ven te voy a invitar a comer algo delicioso- el rubio lo miró extrañado pero acepto. Se encaminaron al lugar donde debían ir.

- Wuauu sugoi-ttebayo, no suelo comer alimentos así. Pero en fin- ambos se encontraban en la plaza principal de la ciudad, comiendo unas hamburguesas con papas más unas bebidas.

- Ni yo, pero de ves en cuando se me antoja y esta fue la ocasión, además me gusta este lugar. Aquí hemos venido varias veces-

- Hai-ttebayo- decía el rubio mientras le daba un mordisco a su comida.

- Quería venir hace días, pero no podía-

- ¿Doushite-ttebayo? ¿Con esa ropa elegante es poco conveniente?- se burlo el rubio, ya que Sai siempre andaba muy bien vestido. Con ternos. Ambos rieron ante el comentario, luego las risas se fueron apagando. Sai noto al rubio mas callado, iba a decirle algo, pero este le interrumpió; - Y sobre lo otro... lo que me dijiste el otro día-ttebayo- el moreno le puso suma atención, ambos sabían a que se refreía el rubio; - En realidad, mi matrimonio con Sasuke esta programado para tres años-

- Si es por eso no te preocupes, yo me encargaré de los detalles-

- ¿Cómo te vas a encargar de los detalles?- le pregunto extrañado el rubio.

- Yo me ocuparé de ello, no te preocupes- el rubio, de pronto se desespero. Y a las ves se sintió extraño. Además ese asunto no tenia que meterse el moreno. Ese asunto era entre él y Sasuke.

- Creo que hay un malentendido, porque estoy de acuerdo con los términos. Es algo que acordamos él y yo, no estoy buscando la manera de deshacerme de ello-ttebayo-

- No, no es lo que quiero decir. A lo que me refería era que me preocupa que te sientas como si el contrato te atara- el rubio desvió su mirar, mientras veía a parejas pasar tranquilas, animadas por algún regalo que le había comprado su novio o cosas por el estilo.

- Mis sentimientos son míos-ttebayo-

- Gomen, si me he equivocado- el rubio negó con la cabeza.

- Ie, mi corazón es mió, pero no estoy seguro de las cosas. - se silenció un momento, para después retomar lo que decía, - Mira... en realidad siento aversión por Sasuke. Siempre me llama usuratonkachi, dobe, baka o lo que se le plazca, y no me trata bien. Siempre me carga de trabajo-ttebayo y siempre me grita. Además a él...- el rubio callo, mientras bajaba su mirar, observando sus zapatillas, - le gusta otra persona- elevo su mirar, mientras continuaba, - Y siempre me hace esperar- de pronto el rubio sintió un nudo en su garganta, sus ojos de humedecieron, l moreno le miró preocupado y también algo enfadado, pero no con el ubio, sino con cierto Uchiha; - Aun así-ttebayo, me siento feliz gracias a él- dio una media sonrisa, sus ojos estaban a punto de no aguantar mas las lagrimas, pero aun así las contuvo - Y por su culpa, me siento desconcertado-ttebayo, hehe... soy muy raro-ttebayo- el moreno le observaba, con una mezcla de sentimientos. Esas palabras habían cambiado las cosas.

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Sasuke se encontraba con un delantal puesto mientras en una mano llevaba un trapo, se encontraba limpiando las escaleras en forma de caracol que se encontraban en el lobby, escalón por escalón. Sin dejar nada sucio. Luego de limpiarlas, se dirigió a los ventanales grandes, limpiándolos tanto por dentro, como por fuera mientras saltaba lo mas alto que podía para alcanzar las partes de mas arriba, se resbalo varias veces, ya que el piso estaba recién limpio. Después de eso, se dirigió al partió a ahechar agua a las plantas, después se puso a limpiar los bancos y el gran banco como columpio. Luego de ello se dirigió hasta limpiar la parte que conectaba a la casa con la orilla del lago, solo penando quizás que cosas, porque en ningún momento se quejo por el trabajo realizado. Nos e le notaba muy animado que digamos.

Ya acabado con todo se dirigió dentro de la casa, se sirvió un zumo de naranja y se puso a leer. Ya habían pasado hartas horas así, de pronto miró su reloj, ya eran horas que el rubio estuviese de vuelta, vio el teléfono a su lado lo tomó y lo observó por hartos minutos. Pero todos sabemos cuan de orgulloso es el menor Uchiha y luego de mirar seguidamente el fono, lo dejó aun lado, se levantó y fue a la entrada de la casa, mientras sus ojos miraban la pequeña colina, por la cual debería llegar cierta cabeza rubia. De pronto pudo observar que un chico rubio, el cual el conocía muy bien iba caminando a paso lento por la colina, el moreno dio una media sonrisa, el rubio ya estaba llegando cuando el moreno le llamo.

- Naruto- el rubio le observó extrañado, que hacia allí y llamadole así más una sonrisa en su rostro. El rubio levantó su mano en señal de saludo. El moreno hizo lo mismo, luego ambos entraron a la casa. Naruto fue directo a la cocina, para servirse un poco de su dichoso ramen, mientras el moreno, se servia un zumo, y algo para picar.

- ¿Has esperado mucho-ttebayo?- dijo con una sonrisa mientras se sentaba en el comedor con su bol de ramen instantáneo.

- Ie, ie... justo cuando llegabas, llegue yo- mintió, pero su orgullo siempre le ganaba. El rubio se enfado, porque además de que el se había apresurado porque no quería ver al moreno aun, este le gritaba eso en la cara.

- Tsk... pues deberías haber venido más tarde-ttebayo- habló en un susurro. Pero el moreno le alcanzó a escuchar.

- ¿Nani?-

- ¿Y por qué esperaste? ¡¿Has esperado a que te hiciera la comida-ttebayo?!- pero es que el moreno, no hacia nada por si mismo.

- Pues claro, he estado esperando a que vinieras y me hicieras la comida, ¿por qué?- le hablo altanero. El rubio le hablo en el mismo tono.

- ¿Limpiaste como te dije que lo hicieras-ttebayo?-

- ¿Limpiar?- dejo lo que comía para abrir sus brazos como mostrando la casa, mas una sonrisa de "yo soy lo mejor del mundo"; - ¿No le has echado un vistazo? ¿Ves lo limpio que está? Muy limpio, y no me puedes decir lo contrario- dijo ya enojado el moreno, ¡si limpio hasta el punte!, el rubio solo dio una mueca de que cortaran el tema, mientras comía sus fideos del ramen. El moreno comió un poco de su especie de cóctel mientras hablaba, pero con la mirada en cualquier punto que no fuera la cara del rubio.

- ¿Se lo has dicho a Sai?-

- ¿Que cosa?- desvió su mirar a uno de los fideos, que no podía agarrar.

- Que no pasa nada si te gusta-

- Hai-ttebayo - dijo mientras al fin agarraba el fideo y se lo levaba a la boca.

- ¿Y que ha dicho?-

- ¿Qué va a decir-ttebayo?, que gracias- el moreno, le observó en aquel momento. - A partir de ahora, yo me encargaré de la relación. ¡Así que no necesitas preocuparte!- el moreno se enfado con esas palabras.

- ¿¡A quién le va a preocupar?!. ¡Es más les deseo lo mejor!- decía enfadado, su orgullo se había herido, pero el lo arreglaba con sus palabras.

- ¡Hai, nos irá bien-ttebayo!- decía enfadado el rubio también, ese Sasuke nos había nada de lo que sentía.

- ¡Que les vaya bien entonces!-

- ¡Ya te lo dije, nos irá de maravilla!- Sus tonos de voz iban en aumento mientras se miraban enojados, sumamente enojados.

- ¡Si, sean felices!-

- ¡Ya te he oído, y ya te he dicho que nos ira excelente-ttebayo!- el rubio no aguantó mas y se levanto, y sin decir mas se fue a su habitación.

- Tsk... ¡kuso!- refunfuñaba el moreno, mientras también subía a su habitación.

Después de unas horas, el moreno seguía aun enfadado mientras veía el LCD de su habitación, se levantó y se dirigió al gran baño. S e comenzó a lavar los dientes, cuando justo en ese momento llega el rubio con su cepillo en las manos, al parecer había pensado lo mismo del moreno, ambos se observaron. Naruto frunció el ceño y salio del baño dando un gran portazo, el moreno miraba aun la puerta. Termino de lavar sus dientes y bajo, se encontró con el rubio al frente de la computadora escribiendo.

- Oe, Naruto, ¿que te pasa?-

- Nada- decía mientras ni siquiera lo miraba solo sus ojos pasaban, del teclado a la pantalla.

- Entonces, ¿por qué te molestas tanto conmigo?- el rubio preguntó sarcástico.

- ¿Cuándo lo he hecho-ttebayo?- el moreno dio un bufido molesto.

- ¿Cuándo? Pues ahora. He hecho todo lo que querías que hiciera. Y puedes ver a Sai como querías. He aceptado todas las condiciones de tu contrato. ¡¿Por qué te quejas y estas tan disgustado?!-

- No es por eso-

- Entonces, ¿que te pasa?-

- Es que... es por trabajo- el moreno le miro curioso, - A partir de ahora voy a estar muy ocupado. Tengo que escribir un guión- el moreno le miró sorprendió.

- ¿Nani?, ¿estás escribiendo un guión?-

- La sinopsis es buena y quieren que escriba un guión para ella-ttebayo-

- Guauuu con nuestro usuratonkachi- se mofaba el moreno, - Es decir, que nuestro usuratonkachi es impresionante, ¿pensabas que eras un fracaso, pero escribes un guión?- seguía el moreno, pero el rubio le interrumpió.

- Por eso, a partir de ahora tú cocinaras y harás todas las tareas de la casa-ttebayo- el moreno abrió grandes sus ojos negros ante las palabras del rubio.

- Eso no es justo-

- Así no te voy a ver más. Eso es bueno, ¿no-ttebayo?- el moreno le miró extrañado, - A partir de ahora no me pidas que te prepare la comida. Ya no soy tu empleado- y así se levanto de donde estaba y paso de largo por el lado del moreno, pero a unos pasos se detuvo, Sasuke le observo; - Y por cierto, llámame otra vez usuratonkachi y ¡te mato!- el moreno le cayo la típica gota de anime por su cabeza ante tales palabras del rubio.

Al día siguiente, Sasuke se levanto a la misma hora de siempre, pero cual fue su sorpresa al bajar a la cocina y ver todos los platos sucios en el lavaplatos. Algo furioso pero enfadado se dirigió al lobby y se sentó en su sofá preferido, luego de unos minutos el rubio bajaba por las escaleras, Sasuke le observaba atentamente. Vio que abría la nevera y saca muchas cosas y después de la despensa sacaba unas galletas y un bol de ramen. Todo esto lo colocaba en una bandeja y se dirigía con ella a su escritorio, enfrente de la computadora.

- Naruto, ¿has lavado los platos?-

- Los lavaré después-ttebayo - respondió indiferente, mientras abría el paquete de galletas. Mientras el moreno se levantaba y se dirigía a él.

- ¿Cómo que después?, límpialos ahora-

- Yo decidiré cuándo los lavo. Además, ya no soy tu empleado. No vuelvas a darme ordenes, sobretodo porque no me gusta oírlas-ttebayo- seguía indiferente, mientras prendía la computadora.

- ¡¿Nani?!... te quito el sueldo si es así- el rubio le observó ya con una cara de enfado tremenda. Podía amenazarle con muchas cosas pero menos con el sueldo, de todas formas todo ese sueldo iba para pagarle al moreno es un toma y devuelve. El moreno desvió su mirar, sabia que era abusivo en ese plano con el rubio, - No se de que va tu guión, demo te voy a quitar el sueldo si sigues así y no me haces los deberes-

- Auque me des todo el dinero que puedas tener por hacerte la comida... no te obedeceré-ttebayo - el moreno le creció la vena en su frente mientras murmuraba maldiciones inteligibles para el rubio, este solo se volteo a ver su computadora y abrir el archivo. Sasuke se dirigió enfadado a su habitación a mirar un poco el LCD, estuvo allí largo rato no había nada bueno en la televisión. Sentía que tenia que hablar con el rubio, del porque aun seguía enfadado con el. Bajó a la primera planta y se encontró con el rubio aun escribiendo en la computadora.

- Naruto, vamos a hablar-

- Estoy ocupado-ttebayo-

- Me da igual. Hablemos- subía el tono de voz, mientras el rubio respondía y tecleaba.

- Pues habla, te escucho-

- Me he dado cuenta...- trago saliva, ni el mismo se podía creer lo que iba a decir,- de que te daba mucho trabajo- el rubio rodó sus ojos "no me digas-ttebayo", - Pero desde que volvimos a rehacer el contrato. Te he ayudado bastante, ¿no aprecias eso?, creo que hay otra razón para que protestes. No sé qué razón es, pero ahora...- estaba enfadado, pero luego se calmo y en susurro dijo, - yo... cocinaré- el rubio abrió sus enormes ojos azules, no creyéndose las palabras del moreno, le observó con aquella visión. El moreno desviaba su mirar, mientras un leve color rojizo se posaba en sus mejillas, - Así que la comida y la limpieza las hago yo también. Como estas ocupado, pues... yo te ayudo- El rubio ya no estaba impresionado, estaba algo curioso y porque no decirlo hasta desconfiado, ¡pero es que Sasuke no era así! - Espero que hagas un buen guión y que se convierta en una buena película- el rubio seguía con su expresión, pero escuchaba atentamente, - Así que esta vez, no comerás ramen instantáneo. Lo voy a preparar yo-

Luego cuando estuvo todo preparado, el moreno llamó al rubio, este aun desconfiado se acerco a la mesa, quedo impresionado al ver todo, el moreno por su parte se sentó. El rubio le siguió.

- Dime de verdad, ¿por qué haces esto-ttebayo?-

- Porque odias cocinar, supongo-

- No es que odie cocinar, pero no me gusta que me traten como un empleado-ttebayo -

- Demo, ¿no sabes lo genial que son los empleados?- dijo el moreno burlándose de paso, - No puedes tener nada en orden sin ellos. La mayoría de las personas no pueden vivir cómodamente sin ellos, los empleados son importantes. Así que esta orgulloso, usuratonkachi- el rubio comenzó a aparecerle una vena gigante en su cabeza, odiaba cuando el moreno hablaba así, solo como reprimenda le golpeó en la cabeza, el moreno obviamente se quejó por aquel acto. De un momento a otro Naruto se puso serio, tenía algo que preguntarle al moreno.

- Sasuke...- El moreno le miró extrañado, porque le llamara por su nombre y no con los típicos apodos.

- ¿Nani?-

- ¿De verdad estás de acuerdo con que salga con Sai?, ¿no tienes ni un mínimo sentimiento al respecto-ttebayo? - el moreno rodó los ojos, por toda la casa, finalmente miró los ojos azules, pero seguido desvió su mirar.

- ¿Qué tipo de sentimiento?, yo no siento nada- el rubio bajo su mirar, y comenzó a comer su ramen, - No hay sentimiento- terminó de rematar el moreno, pero hasta él mismo sabia que sus palabras no eras cien por ciento ciertas.

Después de aquello, el rubio volvió a su computadora y estuvo escribiendo hasta altas horas de la noche, se estiraba unas tantas veces, para no sentirse con dolores, ya entrada en la noche el sueño le venció quedándose dormido en el escritorio, todo esto siendo observado por el moreno, le observó por unos tantos minutos más, hasta que se decidió ir donde el rubio, una manta tenia en sus manos, la cual la colocó encima del cuerpo de Naruto. No sin antes arroparle bien con ella, lo miró unos segundos más, y decidió subir, mañana le tocaba trabajo e ir a la tienda de Gaara.

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Al día siguiente, el moreno se despertó temprano. Se aseo y arreglo, se dirigió a tomar algo de la nevera. Cuando vio al rubio que al parecer se había seguido durmiendo.

- Tsk... usuratonkachi- dijo algo enojado. El rubio estaría muy adolorido ese día. Pero no valía la pena despertarle, para después empezar a discutir, no... no tenía ganas de discutir esa mañana. Y así sin más se retiró directo a la tienda del pelirrojo.

Al llegar a la tienda ambos se saludaron y conversaron, Gaara ya sabia todo lo del contrato de matrimonio, así que el moreno le contó el resto del nuevo contrato.

- Francamente, tres años es mucho tiempo... Demo- le observó, mientras colocaba unas ropas en los colgadores, - no es tanto tiempo como crees, además los años se pasan rápidos, ¿no?-

- Bueno, no estoy seguro...- el pelirrojo le observó interrogante, - Si el acuerdo fuera más corto, y no tanto como ahora... No soy capaz de hacer promesas-

- Demo el que tú y Naruto lo dejaran... no solo seria bueno para ti, sino para todos- el moreno trago saliva, antes de hablar calmadamente.

- La posición en que esta Naruto es lo que ambos decidimos-

- Quiero decir, no me refería a eso. Demo hazme una promesa, ambos sabemos lo que ocurre, prométeme no sentir nada por Naruto, ¿puedes prometerlo?- El moreno miró hacia la calle, donde podía ver a los carros pasar y solo asintió.

- Bien, me debo ir-

- Comprendo, ha... se me olvidaba, mi hermana Temari me dijo que te diera algo, ¿puedo llevarlo a tu casa?-

- Hai- le dijo dando una sonrisa de medio lado, el pelirrojo asintió. Ambos se despidieron.

El día pasó hasta que al fin cierto rubio despertó, se quejaba mientras se levantaba de su lugar.

- Au, au... me duele la espalda. ¿Are? ¿Una manta?- dijo mientras la tomaba entre sus manos, esta lo había protegido mientras dormía, - Quizás me levanté en la noche y la coloque encima mió. Wauuu ni me acuerdo-ttebayo hehe...- de pronto el teléfono comenzó a sonar, Naruto lo tomó:- ¿Moshi-Moshi?.. ¡ahh Tsunade no-baachan, Konnichiwa-ttebayo!... Hai... Hai, si he tomado las medicinas, ya estoy recuperado... ¡Hai, voy esta tarde!, matta ne Tsunade no-baachan- y así colgó para arreglarse e ir a la mansión Uchiha. Luego de una hora y tantos minutos, al fin llegó, pero nadie fue a recibirle, cosa que le extraño. Pero luego de unos minutos llego Shizune muy animada a abrirle.

- Gomen nasai Naruto-kun-

- No hay problema Shizune-neesan-

- Onegai pase- pidió la morena, llevando a Naruto al salón, este se extraño al escuchar tanto bullicio y cual fue su sorpresa al llegar al salón y ver a Tsunade, Fugaku, Mikoto, Itachi, Deidara y a... Gaara, animadamente conversando y viendo algunas cosas.

- Esta es la moda que se usa en Francia, ¿Gaara?- preguntó Tsunade al pelirrojo. Mientras tomaba un sombrero y se lo colocaba.

- Hai, parece que le gusta mucho Tsunade-sama-

- Sabes que puedes decirme Tsunade u Obasan, y esto mismo va para ti Deidara, no me gusta el formalismo de parte de ustedes dos que les conozco desde hace mucho tiempo-

- Hai- respondieron ambos dando una sonrisa.

- Tu hermana no debió molestarse, con saber que volvió bien de su viaje a Francia es suficiente- medio sonrió Fugaku, mientras tomaba en sus manos una camisa muy elegante.

- Esta agradecida porque usted me ayudo cuando estaba enfermo-

- Es que no eres un extraño para nosotros Gaara-

- Si, Gaara-chan. Muchas gracias por los presentes, ¿verdad chicos?- preguntó Mikoto a Itachi y a Deidara los cuales asentían mientras veían sus presentes. De pronto cierto rubio menor, se sintió fuera de lugar allí. Además de todas las palabras que estaban diciendo, se sentía en aquel momento como un extraño. Pero esto fue notado por Shizune, ambos aun no entraban al salón, apoyó una mano en el hombro de Naruto y hablo antes de entrar en voz alta

- El joven Naruto ya se encuentra aquí- dijo Shizune, mientras pasaba al gran salón seguido del rubio. Todos agrandaron sus sonrisas al verle, menos cierto pelirrojo que solo mostraba un rostro indiferente.

- Ah, Naru-chan estas aquí- lo saludo la hermosa mujer morena levantándose para recibirlo con un abrazo.

- Hai, Konnichiwa Mikoto-san, Fugaku-san, Itachi-san, Deidara-san, Tsunade-Sama -Todos se extrañaron por el nombramiento del la rubia, hasta esta le miró curiosa. Pero el rubio solo mantenía la cabeza gacha sin decir nada más.

- Mmm... Naru-chan, ¿conoces a Sabaku No Gaara?- El rubio levanto su vista, y la posó en el pelirrojo, pero con el ceño levemente fruncido.

- Hai, Konnichiwa-

- Konnichiwa- El aire se sentía extraño, fue en ese momento que a cierto rubio mayor se le encendió una ampolleta mental, su koi le observó extrañado por la mirada que el rubio mayor posaba.

- ¿Qué ocurre, Deidara?- el aludido se acerco hacia el moreno, hablando bajito.

- No te parece extraño que se lleven al parecer, ¿mal?- el moreno observó a ambos chicos. Hasta que la misma ampolleta se iluminó en la mente de este, pero a la vez negando.

- No creo, bueno tú sabes que mi ototo-baka estuvo enamorado durante muchos años de Gaara, demo nunca se atrevió a decírselo por su gran orgullo, demo cuando anunció que se comprometía finalmente con Naruto pienso que lo hizo porque realmente quiere a Naruto- el rubio mayor cruzo los brazos mientras aun los miraba.

- No creo que un amor de más de 13 años se olvide fácilmente- Itachi observó a Gaara, en cierta razón es verdad lo que decía Deidara, - Y al parecer esto también lo sabe Naru-chan...- el moreno pasó ahora su mirada al rubio menor.

- Quieres decir...-

- ¿Rivalidad?... si, es lo más probable- pero la conversación fue interrumpida cuando Tsunade dijo que dos personas tenían algo importante que anunciar, los aludidos se sonrojaron por el comentario. Naruto se dirigió a la cocina a traer algunas cosas, Shizune le decía que no se preocupase. Qué él era el invitado, pero todos conocen lo cabezota del rubio, así que le ayudo.

Shizune llevaba en una bandeja muchas copas y una botella de champaña para la ocasión. Mientras, Naruto en otra bandeja llevaba unas cuantas cosas para picar.

- Y bien, ¿quienes y que es lo que nos deben anunciar?- dijo el pelirrojo mientras tomaba una de las copas con el liquido. Todos ante el comentario sonrieron, todos... menos el rubio que no entendía absolutamente nada. El pelirrojo ya se había enterado de todo, y al parecer todos ya sabían lo que se iba a anunciar. Se sintió nuevamente fuera de lugar...

- Por las maneras en que miran a ciertas personitas, me imagino que ya lo sabes. Pero de todas maneras, díganlo- casi ordeno el moreno mayor, padre de los hermanos Uchiha, esposo de la hermosa mujer morena, el ya sabía el motivo del anuncio.

- Bien, bien... sin tantas presiones- dijo Itachi, mientras tomaba la mano de su koi y hablaba, - Hemos decidido casarnos- todos quedaron por unos minutos en silencio hasta que Tsunade habló.

- Vaya me esperaba esto. Pero de una forma mas romántica, con lo típico "el es el hombre de mi vida, cuando lo conocí supe que no le podría dejar nunca y blabla..." lo típico, no tan de repente. Pero lo cierto es que tardaron en decidirse- todos ante el comentario rieron. Naruto se levantó y fue hasta el par.

- ¡Los felicito chicos!- dijo mientras les daba un abrazo a ambos, - Espero que sean muy felices-ttebayo, y no importa si se demoraron en decidirse... mientras estén con la persona que aman y esta les corresponda- sus ojos por un momento dejaron de brillar. Por ese instante una angustia paso por su mente y cuerpo, pero al instante la cambio. - ¿Y para que fechas más o menos tienen decidido casarse?- preguntó mientras los demás ahora les abrazaban y les daban el visto bueno al futuro matrimonio.

- Pues en un año y algo más-

- ¿¡Nani?!- gritaron todos, asombrados.

- De...demo, eso es bastante tiempo. ¿Por qué tan distanciado?- pregunto Mikoto. Ambos muchachos sonrieron y vieron al rubio menor.

- Porque nuestra boda será aun mas elegante que lo que fue la de mi ototo-baka y Naruto-

- Hai, ya la estamos organizando, pero nos llevará tiempo. Demo, no tiene comparación. ¿Cierto Itachi?-

- Hai, Deidara- decían mientras agarraban sus manos, unas tantas flores de esas típicas en escenas románticas de anime se cruzaron. Todos tenían la gota en la cabeza por la escena. Podían llegar a ser bastante infantiles.

- Itachi, Deidara. ¿Por qué no anunciaron esto con Sasuke también presente?- preguntó el pelirrojo. Naruto le llamo la atención aquello. Era verdad, Sasuke es parte de la familia.

- Ah... porque- dijo Itachi cerrando los ojos recordando y diciéndoles lo sucedido hace unos varios meses atrás.

********** Flash Back ***********

- Hasta que al fin decidiste casarte Ototo-baka-

- Ah... mejor cállate- amenizó Sasuke, mientras daba un suspiro resignado.

- Mmmm... no te veo muy animado, se que quieres tenerlo ahora en tu cama. Pero tendrás que esperar un poco, como un matrimonio con todas sus reglas- el moreno menor rojo de vergüenza mezclada con furia le dio un golpe a su aniki.

- Mejor cállate aniki. Insisto- de pronto su mirada se posó en el rubio mayor que estaba al otro lado de la calle mirándolos.

- Mira nii-san. Ya llegó Deidara- el moreno mayor volteó a verle y le saludo con la mano, mientras el rubio hacia lo mismo. El moreno menor los observó a ambos, - Oe nii-san-

- Dime ototo-baka-

- Grr... no me digas así- dijo mientras elevaba el puño, Itachi solo sonrió de medio lado, - ¿Por qué aun no te casas con Deidara?-

- Pues, porque...- el moreno menor lo miro ansioso por la respuesta, - aún no lo hemos hablado- caída estilo anime por su hermano.

- Deberías ya comprometerte con el, se ve que los dos se quieren- ante esas palabras el moreno mayor miró al rubio y le sonrió con cariño; - De todas maneras- el menor le agarró de la camisa amenazándole con su mirada asesina, - El día en que te comprometas y yo este ahí para verlo, sin duda te daré la golpiza de tu vida-

- ¿Y eso por qué?- le preguntó entre algo asustado y extrañado.

- Por no haber decidido a comprometerte antes- y sin mas el moreno menor se retiró a su edificio de trabajo, mientras el moreno mayor le observaba con la gota en la cabeza. Por otro lado Deidara se quejaba de que el moreno mayor ya cruzara la maldita calle para salir juntos.

********** Fin Flash Back ***********

- Y eso pasó...- dijo mientras abría los ojos, a todos les caía la gota estilo anime, es decir que al gran Uchiha Itachi realmente y muy en el fondo le daba miedo su ototo.

- "Ese teme, no sabe otra cosa que amenazar-ttebayo"- pensó el rubio mientras veía a Itachi que tenia una expresión cansada por el recuerdo.

- Itachi, eso quiere decir que le tienes miedo a tu ototo- se mofó su koi, próximamente esposo. El moreno dio unos gruñidos pero no dijo nada mas, sacándoles una sonrisa a todos.

De pronto Naruto observó el reloj, dándose cuenta que era un poco tarde. Ya que debía seguir con su escrito.

- Bien, yo me debo marchar. Tengo trabajos que realizar. Me encantaría quedarme, perro...-

- Yo también me marcho, así que te llevo- dijo el pelirrojo. Naruto lo miró extrañado, ¿por que? El pelirrojo se despidió de todos acercándose después a Naruto; - Tengo que hablar algo contigo- el rubio menor le observó desconfiado. Pero de todas formas aceptó, se despidió de todos. Dándoles nuevamente las felicitaciones al futuro matrimonio y se marchó junto a Gaara.

Ya llevaban bastante tiempo en el auto, ya cuando iban a llegar al centro de la ciudad; Gaara comenzó a hablar:

- No dejaré escapar a Sasuke otra vez. Y para serte sincero, tres años parece mucho tiempo. Pero el va a esperar, y yo también- Naruto en ese momento se enfado, pero no dio a conocerlo, solo habló.

- Demo, en esos tres años. No voy a renunciar mientras Sasuke no lo haga primero-ttebayo -

- Comprendo. No quiero darles presiones. Además no tengo ninguna prisa- el rubio le miró extrañado, - Como no sientes nada por él y es solo un contrato... pues no importa- sin que lo pretendiera el rubio desvió su mirar. Mientras lo posaba en la ciudad, de pronto se le ocurrió algo. Y le pidió al pelirrojo que le dejase allí, este cumplió y se marchó. Naruto por su parte iba directamente a cierta casa. Golpeó repetidas veces la puerta. Hasta que sintió una vos desde adentro.

- ¡Ya voy!, ¡ya voy!, ¡Shanaro!- la chica abrió la puerta viendo al rubio. Este le observó el vientre ya estaba bastante abultado por el embarazo. La chica se lo sujetaba con una mano.- ¡Naruto! Konnichiwa, pasa- le dijo mientras lo hacia pasar a la casa. Lee estaba limpiando unas cosas, que por obvias razones por el estado de la pelirosa esta no podía limpiar.

- Konnichiwa, Naruto- saludo Lee al rubio, - ¿Qué ha pasado?-

- Chicos, ¿cuanto dinero tienen dattebayo?-

- ¿Dinero?- le pregunto extrañada la chica rosa.

- Denme todo lo que tengan-.

- Pero no tenemos dinero, eso ya lo sabes- dijo a rosa aun extrañada por la actitud del rubio.

- Pero algo deben tener-tteba -

- ¿Por qué viene esto tan de repente?- preguntó Lee.

- Porque debo pagarle a Sasuke todo lo que le debo- la pelirosa lo miró extrañada.

- Pero el debería pagarte a ti. ¿Por qué le vas a pagar tú a él?-

- Quiero darle su dinero y divorciarme de él, ¿por qué?- estos lo miraron sumamente sorprendidos, - Tsk, kuso... si no me van a ayudar, mejor me largo-ttebayo - y así sin mas se marcho, mientras la pareja aun estaba sorprendida sentada en el sofá.

Después del viaje, Naruto llegó a su hogar. Estaba sumamente enfadado, pero también par que negarlo... triste, cuando su mano izquierda se posó en la manilla de la puerta observó su anillo de bodas, luego lo tomó y se lo sacó, guardándolo en el bolsillo del pantalón.

Al entrar a la casa se iba a dirigir directamente a su habitación, cuando...

- Oe, usuratonkachi- el rubio se dio la vuelta y le observó, - ¿Dónde fuiste?- el rubio se lo pensó, pero iba a omitir ciertos datos, como lo del anunció del matrimonio, sino golpearía a Itachi y el encuentro con Gaara.

- A la mansión-

- ¿Otra vez?- dijo dando una sonrisa de medio lado, pero no autosuficiente, - Adoras a mi familia, ¿no?- dijo esta vez, dándole una sonrisa sincera, pero casi imperceptible.

- Hai-ttebayo- respondió el rubio devolviendo la sonrisa. Para luego hablar como para si mismo, - Aunque podría ser mejor si no lo hiciera...-

- ¿Nani?- el moreno había escuchado, pero no había entendido lo que quiso decir el rubio. Este negó con la cabeza dando una sonrisa zorruna, pero a Sasuke no le parecía sincera.

- Ie, nada-ttebayo. ¿Has comido?-

- Ie-

- Bien, voy a lavarme las manos y te hago alguna comida- dijo sin más yendo al baño de la primera planta. El moreno le miró extrañado -"¿Esa actitud tan pasiva?, ¿que le ha pasado al dobe?"- eran los pensamientos del Uchiha.

Luego de unos tantos minutos, el rubio tenía la comida preparada. El moreno se extraño aun mas al ver que en la mesa no había ramen ni nada por el estilo, sino que dos platos de sopa de miso, dos pocillos de arroz blanco, dos pescados bien cocinados, mas unos zumos y los servicios. Naruto se sentó a comer, mientras el moreno también se sentaba. Sasuke observó por unos segundos al rubio, este solo comía pero no le observaba. Hasta que Naruto ya no podía desviar la mirada y cuando la posó en el moreno, comenzó a hablar, el ambiente estaba extraño.

- Hoy estaban todos en la mansión, ayudé a Shizune con las cosas para llevar a tu familia, ella sola se ocupada de la casa-ttebayo. Aunque también Mikoto-san la ayuda. Yo pienso que deberían llevar a alguien más a que le ayude, porque...-

- Naruto, algo te ha pasado ¿no?- interrumpió el moreno, el rubio ante esas palabras se quedo quieto pero su sonrisa no se desvanecía.

- Ie, claro que no-ttebayo-

- Algo te ha pasado allá en la mansión, ¿verdad? ¿Te regañó Tsunade?- le preguntaba serio.

- Ie, te he dicho que no- el moreno aun no se iba a rendir.

- ¿Te dijeron algo Otto-san, Oka-san, Nii-san o Deidara?-

- Ie, ellos no me dijeron nada-ttebayo- el moreno suspiro cansado, el rubio no quería decir nada; - además... usuratonkachi, dobe, baka o lo que sea, puedes llamarme como quieras. Ya no me importa-ttebayo - dijo aún con esa sonrisa. Esto sin duda había perturbado al moreno. Naruto solo termino de comer, llevo los platos a su lugar y comenzó a lavarlos.

Al otro día paso algo sumamente extraño nuevamente, Naruto se levanto sumamente temprano y comenzó a hacer el desayuno. El moreno bajó y se encontró con que en la mesa no había tostadas con un café y zumo, sino arroz blanco con una carne y un zumo.

- ¿No vas a hacer tostadas?-

- Demo, si a ti no te gustan las tostadas. A parir de ahora haré el desayuno que te gusta-ttebayo- El moreno seguía extrañado, pero no comentó más y se sentó a comer. Después del desayuno, al moreno le tocaba lavar los platos, pero el rubio le dijo que él los lavaría, y así lo hizo. El moreno nuevamente le observó curioso. Luego de esto el rubio ya había terminado y se había sentado en el escritorio del salón para escribir en su computadora. El moreno mientras se sentaba en su sofá favorito y prendía el LCD, pero su vista se desviaba al rubio. El cual solo tecleaba en la computadora.

- Ne, Naruto. Trae un poco de agua fría-

- Hai- dijo mientras se levantaba e iba a la nevera a sacar la fuente con agua fría, la sirvió en un vaso y se la dejó en la mesa de centro del salón al frente del moreno. Este ya estaba sumamente extrañado ¿Y el rubio la había traído?... el moreno carraspeo un poco, hablando de nuevo; - Ne, Naruto-

- ¿Nani?-

- Me refería a agua con hielo-

- Hai-ttebayo- respondió el rubio con otras de esas sonrisas, mientras nuevamente iba a la nevera tomaba otro vaso, servía agua y colocaba los hielos en él y se lo dejaba a Sasuke. Este tenía una gota en la cabeza. Luego de un rato, el moreno volvió a llamar al ojiazul.

- Naruto, tráeme un vaso de zumo de naranja-

- Hai-ttebayo- y ahí iba de nuevo.

- Naruto, tráeme un vaso con whisky-

- Hai-ttebayo- Y ahí otra ves...

- Naruto, una bebida-

- Hai-ttebayo- ¿¡otra vez?!... El moreno ya se estaba desesperando, ¿Cómo? ¿¡No reaccionaba el rubio?!

- Naruto, escribe el guión mas tarde. Y limpia un poco que esta casa esta hecha un asco... cof, cof- "tosía" por el "polvo" que "había".

- Hai-ttebayo- y así el rubio tomó un trapo y comenzó a limpiar el suelo agachándose y fregando. Ya el moreno estaba harto de esa actitud del rubio, pero el siguió con los pedidos, para de una manera u otra hacerle reaccionar.

- Naruto, deja de limpiar y canta la canción de Los Tres Osos- y el moreno pensando de que el rubio no lo iba a hacer, cual fue su sorpresa cuando el rubio comenzó.

- Una familia de tres osos vive en una casa, Oto-san Oso, Oka-san Osa y bebe Oso...- al moreno le salía una vena por su frente.

- Baila mientras cantas- Y así Naruto empezó...

- Una familia de tres osos vive en una casa, Oto-san Oso, Oka-san Osa y bebe Oso...- mientras bailaba y hacia los gestos con sus manos, - Oto-san Oso es gor...-

- ¡Para, Usuratonkachi!- le interrumpió el moreno. - En serio, ¿que pasa contigo?-

- ¿Con que-ttebayo?- preguntó mientras ladeaba la cabeza, como haciéndolo parecer curioso.

- Me incomodas. ¿Por qué cantas esa canción? ¿Por qué haces lo que te digo?- el rubio desvió su mirar a la cocina. - Has hecho algo, ¿no?-

- No digas eso. Yo solo quiero ser un buen empleado para el poco tiempo que me queda aquí... así que tu pide y yo obedezco- Ese fue un golpe, aunque el aun no se diera cuenta. Algo fuerte para el moreno.

- ¿Y a donde irás?-

- ¿Para que? ¿Acaso piensas que me voy a quedar contigo para siempre-ttebayo?- El moreno ante esas palabras se sonrojo de sobremanera, pero dio vuelta su rostro no mirando al rubio. Este solo se mofó de esa actitud infantil. Mientras volvía a fregar el piso. El moreno algo menos sonrojado le observó, pero observó específicamente las manos del rubio y su rostro mostró sorpresa y algo de enfado al no ver cierta cosa.

- ¿Dónde esta tu anillo?- dijo levantándose del sofá y tomando la mano del rubio este se zafó del agarre agachando la cabeza. - Claro... sabía que lo harías. Has perdido el anillo, y como me iba a enfadar, pues actuaste así de raro, ¿no?- El rubio lo miró confuso, la mente del moreno pasaba unas películas no realizadas de grandes producciones, por lo que acaba de idear; - ¿Sabes lo caro que es?, No podrías comprarlo ni con 5 años de sueldo- el rubio bufó molesto. - Es decir, el dinero no es problema. Demo no es algo que se pueda reemplazar. Tú lo dijiste y es nuestra promesa- el rubio posó su mirada un tanto sorprendida; - Cuando yo lo perdí, me regañaste demasiado. Tsk... ¿como se puede ser tan dobe?- El rubio no hablaba, porque el mismo sabia porque se lo había sacado, bajo su mirar mientras pensaba en muchas cosas. Cuando de pronto el moreno tomó su mano izquierda, el rubio le miró curioso, el moreno le dio una media sonrisa, mientras con un rotulador dibujaba una especie de anillo en el dedo correspondiente.

- Ha, mira usuratonkachi, salio bastante bien. Hasta se ve mas bonito- esto provoco la sonrisa y una pequeña risa del rubio por la acción hecha por el moreno.

- Jajaja esta bien teme, ahora pásame tu mano-ttebayo- el rubio le quitó el rotulador al moreno y tomó su mano haciendo en la muñeca un reloj, anunciando la hora de cenar. El moreno le dio una sonrisa de medio lado y seguido se fue a sentar nuevamente en el sofá.

- Y ahora que ya estamos bien, cántame la canción de los tres osos- al rubio la sonrisa se le fue mientras el moreno cambiaba su sonrisa de medio lado a una siniestra y de exigencia., - Cántala ahora- y volvió a su sonrisa de medio lado.

- Etto... Hai-ttebayo- respondió Naruto con unas gotitas en su cabeza. Por el cambio drástico de actitud en Sasuke.

Ya luego el día se pasó sumamente rápido. Hasta que llegó la noche mientras el rubio escribía en su computadora. Luego de escribir un tiempo, miró específicamente su mano izquierda, el dibujo del anillo. Sonrió ante el dibujo, pero un sin fin de pensamientos pasaban por su cabeza, cada ves estaba más... y más confundido, luego de terminar un tanto, ya que le quedaba muy poco para terminar el guión, finalmente se fue a su habitación a dormir. Ya mañana terminaría y pensaría las cosas que debía pensar.

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Al día siguiente, el rubio se encontraba imprimiendo las últimas hojas de su escrito. Ya cuando iba por la última estaba sumamente ansioso, hasta que esta terminó de imprimirse y gritó de la alegría.

- ¡¡Sugoi-ttebayo!! ¡¡Al fin he terminado!!- el moreno quien iba bajando las escaleras se tapó los oídos con sus manos por el gran grito del rubio.

- Tsk... ¡usuratonkachi, no grites en las mañanas!- dijo, más bien gritó el moreno acercándose al rubio.

- Quien me lo dice-ttebayo- infló una de sus mejillas mientras fruncía el ceño y tomaba el escrito colocándolo dentro de un sobre grande.

- De todas formas no te pongas tan eufórico, dobe- el rubio suspiró mientras se levantaba y tomaba una chaqueta azul que hacia un hermoso conjunto con sus ojos zafiros, mientras miraba al moreno. Este le observaba atentamente.

- Sasuke, hoy... hoy es el día que has estado esperando- el moreno le observó curioso.

- ¿Día? ¿Qué día?-

- Ya te enterarás después. Mejor luego que ahora-ttebayo- el moreno se preguntaba que sería aquello, - No vayas a ningún sitio hasta que yo vuelva- el moreno seguía curioso. Pero asintió a lo dicho por el rubio, este se despidió y se marchó a la oficina de Sai.

Sai ojeo las hojas por unas dos horas, por suerte el escrito no era sumamente largo pero si conciso y preciso y justo lo que se necesitaba.

- Es bastante bueno, te felicito- dijo mientras elevaba su mirada y la posaba en el rubio. Los azules ojos del rubio brillaron con intensidad, al fin sus escritos eran valorizados por ley. - Has hecho un muy buen trabajo en tan poco tiempo. Y es lo que esperábamos-

- Arigato, arigato gosaimas- agradecía fervientemente el rubio con una sonrisa zorruna.

- ¿Gracias, por qué? Soy yo quien te agradezco por hacer esto, arigato por escribir una historia tan buena-.

- jajaja Hai-ttebayo- dijo el rubio riendo elevando el puño y después mostrando la señal de la victoria. Estaba sumamente contento.

- ¿Lo celebramos hoy?- el rubio borro su sonrisa por un instante, ahora recordaba que le había pedido a Sasuke que le esperase, debía ir a casa. Pero luego ese pensamiento fue desechado, de seguro el moreno estaría esperándole. Y asintió a lo dicho por Sai.

Lo que no sabía el rubio es que Sasuke se encontraba esperándole en casa, había comprado unos globos azules, otros amarillos y otros naranja. Los colores más representativos en el rubio. Ya los había inflado y estaban esparcidos por casi gran parte del salón. Había tomado unos cubitos que tenia el rubio en su habitación y con ellos había escrito, colocando uno por uno, la palabra: "Usuratonkachi". Después de eso se dirigió al ventanal y cerca de el puso muchas velas en filas, para cuando llegara la noche encenderlas, luego se dirigió al patio y en la mesa de la terraza puso un mantel blanco, y unas velas rojas, más un pequeño florero con rosas azules, que tanto les agradaba al ojiazul, mientras colocaba unas copas y una botella de champaña para la celebración. Y las horas comenzaron a pasar, el moreno se preguntaba porqué aún no llegaba el rubio ya estaba comenzando a anochecer. De pronto el teléfono comenzó a sonar. El moreno rápidamente fue a contestar.

- ¿Moshi-Moshi? Naruto ¿¡dónde estas, por qué has tardado?!-

- Llegaré tarde. No me esperes levantado, y cena sin mi-ttebayo-

- ¡¿Demo cómo!? Ven a casa, dobe tengo algo que enseñarte-

- ¡Te dije que no voy a ir hasta tarde, teme!-

- ¡Te estaré esperando hasta que vuelvas!- y así sin mas y enfadado pateando unos cuantos globos de paso y, no aceptando un "no" por respuesta de parte del rubio. Colgó. El rubio por su parte también colgó mientras daba un suspiro cansado. Estaba cenando con Sai, este le observó.

- Últimamente he estado alterado por ti-

- ¿Por mi?- se extrañó el rubio.

- Hai, al parecer cada cosa que hago no parece dar resultado y no puedo hacer que me veas más que como a un amigo- aquellas palabras al rubio lo dejaron sin habla. Pero luego comenzó a hablar.

- Yo aprecio mucho todas las cosas que has hecho por mi-ttebayo. Y no me refiero a cosas materiales o de trabajo, sino a estas y además me ayudas mucho a animarme cuando no estoy de ánimos-ttebayo, y como te dije eso lo aprecio mucho...- el moreno lo miró expectante, quería que el rubio continuase, - En realidad, Sai. Tú me gustas un poquito-ttebayo-. El ojinegro sonrió.

- ¿Un poquito?-

- Mmm... ie-ttebayo. Más que un poquito- dijo el rubio algo sonrojado por sus propias palabras.

- Entonces aun tengo algunas esperanzas-

- Hai-ttebayo- afirmó el rubio, animando al ojinegro. Ambos se sonrieron para seguir cenando.

Por otro lado Sasuke se encontraba en el jardín de la casa observando hacia la colina, por donde siempre debían llegar las personas para ir a la casa. Observaba y observaba mientras daba vueltas. Cuando de pronto se encontró con la bicicleta que le había comprado al rubio, mirándola con un odio del porte de un oso, la pateó fuertemente botándola y de paso esta quebró un masetero, uno de las plantas favoritas del rubio. Al moreno le calló la gota por su cabeza, tomó la bicicleta y la dejo donde estaba, mientras tomaba a la pobre planta con masetero roto y la dejaba en un lugar más apartado, para que hasta unos días el rubio no la pudiese ver ni regañarle a él por ello. Y ya aburrido de esperar, además que no quería desquitarse con el jardín, entró a la casa.

Luego de una media hora, el carro de Sai llegó a la zona donde vivía el rubio, Naruto se lo agradeció mientras se despedía. Al ver su casa desde la colina, frunció el ceño. Hablando en vos alta, daba exactamente igual, porque nadie le escucharía.

- Esto de llegar tarde también lo hice para fastidiar a Sasuke-teme. Yo siempre le espero en la puerta de la casa o dejo alguna luz prendida del jardín, yo quiero lo mismo-ttebayo cuando me esperé- ya dejando sus pensamientos infantiles de lado, finalmente llego a la casa. Abrió la puerta, y encendió las luces de la entrada. Iba a dirigirse directamente a las escaleras e ir a su habitación cuando se percató al mirar el salón un bulto en el sofá. Prendió la luz cercana y observo que el bulto era Sasuke, el cual dormía en el sofá. Y mayor fue su sorpresa al observar bien el salón lleno de globos y velas, y también al observar desde el ventanal la mesa de la terraza muy bien decorada.

Se preguntaba el porque de todo eso, cuando observó la pantalla de su computadora que de protector de pantalla danzaban las palabras: -"Felicidades Uzumaki Naruto"- y pegado en el monitor había una rosa azul zafiro con un bello adorno. A Naruto todo aquello lo enterneció de sobremanera y mas al ver que el clima afuera comenzaba a ponerse algo feo, porque chispeaba. Fue en ese momento que se sintió sumamente culpable. Se dirigió al patio y su angustia creció más al ver el columpio grande, todo perfectamente decorado con globos y unos bellos listones. Luego vio como los cubos en el ventanal estaban bien alineados mostrando la palabra "Usuratonkachi" nunca aquella palabra le había resultado tan bien en su mente. Dando una sonrisa, entró nuevamente a la casa, fue a la habitación del moreno, tomó una manta y bajó. Colocándosela a Sasuke encima de su cuerpo, para que no tomase frió. Y se sentó al frente de el en un sofá cercano, mientras estiraba su mano y acariciaba las hebras azabaches. Dio un suspiró agradecido mientras una nueva sonrisa se posaba en su rostro. Después de unos minutos, decidió que era mejor despertar al moreno, ya que comenzaba a hacer frió.

- Sasuke...- le llamó

-...-

- Sasuke despierta-ttebayo- le movió un poco.

-...-

- Teme, despierta- insistió zamarreándolo en el acto. El moreno abrió sus ojos negros mientras veía borrosa la figura del rubio, hasta que luego de frotarse los ojos, despertó completamente.

- Ah... Naruto-

- Tsk... dijiste que me esperarías y ya te has quedado dormido-ttebayo -

- Ie, no estaba durmiendo, creía que...- no sabia ni lo que decía porque sus ojos se habían despejado, pero el seguía en el estado de sueño. Miró el reloj y frunció el ceño.

- Mira la hora que es. ¿Por qué vienes tan tarde?- subía el tono de voz, mientras seguía mirándole de esa forma.

- Ya te dije que llegaría tarde, teme-

- Y yo te dije que te esperaría-

- Ya, ya. Teme, gomen nasai- decía con una sonrisa pequeña, mientras hablaba. - ¿Y que tenías que mostrarme?-

- Ya nada- dijo enfadado, pero mas que nada algo dolido. El rubio solamente se levanto aun con su sonrisa, mientras iba por los fósforos, prendiendo las velas una a una, el moreno le miraba extrañado, el también se levanto y le quitó los fósforos al rubio este le miró curioso, - esto lo hago yo, dobe. Tu ve a colocarte algo abrigador y siéntate afuera, por suerte dejo de haber tan mal clima, pero de todas formas- el rubio sonriente fue a su habitación y saco una chaqueta blanca. Mientras se colocaba una bufanda celeste. Ya cuando estaba listo bajo y fue directamente a la mesa de la terraza. Mientras se sentaba, y era verdad ahora sentía mas el frío que hace un rato. Después de unos minutos, finalmente el moreno termino de prender las sin fin de velas que había comprado, todo se veía sumamente hermoso. Luego Sasuke fue a la nevera y sacó de allí una torta de nuez. Y la llevó donde estaba el rubio, este maravillado la observaba. Mientras el moreno orgulloso decía que la había hecho en el tiempo que este se demoró tanto, el rubio ya no quería seguir con el tema así que tomó un poco de torta y comenzó a comer. Mientras movía la botella de champaña hasta casi sacar el corcho, la tomó por debajo y comenzó a darle golpecitos, hasta que por fin se escucho un sonido fuerte y se vio como el corcho volaba a quizás que lugar del jardín.

- Uhh... hehe voló lejos. ¡El primer guión del gran Uzumaki Naruto! ¡Felicidades-ttebayo!- dijo gritando mientras tomaba las copas para echar la champaña, la cual la espuma escurría por la presión ejercida con anterioridad.

- Tsk... una celebración tan tarde, ¿por qué eres tan dobe? ¿No estas arrepentido?-

- Pues no Teme. Vine tarde a propósito-ttebayo- el moreno le miro incrédulo.

- ¿Nani?-

- Como soy siempre el único que espera, pues quería que hicieras lo mismo-ttebayo- El moreno por su parte negó repetidamente con la cabeza no pudiendo creer la actitud infantil del rubio. Este comenzó a hablar, ya mas serio. - Te dije que hoy era el día, ¿no? Tengo algo que decirte-.

- ¿Qué?, ¿qué es?-

- Ten, toma- y le entregó su anillo de bodas. El moreno al verlo sonrió de medio lado.

- Has encontrado tu anillo, ¿dónde estaba?- dijo tomándolo entre sus dedos.

- Te lo devuelvo-ttebayo. Divorciémonos- El moreno dejó de sonreír para posar su mirada en los ojos azules, estos estaban opacos al igual que los del moreno.

- ¿Así? ¿De repente? ¿Pasa algo?- el rubio fijó su vista en el lago.

- El dinero que te debía y el contrato. El dinero de Lee no es mucho, cuando me paguen por el guión te daré más. Así que divorciémonos-ttebayo- no... el moreno no comprendía el porque.

- Si nos divorciamos, entonces no conseguirás Full House. Lo sabes, ¿no?- El rubio posó su mirar en el moreno. Intercambiando miradas.

- Es que quieres que Gaara, el chico que has amado por casi mas de 13 años, espere aún ¿tres años más?- El moreno no podía formular respuesta, sabía ahora realmente que su cabeza estaba sumamente confundida, - Divorciémonos ahora que estamos bien y somos amigos-ttebayo - El moreno negó con la cabeza mientras tragaba con dificultad un poco de su champaña.

- Ie. No quiero divorciarme- el rubio le observo extrañado.

- ¿Por qué no?-

- ¿Por qué me preguntas? Estoy en mi derecho-

- ¿Dónde dice eso en el contrato?- golpe bajo para el moreno, pero también para el rubio. Su casamiento no era más que un contrato, jefe... empleado. El moreno ya no sabía que excusa más dar...

- ¿Y los sentimientos de mi familia? ¿Te haces responsable de eso?-

- Tsunade obaa-chan, Mikoto-san, Fugaku-san, Itachi, Deidara y Shizune nee-san... todos quieren mucho a Gaara. No te preocupes-ttebayo. Yo solo te digo que nos divorciemos, ¿ne?- El moreno de pronto sintió una gran angustia, su corazón y sus ojos le dolían mucho...

- ¿Tan de repente? Estas jugándome una broma, ¿verdad? ¿Es porqué no te gusta cocinar? Pues no cocines- el rubio dio una sonrisa triste.

- No es por eso-ttebayo. Es que...- inspiró y botó lentamente el aire, mientras volvía a desviar su mirada, el viento comenzaba a hacerse presente revolviendo ambos cabello, - no creo que pueda vivir contigo- sin que se diera cuenta esas palabras el moreno las había sentido como una muy mala medicina cuando te dan de tomarla por estar enfermo.

- ¿Por qué? ¿Te ha dicho Sai que te divorcies rápido?- El rubio viró sus ojos nuevamente al moreno. Este dio un bufido molesto y dolido.

- Eres inteligente al parecer. ¿Quieres el divorcio por Sai?- el rubio se calló ante esas palabras. El moreno comprendió en ese momento el dicho... el que calla, otorga... pero esa no era la realidad por la cual el rubio no decía nada, - bien, olvídalo... ¡No puedo decir eso! ¡No podemos olvidar esto!- gritaba el moreno, con una gran mezcla de sentimientos en su interior, - ¡Haz lo que quieras! ¿¡He dicho algo de que no le veas?!- comenzó a respirar agitadamente, desviando su mirada, ya que no podía ver esas orbes azules opacas y humedecidas. Ya que él estaba igual que el rubio, - Pues... no puedo darte el divorcio, gomen nasai- y diciendo estas palabras se levanto para entrar a la casa. Pero la voz del rubio a sus espaldas lo detuvo.

- No es por eso-ttebayo- los azules ojos ya no aguantaron mas las lagrimas, y estas comenzaron a rodas por sus mejillas mientras hablaba, - Te quiero...- el moreno no podía creer las palabras dichas, su rostro mostraba incredulidad.

- ¿Nani?...-

- La verdad es que, te quiero...- el moreno, sus ojos se aguaron, mientras intentaba con todas sus fuerzas no derramar ni una sola lagrima. Pero una de ella se escurrió por su rostro, no pudiendo evitarlo.

- No puedo creer que estés bromeando otra vez, usuratonkachi- su rostro mostró mucho dolor, mientras daba unas risas cargas de tristezas - Es muy cruel...-

- No te rías. ¿Es que no ves el día a día?, ¿No ves que estoy sufriendo-ttebayo?- secó sus propias lagrimas, calmándose para continuar.- Me duele, porque no puedo seguir así. Así que, onegai, dejemos esto ¿ne?- el moreno apretó fuertemente sus puños mientras cerraba sus ojos y dejaba que el viento le refrescara.

- Dobe... no deberías haberme dicho eso. Si me dices esto... entonces si que no podremos vivir juntos-

El rubio asintió; - Hai, lo se-ttebayo. Por eso, divorciémonos - tragó saliva y volvió a hablar. - Divorciémonos y se feliz con Gaara. Disociémonos-ttebayo- casi rogaba el rubio, ya no quería hacer todo esto más largo. El moreno seguía con los ojos cerrados. En ese momento los abrió, estaban humedecidos.

- Gomen nasai, Naruto. A partir de ahora... ya no puedo estar contigo- y así ambos quizás sin proponérselo, soltaron dos lágrimas... la cuales rodaron al mismo tiempo por sus rostros....

...Continuara...