Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Cuento segundo. por nezalxuchitl

[Reviews - 2]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Este es el segundo cuento del Decameron que adapto al yaoi; el primero  esta publicado como "¡Juro que lo pillare en otro sitio!", y otros que me decida a publicar tambien los publicare en otras categorias, pr si os interesa leerlos, pues partiendo de mi perfil de usuaria podreis leerlos.

Notas del capitulo:

Se trata de un oneshot, repito, son mis adaptaciones yaoi de mis cuentos favoritos del Decameron, de Boccaccio, un clasico de la literatura renacentista.

 

Cuento Segundo.

 

 

Habeis de saber, hermosas damas, que hubo en otro tiempo en nuestra vecina ciudad de G...  un principe justo y noble, no obstante que hacia el final de sus dias se mancho las manos con sangre enamorada.

El principe tenia por nombre Von Hoenheim y tenia un hijo hermoso y dechado de virtudes, que se llamo Edward, y lo queria tanto que aunque ya estaba en edad de casarse el principe no deseaba casarlo  y lo retenia  a su lado para gran contento de ambos.

 

Sin embargo, ocurrio que el joven, ya bien entrado en esa edad que los sabios laman adolescencia sentia el imperioso llamado de esta hacia la conscupicencia, y de entre todas las personas que conocia le atrajo singularmente un joven caballero al servicio de su padre, que se llamaba Roy, y era galante y apuesto como pocos, cualidades  que sumadas a su gentil carecer hicieron que Edward se enamorara perdidamente de el.

 

Mucho discurrio el joven en como dar a conocer su amor al caballero, pues le parecia que el no le era indiferente, pero no deseaba que nadie, menos su padre, se enterara de aquel amor contrario a las costumbres, por lo cual ambos pasaban hondisimas penas.

 

Sin embargo, el amor aguzo el ingenio del joven rubio, haciendole recordar cierto pasadizo secreto que construido antiguamente para alguna emergencia, como esta no se presentara nunca ya habia sido de casi todos olvidado, y que conducia desde su armario a una gruta oculta entre los acantilados , a la cual solo se podia acceder cuando la marea era baja y con muchos trabajos; sim embargo era aquel el medio unico por el que veia ocmo entrevistarse a solas con su amado.

 

Edgard, no queriendo fiarse de nadie para lograr su comedito escribio una carta en un delgado pergamino y enrollandolo lo metio dentro de una caña, y un dia, como en broma y delante de todos para que nadie sospechase, se lo dio a Roy diciendole:

 

-Tomad, caballero, para que con este encendais la hogera donde consumir vuestro fuego.

 

Roy, que entendio por las palabras del joven que aquella caña debia ener un secreto, a solas la examino y se fijo en que era hueca, pero dentro tenia metida una carta, en la cual el rubio le confesaba su amor, y le rogaba que si era correspondido, se entrase por la gruta aquella y pasara la noche con el, pues estaria a solas en sus habitaciones.

 

Casi sintio desmayarse de gozo Roy al leer aquello, y no  poco  remordimiento por la afrenta que haria al principe, que siendo pobre y huerfano lo habia criado y hecho un caballero sintio, pero amor puede mas que gratitud, asi que aquella misma noche, en cuanto hubo bajado la marea el caballero se encamino a la gruta, y encontrando ahí antorcha y  eslabon con que hacer fuego  se ilumino el camino, llegando al cabo al armario del rubio, donde fue recibido por este con cariñosisimas palabras y cogiendose las manos se besaron y se abrazaron y antes de que termianara la noche ya se habian descubierto mutuamente  todas las ternezas del amor.

 

Edward se despidio de Roy, saliendo par ano causar sospechas temprano como solia, y el cab allero se quedo oculto ahí hasta que la nueva marea baja le permitio salir por la gruta, y muchas veces gozaron asi los amantes, sin que nadie mas que ellos estuviera enterado y por ende, la ofensa hacia el principe, si es que realmente existia, pasaba completamente desapercibida.

 

Pero la fortuna que no distingue dichosos ni desgraciados paso a perjudicar a los amantes del siguiente modo: el principe, ya viejo, solia a eces ira de improviso al cuarto de su hijo para conversar con el, y una tarde, yendo, no le enconro, por lo cual juzgo hacerle una broma, y sin sospechar que el burlado seria el se escondio bajo la cama, que era muy gande y adoselada, para asusar a su hijo una vez que este se fuera a acostar.

 

Paso el timepo Hoenheim se quedo dormido, Edwad, que nada sospechaba, se encerro temprano pues esa noche recibiria aRoy, y en efecto el joven caballero llego poco después , y rapidamente pasaron a hacer los jóvenes lo que tanto deseaban, consumando su amor en la cama y los ruidos y los rechinidos y las dulces palabras que se dirigían despertaron al principe, el cual en primer momento creyo tener una pesadilla, pero luego se convencio de que efectivmante habia sido traicionado por su hijo y por su mas querido caballero, y como amaba demasiado a su hijo decidio cobrar venganza solo en el caballero, no sin escarmentar a su hijo , pero sin tocarle un solo cabello.

 

Por lo cual, maquinado lo que habria de hacer, aguardo hasta que los amantes terminaron de consolarse, y una vez amanecido, cuando Roy se fue por el pasadizo y Edward se quedo solo Hoenheim salio de bajo la cama, y dando un terrible susto a su hijo le hablo en los siguientes terminos:

 

-Mucho te ame y eduque para que con semejante traicion  me pagaras.

 

-Padre mio, he cometido un delito, aunque nadie mas que tu lo sabe, mas quiero que sepas que quiza no lo habri acometido si tu, ateniendote a demas normas de los hombres me hubieras casado en vez de hacerme guardar un difícil e inútil celibato.

 

-Bien pudiera perdonartelo si hubieras escogido alguna mujer de nuestra calidad, pero el que me hayas humillado eligiendo por amante a un hombre que es sirviente nuestro no te lo perdonare.

 

-En ese caso castigame solo a mi, padre, pues fui yo quien le sedujo y le obligo.

 

-No hare tal, el y solo el cargara la culpa de ambos y tu castigo sera saber muerto a tu amante.

 

-Si tal haces, ten pos seguro que me matare, padre mio.-repuso con hielo en la mirada el joven.

 

El principe, no creyendo capaz a su joven hijo, lo encerro y saliendo, dio ordenes a varios de sus soldados de aguardar a Roy a la salida de la gruta, de modo que cuando este salio al bajar la marea, fue prendido por los soldados y llevado a comparecer ante el principe, el cual muy encolerizado le reclamo haber traicionado su confianza y la lealtad que le debia, a lo que Roy, lamentando su suerte, solo replico:

 

-Mi señor, no lo niego, he sido ingrato para con vos, pero quiero que sepais que solo la uerza del amor me orillo a  ello,  pues nadie ha amado jamas a un joven como yo amo a vuestro hijo.

 

El principe,  enceguecido por la ira aun, juzgo insolente la respuesta del joven, y sacando su espada la clavo en el pecho a Roy, abriendoselo y sacandolse el corazon que aun palpitaba de amor a Edward, y lo metio en un copa de oro ricamente adornada con joyas y se la envio a su hijo, diciendole

 

-Aquí os envio lo que vos mismo habeis arancado de mi pecho.

 

Edward, esperando el fatal desenlace de su aventura, pues conocia el temperamento de su padre, saco ciertos venenos que tenia guardados en previsión de cualquier emergencia, y luego de ahber recibido la copa le envio la siguiente contestación:

 

-Decid a mi padre que agradezco la honrada tumba que ha dado a  mi propio corazon.

 

Y despidiendo al sirviente hecho el veneno y agua sobre el corazon y luego de añadir sus propias lagrimas bebio el contenido, y besando mucho aquel corazon lamento la desgraciada suerte que habia corrido y se apresuraba aunirsele cuando el principe, entendiendo por la respuesta que su hijo le enviara que en verdad estaba decidido a matarse,  llego a donde Edward agonizaba, y llorando copiosamente comprendio tardiamente su error, lementandose mucho de haber obrado cuando la ira estaba ardiendo en su corazon, comportandose como nunca debe hacerlo un principe.

 

-No lloreis mas Hoenheim, ¿Quién si no vos llora por lograr lo que ha querido? Idos en paz como yo me voy, que os perdono. Solo una gracia quisiera pediros, y es que , ya que no so placio que en vida y a escondidas Roy y yo estuvieramos juntos, ahora en la muerte y en el escondite de un sepulcro nos permitas yacer eternamente unidos.

 

Y exhalo el ultimo suspiro.

 

Hoenheim, muy arrepentido y dolorido, mando enterrar juntos a su hijo y a su amante, y paso en amarga soledad los ultimos años de su vida, que ya fueron pocos.

 

Os he contado esta historia, graciosas damas, para que veais como es peor obrar premuramente  que en contra de lo que dictan las costumbres: pues si el principe no se hubiera dejado arrastrar por su primer impulso y meditando la cuestio hubiera visto que era mejor no hacer nada, ya que su deshonra no era de nadie conocida, habria envejecido felizmente al lado de su hijo y habria dado felicidad a este tambien.

 

                                                      Fin.

Notas finales: El verdadero cuento trata de Tancredi, principe de Salerno, por si os interesa buscarlo en el libro original, es mucho mas dramatico que mi adaptcion, lo confieso.

Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).