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Devils & Angels
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Los Siete de la Devastación
I capítulo: Kilik, la Gula.
No lo recordaba pero hoy se cumple exactamente un año desde que comencé con esta travesía, justo y cuando mi Maestro Oniric, As de los Sueños Terrenales, murió.
Desde que fui pequeño hasta que cumplí los 18 él me preparó física y mentalmente para algo importante, aunque en ese entonces no sabía para qué.
Mientras él fue joven cometió muchas equivocaciones, se dejó llevar por las mil y una maravillas que se le presentaron y hasta llegó a hacer pacto con el mismísimo Diablo, con tal de tener lo que deseaba.
Él se dejó tentar por los Siete Pecados Mortales de la Humanidad.
En busca de toda perfección mi Maestro liberó a las Almas Legendarias de los Pecados Originales que se encontraban presas y con ansías de libertad, los cuales se apoderaron de su cuerpo y su mente en pocas horas, llevándolo a la locura y destrucción de su cuerpo. Sin embargo, un conjuro hecho por él antes de su muerte le permitió revivir por única vez, sellando su espíritu y destruido cuerpo con las siete perversas Almas pecaminosas.
Lo que mi Maestro no tenía en mente era que su roído cuerpo no resistiría más de los cuatro mil años en que se mantuvo en pie. Cuando él vio su futuro y pronto Apocalipsis fue que yo nací, y de ahí en adelante, se esmeró en enseñarme hechicería, magia blanca y negra y por sobre todo, despertar mi verdadero poder interno, para así ayudar y restablecer a la Tierra cuando él marchara y devolverle los Valores Celestiales.
Entonces, desde su muerte hace precisamente un año, los Siete Espíritus de la Devastación han estado libres, haciendo de las suyas y ocasionando el caos en todo el globo terrestre. Todos con un cuerpo material en extremo poderoso y con apariencias normales. Todos buscan el Poder Supremo para así gobernar la Tierra como sólo ellos podrían, para tener día a día súbditos que les complazcan en todos sus deseos y librarse del cuerpo mortal en el cual tuvieron que buscar refugio.
¿Qué he hecho durante este tiempo? ¿Cómo y por qué he permitido que estos Demonios se apoderen y progresen en su avance por el planeta? Y es que al fin, luego de todo este tiempo me siento listo. Después de haberme enfrentado a tentaciones grandes puedo decir que, los Siete Espíritus de la Devastación o Santos Pecados como le dice la gente corriente, no podrán seducirme, no dejaré que ello ocurra. Me ocuparé de sellarlos y devolverlos al Inframundo, a donde pertenecen.
He visto pueblos decaer ante estas pestes, he pasado por aldeas en pudrición y he aprendido a levantar la cara y no dejarme llevar por el resto, aunque lo demás me empuje hacia abajo.
Avaricia, Pereza, Gula, Vanidad, Envidia, todos buscan sobresalir aunque en ocasiones hagan pactos secretos de cooperación, cuando actúan juntos para derrotar a una persona noble de verdad, de principios claros que termina cediendo ante el llamado de éstos.
Pero, sin duda alguna están también los que todos han de conocer, rumorear y temer, los Dos Malignos Guías con más poder sobre la faz de la Tierra en la actualidad: Sobervia y Lujuria. Ambos siguen sumando adeptos de manera impresionante y es por eso que debo atrapar primero a los otros antes de encontrarme con algunos de los dos grandes demonios, ya que podrían inducirme y todo el esfuerzo habría sido en vano.
Camino por el puerto, la brisa matutina anima a despertarse y a correr, a hacer algo de productivo y sin embargo, hay sólo cuatro niños en la playa que tratan de jugar. Ellos son los únicos que no han sido afectados en absoluto. El resto de los adultos holgazanea por las calles, en las plazas, en la playa. De un tiempo hasta acá este puerto pasó de ser el mayor exportador de bienes de la región a ser un basural sin víveres siquiera para la población.
La respuesta: todos portan en sus cuerpos la marca de la Pereza, eso quiere decir que o bien, todos han visto al Espíritu en persona o simplemente se han dejado seducir por quienes cayeron ante el Emperador de la Holgazanería.
Las personas que caen ante los pecados de forma directa quedan marcadas de por vida con la sangre de los Demonios Devastadores, el resto de la gente solo presenta el símbolo en lengua muerta del pecado al cual dejaron entrar a su cuerpo. Todos ellos portan un “tatuaje” en sus espaldas.
Es una lástima que cuando todo termine sean redimidos solo aquellas personas que se dejaron influenciar por otras y no los que cayeron ante los Demonios directamente; ellos pasarían en seguida a la Ultratumba.
De pronto algo capta mi atención, ya que este territorio estaba promulgado como “de pereza”.No obstante, acabo de ver el sello de la Gula en unos muchachos. ¿Sería acaso posible encontrarme con dos pecados a la vez? Creo que es mi día de suerte.
--Aldeanos, aldeanos, queridos aldeanos de “Siempre Pereza”, he llegado hoy a estas tierras haraganas y he visto sus rostros con verdadero dolor!! Puedo notar, oler y sentir su sed… SU HAMBRE INTERIOR!! Aquí no hay comida, aquí no queda nada y nadie puede trabajar!! Les ofrezco de mí, les ofrezco esto y mucho más – observo el lugar y comienza a aparecer comida al por mayor. De dónde sale toda esa comida?? – sólo coman y saciarán su pereza, su dolor, su soledad!! Coman para saciar su aburrimiento y para apurar el tiempo!! Coman para saciar cualquier necesidad que tengan pues yo, Kilik “La Gula” he llegado para redimirlos!!
Allí lo veo, Gula. Tiene el cuerpo de un chico de mi edad, más no. De tez morena y cabellera despeinada y rubia. Y lo más importante, una aureola flotando sobre su cabeza, caída de un lado y de color naranjo brillante. En algún lugar de su cuerpo debe tener el símbolo de su naturaleza, si logro descubrirlo, me bastará con arrojar el zafiro a esa zona y desplegar los hilos transparentes que lo unirán a mí. Luego de eso, no podrá actuar con total libertad.
En caso de presentar dificultades al momento de sellarlo, mi Maestro me dejó los Siete Sellos de los Espejos. Nunca los he ocupado y tengo miedo de hacerlo mal. Son siete pequeños cristales, iguales uno con otro que al momento de clavar el talismán en el símbolo presente en el cuerpo de esos Demonios o una vez que quiera calmar su furia, debo quebrar justo el correcto para liberar al “Espejo” de los Demonios Devastadores. Según mi Maestro, son almas purificadoras que poseen los contra-pecados necesarios. El problema está en que si quiebro el equivocado, perderé a esa alma y no tendré de su ayuda en lo que resta de mi viaje.
--¿Qué… aahhh – se acercó un chico bostezando – …haces acá, Gula? Este… es… mi… - bosteza de nuevo – territorio.
--Tú, Zack de la Pereza, no podrás hacer nada contra mí!! Tu pueblo tiene hambre, está cansado y yo he traído la cura para ellos, la salvación!!
--Kilik, no fastidies y déjanos dormir… vete con tu comida a otra parte que nosotros queremos descansar. Ya… me cansé de hablarte… no lo repetiré…
--Gente, pueblo, solo coman, coman!!
Allí están los dos. Tengo en la mira a Gula y a Pereza que también parecía un joven, aunque unos años mayor que el otro, también moreno y con cabello rojo zanahoria y sin ganas alguna para nada. A simple vista pareciera que fuesen hermanos, de rasgos similares, firmes y de buena contextura ambos. Y es que en muchas oportunidades, la gula y la pereza actúan juntos en la gente.
Sobre la cabellera del pelirrojo, la aureola marrón hacia alusión a que se trataba de Pereza, no podía equivocarme.
Bien, tengo que pensar, dónde podrá estar el Emblema de cada uno, ¿dónde? Supongo que lo más normal sería que Gula lo tuviese en su abdomen, pero y Pereza??
Bien, tengo los Talismanes con punta de zafiro listos, tengo los espejos en caso de emergencia, me concentro y el viento empieza a soplar a mí alrededor. Aclaro lo que deseo y envío una ráfaga de viento en contra de esos pecados. Las personas perezosas ni se inmutan mientras que los gulosos arrancan con la cantidad máxima que puedan de comida.
Pereza se recuesta y hace caso omiso al viento feroz con que lo azoto y Gula se me acerca para tratar de detenerme.
--¡¿Quién eres?!
Utilizo el viento para rasgar su playera y pude ver claramente el emblema en su estómago. Pongo el Talismán frente a mí, cierro los ojos y…
--¡¡Soy David Wolsteinholme, Wind Master que ha descubierto tu identidad maligna…!!
--¿Un qué? ¿Maligno yo? – le arrojo el Talismán y con el viento le doy la dirección para que se entierre justo en el centro de su emblema, en la piel y más profundo, traspasándolo.
-- … - abro mis ojos – ¡¡Entrega tu cuerpo a mí en este momento demonio, para dirigir tus pasos hasta que tu alma también me pertenezca…!!
--¿Qué es esta cosa? – el zafiro ya le había traspasado el piel pero él no sentía dolor, hasta ahora.
--¡¡Yo te sello… GULA!!
En ese momento, su Emblema comenzó a brillar del mismo color anaranjado que su aureola. El rubio de piel tostada se quejó y luego gritó fuerte. Trató de sacar el zafiro pero poco a poco fueron saliendo unos hilos naranja que se alargaron lo suficiente hasta llegar a mi estómago y enterrarse allí. Fue doloroso, pero el sellar el cuerpo de ese demonio implica sufrimiento.
Siguió tratando de cortarlo y siento los hilos en mi interior, en mi intestino, en mi estómago y con cada tirón es como si desgarrara algo en mí. De a poco se va tatuando su mismo Emblema en mi abdomen. Él ha puesto demasiada resistencia y yo observé suplicante a los Espejos. Tal vez sí necesitaría uno de ellos, tal vez no pueda sellar al primer Devastador yo solo pero, y si rompo el equivocado…??
Tomo uno de los espejos, lo arrojo con fuerza al piso y lo trizo con viento. Mi concentración está repartida entre eso y no soltar o cortar uno de los hilos que me está uniendo con Gula. Cuando el cristal se quebró, un destello rosa salió de allí junto con un aura que escapó a toda velocidad.
¡¿Un destello rosa?! ¡¡Necesitaba el anaranjado de la Gula!! ¡¡No el rosa de la Vanidad!! ¡¡Fallé y perdí uno de los Espíritus del Espejo!!
Finalmente, los hilos comienzan a desaparecer y el dolor cesa. Miro mi estómago y puedo ver el mismo Emblema de Gula tatuado exactamente en el mismo lugar que él lo tiene, nada más que yo lo presento en negro y a él pareciera habérsele quemado, ya que ahora lo tenía de color más oscuro que su piel.
--¿¿Qué fue eso?? ¡¡No entendí nada!! ¿Quién eres tú y por qué dijiste que yo no podía ser libre?
--Permiso, luego tendremos tiempo para charlar. Ahora debo capturar a Pereza.
--A quién?? A mí?? Nah, pero me da pereza… Voy a dormir mientras, te parece??
En eso, Pereza se recuesta boca abajo y como su cabello rojo lo tiene de puntas hacia arriba, su cuello quedaba descubierto y era allí, en ese sector donde tenía el símbolo.
Entierro el Talismán rápidamente y me dispongo a decir el conjuro.
--¡¡Yo, David Wolsteinholme, Wind Master que ha descubierto tu identidad, te ordeno que me entregues tu cuerpo en este momento demonio, para dirigir tus pasos desde ahora y hasta que tu alma también me pertenezca…!!
--Aahhh, podrías apurarte?? Me está dando sueño.
--Yo te sello… PEREZA!!
Su Emblema marrón comenzó a brillar, aparecieron los hilos que se clavaron en mi cuello bajo la nuca y el calor en esa zona aumentó. Todo fue mucho menos atareado que con Gula, puesto que Pereza no opuso resistencia.
--Aauuhhh. Qué pasó?? – al fin todo había concluido.
--Ahora, yo, David Wolst…
--Sí, sí, sí, oye – se me acerca y me golpea en la cabeza – ya has dicho como 20 veces tu nombre!! No lo repitas!! Como sea que te llames, a mí ya me dio hambre así que, iré a buscar algo, nos vemos!!!
Justo cuando se iba, toco el tatuaje de Gula que se me formó y los hilos aparecieron, por lo que el demonio rubio de ojos cereza no pudo avanzar más.
--Hey!! Qué es esto??!! ME duele!! Quítalo!!
--Soy David Wolsteinholme, el Wind Master que los capturó. Ahora estarán unidos a mí hasta que logre sellarlos completamente y pueda reunir a los Siete de la Devastación.
--Ah, así que con esas, eh??!! JAJA, crees que todos van a caer tan fácil como yo o ese perezoso??
--Como sea, tengo el apoyo de los Espejos.
--JAJAJA!! Así parece pero, creo que quebraste uno equivocado cuando estabas conmigo, sin querer. Eso quiere decir que alguno de mis compañeritos no tendrá quién lo controle, a parte de un debilucho humano que es Maestro del Viento.
--Como sea. Es hora de partir.
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--Despierta a tu compañero demonio.
--Qué?? Claro que no. Yo iré a comer!! – tiré brusco del hilo que nos une – hey, está bien, está bien!! Pero no siempre me controlarás, que te quede claro. Además, por qué te tenemos que seguir como simples humanos??!!
Bueno, aunque Gula se fue reclamando todo el camino y Pereza durmió la gran mayoría, los tengo bajo mi parcial control. Puedo dominarlos de cierta forma ya que no han alcanzado su poder máximo y están en su etapa de fortalecimiento, dentro del cuerpo de un humano. Si estuviesen con su forma original… este planeta estaría acabado. Por eso, debo apresurar la Cruzada.
--Ah, y una cosa más, ya que tú dices tu nombre a cada rato, apréndete el nuestro!! Yo soy Kilik, la Gula!!
--Prefiero llamarte simplemente Gula.
--No!! Soy Kilik!! El chico que murió hace millones de años comiendo y comiendo. Ese soy yo. Imagina esto… comer, comer…. Claro, que ahora estoy reencarnado en un cuerpo fantástico, ya no soy regordete como antes. Qué mejor??!!
Definitivamente, todavía tiene su parte humana muy latente.
De ahora en adelante tendré que tener cuidado con estos dos. No puedo bajar la guardia ya que en la más mínima oportunidad que se les presente podrían tentarme. Después de todo, cuerpos y apariencias perfectas, un pecado tentador y las palabras que ellos te dicen antes de que cometas el infortunio, todo está perfectamente calculado!! Por eso Gula no puede tener apariencia grotesca, obesa o despreocupada… porque necesita tentar a toda la gente de que comer, tal como él. Así las personas pensarán que no les afectará en nada y que su apariencia podría ser tan atractiva y relajada como la de este muchacho si es que comen y comen.
Uf, primer pecado al cual vigilar y aprender a conocer: KILIK, LA GULA.
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BCB
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